DE LA CARRERA DE ARTES PLÁSTICAS - UMSA...
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Mafalda Córdova Ligia Siles Crespo Serie: Conversaciones con Artistas Plásticas DOCUMENTO DIGITALIZADO POR LA BIBLIOTECA DE LA CARRERA DE ARTES PLÁSTICAS - UMSA
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Mafalda Córdova
Ligia Siles Crespo Serie: Conversaciones con Artistas Plásticas
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MAFALDA CÓRDOVA
Ligia Siles Crespo
Serie: Conversaciones con Artistas Plásticas
2002
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CONTENIDO INTRODUCCIÓN.
1. CONVERSANDO CON MAFALDA CÓRDOVA.
Miraba formas y sombras ... Docentes y compañeros en la escuela
Técnicas que practiqué en la escuela Recordando a Guzmán de Rojas. Etapas y técnicas en mi pintura
Prefiero la pintura abstracta En el Taller de Quinquela Martín Como pintora no he sufrido discriminación
Familia y artista Artista y matrimonio.
La educación en el Arte. La formación del docente debe cambiar. Yo hago querer mi materia.
Satisfacción por haber formado a varias artistas. El artista puede vivir de la enseñanza
He viajado por todo el país. Los viajes y la cultura de cada país. Los medios de comunicación no se preocupan del Arte.
Arte y comercialización. Recuerdos anecdóticos. Intelectuales que conocí
Artistas que admiro Gustos musicales y literarios
2. COMENTANDO SU OBRA.
3. CRÍTICA DE SU LABOR ARTÍSTICA. Mario D. Rios Gastelu Escribe sobre Mafalda Córdova. Las Cumbres Andinas De Mafalda Córdova. Mafalda Córdova propone una “Transición Milenaria”.
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Jimena de La Quintana Escribe: Una Vida Dedicada al Arte.
4. PINACOTECA.
5. RECUERDOS DE UNA VIDA CON EL ARTE.
6. BIBLIOGRAFÍA SOBRE LA ARTISTA.
BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA.
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INTRODUCCIÓN.
Más allá de pretender hacer una biografía de las Artistas Plásticas, mi intención es rescatar algo de su manera de pensar, envuelta aún en su época, su
vida, sus logros, sus desalientos, sus emociones, que sirvan de testimonio para éstas y otras generaciones de artistas por venir. Tampoco quise hacer Historia del Arte, tan sólo ubicar a la artista plástica en su contexto, que después podrá servir
de base para preparar una Historia del Arte Contemporáneo en Bolivia. Se trata de tener apuntes sobre las Artistas Plásticas y su realidad actual, para no dejar a
la ingratitud del tiempo que olvida tantos eventos y pasajes si es que no los escribe. Además conocer detalles de cada artista, que ella considera importante, respetando su privacidad, y después unirlas como partes de rompecabezas que
juntas hacen un todo orgánico de su experiencia en el arte. Está presente mi requerimiento sobre su condición de mujer – artista – sociedad, cómo ve y siente sobre esta trilogía antes y ahora.
Aquí me convierto en motivadora para que la artista se exprese y luego el lector escuche lo que ella dijo, tampoco pretendo que sea una entrevista
periodística por eso las preguntas han desaparecido, pretendo que se perpetúen además de su pensamiento y vivencias su manera de hablar, su ritmo al manejar nuestro idioma. Tampoco pretendo hacer un libro de crítica de arte, sino más bien
dejar a la artista que exprese libremente lo que quiera y recuerde sin ninguna presión, que ella hable de su arte y las etapas o fases que ella considera haber
pasado. También a través de los recuerdos podremos revisar datos muy importantes
de otros personajes, que en el caso de Mafalda Córdova nos habla de Guzmán de
Rojas, Quinquela Martín, Genaro Ibáñez y Luis Lusic, importante intelectual de su tiempo. Ella también manifiesta varios datos sobre lo que fue la Escuela de Bellas Artes en su antigua instalación de la calle Juan de la Riva. Por tanto espero
que disfruten como yo estas conversaciones, que se realizaron en el ambiente tranquilo de su departamento y taller, la otra en el Centro Cultural Taipinquiri,
donde se llevaba a cabo la exposición de su última producción artística.
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1. CONVERSANDO CON MAFALDA CÓRDOVA En una mañana de septiembre casi llegando a la primavera de 2002, se realizó la primera conversación con Mafalda Córdova. De una personalidad fuerte
y dulce a la vez, encontré a Córdova en su hogar y taller de Cota – Cota, desde las gradas pude identificar cuál era su departamento, por el hermoso vitral que tenía
el ventanal cerca de la puerta de entrada, se percibe que éste lugar pertenece a una artista. Entre preciosos recuerdos, sus pinturas y retratos de ella realizados por distintos artistas, me gustó uno en particular realizado por Agnes, donde
están las dos Mafaldas, la artista y el personaje de las historietas de Quino, en un fondo de naranjas y amarillos, al parecer la artista cuando pequeña fue muy traviesa como Mafalda de Quino, aquí comenzó nuestra conversación.
MIRABA FORMAS Y SOMBRAS ...
Desde muy niña me gustaba dibujar, pintar y me parece que ahí se inició
mi acercamiento al arte, esa sensibilidad con las formas, el color. Yo era una niña
traviesa, rebelde, muy tremenda y siempre estaba castigada; en la noche solita en el dormitorio a oscuras, porque me mandaban a la cama, empezaba a mirar
formas, con las sombras y las luces de la calle o de las otras habitaciones, por entonces se usaba mucho estampado en los cortinajes, yo veía formas en todas esas cosas. Creo que desde muy pequeña me he inclinado mucho a ese sentir
artístico, después me puse a dibujar y pintar como todo niño que empieza a dibujar al ratón Mickey, al pato Donald y cositas así. Llegó un momento en que no me gustaban las materias de colegio aparte de literatura, era lo único que me
interesaba, a las matemáticas, no las soportaba, entonces ingresé a la Escuela de Bellas Artes a estudiar.
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DOCENTES Y COMPAÑEROS EN LA ESCUELA
En esa época hemos tenido ¡un lujo de maestros!, realmente ha sido la
“época de oro”, teníamos como director a Cecilio Guzmán de Rojas, a Don Jorge de la Reza, a Hugo Almaráz, Genaro Ibáñez, el grabador, Luis Lusic como profesor de Historia del Arte, Araujo Quezada, y un pintor peruano Manuel Fuentes Lira.
Con Genaro Ibáñez había que trabajar mucho en dibujo, nos llevaba siempre a los interiores de los templos para dibujar perspectiva y pintura de
interiores, él era grabador. Otras profesoras que hemos tenido y muy buenas han sido: Rebeca De La
Barra, de Geometría y Dora Quezada, que era de Anatomía, ambas ex - alumnas
de Bellas Artes que se dedicaron a enseñar. El profesor de escultura me decía: “- Mafalda tiene que ser escultora es
buena”, el de grabado: “- Tiene que grabar”, pero para mí no había nada mejor que el color!
Esos eran mis profesores y casi la mayoría de alumnos eran varones,
éramos pocas mujeres, casi toda gente del pueblo, muchachos que ni estudiaron secundaria ni bachillerato pero que eran de una calidad humana muy linda.
Entre los compañeros de la escuela recuerdo a Manuel Iturri, Eduardo Espinoza, René Reyes, había un muchacho muy bueno y colaborador, no recuerdo bien el nombre pero apellidaba Flores, dice que tiene cualquier cantidad
de pinturas pero que nunca ha expuesto. En la Escuela hemos debido ser unos veinte, veinticinco en total, habían
muchos estudiantes de arquitectura, que iban a aprender acuarela, dibujo con
modelo. Éramos de seis a siete mujeres y las que hemos seguido pintando somos Magda Arguedas, Inés Córdova y yo, Emilia que después se casó con Espinoza, y
otra chica que se dedicó a hacer artesanía. En mi curso éramos cuatro: yo era la única mujer, después estaban Eduardo Espinoza, Manuel Itutrri y René Reyes. De todas quedamos tres que trabajamos en el arte, había una alumna muy buena
Marta Alcázar, que se fue a EEUU a estudiar, pero se eclipsó trajo una muestra de cerámica como las que hacen en el campo, sin embargo ella creía que su trabajo
era muy interesante, estaba muy retrasada, es curioso. Trabajábamos en un ambiente tan estrecho, una casa pequeñísima, en la
Juan De La Riva, bastante vieja, pero nosotros éramos felices, y hemos dado todo,
de esa época han quedado pintores buenos.
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TÉCNICAS QUE PRACTIQUÉ EN LA ESCUELA
En dibujo con tinta he trabajado muy poco, no me interesó mucho el dibujo, más me interesa el color y la forma desecha, no me gusta el realismo, no me gusta el hiperrealismo, me gusta admirar al que trabaja pero no es mi gusto.
