El misterio del Vapor“Venezuela”

Carmina Martos

Son muchas las historias sobre barcos fantasmas, o que aparecen de repente sin que se conozca de dónde salieron o por qué están ahí.En el suroeste del Lago de Maracaibo existe una zona de vegetación intrincada y peligrosa por los pantanos, así como por sus temibles habitantes: caimanes, serpientes y mosquitos asesinos.

Desde hace muchos años, viene pasando de generación en generación el testimonio del misterioso gran barco abandonado que allí se encuentra, lo cual se ha vuelto una leyenda.En el año 2013 se llevaron a cabo dos expediciones guiadas por pescadores que supuestamente conocían el lugar donde se encontraba el barco. Fue imposible llegar hasta el sitio por el riesgo que implicaba perderse, o ser devorado por la ciénaga o por un voraz reptil.

Se trata del Parque Nacional Ciénagas del Catatumbo, llamado también Ciénagas de

Juan Manuel. Un pantano lluvioso y

siempre inundado que mide 2.694 Km2, lo que equivale a 1.4 veces la

extensión de todo el

Estado Miranda.

El Parque Nacional Ciénagas del Catatumbo rodea toda la desembocadura del río Catatumbo en el Lago de Maracaibo.Este lago, lleno de riqueza y de Historia, es el más grande de Suramérica y el mayor del mundo con salida al mar.En él desembocan 135 ríos, pero el Catatumbo, que viene desde Colombia, le aporta el 60% de su agua dulce.

En las zonas pantanosas de las Ciénagas tiene origen el fenómeno natural que genera la mayor cantidad de ozono en el mundo. Aunque existen discrepancias al respecto, algunos científicos creen que este ozono podría subir a la capa de la atmósfera que se encarga de protegernos de los peligrosos rayos ultravioletas: la capa de ozono.

Es el Relámpago del Catatumbo, que se encuentra en el Record Guinness desde el año 2014, por ser el de mayor cantidad de descargas eléctricas anuales (250 descargas x Km2 al año).Un fenómeno similar ocurre en África, en el Congo, con aproximadamente 232 destellos por Km2 al año.

El Relámpago del Catatumbo puede ser observado desde zonas muy lejanas. La fuerza de uno de sus rayos podría encender todos los bombillos de la América del Sur. Cuentan que, en el año 1595, su luz protegió a la ciudad de Maracaibo de una incursión del corsario inglés Francis Drake, al descubrirse sus embarcaciones que pensaban atacar durante la noche.

Dicen que el relámpago se produce por la descomposición de la materia vegetal en las aguas estancadas, lo que da lugar a que se origine gran cantidad de gas metano.El metano es un gas altamente inflamable. Es más liviano que el aire y se eleva mezclándose con el vapor de las nubes, lo que resulta en fuertes descargas eléctricas.En el caso del Catatumbo, los rayos no caen al suelo sino que chocan contra otra nube, por eso no truena.

Pero los wayúu saben que el constante relampaguear se debe a que el primero de su raza, luego de perseguir a su majayura* durante tres mil seiscientas sesenta y cinco lunas, atravesando áridos desiertos, peligrosos bosques y caudalosos ríos, así como la sierra de los aguerridos motilones, allí la encontró.El relámpago se produce porque desde entonces él la acompaña y le hace el amor hasta doscientas ochenta veces por hora, durante diez horas por jornada y ciento sesenta días al año.

* Doncella

Aunque algunos dicen que se trata de la furia del dios creador de los wayúu: Maleiwa, debido al maltrato a que es sometida la Madre Tierra.

Y otros sostienen que los relámpagos son mensajes de los espíritus de los wayúu que ya no viven en nuestra dimensión.

Igualmente los wayúu conocen que en los pantanos de las Ciénagas del Catatumbo vive Wanulúu, un espíritu maligno y muy vengativo.

Y el olor a podrido de las aguas estancadas, en realidad es el aroma pestilente de las heces fecales de Wanulúu.

“Wanulúu es espíritu maligno, personificación de las potencias destructivas, así como desarmonía, desequilibrio, maldad y aparición que augura aniquilamiento. Es misterio, enigma, olor a muerte y vientos pestilentes transpirando su hediondez”

El estado Zulia, que tiene nombre de flor, mide 63.100 Km2.Es el quinto estado de Venezuela en extensión (después de Bolívar, Amazonas, Apure y Guárico) y el primero en población. También existió una aguerrida princesa indígena, nacida en el territorio de lo que hoy es Colombia, cuyo nombre era “Zulia”.

Este importante estado de Venezuela se encuentra rodeado de montañas: Al este y al sur la Cordillera de los Andes, y al oeste la Sierra de Perijá, que también es un ramal de los Andes.

