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El gesto contraculturaluna lectura del streetwear atraves del punk

El gesto contraculturaluna lectura del streetwear atraves del punk

Carlos Andres Peñaranda Galindo

Proyecto de grado para optar al título de diseñador

Dirigido por

Neftalí Vanegas Menguán

Universidad de los AndesFacultad de Arquitectura y Diseño

Departamento de Diseño

Bogotá2020

Dedicatoria

A todos los que se atraven a pensar diferente

Agradecimientos

A mi familia por siempre apoyarme en todo, a mi novia por ayudarme en las crisis de la tesis, a mis amigos por estar ahí y Neftalí por dirigir este proyecto con la mente

abierta.

Epígrafe

Que en este mundo traidor / nada es verdad ni es mentira: / el

camaleón es del color / del cristal con que se mira

Eduardo Torres Campoamor

Índice

1. Introducción

“Streetwear” contracultura o fenómeno comercial ..................................................................................................... 14

2. Antecedentes

Streetwear ............................................................................................................................................................................ 16

3. Estado del Arte Referente Metodológico y Estético................................................................................................................................18

Referente Estético .............................................................................................................................................................. 20

Referente Conceptual ....................................................................................................................................................... 22

4. Desarrollo del Concepto Marco Teórico .....................................................................................................................................................................26

Pertinencia ...........................................................................................................................................................................36

Objetivos ..............................................................................................................................................................................37

Audiencia .............................................................................................................................................................................39

Concepto .............................................................................................................................................................................40

5. Implementación

Proceso Toma de decisiones .............................................................................................................................................44

6. El Proyecto Descripción ......................................................................................................................................................................... 47

Costos ...................................................................................................................................................................................51

7. Conclusiones Conclusiones .......................................................................................................................................................................53

Bibliografía ..........................................................................................................................................................................56

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Abstract La vanguardia del streetwear ha irrumpido en la industria de la moda y la cultura en la actualidad. Esta tiene sus raíces en los movimientos contraculturales que se gestaron hacia finales del siglo XX, como el movimiento punk, el graffiti, el skate y el rap. Se plantea entonces un recorrido histórico y un análisis correlacional de estas manifesta-ciones en occidente y principalmente la forma en que repercuten la escena cultural de Bogotá y Medellín. De dichos movimientos se resaltará el punk y será objeto de estudio la forma en que se ha transformado y ha pasado a ser estructurado en la cultura y el sistema comercial capitalista. En dicha transformación, natural del gesto contracul-tural, se puede observar una pérdida de su carácter ideológico a lo largo del tiempo. En esta tesis se argumenta una reivindicación de los gestos contraculturales dentro del sistema y se busca encontrar el valor del diseño confrontacional en la cultura comercial. Dado esto, la propuesta consiste en una colección compuesta por una camiseta, un saco, un fanzine y un póster que por medio de la gráfica y la ilustración cuestionen los trazados de manera cruda y directa con el fin de fomentar a la reflexión y el diálogo.

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De los Ríos, E. (2020, 22 agosto). Libertad de la verdadera. Canon AE1 Program Kodak Color plus 200. [Fotografía]. Instragram. https://www.instagram.com/p/CEM9TmblG2l/

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(2019, 5 julio). [P+F MAGAZINE VOL. 4 - J BALVIN COVER. Fotografía de J Balvin, ícono cultural colombiano, para importante marca de streetwear.]. https://hypebeast.com/2019/7/places-faces-volume-four-j-balvin-koffee-aj-tracey-aleali-may-magazine

[Vetements Insta Pump Fury un sneaker reconocido del mundo del streetwear con rayones que hacen referencia a la estética punk,]. (2017, 17 mayo). https://hypebeast.com/2017/3/high-fashion-scribble-obsession

Introducción“Streetwear” contracultura o fenomeno comercial A lo largo de mi vida desarrolle un interés particular por el movimiento occi-dental denominado “streetwear”. Desde pequeño por una influencia y prepon-derancia al producto cultural americano tendí a gustos por bandas, productos, películas, entre otros, de la cultura popular occidental y estadunidense. Posterior-mente, eso me llevo a una fascinación por la cultura del rap negro estadunidense, el skate y la moda. Todos estos gustos en la actualidad se podrían acoger bajo la misma cortina del término mencionado anteriormente. Sin embargo, creo que estudiando diseño e interesándome por los diferentes universos estéticos que me llamaban la atención y los movimientos que los acompañan construí una postura crítica frente a los mismo. De ahí justamente nació este proyecto, por un simple deseo de hondar en mis intereses particulares en un movimiento que había influ-enciado mis gustos en tendencias de diseño, música, moda y cultura. Reconocer, cuestionar y estudiar este interés permitió desarrollar esta tesis que busca desde lo más profundo de mi ser traer a colación a través del diseño un mensaje que siempre ha estado presente a lo largo de mi vida: el cuestionamiento y la rebeldía.

Después de mucho leer y reflexionar creo que el streetwear simplemente fue una forma en que mi yo adolescente buscaba maneras de distinguirse y diferenciarse de una sociedad en la que aparentemente todos se vestían igual, pensaban igual y les gustaban las mismas cosas. Lamentablemente me doy cuenta de que simple-mente fui víctima de otra farsa publicitaria capitalista de que lo rebelde vende. Sin embargo, como desarrollo en mi tesis, el hallazgo que encontré a lo largo de mi investigación fue que a pesar de estar siguiendo ciegamente otra maroma comer-cial capitalista pensando que era diferente si hay un valor detrás de reflexionar y cuestionar. Simplemente creo que el streetwear fue una cura en su momento a un mal inconsciente e irreconocible, una sociedad que en su hegemonía aliena todo lo que es diferente. Justamente creo que el streetwear en su carácter originario contracultural es lo que me movía tanto hacia el movimiento.

La investigación me llevo a nuevos caminos y me amplio el horizonte para llegar a problemas y cuestiones más profundas. En la contracultura encontré el verdadero sentido del proyecto, lo que en realidad me interesaba del movimiento denomi-


L’Art de l’Automobile’s Vans Vault Collab Draws From the Volkswagen Golf GTI. (2020, 16 octubre). [Fotografía]. Hypebeast. https://hypebeast.com/2020/10/lart-de-lautomobile-vans-vault-era-volkswagen-golf-gti-sneaker-collaboration

nado “streetwear” (a pesar de que muy problemático el término) que era ese no seguir los trazados tradi-cionales y establecidos como hegemónicos. La contra-cultura es en si el valor de cuestionar y reflexionar para repensar y reconstruir el porque hacemos o dejamos de hacer en sociedad. Pero hablar de contracultura es de-masiado amplio y globalizado, en esta tesis se plantea una revisión del término a partir de diferentes escuelas y estudios que a lo largo del tiempo lo han definido. De igual manera, contraculturas hay muchas y en todo el mundo, por un interés personal y por su relación estre-cha con los derivados del streetwear se escogió el punk, que nació en occidente en la década del 70 y se esparció por el mundo llegando a Colombia, específicamente a Medellín como uno de los gestos contraculturales mas importantes de nuestra sociedad. En este proyecto se plantea entonces si el gesto con-

tracultural tiene valor en la sociedad y en el diseño o si solo es un fenómeno capitalista comercial más. Si lo rebelde es solo un producto para aquellos que creen ser diferentes o es en verdad algo que transmite y cambia realidades. Si el punk es anarquista e irreverente o si es solo otro producto cultural que por la influencia de oc-cidente ha llegado a Colombia. Se busca reivindicar y estudiar el valor de decir lo que no es permitido y sacar a la luz discursos que ante lo establecido no se tienen en cuenta.

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“Streetwear” El término “streetwear” al que algunos llaman sub-cultura, otros lo llaman contra cultura y otros lo definen con una rama de la moda mainstream en la actualidad. Es difícil porque no hay un consenso exacto de que es, que abarca y que representa esta categoría no solo en el ámbito de la moda sino de la cultura en sí. Lo que sí está claro es que desde los noventa y especialmente en la última década se ha adentrado y a irrumpido la industria de la moda, la música, el arte, la cultura, entre otros. Como dice en el artículo “Streetwear Impact Re-port” de Hypebeast: “En pocas palabras, el streetwear es ropa casual de moda: camisetas, sudaderas con capucha y zapatil-las deportivas. Pero esta definición superficial del streetwear subestima un modelo que ha subvertido por sí solo el sistema de moda tradicional al redefinir su componente principal: la exclusividad.” Ciertamente el streetwear hace referencia al aspecto casual de la ropa, dado un contexto en el cual las con-strucciones sociales anteriormente, e incluso hoy en día, les dan un carácter peyorativo e informal a estas prendas. Tal vez por esta razón las contraculturas en los 90 se apoderaron de ellas como un acto político y con el tiempo las introdujeron al modelo comer-cial capitalista. Es ahí donde el streetwear adquiere una profundidad histórica y conceptual sumamente importante. El streetwear se formaliza originalmente en las contraculturas del skate, el surf y el hip-hop a comienzos de la década del 90 en estados unidos cuan-do estos grupos se manifiestan y se expresan para crear símbolos y maneras de ser que no encontraban en un sistema que no los representaba. En esta búsqueda de

expresión pequeños colectivos empieza a experimentar con la filosofía del “DIY”, que originalmente surge en el punk de los setentas, y es justamente la ropa informal y básica que tienen a la mano la más fácil de hacer y diseñar. A través de medios de impresión como la ser-igrafia surgen esas primeras impresiones ideológicas a través de la ropa. Estos colectivos se terminan formulado como marcas de ropa, de las primeras en ser reconocidas son Stussy, de Shawn Stussy, que surge en California en la escena subcultural del surf. Originalmente estas marcas rep-resentaban una forma de sustento para sus creadores que encontraban en este también un trabajo con sen-tido y la posibilidad de expresarse libremente. Dado su carácter sub o contra cultural estas marcas solo se adoptaron por minorías y los grupos contra culturales que se identificaban con ellas. Es en esta adopción de la marca donde surge una contradicción critica en la integración de las contraculturas a través de la moda en la sociedad. El mismo trasfondo ideológico contra cultural que causa que se identifiquen únicamente con cierto grupo o minoría le da su carácter de exclusivi-dad, constituyéndolo en una punta de lanza de doble filo para el propio capitalismo. Sheppard Fairey uno de los artistas más importantes del streetwear, creador de la marca Obey, entiende este fenómeno y lo narra en el short film de Brett Novak, “Shepard Fairey: Obey This Film”: “progresé y evolucioné. Me di cuenta de que realmente no tenía sentido complacer a las personas que ya es-taban de acuerdo conmigo... incluso aunque venía del punk rock, esta idea de elitismo no solo es de la cima de la pirámide para abajo. También hay un elitismo mar-ginal que realmente comenzó a surgir para mí y que,