En mi época de estudiante, en la academia sí, he practicado el tallado, modelado, arcilla, pero porque estaba obligada a hacerlo dentro de las materias
que teníamos en la academia. Para grabado era buena, pero para escultura no, sin embargo el profesor me decía : “Vas a poder, vas a poder”, cada docente de cada materia quería que cada uno sean grabadores, Don Cecilio quería que
seamos pintores, de acuerdo a su especialidad, como que he estudiado en el taller de Cecilio, me tenía un aprecio muy especial.
RECORDANDO A GUZMÁN DE ROJAS.
Don Cecilio Guzmán de Rojas era un hombre muy fuerte, de una gran
personalidad, absorbente, cuando él se paraba ante mi caballete, a mi lado viéndome pintar, yo me paralizaba totalmente, no quería dar ni una pincelada, y él tomaba mi pincel y me decía “Así se pinta!” y agarraba mi tubo de pintura y
ponía en la paleta un montón, porque cuando uno es alumna pone de poquito a poco, a veces me pintaba en el mandil, a veces la cara, y decía: -“Así se pinta...” . Yo creo que de él he tomado la fuerza en el color...
Sentí que Don Cecilio Guzmán de Rojas tenia una preferencia por mí como alumna, porque él me propuso, me dijo: -”Mafalda yo no quisiera que siga en la academia, no es muy bueno ser muy académico, dos años están bien por la disciplina, pero un tercer año ya no, porque no se va a mi taller y pintamos”, y nos
llevo a su taller a mí y a Maria Esther Mendieta, que era una muchacha boliviana que se fue a vivir a Chile, y dice que trabajaba otros días Manuel Iturri,
yo nunca supe sino hasta volver de Europa, ha debido ser otro alumno preferido de él.
Era muy atento, muy amable, salíamos de la Academia y nos íbamos
juntos, caminando desde la Juan de La Riva, me dejaba cerca de casa en la calle Ecuador y se seguía él con Magda Arguedas, a ella la dejaba y se subía a su casa
que era en la Abdón Saavedra; yo vivía al lado de la casa de María Núñez del Prado y Crespo Gastelú.
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ETAPAS Y TÉCNICAS EN MI PINTURA
En mis primeros años he tenido la influencia del indigenismo, cuando pintaba acuarela, después pasé a hacer trabajos en tinta, hice más montañas, nieve, cosas así, y empecé a hacer collage, y desde que comencé a hacer collage
me aparté de esa influencia académica, porque yo creo que el estudiante tiene que salir de lo académico. En la academia uno estudia como cuando el niño aprende
el abecedario, aprende a leer y escribir y después se desarrolla, pero siempre resalta lo académico porque en toda pintura que uno ve, dice: -“este pintor es académico o este pintor es empírico”. Por ejemplo, veamos a Mamani Mamani, es
un muchacho que jamás ha estudiado, que es muy creativo, y si hubiese estudiado sería otra cosa, los colores que él tiene son fuertes .
Después he pintado dentro de lo figurativo, temas sociales, sobre el niño, en sus distintas actividades y niveles sociales, por ejemplo: “El niño Indio”, “El niño de la calle”, como que tenía un cuadro de un niño jugando trompo o con bolitas,
también pinté al niño vendiendo dulces, helados, limpiando autos, toda esa parte social. Trabajé en esta temática unos tres años, más o menos.
Vino la etapa de los pepinos, he trabajado mucho con pepinos, yo me disfrazaba de pepino, me gustaba mucho disfrazarme con la hermana de Magda Arguedas, porque ella ya trabajaba en Oruro y no podía. Me gustaba el pepino y el
Carnaval, había que ver esa entrada, eran cientos de pepinos, era muy lindo! Luego hice collage, interpretando el ambiente de nuestra ciudad, porque me
llamaba la atención cómo la ciudad va avanzando. Además como he podido viajar
al exterior y he visto paisajes, han sido base de mi inspiración, sin embargo nunca he trabajado pensando en un rincón exacto, en un lugar exacto, es sólo lo
que el subconsciente va recogiendo y va evolucionando, y sale en el momento menos pensado, un crítico argentino me dijo, que era una expresión muy internacional, porque en todas partes del mundo encontraba temas así, en
España, Italia, en cualquier lugar. Después del collage fui a la técnica mixta y empecé a hacer bodegones, pero
rompí el esquema del bodegón tradicional, sin preocuparme mucho de la perspectiva, sino más bien del color y de la textura. En mi técnica mixta utilizaba acrílico y papel, con colores fuertes, los bodegones no eran muy definidos, ya sea
en las frutas o los objetos, no eran figurativos, eran hechos abstrayendo,
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manejando más el color antes que la forma, para que llegara a la mente del
observador y él se haga una idea... Antes de los cuatro elementos hice una serie de montañas y después hice
otra exposición sobre el Altiplano, pero todo dentro de la abstracción. Cuando pinté ese cuadro de montañas y lago, algunas personas comentaban que les gustaba esas velas de las balsas, yo nunca había pensado que eran velas, yo más
bien me inspiré en el lago yendo al Perú, que son unas montañas y agua, pero cada uno ve y va encontrando distintas cosas.
En el año 1999 a punto de entrar al año 2000, pensé que iba a haber una transición tremenda, como que está habiendo, entonces el año 2001 pinté una serie de Transición Milenaria y tomé los cuatro elementos: tierra, viento agua,
fuego, a mucha gente le llamó la atención y me decían: –“¿Cómo se puede pintar el viento?” y eso me inspiró para ir hacia lo abstracto. Y cuando me puse a pintar
en fuego, me entró miedo, fastidio, no me salían las cosas, sin embargo con el agua me sale bien todo, y casi todos mis cuadros tienen agua.
Me sorprendí un día que estaba viendo un canal de España, le
entrevistaban a una diseñadora de modas con el mismo tema, yo pensé, cómo en continentes distintos y personas que nunca han estado juntas, pueden coincidir
en un mismo tema. En la entrevista a esta muchacha joven explicaba que ella se fue a una isla para tener la soledad, el silencio, la tranquilidad y poder crear, y ella ha creado dentro de los cuatro elementos, entonces cuando se menciona
Fuego, los trajes son de colores rojo, amarillos, naranjas, bastante voluptuosos, cuando se dice Tierra son colores grises, marrones, ropa de cuero, de lana, de invierno, y me llamo la atención, y dije que cosa mas interesante; que
coincidencia!
PREFIERO LA PINTURA ABSTRACTA
Cuando he salido de la Academia he trabajado con el cubismo, pero desde
un principio me he inclinado mucho a la abstracción, sin darme cuenta. Luego empecé con la abstracción, ahora estoy en esa línea, sin embargo
tiene mucho de paisaje, pero quiero llegar a un abstracto total. Me decía ayer una señora, he visto tus pinturas muy etéreas. En el año
1995, 96, soñaba con llegar al 2000 y cuando llegó el 2000 me di cuenta que no
era tan maravilloso, como que en el año 1999, hice una exposición en honor de
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mis padres porque estaba dejando el siglo pasado, empecé a pensar que iba a
haber muchas catástrofes naturales en el mundo, como que ha habido y se están dando, sobre todo con el agua. Ahora sigo en el intento de lo abstracto.
EN EL TALLER DE QUINQUELA MARTÍN
Estuve corto tiempo en la Argentina, y en realidad en el taller de Quinquela Martín y en el de Agnes yo he asistido como oyente, mi participación ha sido en
un contacto personal y ver el trabajo que hacían ellos, entonces ese ha sido mi trabajo en los dos talleres.
Tenía un taller hermoso con una ventana de donde se veía todo el puerto,
las casitas de colores de la Boca, donde hacen peñas para turistas y se escucha tango, otra música típica de la Argentina.
Él me regaló un álbum, tipo folleto de todos sus temas del puerto, y en el
taller he visto y observado cómo trabajaba. Siempre pintaba cuadros muy grandes con el tema del mar, yo no he visto nunca algo así, y lo que he aprendido
es ver cómo maneja el profesor los colores, los pinceles, las formas, eso es muy importante.
Al recibirme en su taller ha hecho una excepción conmigo, porque una
pintora muy amiga de él me llevó y me presentó como boliviana. Yo, recién estaba en mi segundo año de haber salido de Bellas Artes, era chiquilla. Él ha hecho algo
muy especial conmigo, una deferencia, me daba consejos, todo gracias a la amistad con esta señora, no recuerdo su nombre, pero le decían la pintora de “los girasoles”, era una persona mayor.
Quinquela Martín era un hombre silencioso, pero muy amable, muy atento, cordial, tenía aquello que infunde afecto, era relativamente mediano de altura...
El taller de Quinquela Martín es muy importante en la Argentina, no se si
luego de haber muerto él le habrían hecho un homenaje, pero si lo tenían así como nosotros a Don Cecilio Guzmán de Rojas que lo consideran el máximo
pintor boliviano, a él lo tenían igual. Estuve sólo unos pocos meses en Buenos Aires, después fui a Salta.
