GEOPOLÍTICA E PODER
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GEOPOLITICA E PODER
Paulo Timm – Organizador , para uso em sala de aula -2013
Top 10 military Power in the world
http://www.youtube.com/watch?v=DyiJm57RVdI&feature=share
A Geopolítica Latino-Americana atual
A Sociedade Brasileira de Economia Política em seu XIX
Encontro Anual dedicou um painel ao tema da Geopolítica
Latino-Americana.
Presentes no debate: Carlos Eduardo Martins, Thetonio dos
Santos, e Samuel Pinheiro Guimnarães
A exposição do Professor Theotonio dos Santos se inicia aos 22 minutos e pode ser
acompanhada no canal do IELA no Youtube.
https://www.youtube.com/watch?v=w8peLx2S91g&index=15&lis
t=PLZdWnHzjYCCcra-tWUas3da94p9HzbIEZ
An amazing chart showing global military spending
US spends so much more than anyone else.
VOX.COM|POR EZRA KLEIN
Indice
I – GEOPOLÍTICA
Surgimiento da La geopolítica - Antonio Flores Gavilán
DESTINO MANIFESTO - Antonio Flores Gavilán
II - GEOPOLITICA E PODER
Geopolítica,. Inteligência e. Paradiplomacia na Estraté
gia das. Relações Internacionais dos Movimentos
Sociais. – Acilino Ribeiro
O Brasil e seu “Entorno Estratégico”, na primeira
década do século - José Luís Fiori
Poder, geopolítica e desenvolvimento - José Luís Fiori
Geopolítica e Poder Internacional – J.L.Fiori
Soberanía, naciones y la crisis del desarme -Oriol
Costa
Fracasso fiscal nos EUA obriga a trabalhar para um
mundo des-Americanizado - 13/10/2013, Liu
Chang, Xinhuanet, China
O nascimento do mundo “des-Americanizado” - 15/10/2013, Pepe
Escobar
A rede do controle corporativo global – Stefania Vitali – Entr.
O império norte-americano e a invasão da Ásia = prof
marco aurelio cabral
"Vamos a ganar la batalla contra el tratado
transatlántico de libre comercio" - Resumen de la
conferencia ofrecida en Bilbao - Susan George
Estratégia de Guerra Fria dos EUA: Da Ucrânia às
Filipinas – Marcilio Dinuci – Portal Vermelho
Um tiro no pé – Mauro Santayana -
O jogo geopolítico da Rússia e da China – I. Wallerstein
Entrevista Julian Assange – ESP – agosto 2014
O neo-eurasianismo e o redespertar russo -Dídimo Matos
Para oeste, ho, pela estrada Eurásia BRIC da China, ho
- Pepe Escobar
O reforço da aliança global entre China e Rússia
PUTIN LANÇOU UM NOVO E PODEROSO JOGO
GEOPOLÍTICO
Poder militar e acumulação de capital – James Petras
La disputa por el Atlántico Sur - Raúl Zibechi
Europa – Fragmentação
Brzesinsky : O cérebro da geopolítica de Obama -
Germán Gorriaz López
El Amante Chino - Enrique Guillermo- Abogado
China e Russa – Aliança -
III – BRICS
Banco dos BRICS lança desafio ao predomínio
financeiro dos EUA - Voz da Rússia 02/07/2104
Como a globalização, os BRICS podem ser fenômeno
passageiro - Immanuel Wallerstein – 24 MAY 2013
Crise dos “emergentes” ou do Sistema? - IMMANUEL
WALLERSTEIN
A Cia e os intelectuais – Ernesto Carmona
BRICS I e II – Marcelo Zero
IV - MERCOSUL x NAFTA x PACÍFICO
Para Patriota, Aliança do Pacífico é mais "êxito de
marketing"
O Mercosul afunda na sua irrelevancia - Editorial O
Globo
O Brasil e o Pacífico - Mauro Santayana
La disputa por nuestra América: Unasur en la mirilla
yanqui. Ángel Guerra Cabrera
Santos, la conjura contra Venezuela y la Alianza del
Pacífico - Attilio Boron
NOTAS ECONÔMICAS LATINO-AMERICANAS!
(AGÊNCIAS)! - Cesar Maia NL
La Alianza del Pacífico, el Mercosur y la integración
latinoamericana - Adolfo Aguirre (ACTA)
Ofensiva imperialista em grande escala – Não é só a
Venezuela que está na mira, é o continente - Carlos
Aznárez
Implicaciones geopolíticas del ingreso de Colombia a
la OTAN - Atilio Boron
Banco del Sur se consolida como instrumento
financiero para integración latinoamericana - AVN /
O Brasil e as ameraças do Poder Imperial dos EUA.
Marco Aurélio Weissheimer entrevista Moniz Bandeira
Brasil, EUA e o "hemisfério ocidental - José Luís Fiori
Washington, finalmente, rende-se à Unasul Conselho
Editorial Sul-Americano em 08/05/2014
Asias Geopolitics...
V - BRASIL X USA
Brasil - EUA, muy amigos... - José Carlos Ruy
O dissenso de Washington - Rubens Antonio Barbosa
O Brasil isolado - Rubens Barbosa em O Globo
Moniz Bandeira: O Brasil e as ameaças de projeto imperial
dos EUA - Marco Aurélio Weissheimer
V- BRASIL – COMPETITIVIDADE INDUSTRIAL E PODER MILITAR
O Brasil no contexto regional e global – Celso Lafer
Da politica industrial para o simples bom senso - IEDI
e CNI
Brasil: próxima potencia militar - Santiago Pérez
Industrialização comparada - Marcelo Miterhof
Para calcular o futuro – J.L.Fiori
VI – OS RISCOS DA III GUERRA MUNDIAL
Ataque dos EUA à Síria é repelido pela Rússia no Mediterrâneo –
Um Mundo em Guerra
Na Síria, o bicho pega - Jaime Sautchuk
Terceira guerra mundial em marcha - Conselho Editorial Sul-
Americano
III GUERRA ? Arnaldo Mourthé
EUA arrastam o mundo à guerra Paul Craig Roberts
A scorecard for the US "lukewarm war" on Russia -
strategic and tactical levels
Washington prepara a III GUERRA MUNDIAL – Paul
Craigs Roberts
E Lenin tinha razão: a grande guerra interimperialista – Emir
Sader
O Discurso de Putin no G20 – Nov. 2014
Russia: 21st Century Empire? Nouriel Roubini
Pilger: à sombra de uma Terceira Guerra Mundial?J.Pilger
A terceira guerra é contra a Russia – Boaventura Souza Santos
A Terceira Guerra Mundial? - Boaventura de Sousa Santos
Guerra Grande ou Grande Guerra –
O que quer Putin? Rostislav Ishchenko
Generais da antiga RDA advertem contra risco de guerra
Rota de colisão
Assim se prepara uma nova Guerra Mundial
VII – GUERRA FRIA
Recordar lições importantes da Guerra Fria The Saker, The Vineyard of the Saker
http://vineyardsaker.blogspot.com.br/2014/05/remembering-important-lessons-of-cold.html
Estratégia de Guerra Fria dos EUA: Da Ucrânia às Filipinas -
Manlio Dinucci, no Irã News
EUA e Otan martelam para criar à força uma Guerra
Fria 2.0 – Vladimir Kozin
La guerra psicológica
VIII –GEOPOLÍTICA DO FUTEBOL
IX – GEOPOLITICA DO NARCOTRÁFICO
***
I – GEOPOLÍTICA
Surgimiento de la geopolítica
http://mamiferopolitico.blogspot.com.br/2009/10/surgimiento-de-la-geopolitica.html
Antonio Flores Gavilán : Aqui en el presente articulo presentamos el concepto de
Geopolítica y como este tiene diversas concepciones según los intereses de las grandes
potencias mundiales.
A través del tiempo observamos diferentes interpretaciones y definiciones vemos que
esta ciencia es determinante para la toma de decisiones en el nivel político, incluso ha
sido llamada una ciencia de carácter mítico, que tenía incluso dentro de su propósito ser
una especie de pronóstico del futuro, atribuyéndole concepciones agresivas,
expansionistas, promotoras de utopías e incluso de guerras entre Estados.
Sin embargo en la actualidad incluso las grandes transnacionales, asi como sus altos
ejecutivos a la hora de tomar desiciones sobre nuevas inversiones necesitan tener una
clara visión del espacio en donde estan, y con quien están tratado.
Surgimiento de la geopolítica:
El pensamiento geográfico-político se remonta a los tiempos remotos de la cultura de la
humanidad. Puede hallarse su origen en el siglo IV antes de Cristo con pensadores como
Heródoto, Tucídedes, Hipócrates de Cos, Platón, Aristóteles, Polibio y el gran geógrafo Estrabon
(perteneciente al siglo I antes de Cristo). En sus obras se incluyen referencias y meditaciones
sobre la comprensión de la incidencia del medio ambiente geográfico sobre el hombre y sus
organizaciones políticas.
Todos éstos pensadores de la antigüedad condujeron al autor norteamericano, Derwent
Whittlesey, a afirmar que la “Geografía Política es la forma más antigua de geografía”.
Durante el período renacentista, donde se perfilan los primeros Estados modernos, se concreta
la expansión del mundo conocido, a través de los grandes descubrimientos geográficos,
aparecen destacados cultores del pensamiento geográfico-político. Entre ellos podemos nombrar
a Sansovino, Bodin, Montesquieu, Voltaire, etc. Todos éstos, destacan la influencia determinante
de las condiciones naturales del territorio sobre la conducta humana.
Los precursores de la Geografía Política, ya en la edad contemporánea, fueron los geógrafos
alemanes Alejandro von Humboldt (1769-1859) y Karl Ritter (1779-1859).
El segundo tuvo un papel preponderante en esta rama de la ciencia; sostenía que la disposición
de las tierras en el planeta y las características diferenciadas de los continentes explican el
distinto grado de civilización alcanzado en ellos. En cuanto a Alejandro von Humboldt podríamos
decir que es considerado el padre de la geografía moderna.
Para finalizar vale destacar que el surgimiento y desarrollo de la Geopolítica se dio entre los
siglos IV antes de Cristo y fines del siglo XIX. Además es la aparición y permanencia de un
enfoque ecológico interesado en la influencia del medio físico sobre el hombre y sus actividades
políticas, él cual, consecuentemente se relacionará plenamente con el determinismo ambiental
de la próxima etapa.
Decadencia de la Geopolítica (1950-1970):
Luego de la derrota Alemana en 1945 y la muerte de Karl Haushofer en 1946, tuvo lugar el final
de la escuela de geopolítica alemana. A su vez el fin de la guerra marcó en otros territorios (tales
como el Japón e Italia) la decadencia de la geopolítica. En cuanto a su estudio también en
Norteamérica se desarrollo un desinterés. El cuadro total de los años cincuenta y sesenta es uno
donde se evita la geopolítica y se la relega a secciones históricas de textos tanto en geografía
política como en ciencia política, y en la palabra misma tiene poco uso en debates políticos o
académicos. Esto se debe ya que la declinación de la geopolítica es registrada al nivel de
lenguaje y terminología como la asociación que hubo entre el término con la geopolitik Alemana,
de carácter casi fatal. En conclusión el término era evitado por sus connotaciones nazis.
Esta evidencia de una declinación no debería, sin embargo, ser exagerada como un fallecimiento
completo ya que se llevó a cabo la navegación del término bajo otras apariencias como estudios
estratégicos o inclusive geografía política.
Restauración de la Geopolítica:
La situación mundial comenzó a cambiar. El panorama se enfocó entre la situación bipolar entre
Estados Unidos y la Unión Soviética. Paralelamente se sucedieron hechos tales como: el
crecimiento del nacionalismo tercermundista, la Revolución Cubana y el crecimiento de
movimientos revolucionarios en otras partes del mundo. A su vez esta situación era acompañada
por un crecimiento del poderío militar y naval Soviético y con la palpitante e incipiente amenaza
nuclear. Cabe mencionar también como importante los cambios económicos que reflejaban la
declinación del poder relativo americano en la economía mundial. Todos estos hechos
mencionados, desencadenaron en una mayor complejidad y multipolaridad en la política
internacional que a su vez sirvieron para revitalizar la reflexión geopolítica, aún cuando el
término “geopolítica” fuera evitado.
Planisferio
En muchas formas la declinación de la geopolítica en el período 1950-1970 proveyó buenas
condiciones para el renacimiento del término. El tiempo pareció ser una buena cura ya que
muchos habían olvidado, en efecto, la asociación del término con el régimen de Hitler.
Un elemento clave para la restauración fue el uso extensivo que Henry Kissinger le dio al
término. La geopolítica de Kessinger no sólo señaló el renacimiento de la escritura geopolítica
Occidental, sino que también le dio un ímpetu sustancial en nuevas direcciones. Ya que el uso
dado al término por Kissinger tuvo tal impacto, cabe resaltar la importancia de su obra.
La geopolítica de Kissinger:
1.- Hizo un gran uso del término geopolítica: introdujo el término en la prensa popular y
subsecuentemente en el lenguaje.
2.- Según Bull y Henrikson, Kissinger da al término un concepto individual ya que no es siempre
claro sino más bien indefinido: el contenido geográfico de la geopolítica de Kissinger lo asocia
con el equilibrio global y los intereses nacionales permanentes en el equilibrio del poder
mundial.
3.- El contenido específico de la geopolítica de Kissinger estaba principalmente relacionado con
las nuevas relaciones de Estados Unidos con China comunista.
4.- Su perspectiva se basa en establecer un equilibrio de poder en un mundo multipolar.
5.- Introduce el término realpolitik con el efecto de dar una reacción deliberadamente provocativa
(teniendo en cuenta sus connotaciones históricamente negativas).
Cuadro comparativo de los pensadores:
Pensadores Geopolíticos Nacionalidad Nombre Pensamiento
1.- Alemana
Frederich Ratzel : Introdujo el término “Espacio Vital”.
Todo Estado tiene fronteras dinámicas con capacidad de expandirse
Concepción biológica del estado (organismo viviente).
Rudolf Kjellen : Era funcionalista; es decir seguía con la concepción biológica del Estado como
organismo vivo.
Precursor de nazismo Antiliberal. Gran sentido nacionalista.
Karl Haushofer : Militar
Creó la escuela Alemana de Geopolítica.
Estudió Japón a fondo y escribió varias obras relacionadas con temas como las fronteras. Todo
Estado debía buscar el aumento de espacio vital.
2.- Británica
Harold Mackinder : Fue geógrafo y consideraba la importancia del poder terrestre.
Según él, Eurasia era el corazón de la tierra por lo tanto dominar Eurasia significa dominar el
mundo.
3.- Francesa
Paul de La Blache : No era funcionalista.
Determinista: Considera la importancia de la naturaleza ya que ésta condiciona todas las
acciones humanas.
Otros Pensadores Geopolíticos
4.- Norte Americana
Alfred Mahan : Hace hincapié en el poderío marítimo.
Dominar a la Armada enemiga.
Se van buscando puntos clave en la circulación de los mares.
Nocholas Spykman: Tres conceptos básicos:
colaboración, adaptación y oposición.
Precursor de la O.T.A.N.
Cohen :El mundo presenta dos tipos de regiones:
geo- estratégicas y geopolíticas.
5.- Rusia
Alexander Seversky : Su pensamiento se orientaba hacia el poderío aéreo ya que sostenía que
el avión es el medio mas eficiente para el transporte
DESTINO MANIFESTO
El origen del Destino Manifiesto
Articulo e Infografias por : Antonio Flores Gavilán
Email: [email protected]
Acontinuación aqui en el presente articulo se trata de tener una visión historica de lo que ha sido
el expancionismo norteamericano, aqui se explica algunos alcances del famoso concepto del
Destino Manifiesto, eje central de la doctrina ideologica de la potencia Norteamericana, que se
evidencia desde el Siglo XIX hasta la actualidad, donde se tiene muy en claro el lugar que tiene
los Estados Unidos en el mundo y su relacion con los otros pueblos a lo largo de la historia
desde que fueron trece colonias hasta nuestros días, el Destino Manifiesto ha mantenido la
convicción nacional de que Dios eligió a los Estados Unidos para ser una potencia política
y económica, una nación superior.
La frase “Destino Manifiesto” apareció por primera vez en un artículo que escribió el periodista
John L. O’Sullivan, en 1845, en la revista Democratic Review de Nueva York. En su artículo,
O’Sullivan explicaba las razones de la necesaria expansión territorial de los Estados Unidos y
apoyaba la anexión de Texas. Decía: “el cumplimiento de nuestro destino manifiesto es
extendernos por todo el continente que nos ha sido asignado por la Providencia para el
desarrollo del gran experimento de libertad y autogobierno. Es un derecho como el que
tiene un árbol de obtener el aire y la tierra necesarios para el desarrollo pleno de sus
capacidades y el crecimiento que tiene como destino
Muy pronto, políticos y otros líderes de opinión aludieron al “Destino Manifiesto” para justificar
la expansión imperialista de los Estados Unidos. A través de la doctrina del Destino
Manifiesto se propagó la convicción de que la “misión” que Dios eligió para al pueblo
estadounidense era la de explorar y conquistar nuevas tierras, con el fin de llevar a todos
los rincones de Norteamérica la “luz” de la democracia, la libertad y la civilización. Esto
implicaba la creencia de que la república democrática era la forma de gobierno favorecida por
Dios. Aunque originalmente esta doctrina se oponía al uso de la violencia, desde 1840 se usó
para justificar el intervencionismo en la política de otros países, así como la expansión territorial
a través de la guerra, como sucedió en 1846-48 en el conflicto bélico que concluyó con la
anexión de más de la mitad de territorio mexicano.
Guerra Estados Unidos – México
Fue el Primer Gran paso para la Consolidación Guerra Estados Unidos - México
Texas proclamó su independencia en marzo de 1836 y fue una República independiente hasta
1845, cuando se anexó a los Estados Unidos. Esta anexión provocó la guerra entre México y
Estados Unidos, misma que terminó cuando se firmaron los Tratados de Guadalupe Hidalgo. En
1848 Estados Unidos se apropió de 2 millones 500 mil kilómetros cuadrados de territorio
mexicano, a cambio de los cuales se comprometió a pagar 15 millones de dólares. Este enorme
territorio comprendía los actuales estados de California, Nevada, Utah, la mayor parte de
Arizona, Nuevo México, Texas, así como partes de Kansas, Oklahoma, Colorado y Wyoming. En
1853 México se vio obligado a vender a los Estados Unidos el territorio de La Mesilla (con 110
mil kilómetros cuadrados), para que se construyera ahí una ruta de ferrocarril a California. Con
esta adquisición, la República transoceánica de los Estados Unidos quedó completa.
para ser un país transoceánico.
Texas proclamó su independencia en marzo de 1836 y fue una República independiente hasta
1845, cuando se anexó a los Estados Unidos. Esta anexión provocó la guerra entre México y
Estados Unidos, misma que terminó cuando se firmaron los Tratados de Guadalupe Hidalgo. En
1848 Estados Unidos se apropió de 2 millones 500 mil kilómetros cuadrados de territorio
mexicano, a cambio de los cuales se comprometió a pagar 15 millones de dólares. Este enorme
territorio comprendía los actuales estados de California, Nevada, Utah, la mayor parte de
Arizona, Nuevo México, Texas, así como partes de Kansas, Oklahoma, Colorado y Wyoming. En
1853 México se vio obligado a vender a los Estados Unidos el territorio de La Mesilla (con 110
mil kilómetros cuadrados), para que se construyera ahí una ruta de ferrocarril a California. Con
esta adquisición, la República transoceánica de los Estados Unidos quedó completa.
Otros Aspectos
Se ha dicho que el aspecto positivo de esta doctrina tiene que ver con el entusiasmo, la energía
y determinación que inspiró a los estadounidenses para explorar nuevas regiones,
especialmente en su migración hacia el oeste. También dio forma a uno de los componentes
esenciales del “sueño americano”: la idea de que se pueden obtener la libertad y la
independencia en un territorio de proporciones ilimitadas. En cambio, las consecuencias
negativas son de lamentar: la intolerancia hacia las formas de organización social y política de
otros pueblos, el despojo, exterminio y confinamiento de los pueblos indios de Norteamérica a
reservaciones, guerras injustas y discriminación.
Los principios que consolidaron la doctrina del Destino Manifiesto en el siglo XIX, se arraigaron
en la mentalidad de los norteamericanos durante la fundación de las colonias inglesas en
Norteamérica en el siglo XVII. Aunque la manifestación más evidente de esa doctrina
nacionalista se expresa en el campo de la política, su esencia es religiosa. Los ingleses que
colonizaron la costa Este del territorio que sería Estados Unidos estaban profundamente
inmersos en su religión (el puritanismo, una de las ramas del protestantismo) y su vida
comunitaria y política se desarrollaron en un estricto apego a la ley moral, con el
convencimiento de que el Nuevo Mundo era la “Tierra Prometida” donde cumplirían la
misión encomendada por Dios. Así, en el periodo colonial se encuentra el punto de partida
del ideal estadounidense de ser un “pueblo elegido” entre los demás del mundo.
Este sentimiento de “excepcionalidad virtuosa” fue uno de los rasgos de identidad que alentó
a los colonos a buscar su independencia de Inglaterra en 1776. Desde su origen como nación, el
sueño de Estados Unidos ha sido encontrar la perfección social a través de un triple
compromiso: con la divinidad (cumpliendo con el destino impuesto por Dios), con la religión
(observando una moral intachable) y con la comunidad (defendiendo su libertad, su
seguridad y su propiedad). A lo largo de la historia, los políticos estadounidenses han
invocado el favor de Dios en sus discursos y han insistido en la “misión trascendente”
que la nación tiene que cumplir.
La imagen nacional que los Estados Unidos tienen de sí mismos, como protectores y
defensores de la legalidad, la libertad y la democracia, se funda en la creencia de que
poseen una superioridad moral (porque son el “pueblo elegido”). Esta suposición les ha
permitido justificar su intromisión en los asuntos internos de otros pueblos (que no son
“elegidos de Dios”) o de plano la violencia contra ellos. La primera actitud
intervencionista inspirada por el espíritu del “Destino Manifiesto” fue la obsesión de los
colonos ingleses por desplazar de sus tierras (o bien exterminar) a los indígenas
norteamericanos. En cuanto a su relación con otras naciones, Estados Unidos tiende a manejar
sus relaciones exteriores como si se tratara de una cruzada moral. Generalmente justifica sus
acciones con dos argumentos, ya sea el de la“nación fuerte que protege a la débil”, como
pueden constatar la gran mayoría de las naciones americanas; o bien el de “la lucha contra el
Mal para defender la libertad y seguridad del mundo”, como actualmente alega respecto de su
invasión de Afganistán y el medio oriente, ese concepto es la matriz de su política exterior y su
inspiración geopolítica, asegurar el equilibrio de poder en el mundo.
La historia de las relaciones exteriores de los Estados Unidos provee infinidad de ejemplos de la
política del “Destino Manifiesto”. Algunos de ellos son:
• Doctrina Monroe (1821) declaró que ninguna nación americana independiente debía
volver a ser sometida por Europa y que Estados Unidos intervendría si consideraba que
se afectaban sus intereses
• Anexión de Texas (1845), guerra con México (1846-48) y anexión de más de la mitad de
su territorio
• Guerra con España para libertar a Cuba (1898)
• Construcción del Canal de Panamá (1901-1914)
• Doctrina Truman (1946), mediante la que Estados Unidos comprometía su poder militar y
su fuerza económica para la defensa de países contra el comunismo (entendido como el
“Mal”)
• John F. Kennedy expandió la “nueva frontera”, la comercial, a través de la “Alianza por el
progreso” en América Latina (1961)
• La multimillonaria inversión en fuerza militar (“Guerra de las galaxias”) de Ronald
Reagan.
• La Guerra del Golfo Pérsico en 1991
• La Guerra del Medio Oriente 2003 invasión a Irak y Afganistán
Aunque la doctrina del Destino Manifiesto se interpretó especialmente en relación con la
expansión territorial, después impulsó otro tipo de destinos: ser potencia mundial a nivel
industrial, tecnológico, económico, deportivo, así como en artes y ciencias.
Así pues Vemos que los Estados Unidos de Norteamérica desde muy inicio tuvo en claro un
visión de ser una nación que tenía que tener un peso en la historia y para ello sus hombres más
preclaros idearon este concepto de ser la nación escogida por Dios y para ello en el transcurso
del siglo XIX iniciaron un veloz desplazamiento de su frontera vertical se movió rápidamente
hacia el Oeste.
El territorio se formó hasta Missouri y luego se saltó hasta California hacia 1824. La parte
intermedia, las praderas y montañas ubicadas entre el río Mississipi y la Sierra Nevada, siguió
perteneciendo a algunas tribus indígenas hasta finales del siglo XIX. Louisiana, Florida, Arkansas
y Texas comenzaron a poblarse de estadounidenses en la década de 1830. La primera gran
avanzada hacia el Oeste (1824-1848) coincidió con un intenso flujo de migración de
europeos a los Estados Unidos. Entre 1830 y 1850 la población de los Estados Unidos casi
se duplicó, pasando de 12.9 a más de 23 millones.
Para finales del siglo XIX los Estados Unidos eran una nación cuyo territorio abarcaba de la
costa americana del océano Atlántico a las playas del Pacífico. Había expandido su poderío al
continente asiático, donde se apropió de las Filipinas tras la guerra Hispano-
norteamericana y se convirtió en una potencia colonial en el Caribe, aunque sólo ocupó la
isla de Puerto Rico. Obtuvo las islas de Hawai* y la península de Alaska. En Centroamérica,
aunque no invadió propiamente ningún país, ejerció enorme poder político y económico en la
región, al grado que en 1903 provocó que Panamá se independizara de Colombia para obtener
el control sobre la zona del Canal transoceánico. De este modo, Estados Unidos se consolidó
como una de las potencias económicas occidentales que definieron el siglo del Imperialismo
Acontinuación aqui en el presente articulo se trata de tener una visión historica de lo que ha sido
el expancionismo norteamericano, aqui se explica algunos alcances del famoso concepto del
Destino Manifiesto, eje central de la doctrina ideologica de la potencia Norteamericana, que se
evidencia desde el Siglo XIX hasta la actualidad, donde se tiene muy en claro el lugar que tiene
los Estados Unidos en el mundo y su relacion con los otros pueblos a lo largo de la historia
desde que fueron trece colonias hasta nuestros días, el Destino Manifiesto ha mantenido la
convicción nacional de que Dios eligió a los Estados Unidos para ser una potencia política
y económica, una nación superior.
La frase “Destino Manifiesto” apareció por primera vez en un artículo que escribió el periodista
John L. O’Sullivan, en 1845, en la revista Democratic Review de Nueva York. En su artículo,
O’Sullivan explicaba las razones de la necesaria expansión territorial de los Estados Unidos y
apoyaba la anexión de Texas. Decía: “el cumplimiento de nuestro destino manifiesto es
extendernos por todo el continente que nos ha sido asignado por la Providencia para el
desarrollo del gran experimento de libertad y autogobierno. Es un derecho como el que
tiene un árbol de obtener el aire y la tierra necesarios para el desarrollo pleno de sus
capacidades y el crecimiento que tiene como destino
Muy pronto, políticos y otros líderes de opinión aludieron al “Destino Manifiesto” para justificar
la expansión imperialista de los Estados Unidos. A través de la doctrina del Destino
Manifiesto se propagó la convicción de que la “misión” que Dios eligió para al pueblo
estadounidense era la de explorar y conquistar nuevas tierras, con el fin de llevar a todos
los rincones de Norteamérica la “luz” de la democracia, la libertad y la civilización. Esto
implicaba la creencia de que la república democrática era la forma de gobierno favorecida por
Dios. Aunque originalmente esta doctrina se oponía al uso de la violencia, desde 1840 se usó
para justificar el intervencionismo en la política de otros países, así como la expansión territorial
a través de la guerra, como sucedió en 1846-48 en el conflicto bélico que concluyó con la
anexión de más de la mitad de territorio mexicano.
Guerra Estados Unidos – México
Fue el Primer Gran paso para la Consolidación Guerra Estados Unidos - México
Texas proclamó su independencia en marzo de 1836 y fue una República independiente hasta
1845, cuando se anexó a los Estados Unidos. Esta anexión provocó la guerra entre México y
Estados Unidos, misma que terminó cuando se firmaron los Tratados de Guadalupe Hidalgo. En
1848 Estados Unidos se apropió de 2 millones 500 mil kilómetros cuadrados de territorio
mexicano, a cambio de los cuales se comprometió a pagar 15 millones de dólares. Este enorme
territorio comprendía los actuales estados de California, Nevada, Utah, la mayor parte de
Arizona, Nuevo México, Texas, así como partes de Kansas, Oklahoma, Colorado y Wyoming. En
1853 México se vio obligado a vender a los Estados Unidos el territorio de La Mesilla (con 110
mil kilómetros cuadrados), para que se construyera ahí una ruta de ferrocarril a California. Con
esta adquisición, la República transoceánica de los Estados Unidos quedó completa.
para ser un país transoceánico.
Texas proclamó su independencia en marzo de 1836 y fue una República independiente hasta
1845, cuando se anexó a los Estados Unidos. Esta anexión provocó la guerra entre México y
Estados Unidos, misma que terminó cuando se firmaron los Tratados de Guadalupe Hidalgo. En
1848 Estados Unidos se apropió de 2 millones 500 mil kilómetros cuadrados de territorio
mexicano, a cambio de los cuales se comprometió a pagar 15 millones de dólares. Este enorme
territorio comprendía los actuales estados de California, Nevada, Utah, la mayor parte de
Arizona, Nuevo México, Texas, así como partes de Kansas, Oklahoma, Colorado y Wyoming. En
1853 México se vio obligado a vender a los Estados Unidos el territorio de La Mesilla (con 110
mil kilómetros cuadrados), para que se construyera ahí una ruta de ferrocarril a California. Con
esta adquisición, la República transoceánica de los Estados Unidos quedó completa.