Antecedentes


Fairey, S. (2008, 10 noviembre). [Obama Hope. Poster diseñado para la campaña presidencial de Obama en el 2008, por el cual el artista fue duramente criticado.].https://obeygiant.com/obama-hope/

Dobson, D. (1989–1990). [Inter-national Stussy Tribe. Campaña publicitaria de Stussy, marca pionera del streetwear.]. https://fizzymag.com/articles/stussy-fall-2017

si creyera en la igualdad de oportunidades y en ser un populista, no podría ser. Conoces a un elitista en los márgenes y dices que esto no es para ti, viejo cuad-rado, esto es solo para mis alternativos amigos rebeldes. (traducido)” Este análisis es pertinente, porque entiende como lo que originalmente fue con-tracultura, fue punk, skate, grafiti, hip-hop, entre muchas otras expresiones, se instauró con el tiempo en la cultura hegemónica. En esta instauración y en la actualidad se formuló como una propuesta más de capitalismo de vanguardia que dé contracultura ideológica. Sheppard Fairey entiende esto y por esa razón busca que su obra vaya a un público más general y amplio, su obra no va dirigida a un nicho específico que en su alta cultura y pensamiento diferente excluye a los demás. Todo lo contrario, su obra invita al diálogo a todo aquel que piensa diferente. Es ahí donde muchas de estas expresiones que quedaron del legado de las contraculturas entran en conflicto entre lo que significaba la ideología trans-gresora de la contra cultura y la comercialidad del capitalismo. Pero esta es una situación compleja que no se puede reducir a todas las marcas o a los muchos legados de las contraculturas. Dado esto es importante, como se explicará poste-riormente en este texto, siempre mirar las subculturas o contra culturas sin una mirada categorizadora y globalizada que invisibilice sus particularidades, por esta razón es que términos tan ambiguos como “streetwear” o “contracultura” son perjudiciales para lo que en verdad implican cada una de estas expresiones y manifestaciones que se dan fuera del sistema hegemónico bajo un contexto y una temporalidad específica. Se pretende revisar la historia de algunos gestos contraculturales, principalmente aquellos relacionados al movimiento punk en Occidente, para repensar cual es el legado de estos y como se instauran en la cultura dominante. Esto en busca anal-izar si se pueden reivindicar estas representaciones comerciales de gestos con-traculturales en el streetwear o si su base ideológica contracultural se ha diluido completamente en la cultura comercial.

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Rat Trap

Plataforma de producción de arte no institucional y música no corporativa. Este colectivo es uno de los gestos contraculturales más reconocibles en la actualidad Bogotana porque su “objetivo principal es defender la autonomía creativa y promover la sostenibilidad económica de proyectos artísticos, sociales y culturales, ofreciendo herramientas y espacios para el desarrollo de producciones auto gestionadas y costo efectivas que permitan hacer viables en el tiempo prácticas que históricamente han dependido de incentivos estatales y fondos privados.”

Cabrera, J. D. (2019, 16 octubre). Cruces [Serigrafía]. casaratrap.com. https://casarattrap.com/grafica/

Estado del arteReferente proyectual


Lundi, K. (2018, 3 julio). [Fotografía de la banda de punk del colectivo Rat Trap]. https://www.klauslundi.com/. https://instagram.fbog4-1.fna.fbcdn.net/v/t51.2885-15/e35/35616565_1104110973060591_3555306805879898112_n.jpg?_nc_ht=instagram.fbog4-1.fna.fbcdn.net&_nc_cat=103&_nc_ohc=KMMYceCz1LwAX9YL0Nq&tp=18&oh=4c69a7ad84b6ee2ddbc4cb394fa29072&oe=5FE14884

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Taller 108

Taller 108 es un espacio creativo experimental especializado en la serigrafia. Es un proyecto que aborda la ilustración de manera colaborativa y a través de diferentes medios, tales como el muralismo o el grabado. Desde lo estético hasta el objetivo comunicativo irreverente que manejan es un referente importante para este proyecto, en la medida en que buscan transmitir mensajes que reflexionan sobre la sociedad por medio del diseño.

Pérez Mantilla, R. (2020, 17 octubre). PRINT OR DIE Arnette Fest [Fotografía]. https://www.facebook.com/TALLER.108.TALLER/photos/pcb.746381375916139/746381289249481/

Estado del arteReferente estético


108 Taller. (2020, 20 agosto). Patina y choca con la ley [Ilustración]. https://www.instagram.com/p/CEIQdlzlx3c/

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Supreme

Taller 108 es un espacio creativo experimental especializado en la serigrafia. Es un proyecto que aborda la ilustración de manera colaborativa y a través de diferentes medios, tales como el muralismo o el grabado. Desde lo estético hasta el objetivo comunicativo irreverente que manejan es un referente importante para este proyecto, en la medida en que buscan transmitir mensajes que reflexionan sobre la sociedad por medio del diseño.

Hypebeast. (2020, 9 noviembre). VF Corporation Is Set to Acquire Supreme in $2.1 Billion USD Deal [Fotografía]. Hypebeast. https://hypebeast.com/2020/11/vf-corp-supreme-acquisition

“Qué ridículo y jodido grupo de payasos totalmente uncool. Yo hago mi trabajo sobre

este tipo de triste y estúpida farsa. Estoy esperando a que todos ellos me demanden por

infracción de derechos de autor.”

- Barbara Kruger

Estado del arteReferente conceptual


Kruger, B. (1987). Compro luego existo [Obra de arte]. https://capitel.humanitas.edu.mx/barbara-kruger-una-critica-a-las-imagenes-mediaticas-de-la-mujer/

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Desarrollo del concepto

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Marco TeóricoContra Cultura desde la antropología, la sociología y la filosofíaEl porqué los individuos suelen concentrarse en grupos y el porqué de sus manifestaciones es estudiado por la sociología y la antropología. Estas ciencias han creado diferentes conceptos para entender los fenómenos de creación de identidad y búsqueda de pares. Como por ejemplo, subcultura, contracultura, tribus urbanas y culturas juveniles. Estos conceptos han llevado en parte a la estigmatización de propuestas diferentes tanto ideológica como contextualmente. Subcultura, contracultura, tribus urbanas y culturas juveniles: ¿homogenización o diferenciación? (Tania Arce Cortés Universidad Iberoamericana, México, D.F.) es un texto que sintetiza y analiza los términos mencionados anteriormente. La publicación recopila y reflexiona de manera muy acertada diferentes escuelas y piezas de literatura académica que a lo largo del tiempo se han interesado por definir y conceptualizar de manera sociológica o antropológica diferentes comportamientos y tendencias grupales en espacios geográficos definidos y con contextos variantes. Para el propósito de esta tesis es pertinente entender cómo se han construido y entendido teóricamente estos conceptos para hacer un análisis profundo de lo que significa y conlleva el término de contracultura. A continuación, se hará un breve resumen y análisis del andamiaje y significado que conllevan, así como un cuestionamiento filosófico de los mismos

Como consecuencia del movimiento hippie de los años 60’s en el cual surgió un fuerte descontento hacia la figura parental y la sociedad se crea el término “coun-terculture”. Para Bennet 2001 el término representaba el descontento y la desi-lusión que tenían los jóvenes de la época con la cultura parental y la maquinaria de la sociedad. Por otra parte, para Clark 1976 el significado va más allá de ir en contra de la figura parental ideológica y culturalmente, sino también como una forma suave de atacar las instituciones del sistema dominante, como la familia, la religión, la escuela, los medios y el estado. Por otra parte, no se puede hablar del término “counterculture” sin hablar de Theodore Rozark quien se dice fue el primero en acuñar y utilizar el término en 1969 en su libro “the Making of a Counterculture”. A grandes rasgos Rozark encuentra un terreno en común entre los estudiantes radicales y los desertores hippies de los sesenta, en su mutuo rechazo por lo que él llama “tecnocracia”, que se entiende como el régimen de experiencia corporativa y tecnológica que domina la sociedad industrial. Se parte entonces de la idea de que la “counterculture” es una disgregación de la tecnología

Flickr. (2018, 28 octubre). [La filósofa alemana de origen judío Hannah Arendt (1906-1975)]. https://thecon-versation.com/sobre-la-banalidad-del-mal-en-la-parrilla-televisiva-104504

Walker Art Center. (s. f.). Contracultura hippie 60’s. Primer grupo social definido como contracultura por Theodore Roszak. [Fotografía]. https://highs-chool.latimes.com/the-webb-schools/analysis-of-60s-counterculture-the-division-of-generations/


que evita las emociones humanas básicas y creativas, por lo cual la “counterculture” utiliza la tecnocracia para descender de ese sistema hegemónico y crear un estilo de vida.

Dentro de la literatura del castellano el término “coun-terculture” es traducido como “contracultura”. Aunque hay una corriente de autores que consideran que no existe la contracultura. Para Fadanelli 2000, la define como aquello que va en contra de las instituciones y los pensamientos dominantes y hegemónicos de la época. Plantea que la contracultura constituye un con-trapeso de la cultura dominante que va a estimular su evolución. Para Villarreal 2000, la contracultura es un cuestionamiento de autoritarios existentes, en sus pro-pias palabras dice “La contracultura puede entenderse como aquello que se opone a toda forma de convención social o de conservadurismo, a todo lo establecido que permanece inmutable o incambiable” (Villarreal, 2000: 23). Fadanelli (2000) y Villareal (2000) consideran que la gente sigue esperando que el Estado brinde algún tipo de ayuda, como becas, descuentos o apoyos, por lo cual no consideran que exista contracultura. En la actualidad el término es utilizado para hacer hincapié en aquellas visiones, pensamientos, acciones o activi-dades que se apartan de los estándares. De esta manera, diferentes grupos lo utilizan para darle importancia a nuevas perspectivas y propuestas de pensamiento.