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COMO PINTORA NO HE SUFRIDO DISCRIMACIÓN
Debería ser igual, porque el ser humano es el mismo, la misma inteligencia,
las mismas aptitudes, el mismo talento, el mismo crecimiento. Pero lamentablemente como vivimos en Latinoamérica y creo que a nivel mundial resulta ser que el machismo hace ver a la mujer en un plano inferior. Sin
embargo en el campo del arte, entre las pocas pintoras de nuestra época como con los jóvenes de ahora, nunca nos hemos sentido aisladas, al contrario siempre
hemos ido luchando, trabajando como que ahora hay un grupo de pintoras estupendas, muy buenas, ahora no sé como es el criterio personal de los hombres, que dirán entre ellos. Pero así personalmente no he sentido
discriminación. En la sociedad en general si hay discriminación, piensan siempre que la
mujer es menos, la gente tiene más confianza de ir donde un médico varón que
donde una médico mujer, sin embargo las abogadas, dentro de la parte del Derecho, han crecido “ellas”, se han desarrollado bastante, y ahora se prefiere a
una mujer abogada que a un hombre. FAMILIA Y ARTISTA
Dentro del ambiente familiar, a mis hermanas nunca les interesó el arte y lo
que yo hacía, tanto que me veían como una loca: “- es una loca que ve cosas que no existen, se inventa”, pero yo tenía un hermano mayor, quién era un admirador mío y yo de él, me llevaba con unos quince años, lo importante era que los dos
teníamos los mismos sentimientos, emociones, temperamento, forma de ver la vida, y él me apoyó mucho tanto moralmente como económicamente. Mi mamá
me apoyó mucho también, lógicamente con su comprensión y la libertad que me daba.
La mamá de una amiga y compañera de colegio, María Luisa Paz Salcedo,
era una señora que pintaba, dibujaba, repujaba, hacía muchos trabajos manuales, era profesora de arte en colegio. A ella la he encontrado después de
unos años, ha sido mi maestra, había estudiado acá en Bolivia y también en París, de ella por ejemplo aprendí el ritmo de trabajo, de la entrega, del amor al arte, yo la veía trabajar tanto que cuando yo sabía dibujar, me acordaba de ella y
decía: -“ tengo que ser como ella”.
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Hacía artes aplicadas para vender, para ayudarse económicamente, por ejemplo:
tarjetas para Navidad, yo también de mayor hice esto, hacía unos bolsones con aplicaciones de indígenas, cajitas en repujado, juegos de muebles con
pirograbado. Ella me quería mucho siempre venía a la casa, era como mi mamá, a veces
me llevaba a almorzar y siempre escogía lo que íbamos a comer, me decía: “- esto es francés”, era una mujer muy delicada. Y pienso que se entregó totalmente a mí cuando su hija se fue, cada día venía a casa, tanto que mi mamá se puso celosa y
decía: “- ya viene tu mamá”, ella no había logrado hacer de su hija lo que ella quería y entonces ella vio que yo aceptaba sus consejos me acercaba a ella,
entonces yo era como su “hija en el arte” y en los sentimientos también. ARTISTA Y MATRIMONIO.
No he tenido ningún problema en mi relación familiar, por que adecué la
pintura al trabajo, mi esposo era catedrático de la universidad y comprendía y respetaba, más bien me molestaba y me decía: - “no tienes que dejar de pintar”.
Yo creo que una mujer cuando es artista, al casarse puede perder un poco
la libertad, y que el esposo pregunte ¿Porque llegas tan tarde.” - “ ¿a que hora te acuestas?”, sin embargo yo pienso que si hay comprensión, estas cosas no pasan.
LA EDUCACIÓN EN EL ARTE.
Yo he tenido el deseo inmenso, que nunca he podido realizarlo es el de
haber podido ser Directora de la Normal Superior de la Carrera de Artes
Plásticas, ese trabajo me hubiese gustado para poder organizar mejor, porque el maestro de artes plásticas de la Normal Superior es pésimo. Había planteado alguna vez a amigos que estaban en el Ministerio de Educación que los maestros
del área de Plásticas, deberían ingresar a la Academia de Bellas Artes un año o dos después de la Normal Superior, para que trabajen en la parte creativa,
porque de lo contrario es destruir la creatividad del joven, y la destruyen. Una vez nos llamaron del Ministerio de Educación a un grupo de
profesores, Irmad Jaimes, Hugo Rojas Lara y a mí que también era profesora,
para ver como podíamos trabajar, porque el Ministerio de Educación quería dar un ítem de Artes Plásticas desde Kinder, la idea era maravillosa, pero nosotros
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pasamos una nota indicando que en la forma como estaba en aquella época el
maestro de artes plásticas, tenían primero formar al profesor . Nuestro planteamiento era: primero, que toda la enseñanza artística en el
colegio parta simplemente de la motivación, del sentido de la observación, de llevar al alumno o al niño al sentido estético, y eso es muy fácil de realizar.
LA FORMACIÓN DEL DOCENTE DEBE CAMBIAR
Yo estuve en mi colegio 24 años como profesora, nunca me gustó ser profesora, ni había pensado serlo pero las madres del Colegio Loreto, las americanas, Eva María en especial, le gusté tanto, que me obligó a enseñar en el
colegio, y yo les decía : “- pero yo no soy profesora , no se cómo enseñar “, me decía “- No importa , yo se que vas a poder, yo te doy la sala , te doy todo , no te preocupes por nada, ni de mi, ni de los padres de familia , de los otros profesores, de nadie, puedes hacer lo quieras en tu clase de arte. “.
Fue la maravilla más grande que me ha podido dar Eva Maria en la vida, entonces comencé a enseñar a las chicas, tengo alumnas que ya son profesionales, algunas a punto de ser abuelas, entonces he trabajado muy bien
ahí. Por ejemplo en mis clases les decía hemos pasado la fiesta del Carnaval, cada una se ha divertido, de una forma u otra, una en el viaje, en distracciones, en bailes, en juegos; “- ahora trabajen en algo de lo que es el Carnaval. Eran 40
niñas en el curso, hacían el tema, pero ninguna hacía igual a otra, era sólo motivarlas y despertar el sentido de observación. Volvía de una vacación, les
preguntaba : “- ¿qué han hecho en la vacación?”, trabajen, hagan un cuadro. Lo que más había gustado era la motivación. En cambio un profesor de la Normal
Superior les dibuja en el pizarrón para que copien. Como un día vino mi nieta y me dijo: “-Abuela el profesor de Artes Plásticas nos ha dado trabajo para la casa”; y eso no se debe hacer, los trabajos sólo deben hacerse en el taller, jamás se da
una tarea para la casa . “- En el pizarrón ha dibujado una jarra y debemos dibujar esa jarra y la pintemos como queramos...”, yo le dije: “ – No tú vas a hacer eso, si el tema es una jarra, dibuja una jarra, pero como tú quieras, volando, tiradas, amontonadas, rotas , arrugadas , viejas amontonadas , lo que tu quieras, pero aquello que tú crees debería ser una jarra”. Cuando llegó al colegio le dijo el profesor, -“yo no he dado esta tarea, yo he dicho : “ una jarra como esta en la muestra”, - “Si pero mi abuela me ha dicho que eso no es arte”. Ha discutido!, una
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segunda y una tercera vez, hasta que al final no le volvió a decir nada más; y es la
que ha estudiado Diseño Gráfico. Ahora mi otra nieta que está en el colegio “San Andrews” también, me dice
parece que el profesor es el mismo que cuando estaba Mariana, mi otra nieta, yo le he enseñado que se rebele, que haga el tema pero como ella quiera, la segunda vez ya le dijo: “- Dibuja como tú quieres.”, porque parece que le ha asociado por el
apellido. Yo creo que respecto a la educación habría que cambiar bastante, a nivel
general, no sólo a nivel de arte, en todo, porque la educación parte del colegio, parte de la escuela, y lamentablemente los profesores que tenemos no la menor formación, no se sabe orientar, no se tiene el roce social, ¿entonces cómo se va a
poder guiar a un niño?. Y ahí está el fracaso de una ciudad desordenada, indisciplinada, sucia, cuando un profesor tira un papel en el pasillo, o cuando no
cuida el baño al usarlo, al ver el niño su actitud, hace lo mismo. YO HAGO QUERER MI MATERIA
Y en realidad quiénes han propiciado el cambio de la denominación de la materia de Dibujo, fuimos Eva María y yo que pusimos Artes Plásticas. De ahí que se acostumbró a decir Artes Plásticas. Una vez Humberto Jaimes me llamó,
cuando era Inspector de Artes Plásticas, me dijo: -“Quisiera saber si es importante que Artes Plásticas se califique en la libreta, porque yo realicé preguntas a muchos profesores y te voy a decir después la respuesta”. Yo le dije que suprima, ¿Porqué se va a poner en la libreta?. Y él preguntó: “-Y cómo haces tú con las chicas, cómo puedes hacer que respeten tu clase, que guste tu clase, porque los muchachos sólo por temor a la nota trabajan?”.