Otros Aspectos
Se ha dicho que el aspecto positivo de esta doctrina tiene que ver con el entusiasmo, la energía
y determinación que inspiró a los estadounidenses para explorar nuevas regiones,
especialmente en su migración hacia el oeste. También dio forma a uno de los componentes
esenciales del “sueño americano”: la idea de que se pueden obtener la libertad y la
independencia en un territorio de proporciones ilimitadas. En cambio, las consecuencias
negativas son de lamentar: la intolerancia hacia las formas de organización social y política de
otros pueblos, el despojo, exterminio y confinamiento de los pueblos indios de Norteamérica a
reservaciones, guerras injustas y discriminación.
Los principios que consolidaron la doctrina del Destino Manifiesto en el siglo XIX, se arraigaron
en la mentalidad de los norteamericanos durante la fundación de las colonias inglesas en
Norteamérica en el siglo XVII. Aunque la manifestación más evidente de esa doctrina
nacionalista se expresa en el campo de la política, su esencia es religiosa. Los ingleses que
colonizaron la costa Este del territorio que sería Estados Unidos estaban profundamente
inmersos en su religión (el puritanismo, una de las ramas del protestantismo) y su vida
comunitaria y política se desarrollaron en un estricto apego a la ley moral, con el
convencimiento de que el Nuevo Mundo era la “Tierra Prometida” donde cumplirían la
misión encomendada por Dios. Así, en el periodo colonial se encuentra el punto de partida
del ideal estadounidense de ser un “pueblo elegido” entre los demás del mundo.
Este sentimiento de “excepcionalidad virtuosa” fue uno de los rasgos de identidad que alentó
a los colonos a buscar su independencia de Inglaterra en 1776. Desde su origen como nación, el
sueño de Estados Unidos ha sido encontrar la perfección social a través de un triple
compromiso: con la divinidad (cumpliendo con el destino impuesto por Dios), con la religión
(observando una moral intachable) y con la comunidad (defendiendo su libertad, su
seguridad y su propiedad). A lo largo de la historia, los políticos estadounidenses han
invocado el favor de Dios en sus discursos y han insistido en la “misión trascendente”
que la nación tiene que cumplir.
La imagen nacional que los Estados Unidos tienen de sí mismos, como protectores y
defensores de la legalidad, la libertad y la democracia, se funda en la creencia de que
poseen una superioridad moral (porque son el “pueblo elegido”). Esta suposición les ha
permitido justificar su intromisión en los asuntos internos de otros pueblos (que no son
“elegidos de Dios”) o de plano la violencia contra ellos. La primera actitud
intervencionista inspirada por el espíritu del “Destino Manifiesto” fue la obsesión de los
colonos ingleses por desplazar de sus tierras (o bien exterminar) a los indígenas
norteamericanos. En cuanto a su relación con otras naciones, Estados Unidos tiende a manejar
sus relaciones exteriores como si se tratara de una cruzada moral. Generalmente justifica sus
acciones con dos argumentos, ya sea el de la“nación fuerte que protege a la débil”, como
pueden constatar la gran mayoría de las naciones americanas; o bien el de “la lucha contra el
Mal para defender la libertad y seguridad del mundo”, como actualmente alega respecto de su
invasión de Afganistán y el medio oriente, ese concepto es la matriz de su política exterior y su
inspiración geopolítica, asegurar el equilibrio de poder en el mundo.
La historia de las relaciones exteriores de los Estados Unidos provee infinidad de ejemplos de la
política del “Destino Manifiesto”. Algunos de ellos son:
• Doctrina Monroe (1821) declaró que ninguna nación americana independiente debía
volver a ser sometida por Europa y que Estados Unidos intervendría si consideraba que
se afectaban sus intereses
• Anexión de Texas (1845), guerra con México (1846-48) y anexión de más de la mitad de
su territorio
• Guerra con España para libertar a Cuba (1898)
• Construcción del Canal de Panamá (1901-1914)
• Doctrina Truman (1946), mediante la que Estados Unidos comprometía su poder militar y
su fuerza económica para la defensa de países contra el comunismo (entendido como el
“Mal”)
• John F. Kennedy expandió la “nueva frontera”, la comercial, a través de la “Alianza por el
progreso” en América Latina (1961)
• La multimillonaria inversión en fuerza militar (“Guerra de las galaxias”) de Ronald
Reagan.
• La Guerra del Golfo Pérsico en 1991
• La Guerra del Medio Oriente 2003 invasión a Irak y Afganistán
Aunque la doctrina del Destino Manifiesto se interpretó especialmente en relación con la
expansión territorial, después impulsó otro tipo de destinos: ser potencia mundial a nivel
industrial, tecnológico, económico, deportivo, así como en artes y ciencias.
Así pues Vemos que los Estados Unidos de Norteamérica desde muy inicio tuvo en claro un
visión de ser una nación que tenía que tener un peso en la historia y para ello sus hombres más
preclaros idearon este concepto de ser la nación escogida por Dios y para ello en el transcurso
del siglo XIX iniciaron un veloz desplazamiento de su frontera vertical se movió rápidamente
hacia el Oeste.
El territorio se formó hasta Missouri y luego se saltó hasta California hacia 1824. La parte
intermedia, las praderas y montañas ubicadas entre el río Mississipi y la Sierra Nevada, siguió
perteneciendo a algunas tribus indígenas hasta finales del siglo XIX. Louisiana, Florida, Arkansas
y Texas comenzaron a poblarse de estadounidenses en la década de 1830. La primera gran
avanzada hacia el Oeste (1824-1848) coincidió con un intenso flujo de migración de
europeos a los Estados Unidos. Entre 1830 y 1850 la población de los Estados Unidos casi
se duplicó, pasando de 12.9 a más de 23 millones.
Para finales del siglo XIX los Estados Unidos eran una nación cuyo territorio abarcaba de la
costa americana del océano Atlántico a las playas del Pacífico. Había expandido su poderío al
continente asiático, donde se apropió de las Filipinas tras la guerra Hispano-
norteamericana y se convirtió en una potencia colonial en el Caribe, aunque sólo ocupó la
isla de Puerto Rico. Obtuvo las islas de Hawai* y la península de Alaska. En Centroamérica,
aunque no invadió propiamente ningún país, ejerció enorme poder político y económico en la
región, al grado que en 1903 provocó que Panamá se independizara de Colombia para obtener
el control sobre la zona del Canal transoceánico. De este modo, Estados Unidos se consolidó
como una de las potencias económicas occidentales que definieron el siglo del Imperialismo
II - GEOPOLITICA E PODER
Geopolítica,. Inteligência e. Paradiplomacia na Estratégia das. Relações Internacionais dos Movimentos Sociais.
ACILINO RIBEIRO
[PDF] - ARTIGO 1
xa.yimg.com/kq/groups/16799452/.../name/ARTIGO+1-+Geopolitica
O BRASIL E SEU 'ENTORNO ESTRATÉGICO', NA PRIMEIRA DÉCADA DO SÉCULO XXI
José Luís Fiori
Foi obtido no site: http://www.poderglobal.net/#
Poder, geopolítica e desenvolvimento
Valor Econômico
Por José Luís Fiori
Em última instância, os processos de desenvolvimento econômico também são lutas de dominação". Max Weber, Escritos Políticos I, Folios Ediciones, México, 1982, p:18
O capitalismo nasceu associado com um sistema de poder específico, o sistema interestatal europeu. E desde o início foi um dos principais instrumentos de poder dos Estados que se impuseram, dentro e fora da Europa, transformando-se nas primeiras "grandes potências" do sistema. Durante os cinco séculos seguintes, o desenvolvimento dessas "grandes potências" exerceu um efeito gravitacional e expansivo sobre todo o "sistema interestatal capitalista", que foi ampliando suas fronteiras de maneira contínua, como se fosse um "universo em expansão". Dentro desse "universo", foram sendo criados e incorporados sucessivamente novos Estados e economias nacionais que competem e se hierarquizam dinamicamente, podendo ser classificados em três grandes grupos:
1- Num primeiro grupo, situam-se os Estados e as economias nacionais que adotam estratégias de integração direta, com relação às potências líderes. Fala-se em "desenvolvimento a convite" ou "associado" para referir-se a esses países com acesso privilegiado aos mercados e aos capitais das grandes potências, obtidos em troca da submissão à sua política externa e à sua estratégia militar global. Como foi o caso do Canadá, Austrália e Nova Zelândia, antes e depois de sua independência, e também da Alemanha, Japão e Coreia, depois da Segunda Guerra Mundial, na condição de protetorados militares dos EUA.
Quem liderou a expansão vitoriosa do capitalismo foram sempre os Estados "grandes predadores"
2- Em um segundo grupo se situam os países que questionam a hierarquia internacional e adotam estratégias de mudança do status quo e de crescimento acelerado, com o objetivo de mudar sua participação na distribuição internacional do poder e da riqueza. São projetos nacionais que podem ser bloqueados, e podem não conseguir superar as "barreiras à entrada" do "núcleo central", impostas pelas grandes potências. Mas que também podem ter sucesso e dar origem a uma nova potência regional ou global, como foi o caso dos EUA, na primeira metade do século XX e da China, neste início do século XXI.
3- Por fim, no terceiro grupo se incluem todos os demais países do "andar de baixo" ou a "periferia" política e econômica do sistema. São Estados e economias que podem ter fortes ciclos de crescimento e ter indústrias, mas que não têm condições ou não se propõem a desafiar a ordem estabelecida, aceitam sua posição política subalterna dentro do sistema internacional de poder e se mantêm como fornecedores de commodities e bens industriais específicos, como é o caso do Chile, Colômbia e Peru, entre muitos outros.
Na outra ponta do sistema, o pequeno grupo das grandes potências "ganhadoras" também é hierarquizado e reproduz internamente - num outro patamar de poder - a mesma dinâmica competitiva de todo esse universo. Mas mesmo assim, é possível identificar duas grandes regularidades na sua trajetória "vitoriosa":
1) todos enfrentaram, em algum momento, invasões externas, guerras civis ou rebeliões sociais, e esses acontecimentos contribuíram, de uma forma ou outra, para o fortalecimento de suas identidades nacionais e para a mobilização de suas sociedades em torno de grandes projetos de defesa e/ou de projeção internacional. Por estarem situados dentro de tabuleiros geopolíticos altamente competitivos, estes países também compartiram um sentimento constante de "cerco" e de ameaça externa, que explica a centralidade dos seus sistemas de defesa na definição de suas políticas de desenvolvimento e industrialização, e sua permanente preocupação com a conquista e o controle monopólico das "tecnologias sensíveis", que foram decisivas para o seu sucesso e de toda a sua economia nacional.
2) Todos seus Estados e seus grandes capitais privados "desrespeitaram" sistematicamente as regras e instituições competitivas de mercado que devem ser obedecidas obrigatoriamente pelos que estão situados nos degraus inferiores do sistema. Nesse ponto se pode formular uma lei quase universal: quem liderou a expansão vitoriosa do capitalismo foram sempre os Estados e os capitais que souberam navegar com sucesso na contramão das "leis do mercado", ou seja, os "grandes predadores" que conseguem manter e renovar permanentemente o seu controle monopólico das "inovações" e dos "lucros extraordinários".
Esse caminho dos "ganhadores" está aberto para todos os países? Não, porque a energia que move esse sistema vem exatamente dessa luta contínua, entre Estados, economias nacionais e capitais privados, pela conquista de posições e de monopólios que são desiguais, por definição. Mesmo assim, alguns Estados podem modificar sua posição relativa dentro desse sistema, dependendo do seu território, dos seus recursos e da sua coesão social. E da existência de uma elite política capaz de assumir as grandes pressões sociais e o aumento dos desafios e provocações externas, como sinal de amadurecimento de um país que já está preparado para sustentar uma estratégia de longo prazo, de questionamento do status quo internacional e de desenvolvimento com mobilidade social generalizada.
José Luís Fiori, professor titular de economia política internacional da UFRJ, é autor do livro "O Poder Global", da Editora Boitempo, e coordenador do grupo de pesquisa do CNPQ/UFRJ "O Poder Global e a Geopolítica do Capitalismo". Escreve mensalmente às quartas-feiras.
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Geopolítica e ética internacional
Por José Luís Fiori
"Eu via no universo cristão uma leviandade com relação à guerra que teria deixado envergonhadas as próprias nações bárbaras".
Hugo Grotius, "O Direito da Guerra e da Paz", 1625
Por definição, todo poder territorial é limitado e expansivo. Envolve a existência de fronteiras, e de algum tipo de "inimigo externo" ou "bárbaro", de quem se defender e a quem "conquistar" e "civilizar". Por isto, os projetos expansivos de poder sempre se revestem de algum sentido de missão, e adotam algum sentido moral e messiânico. E toda conquista vitoriosa produz e impõe algum tipo de discurso e de ordem ética "supranacional". Em muitos casos, estes poderes expansivos se associaram com religiões que se propunham ajudar na conquista messiânica e na "conversão" dos povos bárbaros. E o mesmo aconteceu com o colonialismo europeu, até o momento em que adotou a retórica laica e universalista do "direito natural", e mais recentemente, dos "direitos humanos" e das "intervenções humanitárias".
Na hora do nascimento dos atuais Estados europeus, e do início de sua expansão conquistadora ao redor do mundo, o jurista holandês, Hugo Grotius (1583-1645)1 - que foi um dos pais do direito internacional moderno - identificou a contradição fundamental do "universalismo ético" dos europeus. Grotius acreditava na existência do "direito natural, comum a todos os povos, tão imutável que não poderia ser mudado nem pelo próprio Deus". Mas ao mesmo tempo, reconhecia que num sistema internacional formado por muitos Estados, com identidades, culturas e interesses diferentes, sempre existiriam muitas "inocências subjetivas", frente a uma mesma "justiça objetiva". E nestas circunstâncias, não haveria como arbitrar "objetivamente" quem teria a razão, nem como decidir sobre a legitimidade de uma guerra declarada entre dois povos que reivindicassem uma interpretação diferente dos mesmos fatos e direitos.
A questão do respeito aos direitos humanos é o novo
princípio ético legitimador das velhas "guerras civilizatórias"
Por isto, apesar de Grotius considerar que a "segurança" e a "paz" eram direitos inalienáveis de todos os homens e de todos os povos, também considerava que a guerra era um recurso inevitável, num sistema politico com muitos Estados competitivos entre si. Mesmo assim, Grotius nunca imaginou a possibilidade de uma guerra que tivesse como objetivo promover ou universalizar o próprio "direito natural dos homens". Para ele, os direitos humanos e a fé religiosa eram uma conquista de cada homem e de cada povo em particular, e uma guerra feita em nome dos "direitos naturais" seria uma contradição em si mesma, ou seria uma "guerra de conversão",
como as Cruzadas, que ele abominava, apesar de ser um cristão fervoroso.
Quase dois séculos depois, o filosofo iluminista alemão, Immanuel Kant (1724-1804)2, reconheceu a existência desta mesma contradição, no caminho do seu projeto de uma "paz perpétua" universal. Mas Kant acreditava na superioridade dos europeus e defendia sua "missão civilizatória" no mundo. Por isso, propunha seu projeto de paz, mas considerava que primeiro os europeus teriam que converter o resto do "gênero humano" à mesma "ética internacional civilizada" que eles haviam criado. Para Kant, portanto, "no grau de cultura em que ainda se encontrava o gênero humano, a guerra era um meio inevitável para estender a civilização, e só depois que a cultura tivesse se desenvolvido (Deus sabe quando) seria saudável e possível uma paz perpétua".
Neste início do século XXI, a contradição identificada por Grotius e Kant adquiriu muito mais força e extensão, com a multiplicação do número de Estados do sistema mundial e com o fim da bipolaridade ideológica da Guerra Fria. Depois de 1991, muitos acreditaram na vitória do "cosmopolitismo europeu", mas já no início do século XXI, todos perceberam que o sistema mundial segue sendo o mesmo, só que ficou ainda mais complexo e heterogêneo, do ponto de vista ético, cultural e religioso. E tudo indica que neste novo universo ampliado e sem ameaça comunista, as grandes potências ocidentais decidiram transformar a questão do "respeito aos direitos humanos", no novo grande princípio ético legitimador das suas velhas "guerras civilizatórias".
Chama atenção, neste sentido, que todas estas guerras das duas últimas décadas tenham sido lideradas pelos mesmos países que compõem - simultaneamente - o "diretório militar" do mundo ocidental, e seus pequeno "círculo de criadores da moral internacional"3: Estados Unidos, Inglaterra e França. Ou seja, contra toda boa norma jurídica, neste momento da história internacional, os mesmos três países que formulam a ética, os direitos e as regras são os que julgam, condenam e punem quem eles consideram culpado, o que em geral já está definido de antemão. Com ou sem o consentimento do resto do "gênero humano", que ainda não foi "civilizado", e que não tem poder para dizer: basta!
1- Hugo Grotius, 2005, O direito da guerra e da paz, Vol I, Editora Unijui, Ijui.
2- Immanuel Kant, 2008, " A paz perpétua, um projeto filosófico", Lusofia; Press, Covilhã.
3- Edward H.Carr, 2001, "The twenty years crisis, 1919-1939", Harper Collins, London.
José Luís Fiori professor titular de economia política internacional da UFRJ, é autor do livro "O Poder Global", da Editora Boitempo e coordenador do grupo de pesquisa do CNPQ/UFRJ "O Poder Global e a Geopolítica do Capitalismo". Escreve mensalmente às quartas-feiras.
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Soberanía, naciones y la crisis del desarme
Oriol Costa · · · · · 09/06/13
http://www.sinpermiso.info/textos/index.php?id=6043
1. Historizar al máximo
“Historizar al máximo, para dejar el menor espacio posible a lo trascendente”, nos recomendaron
los Wu Ming. No se nos antoja ninguna otra forma racional de abordar el debate sobre la
soberanía. Pero historizar no en el sentido de proyectar hacia el pasado las nociones románticas
de la nación imaginada y perseguir los orígenes últimos de tal o cual proyecto nacional. Eso es lo
contrario de la historia. Resulta ridículo escuchar a Artur Mas, Esperanza Aguirre y otros
nacional-soberanistas afirmar la existencia virtualmente inmemorial de sus respectivas naciones.
Entender la soberanía históricamente quiere decir entender su papel como rótula (como una de
las rótulas) de la articulación entre mercados, estados y sociedades en los últimos cuatro siglos
(esto es: desde bastante antes de la aparición de las naciones). Entender que proyectos de
soberanía distintos han correspondido a proyectos distintos de articulación de lo público, lo
privado y lo social. Sin ir más lejos, la creación de los estados nación soberano no respondió
sino al proyecto político de la burguesía (“que ha desempeñado, en el transcurso de la historia,
un papel verdaderamente revolucionario”) de crear (1) mercados de escala estatal que
permitieran el desarrollo del capitalismo y (2) mecanismos de legitimación de su (nuevo) poder
político de clase. En breve: cada proyecto de soberanía responde a una determinada base
material de relaciones socio-económicas y a una cierta idea sobre qué hacer con esa base.
En este sentido, lo primero que sorprende es la estabilidad del debate entre proyectos soberanos
en España. Un debate que se quiere polarizado, desde hace décadas, entre una soberanía
española pretendidamente transhistórica y unas soberanías catalana, vasca, gallega…
igualmente transhistóricas. Como si durante este tiempo no hubiera sucedido nada con la
relación entre estado, mercado y sociedad. Como si la articulación entre estos elementos pudiera
gobernarse desde el mismo lugar de siempre, a pesar de la integración de las economías en la
UE, que convierte las fronteras estatales en poco más que irrelevantes para los mercados, a
pesar de la desaparición de las monedas estatales en la Unión Económica y Monetaria, a pesar
de la globalización neoliberal que ha empequeñecido a los estados europeos y a pesar de la
financiarización del capitalismo contemporáneo. En forma de preguntas: ¿qué tipo de articulación
entre lo público, lo privado y lo social pueden ofrecer los proyectos soberanos en liza? ¿A qué
base material responde el proyecto de simular la soberanía Española? ¿Y el de reclamar a un
estado ya no verdaderamente soberano la cesión de la soberanía a uno de sus componentes?
¿Cuál sería la capacidad de esos dispositivos para abordar el gobierno de la economía? Porque
al final se trata de eso: ¿Cuál es el papel histórico, esto es, en el conflicto entre bloques
históricos distintos, entre intereses sociales contrapuestos, de cualquiera de estos proyectos de
soberanía?
El desarme de la democracia, esta es la respuesta. El desarme de la democracia ante una
oligarquía varios órdenes de magnitud más poderosa que cualquiera de estas micro-soberanías,
que o no serían soberanías populares o lo serían únicamente de boquilla, vencidas y
desarmadas. La soberanía española y la catalana? Ficciones.
2. La crisis del Desarme
El Desarme se está expresando de una manera muy específica en la zona euro desde 2008. No
es casualidad que la crisis desatada por el capitalismo en 2007 haya convertido justamente la
Unión Económica y Monetaria en una suerte de cámara de eco desde la que la depresión
amenaza con desestabilizar el conjunto de la economía mundial. El Desarme hizo la UEM
particularmente vulnerable a la crisis y está marcando la forma en que ésta la gestiona, esto es,
la está empujando a agravarla y a distribuir injustamente sus costes.
Empecemos por la prehistoria de la crisis, marcada por el enorme superávit comercial alemán,
cuya contraparte era el no menos impresionante déficit de la periferia de la zona euro. La
existencia de una multitud de soberanías económicas en el seno de una única zona monetaria
hizo posible e incentivó el dumping social alemán como estrategia de competición contra los
demás estados de la UE. Emprendida con mano de hierro por el gobierno Schröder, la
precarización de las condiciones de vida y trabajo en Alemania consiguió mantener baja la
inflación y aumentar la competitividad de sus exportaciones. La multiplicidad de soberanías
económicas dentro de la UEM incentivó también la llegada de dinero barato a los países de la
periferia del euro, aumentando su inflación y destrozando su balanza comercial. El déficit se
financió a crédito, claro. Esa fue la forma que tomó el reciclaje del superávit alemán: vuelta del
dinero hacia el Sur en forma de préstamos. A decir verdad, la UE pudo haber puesto en el
marcha entonces en Diálogo Macroeconómico para abordar el diferencial de inflación, pero la
estrategia contaba con dos problemas de fondo (1) en realidad el diferencial de inflación no era
más que el producto de la inexistencia de políticas fiscales, laborales y sociales europeas, que
había incentivado la carrera precarizadora entre estados; y (2) Alemania decidió ejercer su
soberanía e impedir la puesta en funcionamiento de los ya limitados mecanismos con los que
contaba la Unión. Desarmados ante los efectos de la competición entre territorios. Y de esos
déficits estos lodos: la crisis financiera de desencadenó en Wall Street pero llegó a la UEM como
la mecha llega al polvorín.
La forma en la que la UE está gestionando la crisis es también un producto del Desarme.
Cuando la unidad económica estructuralmente deficitaria es un estado plenamente soberano
(con todos los atributos de la soberanía), su gobierno cuenta con algunos instrumentos para
equilibrar su balanza comercial. Puede devaluar su moneda para ganar competitividad en las
exportaciones o puede usar su banco central como prestador de último recurso, por ejemplo.
Desde luego, estas opciones no están ausentes de problemas. Para empezar, la devaluación
compromete el superávit de las economías exportadoras, que por tanto tienen incentivos para
reenviar una parte de éste hacia sus clientes (deficitarios) con el fin de financiar su capacidad de
consumo (y por tanto sus propias exportaciones). Esto es exactamente lo que hicieron los EEUU
con Europa y Japón entre 1945 y la crisis del sistema de Bretton Woods y lo que hizo Europa y
Japón con EEUU desde entonces hasta 2008. La forma en la que se articulen estos mecanismos
de reciclaje del superávit condiciona, en buena medida, las relaciones de poder entre bloques
políticos y económicos, así como la forma más o menos progresiva de las relaciones entre
capital y trabajo, como muestra Varoufakis. En segundo lugar, un pequeño detalle que parece
haber pasado desapercibido para el comentariado local: los estados de la zona euro decidieron
hace tiempo dejar de ser soberanos, de manera que no tienen a su disposición ninguna de las
opciones de política monetaria apuntadas más arriba. Desde el punto de vista monetario, los
estados de la UEM no son más que estados federados.
Y sin embargo, se han mostrado hasta ahora celosísimos en la conservación de sus soberanías
fiscales. De forma que en la UE no se dan los mecanismos de reciclaje de superávits propios de
las federaciones, codificados y automáticos: sistemas compartidos de seguridad social,
prestaciones de desempleo que dependan de la caja común (de una haciendo federal),
inversiones federales en políticas industriales. En breve: la zona euro es el peor híbrido posible.
Los estados han cedido parte de su soberanía para crear una gran zona monetaria pero no han
permitido la creación de una unión de transferencia, manteniendo sus haciendas separadas.
Nuestra moneda no tiene los instrumentos de la política fiscal y nuestra hacienda no tiene los
instrumentos de la política monetaria. El Desarme de la soberanía popular en nombre de las
soberanías nacionales.
3. Tres opciones ante la dislocación de la soberanía
Se abren pues tres opciones mutuamente excluyentes, ante esta dislocación de la soberanía.
-En primer lugar, la fantasía de la renacionalización: devolver a los estados (actuales o futuros,
después de la división de los actuales) la soberanía monetaria. Romper la zona euro. Los costes
de esta opción son literalmente incalculables, económica, social y políticamente. A la rotura de la
zona euro seguiría sin duda la desaparición de la UE. Los efectos sobre las clases populares de
la periferia de la zona euro (que parten ya de unos niveles de sufrimiento extremos) serían
devastadores. Y sobre todo, a medio plazo nos dejaría impotentes ante la globalización
oligárquica. Los estados europeos simplemente ya no están en condiciones de jugar según las
normas del mundo westfaliano que ellos mismos crearon.
-El derecho a decidir Europa: trasladar la soberanía fiscal de los estados a la UE. El programa de
mínimos de esta opción se articularía alrededor de la construcción de una hacienda federal con
capacidad para albergar algunos estabilizadores automáticos (presentaciones por desempleo,
por ejemplo), hacer políticas de gasto y endeudarse en nombre de todos. Las dos implicaciones
de esta opción deberían ser claras para todos: (1) los contribuyentes netos deben comprender
que pagaran a través de la fiscalidad ordinaria (no a través de acuerdos bilaterales, que entregan
todo el poder a los ricos) para mantener la solvencia del conjunto de la zona euro; y (2) todos los
participantes en la UEM deben comprender que van a perder soberanía nacional a favor del
derecho a decidir Europa.
-El mantenimiento de la situación actual, en la que la periferia mantiene la ficción de la solvencia
a base de nuevos créditos proporcionados por unos acreedores que tienen por tanto la
capacidad para imponerles unilateralmente las políticas que más convienen a sus intereses
económicos (recuperar el dinero) y políticos (los propios de la derecha neoliberal europea). Esta
opción es ya incompatible con el mantenimiento de nuestros derechos sociales. Y a medio plazo
resulta incompatible con la democracia, como toda forma de imposición de las políticas
económicas. Estamos viendo ya la desnaturalización de los procesos electorales en Grecia e
Italia y una generalizada vuelta de la tuerca represora. Y a la inversa, también vemos los efectos
que sobre la capacidad de los estados para financiarse tiene la terquedad con la que los
ciudadanos muestran en las urnas su rechazo a la austeridad.
Esta es la verdadera batalla por la soberanía: la que se da entre estas tres opciones. Y es una
batalla que contrapone la soberanía popular con la soberanía nacional, aliada de los mercados.
Y en esa batalla crucial, los nacional-soberanistas catalanes y españoles comparten trinchera.
Para decirlo con el trilema de Rodrik, debemos escoger dos de los siguientes tres elementos: la
soberanía nacional, una economía europea integrada y la democracia. Los tres a la vez son
imposibles. Los estados soberanos no serán capaces de gestionar una economía europea
integrada más allá de la aplicación del diktat de los mercados. Como se está viendo con la crisis
del Desarme.
Oriol Costa es profesor de relaciones internacionales en la UAB.
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subvención pública ni privada, y su existencia sólo es posible gracias al trabajo voluntario
de sus colaboradores y a las donaciones altruistas de sus lectores. Si le ha interesado
este artículo, considere la posibilidad de contribuir al desarrollo de este proyecto político-
cultural realizando una DONACIÓN o haciendo una SUSCRIPCIÓN a la REVISTA
SEMESTRAL impresa
www.sinpermiso.info, 7 junio 2013
Fracasso fiscal nos EUA obriga a trabalhar para um
mundo des-Americanizado 13/10/2013, Liu Chang, Xinhuanet, China
http://news.xinhuanet.com/english/indepth/2013-10/13/c_132794246.htm
PEQUIM (Xinhua) – Com deputados e senadores norte-americanos
dos dois partidos ainda às tontas de um lado para outro entre a Casa
Branca e o Capitólio, sem chegar a acordo viável que devolva a
normalidade ao corpo político que tanto louvam, parece ser boa hora
para que o mundo, desentendido, comece a considerar a construção
de um mundo des-Americanizado.