Por otro lado, en la década del 90´ en México y España, empieza a surgir por diferentes teóricos el término culturas juveniles. Define a las culturas juveniles como un concepto que no puede ser determinado por las construcciones biológicas y funcionalistas de la juventud, sino como un proceso en continuo movimiento. Esto lo logran a través de estudios en la dimensión situacional y contextual-relacional. Donde la primera dimensión implica análisis identitarios de grupos específicos. Mientras la segunda, entiende el entrecruzamiento de los elementos políticos, sociales, culturales y económicos junto con la memoria históri nas. En primer lugar, Maffesoli, en su libro el Tiempo

de las tribus, expone los nuevos grupos juveniles que se reúnen como manifestaciones momentáneas en el nomadismo y con un sentido de pertinencia. Donde se entiende al nomadismo como una posibilidad de sublevación, de salir de sí mismo y resaltar los aspectos lúdicos como corporales. Por otro lado, el sentido de pertenencia lo entiende como “conciencia de sí, no más la identidad cerrada y encerrada en sí misma, sexual, ideológica y profesionalmente (…) yo sigo mi propia ley y sí: mi ley es otro quien me la da, quien me la indica” (Maffesoli, 2004b: 38) como citan en el texto. En cambio, la postura de los españoles consiste más en que las tribus urbanas son aquellas pandillas o bandas con hábitos comunes de consumo, vestimenta, ocio y rebeldía, caracterizadas por su individualismo y actos violentos.

Como conclusión Arce Cortez, realiza una reflexión sobre los conceptos que las escuelas académicas han construido para categorizar y entender a estas mani-festaciones grupales de individuos que surgen alternas a la sociedad. Plantea entonces dos puntos de vista: en primer regular resalta como el uso de estos conceptos en la antropología han servido para delimitar y marcar la diferencia de sus expresiones con la sociedad “domi-nante”, que se ven materializadas o visualizadas en sus territorios, su jerga, su vestimenta y sus gustos sexu-ales y musicales, entre otros. Por otra parte, plantea un cuestionamiento sobre cómo estas categorías glo-balizadas de cierto modo, estigmatizan y generalizan a estos grupos impidiendo visibilizar sus particulari-dades y propuestas individuales. Las categorías univer-salmente aplicables solo generan confusión en muchas ocasiones al forzar un concepto global de la identidad de estos grupos y los individuos que los conforman. Es así como la creación de conceptos y de grandes catego-rías iría en contra de los diversos diálogos y expresiones que se generan en los mismos movimientos y fenómenos.

Arce Cortez plantea entonces una pregunta muy per-tinente ¿Por qué se generan estas conceptualizaciones? Su respuesta radica en cuestionar el concepto an-

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tropológico mismo de “cultura” ya que en la actualidad existe una inseguridad y no hay un consenso sobre qué es cultura. Por esta razón hay escuelas que ven a estos grupos como una variación dependiente de la cultura, otras como opuestos a la cultura y otras como parte de la cultura. Toma gran importancia entonces el cues-tionamiento de ¿Qué es cultura y para quién? o ¿Qué y a quienes consideramos parte de nuestra cultura? Cabe aclarar, que el artículo de Arce Cortez hace referencia a la concepción de cultura brindada por Gilberto Gimé-nez: ‘‘Proceso de continua producción, actualización y transformación de modelos simbólicos (en su doble acepción de representación y de orientación para la acción) a través de la práctica individual y colectiva, en contextos históricamente específicos y socialmente estructurados’’ (Giménez, 2005: 10)

La autora termina el texto con una invitación a no crear más categorías, definiciones, términos o conceptos de estos grupos, sino a entenderlos de manera individual, para lograr una visión más completa de las distinciones y particularidades de cada uno de estos y así obtener una comprensión más específica. Esto significa en parte no agrupar a la gente, sino darle un nombre a cada uno de los sujetos, para asegurarse de entender las expresiones y verdades de estos grupos, y no borrarlas con una mirada globalizadora. Esta conclusión me parece pertinente comprarla con el texto de Diana Patiño, “Implicaciones de las propuestas de Rancière y Arendt para leer las contraculturas” en el cual a través de las posturas filosóficas de Hannah Arendt y Jacques Ranciere sobre la política se hace una invitación a entender la contracultura no a través de las funciones y categorías que ya tiene asignadas.

A grandes rasgos se toman en cuenta los puntos en común que tienen Arendt y Ranciere para entender la política. Por un lado, Ranciere entiende la política como una reconfiguración efímera del trazado impuesto por la policía. Para esto se introduce el concepto de policía en el artículo como: “un cierto reparto de lo sensible; es una forma de contar que distribuye acciones y

asigna jerárquicamente lugares y funciones, modos de ser, modos de hacer y de decir, modos de existir, correspondientes a cada lugar asignado... es un trazado que establece unas fronteras para delimitar lo común y, de esta forma, instaurar relaciones de igualdad y desigualdad.” Contrario a esta definición de policía, la política reconoce y enfrenta ese trazado de la policía que distribuye y asigna relaciones de desigualdad. Es específicamente antagónica a la policía y al romper esa configuración la desordena para hacer visible algo que antes no estaba siendo tenido en cuenta. Pero con hacer visible lo que no se había tenido en cuenta no hace referencia a intereses definidos por el trazado policía, en este orden de ideas se piensa el sujeto político no como alguien que defiende intereses propios ligados a una identidad social definida por la policía, sino que en su confrontación sale a la luz y se pone en manifiesto.

Por otro lado, desde las posturas filosóficas de Arendt, se entiende la política como una acción que se da en la pluralidad. Esta acción política crea un “en medio de” intangible que surge cuando los hombres se reúnen en torno al discurso y la acción en el espacio público, al que se llamará una “trama de relaciones”. Esta acción no solo crea esa “trama de relaciones” si no que da paso a la igualdad, porque esta acción se da en un espacio de libertad entre iguales. Se cita con referencia a esta trama de relaciones en el espacio público, “se trata del espacio de aparición en el más amplio sentido de la palabra, es decir, donde yo aparezco ante otros como otros aparecen ante mí, donde los hombres no existen meramente como otras cosas vivas o inanimadas, sino que hacen su aparición de manera explícita” (221).

Con base en estos dos lineamientos filosóficos se pre-tende determinar el gesto contracultural, en primer lugar, desde su carácter de confrontación que según los pensamientos de Ranciere se entiende como aquel que reconoce y desordena la configuración de la policía para hacer visible lo que antes no se tenía en cuenta. Para la autora, “el gesto contracultural será aquel que, al igual que la acción política en Rancière, reconoce


que esa configuración dada por la cultura respecto de visibilidades, lugares, espacios, etc., no es definitiva (46)”. En segundo lugar, desde su carácter efímero, por lo que se entiende que los protagonistas del gesto contracultural no actuarán en busca de modificar la configuración trazada y establecida por la policía, “el carácter conflictivo y de ruptura del gesto no trae en sí la necesidad de generar una nueva tendencia que se repita y que marque un nuevo estilo de vida, de actuar, de aparecer, de ser. No tiene como intención ser una nueva moda.” Aunque el gesto contracultural o de ac-ción política en términos Rancieranos si puede llegar a reconfigurar el trazado establecido y generar nuevas tendencias y configuraciones, esa no es su finalidad, por lo que está fuera del gesto en sí. Por último, en ter-cer lugar, el gesto contracultural se observa como una pequeña luminosidad que al reconfigurar los traza-dos establecidos da lugar a al acto político que crea la trama de relaciones propuesta por Arendt. El gesto da lugar a una acción política en libertad e igualdad de los hombres exponiendo un nuevo escenario donde los hombres actúan en igualdad y libertad que al hacer en concierto altera el medio en el que surge.

Patiño Niño, realiza este análisis con el propósito de reivindicar el gesto contracultural como aquel origi-nado por cualquiera y en cualquier lugar de forma in-esperada e impredecible. Liberándose de categorías y devolviéndole a la gente del común como un elemento fenoménico de cambio del statu quo. “La contracultura no será aquella que espera ser identificada y enmarcada en categorías, sino que estará en todas partes. (47)” Lo plantea para problematizar los conceptos categóricos y para repensar la forma en que se lee la contracultura, casi que su artículo se puede entender como un gesto contracultural en sí.

Después de haber hecho un barrido de los conceptos antropológicos y una reflexión filosófica de los mismos a partir de los textos “Subcultura, contracultura, tri-bus urbanas y culturas juveniles: ¿homogenización o diferenciación?” de Tania Arce y “Implicaciones de las

propuestas de Rancière y Arendt para leer las contra-culturas” de Diana Patiño, puedo proceder a formular que se va a entender por contracultura en esta tesis. No se pretende mirar la contracultura con ojos que tracen y la configuran de manera establecida e inmutable, que de manera globalizada como diría Arce, invisibiliza sus particularidades. Sino que continuaré un poco con la línea de pensamiento que plantea Patiño, en la cual se entiende como gestos que surgen por cualquiera y en cualquier lugar de forma inesperada e impredecible, que buscan desordenar y reconfigurar los trazados y las formas, pero no necesariamente de manera lineal en lo que enmarcaría una cultura hegemónica y su antítesis. No es un movimiento que pretenda cambiar e inscri-birse en la sociedad, si no un gesto de tomar acción y manifestar un discurso que ante lo establecido no es escuchado. Bajo esta definición el “streetwear” no puede ser con-siderado como contracultura, tal vez según algunas de las escuelas teóricas revisadas anteriormente se puede enmarcar dentro de expresiones estéticas y de estilo de culturas juveniles, tribus urbanas o subculturas. Pero de igual manera, al ser un movimiento que ya está circunscrito en la cultura dominante en los trazados ya impuestos no se le puede considerar como contra cultura, pero sí se pueden observar en él, en diferentes momentos, gestos contraculturales. Para el propósito de la tesis entonces se va a dejar atrás aquellas catego-rizaciones y conceptos que parten desde la episteme de las escuelas y los autores que las acuñaron, y se va a dar una mirada más a profunda a los gestos contra-culturales que han surgido a lo largo de la historia que han definido este movimiento al que se le denomina “streetwear”, principalmente aquellas relacionadas con el punk, para revisar si se puede reivindicar algunas expre-siones del mismo como gestos contraculturales, que ob-tienen gran valor al ser acciones que movilizan la sociedad.