Lo que hago es hacer amar mi materia, hago que la quieran, entonces
castigo a cursos enteros, cuando se portan mal, no se pasa dos semanas clase de arte, eso era castigo para ellas: - “entonces que vamos hacer?”, y yo las metía a la
sala y les leía un cuento, empezaba a leer y luego les hacia escribir y escribir, ese era su castigo. La cuestión está en la motivación. Cuando el señor Carrillo, era Inspector de Educación fue a todos los colegios, a
todas las materias, porque entonces estaban en una campaña para que el maestro despierte la vocación de los estudiantes desde el colegio, ellos debían
salir con una vocación como ser de Biología, o Física o Matemáticas, y cada maestro debía alimentar esto, y llegó a la conclusión general, de que la única
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materia que vio que se estaba despertando la vocación era la materia de Artes
Plásticas; y yo estaba de profesora en el colegio. Y como que tengo varias profesoras de Artes Plásticas que antes habían sido mis alumnas.
SATISFACCIÓN POR HABER FORMADO A VARIAS ARTISTAS
He tenido la satisfacción de formar muchas alumnas que han estudiado Arquitectura y Pintura, que han salido del colegio, como Patricia Mariaca,
Rosario Ostria, Giancarla Muñoz, Roxana Crespo, María La Placa, han sido mis alumnas de colegio, mi alegría es esa, ellas si reconocen o no, interesa poco, lo que importa es que no he coartado su creatividad.
Ricardo Castañón, psicólogo, fue a dar una charla al colegio, habló mucho sobre “Enseñar a pensar”, es un profesor bastante rebelde, comunista, me dijo: –“Usted me puede dar la receta de cómo enseñar a pensar ?”. Yo levanté la mano y
pedí si podía contestar: -“Todos los maestros sobre todo los de matemáticas desprecian y relegan mucho la materia de Artes Plásticas y las técnicas en general como música. ¿ Y ustedes saben cuándo empiezan a pensar?, es en los talleres de artes plásticas, porque se les da un móvil de motivación, y ellos piensan, por ejemplo :”- pinten un bosque” por decir; y en la mente visualizan un bosque, y una y otra no hacen un bosque igual, yo creo que es una materia donde ellas se ponen a pensar y que a lo largo de la vida es una persona creativa, es creativa en física, en matemáticas, en geografía, en la vida en general, hasta para ser cocinera.”
Como cuando alguna alumnas me decían:”- Mafalda, en el futuro no vamos a ser pintoras”, les explicaba: “- No importa, van a aprender a vestirse, para decorar sus casas, su fuentes, para ser buenas amas de casa o profesionales.” Entonces yo pienso que es muy importante la materia de artes plásticas que
estos dos últimos años se ha discutido mucho a nivel gubernamental de suprimir el sistema de antes.
EL ARTISTA PUEDE VIVIR DE LA ENSEÑANZA
Yo creo que en ninguna parte del mundo el artista puede vivir de su arte, a no ser que el artista comercialice lo suyo, pero el artista honesto, el creativo, si
vende un cuadro que alegría, sino que pena, pero no trabaja precisamente para vender y para vivir de eso. Claro que últimamente en nuestro medio los
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muchachos jóvenes, que son muy buenos pintores, y casi todos son del pueblo,
con mucho sentido artístico, mucho colorido, lamentablemente están pintando por serie y viven de eso; pero se está generalizando más que muchos son
profesores de Artes Plásticas en colegios. Así Marina Núñez del Prado ha sido maestra, María Luisa Pacheco también ha sido maestra; yo creo que un medio de mantener su profesión y medio de vida es la docencia, porque hay libertad de
trabajo, y también de horario.
HE VIAJADO POR TODO EL PAÍS
Yo he estado en mis primeros años de casada, y recién salida de Bellas
Artes he viajado por casi todo el país, he visto la diferencia de costumbres, del Chaco, Cochabamba que es totalmente distinto, Potosí, de Caranavi, y uno va recogiendo cosas y se motiva. Pero yo personalmente soy muy altiplánica, a mi me
gusta mucho La Paz, y he pintado mucho trabajos no en gris, sino con colores vivos, vibrantes, fuertes, y he entrado al verde que le tenía tanto miedo, porque
generalmente la gente cruceña, cochabambina, tarijeña pinta con el verde, utilizan este color frecuentemente, en cambio el paceño utiliza más el violeta rojo y los grises, pero yo he salido mucho de los grises, me gusta el color, a veces me
asusto y digo: ¿porqué estoy pintando estos colores tan claros?
LOS VIAJES Y LA CULTURA DE CADA PAÍS
Viajé mucho, he estado en México en la misma ciudad, Cuernavaca,
escuché como hablaban, como pintaban sus casetas de varios colores. Lo mejor de México es su gente, la amabilidad, el cariño que tienen, incluso la gente en la
calle se aproxima y está presta a ayudar, preguntan qué está buscando, que quiere? Se parece mucho a lo que antes era el boliviano. Eso es lo que más me ha impresionado de México, la ciudad tan grande con grandes avenidas, tan llena de
cultura. He conocido el Museo Nacional de Arte, el de Arte Moderno, no he conocido galerías. En Chile si he conocido galerías, encuentro que nuestro arte es superior, pero entre bolivianos nos pisamos unos a otros. El año pasado cuando
pinté en el evento “Pintemos juntos”, me tocó trabajar con el Cónsul de xxxxx, me decía que en Bolivia hay excelentes pintores, tanto hombres como mujeres.
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Después he estado en Argentina, Buenos Aires, Salta, Córdova y Jujuy,
también me acuerdo del Chaco argentino, del Chaco paraguayo, del Chaco boliviano, los tres Chacos, todos estos lugares los hice por carretera. Estuve
también en Bogotá, en Lima, en Caracas. Mi interés en viajar ha radicado en conocer la cultura de esos países, cada
país tiene sus costumbres, pero lo que más me ha impresionado ha sido la actitud
hacia el artista, es muy diferente de aquí, para ellos el artista es una persona tan superior, le tratan como a una reina. Cuando estuve en Córdova, me llamaban
por teléfono y me decían que mandarían al chofer para que me recoja, un trato que no se da en nuestro país...
LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN NO SE PREOCUPAN DEL ARTE A través de su cultura se puede ver el avance de un pueblo, si está
creciendo, si está progresando. Pero lamentablemente, en estos últimos años no sólo en Bolivia sino en Latinoamérica, a la gente le preocupa más la política que el
arte y la cultura. También en televisión se ven los programas de deporte. Al football yo no lo soporto, me molesta, no puedo ver, gastan cualquier cantidad de dinero en deporte y nunca han hecho quedar bien al país. En cambio el artista
hace conocer su país, en silencio, solo sin ningún apoyo del gobierno. En la prensa igual, ahora no hay una sección de cultura, pero de deportes tienen por lo
menos ocho hojas... ARTE Y COMERCIALIZACIÓN
Ha habido una época que si ha habido venta de obras de arte, por ejemplo parejas que recién se ha casado y estaban haciendo su casa, han comprado muchas obras. También hay muchos que compran sólo “firmas”, no porque les
guste, sino como una inversión.
RECUERDOS ANECDÓTICOS
Una anécdota de un muchacho que vino a entrevistarme, yo pintaba por
entonces montañas, entonces me decía porque no pinto el verde, le dije que como paceña el verde, el rojo nos apabulla, no logramos en eso, y le digo: -“yo he llegado a pintar hasta la cumbre, me refería a la cumbre del camino a los Yungas”, pero él
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ha debido pensar esta pintora es tan engreída, que dice que ha llegado a la
cumbre del arte, del éxito. Otra anécdota que recuerdo cuando mi profesor Historia del Arte era Luis
Lusic, era político, escribía y pintaba acuarelas, muy lindas, él era un hombre muy espiritual, magnífico, que creó en las alumnas un amor al arte. Nos citaba a las seis de la mañana, pasaba por la casa de Magda a recogerla, a la mía, y nos
íbamos a pintar a los tambos. Alguna vez, cuando él tocaba el timbre de la casa, yo le decía: “- por favor, no voy a pintar, porque no tengo pinturas, no tengo papel”, yo hacía esto por floja y él me decía: “no importa, yo te voy a dar”, y me cargaba a pintar...
Los tambos de fruta que estaban en la Sagárnaga, por entonces eran pocos y muy poéticos en aquella época, muy lindo! Pero ahora como la ciudad entera se ha convertido en un mercado, ya no es lo mismo.