Ao emergir do mar de sangue que foi a 2ª Guerra Mundial como nação
mais poderosa do mundo, os EUA, desde então, tentam construir um
império global, impondo uma ordem pós-guerra, alimentando a
recuperação na Europa e estimulando a mudança de regime em
nações que os EUA vejam como pouco amigas de Washington.
Com sua aparentemente invencível força econômica e militar, os EUA
declararam que têm interesse nacional vital de proteger, em quase
todos os cantos do globo, e habituaram-se a imiscuírem-se nos
negócios de outros países e regiões distantes de suas praias.
Ao mesmo tempo, o governo dos EUA muito se tem esforçado para
mostrar-se ao mundo como nação que se regeria por altos princípios
morais, apesar de, clandestinamente, atrever-se a torturar prisioneiros
de guerra, massacrar civis em ataques de drones e espionar líderes
mundiais.
Sob o que se conhece como uma Pax-Americana, não se vê mundo
no qual os EUA ajudem a diminuir a violência e os conflitos, a reduzir
as populações de pobres e deslocados, e a criar paz verdadeira e
duradoura.
Sobretudo, em vez de honrar seus deveres como potência liderante
responsável, uma Washington interessada só em si mesma abusa de
seu status de superpotência e gera caos ainda mais profundo no
planeta, disseminando riscos financeiros para todo o mundo,
instigando tensões regionais e disputas territoriais, e guerreando
guerras ilegítimas, sob a manto de deslavadas mentiras.
Resultado disso, o mundo ainda se debate para safar-se de um
desastre econômico gerado pela voracidade das elites de Wall Street,
enquanto os bombardeios e as matanças já se tornaram rotina
virtualmente diária no Iraque, anos depois de Washington ter
declarado que teria libertado o país de um governo tirânico.
Mais recentemente, a estagnação cíclica em Washington, que não
consegue construir solução bipartidária viável em torno de um
orçamento, nem consegue aprovar um aumento no teto de suas
dívidas, põe outra vez sob ameaça os gigantescos investimentos em
dólar de muitas nações e em agonia, a comunidade internacional.
Esses dias alarmantes, quando o destino de outros jazem nas mãos
de uma nação hipócrita têm de terminar. E uma nova ordem mundial
deve ser criada, segundo a qual todas as nações, grandes ou
pequenas, pobres ou ricas, passem a ter respeitados os seus
interesses chaves, respeitadas e protegidas em pés de igualdade.
Para tanto, é preciso que se fixem várias pedras angulares, sobre as
quais se venha a apoiar um mundo des-Americanizado.
Para começar, todas as nações têm de respeitar os princípios básicos
da lei internacional, incluído o respeito à soberania, sem se imiscuírem
em assuntos domésticos de outros.
Além disso, a autoridade da ONU, para encaminhar soluções
nos hotspots globais, tem de ser reconhecida. Significa que ninguém
tem direito de empreender qualquer modalidade de ação militar contra
outros, sem mandado da ONU.
E o sistema financeiro mundial também tem de passar por reformas
substanciais.
As economias de mercado em desenvolvimento e emergentes têm de
ter voz mais ativa nas principais instituições financeiras internacionais,
inclusive no Banco Mundial e no Fundo Monetário Internacional, para
que essas instituições possam melhor refletir as transformações pelas
quais passa a paisagem econômica e política global.
E também se deve incluir, como item chave de uma efetiva reforma, a
criação de uma nova moeda internacional de reserva, a ser criada
para substituir o dólar norte-americano hoje dominante, para que a
comunidade internacional possa viver permanentemente preservada
dos respingos desse sempre crescente tumulto político doméstico nos
EUA.
Evidentemente, o objetivo dessas mudanças não é alijar
completamente os EUA, o que é impossível. Em vez disso, trata-se de
encorajar Washington para que desempenhe papel mais construtivo,
nos assuntos globais.
Dentre várias opções, bom será que os políticos norte-americanos
comecem por encontrar saída que ponha fim ao pernicioso impasse
atual.
***********************************************
O nascimento do mundo “des-
Americanizado”
15/10/2013, Pepe Escobar, Asia Times Online
http://www.atimes.com/atimes/World/WOR-02-151013.html
É isso. A China decidiu que “basta!” Tirou as luvas (diplomáticas). É
hora de construir um mundo “des-Americanizado”. É hora de “uma
nova moeda internacional de reserva” substituir o dólar norte-
americano.
Está tudo lá, escrito, em editorial da rede Xinhua, saído diretamente
da boca do dragão. E ainda estamos em 2013. Apertem os cintos –
especialmente as elites em Washington. Haverá fortes turbulências.
Longe vão os dias de Deng Xiaoping de “manter-se discreto”. O
editorial de Xinhua mostra, em formato sintético, a gota d’água que fez
transbordar o copo do dragão: o atual ‘trancamento’ (shutdown) nos
EUA. Depois da crise financeira provocada por Wall Street, depois da
guerra do Iraque, um mundo “desentendido”, não só a China, quer
mudança.
Esse parágrafo não poderia ser mais explícito:
“Sobretudo, em vez de honrar seus deveres como potência
liderante responsável, uma Washington interessada só em si
mesma abusa de seu status de superpotência e gera caos
ainda mais profundo no planeta, disseminando riscos
financeiros para todo o mundo, instigando tensões regionais e
disputas territoriais, e guerreando guerras ilegítimas, sob o
manto de deslavadas mentiras.”[1]
A solução, para Pequim, é “des-Americanizar” a atual equação
geopolítica – a começar por dar voz mais ativa no FMI e no Banco
Mundial a economias emergentes e ao mundo em desenvolvimento, o
que deve levar à “criação de uma nova moeda internacional de
reserva, a ser criada para substituir o dólar norte-americano hoje
dominante”.
Observe-se que Pequim não advoga a sumária extinção do sistema de
Bretton Woods – não, pelo menos, já; quer, isso sim, mais poder para
decidir. Parece razoável, se se considera que a China tem peso
apenas ligeiramente superior ao da Itália, no FMI. A “reforma” do FMI
– ou coisa parecida – está em andamento desde 2010, mas
Washington, como seria de esperar, vetou todas as alterações
substanciais, até agora.
Quanto ao movimento para afastar-se do dólar norte-americano,
também já está em andamento, com graus variados de velocidade,
especialmente no que diga respeito ao comércio entre os países
BRICS, as potências emergentes (Brasil, Rússia, Índia, China e África
do Sul), que já está sendo feito, hoje, predominantemente, nas
respectivas moedas. O dólar norte-americano está lentamente, mas
firmemente, sendo substituído por uma cesta de moedas.
A “des-Americanização” também já está em curso. Considere-se, por
exemplo, a ofensiva de charme dos chineses pelo Sudeste Asiático,
que está acentuadamente começando a inclinar-se na direção de mais
ação com principal parceiro econômico daqueles países, a China. O
presidente Xi Jinping da China, fechou vários negócios com a
Indonésia, a Malásia e também com a Austrália, apenas umas poucas
semanas depois de ter fechado outros vários negócios com os ‘-stões’
da Ásia Central.
A empolgação chinesa com promover a Rota da Seda de Ferro
alcançou nível de febre, com as ações das empresas chinesas de
estradas de ferro subindo à estratosfera, ante o projeto de uma
ferrovia de trens de alta velocidade até e através da Tailândia já
virando realidade. No Vietnã, o premiê chinês Li Keqiang selou um
entendimento segundo o qual querelas territoriais entre dois países no
Mar do Sul da China não interferirão com mais e novos negócios.
Pode-se chamar de “pivotear-se” para a Ásia.
Todos a bordo do petroyuan
Todos sabem que Pequim possui himalaias de bônus do Tesouro dos
EUA – cortesia daqueles massivos superávits acumulados ao longo
dos últimos 30 anos, mais uma política oficial de manter lenta, mas
segura, a apreciação do yuan.
E Pequim, simultaneamente, age. O yuan está também lenta, mas em
segurança, se tornando mais conversível nos mercados
internacionais. (Semana passada, o Banco Central Europeu e o Banco
do Povo da China firmaram acordo para uma troca de moeda
(orig. swap) de US$45-$57 bilhões, que aumentará a força
internacional do yuan e melhorará seu acesso ao comércio financeiro
na área do euro.)
A data não oficial para a total conversibilidade do yuan cairá em algum
ponde entre 2017 e 2020. A meta é clara: afastar-se de qualquer
respingo da dívida dos EUA, o que implica que, no longo prazo,
Pequim está-se afastando desse mercado – e, assim, tornando muito
mais caro, para os EUA, tomarem empréstimos. A liderança coletiva
em Pequim já fechou posição sobre isso e está agindo nessa direção.
O movimento na direção da plena conversibilidade do yuan é tão
inexorável quanto o movimento dos BRICS na direção de uma cesta
de moedas que, progressivamente, substituirá o dólar norte-americano
como moeda de reserva. Até lá, mais adiante nessa estrada,
materializa-se o evento cataclísmico real: o advento do petroyuan –
destinado a ultrapassar o petrodólar, tão logo as petromonarquias do
Golfo vejam de que lado ventam os ventos históricos. Então, o bate-
bola geopolítico será outro, completamente diferente.
Pode ser processo longo, mas é certo que o famoso conjunto de
instruções de Deng Xiaoping está sendo progressivamente
descartado: “Observe com calma; proteja sua posição; lide com calma,
com as questões; esconda nossas capacidades e aposte no nosso
tempo; seja discreto; e jamais reclame a liderança.”
Uma mistura de cautela e escamoteamento, baseada na confiança
que os chineses têm na história, e levando em consideração uma
grave ambição de longo prazo – era Sun Tzu clássico. Até aqui,
Pequim andou devagar; deixando que o adversário cometa erros fatais
(e que coleção de erros de multi-trilhões de dólares...); e acumulando
“capital”.
Agora, chegou a hora de capitalizar. Em 2009, depois da crise
financeira provocada por Wall Street, ainda havia chineses que
resmungavam contra “o mau funcionamento do modelo ocidental” e,
em suma, contra o “mau funcionamento da cultura ocidental”.
Beijing ouviu [Bob] Dylan (legendado em mandarim?) e concluiu que,
sim, the times they-are-a-changing [os tempos estão
mudando].[2] Sem que se veja nem sinal de avanço social, econômico
e político – o ‘trancamento’ [shutdown] nos EUA seria outra perfeita
ilustração, se se precisasse de ilustração – de que os EUA deslizam
tão inexoravelmente quanto a China, pena a pena, vai abrindo as asas
para comandar a pós-modernidade do século 21.
Que ninguém se engane: as elites de Washington lutarão contra,
como se estivessem ante a pior das pragas. Mesmo assim, a intuição
de Antonio Gramsci precisa ser atualizada: a velha ordem morreu, e a
nova ordem está um passo mais perto de nascer.
A rede do controle corporativo global
www.cartamaior.com.br -11/10/2013 - Copyleft
A A+Marcelo Justo
Londres - No final de 2011, um estudo da Escola Politécnica Federal de
Zurique sacudiu o debate sobre a concentração do poder em nível
mundial. A base de dados do estudo chegava até 2007, ou seja, até a
fronteira da grande crise que sobreveio com a queda do Lehman
Brothers, e quantificava pela primeira vez a ideia generalizada de que um
punhado de empresas dominava a economia mundial.
A investigação de Stefania Vitali, James B, Glattfeldes e Stefano
Battiston, “The network of global corporate control” (A rede do controle
corporativo global), não se baseava em teorias econômicas ou políticas,
mas sim no desenho de sistemas e demonstrava que 1318 empresas
transnacionais possuíam direta ou indiretamente ações de sociedades
que representavam 60% das receitas mundiais. Mostrava ainda que o
núcleo duro desse grupo era formado por 147 empresas que
concentravam 40% das receitas corporativas mundiais.
Hoje, Stefania Vitali está pesquisando o que ocorreu de 2008 até nossos
dias e maneja como hipótese provisória que essa concentração se
intensificou ainda mais. Em entrevista á Carta Maior, Vitali fala de seu
estudo e de seu impacto econômico e político.
CM: Como avalia que evoluiu esta rede de 147 companhias?
Stefania Vitali: Estas redes costumam ser estáveis, ou seja, não apresentam
mudanças drásticas de um ano para o outro. Mas como desta vez temos a
crise de 2008, calculamos que haverá mudanças. Sabemos já que vários
bancos foram nacionalizados ou desapareceram ou enfrentam sérios
problemas. Também calculamos que haverá uma maior presença da Ásia.
Minha hipótese é que a concentração se aprofundará, mas até que não
tenhamos os dados concretos não podemos corroborar tal ideia. Há uma coisa
que está clara, porém. Os dois principais resultados de nosso trabalho anterior
serão mantidos. O primeiro se refere ao nível de conectividade que há entre as
grandes empresas e o segundo é o nível de concentração. Ou seja, as
empresas estão muito mais conectadas do que se pode imaginar. Em
particular, encontramos um centro, muito pequeno, composto por 1400
empresas que estão conectadas direta ou indiretamente.
A outra face disso é a concentração. Descobrimos que 80% das ações dessa
rede interconectada estavam em mãos de 0,6% dos acionistas. Assim,
chegamos ao núcleo duro desta concentração e interatividade quando vimos
que 147 empresas controlavam 40% do valor das multinacionais. De modo
que, quanto mais nos aproximamos do centro da estrutura, mais aumenta a
concentração.
CM: Uma das críticas feitas ao seu estudo foi que as empresas financeiras
estavam excessivamente representadas. Isso se deve ao que se passou a
chamar de financeirização da economia, ou seja, que o setor financeiro tem
uma importância cada vez maior na economia mundial, o que relegou a
produção a um segundo plano na geração de lucros?
Stefania Vitali: Os resultados sempre dependem dos dados. Nós dependemos
do que nos forneceu Orbis que tem uma base de dados de cerca de 37 milhões
de empresas e investidores de todo o mundo. Com base nesta fonte, fizemos
uma primeira depuração e ficamos com umas 43 mil transnacionais vinculadas
por participações acionárias. É possível que seja mais fácil recolher dados
sobre as instituições financeiras e que isso tenham aumentado o seu peso.
Também é possível que estas instituições tenham muita mais conectividade. As
empresas do setor da manufatura costumam conectar-se mais com suas
subsidiárias em uma estrutura piramidal enquanto que o setor financeiro tem
uma estrutura muito mais complexa.
CM: Que consequências têm na economia mundial este nível de concentração
e conectividade?
Stefania Vitali: Não investigamos isso diretamente, é algo que estamos fazendo
agora, mas temos algumas hipóteses. Primeiro que isso gera um grande risco
adicional de instabilidade no conjunto do sistema porque quando as empresas
se diversificam muito aumentando enormemente sua interconectividade, é
benéfico para as empresas, mas ao mesmo tempo as expõe a um impacto
negativo sistêmico. Neste sentido, a crise de 2008 pode ser o resultado deste
alto nível de conectividade. A segunda consequência é uma redução da
competição no mercado.
Se empresas que pertencem ao mesmo setor do mercado estão em mãos de
um mesmo grupo de acionistas, elas não têm nenhum interesse em competir.
Ao invés disso, têm uma tendência de se colocar em acordo para fixar preços
ou lucros.
CM: Outra das críticas feitas ao estudo é que ele confundia a propriedade e o
controle de uma empresa. Segundo seus críticos, defensores do capitalismo,
os donos das ações eram em muitos casos fundos de pensão que
administravam a aposentadoria da população. Ou seja, o dono, segundo essa
crítica, era o cidadão comum que coloca suas poupanças em mãos de fundos
financeiros administradores.
Stefania Vitali: Nós nunca falamos de controle, mas sim de controle potencial.
Sempre se distingue entre o acionista e o que tem direito a tomar decisões nas
reuniões de direção de uma empresa. Pode ter ações, mas não ter direito de
voto nas decisões das empresas. Usamos três modelos distintos para unir a
propriedade das ações e o controle concreto da conduta de uma companhia.
Um modelo estabelece que aquele que detém mais de 20% do controle do
pacote acionário de uma empresa tem um controle de 100%. Cabe dizer que,
dada a amplitude da nossa base de dados – cerca de 37 milhões de empresas
– não pudemos fazer uma análise específica de cada caso, mas a base de
dados com a qual trabalhamos confirmava este vínculo entre propriedade e
controle.
CM: Com empresas tão fortes, qual o impacto disso sobre os governos e a
democracia?
Stefania Vitali: Quando há empresas tão grandes elas podem criar blocos de
ação. Se não há uma regulação forte, é muito difícil proteger a democracia. No
mínimo temos um problema de regulação.
CM: Mas quando falamos da conectividade destas empresas, temos
companhias do setor financeiro vinculadas ao setor industrial e também ao
controle midiático. Quando há uma incidência direta sobre o setor midiático, o
perigo é maior, algo sobre o que uma italiana como você deve ter muita
experiência.
Stefania Vitali: (...risos...) O perigo é real. É necessário ter regras que eliminem
a possibilidade desse tipo de conectividade. Com o governo de Mario Monti se
introduziram certas regras para reduzir essa interconectividade, por exemplo,
para que uma pessoa tenha limites a respeito de quantas diretorias pode fazer
parte porque, se está em diferentes setores estratégicos, pode terminar
distorcendo a economia para adequá-la aos seus próprios interesses. O
mercado busca o lucro.
Esse é o seu interesse. De modo que o Estado é o único fator que pode
exercer um contraponto. Muitas vezes, um Estado não pode fazer isso sozinho.
É necessária uma ação combinada como a que podem exercer os estados da
União Europeia. Isso é importante porque as multinacionais têm o poder para
colonizar estados, em particular nos países mais pobres. Estão buscando seu
próprio benefício, não o benefício social, coletivo.
WWW.CARTAMAIOR.COM.BR - Tradução: Marco Aurélio Weissheimer
O império norte-americano e a
invasão da Ásia
by prof marco aurelio cabral
Um dos debates mais importantes do século XX se deu no interior
do Estado norte-americano quanto a estratégia geopolítica a ser
adotada no imediato pós-guerra. À época formuladores dividiam-se
entre duas propostas não necessariamente substitutas.
A primeira veio da NASA e compreendeu o que prevaleceu na
história como "estratégia de retaliação total", centrada na
distribuição de ogivas nucleares em mísseis balísticos
intercontinentais (Classes Titan e Atlas) e submarinos (Classe
Polaris), bem como bombas termonucleares apoiadas em
aeronáutica supersônica. Claramente, nesse contexto, a "missão a
Lua" permitiu-se justificar perante a opinião pública vultuosas
inversões públicas em tecnologias com emprego apenas indireto
para aumento de bem estar.
A segunda proposta, aparentemente derrotada, previa emprego de
rede de satélites de baixa órbita com objetivo de monitoramento de
ameaças e identificação de alvos, tal como adotado a partir dos
anos noventa pelos EUA. Esta segunda proposta, defendida por
pesquisadores do RAND (instituto sem fins lucrativos criado em
1948 a partir de equipe da Douglas Aircraft). Reuniu-se desde então
no RAND cientistas e engenheiros para assuntos de defesa.
Desde o final dos anos setenta até a queda do muro de Berlim
(1989), o esforço militar empreendido por EUA e Rússia foi revisto
por onda financeira liberalizante que impôs progressivamente
restrições para gastos públicos. Com isso, acentuou-se
necessidade de revisão da estratégia externa norte-americana,
adaptando-se a configuração até então inesperada - a condição de
ausência de desafiadores diretos ao projeto expansionista dos EUA.
Com o avanço das tecnologias de informação, a serviço da
montagem de um "cassino" internacional real time on line nos anos
90, tornou possível ao complexo industrial-militar atualizar
estratégia proposta pelo RAND, potencializada com capacidade de
processamento e integração de informações colhidas através de
diferentes artefatos, incluindo-se satélites.
Além do usual acesso discricionário a recursos públicos subsidiados
para pesquisa e desenvolvimento, a partir de 2000 o complexo
industrial-militar passou também a participar dos benefícios diretos
da função inteligência para o sucesso na concorrência internacional.
A partir dos documentos históricos secretos revelados pelo espião
duplo norte-americano E. Snowden, tornou-se possível aos demais
Estados Nacionais, incluindo-se potências ocidentais e asiáticas,
perceberem imbricações existentes entre o poder, o dinheiro e o
novo imperialismo norte-americano. Desta vez com pretensões a
império global.
No entanto, o sucesso no projeto de poder norte-americano
pressupõe consolidação de alianças mais ou menos estáveis com
elites locais, supostas de ocupar alto comando das maiores
empresas em cada país. Bancos e firmas industriais nacionais são
esperadas de disputar acesso privilegiado a dólares e tecnologias
superiores, respectivamente.
Enquanto esse é o caso dentro das fronteiras ocidentais do império,
o mesmo não acontece na Ásia. Rússia e China, as quais dispõem
de recursos para se configurarem em ameaça, defendem territórios
da invasão norte-americana. Essa, por sua vez, tem sido executada
em diversas frentes, dissolvendo-se resistências para o
desembarque da cultura consumista ocidental.
Atacam-se formas de organização política distintas da "democracia-
modelo" dos EUA, cuja aderência aos interesses do grande capital
é quase irrestrita. O resultado encontra-se na adesão de países do
leste europeu à OTAN, bem como na primavera árabe.
Enquanto as fronteiras do império avançam em direção á Ásia, as
elites russas e chinesas parecem não compreender exatamente
qual papel terão as maiores corporações nacionais em jogo de
xadrez em que pesam assimetrias de informação importantes.
Enquanto isso, as elites industriais ocidentais possuem interesse no
aumento das tensões militares como oportunidade para novo ciclo
de crescimento baseado em keynesianismo bélico.
Naturalmente, as projeções de banqueiros para recuperação
mundial não levam em consideração as importantes relações
circulares entre crises econômicas e políticas propagadas
assimetricamente pelo sistema internacional. Insistem em
narrativas comceteris paribus sem conflitos ou rupturas, o que soa
como patético em bases ex post.
Conclusivamente, a crise política que se anuncia na Ucrânia deve
desempenhar papel de acelerador das tensões internacionais, ao
ponto de ignição de gastos militares extraordinários, principalmente
na Europa. Não há necessidade de explicar o quanto uma ameaça
militar na Europa pode justificar mudança nas políticas até aqui
favoráveis aos interesses financeiros na região (metas fiscais).
Neste contexto, dificilmente prevalecerá contracionismo na
Alemanha pós-Merkel ou integridade do arcabouço supranacional
da União Européia. Isso sem, necessariamente, mover os EUA na
direção de uma guerra real, tal como ocorrido durante o período da
guerra fria.
Como todo processo de longo prazo, contudo, demora-se o tempo a
passar antes que hipóteses como esta possam ser testadas em
bases ex post. É esperar e conferir.
prof marco aurelio cabral | março 10, 2014 às 7:26 pm | Categorias: Uncategorized | URL:http://wp.me/p2WYh8-ju
"Vamos a ganar la batalla contra el tratado
transatlántico de libre comercio"
Susan George
Susan George ofreció el 17 de marzo una conferencia en la sede de Bilbao
del sindicato ELA. Ante la sala repleta, Susan George desgranó los detalles
del tratado transatlántico de libre comercio e inversión (conocido como
TTIP o TAFTA) que se está negociando entre Estados Unidos y la Unión
Europea. "Es un asalto a la democracia que busca que sean los negocios los
que gobiernen el mundo". Aquí tienes el resumen de la conferencia y el audio
original en inglés.
Hoy os voy a dar muchas malas noticias, pero voy a empezar con una buena:
vamos a ganar esta lucha. Para conseguir la victoria debemos utilizar la estrategia
del vampiro: sacar a la luz lo que se está negociando, para matar su plan.
El tratado tiene consecuencias dramáticas para los y las trabajadoras, para
cualquier persona que pueda caer enferma, para los que se preocupan de la calidad
de la alimentación, para las que se alarman ante el fracking... Si hacemos
conscientes a todas estas personas de lo que se está negociando, mataremos al
vampiro.
Y ¡ojo! que este no es un mero acuerdo sobre comercio, es, la guinda a una
estrategia que han llevado a cabo las corporaciones transnacionales durante mucho
tiempo. Creen que están a punto de ganar, pero somos nostras las que
venceremos.
El origen del TTIP
Al finalizar la II Guerra Mundial se crea el GATT (General Agreement on Tariffs and
Trade, Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio), una mesa negociadora entre
países colonizadores para rebajar los aranceles de productos industriales, con la
intención de ir profundizando en la liberalización del comercio. Las corporaciones
transnacionales no tomaban parte en estas negociaciones, hasta que en la década
de los ochenta, alguien, no sé quién, decidió lo contrario.
De esta primera mesa surge en 1994 la OMC (Organización Mundial del Comercio)
con la intención de ampliar la liberalización a más ámbitos. Las transnacionales
acogieron de forma muy entusiasmada el nacimiento de esta organización, pero en
seguida se dieron cuenta que no daba los frutos esperados, porque se necesitaban
consensos muy complicados para poder avanzar.
Con el objetivo de superar este parón, las transnacionales promovieron los
acuerdos bilaterales y multilaterales con Europa y Estados Unidos. Aunque fueran
acuerdos de ámbitos geográficos más pequeños, esta estrategia tuvo éxito, ya que,
a parte de firmar más de 3.000 acuerdos, se consiguió incluir acuerdos de inversión
en los de comercio.
Por ejemplo Estados Unidos decía a Ecuador, a Perú, o a otros pequeños países: si
no ponéis en marcha estas políticas de ajuste, no invertiremos en vuestro país.
Estas amenazas, con el miedo al aislamiento, llevaron a muchos países pequeños a
firmar acuerdos con Estados Unidos, y a profundizar en la liberalización del
comercio. De esta forma, las transnacionales consiguieron superar el inmovilismoa
de la OMC.
El inicio del TTIP (Transatlantic Trade and Investment and Partnership, Asociación
Transátlantica de Comercio e Inversiones) se puede situar en 1995, cuando las
corporaciones transnacionales de Europa y Estados Unidos, la Cámara de Comercio
de Estados Unidos y el Comité Europeo de Comercio ponen en marcha
el Transatlantic Business Dialogue ( Diálogo para el Comercio Transatlántico)
Este Transatlantic Business Dialogue fue impulsado las multinacionales con la
intención de establecer una relación directa y fluida con los gobernantes. En esta
mesa participaban más de setenta directivos de transnacionales de diferentes
sectores, bajo el lema: acordado por nosotros, aceptado por todos. “De estas cosas
sólo entendemos nosotros, vosotros permaneced callados” es lo que piensan estos
empresarios, y para conseguir sus fines actúan como un gran lobby. De esta forma
los dueños de las multinacionales consiguen todo lo que quieren, por ejemplo, de la
Comisión Europea. El documento sobre la competitividad europea, redactado por
ellos, fue aceptada por la Comisión y ahora ese documento se ha convertido en ley.
Lo mismo ocurre al otro lado del Atlántico Para que os hagais una idea, la Cámara
de Comercio de Estados Unidos gasta 136 millones al año de dólares para trabajos
de lobby.
Nos dicen que el objetivo es acelerar la integración entre Europa y Estados Unidos.
Pero ¿quién ha dicho que los europeos queramos integrarnos con Estados Unidos?
¿Alguien ha votado sobre este asunto? No. Alguien del consejo creado por las
transnacionales ha decidido que hay que eliminar las regulaciones para conseguir la
armonización entre los dos territorios, en un proceso sin fin. Esto es un peligro
extraordinario para la democracia.
¿Qué es el TTIP?
El TTIP busca integrar modelos de seguridad en alimentos, medicinas, transgénicos
y fracking, propuestas de estabilidad financiera, liberalización de capitales para la
inversión, privatizaciones, vías de bloqueo para nuevos impuestos (por ejemplo, el
que queremos implantar para las transacciones financieras) y para dificultar
mejoras en la legislación laboral, sistemas para destruir la negociación colectiva,
medidas para frenar propuestas que impulsen la seguridad climática...
Esto es lo que sabemos, ya que nadie conoce el contenido concreto de las
negociaciones, ni siquiera nuestros legisladores. La mesa negociadora se reúne
cada meses y nuestros gobernantes no saben de qué se está hablando. Es un claro
ataque a la democracia. Daos cuenta de que este acuerdo afecta a 800 millones de
consumidores, a la mitad del PIB mundial y al 45% del comercio mundial... Es una
barbaridad. Lo que buscan es controlar el comercio para favorecer los intereses de
las grandes corporaciones, es decir, que los mercados gobiernen el mundo. Y, al
mismo tiempo, es una forma de presionar a China para que sus políticas también
adopten la misma dirección.
Nos dicen que que los miembros de la Unión Europea firmaron los principios del
TTIP, pero la pregunta es ¿quién los redactó? No hay respuesta; no existe la lista
de redactores. Sin embargo, son hablan de las bondades del tratado. Un grupo de
investigadores calcula en 120 billones de euros al año (aproximadamente 505 euros
al año para cada familia europea) el beneficio que aportara el acuerdo gracias al
descenso de precios que provocará. Obviamente, los autores del informe son
un Think Tank financiado por la banca, aunque son sinceros cuando dicen que esta
es la hipótesis más optimista, y que estos resultados se verán hacia el 2027.
Así es que como nos quieren vender la moto, pero la ventaja que tenemos es que
conocemos los resultados que han traído acuerdos similares firmados
anteriormente. Al principio, empezaron llamando TAFTA al TTIP, pero pronto
cambiaron de nombre porque recordaba demasiado a NAFTA (Acuerdo de Libre
Comercio de América del Norte), y la gente no tiene muy buen recuerdo de él, ya
que, entre otras cosas, como consecuencia del mencionado acuerdo 2 millones de
campesinos y campesinas mejicanas y 28.000 pequeños comercios quebraron ante
la imposibilidad de competir con los Estados Unidos. Se calcula, a su vez, que en
Estados Unidos se perdieron 682.900 puestos de trabajo debido a este acuerdo.