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Movimiento punk en Colombia y

OccidenteContracultura, ahora se pretende realizar un recuento histórico y conceptual del movimiento Punk, los fenómenos sociales, culturales y económicos que propi-ciaron el ambiente social para que surgieran estos gestos contraculturales y le-gado de estos. Es importante porque da cuenta de uno de los movimientos que cambiaron las narrativas y los discursos de los gestos contraculturales de man-era radical a partir de la década del 70, dejando un legado que permea muchos otros gestos y expresiones contraculturales posteriores ya sea culturalmente, so-ciológicamente, filosóficamente, estéticamente, materialmente, etc. Que termina-rían manifestándose también y defiendo en gran medida el streetwear. Para este análisis histórico es de vital importancia citar y revisar el texto, “Una lectura de lo real a través del punk” de Andrea Restrepo.

Para hablar del punk en Colombia, primero realizaré un corto recuento histórico del nacimiento de esta contracultura en los setenta en occidente. Es importante esto ya que, como siempre nuestra cultura se ve permeada por aquellas del primer mundo, inclusive en términos de gestos contraculturales. El punk nació en los suburbios Londinenses a comienzos de la década del 70´ en medio de una crisis económica y una clase obrera cansada y sobreexplotada. La economía británica iba en pique, la libra esterlina se desplomaba, el contrato social entre los traba-jadores y el estado se estaba deteriorando. Sumado a esto, las instituciones tradi-cionales de cohesión social, como la familia, la religión y la escuela entraban en conflicto con esta juventud obrera, que retomando algunos puntos del análisis de Rozark, son hijos de una tecnocracia que no les brinda sentido y que ante las crecientes problemáticas solo dejan un panorama de incertidumbre y nihilismo. La creciente pérdida de confianza y creencia en el sistema son la conjunción de factores que dejan tan insatisfecha a una generación de juventud obrera que sólo en el acto de la rebelión y la anarquía encontrarán caracteres, símbolos, modos de ser y de actuar que le den sentido a la sociedad que los rodea.

Esta es la corriente histórica más aceptada y generalizada sobre el punk, aunque cabe mencionar algunos otros de los sucesos precursores del punk rock y el mac-ro contexto en el que surgió. Principalmente los precursores del punk fueron el rock estadounidense, bueno y no solo el rock sino muchos otros géneros alterna-tivos de la época, entre estos se resaltan el glam, garage o street rock. De hecho, en el artículo “El punk como resistencia: el arte, el estilo de vida y la acción política del movimiento como camino para crear un nuevo mundo” de Valentina Ivaylova Dimitrova, explica la autora como estas bandas de rock a finales de la década

Figura1. [Los Saicos Portada.]. (s. f.). VillaMaldita. http://villamaldita.com/los-saicos-y-el-nacimiento-del-punk/

Reid, J. (1977). God Save The Queen [Litografía]. MoMa. https://www.moma.org/collection/works/156133


del 60´y en los principios de los 70 difumina esa línea categórica y de definición en Nueva York donde estas bandas de rock empiezan a ser las primeras bandas de punk, razón por la cual en 1971 aparece por primera vez en la revista “Cream” el término por Dave March en un artículo donde describe “la histórica explosión del punk rock”.

Sin embargo, verdaderamente las primeras expresiones y manifestaciones musicales de lo que se conoce como el punk hoy en día, surgen en Perú alrededor de 1964. Los pioneros del punk, adelantados a su tiempo, que mientras los Beatles cantaban canciones de amor el-los con sonidos amateurs y estridentes tocaban sobre destrucción, peleas y muerte, fueron Los Saicos(fig.1). En realidad, no se les clasifica como punk sino como Proto-punk que pretende agrupar a ese grupo de ban-das que antes de los setenta no fueron clasificables y cuyos símbolos, letras y manifestaciones fueron los precursores del movimiento contracultural llamado punk. Esta banda surge en distrito limeño de Lince, constituida por cuatro jóvenes amateurs que siguiendo la estructura dicotómica del rock y el cine americano de los 50-60´s que muestra una juventud rebelde y una adultez sumergida en la cotidianidad, constituye lo que se conoce como la nueva ola del rock en Perú en esa época. Para su sorpresa pega con gran éxito comercial hasta llegar al punto de tener su propio canal televisivo. Sin embargo, esta banda fue una expresión estética fugaz puesto que la agrupación solo duro del 64 al 66. Una banda de garaje juvenil de clase media alta peruana conforma entonces los primeros sonidos del punk, siguiendo estructuras del rock americano y ejemplos de boy band como los Beatles. Interesante que es un fenómeno muy ignorado y poco estudiado hasta el 98. Esto puede entenderse en parte porque las narrativas históricas siguen órdenes establecidas desde el colonialismo, donde ese sistema heredado ignora en gran medida los otros puntos de vista y expresiones históricas que no vienen desde una posición de poder.

Más adelante el punk llega a Colombia, a causa de la

influencia que representaba la cultura americana y eu-ropea en la clase alta. Al igual que el rock, es traído del exterior por esa clase alta que busca estar al tanto de la cultura vanguardista de los países del primer mundo. Entonces es importado por jóvenes y adultos burgueses de clase media alta que tenían los medios para viajar al exterior y volver con vinilos o casetes que posteriormente se difundirán en la escena urbana de Bogotá y Medellín, aunque solo en la ciudad de las flores tendrá una acogida que fomenta un gesto con-tracultural. Es cuestionable esta forma en que llegó el punk a Colombia, porque justamente el punk no es una moda ni debería ser considerado vanguardia para una minoría de clase alta elitista que busca estar al filo de la tendencia, pero el movimiento que genera es verdad-eramente una manifestación de una juventud de clase media baja obrera que está inmersa en un tejido social que los aliena y los violenta.

La industria del rock ya estaba consolidada y sedimen-tada en Medellín, el género agotado ya no suscita nada para estas nuevas generaciones que vivían el azote del narcotráfico, lo que significó el panorama perfecto para que nuevas propuestas musicales le dieran un escape y una forma de expresarse a esta generación. “La música, como un arte que recoge la memoria colectiva, como un espejo social a nivel sonoro, necesita de nuevas ex-presiones para estar en armonía con los procesos del contexto.” (Restrepo, 2005) es una reflexión pertinente que hace la autora frente al porque el punk surge como movimiento en Medellín dado el contexto social.

El punk es un gesto contracultural que surge en reac-ción directa al contexto para darle voz a lo que no está siendo escuchado por la configuración establecida. Un ejemplo que sustenta esto es Los Saicos, mencio-nados anteriormente, que se pueden considerar como la primera banda punk desde lo musical pero que no tiene una acogida social e ideológica, en parte por el momento histórico y el contexto social en que se ges-ta. Se puede decir entonces que sin una sociedad he-gemónica que trace y configure de manera definitiva

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las formas de ser y hacer, los espacios, los caracteres, etc. no puede haber punk, el punk es en sí una dis-topía utópica, una expresión que manifiesta algo que no se tiene en cuenta pero que no se circunscribe en el trazado existente, tal vez por eso el punk se manifiesta a lo largo y ancho del mundo en diferentes momentos y contextos históricos.

Retrepo hace referencia a cuatro ejes históricos que conforman el panorama socioeconómico y cultural de los 80 en Medellín: la consolidación del narcotráfico, los intentos fallidos de procesos de paz, el surgimiento del paramilitarismo y la terminación de los gobiernos de corte social por presiones del banco mundial para asentar las políticas del neoliberalismo, lo que causa una cruda política anti izquierdista que comienza con el gobierno de julio Cesar Turbay (Restrepo, 2005). Se resalta la consolidación del narcotráfico del cartel de Medellín y el interés de Pablo Escobar por

la política, la campaña de “Medellín sin Tugurios” que lo que buscaban era reivindicar su imagen como un filántropo para luego al vincularse públicamente a la campaña de Luis Carlos Galán en 1982, que luego del rechazo del ministro de justicia Lara Bonilla lo asesinaría a través del sicariato, ante lo que Belisario Betancur más adelante en el 84 por presión E.E.U.U y la guerra contra las drogas, declarará la política de extradición ante lo cual el cartel de Medellín declaró la guerra contra el estado y sus instituciones a través de la consolidación del sicariato. De igual manera la limpieza social se ve fomentada y surgen diferentes grupos y escuadrones de la muerte. Este entramado de violencias es la coyuntura social en la que se encuentra inmersa la generación mencionada anteriormente en el análisis de la obra Rodrigo D. No futuro. Carlos David Bravo, alias “Caliche”, en la entrevista que le hace “Mentes en disturbio” sobre su libro “Mala Hierba: El surgimiento del Punk en el barrio Castilla”, dice “aquí sí fue más real que en Inglaterra y en cualquiera parte, el no futuro y esa idea porque aquí nos tocó, pues una crisis social sin precedentes... eso nos llevó a que cada día teníamos que afrontar la vida de una manera inmediatista, el futuro no se veía pues por ningún lado... estábamos hoy mañana no.” Vale resaltar esta comparación de la forma en que contextualmente se vivía el no futuro en el contexto de Inglaterra y en el de Medellín, por un lado, los ingleses eran, como dice Rozark, hijos de una tecnocracia de una sociedad que a pesar de que los inscribía en casillas del deber ser y que estaba en crisis económica, se los había dado todo. En Colombia, por el contrario, estos son hijos de un campesinado migrante a una sociedad que se desbordada en los conflictos sociales, en la cual literalmente no hay un futuro aparente más allá que la muerte por las distintas violencias, los jóvenes o hacen parte del sicariato o terminan siendo carne de gatillo. El punk de Medellín nace de la precariedad, de la misma precariedad en la que se encuentran las vidas de estos jóvenes y es en parte eso lo que le da un valor único no solo musicalmente sino ideológicamente. El no futuro se expresa literalmente en esta historia, de Víctor Raúl