En la Escuela de Bellas Artes, cuando estudiaba, las clases eran desde las ocho de la mañana a las doce y por la tarde de cinco a ocho de la noche, tomábamos siempre el té en mi casa o en la casa de Magda, como chiquillas y
quinceañeras nos servíamos con abundancia de pan. Nuestro hobby era llegar a la academia y después de la primera hora salir a comprar pan dulce, pero no con
mermelada sino con unas tablillas, nos sentábamos en las gradas, nos poníamos a comer el pan con dulce, muchas veces Genero Ibáñez nos decía que le invitemos pan. Pero lo más gracioso estaba en que a veces nos faltaba plata para
comprarnos más, hasta el portero nos prestaba y cuando nos daban la beca, le pagábamos... Otras veces íbamos donde el Arquitecto Almaráz, profesor de Escultura y Modelado, y le decíamos : “- Don Hugo nos puede prestar una monedita porque estamos haciendo un decorado y necesitamos hacer redonditos”, entonces él nos prestaba y nunca le devolvíamos la monedita, hasta que un buen
día el se dio cuenta y cuando le fuimos a pedir la monedita nos dijo: “ -¿Qué les parece chicas si mejor les doy un compás, y les enseño a manejar el compás?” y ahí
nos cortó lo de la monedita.
INTELECTUALES QUE CONOCÍ Había un escritor argentino muy bueno, que amaba Bolivia, en la Argentina
nos encontramos, era Rufino Marín, escribió varios libros sobre Bolivia, era
admirable. Después en Buenos Aires conocí a un escritor que cuando yo hice mi exposición, lo vi limpiando, agarrando el basurero, iba desempolvando los
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cuadros, el señor comenzó a charlar de mis cuadros, cuando a eso llegó el
director, yo pensé qué hombre tan instruido el barrendero, y como en la Argentina todos se confunden porque son bien vestidos y de ojos claros, conoce al autor del
libro de lectura “Abejitas”, yo le digo claro y no era portero ni muchos menos. ARTISTAS QUE ADMIRO
A nivel internacional lógicamente admiro a Dalí, Picasso para mí estaba en
primer lugar, pero desde que vi videos, y me compré unos libros, lo encontré a Dalí más talentoso, con una creatividad increíble. Picasso es importante por el trabajo y la abundancia de obras, en cambio Dalí y su locura, apasionan!
Después Miró, Braque, Van Gogh... GUSTOS MUSICALES Y LITERARIOS
Yo trabajo en silencio, pero la música me gusta mucho, cuando descanso en la noche, escucho mucha música. Me gusta la música clásica, la música ligera,
como de Ricky Marti, Chayan. No me gustaba la música mexicana, cuando yo estuve en México en la Plaza Garibaldi con mariachis tocando, me gustó, porque yo vi al mexicano y ahora escucho tocar esta música y me deleito, porque me da
la impresión de que estoy en México. El tango me gusta, está dentro de lo folklórico de la Argentina. Dentro de lo folklórico nacional me gustan los Kjarkas,
Zulma Yugar porque canta con el alma de la tierra, lo hace con mucha altura. Me gusta mucho la literatura más filosófica con rasgos psicológicos, me
gusta mucho Stephan Zweigh, porque encuentro que es una literatura muy rica,
muy limpia de volver a leer una y otra vez. También los autores clásicos, Alejandro Dumas, Herman Hesse, Oscar Wilde, entre los poetas bolivianos Armando Soriano, esta muchacha Juanita Velásquez, excelente, ahora está en
México, y ella dicen que en México una mitad canta y la otra escribe.
PIN PARA UN BUEN COLLAGE.
Mafalda Córdova da un secreto para obtener un buen
collage, lo primero es trabajar con un material que no
pierda el color, así ella escogía las revistas LIFE, porque
otros papeles pierden el color, y por tanto la obra
también.
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2. COMENTANDO SU OBRA La trayectoria artística de Mafalda Córdova se desarrolla entre la pintura y la docencia, trabajó catorce años en el colegio Amor de Dios, formando a futuras
artistas que ahora están en la plenitud de su trabajo pictórico. En su obra se nota una preocupación por el manejo del color y textura, más
que de forma o dibujo, esto le acerca cada vez más a la pintura abstracta, logrando unas magníficas combinaciones de colores casi puros que destacan de la pintura paceña que por lo general es trabajada con grises y tierras de siena.
Su amplia trayectoria en la pintura, la lleva por caminos seguros y firmes hacia un abstraccionismo casi total en la actualidad, se pueden reconocer varias fases o etapas a veces dadas por un tema en especial y en otras por el manejo de
determinada técnica que hace que su expresión tenga variaciones muy interesantes, de acuerdo a la conversación que sostuve con Mafalda Córdova, y al
material que pude ver en sus exposiciones de anteriores años, además de catálogos y fotos de su obra que ella tuvo el cuidado de guardar, las etapas de su obra artística serían las siguientes:
Indigenismo. Sus estudios en la escuela de Bellas Artes con maestros como Guzmán de Rojas, Genaro Ibáñez, Luis Lusic, dieron como resultado la influencia
lógica del indigenismo, pero Córdova pinta el indígena que ya no está en su antiguo hábitat, el campo, sino lo trabaja como migrante en la ciudad, un ejemplo de aquello se puede ver en un collage de una feria con sus blancas
chiwiñas, contrastando con el colorido de mantas y polleras de las mujeres vendedoras y compradoras en complicado movimiento, denotando un ambiente
festivo y alegre, no está presente la lucha del indígena sino sus pocos momentos de esparcimiento, los tiempos han cambiado pasó la revolución del 52, entonces Córdova se fija en lo cotidiano.
Temática social. Lo cotidiano del indígena hace que su pintura repare en la problemática social y más específicamente en lo que acontece a los pequeños que ya han nacido en la ciudad o migraron a muy temprana edad con sus padres, que
querían darles un mejor provenir en la ciudad, sin embargo estas esperanzas se han esfumado y se hace necesario que incluso los niños aporten al presupuesto
hogareño vendiendo en las calles. Aquí está su serie de niños trabajando en la
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calle: vendedores de dulces, lustrabotas, heladeros, limpiadores de autos o
jugando con bolitas en sus pocos momentos libres. Está presente lo social y maternal a la vez.
Temática festiva. Su carácter juguetón y alegre se manifiesta en esta etapa, el pepino además de ser un personaje típico del Carnaval de la Paz, es muy interesante plásticamente y Córdova lo pinta en el momento de descanso, cuando
ha dejado de saltar y jugar, sin embargo continúa su picardía. La obra que la artista seleccionó, los pepinos están delante de unas rejas, que parecen guardar
al hombre común en su vida cotidiana, con su carácter taciturno y serio del andino, que por un momento realiza su catarsis oculto detrás de una máscara durante la festividad de carnestolendas.
Collage y hábitat. Esta técnica propia del siglo XX, incorporada por Braque y Picasso al lenguaje bidimensional hacia 1912, es trabajada por Córdova durante varios años, lo hace de manera magistral; a decir del maestro Solón Romero,
Mafalda es la “reina del collage”, deja la figura humana y muestra ciudades con bastantes grises y detalles de papeles de color, hay poesía de síntesis en cada
obra. La ciudad de La Paz está en formato vertical que acentúa su topografía, sus interminables gradas hacia la ceja de El Alto, la pobreza que aumenta en el ascenso, las casas y edificios se convierten en chozas, con gradas hechas de tanto
andar que poco a poco se deforman en el camino ondulante que se pierde en las alturas. Papeles a veces cortados con un instrumento, en otras rasgados con la
mano, se unen con ritmo lento y movimiento suave deteniéndose a veces en un color gris para volver a repetir esta acción, cada trozo es como una pincelada bien puesta.
Paisaje de rincones ocultos. En esta fase Córdova trabaja en técnica mixta de collage y acrílico, reaparece la figura humana, enigmática ahora escondida detrás de puertas, ventanas y sombras, mimetizada con éstas, ella nos mira pero el
espectador no lo percibe. Éstas figuras son recortadas y la arquitectura que las rodea con trabajadas con pintura, formando una simbiosis muy interesante, unas
veces son calles, otras pasadizos o rincones de lugares antiguos, con casas vetustas cuya pátina las tiñe de varios matices y colores, sin duda alguna son ciudades coloniales, talvez Potosí, Sucre o Cuzco, o rincones no físicos sino del
alma. Bodegones con collage y acrílico. Otra etapa con la misma técnica mixta que la
anterior, donde los elementos plásticos predominan más que el contenido de la
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obra. Hay una exquisita selección del color, grises y complementarios con collage
de papeles blancos con texto impreso que atenúan el contraste del conjunto. Los elementos de los bodegones son sugeridos, no son formas acabadas, son
sugerencias de frutas, de utensilios y mesas en medio de periódicos desenvueltos. Poco a poco la forma va desvaneciéndose hasta casi desaparecer en las siguientes etapas, su obra gana en contenido.