En el Zulia vive la mayor parte de toda la población indígena de Venezuela (57% según el INE) de la cual el grupo más numeroso es la etnia wayúu, de origen arawako.Otros pueblos importantes del estado Zulia son los bari (llamados motilones por los conquistadores), los yukpa, y los añú o paraujanos.

La tierra natural de los wayúu es la Península de la Guajira, cuya mayor extensión es colombiana. En Venezuela se ubican mayormente en el Municipio Bolivariano de la Guajira, ubicado al noroeste del estado Zulia, sobre el Golfo de Venezuela.

Son gente de arena, sol y viento. Su actividad económica es la ganadería así como su hermosa artesanía en la que destaca los hermosos tapices de llamativos colores. Este grupo nunca llegó a ser sometido por los españoles ni cultura vecina alguna.

Guajiro no es sinónimo de wayúu. Estos últimos son un grupo homogéneo en cuanto a su idioma y cultura, mientras que guajiro es todo el que haya nacido en la Guajira. Wayúu se traduce como “la gente” y se opone a “alijuna” que quiere decir “persona extraña”.El resto de los grupos indígenas son conocidos como “kusina” por los wayúu, exceptuando los añú, a los que denominan “paraujanos”, que significa “gente que vive de la pesca”.

Los añú o paraujanos, al igual que los wayúu, son de origen arawako. Descienden de aquellos indígenas que Alonso de Ojeda y Américo Vespucio encontraron viviendo en Palafitos cuando entraron al Lago de Maracaibo.

Se autodenominan “añú” que quiere decir “gente del agua”.

Siguen habitando mayormente en la entrada del Lago de Maracaibo y mantienen su tipo de vivienda, construida sobre pilares sumergidos.

Los yukpas son de filiación Caribe, los indígenas que Colón encontró cuando llegó a esta “Tierra de Gracia” y que lucharon valientemente contra los conquistadores. Se encuentran dispersos por la Serranía de Perijá y se alimentan básicamente de maíz, plátanos y yuca, que siembran en sus conucos.

La etnia bari es de origen Muisca o Chibcha, un grupo que proviene de lo que hoy es Colombia y luego se extendió por los Andes. Son pescadores, cazadores y también siembran yuca, plátano, maíz y piña.

Los bari son “los hijos sonrientes de la piñas”.

Sabaseba, su dios creador, que al atardecer desaparece por el occidente para dar la vuelta y luego aparecer por el oriente, se alimentaba de piñas amarillas y de ellas fueron naciendo todos sus hijos.

Debido a la forma como cortan su cabello, los bari fueron bautizados como “motilones” por los españoles. Motilón quiere decir “que tiene poco pelo”. El dios creador Sabaseba, en el principio de los tiempos, les ordenó que se cortaran el pelo y tejieran con él lianas para poder bajar del árbol catatú o “árbol de la vida” donde ellos estaban.

Los bari viven a lo largo de las riveras del río Catatumbo, así como en los alrededores de su desembocadura, en los caños, lagunas y ciénagas, que es donde duerme el barco leyenda. Este lugar también es la morada de Dadibdu, el espíritu maligno guardián de los pantanos, que se presenta en forma de hermosa doncella.

En julio de 2014 se publica una interesante noticia en algunos medios:

“En días pasados, pescadores y habitantes del Municipio Catatumbo del estado Zulia, hallaron encallada una goleta con el nombre “Venezuela”, la cual posiblemente haya pertenecido a la flota del Libertador”.

Sin embargo, algunos expertos opinan que la proa del buque hace imposible que sea un buque de esa época.Podría tratarse del Vapor de Guerra de nombre Venezuela, siniestrado en esas aguas en el año de 1.860.

Después de una penosa caminata al fin fue avistado el barco, que lleva por nombre “Venezuela” y mide cien metros de largo por doce de alto.

Tiene 33 ventanas a cada lado y al parecer su color era blanco, pero ahora se encuentra totalmente oxidado.

Un dato importante es que en una de las vigas de la proa aparece la inscripción “Phoenix Iron CO”. El caso está en manos de diversos investigadores.Hasta ahora, la única certeza, por las condiciones en que se encuentra, es que el barco tiene más de cien años en ese lugar.

Cuándo y dónde encalló la nave y que sucedió con sus tripulantes?

Qué se encuentra actualmente dentro del vapor?

Cuál fue la causa de que el barco fuera abandonado?

Todas estas preguntas serán aclaradas una vez que concluyan las investigaciones.

Mientras tanto es inevitable dejar de pensar que el naufragio pueda deberse a que Wanulúu se haya enfadado por alguna razón llevando el barco a pique. O que Dadibdu, el espíritu de los pantanos, haya aparecido en forma de hermosa mujer seduciendo a los tripulantes y haciendo encallar el vapor.