Gaviria, V. (1991, 11 enero). [Captura Rodrigo D. No Futuro]. habanafil-mfestival. http://habanafilmfestival.com/filme/rodrigo-d-no-futuro/rodrigo-d-no-futuro-2/


Jaramillo, alias “Piolín”, fundador de Reencarnación. “Y me decían: ‘nosotros sabemos quién sos vos, que es lo que haces y te vamos es a quebrar. Y conocemos a Cipriano y a La Bruja y que no sé qué…’. Me sen-taron en una mesa y me dicen ‘te sentás en esta mesa y te tomás un trago con nosotros’. Y pues qué les iba a decir… No recuerdo, pero algo pasó y uno de ellos se fue a arreglar otro cruce de alguna cosa, y el man que estaba con él salió detrás. Entonces, un viejito sentado ahí me gritó enseguida ‘¡corra, corra!’. Yo salí en pura, me les volé y los manes alcanzaron a dispararme como dos o tres veces, pero no me dieron. Esa fue todo” (Na-gles Soto, 2019)

Así era, el punk y el metal se consolidan como un gesto contracultural que aleja a los jóvenes de los intereses del narcotráfico por lo cual se vuelve un obstáculo para la narcoviolencia que los reclutaba, generado en mu-chas ocasiones el asesinato de los que se identificaban con estos movimientos. Esa misma violencia que recae sobre la juventud es en parte la razón por la que se ex-presan con la misma violencia, lo que sería uno de los

factores que le daría fuerza y unicidad a las expresiones estéticas y musicales. De igual manera, cabe resaltar también que en parte la falta de conocimiento y de téc-nica, la marginalidad y la precariedad de los medios de las periferias o comunas de las laderas de Medellín, la falta de instrumentos y herramientas es otro de los factores que le dan originalidad al punk y metal en Colombia. También a causa del desconocimiento jus-tamente de esa juventud sin futuro, educación, oportu-nidades que solo tenía como referencias rock y géneros extranjeros traídos por una clase alta fascinada por la vanguardia del primer mundo sumados a la coyuntura social se codifican sus propios códigos que varían entre las categorías del metal y el punk que se desarrollan de la mano en esa época. Bandas como Parabellum, Reen-carnación, Ekyhmosis, Masacre surgen conjuntamente a bandas como Mierda, Pestes o Restos de Tragedia.

Herrera, L. M. (2020, 26 marzo). Escena punk colombiana [Fotografía]. https://medium.com/rockaloficial/sinescena-ni-arriba-ni-debajo-del-punk-a-trav%C3%A9s-257cae681e0f

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Manifiesto PunkDespués de realizar un proceso de investigación donde se entendió las definiciones antropológicas y filosófi-cas de la contracultura, y se dio una mirada a través de esta a la historia del punk en el mundo y en Colombia, traigo a colación el “Manifiesto Punk” de Greg Graf-fin, cofundador y vocalista de la banda Bad Religion. Esto para concluir este análisis del punk y su propósito argumentativo para la tesis. En este manifiesto Graffin da una definición formal de lo que es el punk, cierta-mente desde su episteme, en la que plantea cuestiones y defiende “el fenómeno social que pervive llamado Punk”.

Se ha planteado como desde sus inicios el punk ha sido un fenómeno que no se circunscribe fácilmente en el orden establecido, desde la tecnocracia lo han tratado de calificar y definir en las ciencias humanas, de comercializar y volverlo un elemento de consumo masivo para el capitalismo, de estigmatizar y alienar como forma de pensamiento y expresión, pero justa-mente la esencia del punk que radica en el gesto con-tracultural de manifestarse por fuera de lo configurado impide y se contradice con todos estos obstáculos que surgen alrededor del mismo sentimiento punk. Graf-fin resume muy bien algunos de estos sucesos y obs-táculos de manera acertada: empieza por el estigma de la violencia, en la publicidad amarillista y barata, y la desinformación que promueven los medios constante-mente se hace referencia al punk con lo “bestia” con jóvenes sin dirección que, de manera estridente, como su música, actúan violentamente ante una sociedad que los aliena. Sin embargo, Graffin reivindica el punk, como algo más allá de la violencia: “es la expresión per-sonal de originalidad que proviene de las experiencias de crecer en contacto con nuestra habilidad de razonar y hacer preguntas.” Por lo que el autor concluye que la violencia no tiene cabida en el punk y no es un el-emento que lo defina. Pero, anteriormente en este texto se menciona que, en el acto de la infracción, en el decir

no, en la violencia nihilista y autodestructiva, también hay un gesto contracultural, hay una razón para que los individuos actúen de esta manera y hay que observar el acto violento del punk más allá de sí mismo. Por otro lado, se hace referencia al aspecto de la origi-nalidad biológica y natural del individuo en el mani-fiesto de Graffin. Con una lectura biológica, el autor hace referencia a un código genético humano único para cada persona lo que codifica su perspectiva única y original ante el mundo. Ante esta originalidad la so-ciedad configura una serie de normas y estructuras que determinan el deber ser de los individuos lo que atenta directamente con esta naturaleza original del humano. Por lo que Graffin establece otro de sus postulados del punk: “un movimiento que sirve para refutar actitudes sociales que han sido perpetradas voluntariamente con la ignorancia de la naturaleza humana.” Análisis, que en fondo es muy similar a la teoría filosófica de Arendt sobre el acto político, donde se aleja de la moral imperante de la comunidad e invita a la reflexión y el diálogo interior para pensar por sí mismo y no dejarse llevar por el rebaño. Reflexión a la que invita el punk y Arendt, por lo tanto, el gesto contracultural, que es tan pertinente como dice Graffin para preservar a la raza humana, si no construcciones totalitaristas como

[Caricatura sobre el punk.]. (2012, 4 septiembre). Gargantas Libertarias. https://gargantas-libertarias.blogspot.com/2012/09/manifiesto-punk-por-greg-graffin-bad.html


los Nazis podrían triunfar destruyendo la humanidad, ejemplo que se da desde la filosofía de Arendt. El último factor al que Graffin hace referencia en su manifiesto es el miedo del sistema límbico, el miedo que rige el actuar a partir de lo construido y aprendido por las configuraciones socioculturales. Este miedo que impide razonar en ocasiones y genera la negación de estímulos evidentes produciendo una actitud con-formista y segura. Por lo cual el autor dice que el punk es: “la constante lucha ante el miedo de las repercu-siones sociales.” Porque los punks, el gesto contracul-tural, no tiene miedo de señalar ante lo establecido algo que no es escuchado sin importar las repercusiones que esto pueda significar en el sistema establecido y su configuración. Para terminar Graffin hace entonces el cuestionamiento de cómo esta ideología del punk, que la definen los factores mencionados anteriormente, es un microcosmo del espíritu humano. Los punks tri-unfan con su mente, no con la fuerza bruta. Ayudan a la sociedad a avanzar con su diversidad, no con su conformismo. Motivan a otros con inclusión, no con dominación.”

Esta ideología del punk, representa muchos de los

factores que se reflejan en el gesto contracultural del punk, aunque también es cuestionable en el sentido en que encierra, define y determina el gesto. El punk si es todo lo mencionado por Graffin anteriormente, pero no es solo eso y no debe serlo. Desde lo que se definió anteriormente como gesto contracultural se puede leer la ideología del punk. El punk no se puede definir, no se puede categorizar, no hay un deber ser en el punk, no hay forma desde la filosofía de Rancerie de inscri-birlo en los trazados establecidos desde la policía. Más bien, siguiendo la filosofía de Arendt, en esta tesis se entiende el punk como la invitación a la reflexión, a el cuestionamiento y de ser necesario a la infracción de lo establecido. Por otra parte, se pretende conciliar las contradicciones que se dan dentro de los mismos gestos contraculturales, en el caso específico del punk y de muchos otros, sobre la integración de estos y su ide-ología en la cultura dominante, que los vuelve un bien de consumo y en algunos casos de vanguardia margin-al. Para esto traigo a colación esta cita de los filósofos de la escuela de Frankfurt, Horkheimer y Adorno, que en su libro Dialéctica de la Ilustración manifiestan:

“Lo que se resiste puede sobrevivir solo en la medida en que se integra. Una vez registrado en sus diferencias por la industria cultural, forma ya parte de esta como el reformador agrario del capitalismo. La rebelión que tiene en cuenta la realidad se convierte en la etiqueta de quien tiene una nueva idea. La esfera pública de la sociedad actual no permite llegar a alguna acusación perceptible en cuyo tono los sujetos de oído fino no adviertan ya la grandeza bajo cuyo signo el rebelde se reconcilia con ellos” (Horkheimer y Adorno, 2006, p. 176).

[Fotografía de Greg Graffin.]. (2020, 17 agosto).https://news.yahoo.com/bad-religions-greg-graffin-cramming-150037544.html

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Pertinencia

Este tema merece ser investigado para cuestionar la importancia cultural del streetwear en la actualidad, porque este movimiento nace desde la ideología con-tracultural que con el tiempo se instauró en la cultura comercial capitalista que fagocita su elemento discursivo originario. Para de esta manera revisar si como producto comercial tiene una relevancia ideológica y de discurso que puede fo-

mentar el diálogo y la reflexión de los trazados establecidos.

Lanchion, R. (s. f.). Street style [Fotografía]. Aidan Palermo. https://www.aidanpalermo.com/streetstyle/dj0ylfqs-jv5tquiaet3nlaeuowv91f


Objetivos

GeneralFomentar el diálogo e invitar a la reflexión a los jóvenes capitalinos de los traza-dos establecidos por la sociedad hegemónica Bogotana que distribuye y asigna jerárquicamente funciones y lugares, modos de hacer y de decir, fronteras de lo que es y no puede ser. Por medio de la ilustración, la gráfica y el grabado desor-denar esa configuración establecida para darle luz a discursos que no se tienen en cuenta. Tales como cuestiones de género, el poder político, la desigualdad, la conformidad y el seguir ciegamente normas sin cuestionar el porqué hacemos o dejamos de hacer en sociedad.

Específicos- Encontrar el valor del diseño confrontacional en la cultura comercial capitalista de Bogotá.

- Reivindicar el streetwear como gesto contracultural en Bogotá que funciona como símbolo discursivo.