Paisaje Etéreo. En esta etapa se destaca la serie de las montañas de pinceladas anchas de colores limpios y claros, parecen un homenaje a la cordillera que nos
rodea y al lago sagrado. No hay nada definido, todo se acerca a un abstraccionismo, pero aún se pueden diferenciar los elementos de la composición, son sugerencias que están en lo profundo de nosotros, y Mafalda los saca a luz.
Hay madurez y seguridad en esta fase, unida a sensaciones de paz, tranquilidad y eternidad. Universo y humanidad. Su penúltima exposición del año 2000 denominada:
“Cuatro elementos: Transición Milenaria”, Córdova centra su creatividad en los elementos que Grecia y otras culturas antiguas definen como la composición del
universo: agua, aire, fuego y tierra. La figura humana femenina reaparece en su obra, pero de una manera etérea en el aire, húmeda en el agua, consumida por el fuego y entremezclada con el verde selvático de la tierra, ella es parte constitutiva
de cada elemento. Fue su homenaje a la era que llegamos y a la que se fue, y los trastornos actuales, está además lo que la artista desea para el mundo, algo muy
distinto a las catástrofes, mal llamadas naturales, y los estragos de la guerra; Córdova ve un mundo acorde entre la naturaleza y el ser humano. Mundos Extraños. En su última exposición del 2002, Mafalda Córdova, muestra
una producción más cercana al abstraccionismo, pero aún se puede percibir mundos talvez de otras galaxias o en plena génesis, la figura humana ha desaparecido, como que Córdova ya no quiere reflejar este mundo y sus
catástrofes y prefiere refugiarse en otros más benignos, tranquilos o solitarios. No sabemos qué sorpresa nos prepara Mafalda Córdova en su próxima exposición,
después de una larga trayectoria por lo caminos de la pintura, en especial ahora cuando tiene más tiempo libre de sus actividades en la docencia.
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3. CRÍTICA DE SU LABOR ARTÍSTICA. MARIO D. RIOS GASTELU ESCRIBE SOBRE MAFALDA CÓRDOVA.
Mafalda Córdova en las artes plásticas de Bolivia un nombre puesto en la vanguardia del movimiento contemporáneo en la pintura. Cuando su arte se
detiene ante lo virginal de un lienzo, surgen las ideas y se materializan en colores y líneas movidas por la inspiración.
En otros casos, solamente el tratamiento del color hace posible la
realización de una obra, no importa cual sea la escuela ni los motivos originales del cuadro definitivo.
Domina la técnica empleada, pues lo hizo desde el comienzo, cuando los
temas se caracterizaban por figurativos, allí donde la imagen humana puede dar paso a los cuadros más encendidos por la luz y el color, o aquellos de mayor
amplitud visual muy frecuente en los paisajes. La fuente informativa más clara de entrega total a su creación artística, se
cimienta en el hecho de ser, Mafalda Córdova, una pintora que no reposa, sino
que se entrega a sus labores plásticas con minuciosidad, sin importar el tiempo que emplea en cada cuadro, lo cual garantiza una obra pulcra y atractiva.
Cuando se llega a un nivel digno y se figura entre lo mejor de la plástica de un país se comprueba que el camino recorrido ha sido encarado seriamente y fructíferamente recorrido. Mafalda pintó bodegones y paisajes en las horas
tempranas. También hubo temas variados, comienzo de la búsqueda para encontrar otras fuentes de inspiración.
Si la imagen del ser humano alcanzó, en su momento, una atención
especial de la artista las variantes de su pintura tuvieron el tinte de la alegría, si podemos calificar así su serie carnavalesca representada con el mas genuino de
los personajes de La Paz, el pepino. El color tomó otros matices sin encender la intensidad que vendría mas tarde.
Lo urbano está presente en su arte, de otro modo no habría referencia sobre
aquellos tonos apagados: los grises y los claroscuros contrapuestos a lo luminoso de cielos abiertos. Es el paisaje de la ciudad. Los muros castigados de tiempo. Los
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techos maltratados por aves y felinos; las “chiwiñas” multicolores y creadoras de
sombras intensas, en fin, aquello mas frecuente en el diario vivir.
MONTAÑAS Mafalda Córdova vive entre montañas. La naturaleza le da el marco ideal
para sus nuevas telas. No son los cerros colorados, las lomas brillantes o los
“cerratos” que guardan pasado y presente perdiendo originalidad, las montañas en toda su grandiosidad, en su imponente dureza de granito desafiante donde
resaltan las arrugas de piedra que dan sensación de vejez. Ese inmenso cuadro natural se traslada al taller de Mafalda Córdova donde las ideas vencen la pureza del lienzo y toman un a forma muy particular que solo el arte puede lograr si es
guiado por mano experta y mente despierta. Las montañas de Mafalda Córdova son el paso definitivo rumbo a la
abstracción que llega mas tarde, tras un intervalo de calma, silencio y soledad,
que es la otra serie cautivante de la artista: Altiplano.
ALTIPLANO Con esta serie, Mafalda Córdova deja muy lejos el impresionismo, lo
figurativo y sobre todo el realismo. El altiplano en su infinita extensión muestra al
desnudo la tierra rateada de soles. Hay sombras y caminantes. Luces que dan impresión de lejanía. De la vastedad de esas regiones, surgen las obras artísticas
guiadas por la maestría de los creadores de lo bello. ABSTRACCIÓN
Todos los pasos se sumaron para llegar a lo más alto del arte plástico, pintura abstracta. Mafalda Córdoba de sitúa en aquellos pedestales de la creación subjetiva junto a
sus admiradores y sueña con los paisajes, gente, astros, agua y fuego con el solo empleo de la inteligencia frente a los colores.
En sus cuadros resalta la calidad del trazo, es decir, la maestría para pintar en esta escuela. reflejos de arena o reflejos de luna. Claroscuros con luces de astros. Verdinegros juncos a orillas de aguas saladas. Tierras ardientes de sol.
Estamos frente a las telas de Córdova. Ella creo sus alegorías, sus símbolos, en fin, lo que la artista transpone de la realidad a la sutileza de su arte. La noche
o el día muestran en el limite de su cambio sombras agoreras. El paisaje ya no es
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el mismo. El cielo nocturno apagó sus astros. El día se hizo penumbra. Hay la
constancia del agua porque al ser incolora, desafía al arte de los colores donde surgen reflejos y transparencias , pues ahí está lo hermoso de pintar el universo.
LAS CUMBRES ANDINAS DE MAFALDA CÓRDOVA. (De la Revista Enfoques, Julio De 1997)
Mafalda Córdova es de esos temperamentos a los que no les conforma la obra terminada, es decir que van en busca de algo mas profundo, mas novedoso
y, por esa razón, la artista nos deleitó con la alegría de figuras carnavalescas, de pronto se eleva a las cumbres y recoge mensajes del silencio de las montañas.
No hay en ese entorno la frivolidad de un paisaje mas, porque surge de las
pétreas figuras algo tan lleno de Dios, tan lleno de misterio que nos empuja a mirar la cima como algo tan grandioso, capaz de empequeñecer a los hombres que están al pie de sus faldas.
Córdova siente aquella profundidad penetrada en la dureza de la roca y afina sus pinceles para comprender el alma de la esfinge.
Con “Montañas de mi Tierra”, Mafalda Córdova se acerca al arte abstracto depuse de haber demostrado en el figurativo, los alcances de una paleta acentuada en los colores primarios para captar la luz y la sombra en el equilibrio
de la única respuesta que puede dar una montaña por magia del arte.
MAFALDA CÓRDOVA PROPONE UNA “TRANSICIÓN MILENARIA”. (El Diario, Sección Cultural, 18 De Septiembre De 2001)
Las mas recientes creaciones plásticas de la artista Boliviana Mafalda
Córdova podrán ser apreciadas por el publico paceño en la exposición “Transición Milenaria”, que será inaugurada este miércoles 19, a horas 19:30, en la galería Taypinquiri, ubicada en la avenida Montenegro 1378, San Miguel, zona sur de
esta ciudad. En la muestra que estará en exhibición hasta el `primero de octubre,
Córdova vuelve a reflejar la pasión que siente por la abstracción artística. La tierra el viento, el fuego y el agua son los cuatro elementos centrales que conforman la flamante propuesta pictórica de Mafalda, los cuales a su vez, le
permiten presentar visualmente la creación del universo y la vida. Para transmitir el sentimiento y la razón de la exposición, “Transición
Milenaria”, la artista paceña ha rescatado el siguiente poema de Joyce Eduardo.
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“La tierra acuna en su seno el sentir de la vida presente
convirtiendo al hombre en su hijo predilecto.
Entre los caminos del mundo
silba en viento como un caminante
y a esa tonada le acompaña el gesto de una lluvia cálida.
Su fuerza avasalladora
refleja el espíritu latente de la vida gloriosa
de la búsqueda original.