Otro acuerdo similar a este es el acuerdo entre Corea y los Estados Unidos de
América. Obama dijo que este tratado incrementaría las exportaciones en 10
billones de dólares, y se redujeron en 3,5 billones. Dijo que se crearían 70.000
nuevos puestos de trabajo y se perdieron 40.000. Lo único que se consigue con
estos tratados es concentrar aún más el poder en manos de estas corporaciones
transnacionales.
Pero eso no es todo. Lo que la gente más teme del TTIP es la creación del ISDS
(Investors to State Dispute Settlements,Juzgado para las disputas de Inversor a
Estado ). Este juzgado privado ofrece la oportunidad a los inversores para que
demanden a un gobierno si creen que sus beneficios (presentes o futuros) han
disminuidos debido a la legislación o regulación que dicho gobierno ha aprobado.
Para empezar, las costas de estos juicios son enormes (8 millones de euros de
media), a lo que hay que sumar las indemnizaciones que el estado deberá abonar a
las transnacionales cuando llegue la sentencia (Ecuador tuvo que pagar 1,1 billones
de dólares a Occidental Petrolium por la prohibición de extraer petróleo en un área
protegida; una central nuclear sueca ha llevado a juicio a Alemania y solicita 4,2
billones de dólares en caso de tener que detener su producción). Pero es que
además, el ISDS trabaja en una única dirección, es decir, es el inversor el que
puede llevar a juicio al estado, no al revés. Se protege a las transnacionales, no a
los y las ciudadanas.
Hoy por hoy se dice que en el mundo hay en marcha 560 juicios de este tipo,
aunque seguramente haya más. Tampoco sabemos cuáles son las cantidades que
se demandan, ya que esa información suele ser secreta. En cualquier caso, lo que
queda manifiesto es que estos juicios limitan mucho las regulaciones, ya que una
vez que un estado se ve obligado a pagar semejantes cantidades, se lo pensará dos
o diez veces antes de volver a promulgar una nueva regulación.
Protección para las industrias, riesgo para las personas
La normativa que se busca armonizar mediante el TTIP, es muy distinta en Estados
Unidos y en Europa. En los Estados Unidos de América apenas existe regulación
para los servicios y los productos. Todo es comerciable hasta que se pruebe
científicamente que es perjudicial. La responsabilidad no recae en la empresa
productora, sino en la persona consumidora. Es la consumidora la que debe probar
que el producto o servicio peligroso, para que se prohíba su comercialización en el
mercado,
En Europa es justo lo contrario. Es el productor el que debe demostrar su producto
o servicio no es perjudicial para poder comercializarlo. Si existe alguna sospecha el
producto o servicio no se podrá comercializar. Por este motivo, muchos productos
químicos autorizados en Estados Unidos, no se pueden comercializar en Europa, los
transgénicos que se utilizan sin restricciones en Estados Unidos están limitados en
Europa... Si se firma este tratado, además de poner en riesgo nuestra salud, todas
y todos los pequeños agricultores europeos desaparecerán ante la imposibilidad de
competir con una agricultura industrial super-subvencionada en Estados Unidos.
El caso del fracking es clarificador. Como sabéis en el fracking para extraer el gas
se utilizan múltiples productos químicos en el subsuelo. Estos productos químicos
pueden contaminar los acuíferos subterráneos. ¿Qué hizo Bush? Excluyó a las
compañias que se dedicaban al fracking de la normativa para garantizar la calidad
del agua potable, es decir, posibilitó a las compañías la utilización de cualquier
producto químico, aunque sean contaminantes. Si se contaminan los manantiales,
deberán ser las personas perjudicadas las que tengan que demostrar
científicamente que esa contaminación es debida al Fracking. Es decir, Bush
aumenta la protección a la industria, poniendo en mayor riesgo a las personas, y
esto preocupa mucho a la gente.
Con este tratado la Comisión Europea y las corporaciones transnacionales europeas
quieren eliminar las normativas que protegen a las personas, pero la ciudadanía no.
Las organizaciones sociales y los sindicatos han comenzado a movilizarse y la
Comisión Europea se ha dado cuenta de que se va a encontrar con resistencias.
Hace dos años, descubrí por casualidad un informe técnico, Regulatory
Cooperation (Colaboración para la Regularización), de los dos lobbys más
poderosos a ambos lados del Atlántico (Business Europe y US Chamber of
Commerce) en el que se detallaban los pasos a dar y las medidas a tomar para la
armonización entre Estados Unidos y Europa. Con el paso del tiempo parecía que
este plan había sido arrinconado, pero debido a la contestación que está recibiendo
el TTIP, de nuevo se empieza a habla de él. Y ¿qué dice? “Vamos a crear un
Consejo de Colaboración para la Regularización entre la Unión Europea y Estados
Unidos, independiente del TTIP, de momento, con la intención de ir elaborando una
regulación coherente entre Europa y Estados Unidos, a través de los grupos de
trabajo que irán relacionándose con los legisladores.”
En mi opinión, lo que esto quiere decir es que al no poder establecer el TTIP en su
totalidad, un consejo de este tipo podrá ir adoptando medidas poco a poco, sin
tener en cuenta a la ciudadanía y a los legisladores, dejando bien claro que este
consejo se mantendrá vivo permanentemente, para ir realizando modificaciones sin
fin, mientras la Unión Europea sigue alabando los beneficios del tratado. No sé,
habrá que seguir de cerca los acontecimientos.
Para terminar; si nos rendimos ante la presión de las corporaciones, dejando
nuestro poder judicial (una parte importante de la democracia) en manos privadas,
deberemos preguntarno qué es la Comisión Europea que ha firmado todo esto.
¿Creen que todo esto es bueno, o no se atreven a hacer frente a Estados
Unidos?¿Los dirigentes de los gobiernos que han firmado este acuerdo desconocen
sus consecuencias? ¿Son necios o son fuerzas antidemocráticas a las que no les
importa nada todo esto?
Este acuerdo es un asalto a la democracia, a la clase trabajadora, al medio
ambiente, a la salud de la ciudadanía y al bienestar. La única respuesta posible
ante este ataque es levantarse de la mesa, cerrar la puerta y dejar la silla vacía.
Fuente: http://www.mrafundazioa.org/es/articulos/susan-george-vamos-a-ganar-la-batalla-
contra-el-tratado-transatlantico-de-libre-comercio
3 de maio de 2014 - 15h28
Estratégia de Guerra Fria dos EUA: Da Ucrânia às Filipinas
O presidente Barack Obama e a sua equipe de segurança nacional já olham para além da crise ucraniana porque estão ocupados em “criar uma atualização de uma estratégia da guerra fria para conter a Rússia”. O que os funcionários da administração fazem saber, de quando especificando o objetivo sobre o qual o presidente se concentra, é que o objetivo aqui seria o de “isolar a Rússia de Putin através de cortar os seus elos econômicos e políticos com o mundo exterior”. Por Manlio Dinucci, no Irã News
Irã News
De
acordo com Dinucci, a estratégia dos Estados Unidos é isolar economicamente
a Rússia
O primeiro passo nessa direção seria o de ir sempre reduzindo, até ao
interromper, o fornecimento do gás russo à Europa, para poder substituí-lo,
principalmente, por aquele fornecido pelas companhias americanas explorando
as reservas do Oriente Médio, as reservas africanas e outras, incluindo-se aqui
a dos Estados Unidos, que estão se preparando para exportar gaz liquificado
extraído da ardósia betuminosa. Aqui os Estados Unidos estão mostrando suas
cartas. A margem de superioridade econômica dos Estados Unidos a escala
mundial se reduz mais e mais.
A China já está em segundo lugar com o seu gráfico mostrando um forte
crescimento já equivalente a metade da dos Estados Unidos, sendo seguida
aqui então pelo Japão e a Alemanha, sendo que também, em gráfico, se
poderia ver que os 28 países da União Europeia já ultrapassaram os Estados
Unidos. Para conservar a sua supremacia econômica eles se baseiam no
sector financeiro, no qual eles mantém vantagens, assim como na capacidade
de suas multinacionais de conquistar novos mercados e fontes de matéria
prima. Com esse objetivo Washington põe na balança o peso de sua própria
superioridade militar, assim como da OTAN, a qual vem mesmo abaixo do
comando deles. Nesse cenário então entra a demolição sistemática, através de
instrumentos militares, de países inteiros (como na Iugoslávia, Líbia e
atualmente também na Síria) e a anexação, por intermédio da OTAN de todos
os países do ex-pacto de Varsóvia, assim como dois da ex Iugoslávia, e três da
ex-URSS.
Na verdade esses últimos denominados serão mesmo quatro, porque a
Ucrânia já estava de fato sob o controle da OTAN, mesmo antes da crise. Será
suficiente esperar as eleições de 2015 para se ter na Ucrânia um presidente
que irá acelerar uma entrada oficial do país na aliança. Porque se teria então
tomado em Washington a decisão de organizar o golpe de estado que acabaria
por derrubar o presidente Yanukovich (que estava longe de ser hostil ao
ocidente) e de instalar no governo, em Kiev, os representantes os mais hostis
contra a Rússia, e aos russos da Crimeia e da Ucrânia do Leste? Ao que tudo
indica, isso teria sido para fazer Moscou reagir e poder lançar, então sem
constrangimentos, a estratégia de isolamento.
Coisa não fácil: a Alemanha, por exemplo, é a maior importadora do gás russo
e acabaria sofrendo danos com uma eventual interrupção de fornecimento do
gás. Entretanto, Washington já se decidiu por não esperar os governos
europeus para impor à Rússia as mais duras sanções. Ele já tem o ok, ou seja
a luz verde, de Roma (da qual já se conhece a fidelidade) e ele já está a
caminho de entrar em um acordo com Berlim e outras capitais.
O objetivo estratégico aqui seria o de criar uma frente Anti-Rússia, frente essa
constituída dos EUA-UE e consolidada por um acordo de livre comércio entre
esses o que permitiria aos Estados Unidos de aumentar sua influência na
Europa. Tem-se nesse cenário também a estratégia de tensão na região Ásia-
Pacífico, onde os Estados Unidos tem em vista o conter a China. Aquele que
se aproximar da Rússia, exercerá um peso crescente não só regional como
também global, o que poderia fazer com que as sanções contra Moscou
fossem em vão, pois essa aproximação lhe abriria uma possibilidade de um
futuro comércio suplementar, ao leste, e isso seria muito importante para as
exportações energéticas.
Nesse cenário e de quebra, Obama já efetuou uma visita oficial na Ásia.
Entretanto, nessa o Japão se recusou a assinar um acordo de livre comércio o
qual teria aberto um mercado aos produtos agrícolas dos Estados Unidos. Em
compensação, a Filipina concluiu com os Estados Unidos um novo acordo de
decênio que permite aos Estados Unidos aumentar sua presença militar no
arquipélago, isso tendo uma função claramente anti-chinesa.
Tem-se que onde o dólar fracassa, a espada sucede.
UM TIRO NO PÉ
Mauro Santayana – www.maurosantayana.com - 15/06/2014
(Hoje em Dia) - Plamen Oresharski, o Primeiro-Ministro da Bulgária, acaba de anunciar a
suspensão das obras de um gasoduto a ser construído pelos russos, que serviria para levar gás
à Europa, sem passar pela Ucrânia.
A decisão foi tomada após reunião de membros do governo búlgaro com uma “delegação”
chefiada pelo Senador republicano John Mcain, que se deslocou com numerosos diplomatas
para a capital búlgara, Sofia, para pressionar o governo .
Washington quer impedir a construção do gasoduto que passa pela Bulgária, por uma razão
simples. Com ele, os russos teriam rota alternativa para levar seu gás à Europa, e poderiam
fechar o gasoduto que passa pela Ucrânia quando quisessem, usando dessa prerrogativa para
manipular os ucranianos.
Surpreendentemente, em um gesto de abjeta sujeição aos Estados Unidos, a União Europeia
apoiou a suspensão das obras, sob alegação de que há dúvidas sobre o processo de escolha
dos vencedores da concorrência, e que é preciso assegurar que a obra esteja em conformidade
com a legislação européia.
Gennadi Timechenko, que lidera o consórcio vencedor, é um dos empresários russos que está
na lista das personalidades sancionadas pelos Estados Unidos depois dos conflitos na Ucrânia.
Sem alternativas para a obtenção de energia, a Europa confia demais no gás de xisto norte-
americano, que poderia abastecê-la no futuro. Para que esse gás chegasse ao continente
europeu seria necessário gastar dezenas de bilhões de dólares em navios, terminais portuários
e infraestrutura. Além disso - e mais importante - descobriu-se agora que as reservas norte-
americanas desse combustível fóssil seriam pelo menos dez vezes menores do que foi
divulgado inicialmente, devido a falhas da empresa que fez o levantamento de seu potencial
para o governo dos EUA.
A situação da Rússia, ainda nesse aspecto, é mais confortável. Na hipótese, improvável, de que
a Europa conseguisse diversificar suas fontes de suprimento, trazendo gás dos EUA, ou
explorando gás de xisto diretamente, com risco de destruição do subsolo e da contaminação
do meio ambiente, os russos teriam como clientes a Índia e a China, com quem acabam de
assinar o maior contrato de fornecimento de gás da história, e seus bilhões de habitantes.
Ao endossar a pressão norte-americana sobre o governo búlgaro, a Europa não se tornará
menos, mas ainda mais dependente do gás russo, e de um único caminho para obtê-lo. O que
ocorrerá se, daqui a alguns meses, a situação na Ucrânia evoluir para uma guerra civil aberta e
esse gasoduto for sabotado, e tiver seu funcionamento interrompido em pleno conflito? Os
russos ficarão sem receber, a cada mês, o seu dinheiro, mas os europeus congelarão, no
inverno, até a medula, sem a alternativa que poderia haver, dentro de um ano, com a
construção do ramal que passaria pela Bulgária.
O jogo geopolítico da Rússia e da China
Não é a ressurreição da Guerra Fria. Rússia e China só procuram acordos
com Alemanha e Estados Unidos.
Junho 2014
Immanuel Wallerstein - Russian Presidential Press and Information Office
Governos, políticos e mídia no mundo “ocidental” parecem incapazes de
compreender os jogos geopolíticos na forma como são praticados por
quaisquer outros. As suas análises do anunciado novo acordo da Rússia e da
China são um surpreendente exemplo disto.
Em 16 de maio, Rússia e China anunciaram ter assinado um “tratado de
amizade” que duraria “para sempre” mas não é uma aliança militar.
Simultaneamente, anunciaram um acordo sobre o gás, pelo qual os dois países
irão construir um gasoduto para exportar gás russo para a China. A China vai
emprestar à Rússia o dinheiro com o qual esta construirá a sua parte do
gasoduto. A Gazprom (maior produtora russa de gás e de petróleo) fez
algumas concessões de preço à China, questão que reteve durante algum
tempo a assinatura do acordo.
Se formos ler os meios de comunicação do dia 15 de maio, estão cheios de
artigos explicando por que um acordo com este era improvável. Quando,
mesmo assim, ele foi assinado no dia seguinte, os governos ocidentais, os
políticos e a mídia dividiram-se entre os que o viram como uma vitória
geopolítica do presidente russo Vladimir Putin (e a deploraram) e os que
argumentaram de que não irá fazer muita diferença em termos geopolíticos.
É bastante claro, quando se olha para as discussões e as votações do
Conselho de Segurança da ONU dos últimos anos, que a Rússia e a China
partilham uma aversão às diversas propostas priorizadas pelos Estados Unidos
(e frequentemente com colaborações de vários países europeus) para autorizar
o envolvimento direto (abrindo em última instância o caminho ao envolvimento
militar) na guerra civil na Ucrânia e nos múltiplos conflitos no Oriente Médio.
As sanções unilaterais que os Estados Unidos já impuseram à Rússia devido
ao seu alegado comportamento na Ucrânia e a ameaça de impor ainda mais
sanções apressaram o desejo da Rússia de encontrar novas saídas para o seu
gás e petróleo. E isto, por seu turno, leva a muita conversa sobre uma
ressurreição da Guerra Fria entre Rússia e Estados Unidos. Mas será este na
verdade o ponto principal do novo acordo Rússia-China?
Parece-me que ambos os países estão realmente interessados numa
reestruturação das alianças entre Estados. O que a Rússia realmente procura é
um acordo com a Alemanha. E o que a China realmente quer é um acordo com
os Estados Unidos. E o truque é anunciar esta aliança “para sempre” entre
eles.
A Alemanha está claramente dividida internamente quanto à perspetiva de
incluir a Rússia na esfera europeia. A vantagem para a Alemanha de um
acordo deste tipo seria consolidar a base de clientes russos para a sua
produção, garantir as suas necessidades energéticas e incorporar a força
militar russa no seu planeamento global de longo prazo. Como isto
inevitavelmente significaria a criação de uma Europa pós-Otan, há oposição à
ideia não só dentro da Alemanha mas, evidentemente, também na Polônia e
nos Estados bálticos. Do ponto de vista da Rússia, o objetivo do tratado de
amizade Rússia-China é fortalecer a posição dos que na Alemanha querem
trabalhar com a Rússia.
A China, por outro lado, está fundamentalmente interessada em amansar os
Estados Unidos e reduzir o seu papel na Ásia oriental. Mas, dito isto, quer
reforçar, não enfraquecer, as suas ligações com Washington. A China procura
investir nos Estados Unidos aos preços de saldo que considera estarem a ser
oferecidos. Quer que os Estados Unidos aceitem a sua emergência como
potência regional dominante na Ásia oriental e do sudoeste. E quer que os
Estados Unidos usem a sua influência para impedir o Japão e a Coreia do Sul
de se tornarem potências nucleares.
É claro que o que a China quer não está em consonância com a linguagem
ideológica que prevalece nos Estados Unidos. Porém, parece haver dentro dos
Estados Unidos um apoio discreto a esta evolução de alianças, especialmente
no interior das principais estruturas empresariais. Tal como a Rússia quer usar
o tratado de amizade para encorajar certos grupos na Alemanha a moverem-se
na direção que considera mais útil, também a China deseja fazer o mesmo com
os Estados Unidos.
Será que estes jogos geopolíticos vão funcionar? Possivelmente, mas isso de
forma alguma é certo. Ainda assim, nas perspetivas tanto da Rússia quanto da
China, têm tudo a ganhar e muito pouco a perder usando este ardil. A questão
real é como o debate interno na Alemanha e nos Estados Unidos vai evoluir no
futuro próximo. Quanto ao argumento de que o mundo está a voltar à Guerra
Fria entre os Estados Unidos e a Rússia, pensem nele como o ardil dos
Tradução, revisada pelo autor, de Luis Leiria, para o Esquerda.net.
Créditos da foto: Russian Presidential Press and Information Office
Leia: www.desenvolvimentistas.com.br
Entrevista. Julian Assange - WikiLeaks
Em conversa por telefone com o 'Estado', fundador do site WikiLeaks fala sobre geopolítica,
espionagem e o livro que lançará em fevereiro
Por: Guilherme Russo
Postado no Estadão dia 10/08/2014
Confinado há mais de dois anos na Embaixada do Equador em Londres, para evitar ser preso
pelas autoridades britânicas e extraditado para a Suécia, onde é acusado de crimes sexuais, o
australiano Julian Assange, fundador do site WikiLeaks, continua divulgando documentos
secretos do governo americano.
Em entrevista por telefone ao Estado, Assange questionou o grau de independência do Brasil
em relação aos EUA, afirmou que Israel comete crimes de guerra em sua ofensiva contra Gaza
e disse que há uma "guerra fria" em andamento na Ucrânia. Em fevereiro, o australiano
lançará no Brasil o livro Quando o Google encontrou o WikiLeaks, pela Boitempo Editorial. A
seguir, a íntegra da entrevista.
O WikiLeaks afirma que Israel tem atingido alvos civis deliberadamente na atual incursão em
Gaza.
Publicamos dois documentos relativos a esse assunto. O mais importante é, provavelmente,
uma admissão do subchefe do Estado-Maior israelense (o major-general Gadi Eizenkot) para a
Embaixada dos EUA em Tel-Aviv de que, pouco após a guerra com o Líbano de 2006, Israel
planejava ir adiante com a "doutrina Dahiya", que é uma estratégia de retaliação contra
valores, de tratar as regiões de onde ataques partem como alvos e de usar deliberadamente
força desproporcional - o que significa matar a população civil que cerca a atividade militar,
com o objetivo de impor pressão política na área. E isso é um crime de guerra, um crime de
guerra brutal, não há dúvida sobre isso.
E essa estratégia é aplicada no atual conflito?
Na Guerra Fria, havia discussões sobre se as forças militares deveriam adotar estratégias de
combater forças ("counterforce") ou de combater valores ("countervalue"). Countervalue é
quando o objetivo é destruir o que é valioso para o oponente, incluindo a população civil.
Counterforce é quando o alvo são apenas as forças militares do oponente.
Aquelas discussões chegaram à conclusão que, na maior parte das vezes, a estratégia de
combate a forças deveria ser usada, que é ter como alvo militares e não a população civil. Mas
Israel ataca com uma estratégia de destruir coisas de valor para os palestinos, incluindo
infraestrutura e população civil.
'Os EUA são capazes de cortar o Brasil do resto do mundo em qualquer momento que
queiram'
O que o sr. achou de a presidente Dilma Rousseff ter cancelado a visita de Estado que faria aos
EUA após a revelação da espionagem que a NSA fez ao governo brasileiro e à Petrobrás?
Foi um ato positivo de Dilma, de tentar demonstrar independência. Mas quando olhamos
abaixo da superfície, infelizmente, podemos questionar quão independente o Brasil é. O País
se mostra cada vez mais independente, mas sem chegar ao ponto de oferecer asilo a Edward
Snowden, por exemplo. O Brasil foi um dos países que se recusaram a dar asilo a Snowden.
O sr. é a favor de um esforço para regular a internet internacionalmente?
É preciso uma legislação para evitar que governos interfiram na internet. Uma forma de
regulação negativa, declarando que governos não deveriam centralizar a internet, bloqueá-la
ou manipular seu conteúdo. As ações de governo e corporações podem ser reguladas de duas
maneiras: declarando-se que eles devem fazer algo e têm oportunidades de fazer algo ou,
também, que eles não devem fazer nada. Nós apoiamos uma regulação negativa da internet -
ou seja, que não haja interferência de governos ou de corporações poderosas que, em razão
de seu tamanho e escala, conseguem exercer funções tipicamente atribuídas a governos.
Não soa contraditório que um defensor da liberdade de expressão obtenha asilo de um
governo que suprime liberdade de expressão e persegue seus opositores?
É uma ironia que os EUA tenham cancelado o passaporte de Edward Snowden quando ele
estava a caminho da América Latina, dessa maneira forçando-o a aceitar o asilo russo e não de
algum outro país. Mas, quando começamos a criticar a liberdade de expressão na Rússia - e há
muito o que criticar - devemos nos lembrar que nenhuma nação da Europa Ocidental, nem o
Brasil, se levantaram para dar asilo a Edward Snowden. Então, o que devemos questionar são
os níveis verdadeiros de liberdade de expressão nesses países. E, é claro, nos EUA, onde ele
não pôde falar livremente também.
O que há abaixo da superfície em relação a essa independência que o País tenta mostrar
diante da comunidade internacional?
A posição física e geográfica do Brasil é próxima aos EUA e as telecomunicações brasileiras
com o resto do mundo passam quase todas pelos EUA. O Brasil é um país que sim, tem sua
independência, tem feito progressos significativos em se tornar independente - e podemos ver
um exemplo disso na importante retirada simbólica do embaixador brasileiro em Israel. Mas o
Brasil ainda precisa lutar para aumentar sua independência. E isso é importante para toda a
América Latina.
Não depender de instalações de comunicação que passam pelos EUA contribuiria para que
houvesse mais autonomia na região?
Sim. Neste momento, a Agência de Segurança Nacional intercepta quase todas as
telecomunicações brasileiras com o resto do mundo. E isso compromete a autonomia do
Brasil. Veja a Rússia, por exemplo, e o regime de sanções que lhe foi imposto. Os EUA são
capazes de cortar o Brasil do resto do mundo em qualquer momento que queiram. Então, é
importante que o Brasil e a América Latina como um todo tenham elos de telecomunicações
independentes com o resto do mundo, para que não sejam isolados nesse sentido.
Há alguns outros aspectos a considerar, como a decisão do Brasil de comprar caças suecos, por
exemplo: mais de 51% dos componentes daqueles caças vêm dos EUA - isso está em um
documento que revelamos - e outros componentes vêm da Grã-Bretanha. Num eventual
futuro conflito para o Brasil, um dos possíveis cenários estudados envolveria Estados apoiados
pelos EUA na região, como a Colômbia, e a possível necessidade de intervir em uma crise
humanitária na região do Caribe, por exemplo, poderia colocar o Brasil em conflito com os EUA
ou a Grã-Bretanha, que controla muitas das ilhas caribenhas. No limite, os caças comprados
pelo Brasil poderiam não estar funcionais, pois não haveria um abastecimento de
componentes contínuo.
O sr. possui algum material sobre a crise ucraniana que esteja prestes a publicar? Ou gostaria
de ressaltar informações de algum documento relativo a esse tema que tenha publicado
recentemente?
Publicamos importantes materiais anteriormente que mostram que os EUA estavam cientes de
que um conflito do gênero poderia surgir na Ucrânia se o país continuasse a se aproximar da
OTAN e da Europa Ocidental. Na verdade, a Rússia revelou aos EUA suas linhas vermelhas em
2008. E esses documentos afirmavam que haveria um conflito entre o leste e o oeste da
Ucrânia.
O mundo caminha, de alguma maneira, para reviver a Guerra Fria?
Uma guerra fria em relação à Rússia, uma guerra indireta em relação à Rússia, já está em
andamento na Ucrânia. Esteve se desenvolvendo pelo menos desde 2004, com a expansão da
Otan em outros países em abertura ao longo da fronteira russa e o crescente cercamento da
Rússia. Uma abordagem similar vem sendo aplicada agora em países ao sul da China. Há um
material sobre uma luta indireta com a China na África e o Africom (comando militar
americano na África), criado para manter sob controle a influência chinesa na África.
Quais são as principais dificuldades que o sr. enfrenta por estar confinado há tanto tempo? O
sr. planeja alguma manobra para conseguir sair da embaixada do Equador sem ser preso?
Em 16 de agosto completam-se dois anos do meu asilo político. O asilo tem sido obstruído
desde então - o que é uma violação do direito internacional pela Grã-Bretanha.
Por não lhe ter sido concedido o salvo-conduto para que o sr. viaje ao Equador?
Sim. A lei internacional é clara: concessões de asilo sobrepujam pedidos de extradição. A Grã-
Bretanha, em virtude de suas próprias razões políticas domésticas, está escolhendo não
respeitar o asilo. A partir de 16 de agosto (quando se completam dois anos da concessão de
asilo pelo Equador), tentaremos novamente resolver o impasse.
Então, o sr. considera que a Grã-Bretanha está violando o direito internacional.
Sim. A lei é clara e essa é também a opinião de professores de direito de Oxford.
Mas quais são as principais dificuldades que o sr. enfrenta em sua vida cotidiana?
A principal irritação é não ver o sol por mais de 20 minutos por dia em dois anos. Dito isso, a
situação em que estou é consideravelmente melhor do que a de Chelsea Manning, uma de
minhas fontes nos EUA - que foi sentenciada ano passado a 35 anos de prisão por revelar
informações sobre os crimes de guerra dos EUA, conosco, para o público.
O sr. se sente de alguma maneira culpado pela prisão de Chelsea Manning?
A situação dela é algo que deveria preocupar todos os que são interessados em saber o que
está realmente acontecendo no mundo. Em relação ao trabalho do WikiLeaks com aquele
material, a alegação do Pentágono é que Chelsea Manning falou com um informante
americano nos EUA. Não há nenhuma alegação de que teríamos fracassado em proteger
nossas fontes.
Falando de seu próximo livro, por que o Google representa um perigo para a privacidade?
Nos últimos dez anos, o Google se tornou grande e mau. Todos nós vemos o Google como um
serviço útil para buscas e administração de e-mails. Mas o Google integrou-se com o governo
dos EUA de uma maneira que deveria preocupar a todos, incluindo americanos. Isso não é
comum. É o crescimento natural de uma corporação nos EUA buscando controlar o mercado
de exportação para se tornar dependente do Departamento de Estado Americano e das
agências de inteligência dos EUA para guiar sua interação com o mundo. Mas o Google, como
corporação, atrai agora mais de 1 bilhão de pessoas em seu esquema de vigilância em escala
industrial.
Como ele conseguiu fazer isso?
Por meio do Android, o sistema operacional de mais de 80% dos smartphones sendo vendidos
atualmente, o Google adquiriu informações detalhadas das pessoas usando seus telefones.
Isso inclui localizações e o que elas estão buscando. A maioria dos websites usa propagandas
que rastreiam os endereços que as pessoas visitam - e não apenas o próprio Google ou
serviços como o buscador do Google, que também retiram informações deles.
O resultado é que o Google conseguiu integrar essa informação de todas as partes do mundo
com seu serviço de mapeamento e isso foi centralizado nos EUA, onde é acessível para a
inteligência americana. O Google se tornou essencialmente um monopólio mundial de coleta e
integração de informações, que sabe muito sobre a maioria das pessoas que têm qualquer tipo
de influência no mundo. E, em razão de sua relação com Washington e sua localização, na
jurisdição dos EUA, isso estendeu dramaticamente o alcance do governo americano em todo o
mundo.