- Utilizar el diseño gráfico y la ilustración como herramienta de cuestionamiento de los valores y lineamientos establecidos por el statu quo Bogotano. - Resaltar la importancia y el valor de la confrontación, la infracción, la rebelión y la reflexión. - Crear espacios y escenarios que propicien el diálogo sobre la contracultura y la rebelión en Bogotá.

- Criticar el formato en que se consume la información que no fomenta la reflexión sino por el contrario sigue agendas políticas y económicas.

- Encontrar medios y formatos en que se pueda invitar a la reflexión a los jóvenes de manera ligera y atractiva.

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De los Ríos, E. (2020, 5 octubre). Skate life manin. [Fotografía]. https://www.instagram.com/p/CF_AYDUlZj7/


Audiencia

Jóvenes entre los 18 y los 25 años de edad que tienen una afinidad por el diseño y que encuentran valor en los medios de grabado y el desarrollo artesanal nacional de productos de consumo tales como camisetas, libros y pósters. De igual manera es un grupo objetivo que no se ve representado en las normas y el deber ser esta-blecido culturalmente en Bogotá, por lo que tienden a acudir al arte, la música, el diseño, las publicaciones independientes, entre otros, para encontrar escenarios en que se desarrollen e identifiquen con espacios de libre pensamiento.

cosasquenotienenestetica. (2018, 21 octubre). [Fotografía de la protesta social de jóvenes Bogotanos]. https://www.instagram.com/p/BpOCiQdFOIq/

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Rebeldía comercialRebeldía como aquello que cuestiona, que desordena y re-configura trazados establecidos y fronteras en la sociedad. Comercial como aquello que apela a grandes audiencias, se vende fácil y bien, se lucra del sistema económico capital-ista y se inscribe en lo establecido como norma que rige el consumo e intercam-bio de bienes humanos. Es difícil encontrar términos tan opuestos y antagónicos, pero que funcionan de manera dicotómica. Por qué lo rebelde solo sobrevive en la medida en que se integra. A lo largo de esta investigación se han mencionado esas transformaciones y cambios que se dan dentro de lo que se denomina en el proyecto como gesto contracultural, que con el tiempo tiende a popularizarse e establecerse en la sociedad. Pero, como se dijo anteriormente, el gesto contracul-tural puede reconfigurar esos trazados hegemónicos aunque vaya más allá del gesto y su intención en sí. Con esto se hace referencia a que el hecho de que se comercialicen los símbolos, códigos y caracteres que se codifican dentro de la contracultura, eso no le resta valor discursivo necesariamente. Porqué al fin y al cabo es un tema de epistemes y realidades subjetivas, lo que para alguien puede ser mainstream y comercial para otra persona en su realidad puede ser un sím-bolo de no estar de acuerdo con una serie normas y generar una expectativa de cambio. Dado esto el diseño aunque sea comercial y critique el mismo sistema en que está inscrito puede tener un valor discursivo igual de importante a si no

estuviera inscrito en los trazados establecidos hegemónicos.

Concepto


Heath, J., & Potter, A. (s. f.). Rebelarse vende [Portada]. https://www.librosdemario.com/rebelarse-vende-el-negocio-de-la-contracultura-1-leer-online-gratis

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Implementación

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Proceso de toma de decisionesDefinir el contenido del fanzine consistió en primer lugar en realizar un paneo y una revisión de lo valores, normas, constructos sociales y fronteras establecidas como hegemónicas en la sociedad bogotana que per-cibían, afectaba o no estaban de acuerdo un grupo de jóvenes que se acomoda al perfil planteado. Cabe resaltar que en parte el tono del contenido se planteó desde mi estudio del punk y los punk zines de Medallo, así como la postura política era sólida desde la idea del gesto contracultural. Entre los cuestionamientos más resaltados salieron: la religión y la institución de la iglesia, ya que afectaba a muchos desde el hogar y el colegio; lo anterior también lo relacionaron con el sistema educativo, cuestionaron la educación no laica y plantearon conflictos con la docencia; igualmente, la protesta social fue un factor clave para todos que rela-cionaron con los abusos de la autoridad policial y la violencia institucional; Por otra parte, todos resaltaron los constructos de feminidad y machismo en la socie-dad bogotana y lo mucho que los afectan. Por último, cabe resaltar la política como un eje central que toca varios de los temas mencionados anteriormente, esa fue motivo de conflicto por las diferentes afiliaciones políticas y la forma en que los medios mantienen esas agendas. Tomando en cuenta estos cuestionamien-tos resaltados por el grupo objetivo me dio unos ejes centrales frente a los cuales abordar el contenido del fanzine.

Por otra parte, teniendo estos ejes en cuenta, el fanzine partía completamente desde mi subjetividad y mi episteme por lo cual mantuve los temas que me proporcionaron las entrevistas realizadas pero escribiendo todo el contenido desde mi opinión. Por otra parte, las decisiones en cuanto a formato y diagramación también eran importantes para darle coherencia a todo el proyecto. Dado esto definí un

formato que mantuviera la idea de propagación y medio de información pero realizando una crítica a los medios de comunicación en colombia. Ambas una revista de noticias como semana y un fanzine punk pueden tener el mismo propósito de informar sobre novedades en su ámbito pero manteniendo agendas muy diferentes. Dado esto mi fanzine tomó como referente la revista Semana para cuestionar el cómo se transmite la información hoy en día y bajo qué agendas funcionan los medios de comunicación, también al comunicar una serie de mensajes gráficos y escritos que no son tenidos en cuenta en esta sociedad estaba dándole su carácter de gesto contracultural.

Para la realización de la zine primero realicé un mapa guión con todos los contenidos que me imaginaba para la publicación. Lo dividí por páginas y segmentos para facilitar y aclarar el proceso a seguir. De igual manera fue importante el escribir los diferentes textos que irían con base en ese mapa para posteriormente diagramar-los. A continuación se pueden observar los primeros bocetos de contenido.


Critica a el icono simbólico de la contracultura que son las Dr. Martens que en la actualidad son un negocio multinacional que solo fagocita la idea de la rebeldía. Aunque esto no significa que para una persona en su realidad usarlas sea un acto discursivo de no estar de acuerdo con un sistema de valores y generar expectativa de cambio.

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El Proyecto


Serigrafía como medio artísticoLa serigrafía es un procedimiento con caracteres propios, los verdaderos serigra-fos, la entienden como un medio de grabado original. Por otra parte, se ha enten-dido como medio multiplicador de la pintura, que permite traducir el lenguaje pictórico a una edición múltiple. Es un medio de impresión rápido, liviano y que permite variantes considerables en el estilo pictórico. Lo que la ha posicionado en el espíritu de muchas técnicas pictóricas modernas. El hecho de que la tinta atraviesa la malla, por el contrario de otros medios como la Litografía donde la tinta imprime por reporte del clisé, esta atraviesa el clisé lo que le da ilimitadas aplicaciones sobre cualquier soporte. Por último, la serigrafía permite una in-tensidad sin igual de colores, por la sobreimpresión de colores y la utilización de tintas fluorescentes. Estas son algunas de las razones por la cual la serigrafía es un medio de impresión perfecto para ser adoptado por la filosofía mencionada anteriormente del “hazlo tú mismo”, hoy en día en una protesta social en Bogotá o en un evento de música nunca falta este medio para la impresión sobre diferentes sustratos que trae la gente. Esto tiene sus raíces directas en esa filosofía del punk. Es el uso de un me-dio para la expresión y representación de un acto político o estético de un gesto contracultural. Artistas como Sheppard Fairey comenzaron haciendo serigrafías de stickers y camisetas con estética punk y posteriormente se conformaron como OBEY, una de las marcas más significativas del streetwear. Un ejemplo ejemplar de esto es “Rat Trap” en Bogotá, que es una plataforma de producción de arte no institucional y música no corporativa. Este colectivo es uno de los gestos contra-culturales más reconocibles en la actualidad Bogotana, donde la serigrafía es el medio más representativo para compartir y crear contenido. Para este proyecto se entiende este medio de impresión como parte del acto político de crear bienes de consumo de manera auto-gestionada, que ante lo esta-blecido por los medios de producción de la cultura capitalista no necesariamente tendría cabida. No solo por el acabado pictográfico si no por lo que representa la impresión artesanal de la serigrafía.

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Alzate, Y. (2012, 5 agosto). Nueva Fuerza 07 [Zine]. https://issuu.com/ellibertario/docs/nueva_fuerza__7__1991__zine


El FanzineEl recurso autogestionado e independiente del fan-zine o punkzine es una de las expresiones más tangi-bles de la filosofía del DIY, que se había desarrollado en la primera ola del punk. Felipe Arias Escobar, en su artículo “Medellín Subterráneo: la edad de oro del fan-zine paisa (1989 - 1991)” recopila y hace un barrido de estos zines, que codificaran un medio de difusión que determinara y prolifera la identidad del gesto contra-cultural de esta generación del no futuro en Medellín en la década del 80 y comienzos de los 90. El fenómeno va de la mano de las primeras bandas que en palabras de Arias dice, “los que no están tocando empiezan a manifestarse por medio de hojas volantes, la mayoría de ellas elaboradas por los primeros punkeros del país” (Arias Escobar, 2016). Esta expresión es una de las más importantes al margen de los medios convencionales porque representa los valores e ideologías contesta-rías de la generación más a profundidad sumados a su valor estético. Aunque en un inicio el trabajo es más panfletario, de crítica ante el género del rock o algunas bandas que se comercializaban, se va transformando en publicaciones más extensas y periódicas (Arias Escobar, 2016). En la medida en que crece el género y coge fuerza lo mismo sucede con sus expresiones ideológicas, para finales de la década cada vez se dan más espacios de difusión y nuevas propuestas que ex-perimentaban con diferentes acabados que lograban en imprentas caseras. De igual manera que en la música como se mencionó anteriormente, el contexto deter-minada en gran medida los acabados de los zines, la misma precariedad y la coyuntura social no les per-mitía ir más allá de dibujos a mano, textos en máquina de escribir, recortes de revistas que luego diagramaban a ojo y fotocopiaban. “Publicaciones DIY criollas” como las llama Arias, que comparten de manera informal, los nuevos sencillos, casetes o vinilos de punk que se producen o llegan a la ciudad, escriben artículos de opinión política, social

y económica; distribuyen arte y fotografía, reseñan ál-bumes, analizan letras de canciones, entrevistan ban-das y artistas del género, entre muchas otras, ya que su carácter independiente, informal y personal lo liberaba de cualquier deber ser. El zine era verdaderamente una publicación donde cada uno compartía lo que se le di-era la gana compartir. En estos la relación imagen texto era fundamental, el fanzine desarrollo unos caracteres y signos propios estéticos y conceptuales que se ob-servaban en las tipografías experimentales que desar-rollan, en las caricaturas y comics que ilustraban, en las piezas graficas entre la fotografía y el collage con el ex-perimentan y complementan con la fotocopiadora, así como su característica cruda de máquina de fotocopias que le brindaba un valor estético conceptual a blanco y negro muy poderoso. Sumado a esto Arias recalca el estilo particular de comunicación que estos fanzines propician dentro de la misma escena, una dinámica de trueque, de cambio y de colección de los mismos fanzines que en muchas ocasiones a través de esa logra-ban llegar al exterior. De igual manera eran el medio de difusión por el cual las bandas en esquinas o hojas del fanzine anunciaban sus toques o eventos.