Se filtra en el
más sórdido desierto donde el sol y el genio
se metamorfosean
en brasa candente de fuego.
COMENTARIOS. De acuerdo Con el comentario critico de arte Mario Ríos Gastelú “La pintura
actual de Mafalda Córdova deja atrás la ensoñación de la estampa callejera la
mirada sube a los cielos y baja por las faldas pedregosas, siguiendo la parábola de la luz solar, tejiendo mantillas brillantes hace que la noche extienda sombras bajo el parpadeo de los astros nocturnos. Esas composiciones fuertemente construidas
con la espontaneidad propia de su obra, entre real e imaginaria llevan la vitalidad de la pintora que entrega su temperamento y formación al arte Moderno
Boliviano” Dennise Osrtermann por su parte apunta “ en la línea abstracta Mafalda
Córdova trae la intensidad del color de un cielo sin fronteras la sensualidad de
una naturaleza explorada, la frescura del aire de las montañas y el enigma del sonido de las olas del Titicaca, el lago sagrado”.
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LA ARTISTA.
Mafalda Córdova nació en La Paz Bolivia, estudios en la escuela superior de bellas Artes “Hernando Siles” y en los talleres Cecilio Guzmán de Rojas y Agnés de
la sede de gobierno. A partir de 1757 a presentado sus obras en mas 60 exposiciones
individuales y colectivas realizadas en las principales ciudades de Bolivia,
Argentina y Estados Unidos.
MAFALDA CORDOVA. Su vocacional dedicación a la pintura, muestra ostensiblemente un
progresivo perfeccionamiento de su arte de formación académica.
Mafalda Córdova, en la corriente de su pintura figurativa de índole realista, capta temas y estampas de nuestro ambiente, destacando sincera fidelidad que enaltece una pintura de alcance propiamente nacional. Tema, índole y color,
encaminando una vocación inclinada a investigar y explotar las múltiples expresiones nuestras, como el paisaje, los seres y las cosas.
Campos de trigo de intenso amarillo con alguna resonancia impresionista, muestran la adecuada aplicación del pincel, en trazos breves que dejan la huella de ligeros empastes que cumplen atractiva sensación en la representación.
El trigo agrupado en gavillas con su madures amarilla, resalta en el paisaje, equilibrado de luz que crea los matices perseguidos.
Los rasgos de su pintura social y nativista, están caracterizados por la tónica temática de las vendedoras indígenas, de los niños pobres o desamparados y otros motivos vecinos a la corriente elegida por ella.
Vendedoras de mercado representadas con la simplicidad de planos triangulares sin tratamiento somático, consiguen el perfil neto de la apariencia perseguida, dentro de azules y verdes esfuminados, en los que las imágenes se
advierten notoriamente a pesar de parecer mimetizadas en la propia atmósfera de planos sin perspectiva.
Sus composiciones recientes en este campo, acentúan el diseño con precisos contornos de detalle, que separan categóricamente los colores, definiendo las partes del todo. Los rostros aparecen con el detalle que rehuye
deliberadamente la búsqueda de la impresión o del trasunto emocional o subjetivo. Sin embargo, esos rostros esbozan la meditativa pasividad del
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personaje, cuyos atavíos de colores sobrios y apagados, conjugan con el equilibrio
de luz y color previstos. Voceadores de periódicos, niños pordioseros y mendigos completan la gama
de su pintura de acento social, en una serie prolongada, exploratoria, y de ensayo sobre tonalidades y matices de violeta, en inequívoca proyección de características expresionistas, que frecuentemente se prestan para relevar los ribetes dramáticos
y emocionales de este marco temático. Así, la pobreza y el desamparo quedan traducidos en la desnudez y flacura de los personajes reproducidos con
autenticidad en la comunicativa atmósfera inductora de sentimientos de compasión y rebeldía.
No están ausentes las estampas infantiles callejeras, llenas de risueña
jovialidad: niños jugando en la calle con globos o cometas enredados en los hilos telegráficos. Motivos simples y tiernos, de fuerte contenido afectivo.
Mafalda Córdova es también pintora de casas aisladas o agrupadas en
expresión urbana. Con la utilización predominante del negro, rojo y blanco, armoniza variadamente la vistosidad de sus casas, que se levantan unas veces en
el señorío de su dignidad de mansiones, o en la humildad de los conventillos que muestran las laceraciones de su vejez. Su tratamiento compositivo de primer plano, casi con la abolición de perspectiva, deja una interesante y sugerente
sensación. Son igualmente conocidos sus temas, en vibrante color, de payasos y
pepinos carnavaleros, arrinconados por la diligencia y desarrollismo económico social y social que avasalla la tradición.
Trabaja también con tintas, que semejan por la calidad de su elaboración,
verdaderas monocopias. Temas de aliento simbólico y realista, animan estas producciones realizadas en la simplicidad de la tinta china atenuada por el agua.
Son importantes sus collages, que marcan signos de renovadas calidades,
pues la composición acentúa la perspectiva, aboliendo el exclusivo primer plano tradicional, e incorporando detalladamente el matiz y el tono con la minuciosa
selección del material. Mafalda Córdova, es una de nuestras buenas y prestigiosas pintoras.
JIMENA DE LA QUINTANA ESCRIBE: UNA VIDA DEDICADA AL ARTE. (Revista DOMINGO Hechos y Vidas, 27 de Junio de 1999)
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Tan sencilla y modesta en su personalidad, como prolífica y diversa en su
obra, es Mafalda Córdoba. Ha incursionado en muchas expresiones y Técnicas, siempre buscando un reflejo de los paisajes y realidades del país. Ha sido también
maestra y formadora de las inquietudes artísticas de muchos niños en un cuarto siglo de docencia.
Fue discípula de pintores de la talla de Guzmán de Rojas, Genaro Ibáñez y
otros. Desde hace mas de treinta años Mafalda Córdoba, reconocida artista plática de
nuestro medio, desarrolla su arte influenciada por estos maestros e inspirada en el heterogéneo medio y contrastante geografía que le rodea.
Tiene aproximadamente 60 exposiciones colectivas y mas de una treintena
de exposiciones individuales. Su obra ha sido exhibida en países como Argentina, Perú, y Estados Unidos, entre esos.
Modestamente, como es ella señala que son varios años de trabajo y todavía sigo aprendiendo. En el arte nunca se sabe lo suficiente. Su expresión se ha
desarrollado en diferentes técnicas durante su trayectoria artística, primero empezó con la acuarela, luego la tinta, el collage, el acrílico, las técnicas mixtas y durante los últimos 10 años se ha dedicado al óleo.
Algunos de sus trabajos se encuentran en ediciones dedicadas a la obra de artistas y pintores bolivianos, como la memoria de la Fundación Cultural EMUSA
1974-1994, que rescata algunos de sus cuadros en collage, técnica en la cual obtuvo expresiones artísticas muy bien logradas.
EVOLUCION PICTÓRICA La temática de la obra de Mafalda Córdova ha cambiado con el correr de los
años. Gran parte de ella gira en torno al contexto urbano y suburbano de nuestra
ciudad, así como los diferentes paisajes y realidades del país, nuestras montañas, su belleza, diversidad y colorido han sido varias veces el centro de inspiración de
la artista, quien capto la particularidad de estos colores inmóviles, tanto de la zona andina como de los valles. En su última exposición titulada “Reflejos del altiplano”, presentada el mes de marzo en la galería Taipinquiri, plasmó de una
manera abstracta y característica de las planicies altiplánicas con un juego de luces y sombras de fuertes y brillantes colores.
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El crecimiento desmedido, asimétrico y abigarrado de una ciudad como la
nuestra, con calles empinadas, parajes escarpados y construcciones colgantes con ese aire entre mágico y místico fueron las fuente primitiva y natural de
inspiración de la obra de Mafalda Córdoba. “Todos estos años de convivir con los sorprendentes paisajes de esta ciudad y de otros lugares del país, provocó en mi la necesidad imperiosa de imprimir con mi arte, las características particulares de
indómita belleza que son parte de nuestras urbes”, agrega. Personajes como los “pepinos” y las singulares chiwiñas también fueron
algunos de los temas que la pintora desarrollo cuando aún estas figuras y símbolos, tan arraigados a nuestra cultura criolla, tenían el toque pintoresco y auténtico que la modernidad y la alineación han ido destruyendo.
En consecuencia y con una obra que abarca décadas de historia y de producción, hablar de una temática única en su obra seria imposible. Ella misma lo admite y se confiesa diversa, así como las técnicas con las cuales ha querido
experimentar. Curiosa y aventurera muchas veces señala que la inquietud, un rasgo natural de su personalidad, le ha permitido experimentar sin miedo en el
arte “Yo no podría anquilosarme en una sola línea – asegura- a mi me gusta experimentar, descubrir y explorarlo todo”.