Há outras corporações na internet que trabalham dessa maneira? O Facebook, por exemplo?
Sim, o Facebook é um problema significativo também, por razões muito similares. Incorporou
bilhões de pessoas, tem base na jurisdição dos EUA e tem relação com Washington. Contudo,
o Facebook está, talvez, onde o Google estava há 6 ou 7 anos, ainda não chegou a um nível em
que está integrando tantos aspectos diferentes das vidas das pessoas.
Quando as pessoas pensam no Google, pensam no mecanismo de busca, mas, na verdade, o
sistema está na maioria dos telefones, que estão informando ao Google as localizações das
pessoas, seus contatos e o que elas estão procurando (na internet). Isso, combinado com
todos os outros serviços do Google que estão sendo usados em muitos websites que as
pessoas não estão cientes, rastreia as pessoas. O Google avançou também em outras áreas -
não apenas na coleta de dados e em tentar tornar as pessoas o mais previsíveis possível -,
agora está comprando outras empresas, comprou mais de oito companhias de robótica nos
últimos 14 meses.
O sr. acredita que é possível para o cidadão comum escapar da vigilância do "Grande Irmão"?
É quase impossível. A questão é: você consegue preservar algumas áreas de sua vida da
vigilância? É impossível agora, infelizmente, estar fora do sistema de coleta de informações
dos EUA. Mas é importante preservar algumas áreas de sua vida, alguns de seus interesses,
algumas de suas atividades políticas. É possível preservá-los? Com algum esforço, você
consegue proteger uma pequena parte dessa atividade.
É necessário ser um especialista em computação para conseguir isso?
A maneira mais simples para as pessoas comuns é evitar todos os computadores, smartphones
e interações com pessoas que os utilizam. Infelizmente, isso inclui o governo do Brasil, cujo
sistemas são frequentemente invadidos pelos EUA. É bem difícil de fazer isso agora - por
exemplo, se você vai a uma festa ou até se você mandar um e-mail para alguém afirmando que
vai a algum lugar usando seu smartphone que tenha informações coletadas pelo Google ou
outras pessoas podem relatar no Facebook que viram você com um amigo. É algo bem difícil
de fazer, porque até se você restringir a quantidade de informação que você põe na internet,
as organizações burocráticas e comerciais e os seus amigos estão relatando informações sobre
a sua atividade.
Há algumas formas, há alguns programas razoavelmente simples de usar que protegem
alguma informação, mas, para fazer isso da maneira adequada, infelizmente, você tem de ser
um especialista. Contudo, nos últimos dois anos, as pessoas estão ficando cada vez mais
conscientes do que está acontecendo. E as revelações de Snowden tornaram as pessoas mais
conscientes. E o resultado é que há agora um mercado para telefones criptografados, uma
demanda de mercado para telefones criptografados e e-mails privados e assim por diante.
E há pessoas trabalhando agora para suprir o desejo das pessoas de escapar. Nos próximos
dois anos, nós veremos muitos programas de telefones criptografados e programas de chat
criptografados - além de esforços para excluir informações pessoais em poder de companhias
como a Amazon, que também as fornece para a CIA.
Há algo mais que o sr. gostaria de dizer para o público brasileiro?
Somente que os brasileiros têm sido muito solidários sobre meu trabalho e sobre a minha
situação e, pessoalmente, eu lhes agradeço isso.
O neo-eurasianismo e o redespertar russo
13 ago 2014 |
http://www.orientemidia.org/o-neo-eurasianismo-e-o-redespertar-
russo/?utm_source=dlvr.it&utm_medium=facebook&utm_campaign=o-neo-eurasianismo-e-o-
redespertar-russo
Dídimo Matos1
O Eurasianismo
O termo eurasianismo apresenta diversas acepções. Surge pela primeira vez no século XIX, cunhado pelo movimento eslavófilo que defendia a rica diversidade da Eurásia2, numa espécie de outra via que não europeia ou
asiática, e que juntasse a cultura e tradição da Ortodoxia e da Rússia. Esse foi, pois, seu primeiro uso.
Tais ideias foram retomadas logo após a I Guerra Mundial, por figuras como o filólogo e etnólogo Nikolai S. Trubetskoy, pelo historiador Peter Savitsky, pelo teólogo ortodoxo G. V. Florovsky e, mais a frente, pelo geógrafo, historiador e filósofo Lev Gumilev, que defendia a luta cultural e política entre, de um lado, o Ocidente e, de outro, o subcontinente da Eurásia3, guiado pela Rússia. Gumilev foi o criador de duas teorias: i) a da etnogénese, pela qual as nações são originárias da regularidade do desenvolvimento das sociedades; e ii) a da paixão, sobre a capacidade humana para se sacrificar em prol de objetivos ideológicos.
Estes teóricos do eurasianismo, estudaram de modo aprofundado os impérios de Gengis Khan, Mongol e Turco-Otomano, e se encontraram, mais de uma vez, com o geopolítico alemão Karl Haushofer. Baseada ainda na produção do britânico Halford Mackinder, essa primeira versão do eurasianismo procurou estabelecer a identidade russa, distinta da ocidental, e propugnava uma fusão das populações muçulmanas e ortodoxas. Rejeitaram a proposta de integração russa à Europa, de Pedro, o Grande. Defendiam que a Rússia era, claramente, não europeia, que era um continente em si, separado objetivamente, tanto da Europa quanto da Ásia, pela geografia, e que teve sua cultura moldada por influências da Ásia.
Com a revolução russa, Trubetskoy tentou adaptar seu pensamento à nova realidade, acompanhado por outros eurasianistas. Ele defendeu que o separatismo era inaceitável e insistiu na indivisibilidade da grande região que correspondia a Eurásia, ou seja, que a União Soviética (URSS) deveria manter o império russo em toda a sua extensão, em uma ideia de globalidade distinta da europeia e da asiática: “o substrato nacional do antigo Império Russo e atual URSS, só pode ser a totalidade dos povos que habitam este Estado, tido como uma nação multiétnica peculiar e que, como tal, possuía o seu próprio nacionalismo”. (SANTOS, 2004).
Para Savitsky, a Eurásia havia sido formada pela natureza, que havia condicionado e determinado os movimentos históricos e a interpenetração dos povos, cujo resultado fora a criação de um único estado, que derivando da natureza, possuía a qualidade transcendente dessa mesma natureza (SANTOS, 2004). Além desses primeiros eurasianistas, temos o atual eurasianismo, tema central dessa comunicação e que passamos a discutir abaixo. O Eurasianismo atual, ou neo-eurasianismo, herda dos anteriores muitas de suas características, mas é distinto de ambos em vários sentidos. Basicamente, foi idealizado pelo russo Alexander Dugin.
Alexander Dugin pode ser caracterizado como geopolítico, filósofo, cientista político e sociólogo. Ele é também considerado um importante jornalista e analista político. É preciso enfatizar sua grande influência no pensamento geopolítico russo pós-soviético. Seu pensamento que a geopolítica é não somente uma ciência, mas possui muito de ideologia tem tido muita influência
na política russa, e seus livros são utilizados pelas escolas geopolíticas militares e civis da Rússia. Dugin ocupou cargos de assessoramento na Duma e teve muita influência junto aos assessores ocupados da política externa dos governos Vladimir Putin e D. Medvedev, sendo considerado o idealizador oficioso dessa. Essa influência é vista nos pronunciamentos de ambos os líderes russos, quando falam abertamente no eurasianismo como guia das relações internacionais da Rússia.
Atualmente, Dugin ocupa o cargo de chefe do Departamento de Sociologia das Relações Internacionais, da Universidade Estatal de Moscou, e a presidência do Centro de Estudos Conservadores, dessa mesma universidade.
O Neo-eurasianismo de Dugin
Visto de maneira integral, o neo-eurasianismo não é apenas uma teoria geopolítica, mas uma filosofia geral que possui as seguintes características: a) Histórica e geograficamente é o mundo inteiro excetuando o setor ocidental; b) Estratégica e militarmente é a união de todos os países que não aprovam as políticas expansionistas dos EUA e da OTAN; c) Culturalmente representa a preservação das tradições culturais, nacionais, étnicas e religiosas orgânicas; d) Socialmente representa formas diferentes de vida econômica e a “sociedade socialmente justa”.4
O neo-eurasianismo tem por princípios:
1) o Diferencialismo: pluralismo de sistema de valores contra a dominação obrigatória de uma ideologia; 2) a Tradição: contra a supressão de culturas, dogmas e descobertas das sociedades tradicionais; 3) os direitos das nações contra os “bilhões de ouro” e a hegemonia neocolonial do “norte rico”; 4) as etnias como valores e sujeitos da história contra a despersonalização das nações, aprisionadas em construções sociais artificiais; 5) a justiça social e solidariedade humana contra a exploração e humilhação do homem pelo homem.
Enquanto teoria geopolítica, o neo-eurasianismo faz parte da chamada escola expansionista (TEIXEIRA, 2009), que passaremos a descrever. A Figura 1 mostra simbolicamente as pretensões expansionistas do coração da Rússia para o mundo, em todas as direções.
O eurasianismo pretende em primeiro lugar, ser uma alternativa à globalização. Dugin entende o modelo de globalização atual como a representação do expansionismo dos EUA e seus aliados da OTAN, ou seja, como a representação de um mundo unipolar que tem nos estadunidenses seu modelo econômico e filosófico e que quer impor ao mundo seus valores liberais, individualistas e democráticos.
Do coração da Rússia para o mundo
Como alternativa ao modelo de globalização atual, Dugin fornece um novo modelo de globalização, baseado na conjugação de ideias de H. Mackinder e K. Haushofer. Retira de Mackinder a ideia de luta entre terra e mar, e de que quem domina o coração da Eurásia domina o mundo. Defende, como o geopolítico estadunidense Bzerzinki, que a Rússia é o coração da Eurásia e representa o centro das forças terrestres (eurasianistas) em luta contra as forças marítimas (atlantistas) guiadas pelos EUA.
De Haushofer, se inspira na ideia de pan-regiões e as redesenha para defender, contra o mundo unipolar da globalização atual, um novo modelo de globalização multipolar, com quatro Zonas Meridionais: a zona Anglo-Americana, a zona Euro-Africana, a zona Rússia-Ásia Central e a zona do Pacífico. Nesse esquema, a zona Anglo-Americana (Atlantista) seria contrabalançada pelas outras três zonas.
Cada zona meridional no projeto eurasiano consiste de vários “grandes espaços” ou “impérios democráticos” (Figura 2). Cada um deles possui liberdade relativa e independência, mas está estrategicamente integrado em uma zona meridiana correspondente. Os grandes espaços correspondem às fronteiras das civilizações e incluem vários Estados-nações ou união de Estados.
A Rússia, para dominar o imenso espaço da zona meridional Rússia-Ásia Central, precisa, no âmbito interno, originar um Estado com diversas etnias e religiões,bem como, no plano externo, se organizar por meio de alianças, com a elaboração de projetos especiais no âmbito pan-europeu, com a Alemanha, no pan-árabe, com o Irã, e no pan-asiático, com o Japão (MARCU, 2007).
Devido à necessidade de integração continental, a Rússia deveria estabelecer uma nova geopolítica no sul da Eurásia, de tal maneira que a Índia, a Indochina
e os Estados islâmicos passariam a ser um “teatro de manobras continentais de posição” (MARCU, 2007 segundo TEIXEIRA, 2009), com o fim de convergir os objetivos estratégicos dessa região ao centro eurasiático representado por Moscou (TEIXEIRA, 2004). Dugin desenvolve tal ideia a partir do conceito de vetores abertos que se originam em Moscou, passam pelos vizinhos próximos, e que chegam aos Estados europeus, asiáticos e islâmicos (DUGIN, 2004).
Assim, as características estratégicas do eurasianismo estão relacionadas a diferentes ações que devem ser tomadas respeitando aspectos militares, econômicos, políticos, étnicos e religiosos daquela região.
Além dos eixos estratégicos com os vizinhos próximos, vetores como Moscou-Teerã, Moscou-Nova Deli e Moscou-Ancara são considerados básicos para essa integração, e há ainda planos para o Afeganistão e Paquistão, a região do Cáucaso e a Ásia Central, assim como a valorização das relações com a França e a Alemanha através dos vetores Moscou-Paris e Moscou-Berlim, respectivamente.
Eixo Moscou-Teerã
Na integração russo-asiática a questão central deste processo é a implementação de um eixo Moscou-Teerã. O processo interno depende do sucesso do estabelecimento de uma parceria de médio e longo prazo com o Irã. A união dos potenciais econômico, militar e político de Rússia e Irã aumentará o processo de integração da zona, tornando-a irreversível e autônoma.
O eixo Moscou-Teerã será a base para uma integração regional posterior. Tanto Moscou quanto o Irã são potências autosuficientes, na visão de Dugin, aptas a criarem seu próprio modelo organizacional para a região.
Eixo Moscou-Nova Deli
A cooperação russo-indiana forma a base do segundo mais importante eixo meridiano de integração no continente eurasiano e em seus sistemas de segurança coletiva. Moscou terá um papel importante ao diminuir as tensões entre Nova Deli e Islamabad (Kashmir). O plano eurasiano para a Índia, patrocinado por Moscou, é a criação de uma federação que refletirá a diversidade da sociedade indiana com seus numerosos grupos étnicos e religiosos, incluindo hindus, sikhs e muçulmanos.
Eixo Moscou-Ankara
O principal parceiro regional no processo de integração da Ásia Central é a Turquia. A ideia eurasiana está se tornando popular por lá na atualmente devido ao entrelaçamento das tendências ocidentais e orientais. A Turquia reconhece suas diferenças civilizacionais com a União Europeia, seus interesses e objetivos regionais distintos, a ameaça da globalização e a consequente perda de soberania. É imperativo para a Turquia estabelecer uma parceria estratégica com a Federação Russa e o Irã. A Turquia só será capaz de manter suas tradições dentro de um modelo multipolar de mundo. E parece que certas facções da sociedade turca entendem esta situação, desde elites políticas e socialistas até religiosas e militares. Assim, o eixo Moscou-Ankara pode se tornar uma realidade geopolítica apesar do longo período de hostilidade mútua.
O plano eurasiano para Afeganistão e Paquistão
O vetor de integração com o Irã tem importância vital para que a Rússia ganhe acesso a portos de águas quentes e também para a reorganização político-religiosa da Ásia Central (países asiáticos da Comunidade dos Estados Independentes – CEI, Afeganistão e Paquistão). Uma cooperação próxima com o Irã implica na transformação da área afegã-paquistanesa em uma confederação islâmica livre, leal tanto a Moscou quanto ao Irã.A razão desta necessidade é que os Estados independentes de Afeganistão e Paquistão continuarão a ser fonte de desestabilização, ameaçando os países vizinhos. A luta geopolítica eurasiana providenciará a capacidade para implementar uma nova federação central-asiática e transformar esta região complicada em uma área de cooperação e prosperidade.
O Cáucaso
O Cáucaso é a região mais problemática para a integração eurasiana dado seu mosaico de culturas e etnias, que facilmente eleva as tensões entre as nações.
Essa diversidade cultural é uma das principais armas exploradas por aqueles países que buscam parar o processo de integração do continente eurasiano. A região do Cáucaso é habitada por nações que pertencem a diferentes Estados e áreas civilizacionais. A região deve ser um polígono de testes de diferentes métodos de cooperação entre os povos, pois o que for bem sucedido ali poderá sê-lo ao longo do continente eurasiano. A solução eurasiana para este processo jaz não na criação de Estados étnicos ou estritamente associados a uma só nação, mas no desenvolvimento de uma federação flexível fundamentada nas diferenças étnicas e culturais no interior de um contexto estratégico comum da zona meridiana. O resultado deste plano é um sistema de um semieixo entre Moscou e os centros do Cáucaso (Moscou-Baku, Moscou-Erevan, Moscou-Tbilisi, Moscou-Mahachkala, Moscou-Grozni etc.) e entre os centros caucasianos e os aliados da Rússia no interior do projeto eurasiano (Baku-Ankara, Erevan-Teerã etc.).
O plano eurasiano para a Ásia Central
A Ásia Central deve se mover rumo à integração com a Federação Russa, em um bloco unido estratégica e economicamente no interior da estrutura de união eurasiana, a sucessora da CEI. A principal função dessa área específica é a reaproximação da Rússia com os países do Islã continental (Irã, Paquistão, Afeganistão). Desde o início, o setor da Ásia Central deve possuir vários vetores de integração. Um plano tornará a Federação Russa o principal parceiro (similaridades de cultura, interesses econômicos e energéticos convergentes, e uma estratégia comum de sistema de segurança). O plano alternativo é colocar o foco em semelhanças étnicas e religiosas: mundos turco, iraniano e islâmico.
Considerações finais
Como disse Dugin, “Este é o Eurasianismo, a política da heartland” (GLOVER citado em TEIXEIRA, 2009). O pensamento eurasianista é o que mais se alinha à política russa atual, e isso pode ser acompanhado diariamente nos jornais russos onde se verá Putin e Medvedev não apenas pondo em prática a teoria, mas citando-a explicitamente5. O eurasianismo põe-se como uma alternativa a filosofia ocidental e a sua economia, bem como mistura geopolítica e espiritualidade tradicional, esses itens, entretanto, fogem ao escopo do presente trabalho, mas os interessados poderão encontrar referências aos trabalhos de René Guénon e Julius Evola, ambos vinculados a produção intelectual de Dugin.
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Dídimo Matos
Possui graduação em Filosofia pelo Instituto de Ensino Superior do Centro Oeste (2004), Mestrado em Filosofia pela Universidade Federal da Paraíba.
Atualmente dá aulas nas redes pública e privada da Paraíba. Tem experiência na área de Filosofia, com ênfase em filosofia analítica, círculo de Viena, lógicas clássicas e não clássicas, paraconsistência, Newton da Costa.
Tem interesse em geopolítica, educação, filosofia política, ética e filosofia da linguagem. Atualmente é doutorando no Programa de Pós-Graduação em Geografia Humana na Universidade de São Paulo, USP, no qual desenvolve pesquisa em geopolítica focando o Eurasianismo de Alexander Dugin e o Meridionalismo de André Martin.
Referências Dugin, Alexander. A grande Guerra dos Continentes. Lisboa: Antagonista, 2006. _____. A Ideia Eurasiana. Disponível emhttp://pbpolitica.blogspot.com.br/2012/02/ideia-eurasiana.html _____. Visão Eurasianista. Disponível emhttp://pbpolitica.blogspot.com.br/2010/04/visao-eurasianista.html MARCU, Silvia. La geopolítica de la Rusia postsoviética: desintegración, renacimiento de una potencia y nuevas corrientes de pensamiento geopolítico. Scripta Nova: revista electrónica de geografía y ciencias sociales. Universidad de Barcelona, v. XI, n. 253, dic. 2007. Disponível em: http://www.ub.es/geocrit/sn/sn-253.htm SANTOS, Eduardo Silvestre dos. O eurasianismo: a “nova” geopolítica russa. Jornal Defesa e Relações Internacionais. Lisboa, nov. 2004. Disponível em:http://www.jornaldefesa.com.pt/conteudos/view_txt.asp?id=97 Teixeira, José A. B. J. O pensamento geopolítico da Rússia no início do século XXI e a geopolítica clássica. Revista da Escola Superior de Guerra Naval. Rio de Janeiro, n. 13, junho de 2009.
1Mestre em filosofia na UFPB, professor de filosofia da SECPB. 2Termo também com vários significados como veremos adiante. 3Eurásia seria um subcontinente plantado entre a Europa e a Ásia. Outro emprego seria como parte integrante do Império Russo. 4Dugin, Alexander. Visão Eurasianista. Disponível emhttp://pbpolitica.blogspot.com.br/2010/04/visao-eurasianista.html
5Os principais jornais russos apresentam formato on line inclusive em língua portuguesa. Um exemplo pode ser consultado em:http://gazetarussa.com.br/articles/2011/10/19/o_novo_projeto_de_integracao_para_eurasia_um_futuro_que_nasce_hoje_12701
Para oeste, ho, pela estrada Eurásia BRIC da
China, ho 22/3/2015, Pepe Escobar, (novo) Asia Times Online
“…é imperativo que nenhum desafiante eurasiano apareça
capaz de dominar a Eurásia e, pois, de desafiar também os EUA”
(Zbigniew Brzezinski, The Grand Chessboard, 1997).
Se “O que se guarda num nome?!”,[1] imaginem num ideograma! Tudo. Um
único ideograma chinês 介, jie(“entre duas coisas”) – ilustra claramente
a iniciativa chave de política exterior do novo sonho chinês.
Na parte superior do ideograma de quatro gestos-traços – a qual deve ser lida
simbolicamente como o telhado de uma casa –, o gesto-traço à esquerda significa o
Cinturão Econômico da Rota da Seda; e o gesto-traço à direita significa a Rota da
Seda Marítima do Século 21. Na parte inferior do ideograma, o gesto-traço à esquerda
significa o corredor China-Paquistão, via província Xinjiang; e o gesto-traço à direita, o
corredor China-Myanmar-Bangladesh-Índia, via província Yunnan.
A cultura chinesa é farta em fórmulas, lemas – e símbolos. Com muitos intelectuais
chineses já temerosos de que a recente manifestação do “poder suave” do Império do
Meio acabe perdida na tradução, o ideogramajie acima – repleto de conectividade – já
é o ponto de partida para que 1,3 bilhão de chineses, mais os chineses da diáspora,
visualizem os dois eixos gêmeos – continental e naval – da visão da Nova Rota da
Seda exposta pelo presidente Xi Jinping, conceito também conhecido como “Uma
Estrada, Um Cinto-em-volta”.
Em termos práticos, também ajuda que a Nova Rota da Seda venha empurrada por
um Fundo da Rota da Seda, de multibilhões de dólares, e pelo Novo Banco Asiático de
Investimento em Infraestrutura [orig. Asian Infrastructure Investment Bank (AIIB)], o
qual, não por acaso, atraiu a atenção de investidores europeus.
A Nova Rota da Seda, de fato, estradas, simboliza o movimento de pivô da China na
direção de um bastião ancestral: a Eurásia. Implica uma China poderosa, ainda mais
rica pelo que há à volta daquele bastião, e sem perder a própria essência de
civilização-estado. Pode-se chamar de remix moderno das dinastias Tang, Sung e
Ming (inicial) – como Pequim fez ver, inteligente e recentemente, mediante uma
exposição soberba, no Museu Nacional da China, de peças raras da Rota da Seda
reunidas de vários museus regionais.
No passado, a China já realizou uma grande empreitada de infraestrutura de
unificação: a Grande Muralha. Para o futuro, tem o projeto gigante de unificar a
Eurásia via ferrovia de alta velocidade. Se se considera a amplidão dessa visão, a
ideia de mostrar Xi como se só pensasse em se igualar a Mao Zedong e a Deng
Xiaoping soa tão pedestre!
Claro que o novo impulso da China pode ser interpretado como projeto para um novo
sistema tributário, de vias afluentes ordenadas e centradas em Pequim. Ao mesmo
tempo, muitos nos EUA sentem-se pouco confortáveis com a ideia de que a Nova
Rota da Seda possa ser uma resposta geopolítica, “desenvolvimento pacífico”,
resposta “ganha-ganha”, à pivotagem de Obama, movida a Pentágono, na direção da
Ásia.
Pequim apressou-se a desqualificar quaisquer noções de aspiração à hegemonia. Os
chineses têm repetido quenão se trata de nenhum Plano Marshall. É inegável que o
Plano Marshall “cobriu só nações ocidentais e excluiu todos os países e regiões que o
ocidente supunha que fossem ideologicamente próximas da União Soviética”. A China,
por outro lado, está focada em integrar “economias emergentes” numa vasta rede
paneurasiana de trocas/comércio.
Achtung! Seidenstrasse! (Atenção! Rota da Seda!)
Não surpreende que as principais nações, na devastada União Europeia, tenham
gravitado para o lado do Novo Banco Asiático de Investimento de Infraestrutura (AIIB)
– que desempenhará papel chave na(s) Nova(s) Rota(s) da Seda.
Ferdinand von Richthofen – geógrafo alemão – foi quem inventou o conceito
de Seidenstrasse (Rota da Seda). Marco Polo conectou para sempre a Itália, à Rota
da Seda. A União Europeia já é a principal parceira comercial da China. E, outra vez
muito simbólico, em 2015 festejam-se 40 anos das relações China-UE. Está aí, bem
visível, a possibilidade de que surja um Fundo Sino-Europeu que financie
infraestrutura e até projetos de energia limpa por toda uma Eurásia já integrada.
É como se o Anjo da História – aquela imagem espantosa pintada por Paul Klee e
revisitada pelo filósofo Walter Benjamin – estivesse agora tentando nos dizer que uma
sinergia de Seidenstrasse China-UE do século 21 é hoje absolutamente inevitável. E
que, crucialmente, terá de incluir a Rússia, que é parte vital da Nova Rota da Seda
mediante um já próximo upgrade numa ferrovia Trans-Siberiana de alta velocidade, de
$280 bilhões, financiados por Rússia-China. É aí onde o projeto da Nova Rota da
Seda e a ideia inicial do presidente Putin, de um empório comercial gigante “de Lisboa
a Vladivostok”, efetivamente se fundem.
Em paralelo, a Rota da Seda Marítima do século 21 aprofundará a interação comercial
já frenética, por mar, entre China e o Sudeste da Ásia. A província Fujian – cara a cara
com Taiwan – desempenhará papel chave. Aspecto crucialmente importante, Xi viveu
muitos anos de sua vida em Fujian. E Hong Kong, não por acaso, também
querparticipar na ação.
Todos esses desenvolvimentos são viáveis, porque a China finalmente ficou pronta
para se tornar exportadora massiva de capital líquido, e a principal fonte de crédito
para o Sul Global. Em poucos meses, Pequim lançará o Sistema Internacional Chinês
de Pagamento [China International Payment System (CIPS), destinado a turbinar o
yuan como moeda global chave para todos os tipos de trocas. Há também o
Banco AIIB. E se isso não bastasse, ainda há o Novo Banco de Desenvolvimento
lançado pelos BRICSs para concorrer com o Banco Mundial, que tem sede em Xangai.
Pode-se contra-argumentar que o sucesso de toda a Rota da Seda depende de como
Pequim lidará com a agitada Xinjiang, terra dos uigures – que é, sem dúvida, um dos
nodos chaves da Eurásia. Essa é uma subtrama no roteiro – marcada pela
insegurança, para dizer o mínimo – que se terá de acompanhar em detalhe pelo resto
da década. Certo, isso sim, é que a maior parte da Ásia sentirá o impulso tremendo da
China na Eurásia.
E a Eurásia – na direção contrária à do perene pensamento desejante de Brzezinski –
provavelmente assumirá o formato de um desafio geopolítico: uma parceria estratégica
China-Rússia de facto que se manifesta em várias facetas da Nova Rota da Seda e
que também dará nova força à Organização de Cooperação de Xangai [orig.Shanghai
Cooperation Organization (SCO)].
Com o tempo, ambos, Irã e Paquistão, serão também admitidos como membros
da SCO. Relações muito próximas entre o que foi a Pérsia antiga e a China estendem-
se por dois milênios – e, agora, Pequim as vê como questão de segurança nacional. O
Paquistão é outro nodo essencial da Rota da Seda Marítima, especialmente por causa
do porto de Gwadar no Oceano Índico, o qual, em poucos anos, pode ser também
ponto chave de passagem do gasoduto Irã-Paquistão. E pode também vir a ser o
ponto inicial de outro grande gambito chinês no Oleogasodutostão, paralelo à rodovia
Karakorum, que levará gás para Xinjiang.
Para Pequim, Irã e Paquistão – a intersecção do sudoeste da Ásia e do sul da Ásia –
são nodos fundamentalmente estratégicos da Nova Rota da Seda. Por ali, a China
pode projetar seu poder comercial/de negócios não só para o Oceano Índico, mas
também para o Golfo Persa.
Got vision, will travel[2] [*Tive uma visão, vou viajar]
O alarme que toma conta de Washington ante esses desenvolvimentos evidencia a
rutilante ausência de qualquer visão made-in-the-USA que seduzisse a opinião pública
paneurasiana – além da turva postura de pivoteamento militar, misturada à incansável
expansão da OTAN, e da fraude corporativa chamada TTIP, a ‘parceria’ de “livre
comércio”, conhecida por toda a Ásia como “OTAN comercial”.
O contragolpe contra os itens acima listados pode já estar vindo via os BRICSs; via a
Organização de Cooperação de Xangai; via o ininterrupto fortalecimento da parceira
estratégica China-Rússia. Há também a expansão da União Eurasiana (Armênia,
Bielorrússia, Cazaquistão, Rússia – aos quais logo se incorporará o Quirguistão, a ser
seguido pelo Tadjiquistão). No Oriente Médio, a Síria estuda seriamente a
possibilidade, e um acordo comercial com o Egito já está alinhavado. No sudeste
asiático, até o final de 2015 estará firmado o pacto com o Vietnã.
Uma agenda “secreta” de Rússia e China, para ajudar a concluir um acordo Irã-P5+1
pavimenta a estrada para que Teerã seja admitida na Organização de Cooperação de
Xangai como membro pleno. Pode-se esperar, para 2016, um alinhamento
na SCO que unirá pelo menos 60% da Eurásia, com população de 3,5 bilhões de
pessoas e riqueza de petróleo e gás que supera a dos estados do Conselho de
Cooperação do Golfo.