Uno de estos zines que se destacó en la escena de las publicaciones autogestionadas fue “Nueva Fuerza “de piedad Castro, cofundadora de la banda “Fértil Mis-eria”, en el cual publicaban más artículos de opinión en los que celebraban el crecimiento y la unión en la escena, pero también escribían críticas a la cultura del narcotráfico, a la obra de Rodrigo D. No Futuro, a las bandas que se comercializaban, a la influencia de la cultura americana, al rol de la mujer, entre otras. De igual manera se adentra más en los acabados y la co-municación de los gráficos, por ejemplo, explorando con medios de grabado como la litografía en los 90s, práctica que luego otros zines adoptarán. Arias hace referencia a esta mejora en los acabados y contenidos a causa de la revista “Slayer Magazine” que llegaría a Co-lombia por Bull Metal desde Noruega (El también sería un actor reconocido de la escena y llevaría la música de Parabellum a Noruega en un continuo intercambio

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cultural) y sería un ejemplo de una publicación under-ground con acabados de diagramación alta.

Lamentablemente este fenómeno de autogestión acaba-ría pronto en los 90s a causa de la apertura económica de Cesar Gaviria que, en palabras de Arias, “el auge de las importaciones, así como la diversificación del con-sumo de bienes y servicios, también contribuyó a que decayeran muchas industrias locales, incluyendo el pe-culiar movimiento de los fanzines paisas. (arias,2016)” En parte por cuestiones de calidad y contenido que representó la nueva oferta de consumo, con posters e impresiones a color. Se resalta igual algunos movimien-tos que siguieron con las prácticas o coleccionaron los fanzines por su valor histórico, pero la creciente oferta cultural foránea los terminó matando. Arias rescata que “lo aprendido no fue en vano” toda esta generación de punks aprendió a acceder a estas tecnologías a acer-carse a los medios de grabado, a producir sus propias piezas gráficas. Repercutió fuertemente en los signos y caracteres que desarrollaron habilidades y gestos para la producción de carátulas, de prendas DIY, de stickers y pines. Significó oportunidades de sustento para una generación sin oportunidades, derivó en que muchos punks y metaleros se dedicaran al diseño. Para termi-nar su artículo, Arias dice:

“hablamos de un poderoso vehículo de resistencia en una sociedad amedrentada, de gritos de rebeldía y crítica ante las amenazas, la brecha social y la desidia de la clase dirigente. Y ante el mundo (es decir, ante movimientos culturales afines que surgieron en otras ciudades y países) los fanzines se convirtieron en la carta de presentación e intercambio de ideas de los que promovían estas formas únicas de sentir y de decir “Es-tamos vivos y presentes”.”

Ciertamente el artículo de Arias es una de las recop-ilaciones más valiosas que permiten darle una mirada a este valioso movimiento zine del Punk de Medellín. Un gesto contracultural muy puro, que desde la au-togestión busca darles voz a discursos y comunicar

ante las configuraciones ya definidas de la sociedad y cultura hegemónica de manera efímera y libre a la in-terpretación las diferentes posturas y perspectivas. Si el zine genera un cambio eso va más allá del acto en sí de su publicación. Es el gesto contracultural más puro y congruente que se observa en esta tesis. Dado esto es el medio escogido por congruencia en la toma de decisiones y la investigación realizada.

(s. f.). Papa Bazuko [Serigrafía]. https://desperfecto.weebly.com/uploads/5/1/9/0/51905061/pixx_orig.jpg


El Contenido Una vez son claras las decisiones en cuanto a el me-dio, la serigrafía y el formato, el fanzine, se planteó cual era el camino gráfico y estético más acorde a la investigación del proyecto y el objetivo comunicativo que deriva desde el mismo concepto y los objetivos. Es innegable que los mismos zines de Medallo y los ref-erentes del estado del arte dan cuenta de una línea a seguir, aunque también hay que distinguir que el mis-mo carácter disyuntivo del fanzine permite no seguir ningún tipo de norma tradicional editorial. Existe una libertad total en cuanto a los estilos, los textos, las il-ustraciones y todo el contenido dispuesto en general. Esa misma amplitud es difícil de abordar desde un punto de vista de diseño ya que mantener congruen-cia y unidad a lo largo de una publicación tan variada es un reto. Sin embargo, con la ayuda de encuestas y entrevistas logre correlacionar conceptos y definir cual era el contenido y el estilo de mi fanzine. Mi objetivo era invitar a la reflexión a los jóvenes capitalinos de los trazados establecidos por la sociedad hegemónica Bo-gotana y darle voz a discursos y perspectivas que en la actualidad no son tenidos en cuenta. Para esto era clave entonces entender que lineamientos entendía mi grupo objetivo como hegemónicos en su realidad. De las encuestas realizadas y las entrevistas se resaltaron principalmente: en primer lugar, la política en Co-lombia, bajo la coyuntura actual de polarización entre políticas tradicionales de derecha como el uribismo y el contrapeso de nuevas posturas de centro y de izquierda sumado al deteriorado proceso de paz. Para todos los jóvenes, la mayoría con tendencias de centro izquierda, este fue un eje central del cual varios desglosaban otras temáticas que se relacionan, como la religión, el siste-ma de autoridad y el aspecto socio económico. Dando paso así a un segundo lugar, la religión en Colombia, principalmente el catolicismo y el cristianismo, fueron un conflicto que todo el grupo encuestado reconocía que lo afectaba, ya sea porque su familia les imprime unos valores o desde el colegio y la educación recibida.

En tercer lugar, la autoridad bajo la creciente oleada de protestas en el país la mayoría destaco sentimientos de frustración y rabia ante la policía y entidades similares. De igual manera, diferentes comentarios relacionados al tema socio económico que referenciaban conflictos con la desigualdad que se vive en el país, la falta de em-patía por la ciudadanía en especial los de clase alta, el sistema de estratos, entre otros. Por último, varios re-saltaron la importancia de los productos culturales que se consumen, la creciente tendencia de noticias falsas y la falta de credibilidad en los medios de comunicación, que van de la mano con la critica a las redes sociales. Bajo un panorama más claro y ceñido de que temáti-cas son las que no solo desde mi subjetividad e inves-tigación debía aborda en el zine pude tomar decisiones principalmente de contenido. Este igual mantiene una subjetividad importante ya que en su gran mayoría fue desarrollado por mí, aunque era importante mantener una postura critica a lo largo de todos los artículos que escribí pero que al fin y al cabo parten de mi opinión. Esto aclaro en gran medida que tipo de zine sería, ya que son muchos los caminos y posibilidades, porque cuando inicie el proyecto me imaginaba por ejemplo un zine únicamente de ilustración sin ningún conte-nido escrito, sin embargo, teniendo en cuenta el mov-imiento punk de Medellín y el gesto contracultural, un fanzine únicamente ilustrado no se acomodaba al carácter de crítica social y reflexión.

Los punkzines de Medellín, publicaciones DIY criol-las que informaban sobre la escena y de igual manera compartían ideas y artículos de opinión similares a lo que se considera un medio de información y difusión, únicamente que independiente y autogestionado, sin seguir agendas políticas o económicas. Teniendo en claro los temas que abordaría en mi zine y tomando como referencia la idea de medio de información, plantee que el fanzine siguiera el formato de revistas de análisis político y noticias, principalmente el de la revista Semana. Esto en busca de criticar y repensar cual es el modelo de negocios que siguen los medios de información en Colombia y su equilibrio con el poder

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político. En particular, seguir el esquema de la revista me ayudaba a organizar los temas a abordar y seccionarlos, mientras que podía hacer una reflexión pertinente sobre la democratización de la información en el país. Aunque, en la realización me aleje lentamente de esta idea original a causa de decisiones gráficas y en busca de darle un carácter más disruptivo, ya que el esquema de diagramación tradi-cional de la revista se quedaba corto en darle impacto y fluidez a las ilustraciones y los textos. En este punto también fue importante repensar el fanzine no solo como un proyecto que incluía artículos de mi opinión sino a futuro entenderlo como una plataforma de cocreación donde los jóvenes también puedan plasmar sus ideas y conflictos con la sociedad hegemónica Bogotana. Sin embargo, fue difícil conseguir la participación de varios por lo cual solo conseguí me conformé con la colaboración y participación de Sebastián Laverde, un ilustrador contem-poráneo que se ajustaba al grupo objetivo y se interesó mucho en la propuesta. Su participación se limitó únicamente a un artículo, sin embargo, se plantea que a futuro el zine cuente con diferentes colaboradores en la creación de contenido.