El arte abstracto, con el cual ha estado trabajando, es una prueba de ello.
“Mi última exposición fue una abstracción del altiplano, ahora quiero llegar al abstracto absoluto, afirma y añade sin embargo, que para llegar a ello el artista
debe evolucionar y darse cuenta de que debe haber algo construido para destruir, algo hecho para deshacer y lograr el objetivo de la abstracción.”
24 AÑOS DESARROLLANDO TALENTOS Por su dinamismo, inquietud y afán de descubrimiento, el trabajo de
Mafalda Córdoba no se reduce a un lienzo y un pincel, durante 24 años ejerció la
docencia, primero en el colegio Loreto y luego en el Amor de Dios, ambos de la ciudad de La Paz.
Durante ese tiempo, más de 800 niños y jóvenes pasaron semanalmente por sus aulas y sus manos aprendiendo a usar las tijeras, el papel, el pincel y el lienzo, instrumentos esenciales para desarrollar el talento y la creatividad que,
más que nadie, un niño puede explotar al máximo. Importantes artistas plásticas jóvenes y con gran futuro como Roxana Crespo,
Patricia Mariaca, Rosario Ostria, Angelines Prudencio y otras, fueron algunas de
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las niñas que tuvieron la suerte de ser alumnas de Mafalda Córdova, quien con su
sencillez habitual sólo guarda un comentario al respecto: “No es merito mío que sean pintoras, pero puedo decir que nunca coarte su creatividad.”
Sobre su larga trayectoria como maestra apunta que ha sido un trabajo enriquecedor al máximo porque el profesional y el maestro de cualquier nivel, en tanto que instruye, aprende de sus alumnos. “Ha sido una practica y un ejercicio
maravilloso, tanto por la visión plástica como por la parte psicológica y social. Yo me nutria con esa juventud fuerte y seguramente, esa juventud recibía de mí la
experiencia de una persona mayor”, puntualiza. Para una persona con amplia experiencia artística como Mafalda, el enfoque
que se da en los colegios a las artes plásticas es erróneo y descuidado. Se anula la
imaginación del niño y el adolescente al imponer formas de trabajo rígidas, establecida por “el programa”, así como temáticas predeterminadas que no dejan surgir la inventiva y dar alas a la creación.
“Debería ser obligatorio –dice- que los alumnos de la Normal pasarán un año, por lo menos, en la Escuela de Bellas Artes para que tengan otra perspectiva de lo
que es arte.”
Para Mafalda Córdova, la mejor forma de descubrir talento y fomentar un acercamiento al arte es a través de la práctica. “Los padres podrían fácilmente
motivar a sus hijos dándoles libertad para expresarse como quieran, sólo hace falta proporcionarles lápiz y papel, y dejar que hagan lo que les plazca”, concluye.
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4. PINACOTECA
Indigenismo y collage.
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Feria en La Paz.
Temática Festiva.
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Collage y hábitat.
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Su sombra en el camino.
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Avanzando tus alturas.
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Tu eco y tu canción.
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Entre puertas y ventanas.
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Entrelazada Formación.
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Paisaje de rincones ocultos.
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Duerme una tarde.
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Tras la ventana.
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Bodegones con collage y acrílico.
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Paisaje Etéreo
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Pajonal.
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Universo y humanidad.
Serie: Transición Milenaria: Elemento Fuego. Óleo
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Serie Transición Milenaria: Elemento Viento. Óleo
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Serie Transición Milenaria: Elemento Agua. Óleo.
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Mundos Extraños.
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5. RECUERDOS DE UNA VIDA CON EL ARTE
6. BIBLIOGRAFÍA SOBRE LA ARTISTA
En el interesante catálogo de la II Exposición de ARTE CONTEMPORÁNEO: ARTISTAS
BOLIVIANOS DE HOY, auspiciado por la Casa de la Cultura “Raul Otero Reiche” de Santa Cruz
publicado en 1978 , encontré el siguiente material sobre Mafalda Córdova:
”Estudios realizados en la Academia de Bellas Artes de La Paz.
”EXPOSICIONES INDIVIDUALES: Numerosas exposiciones individuales en La Paz, exposición
en la Galería ADEA, Buenos Aires – Argentina, 1953; en la Asociación de Escritores Salta –
Argentina, 1953; en la Galería de Arte Radio Nacional – Córdova – Argentina, 1968.
“EXPOSICIONES COLECTIVAS: Hall Municipal de La Paz, 1974; Premio a dos exposiciones de
poema „Grito‟ y „ Manos‟ en el Primer Salón del Poema Femenino Ilustrado La Paz, 1974 por la
Asociación Internacional en la Primera Bienal I.M.B.O.”
En el libro PINTURA BOLIVIANA DEL SIGLO XX Cap. 5 Índice de Pintores Bolivianos
1900 –1987 , capítulo escrito por Silvia, Arze, dice lo siguiente:
“Nació en La Paz en 1933. Fue alumna de Cecilio Guzmán de Rojas. Estudió en la Escuela
Superior de Bellas Artes de La Paz y en el Taller de Quinquela Martín en Buenos Aires. Entre 1945 y
1985 realizó ocho exposiciones individuales en La Paz, Salta, Córdova y Buenos Aires (Argentina). Entre
1945 y 1983 participó en varias exposiciones colectivas en La Paz, Potosí, Cochabamba, Oruro, Santa Cruz,
Salta y Córdova. En 1947 obtuvo un Premio de la Municipalidad de La Paz. Emplea la técnica de óleo
sobre lienzo, acuarela y collage.”
En el libro del crítico de arte y escritor Armando Soriano Badani, ARTISTAS BOLIVIANOS
CONTEMPORÁNEOS, el autor escribe lo que a continuación transcribo:
“Su vocacional dedicación a la pintura, muestra ostensiblemente un progresivo perfeccionamiento
de su arte de formación académica.
“Mafalda Córdova, en la corriente de su pintura figurativa de índole realista, capta temas y
estampas de nuestro ambiente, destacando sincera fidelidad que enaltece una pintura de alcance
propiamente nacional.
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“‟Campos de trigo‟ de intenso amarrillo con alguna resonancia impresionista muestran la
adecuada aplicación del pincel en trazos breves que dejan la huella de ligeros empastes que cumplen
atractiva sensación en la representación .
“Los rasgos de su pintura social y nativista, están caracterizados por la tónica temática de las
vendedoras indígenas, de los niños pobres y otros motivos vecinos a la corriente elegida por ella.
“‟Vendedoras de mercado‟ representadas con la simplicidad de planos triangulares sin
tratamiento somático, consiguen el perfil neto de la apariencia perseguida dentro de azules y verdes
esfuminados en los que las imágenes se advierten a pesar de parecer mimetizadas en la propia atmósfera
de planos sin perspectiva. No están ausentes las estampas infantiles callejeras llenas de risueña
jovialidad, niños jugando en la calle con globos y cometas enredados en los hilos telegráficos. Motivos
simples y tiernos.
“También pintora de casas aisladas en expresión urbana predominantes rojo, negro, blanco,
que armoniza variadamente la vistosidad de sus casas que se levantan unas veces en el señorío de su
dignidad de mansiones, o en la humildad de los conventillos que muestran las laceraciones de su vejez.
Su tratamiento en 1er plano, aboliendo la perspectiva deja una interesante y sugerente sensación .
“Son igualmente conocidos sus temas de payasos y „pepinos‟ carnavaleros, arrinconados por la
diligencia y desarrollismo económico y social que avasalla la tradición .
“Trabaja también con tintas, que semejan por la calidad de su elaboración, verdaderas
monocopias .
“Son importantes sus collages, que marcan signos de renovadas calidades, pues la composición
acentúa la perspectiva, oliendo el primer plano tradicional.”
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BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA.
CHADWICK, Whitney Mujer, Arte y Sociedad Ed. Destino Thames and Hudson
Barcelona 1992
PAREDES, Elsa Diccionario Biográfico de la Mujer Boliviana
SALAZAR M., Carlos La Pintura Contemporánea de Bolivia Ed. Juventud La Paz –
Bolivia 1989
SORIANO B., Armando Pintores Bolivianos Contemporáneos 2° Ed. Los Amigos del Libro
Cochabamba – Bolivia 2000
Varios Autores Pintores del Siglo XX Ed. Banco Hipotecario Nacional La Paz
– Bolivia 1989
ECKER, Gisela (ed.) Estética Feminista Ed. Icaria Antrazyt España 1986
DEEPWELL, Katy (ed.) Nueva Crítica Feminista de Arte, Estrategias Críticas Ed.
Cátedra Universidad de Valencia Instituto de la Mujer Madrid -
España 1998
Catálogos:
Catálogo de la II Exposición de ARTE CONTEM-PORÁNEO ARTISTAS BOLIVIANOS DE
HOY CASA DE LA CULTURA “RAUL OTERO REICHE” Santa Cruz - Bolivia 1978
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