Por tudo isso, a verdadeira história não é como se dará o colapso da China, como
tanto insiste David Shambaugh, dito o segundo maior especialista norte-americano em
China (quem é o primeiro? Henry Kissinger?). Essa linha já foi firmemente
desqualificada por várias fontes.
A verdadeira história, que um Asia Times revitalizado cobrirá em detalhes nos
próximos anos, é como os muitíssimos aspectos da Nova Rota da Seda estarão
configurando um novo sonho eurasiano. Tenha visão, viaje.[3] Bon voyage. *****
[1] Orig. What’s in a name. É fala de Julieta, em Romeu e Julieta, ato 2, cena 2: “O que há num nome?! O que chamamos rosa, com outro nome não teria igual perfume?” [NTs].
[2] A tradução é tentativa. Impossível saber com certeza, mas a expressão parece ser um reaproveitamento metafórico de “Have Gun. Will Travel” [aproximadamente, talvez, “Tenho arma. Vou viajar”]. Sobre o seriado norte-americano (1957-1963), do gênero western, que levou esse título, ver http://en.wikipedia.org/wiki/Have_Gun_%E2%80%93_Will_Travel [NTs].
[3] Orig. “Have vision, will travel”. Parece ser mais uma variação de “Have Gun. Will Travel” (vide nota 2). A tradução aqui também é tentativa. Todos os comentários e correções são bem-vindos. [NTs].
O reforço da aliança global entre China e Rússia
Umberto Martins * 2015
A parceria entre China e Rússia ganhou novo impulso na última semana, com o encontro dos presidentes Xi Jinping e Vladimir Putin em Moscou na véspera da comemoração do Dia da Vitória, 9 de maio, no 70º aniversário da vitória da União Soviética contra a Alemanha nazista. Os dois mandatários fecharam um acordo de US$ 25 bilhões em empréstimos chineses a empresas russas e diversos outros compromissos mútuos, inclusive um pacto pelo “reforço da aliança global” entre as duas nações.
O presidente chinês enalteceu a “forte amizade” entre Pequim e Moscou, nascida, conforme afirmou, “nos combates da 2ª Guerra Mundial”, nos quais os dois povos guerrearam contra o eixo nazifascista - os soviéticos lutaram contra os alemães enquanto os chineses enfrentaram o imperialismo japonês. Putin afirmou que a China “é a principal aliada estratégica da Rússia”. Os dois líderes alertaram para o risco emergente do neofascismo no mundo. Merece também registro a realização da “Cooperação Marítima 2015”, exercício militar conjunto das duas potências nucleares no Mediterrâneo. Uma coluna de tropas chinesas participou da parada do Dia da Vitória, em mais um sinal da “forte amizade” mencionada por Jinping. Registre-se que os dois países, componentes do Brics, também fecharam recentemente um ousado acordo energético que em 30 anos pode mobilizar US$ 400 bilhões. Contraponto O fortalecimento da parceria entre Rússia e China ocorre no momento em que se acirram os conflitos diplomáticos entre os EUA e o governo Putin, alvo de sanções econômicas e uma dura campanha de isolamento e desestabilização, que o império promove em aliança com as potências capitalistas da Europa manobrando a perigosa situação da Ucrânia (onde patrocinaram um golpe e a ascensão de neofascistas ao poder) e procurando expandir o domínio da Otan na região. O governo Obama pretende sufocar Putin com as sanções e forçar a Rússia ao recuo e à humilhação na Ucrânia. Pressionados pela Casa Branca, os líderes do chamado Ocidente (EUA, União Europeia e Japão) boicotaram a comemoração, que não obstante reuniu 30 líderes estrangeiros e o secretário geral da ONU, Ban Ki-moon. Foi um acontecimento emblemático das transformações que estão em curso no mundo e das contradições a elas subjacentes. A China não só não aderiu às crescentes hostilidades do império contra Putin como faz gestos e toma atitudes concretas para evitar o isolamento político e a asfixia financeira da Rússia pelas potências capitalistas. É o caso dos empréstimos de US$ 25 bilhões anunciados dia 8, que certamente vão aliviar a situação do país, cuja economia está em crise devido à queda do preço do petróleo e às sanções ocidentais. Alguns analistas apostavam que Pequim não ia se juntar a Moscou, afrontando Washington, e nem estaria preparada para socorrer financeiramente a Rússia, mas os fatos apontam o contrário. O contraste entre os dois movimentos é notório e reflete uma disputa bem mais
abrangente do que aparenta em torno da liderança mundial, peleja que se dá nos marcos de uma crise da hegemonia ou da sangrenta e controvertida Pax Americana. Embora os protagonistas principais sejam os Estados Unidos e a China, eles não são os únicos atores relevantes deste drama histórico. O fortalecimento da aliança entre Rússia e China, duas potências militares com poder de veto no Conselho de Segurança da ONU, tem o potencial de alterar substancialmente a correlação de forças internacional e criar um sonoro contraponto ao exercício, sempre unilateral, da hegemonia dos EUA. Constitui também mais uma evidência de que a ordem mundial remanescente dos acordos de Breton Woods está esgotada e o mundo vive, por consequência, uma transição para um novo tempo que abre caminho através das contradições e da luta, num processo que não será tranquilo ou pacífico e cujo desfecho não está desenhado. Convergência de interesses Embora o palco desses acontecimentos possa parecer distante do Brasil, assim como da Venezuela e outros países latino-americanos, a verdade é que eles estão estreitamente interligados à luta de classes que se desenvolve em nossas sociedades e que, como em todo o mundo, está em franco acirramento. Há uma fina sintonia entre o empenho da China e do Brics por uma nova ordem internacional e as iniciativas de governos, nações e povos latino-americanos e caribenhos pela integração política e econômica e pelo desenvolvimento soberano, traduzidos na rejeição da Alca e criação da Celac, caminho que nos conduz a um novo arranjo geopolítico regional que se contrapõe objetivamente aos desígnios do império estadunidense. As convergências de interesses no plano da economia política superam e ofuscam as divergências no intercâmbio comercial entre as indústrias brasileiras e chinesas, embora estas não sejam irrelevantes. A China, que hoje é a maior economia do mundo, se transformou na principal parceira comercial do Brasil (desde 2009) e da América Latina. Acumulou também um forte “cacife financeiro” para respaldar sua influência econômica, conforme notou o jornal Valor em editorial. Ao longo dos últimos anos o Estado chinês emprestou mais de US$ 50 bilhões à Venezuela, investiu um valor superior a US$ 20 bilhões na Argentina, países rebeldes ao FMI e submetidos ao forte boicote do sistema financeiro ocidental, e oferta projetos de infraestrutura no valor de US$ 59 bilhões ao Brasil (http://www.valor.com.br/opiniao/4045206/cacife-financeiro-sustenta-ofensiva-comercial-chinesa). Os investimentos chineses no exterior têm mais sentido político, estratégico, do que os realizados pelas potências ocidentais na medida em que estão sujeitos predominantemente ao controle direto do Estado e não das multinacionais, ou seja, do capital privado, cujo objetivo maior é sempre em primeiro plano o lucro. Ou seja, tais investimentos não se submetem necessariamente à lógica estreita
do capital e percorrem um caminho diferente do trilhado pelos EUA e Europa. A Petrobras obteve em abril um empréstimo de US$ 3,5 bilhões do Banco de Desenvolvimento da China no momento em que o sistema financeiro ocidental negava crédito e procurava sufocar a estatal. O estabelecimento de uma ordem internacional efetivamente democrática e multilateral, defendido pelos dirigentes do Partido Comunista Chinês, coincide com o anseio e a luta dos povos, nações e governos progressistas pela integração soberana e por um novo arranjo geopolítico regional. Os interesses dos EUA em Nossa América estão alinhados aos das forças mais obscuras e reacionárias, ao que podemos caracterizar de um modo geral como interesses de classe das burguesias locais. Já os objetivos atuais da China, em que pesem as contradições que rondam a corrente comercial e as relações de troca, convergem objetivamente com os interesses da classe trabalhadora e dos governos progressistas na região e em particular com a luta por um Brasil socialmente justo, democrático e soberano, que colidem com os propósitos da burguesia imperialista estadunidense e seus lacaios por aqui, recrutados no seio da burguesia nacional. O Brics tem tudo a ver com a Celac, a Unasul, a Alba e o Mercosul. E absolutamente nada a ver com a Alca. A ascensão da China à condição de grande potência financeira pode ser uma válvula de escape para os países economicamente dependentes que estão hoje submetidos ao tacão de ferro do sistema financeiro do dito Ocidente, às chantagens e imposições de rentistas e fundos abutres norte-americanos e europeus. O reforço da aliança econômica, política e militar entre China e Rússia é uma notícia alvissareira para a humanidade e oxalá que promova “um escudo poderoso da paz e da segurança mundial”, conforme disse Fidel Castro (http://www.vermelho.org.br/noticia/263562-9), capaz de conter os ímpetos belicosos do império e afastar o fantasma da guerra, que voltou a assombrar e pode abortar a história humana.
PENTAGONO.- EEUU: PODER MILITAR Y ACUMULACIÓN DE CAPITAL
¿POR QUÉ LA MÁS IMPORTANTE CORPORACIÓN MULTINACIONAL AGACHA LA
CABEZA ANTE UNA POLÍTICA EXTERIOR IMPERIAL DE LA CUAL RESULTA LA PÉRDIDA DE OPORTUNIDADES ECONÓMICAS?
James Petras, REBELIÓN, 30 de octubre de 2014,
NO HAY DUDA de que tras las conquistas militares estadounidenses, guerras, ocupaciones y sanciones –y durante unos cuantos años después–, las corporaciones estadounidenses han salido perdiendo en relación con posibles sitios donde invertir provechosamente. Las pérdidas mayores se han dado en la
explotación de recursos naturales –sobre todo, gas y petróleo– en Medio Oriente, el Golfo Pérsico y Asia del Sur.
Como resultado de ello, los observadores han especulado acerca de profundas fisuras e intereses contradictorios en el interior de la clase dirigente estadounidense. Su argumento es que, por un lado, las élites políticas vinculadas con los grupos de presión proisraelíes y el poderoso complejo industrial-militar promueven una política exterior altamente militarizada y, por el otro, algunas de las corporaciones más grandes y ricas tratan de encontrar soluciones basadas en la diplomacia.
Aun así, da la impresión de que la “división en las altas esferas” no se ha materializado. Por ejemplo, no hay pruebas de que las empresas multinacionales del petróleo hayan procurado oponerse a las guerras de Irak, Libia, Afganistán y Siria. Tampoco las 10 mayores empresas petrolíferas –con un activo neto por encima del 1.100.000 millones de dólares– movilizaron suslobbies e influencias en los medios por la causa de una penetración pacífica del capital y una dominación de los yacimientos hidrocarburíferos por medio de sus clientes neoliberales.
En el período previo a la guerra de Irak, las tres mayores empresas estadounidenses del sector del petróleo –Exxon-Mobil, Chevron y Conoco Phillips–, impacientes por explotar la tercera reserva mundial de crudo, no hicieron lobby en el Congreso ni ejercieron presión sobre la Administración Bush o, más tarde, la Administración Obama para conseguir una solución pacífica del conflicto. De nada sirvió que las “Big Ten” (las 10 principales empresas petrolíferas de EEUU NdT) desafiaran con una política alternativa al lobby israelí a favor de la guerra y sus falsos argumentos que aseguraban que Irak tenía armas de destrucción masiva.
Una “pasividad política” similar se puso en evidencia durante el período anterior a la guerra en Libia. En realidad, las grandes petroleras estaban a punto de firmar unos lucrativos acuerdos cuando los militares de Washington volvieron a golpear y destruyeron el gobierno libio e hicieron trizas la estructura económica libia.
Es posible que las grandes petroleras hayan lamentado la pérdida del crudo y de los beneficios económicos pero no hubo un esfuerzo concertado –ni antes ni después de la debacle libia–para examinar
críticamente o evaluar la pérdida de la muy importante región productora de crudo. En el caso de las sanciones económicas contra Irán, que posee la segunda reserva mundial de hidrocarburos, las multinacionales se hicieron notar por su ausencia en los pasillos del Congreso y el departamento del Tesoro. Los prominentes sionistas y responsables políticos Stuart Levey y David Cohen diseñaron y pusieron en marcha unas sanciones que impedían invertir o comerciar con Teherán a cualquier empresa petrolífera de Estados Unidos (y de la Unión Europea).
De hecho, a pesar de la aparente diferencia de intereses entre una política exterior altamente militarizada y el esfuerzo global de la corporación multinacional destinado a la acumulación de capital, no han surgido conflictos de tipo político. La pregunta básica que se hace este documento es esta: ¿Por qué la más importante corporación multinacional agacha la cabeza ante una política exterior imperial de la cual resulta la pérdida de oportunidades económicas?
¿Por qué fracasa la corporación multinacional si trata de oponerse al militarismo imperial?
En la cuestión del acomodamiento de la corporación multinacional a la altamente militarizada expansión imperial hay varias hipótesis posibles.
En primer lugar, los CEO (acrónimo de Chief Executive Officer: máxima autoridad ejecutiva de una empresa. NdT) de la corporación multinacional quizás pensaran que las guerras, sobre todo la de Irak, serían breves y conducirían a una etapa de estabilidad bajo un régimenclientelar deseoso y capaz de privatizar y desnacionalizar el sector del petróleo y el gas. En otras palabras, las élites del petróleo compraron los argumentos de Runsfeld, Cheney, Wolfowitz y Feith, que decían que “la guerra se pagaría sola”.
En segundo lugar, incluso después de la larga y destructiva guerra y la profundización de los conflictos sectarios, muchos CEO creían que la década perdida se compensaría con una “larga etapa” de ganancias. Pensaban que los beneficios fluirían una vez que se estabilizara el país. Sin embargo, las mayores entradas por el crudo habidas después de 2010 resultaron inmediatamente amenazadas por la ofensiva del Estado Islámico. Los “tiempos” imaginados por
los estrategas fueron al menos subestimados, si no totalmente equivocados.
En tercer lugar, la mayor parte de los CEO creía que la invasión de Libia por fuerzas de EEUU y la OTAN daría lugar a una situación de propiedad monopólica con beneficios mayores de los que recibían de la empresa mixta (mitad pública, mitad privada) con el régimen de Gadafi. Los principales del petróleo pensaban que se harían con el control total o monopólico del sector. Es decir, que la guerra permitiría que la corporación multinacional del crudo tuviera asegurados beneficios monopólicos durante un prolongado período. En lugar de eso, el final de una asociación estable condujo a la corporación a un mundo hobbesiano en el que el caos inhibió cualquier beneficio económico extraordinario y de largo plazo.
En cuarto lugar, la corporación multinacional, incluyendo las del sector del petróleo, había invertido en cientos de empresas de varias docenas de países. Estas empresas no se vinculan con una sola localización. Dependen entonces de un estado imperial militarizado que defienda sus intereses globales. Por lo tanto, es probable que estén poco dispuestas a cuestionar o desafiar a los militares en, digamos Irak, por el temor de que eso podría poner en peligro intervenciones imperiales estadounidenses en otros sitios del mundo.
En quinto término, muchas multinacionales están entrelazadas en distintos sectores económicos: invierten en campos petrolíferos y en refinerías; en bancos, financieras y aseguradoras, como también en distintos sectores extractivos. Según su grado de diversificación del capital, las corporaciones son más o menos dependientes en cada región, sector de actividad o fuente de beneficios. Por consiguiente, las guerras destructivas que se produzcan en uno o en varios países, es posible que no tengan efectos tan perjudiciales como sucedía en el pasado, cuando las grandes petroleras solo se ocupaban del petróleo.
En sexto lugar, el énfasis de las agencias del Estado imperial de EEUU está puesto mayormente en las actividades militares y no en las de tipo económico. El grueso de la burocracia internacional de Estados Unidos está compuesto por oficiales militares, de inteligencia y de contrainsurgencia. Por el contrario, China, Japón, Alemania y otros países emergentes (Brasil, Rusia e India) tienen un gran componente económico en su burocracia de ultramar. La diferencia es importante. Las corporaciones estadounidenses no
tienen acceso a funcionarios del ámbito económico como sí lo tienen las grandes empresas chinas. La expansión de China y sus corporaciones fuera de sus fronteras se ha construido alrededor de un sistema de poderosos apoyos económicos y agencias. Las corporaciones estadounidenses deben tratar con jefes de las Fuerzas Especiales, agentes secretos y “funcionarios” muy militarizados. En otras palabras, es ineludible que el CEO en búsqueda de “apoyo estatal” se vea frente a interlocutores militares en su mayor parte, que ven a las corporaciones como instrumentos de su política en lugar de sujetos políticos.
Séptimo, los últimos 10 años han sido testigos del surgimiento del sector financiero como destinatario dominante del apoyo gubernamental. Como resultado de ello, la gran banca ejerce una importante influencia en las políticas públicas. Siendo así, la verdad es que mucho del dinero del “negocio del petróleo” ha ido a parar a las finanzas y a los beneficios acumulados por el saqueo del Tesoro. Como consecuencia de esto, los intereses del petróleo se fusionan con los del sector financiero; en gran medida, sus “beneficios” dependen del Estado, como sucede en las explotaciones en el extranjero.
En octavo término, mientras las grandes petroleras tienen enormes sumas de capital, localizaciones diversas y diversificación de actividades, su dependencia de la protección estatal (militar) debilita la oposición que puedan sentir en relación con las guerras que Estados Unidos libre en países con posibilidades de lucro relacionadas con el petróleo. Como consecuencia de esto, otros poderosos lobbies que abogan por la guerra y no se ven exigidos por esas limitaciones, gozan de total libertad. Por ejemplo, los sectores de poder que trabajan a favor de Israel tienen bastante menos “capital” que cualquiera de las 10 petroleras más importantes; sin embargo, cuentan con un número mayor de lobbistas con mucha más influencia sobre los congresistas. Por otra parte, su propaganda (apalancamiento mediático) es mucho más efectiva que la de las grandes petroleras. Son muchos los críticos de la política exterior de Estados Unidos, incluyendo sus políticas relacionadas con el uso de la fuerza militar y de las sanciones, que están más dispuestos a criticar a las grandes petroleras que a los lobbiessionistas.
Finalmente, el aumento de la producción estadounidense de hidrocarburos como resultado del empleo de la tecnología
del fracking proporciona a las grandes petroleras nuevas localizaciones –lejos de Medio Oriente– donde obtener beneficios económicos, incluso pensando que los costos pueden ser mayores y de menor duración las explotaciones. La industria del petróleo ha reemplazado las pérdidas en Medio Oriente –debidas a las guerras–con inversiones en el territorio nacional.
No obstante, existe tensión y conflicto entre el capital ligado al petróleo y el poder militar. El caso más reciente tiene que ver con los planes de inversión de Exxon-Mobil por un total de 38.000 millones de dólares en un emprendimiento conjunto –con la concesión petrolera rusaRosneft– en el Ártico ruso. Las sanciones contra Rusia impuestas por Obama han paralizado el acuerdo, lo que ha provocado gran consternación de los CEO de Exxon-Mobil, que ya había invertido 3.200 millones de dólares en una zona tan extensa como el estado de Texas.
Conclusión
Es posible que los conflictos –los latentes y los ya manifiestos– entre el poder militar y la expansión económica al final encuentren una mayor articulación en Washington. Sin embargo, de momento, debido a las estructuras globales y a la orientación de la industria del petróleo y a su dependencia de los militares para la “seguridad”, esta industria en particular, y las corporaciones multinacionales en general, han sacrificado los beneficios en el corto y el mediano plazo pensando en “ganancias futuras”, con la esperanza de que las guerras se acabarán y regresarán así los beneficios más lucrativos
"MIRTIÉCEN" (MUNDO DA NOTÍCIA)--MOSCOU, 23/3/2015
PUTIN LANÇOU UM NOVO E PODEROSO JOGO GEOPOLÍTICO
O Presidente da Rússia depois de uma pausa volta ao mundo político mundial com força ainda maior, tendo iniciado um novo jogo de estratégia que pode remodelar completamente todo o espaço geopolítico mundial.
O retorno de Vladimir Putin após uma pequena pausa foi marcado por vários acontecimentos importantes que são as ligações de uma cadeia. A saber:
O líder russo teve uma reunião com o presidente do Quirguistão Almazbek Atambaiev em Moscou e com o chefe da chancelaria do Comitê Central do Partido Comunista da China Li Zhanshu. No segundo caso, estamos falando sobre a coordenação do aparelho de Estado ao mais alto nível, o que em si é uma prática mundial sem precedentes.
Entre a Rússia e Ossétia do Sul foi acordada a cooperação e integração com a assinatura de todos os documentos necessários.
Vladimir Putin participou de um comício em homenagem à reunificação da Criméia com a Rússia.
Houve a exibição do filme "Crimeia---.à Caminho de Casa ", no qual o presidente expressou claramente o acerto de suas políticas, teses e ações..
Finalmente, na capital do Cazaquistão realizou-se uma reunião com Nursultan Nazarbáiev e Alexander Lukashénko., este Presidente da Bielorrússia.
"O ponto de aglutinação"
A agenda oficial da reunião em Astana foi a decisão sobre questões tópicas da integração euro-asiática em uma união econômica, cujos membros, além de Rússia, são Cazaquistão, Bielorrússia, Quirguistão e Armênia. O conteúdo real das negociações do presidente russo com seus colegas podem ser metas muito mais amplas e que podem afetar o número de questões internacionais. O status da Rússia como "ponto de aglutinação" de todo o espaço pós-soviético para a formação de uma nova e poderosa associação geopolítica não tem sido negado. Alguém poderá impugná-la, como fazem em Kiev e nos países Bálticos, mas, essencialmente, isso não muda um fato - a Rússia voltou à arena política mundial como um dos centros de poder, é o retorno para remodelar o mundo.
Retorno triunfal
É interessante notar que esse retorno se daria alguns anos antes, mas depois optaram por uma "pausa de Medviédev". Vamos passar para números específicos. De acordo com o Banco Mundial, o PIB combinado dos Estados da CEEA em 2013 ascendeu a 4.064.000 milhões de dólares. De acordo com este indicador a CEEA está à frente da Alemanha, que ficou em quinto lugar no ranking mundial.
Após uma breve pausa, a comunidade internacional e do espaço Internet estão assistindo a volta de Vladímir Putin à arena política com vigor renovado. Se Lukashenko e Nazarbáiev aplicarem todo o conjunto de medidas propostas, em futuro próximo a CEEA, com a posição de liderança da Federação Russa, pode adquirir uma importantíssima posição político-militar no mundo.
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La disputa por el Atlántico Sur
Raúl Zibechi
ALAI AMLATINA, 19/12/2014.- “Las garras del cisne” se titula el
libro recién publicado por Roberto Lopes, historiador militar formado
en el Centro de Estudios de la Defensa Hemisférica de la
Universidad de Defensa Nacional de los Estados Unidos. En su
trabajo de casi 500 páginas, sólidamente documentado, Lopes
detalla la ambición de la Marina de Brasil para la próxima década:
pasar de ocupar un modesto vigésimo lugar en el mundo, al
noveno, detrás de Estados Unidos, China, Rusia, Francia,
Inglaterra, India, Corea del Sur y Japón.
No se trata de una ambición insensata ni desmedida. Supone un
conjunto de inversiones en el marco del Plan de Articulación y
Equipamiento de la Marina de Brasil (PAEMB) que se propone
adquirir o construir 61 navíos de superficie y 21 submarinos en los
próximos 17 años, un promedio de tres a cuatro incorporaciones
anuales. Pocos lo saben pero ese proyecto incluye la construcción
en Brasil de seis submarinos nucleares (el primero ya está en fase
de construcción) y 15 submarinos convencionales, de los cuales el
primero será concluido en poco más de un año. Además se prevé
la construcción de dos portaaviones en el país, con asistencia
externa, igual que sucede con los submarinos gracias al acuerdo
con Francia firmado en 2008.
Entre los planes estratégicos de la Marina se prevé construir una
segunda escuadra que se agregue a la fondeada en Rio de Janeiro,
que deberá situarse cerca de la desembocadura del Amazonas para
cubrir las costas del norte. El rearme incluye treinta naves de
escolta, dieciocho patrulleros oceánicos y 48 cazas de alta
performance. A lo que debe sumarse el enorme avance de la
industria aeronáutica que acaba de estrenar el carguero militar KC-
390, destinado a sustituir al mítico Hércules 130 estadounidense,
además de la firma de una acuerdo con la sueca Saab, que le
permitirá a la Embraer construir cazas de última generación.
Nuevas armas para nuevas riquezas
“Brasil pretende pleitear en las Naciones Unidas, el bloqueo de un
área en la Elevación Rio Grande, una cordillera submarina en el sur
del país, a mil kilómetros de la costa de Rio de Janeiro” (Folha de
São Paulo, 10 de febrero de 2013). La noticia apareció en la prensa
brasileña días después de la VII Reunión Ministerial de la Zona de
Cooperación y Paz del Atlántico Sur (ZOPACAS) pero los medios
no vincularon ambos hechos. Se trata de la alianza creada el 27 de
octubre de 1986 por iniciativa de Brasil, con el apoyo de Argentina,
integrada por 24 países atlánticos, sudamericanos y africanos, que
incluye dos países que integran los BRICS (Brasil y Sudáfrica).
Hasta ahora se venía hablando sobre los descubrimientos de
petróleo “pre-sal” (yacimientos bajo una gruesa capa de sal) en el
litoral brasileño, cerca del puerto de Santos, como razón para
explicar el rearme de la Marina. Se trata de uno de los más
importantes descubrimientos de hidrocarburos en la última década,
lo que la Marina denomina como “Amazonia Azul”. Sin embargo,
las riquezas en el fondo marino no habían sido tenidas en cuenta
hasta hace poco tiempo.
La información revela que en esa región atlántica, a seis mil metros
debajo de la superficie marina, la brasileña Compañía de
Investigaciones de Recursos Minerales (CPRM por sus siglas en
portugués), detectó la presencia de cobalto, níquel, manganeso,
fosfato, gas metano y minerales raros. Brasilia ya envió cinco
expediciones a la zona en la que pretende desarrollar actividades
comerciales en apenas diez años, ante los indicios de que
embarcaciones alemanas y rusas, tal vez chinas, están explorando
la misma zona.
El próximo paso es pedir a la Autoridad Internacional de Fondos
Marinos (ISBA por sus siglas en inglés), el bloqueo de un área de
tres mil kilómetros cuadrados que, en caso de ser aprobado, le dará
a Brasil 15 años para investigar en exclusiva la zona. Roberto
Ventura, director de geología y recursos minerales de la CPRM dijo:
“Quien tenga los mapas y conozca las áreas potenciales y las áreas
críticas va a tener más chances”, recordando que las riquezas
minerales son finitas y que la explotación de los océanos será
inevitable en un futuro cercano (Folha de São Paulo, 10 de febrero
de 2013).
Rusia y Francia ya han pedido el bloqueo de una zona cercana a la
cordillera de Rio Grande en tanto barcos chinos frecuentan la
misma área. Por otro lado, ni Brasil ni los demás países atlánticos
del sur cuentan con barcos apropiados para ese tipo de trabajos de
exploración como los tienen China, Japón, Rusia y Alemania. Las
cinco expediciones brasileñas han sido realizadas con barcos
holandeses y japoneses.
En diciembre de 2010 la cancillería brasileña organizó una Mesa
Redonda en Brasilia con el objetivo de revitalizar la alianza del
Atlántico Sur. Se identificaron áreas para el desarrollo de proyectos
comunes: “Mapear y explorar los fondos marinos, proteger y
preservar los recursos del mar, transporte marítimo y aéreo,
seguridad portuaria, cooperación en defensa y combate a crímenes
transnacionales” (Ministerio das Relações Exteriores, 9 de
diciembre de 2010).
El polémico control del Atlántico
En noviembre de 2010 se celebró la Cumbre de Lisboa de la OTAN,
que supuso el reconocimiento de que la alianza militar se ha
convertido en una fuerza con vocación de intervención global. La
propuesta, encabezada por los Estados Unidos, prevé que los
intereses occidentales pueden llevar a la alianza, inicialmente
circunscrita al Atlántico Norte, a intervenir en cualquier lugar del
planeta, según lo establece el documento “Strategic Concept For
the Defence and Security of The Members of the North Atlantic
Treaty Organisation” (www.nato.int/lisbon2010/strategic-concept-
2010-eng.pdf)
Brasil respondió de inmediato. El ministro de Defensa, Nelson
Jobim, mostró su preocupación por el riesgo de que la OTAN pueda
realizar incursiones armadas en el Atlántico Sur, al que definió
como “área geoestratégica de interés vital para Brasil”. El ministro
fue claro al señalar que es necesario separar las cuestiones del
Atlántico Norte de las del Sur, que merecen “respuestas
diferenciadas, tanto o más eficientes y legítimas cuanto menos
involucren a organizaciones o Estados extraños a la región”
(Defesanet, 17 de setiembre de 2010).
Aseguró que las razones por la cuales se creó la OTAN “dejaron de
existir” ya que desapareció la amenaza que representaba la Unión
Soviética. Denunció que la OTAN se convirtió en “instrumento para
el avance de los intereses de su miembro principal, los Estados
Unidos”, y criticó de modo frontal “la extrema dependencia europea
de las capacidades militares norteamericanas en el seno de la
OTAN”, lo que le impide “constituirse en un actor geopolítico a la
altura de su peso económico”.