El TonoLa manera en la cual se cuenta algo también adquiere una importancia significa-tiva en el contenido. Claramente yo podría realizar un documento académico so-bre los temas que abordo el zine, sin embargo, eso no estaría en congruencia con mis objetivos y posturas políticas. Creo que igual cabe esclarecer que uno como diseñador a lo largo de la carrera construye un estilo gráfico, una forma de decir y manifestar desde sus mismos caracteres y códigos estéticos, sin embargo, eso no significa que uno aborde diferentes proyectos con tonos y posturas variantes. Para este caso en particular era clave mantener la irreverencia, la confrontación, la disidencia desde como se dice y como se muestra. Razón por la cual un tono jocoso, sarcástico, informal, grosero, que no acata normas ni sigue lineamientos era el camino a seguir con base en los objetivos comunicativos y la investigación realizada. De esta forma decir algo que fuera ligero, que fuera entretenido, fácil de leer, pero que igualmente comunicara de manera disiente y brusca esa voz que no se tiene en cuenta. El tono busca ser un intermedio entre chistoso y serio, difícil y casi que cínico tratando temas tan importantes y delicados, pero que se abordan con ligereza y diversión para una audiencia juvenil que también busca identificarse como la emoción del narrador. Escribir los artículos también sig-nificaba una tarea de diseño en que información se decía y como se decía y era un reto mantener el aspecto critico e informado frente a la sociedad siendo

sarcástico e irreverente.


La camiseta En mi investigación resalto como la camiseta ha sido un eje central en los mov-imientos y gestos contraculturales, en parte por su fácil acceso y por ser una prenda que no se acomoda necesariamente a ningún género y les permite a los hombres acercarse a la moda. Esta, casual e informal es una representación de identidad que se ha adoptado desde el siglo pasado y ha servido como un el-emento discursivo desde el cual antropológicamente los individuos han trans-mitido un discurso político u afiliación desde la vestimenta. Desde demostrar afiliación a un equipo deportivo o a una institución o entidad como, por ejemplo, una universidad o empresa, hasta el lugar social de un individuo, como de ide-ologías por portar símbolos como la imagen del Che. Representaciones donde la grafica es el elemento crucial para cumplir ese propósito social de demostrar esas afiliaciones o discursos políticos ante el mundo. Momento en el cual se conjugan dos elementos cruciales de la propuesta, la serigrafía como medio de resistencia y la camiseta como sustrato que evidencia al sujeto político ante el mundo a través de la vestimenta. Razón por la cual la camiseta es un entregable fundamental para este proyecto, demuestra por un lado la investigación sobre el gesto contracultur-al y sus raíces en movimientos a finales del siglo pasado en occidente y transmite esa voz que no es tenida en cuenta cumpliendo el objetivo planteado de critica y reflexión desde como la audiencia se presenta ante el mundo y transmite a través de la moda y la vestimenta un rechazo a cierto esquema de valores y constructos de la sociedad hegemónica.

El cartel ilustradoEl cartel se ha consolidado en Colombia desde los años 30 como un medio de “propagación no sólo de productos y campañas, sino de estilos de vida, de formas de pensar y vivir, de imperialismo cultural, de transmisión de nuevos valores y apreciaciones, de otros consumos, de nuevas ideologías y mentalidades. (Duque López, 2009)” Es en gran medida uno de los vehículos gráficos más representa-tivos del activismo y la protesta social en el país y América Latina. Es un medio que permite llegar a amplias audiencias y que desde la grafica plantea retos comu-nicativos y estéticos ya que tiene que ser visualmente atractivo, pero cumplir con el objetivo comunicativo. De igual manera al ser un elemento que comunica ma-sivamente se ha planteado su reproducción múltiple, momento en el cual tecinas de grabado artesanal como la serigrafía se conjugan con este medio para hacer del cartel un importante vehículo de resistencia. Razones por la cual se plantea en la propuesta como el ultimo producto de la serie, para consolidar el contenido del fanzine en un medio de impresión rápida que apela a grandes audiencias.

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RealizaciónCon base en lo mencionado anteriormente se consolida una propuesta de diseño clara, un fanzine que, a través del grabado como la serigrafía, expusiera conteni-dos de opinión crudos e irreverentes de temas que aquejan a los jóvenes Bogota-nos, tales como la política, lo económico y lo cultural. Estos expuestos de la mano con ilustraciones y composiciones graficas que manejan un tono ligero, diver-tido y grosero para apelar a una audiencia juvenil. De igual forma, este se acom-pañaría de una camiseta donde se entiende la vestimenta como acto político que transmite por medio de la gráfica posturas y perspectivas diferentes y demuestra ante el público y el mundo diciendo “estamos aquí y no nos da miedo decirlo”. Por ultimo la propuesta se consolida con el cartel como vehículo de resistencia que apela a grandes audiencias y que de manera ligera y llamativa transmite a grandes rasgos el contenido expuesto en el zine. Para realizar estos productos fue un proceso largo y arduo. Siendo el eje central el zine, era el primer producto por abordar del cual derivan la camiseta y el cartel. Para este como mencione anteriormente con los temas obtenidos de las herramientas como las entrevis-tas lo primero fue escribir varios artículos de opinión que siguieron el esquema de la revista semana, que consiste en: carta al lector y créditos, nación, justicia, cultura, gastronomía, cine, música y pasatiempos. Una vez tenia estos el siguiente paso era ilustrar realizar piezas graficas acorde a cada artículo. Algunas de estas piezas eran ilustradas mientras que otras consisten en collages y fotografías en semitonos para poder imprimirse en serigrafía. Acá hay que reconocer ciertas limitaciones que el mismo medio delimita y determina, desde la serigrafia que maneja sus propios caracteres como que no se pueden imprimir fotografías tal cual, sino debe tener cierto grabado como el semitono, así como un limite de tintas (colores). De igual manera me encontré con otro limitante importante en el formato editorial, como que tamaño tendría y que tipo de encuadernación. Todos estos limitantes era importante resolverlos de manera estratégica para la reali-zación, pero manteniendo la congruencia con la propuesta. En este punto fue que tuve que optar para el fanzine por la risografía, considerada por muchos como un primo cercano de la serigrafia, por similitudes dentro de los procesos y formatos.


CostosAnálisis de producción

Este proyecto, dado su carácter mayoritariamente autogestionado, tiende a tener un bajo costo y producción. El fanzine, el eje de los entregables, se planteó para producirse desde la serigrafía o su derivado la risografía, ambos métodos de impresión relativamente sencillos y costo efectivos. Los costos de la realización también van de la mano al número de copias y sustratos. Lo que significa que es una decisión sobre cuál va a ser el alcance del proyecto y su impacto. Dada la coyuntura actual se plantean pocas unidades del fanzine, dos o tres. Sin embargo, “Los Desobedientes” se plantea como un proyecto a futuro en el cual las difer-entes ediciones del fanzine lleguen a una mayor distribución y propagación para llegar a una mayo audiencia.

Entre los costos de la serigrafía hay que resaltar: - Los marcos, el material de los mismos y su hilaje. - El sustrato: Para este proyecto se plantea un fanzine sobre papel durex de 180 gramos, y camisetas gildan de algodón manga largas. - La tinta: El número de colores que se utilizaran en la serigrafía y que tinta se va a escoger. Para el proyecto se usará tinta extender tradicional a base de agua. - El revelado: El revelado de los marcos a partir del fotolito. Para esto se necesita acudir a un tercero para el proceso de revelado adecuado.

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Conclusión


Este proyecto de grado ha sido un trabajo largo, arduo y frustrante. No hay un camino claro, ni hay respues-tas a la vuelta de la esquina. Todo fue un proceso lento de hallazgos que se fueron dando en la medida en la que el proyecto se asentaba. Empezó por un interés a grandes rasgos por el movimiento del streetwear, una idea lejana de un entregable que se asemejara un poco a esos gustos personales por la ropa, la gráfica y la ilus-tración. Sin embargo en la medida que avanzó el pro-ceso de investigación los objetivos se fueron haciendo claros, la profundidad conceptual se fue solidificando e incluso mis intereses y objetivos con el proyecto cam-biaron por completo. Requirió de introspección per-sonal y ayuda de mis allegados pero se logró. Entendí el valor detrás de mi gusto por el movimiento denomi-nado “streetwear” que radica netamente en su carácter de cuestionar que partía desde su núcleo contracul-tural. Se logró asociarlo con el gesto contracultural del punk, que también siempre me había interesado mucho. Logre llegar a una conclusión sumamente per-sonal filosófica e importante, como lo es la de plantear diseños desde el entendimiento que las epistemes y re-alidad de cada uno son diferentes, obvio sin caer en el relativismo.

Consolidar la propuesta fue difícil, pero siempre man-tuve la concordancia de la toma de decisiones de diseño con la investigación realizada lo que me permitió llegar a la idea del fanzine. “Los Desobedientes” es para mi uno de mis más importantes logros personales al día de hoy. Es una publicación autogestionada que logra reco-pilar mis más profundas inquietudes, cuestionamien-tos y sentimientos a través del diseño y la ilustración. Por fín siento que encontré un mensaje que vale la pena transmitir a través de mi labor como diseñador. Nunca he sido una persona dócil, desde pequeño mis padres me regañaban por cuestionar todo, por rayar los pupitres, por decir lo que pienso y por ser rebelde. Nunca me he sentido representado por el sistema de valores y construcciones sociales hegemónico y creo que este proyecto me ayudó a reconciliar esos conflic-tos personales y transmitir de manera asertiva a través

del diseño los mimos. Me dio una voz para explotar con mis herramientas gráficas y por eso siempre estaré agradecido al proceso y el acabado final.

A futuro pretendo seguir con futuras ediciones de los Desobedientes. Continuaré resistiendo a través de la gráfica, planteando colecciones de ropa a través del hacer de la serigrafía. Creo que es una base conceptual muy fuerte para continuar con un proyecto que pueda crecer mucho y así no lo haga es algo que transmite mis opiniones y conflictos frente a la realidad que se presenta ante mi y que no me representa. Es impor-tante que como individuos y diseñadores tomemos una postura crítica ante el mundo aunque no sea comercial lo que hagamos y la gente no esté de acuerdo, aunque no consigamos trabajo. Creo que para mi fue ese el val-or de este proyecto para concluir, el de volver a hacer porque tenía que sacar todos esos pensamientos e ideas y dejar de lado todo lo que le guste a la gente a mis pa-pas y lo que le sirva a mi portfolio.

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Epígrafe

Que en este mundo traidor / nada es verdad ni es mentira: / el

camaleón es del color / del cristal con que se mira

Eduardo Torres Campoamor

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