El 3 de noviembre de ese año, en la apertura de la VII Conferencia
de Seguridad Internacional Fuerte de Copacabana (Rio de Janeiro),
patrocinada por la Fundación Konrad Adenauer de Alemania, el
ministro Jobim dijo que Brasil y Sudamérica no pueden aceptar que
Estados Unidos y la OTAN “se arroguen” el derecho de intervenir en
cualquier parte del mundo y, de modo particular, de “cortar la línea”
que separa al Atlántico Norte del Sur (Folha de São Paulo, 4 de
noviembre de 2010).
Jobim rechazó la idea de “soberanías compartidas” sobre esta
región que maneja el Pentágono: “¿Cuál es la soberanía que
Estados Unidos quiere compartir, la de ellos o la nuestra? No
seremos aliados de Estados Unidos para que ellos mantengan su
papel en el mundo” y aseguró que “la política internacional no
puede ser definida a partir de la perspectiva que convenga a los
Estados Unidos” (Folha de São Paulo, 4 de noviembre de 2010).
Es evidente que no se trata de un posicionamiento personal sino
compartido por las fuerzas armadas y el gobierno del entonces
presidente Lula. En ese momento Brasil ya había firmado su
alianza estratégica con Francia y a promover al rearme del país, lo
que llevó a Lopes a considerar que el gobierno del PT “hizo más por
las fuerzas armadas que ningún otro” (Defesanet, 30 de agosto de
2014).
Para los estrategas brasileños, se trata de impedir que la
superpotencia consiga crear una suerte de OTAN del Sur.
Guilherme Sandoval Góes, coordinador de la División de Asuntos
Geopolíticos y Relaciones Internacionales de la Escuela Superior de
Guerra, sostuvo que la ZOPACAS “tiene un importante papel para
neutralizar una posible iniciativa de Estados Unidos de crear la
Organización del Tratado del Atlántico Sur (OTAS), que consolidaría
la hegemonía norteamericana en esta importante región geo-
estratégica” .
La Escuela Superior de Guerra, como centro de pensamiento de los
militares brasileños, considera que se trata de evitar la
subordinación geopolítica de la región sudamericana que es,
además, un espacio “vital para el fortalecimiento internacional de
Brasil”. Si estos pasos no se concretaran, Sudamérica sería
apenas un objeto de la explotación económica de Washington sin
autonomía política, razonan los estrategas militares.
La seguridad de cada uno de estos países pasa por evitar que otras
potencias se hagan presentes en el Atlántico Sur. Por eso los
gobiernos del PT, con diferentes énfasis, han coincidido con la
Marina, y también con la fuerza aérea, en la necesidad no sólo de
modernizar las tres armas sino de hacerlo en base a la
transferencia de tecnología, que permita la creación de un complejo
militar-industrial autónomo como establece la Estrategia Nacional
de Defensa aprobada en 2008 por Lula.
Uno de los núcleos de ese desarrollo es el complejo naval de
Itaguaí, en el estado de Rio de Janeiro. Se trata de un conjunto de
instalaciones fabriles, de la industria nuclear y astilleros donde se
construyen los submarinos, que Lopes considera “comparable a las
principales instalaciones de ese género en Estados Unidos, Rusia y
China” (Defesanet, 30 de agosto de 2014).
- Raúl Zibechi, periodista uruguayo, escribe en Brecha y La Jornada
y es integrante del Consejo de ALAI.
Publicado en América Latina en Movimiento, No.
500: http://alainet.org/publica/500.phtml
URL de este artículo: http://alainet.org/active/79607&lang=es
EU.- BRZEZINSKI, EL CEREBRO GEOPOLÍTICO DE OBAMA
(Fragmentos)
EEUU utilizará la Alianza del Pacífico (2011), refinado proyecto de ingeniería geoeconómica promovida por Estados Unidos y secundado por México, Colombia, Chile, Perú y Costa Rica, como “caballo de Troya” para dinamitar el proyecto integracionista representado por la UNASUR e intensificar la política de aislamiento de los gobiernos progresistas de la región. Germán Gorriaz López* LA HAINE 1 de febrero de 2015 TRAS LA ELECCIÓN de Obama para su primer mandato presidencial (2008), The Economistironizó sobre la inexperiencia en política exterior de Obama con un titular impactante: "¡Un nuevo cerebro para Barack Obama! Tiene 78 años y todavía funciona perfectamente. Pertenece a Zbigniew Brzezinski, el picante ex consejero de seguridad para Jimmy Carter”. Por su parte, el historiador estadounidense Webster Tarpley, en el libro Obama, The Postmodern Coup, The Making of a Manchurian Candidate, sostiene que “Brzezinski es el verdadero poder en la sombra, al tiempo que su estrategia es mucho más peligrosa y demencial que la de los acólitos neoconservadores de George W. Bush”. Y continúa diciendo que “han decidido introducir una nueva cara; no a alguien de derecha, ni a un neoconservador, si no a un demagogo de izquierda que promete cambio y esperanza; pero el verdadero proyecto de la administración de Obama apuntará a ampliar el teatro de las guerras mucho más allá del Medio Oriente pues el plan es buscar el enfrentamiento con Rusia y China”. Así, Brzezinski estaría enfrentado con los lobbys neocons republicano y judío de EEUU y, con su habitual mordacidad, habría desacreditado la miopía geoestratégica de ambos grupos de presión al afirmar que “están tan obsesionados con Israel, el Golfo Pérsico, Irak e Irán que han perdido de vista el cuadro global: la verdadera potencia en el mundo es Rusia y China, los únicos países con una verdadera capacidad de resistir a Estados Unidos e Inglaterra y sobre los cuales tendrían que fijar su atención”. Respecto a Israel, en un discurso ante al Consejo Nacional Irano-estadounidense (NIAC), Brzezinski afirmó que “creo que los EEUU tiene derecho a decidir su propia política de seguridad nacional y no seguir cual mula estúpida lo que hagan los israelíes”, pues desde el asesinato de John F. Kennedy (quien se enfrentó en una guerra secreta a Ben Gurion en su vano intento de detener el programa israelí de armas nucleares), los Estados Unidos no han disfrutado de ese derecho.
El nuevo Orden Mundial (NWO) Wright Mills en su libro The Power Elite (1956), indica que la clave para entender la inquietud norteamericana se encontraría en la sobre-organización de su sociedad. Así, el stablishmentsería “el grupo élite formado por la unión de las sub-élites política, militar, económica, universitaria y la massmedia de EEUU”, lobbys de presión que estarían interconectados mediante “una alianza inquieta basada en su comunidad de intereses y dirigidos por la metafísica militar”, concepto que se apoya en una definición militar de la realidad y que habría transformado la economía en una guerra económica permanente. Por su parte, Brzezinski en un artículo publicado en la revista Foreign Affaire (1970), expone su visión del “Nuevo Orden Mundial” al afirmar que “se hace necesaria una visión nueva y más audaz (la creación de una comunidad de países desarrollados que puedan tratar de manera eficaz los amplios problemas de la humanidad”, esbozos de una teoría que perfilará en su libroEntre dos edades: El papel de Estados Unidos en la era tecnotrónica (1971), donde explica que ha llegado la era de reequilibrar el poder mundial, poder que debe pasar a manos de un nuevo orden político global basado en un vínculo económico trilateral entre Japón, Europa y Estados Unidos. En el citado libro Between two Ages (1971), aboga además por el control de la población por una élite mediante la “manipulación cibernética” al afirmar : “la era tecnotrónica involucra la aparición gradual de una sociedad más controlada y dominada por una élite sin las restricciones de los valores tradicionales, por lo que pronto será posible asegurar la vigilancia casi continua sobre cada ciudadano y mantener al día los expedientes completos que contienen incluso la información más personal sobre el ciudadano, archivos que estarán sujetos a la recuperación instantánea de las autoridades”, lo que anunciaba ya la posterior implementación del programa PRISM. Asimismo, en un discurso reciente durante una reunión del Council on Foreings Relations (CFR), el exasesor de Carter advirtió que “la dominación estadounidense ya no era posible debido a una aceleración del cambio social impulsado por la comunicación instantánea que han provocado el despertar universal de la conciencia política de las masas (Global Political Awakening) y que está resultando perjudicial para la dominación externa como la que prevaleció en la época del colonialismo y el imperialismo”, por lo que tras el fallido intento de controlar “la nube” (Programa PRISM), en los próximos años asistiremos al final de la democratización de la información, con la imposibilidad del acceso directo a la red siguiendo los pasos de las políticas restrictivas implementadas por países como China, Rusia, Turquía, Tailandia o Irán. El 11S y la deriva totalitaria de EEUU Según el Financial Times, Brzezinski en una audiencia ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado en el 2007, explicó que: “Un escenario posible para un enfrentamiento militar con Irán implica un acto terrorista en suelo americano del cual se haría responsable a Irán. Esto pudiera culminar
con una acción militar americana ‘defensiva’ contra Irán en el que estarían incluidos Irán, Irak, Afganistán y Pakistán”, de lo que se deduce la posibilidad de un nuevo atentado en EEUU que sería falsamente atribuido a Irán para provocar su invasión y una posterior deriva totalitaria de EEUU, similar a la registrada con George W. Bush tras el 11-S del 2001. Así, un mes después del atentado del 11-S, el gobierno de George W. Bush decidió secretamente anular una de las principales protecciones constitucionales de este país (habeas corpus) mediante la ley conocida como USA- Patriot Act bajo la justificación de su “lucha contra el terrorismo” según documentos oficiales revelados a finales de 2005 en una serie de reportajes en el New York Times. Asimismo, el citado diario informó de la existencia de la red de espionaje electrónica más sofisticada del mundo, (el llamado programa PRISM o Big Brother), herramienta para monitorizar las comunicaciones de ciudadanos no estadounidenses a través de sus metadatos, (verdadero monstruo virtual que habría extendido sus tentáculos hasta los servidores de compañías como Google, Apple, Micros Eloft, AOL, Facebook y Yahoo), programas ambos aprobados por el Congreso de EEUU a instancias de la Administración Bush en el 2007 pero que por inercia apática continuaron bajo el mandato de Obama. Como colofón a esta deriva totalitaria de EEUU, estaría la firma con objeciones por Obama de la Ley de Autorización de Defensa Nacional (NDAA), que permite a las autoridades militares la detención indiscriminada de ciudadanos estadounidenses en cualquier parte del mundo (sin especificar los cargos que se le imputan ni el tiempo de detención), reservándose Obama la interpretación personal de la sección 1021 de dicha Ley para, según sus palabras, “asegurarse que cualquier detención autorizada se llevará a cabo conforme a la Constitución y a las leyes de guerra”. Europa Según explicaba Brzezinski en la revista National Interest en el año 2000, “los europeos estarán más inmediatamente expuestos al riesgo en caso de que un imperialismo chauvinista anime nuevamente la política exterior rusa”, con lo que esbozó un plan que pasaría por la expansión de la OTAN hasta límites insospechados en la década de los 90 y la implementación del nuevo sistema europeo de defensa anti-misiles –European Phased Adaptative Approach (EPAA) —. Dicho sistema en realidad se trata de un escudo anti-misil global en el que los misiles interceptores emplazados en plataformas móviles pueden abatir blancos en un espacio común (a base de datos transmitidos por todos los radares y sistemas de reconocimiento optoelectrónicos), con el fin maquiavélico de, tras un primer ataque sorpresa de EEUU que destruiría el potencial nuclear ruso en su propio territorio, neutralizar posteriormente la réplica rusa por medio de los misiles estacionados en Polonia. En un principio, Rusia y la OTAN acordaron cooperar en la creación del escudo antimisiles para Europa en noviembre de 2010 en la Cumbre Bilateral de Lisboa, pues para Moscú era vital que la OTAN ofreciera garantías reales de
que ese sistema no apuntaría a Rusia y disponer de un documento jurídicamente vinculante al respecto, pero la Administración Obama siguiendo la inercia mimética de la Administración Bush de ningunear a Rusia, ha rehusado hasta el momento ofrecer dichas garantías por escrito y dado el actual contexto de guerra fría EEUU-Rusia, es previsible que EEUU decida finalmente completar cuarta fase del despliegue del escudo antimisiles en Europa (Euro DAM), lo que tendría como réplica por la parte rusa, la instalación en Kaliningrado del nuevo misil balístico intercontinental de 100 Tm, (“el asesino del escudo antimisiles de EEUU” en palabras del viceprimer ministro ruso Dimitri Rogozin), así como la reactivación de la carrera armamentista entre las dos grandes potencias, no siendo descartable la reedición de la Crisis de los Misiles (Cuba, 1962). Doctrina del “choque de civilizaciones” En 1978, Zbigniew Brzezinski, declaró en un discurso: "Un arco de crisis se extiende a lo largo de las costas del Océano Índico, con frágiles estructuras sociales y políticas en una región de importancia vital para nosotros que amenaza con fragmentarse y Turquía e Irán, los dos estados más poderosos del flanco Sur son potencialmente vulnerables a los conflictos étnicos internos y si se desestabilizara uno de los dos, los problemas de la región se harían incontrolables”, esbozo de una teoría que terminó de dibujar en su libro El gran tablero mundial. La supremacía estadounidense y sus imperativos geoestratégicos (1997), considerada la Biblia geoestratégica de la Casa Blanca así como el libro de cabecera de las sucesivas generaciones de geoestrategas y politólogos. Sin embargo, en una entrevista a Brzezinski realizada por Gerald Posner en The Daily Beast (18 de septiembre de 2009) afirmó que “una colisión estadounidense-iraní” tendría efectos desastrosos para Estados Unidos y China, mientras Rusia emergería como el gran triunfador, pues el previsible cierre del Estrecho de Ormuz en el Golfo Pérsico donde atraviesa el transporte de petróleo destinado al noreste asiático (China, Japón y Corea del Sur), Europa y Estados Unidos, elevaría el precio del oro negro a niveles estratosféricos y tendría severas repercusiones en la economía global, pasando a ser la UE totalmente crudodependentiente de Rusia”, por lo que la administración Obama procedió a la implantación de sanciones económicas al régimen iraní para lograr su asfixia económica y provocar la revuelta social. Recordar que Irán adquirió una dimensión de potencia regional gracias a la política errática de Estados Unidos en Irak (fruto de la miopía política de la Administración Bush obsesionada con el “Eje del Mal”) y al eliminar a sus rivales ideológicos, los radicales talibanes suníes y a Saddam Hussein con el subsiguiente vacío de poder en la zona, por lo que ha reafirmado su derecho inalienable a la nuclearización y tras la elección de Hassan Rowhani como nuevo presidente iraní, se abriría una nueva oportunidad para la solución diplomática al llamado contencioso nuclear iraní. Así, Rowhani (clérigo educado en Gran Bretaña), encabezó el equipo de negociación nuclear iraní de 2003 a 2005 y es conocido por su pragmatismo
nuclear que en esa época llevó al acuerdo de Irán a una suspensión total de actividades nucleares conflictivas, por lo que en el supuesto de lograrse la resolución del contencioso nuclear de EEUU-Irán y el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países, Rowhani conseguiría su objetivo de que se reconozca el papel de Irán como potencia regional, logrando de paso el incremento de cooperación irano-estadounidense relativa a la seguridad en Irak y Afganistán y la resolución del avispero sirio-libaní. Sin embargo, en caso de fracasar la vía diplomática de Obama, aumentaría la presión del lobbypro-israelí de EEUU (AIPAC), para proceder a la desestabilización de Irán por métodos expeditivos, momento que será utilizado por EEUU, Gran Bretaña e Israel para proceder a rediseñar la cartografía del puzzle inconexo formado por dichos países y así lograr unas fronteras estratégicamente ventajosas para Israel, siguiendo el plan orquestado hace 60 años de forma conjunta por los gobiernos de Gran Bretaña, Estados Unidos e Israel y que contaría con el respaldo de los principales aliados occidentales (El Gran Israel). China El objetivo de Brzezinski es la confrontación con la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS), fundada en 2001 por los Cinco de Shanghai (China, Rusia, Kazajstán, Kirguistán, Tayikistán) más Uzbekistán y convertida junto con los países de la ALBA e Irán en el núcleo duro de la resistencia a la hegemonía mundial de Estados Unidos y Gran Bretaña, teniendo al Tibet y a Xinjiang como escenarios para sus operaciones desestabilizadoras. Hay que recordar que la etnia uigur de Xinjiang (de origen turco-mongol y con un total de 8,5 millones de habitantes), conserva características étnicas e islámicas que les situarían muy próxima a sus parientes de Asia Central y Turquía, por lo que sería el caldo de cultivo ideal para implementar la estrategia brzezinskiniana del “choque de civilizaciones”, consistente en lograr la balcanización de China y su confrontación con el Islam (cerca de 1.500 millones de seguidores) así como secar sus fuentes de petróleo de los países islámicos del Asia Central. Así, según F. William Engdahl, en el artículo titulado “La agenda oculta tras la violencia en Xinjiang” y reproducido por China Daily en el 2009 varios de los más importantes gasoductos de China pasan por Xinjiang en procedencia de Kazajstán, Turkmenistán, Uzbekistán y Rusia, lo que explicaría la importancia estratégica de dicha provincia dentro de la estrategia brzezinskiniana de lograr la total rusodependencia energética china para en una fase posterior acabar enfrentándolas entre sí y finalmente someterlas e implementar el nuevo orden mundial bajo la égida anglo-judío-estadounidense. Doctrina del “caos constructivo” y la crisis siria La “Doctrina Carter” inspirada por Brzezinski (1980), tenía como objetivo la implementación en Oriente Próximo y Medio del llamado “caos constructivo”, concepto que se basaría en la máxima atribuida al emperador romano Julio
César “divide et impera”, para lograr la instauración de un campo de inestabilidad y violencia en la zona (balcanización) y originar un caos que se extendería desde Líbano, Palestina y Siria a Irak y desde Irán y Afganistán hasta Pakistán y Anatolia (Asia Menor). Dicho proceso de balcanización de la zona estaría ya en marcha y tendría su plasmación en países como Irak, devenido en Estado fallido y desangrado por la reavivación de la guerra civil chií-suní; en la endémica división palestina plasmada en la imposible reconciliación nacional de las facciones de Hamás y la OLP; en la anarquía reinante en Libia con el wahabismo salafistainstaurado en Trípoli, mientras grupos takfiríes (satélites de Al-Qaeda), dominan tribalmente el interior de Libia y en la aplicación de la yihad suní contra el régimen laico de Al Assad y sus aliados chiíes, Irán y Hizbulá que, por efecto mimético, habría convertido ya al Líbano en un país dividido y presto para ser fagocitado por Israel, quedando el régimen teocrático chíita del Líder Supremo Ayatolah Jamenei, como única zona todavía impermeable a la estrategia balcanizadora de Brzezinski. Sin embargo, Brzezinski en una reciente entrevista publicada en The National Interest, advirtió sobre las nefastas consecuencias de implicarse militarmente en el conflicto sirio, al afirmar que “tengo miedo de que nos dirigimos hacia una intervención estadounidense ineficaz, pues la intervención militar podría acelerar la victoria de los grupos rebeldes que son mucho más hostiles para nosotros que Assad, pues la actual crisis en Siria sería una guerra colonial orquestada por Arabia Saudita, Qatar, Turquía y sus aliados occidentales Francia y Gran Bretaña”. Así, el acuerdo de cooperación energética de 2010 entre Irak, Irán y Siria para la construcción del gasoducto de South Pars a Homms que conectaría el Golfo Pérsico con el Mar Mediterráneo, relativizaría la importancia estratégica de Turquía dentro del Proyecto del Gasoducto Trans-Adriático (TAP) así como el papel relevante de las monarquías árabes del Golfo como suministradores de crudo a Occidente, lo que explicaría el afán de Catar, Arabia Saudí y Turquía por defenestrar a Al-Assad. Finalmente, la jugada maestra de Putin convenciendo a Assad para que entregue todo su arsenal de armas químicas y el escaso apoyo internacional recibido por Obama para iniciar su operación militar contra Siria, podría conducir a la celebración de la anhelada Conferencia Internacional Ginebra III sobre Siria (rememorando la Guerra de Laos y los Acuerdos de Ginebra de 1954), con lo que la crisis siria se limitará a una puesta en escena en la que los actores participantes usarán el escenario sirio como banco de pruebas para un posterior conflicto a gran escala que englobará a Israel y Egipto y que podría reeditar la Guerra de los Seis Días en el horizonte del próximo quinquenio. América Latina En el discurso de Obama ante el pleno de la VI Cumbre de las Américas celebrado en Cartagena (Colombia) en el 2012, recordó que la Carta Democrática Interamericana declara “que los pueblos de América Latina tienen
derecho a la democracia y sus gobiernos tienen la obligación de promoverla y defenderla, por lo que intervendremos cuando sean negados los derechos universales o cuando la independencia de la justicia o la prensa esté amenazada”, advertencia extrapolable a Ecuador y Venezuela. La revista Foreign Policy, (edición de enero-febrero, 2012), publicó un análisis de Brzezinski titulado “After America” (“Después de América”), donde analiza la tesis de la decadencia de los EEUU debido a la irrupción en la escena global de nuevos actores geopolíticos (China y Rusia) y de sus posibles efectos colaterales en las relaciones internacionales. Respecto a México, afirma que “el empeoramiento de las relaciones entre una América (EEUU) en declive y un México con problemas internos podría alcanzar niveles de escenarios amenazantes”. Así, debido al “caos constructivo” exportado por EEUU y plasmado en la guerra contra los cárteles del narco iniciada en el 2006, México sería un Estado fallido del que sería paradigma la ciudad de Juárez, (la ciudad más insegura del mundo con una cifra de muertes violentas superior al total de Afganistán en el 2009), por lo que para evitar el previsible auge de movimientos revolucionarios antiestadounidenses se procederá a la intensificación de la inestabilidad interna de México hasta completar su total balcanización y sumisión a los dictados de EEUU. Por otra parte, EEUU utilizará la Alianza del Pacífico (2011), refinado proyecto de ingeniería geoeconómica promovida por Estados Unidos y secundado por México, Colombia, Chile, Perú y Costa Rica, como “caballo de Troya” para dinamitar el proyecto integracionista representado por la UNASUR e intensificar la política de aislamiento de los gobiernos “progresista-populistas” de la región, (Venezuela, Nicaragua, Ecuador, Uruguay y Bolivia). Así, EEUU podría estrechar lazos comerciales y militares con el presidente dominicano Danilo Medina ante el peligro de contagio mimético de los ideales revolucionarios chavistas al depender el país dominicano de la venezolana Petrocaribe para su abastecimiento energético. Dicha estrategia fagocitadora tendría como objetivos a medio plazo aglutinar el Arco del Pacífico para integrar además a Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá e incorporar por último al Mercosur (Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay), siguiendo la teoría kentiana del “palo y la zanahoria” expuesta por Sherman Kent en su libro Inteligencia Estratégica para la Política Mundial Norteamericana (1949). En cuanto a Venezuela, tras las reñidas elecciones presidenciales en Venezuela en las que Maduro se habría impuesto a Capriles por el estrecho margen de 200.000 votos, asistiríamos a una división casi simétrica de la sociedad venezolana que será aprovechado por EEUU para implantar “el caos constructivo de Brzezinski” mediante una sistemática e intensa campaña desestabilizadora que incluirá el desabastecimiento selectivo de artículos de primera necesidad, la amplificación en los medios de la creciente inseguridad ciudadana y de la ilegitimidad democrática de Maduro, estrategia que contando con la inestimable ayuda logística de Colombia (convertida en el portaaviones
continental de EEUU) podría llegar a desestabilizar el régimen postchavista para asegurarse el suministro del petróleo venezolano (Venezuela aportaría el 21,6% de un total del 38% de productos de la OPEP importados por EEUU). En cuanto a Cuba, las medidas cosméticas tomadas por la Administración de Obama (relajación de las comunicaciones y el aumento del envío de remesas a la Isla así como el inicio de una ronda de conversaciones sobre temas de inmigración), dejan intacto al bloqueo y no cambian sustancialmente la política de Washington, aunque reflejen el consenso de amplios sectores del pueblo norteamericano a favor de un cambio de política hacia la Isla auspiciado por la decisión del régimen cubano de terminar con el paternalismo estatal y permitir la libre iniciativa y el trabajo por cuenta propia. Sin embargo, la renovación automática por parte de EEUU por un año más del embargo comercial a la Isla podría suponer para Cuba pérdidas estimadas en cerca de 50.000 millones de dólares y abocar al régimen de Raúl Castro a la asfixia económica. En cuanto a Brasil, forma parte de los llamados países BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) y aunque se descarta que dichos países forman una alianza política como la UE o la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN), tienen el potencial de formar un bloque económico con un estatus mayor que del actual G-8 (se estima que en el horizonte del 2050 tendrán más del 40% de la población mundial y un PIB combinado de 34.951 Billones de dólares). El objetivo ruso sería duplicar la facturación de los intercambios comerciales ruso-brasileños tras lo que subyacería la firme decisión de Putin de neutralizar la expansión de EEUU en el Cono Sur americano y evitar la posible asunción por Brasil del papel de "gendarme de los neoliberales" en Sudamérica, pues Brasil juega un rol fundamental en el nuevo tablero geopolítico diseñado por EEUU para América Latina, ya que lo considera como un potencial aliado en la escena global al que podría apoyar para su ingreso en el Consejo de Seguridad de la ONU como miembro permanente, con el consiguiente aumento del peso específico de Brasil en la geopolítica mundial. Sin embargo, en el caso de no ser sensible el gobierno de Dilma Rousseff a las tesis de EEUU, no sería descartable el retorno a la política del Big Stick o “Gran Garrote” (cuya autoría cabe atribuir al presidente de Estados Unidos Theodoro Roosevelt), sistema que desde principios del siglo XX ha regido la política hegemónica de Estados Unidos sobre América Latina, siguiendo la Doctrina Monroe: “América para los americanos”, de lo que se deduce que estaríamos en vísperas de la irrupción en el escenario geopolítico de América Latina de una nueva ola desestabilizadora (cuyos primeros bocetos ya están perfilados y que terminará de dibujarse en esta década) y que tendrían a Honduras y Paraguay como paradigmas de los llamados “golpes virtuales o postmodernos” que protagonizará EEUU en esta década en el nuevo escenario panamericano que surgirá tras el retorno al proteccionismo económico y consiguiente finiquito a la economía global. * Periodista y analista español que escribe para diarios y sitios digitales de diferente orientación política. ENVIADO POR ARQUIMEDES
El Amante Chino
Enrique Guillermo Avogadro - Abogado
"... parecería evidenciar la magnitud de los daños que una nación puede autoinflingirle a sus mejores intereses cuando no acierta con la manera de conectarse con el gigante emergente". Andrés Cisneros Antes de que me acuse de apocalíptico, como hicieron algunos amigos antes del asesinato del Fiscal Nisman, le recuerdo que vivimos en un país cuyo gobierno permitió que la corrupción produjera crímenes como los de Cromagnon, de Once y de los archivos de Iron Mountain, en Barracas, mientras llena los cementerios de muertos inexplicables; también yo podría decir la ya famosa frase: "No tengo pruebas, pero no tengo dudas". Ahora, entremos en materia. China ha virado hacia una economía fuertemente capitalista, pero aplica pesados cerrojos a la libertad y, a pesar de combatir recientemente la corrupción hacia adentro, no le hace ascos cuando es para afuera. Tiene la población más grande del planeta, a la que necesita alimentar y dar trabajo y, para ello, requiere de materias primas de todo tipo. En función de ello, ya tiene grandes negocios en varios países del África negra, Venezuela, Ecuador y, ahora, ha comenzado a interesarse en nuestro país, proveedor de alimentos y energía. La Argentina de hoy provee básicamente soja, pero también podría suministrar ingentes cantidades de gas, petróleo y minerales estratégicos, es decir, productos primarios que son y serán industrializados allí. Toda nuestra economía, en comparación con la china, puede ser medida en pocas monedas. Por otra parte, el Gobierno necesita desesperadamente divisas y, para conseguirlas, está dispuesto a hacer todo, comenzando por ceder territorio y renunciar a la soberanía, romper definitivamente con los Estados Unidos y Europa, abrir indiscriminadamente su mercado para los productos chinos, reprimarizar nuestra economía, contratar a empresas chinas sin licitación y a cualquier precio o permitir que trabajadores de esa nacionalidad se desempeñen aquí en condiciones reñidas con nuestras leyes. Pero, como dice la vieja broma, los chinos no son kamikazes, y disponen de uno de los servicios de informaciones más eficientes. Por eso, saben que quien acepta esta descarada colonización y firma por nuestro país los acuerdos de intercambio de monedas y de financiamiento de grandes obras de infraestructura, además del que permitió comenzar a construir, con cesión de soberanía, la base espacial científico-militar en la Patagonia (que constituye una verdadera avanzada en el posicionamiento de China en su silente guerra con los Estados Unidos), es una Presidente que, constitucionalmente, debería entregar el poder en diciembre de este mismo año y cuyo sucesor, seguramente, al menos los revisará y, en algún caso, hasta los anulará en función de un nuevo alineamiento internacional; las amistades que el kirchnerismo ha cultivado en estos años con los países peor vistos desde Occidente -Irán, Rusia, China, Venezuela- están reñidas no solamente con nuestras tradiciones y necesidades geopolíticas sino hasta con la bandera que el Gobierno ha intentado transformar en su baluarte ético, los derechos humanos, que son sistemáticamente violados en todos ellos. La demostración más clara de ese conocimiento que tiene Xi
Jinping, Presidente de China, sobre nuestra realidad es, precisamente, el cuentagotas con que está entregando los frutos monetarios de esos acuerdos: de los swaps sólo ha entregado el 10% y, de las inversiones necesarias para la construcción de las represas Kirchner y Cepernic, en Santa Cruz, apenas US$ 285 millones, un vuelto comparado con los montos involucrados; ¿estarán destinados a pagar la expropiación de las estancias recientemente adquiridas por Lázaro Báez para la familia imperial, que serán inundadas si, a pesar de todo, las centrales hidroeléctricas proyectadas son construidas? Por otra parte, la nueva alianza con Rusia esconde un factor terrible para todo el hemisferio occidental, cual es el compromiso asumido por Putin de construir en la Argentina una planta de enriquecimiento de uranio cuyo producto tendría como destino final a Irán. Detrás de este acuerdo, impulsado por el extinto Chávez, tal vez deban rastrearse las razones verdaderas que llevaron a la firma del insólito memorandum, ya declarado inconstitucional, ya que quizás encontremos esa crematística a la que son tan adictos los Kirchner. Si ha tenido la paciencia de seguir mis notas, sabrá ya cuánto descreo de una transición pacífica mediante unas elecciones que, a esta altura del año, debieran considerarse inminentes. Recordará, seguramente, por qué estoy convencido que doña Cristina no entregará el poder pero, a riesgo de ser reiterativo, las enumeraré rápidamente: nunca ha respetado la Constitución, dispone de dinero (Ciccone y Casa de la Moneda), de "tropa" (Vatayón Militante, Tupac Amaru, Hinchadas Unidas, etc.), de "fierros" (han desaparecido arsenales enteros -¡hasta un misil!- y, diariamente, ingresan armas más sofisticadas) y de drogas, para pagar la transitoria lealtad de individuos capaces de generar un grave caos en las calles; ahora, además, y los recientes movimientos de la Justicia así lo acreditan, la Presidente se juega su libertad y la de sus hijos y, al menos parcialmente, su fortuna y, sobre todo, no tiene nadie enfrente capaz de encabezar una resistencia civil y las fuerzas armadas serían prescindentes. Entonces, ¿por qué cumpliría hoy las mandas constitucionales y entregaría la banda y el bastón a un sucesor que no será, en ningún caso, "del palo"? Conoce al peronismo desde adentro, y sabe que éste tiene un "día de la lealtad" porque los otros 364 son de la traición, y siempre acude en ayuda del vencedor; si, finalmente, el candidato del FpV fuera Scioli, éste no solamente se cobrará doce años de ininterrumpidas humillaciones sino que todo el PJ -como ya lo ha hecho con Menem y con Duhalde- se alinearía tras él y olvidaría la década en la que pagó con obsecuencia los cargos y prebendas recibidos. Cuando algún lector me ha preguntado cómo imaginaba que actuaría el kirchnerismo si mis especulaciones fueran ciertas, respondo que creo que generará una enorme conmoción social, antes de las PASO, que le permitiera decretar el estado de sitio y suspender las elecciones hasta nuevo aviso; en realidad, hasta que una nueva bonanza económica permitiera que la ciudadanía, tan sensible a lo que marca su bolsillo, su órgano más sensible, nuevamente viera al FpV con buenos ojos, olvidando todas las calamidades que ha producido. Es obvio que ese eventual viento de cola no vendría, en ningún caso, desde los países que ya observan con horror los desmanes de todo tipo que se están produciendo en la Argentina pero sí podría llegar, ¡oh, casualidad!, desde China que, en ese caso, tendría un horizonte más amigable y prolongado para sus intereses aquí y para sus aspiraciones geopolíticas globales. En resumen, si doña Cristina consiguiera asegurar a Xi que ella o alguien indubitablemente fiel permanecería en la Casa Rosada por un lapso prolongado, el mandatario seguramente abrirá las canillas de ese financiamiento que nuestro Banco Central ya necesita como una transfusión
sanguínea; todas las cifras involucradas en los convenios firmados son, como dije, sólo monedas para una economía como la china. Entonces, los objetivos finales no pueden ser más coincidentes pero, dado lo escaso de los tiempos restantes, será el régimen argentino quien deberá dar el primer paso y, por eso, considero el affaire Nisman como sólo el inicio de lo que vendrá. Queda, por supuesto, algunas incógnitas: ¿cómo reaccionará el mundo occidental, en especial Estados Unidos, frente a todas estas iniquidades que podrían desbalancear el equilibrio mundial?, ¿puede permitirse que armemos a Irán o que China disponga de una base militar en el continente americano? Los acontecimientos se precipitan en la Argentina, a velocidad de vértigo; a muchos de ellos, no les encuentro otra explicación que las que leyó en esta nota. Rezo, todos los días, para que los hechos y el tiempo vayan demostrando que todo cuanto digo está equivocado, que el proceso electoral se cumpla en paz y con normalidad y que la Justicia cumpla a rajatabla con el rol que la Constitución le asigna pero, lamentablemente, ya sé que los Reyes Magos son los padres.
Bs.As., 8 Feb 15
III – BRICS
Banco dos BRICS lança desafio ao predomínio
financeiro dos EUA
Voz da Rússia 02/07/2104
O mundo já está cansado do sistema de Bretton Woods e do predomínio
do dólar.
Uma alternativa já foi encontrada na União Europeia que desenvolveu sua
própria divisa. Agora, vários países emergentes revelam grande interesse
em relação a esta ideia.
O primeiro passo será a constituição de um banco do BRICS, capaz de
financiar os maiores projetos de infraestrutura. Este banco deverá tornar-
se uma alternativa ao FMI, controlado pelos EUA, do qual é muito
complexo receber empréstimos e em relação ao qual os países do Grupo
acumularam bastantes perguntas.
Os países do BRICS decidiram conjugar esforços, optando por ajuda
mútua. Estão cansados de esperar respostas do Fundo Monetário
Internacional ou do Banco Mundial que se tornaram muito politizados e
severos em relação aos seus clientes.
Organizações, controladas há 70 anos pelos países mais ricos do Ocidente,
terão agora de ceder passo a outras. Enquanto antes elas ditavam as
condições, elegendo os países dignos de ajuda para o desenvolvimento de
uns ou outros projetos, agora as economias emergentes irão formar o seu
próprio “clube”.
Na opinião de peritos, tal associação financeira será menos política e mais
prática, permitindo se livrar do monopólio do FMI. O chamado Banco do
BRICS começará a funcionar oficialmente em 2016, tendo já resolvidas
todas as potenciais barreiras e divergências que impediam sua
constituição. Irá integrar diretamente o Brasil, Rússia, Índia, China e África
do Sul. Como sustenta Roman Andreev, analista financeiro, o Banco de
Desenvolvimento do BRICS seja uma alternativa digna no mundo
financeiro:
“O Banco, concebido pelos países do Grupo do BRICS, irá fazer o mesmo
que o Fundo Monetário Internacional e o Banco Mundial, financiando
défices orçamentais em períodos de uma instabilidade econômica dos
países participantes do banco, assim como os projetos sociais e
econômicos cujo financiamento será recusado pelo FMI, BM e outras
instituições. Em outras palavras, o banco irá garantir o desenvolvimento
sustentável dos países do BRICS”.
O futuro Banco de Desenvolvimento do BRICS, diferentemente do FMI e
outras instituições financeiras, não vai exigir a aplicação obrigatória de
reformas estruturais, a elevação de impostos ou a pressão política, ligada
à vontade de um ou de outro membro do FMI de intervir nos assuntos
internos de outro país. Mais uma diferença importante será uma
distribuição igual das quotas-partes no banco.
Entretanto, as quotas do FMI foram distribuídos durante várias décadas
segundo padrões antigos, mas a economia da China, nestes tempos,
cresceu em várias vezes.
Ao mesmo tempo, os EUA não estão interessados em perder o direito de
veto, renunciando a ratificar as novas regras de distribuição de quotas. Em
resultado, a China não pode emprestar montantes necessários ao FMI. O
mesmo diz respeito a outros países. Em outras palavras, a estrutura do
FMI tem caducado e exige uma revisão. Comenta uma analista, Anna
Kokareva:
“O FMI renunciou a financiar projetos do Brasil, Índia e África do Sul.
Estatisticamente, a presença do FMI e do BM naqueles países não é
grande. Eles precisam de meios para o desenvolvimento e decidiram por
isso constituir um banco análogo que, porém, será mais leal a eles”.
Os cinco países do BRICS incluem quase 50% da população mundial e por
isso há muitos projetos que devem ser financiados. Inicialmente, o capital
bancário não será suficiente para financiar todos os projetos. Mas os cinco
países já acordaram que o capital do banco do BRICS seja aumentado,
continua Anna Kokareva:
“O banco terá seu capital social que na etapa atual constituirá 50 bilhões
de dólares. Os votos serão distribuídos pelo princípio de paridade e os
projetos serão discutidos, votados e só após a aprovação – financiados”.
É evidente que inicialmente o Banco de Desenvolvimento do BRICS não
poderá substituir o FMI. Mas os países do Grupo não pretendem por
enquanto alcançar tais objetivos. Mas o surgimento de tal instrumento
como banco de desenvolvimento ajudará estes países a desenvolver-se,
podendo no futuro desfiar o predomínio dos EUA no mundo financeiro.
Banco dos Brics será criado durante cúpula do
bloco em julho
Aporte inicial da instituição será US$ 50 bilhões, divididos entre os 5
países.
Fundo anticrise, chamado arranjo de contingente, terá US$ 100 bilhões.
Mariana Oliveira Do G1, em Brasília OGLOBO 09/06/2014
O banco de desenvolvimento dos Brics - grupo formado por Brasil, a
Rússia, Índia, China e África do Sul - será criado durante a VI Cúpula do
bloco que será realizada em Fortaleza (CE), entre os dias 14 e 16 de julho.
A informação foi dada nesta segunda-feira (9) pelo embaixador José
Alfredo Graça Lima, subsecretário de política do Ministério das Relações
Exteriores, durante anúncio de detalhes do encontro.
O encontro terá inicio no dia 14 de julho de 2014 com reunião entre
representantes dos Bancos Centrais e Bancos de Desenvolvimento. No dia
15, os cinco presidentes dos países se reunem. A previsão é de que no dia
16 vários outros presidentes estejam com os representantes do bloco em
atividade em Brasília.
Durante a cúpula, os países deverão assinar o acordo para a criação do
banco de desenvolvimento e o tratado para constituição do Arranjo de
Contingente de Reservas, espécie de fundo anticrise do bloco.
Segundo o embaixador, o banco terá capital inicial de US$ 50 bilhões,
sendo US$ 10 bilhões em recursos e US$ 40 bilhões em garantias. Após a
assinatura do acordo para criação, a instituição deve levar cerca de dois
anos para entrar em funcionamento porque terá que ser aprovada pelo
Congresso dos cinco países integrantes.
Já o fundo terá capital no valor de US$ 100 bilhões para auxiliar
integrantes que venham a enfrentar dificuldades. A China deverá entrar
com US$ 41 bilhões; Brasil, Rússia e Índia com US$ 18 bilhões cada; e a
África do Sul com US$ 5 bilhões.
Atuação do banco e do fundo
Conforme o embaixador, o banco atuará com "nicho específico" de
financiamento em infraestrutura e desenvolvimento sustentável. "A
iniciativa liberará o Fundo Monetário Internacional para atender outras
regiões mais necessitadas de assistência. Já o arranjo constituiria uma
linha de defesa internacional", afirmou. O embaixador afirmou que o
banco dos Brics pretende ser um "espelho" do Banco Mundial.
O dinheiro do banco deverá ser emprestado a países que não integram o
bloco, mas trata-se de uma questão ainda em discussão.
"A ideia do banco é suprir necessidade cada vez mais evidente, a de
financiar projetos de infraestrutura e desenvolvimento sustentável não só
dos cinco países, mas como de países de fora. Por exemplo, países
africanos que tem essa necessidade e que podem encontrar dificuldades
na obtenção de recursos."
Angola olha para futuro banco dos Brics como
fonte de financiamento, segundo a EIU
Da Redação, com agência Portugal Digital 01/07/2014
Angola está bem posicionada para vir a receber financiamento do futuro
banco dos Brics, dadas as suas relações próximas com o Brasil e com a
China, afirma a Economist Intelligence Unit.
Luanda - Angola está bem posicionada para vir a receber financiamento
do futuro banco dos Brics, dadas as suas relações próximas com o Brasil e
com a China, afirma a Economist Intelligence Unit.
A recente visita de Estado do presidente angolano, José Eduardo dos
Santos, ao Brasil, veio sublinhar o nível privilegiado da relação bilateral,
traduzindo-se em termos práticos numa sexta linha de crédito brasileira,
no valor de dois mil milhões (2 bilhões) de dólares, operacional já este ano
e vocacionada para a área da produção de electricidade.
Segundo o governo angolano, dois grandes projectos estão desde já
inscritos nesta linha de financiamento brasileiro: a construção de uma
segunda central eléctrica na barragem de Cambambe, na província do
Cuanza Norte, e o novo aproveitamento hidroeléctrico de Laúca, no rio
Cuanza.
Para a Economist Intelligence Unit, o apoio demonstra as "fortes ligações
económicas e políticas entre os dois países", bem como o "empenho do
Brasil nas suas operações em Angola" e a capacidade deste país, que
pretende investir em infraestruturas, "assegurar o acesso a financiamento
de várias fontes".
Durante o encontro de José Eduardo dos Santos com a sua homóloga
Dilma Roussef terá sido abordada a questão da próxima cimeira dos países
Brics (Brasil, Rússia, Índia, China e África do Sul), que terá lugar no Brasil
em Julho, refere a EIU.
Um dos tópicos em agenda nesta reunião é o projecto de lançamento de
um banco dos Brics que sirva de alternativa ao financiamento do Banco
Mundial e Fundo Monetário Internacional e que poderá vir a constituir-se
como um novo apoio para Angola.
"Angola, que tem fortes laços com a China, Brasil e Rússia seria um
candidato ideal a receber financiamento de uma tal iniciativa", quando
estiver operacional, refere a EIU.
A nova linha eleva para perto de 8 mil milhões de dólares (8 bilhões) o
total de apoios a Angola por parte do estatal brasileiro Banco Nacional do
Desenvolvimento Económico e Social (BNDES), que tem vindo a permitir a
construção de infraestruturas importantes, além de apoiar a presença de
grandes empresas brasileiras no país.
O grupo brasileiro Odebrecht, presente no país desde o início da década
de 1980, é considerado o maior empregador privado angolano.
Nos últimos meses, Angola assegurou novos apoios da China, Estados
Unidos da América e Brasil, mostrando o interesse que grandes potências
têm no desenvolvimento das suas relações económicas com o emergente
país africano.
Durante a recente visita a Luanda do primeiro-ministro chinês, Li Keqiang,
foi anunciada a abertura de novas linhas de crédito no valor de 170
milhões de dólares, pelo Banco de Exportações e Importações da China,
para financiar a reconstrução de uma hidroeléctrica e linhas de
transmissão de electricidade na província do Moxico, além de um projecto
agro-industrial na província do Zaire e a construção no Lubango de um
instituto de formação de gestão.
O chefe do governo chinês deixou ainda a promessa de um donativo de 28
milhões de dólares para financiar projectos de desenvolvimento não
especificados em Angola, que desde 2002, segundo a EIU, já recebeu mais
de 10 mil milhões de dólares em financiamento chinês, direccionado
sobretudo para infra-estruturas. AngoNotícias
Vladimir Putin discutirá projetos conjuntos em
visita à Argentina
Presidente russo participou da apresentação de 14 embaixadores em
Moscou
27/06/2014 13h27 Diário da Rússia
O Presidente russo, Vladimir Putin, anunciou nesta sexta-feira, 27, que
fará uma visita à Argentina no próximo mês de julho, depois da Copa, para
se reunir com a Presidente do país sul-americano, Cristina Kirchner, e
analisar assuntos de cooperação no âmbito da energia, da defesa e da
maquinaria pesada.
O anúncio aconteceu durante a cerimônia de apresentação das cartas
credenciais de 14 embaixadores em Moscou, entre os quais estava o novo
chefe da delegação diplomática argentina, Pablo Anselmo Tettamanti.
O líder russo disse que, enquanto estiver em Buenos Aires, pretende
discutir em pormenor todos os temas da agenda bilateral e internacional,
além de delinear os projetos conjuntos entre os dois países.
A visita fará parte de uma viagem mais ampla pela América do Sul. Depois
de assistir à final da Copa do Mundo no Rio de Janeiro, Putin participará
da cúpula dos BRICS em Fortaleza, que será realizada entre os dias 14 e 15
de julho, e na qual Kirchner também estará presente como convidada.
Argentina participará de cúpula dos Brics no
Brasil
O convite foi confirmado pelo chanceler da Rússia, Serguei Lavrov, após
uma reunião em Moscou com seu colega argentino, Héctor Timerman
AFP redaçã[email protected] 29/05/2014
A Argentina participará da cúpula da organização dos grandes países
emergentes conhecida como Brics, que será realizada em julho no Brasil,
informou nesta quinta-feira o chefe de Gabinete argentino, Jorge
Capitanich.
"Trata-se de um convite feito pela Rússia à Argentina e que envolve uma
participação na cúpula que será realizada em Fortaleza a partir de 15 de
julho", disse Capitanich em uma coletiva de imprensa.
O convite significa um reconhecimento ao país, não necessariamente a
integração como membro do bloco
O convite foi confirmado pelo chanceler da Rússia, Serguei Lavrov, após
uma reunião em Moscou com seu colega argentino, Héctor Timerman.
"Convidamos a Argentina a uma reunião dos BRICS", escreveu Lavrov na
quarta-feira na rede social Twitter, anunciando que na reunião no Brasil
"haverá uma oportunidade para que o presidente russo, Vladimir Putin, se
reúna com a presidente argentina, Cristina Kirchner".
Para Capitanich, este convite significa "um reconhecimento à Argentina,
não necessariamente a integração como país membro de forma
imediata".
Sobre o tema, o funcionário explicou que há interesse por parte dos
integrantes do bloco de emergentes que a Argentina o integre de maneira
efetiva.
O grupo de potências emergentes é integrado por Brasil, Rússia, Índia,
China e África do Sul.
Putin também discutirá com Cristina Fernández de
Kirchner a questão das Malvinas
--
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"É preciso transformar desânimos e resignações em esperança combativa."
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Como a globalização, os BRICS podem ser fenômeno passageiro
Immanuel Wallerstein – 24 MAY 2013
Na atual situação em que existem cerca de 8-10-12 protagonistas de poder geopolítico
significativo, os BRICS são definitivamente parte da nova estrutura geopolítica multipolar.
IMMANUEL WALLERSTEIN
Em 2001, Jim O'Neill, então presidente de Gestão de Ativos do Goldman Sachs, escreveu um
artigo aos seus assinantes intitulado “O Mundo precisa de melhores BRICs económicos”. O'Neill
inventou o acrónimo para descrever as chamadas economias emergentes do Brasil, Rússia,
Índia e China, e para recomendá-las aos investidores como o “futuro” económico da economia-
mundo.
O termo pegou, e os BRICs tornaram-se na verdade um grupo que se reúne regularmente e
mais tarde incluiu a África do Sul, mudando o “s” minúsculo para maiúsculo. Desde 2001, os
BRICS floresceram economicamente, pelo menos em relação a outros estados no sistema-
mundo. Tornaram-se também um assunto muito controverso. Há os que veem os BRICS como a
vanguarda da luta anti-imperialista. Há os que, muito pelo contrário, consideram os BRICS
agentes subimperialistas do verdadeiro Norte (América do Norte, Europa ocidental, e Japão). E
há os que acham que são ambas as coisas.
Na sequência do declínio pós-hegemónico do poder, do prestígio e da autoridade dos Estados
Unidos, o mundo parece ter estabelecido uma estrutura geopolítica multipolar. Na atual situação
em que existem cerca de 8-10-12 protagonistas de poder geopolítico significativo, os BRICS são
definitivamente parte deste novo quadro. Pelos seus esforços de forjar novas estruturas no
cenário mundial, tais como a estrutura interbancária que procuram criar para substituir o Fundo
Monetário Internacional (FMI), estão certamente a enfraquecer ainda mais o poder dos Estados
Unidos e de outros segmentos do velho Norte a favor do Sul, ou pelo menos dos próprios
BRICS. Se a nossa definição de anti-imperialismo é reduzir o poder dos Estados Unidos, então
os BRICS certamente representam uma força anti-imperialista.
A geopolítica, contudo, não é a única coisa que conta. Também queremos saber algo sobre a
luta de classes no interior dos países BRICS, as relações desses países uns com os outros, e as
relações dos países BRICS com os países não-BRICS no Sul. Nestes três aspetos, o registo dos
BRICS é, no mínimo, sombrio.
Como podemos avaliar a luta de classes no interior dos países BRICS? Uma forma comum é
observar o grau de polarização, tal como indica o índice GINI que mede a desigualdade. Outra
forma é ver quanto dinheiro estatal é utilizado para reduzir o grau de pobreza entre os estratos
mais pobres. Dos cinco países BRICS, apenas o Brasil melhorou significativamente os seus
índices no que respeita a esta questão. Nalguns casos, apesar de haver um aumento do PNB,
as estatísticas são piores que, digamos, há 20 anos.
Se olharmos para as relações económicas entre os próprios países BRICS, a China ofusca os
outros em crescimento do PNB e em acumulação de ativos. A Índia e a Rússia parecem sentir a
necessidade de proteger-se contra a força da China. O Brasil e a África do Sul parecem sofrer
com o atual e potencial investimento da China em arenas chave.
Se olharmos para as relações dos BRICS com outros países do Sul, ouvimos queixas crescentes
em relação à forma como estes países se relacionam com os seus vizinhos imediatos (e não tão
próximos) que se parece demasiado com as relações que os Estados Unidos e o velho Norte
mantinham com eles. São acusados por vezes não de serem “subimperiais”, mas sim
simplesmente “imperiais”.
O que faz os BRICS parecerem tão importantes hoje são os seus altos índices de crescimento
desde por volta de 2000, índices esses que foram significativamente mais altos que os do velho
Norte. Mas será que isto vai continuar? As suas taxas de crescimento já começaram a
escorregar. Alguns outros países do Sul – México, Indonésia, Coreia (do Sul), Turquia – parecem
estar a corresponder ao crescimento deles.
Porém, dada a depressão mundial na qual continuamos a viver, e a baixa probabilidade de haver
uma recuperação significativa na próxima década, a possibilidade de, numa década, um futuro
analista do Goldman Sachs continuar a projetar os BRICS como o futuro (económico) é bastante
duvidosa. Na verdade, a probabilidade de os BRICS continuarem a ser um grupo que se reúne
regularmente, com políticas presumivelmente comuns, parece remota.
A crise estrutural do sistema-mundo está a evoluir demasiado rapidamente e, de formas
demasiado incertas, para assumir uma estabilidade relativa suficiente que permita que os
BRICS, como tais, continuem a desempenhar um papel especial, tanto geopolítica quanto
economicamente. Tal como o próprio conceito da globalização, os BRICS podem-se revelar
como um fenómeno passageiro.
Por Immanuel Wallers
Crise dos “emergentes” ou do Sistema?
IMMANUEL WALLERSTEIN – ON 06/02/2014CATEGORIAS: ALTERNATIVAS, CAPA, PÓS-CAPITALISMO
HTTP://OUTRASPALAVRAS.NET/CAPA/WALLERSTEIN-CRISE-DOS-EMERGENTES-OU-DO-SISTEMA/
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Novas turbulências sugerem: vivemos época de bifurcação. Em
declínio, capitalismo será superado – por algo bem melhor ou bem
pior que ele…
Por Immanuel Wallerstein | Tradução: Antonio Martins
Não faz muito tempo, os “especialistas” e os investidores viam os “mercados
emergentes” – um eufemismo para China, Índia, Brasil e alguns outros – como
salvadores da economia-mundo. Eram eles que iriam sustentar o crescimento
e, portanto, a acumulação de capitais, quando os EUA, a União Europeia e o
Japão declinavam, em seu papel tradicional de pilastras do sistema capitalista
global.
Por isso, é chocante que, nas duas últimas semanas de janeiro, o Wall Street
Journal (WSJ), o Financial Times (FT), o Main Street, a agência Bloomberg,
o New York Times (NYT) e o Fundo Monetário Internacional tenham, todos,
soado o alarme sobre o “colapso” destes mesmos mercados emergentes; e
que tenham advertido, em especial, sobre a deflação, que poderia ser
“contagiosa”. Tive a impressão de que estão em pânico, quase indisfarçável.
Primeiro, algumas palavras sobre deflação. Mercados “calmos” são aqueles em
que os preços nominais não caem e sobem devagar. Isso permite aos
vendedores e compradores prever, com razoável confiança, quais suas
melhores decisões. Os mercados mundiais não estão calmos há bastante
tempo. Muitos analistas associam o fim desta calma à crise, em 2008, do
mercado de hipotecas norte-americano. De minha parte, vou além. Penso que
o declínio começou no período entre 1967 e 73, e não foi interrompido desde
então.
Os mercados não estão calmos quando há deflação ou inflação significativas.
Estes dois fenômenos têm, ambos, impacto nas estatísticas de emprego e,
portanto, na demanda mundial efetiva por todos os tipos de produção. Se os
índices de emprego real caem, por uma das duas razões, há sofrimento agudo
para a vasta maioria da população e um grande aumento das incertezas, que
tende a paralisar novos investimentos produtivos. Isso leva a mais sofrimento e
mais paralisia, num círculo vicioso.
É claro que alguns capitalistas são capazes de tirar proveito da situação, por
meio de manipulações financeiras engenhosas, envolvendo especulação. O
problema é que estão fazendo uma grande aposta – que pode levar tanto à
valorização maciça de seus ativos quanto à falência. Mas, pelo menos, têm
uma chance de lucrar muito. Para a maioria da população mundial, o
prognóstico provável é perder, às vezes maciçamente.
O que dizem estes relatos de pânico? Michael Arnold pergunta, no WSJ: “A
desvalorização das moedas levará os bancos centrais dos mercados
emergentes a elevar as taxas de juros?” Ele diz que o desarranjo foi provocado
por “estatísticas de crescimento desapontadoras” na China e pela
desvalorização da moeda argentina. Arnold adverte, em especial, para a
situação da Índia e Indonésia, que têm “alta carga de dívidas e dependência
pesada de empréstimos externos – por isso, estão tentando reduzir a inflação.
Ele menciona a Turquia como outra zona de problemas.
Hal M. Bundrick enfatiza, no Main Street, o contágio. Ele aponta tanto a
mudança na política monetária dos EUA quando as preocupações com a
economia chinesa – além das tensões políticas na Turquia, Argentina e Ucrânia
– como “aceleradores do declínio”. Cita um banqueiro russo, que fala sobre a
queda do rublo e a atmosfera “próxima ao pânico”. Afirma que tal sensação
está “se deslocando dos mercados emergentes para os desenvolvidos”.
O título de uma matéria de Gavyn Davies, no FT, é “O mundo emergente
descarrilhará a recuperação global?” O autor diz que as moedas emergentes
estão “em queda livre”. Também ele vê a desaceleração chinesa como um fator
principal, em particular por causar impacto nas “economias abastecedoras” (ou
seja, países que vendem produtos primários à China) – em particular Brasil,
Rússia e África do Sul. Ele diz que os riscos de uma bolha de crédito não são
um problema apenas na China, mas também na Turquia, Índia e Indonésia. Se
a redução do crescimento chinês se prolongar muito, ela poderá provocar
“ampliação da recessão global”. Embora faça previsões moderadamente
otimistas, ele imediatamente recua, ressalvando que suas simulações (que
alimentam seu otimismo contido) baseiam-se em padrões antigos, que podem
não mais funcionar.
No FT, Ralph Atkins fala no “espectro da deflação”. O fenômeno, mesmo que
positivo a curto prazo, é “definitivamente negativo para os ativos”, no longo
prazo. Sua preocupação particular dirige-se à zona do euro. Depois de citar
argumentos de outros analistas, que veem os aspectos positivos, ele termina
dizendo: “o espectro da deflação vestiu seu manto de invisibilidade”.
E ninguém menos que Christine Lagarde, diretora-gerente do FMI, afirmou, aos
representantes do Establishment reunidos no Fórum Econômico Mundial, em
Davos, que há uma ameaça ao mercado global, quando os Estados Unidos
cortam seus estímulos monetários. Existe um “novo risco no horizonte, e ele
precisa ser examinado de perto”. Ela cita as “repercussões… nos mercados
emergentes”.
Naquele mesma semana, um editorial da agência Bloomberg começava assim:
“As economias emergentes viveram uma semana brutal”. O texto vê estes
mercados como muito ligados ao dólar e, portanto, “excessivamente sensíveis
a flutuações – reais ou imaginárias – na política monetária norte-americana”.
Por isso, pede que o FED, banco central dos EUA, “não feche a torneira muito
cedo” e (previsivelmente), que os países emergentes “melhorem suas
políticas”.
Não menos importante, Lando Thomas informa, no NYT, que a nova palavra da
moda em Wall Street, substituindo os BRICS, é “os cinco fracos” [“the Fragile
Five”]. A lista inclui três membros dos BRICS (Brasil, Índia e África do Sul) mais
Turquia e Indonésia. Exclui tanto a China quanto a Rússia, cujo impacto
geopolítico parece pesar decisivamente.
Todos parecem oferecer bons conselhos, certos de que, de alguma maneira,
eles irão aliviar a situação. Poucos parecem admitir que a demanda efetiva
global é o verdadeiro problema. Mas é nítido que, abaixo da superfície, já o
detectaram. É por isso que estão em pânico, porque, então toda sua ênfase no
“crescimento” – uma fé crucial – estará minada. Neste caso, a crise deixa de
ser cíclica e torna-se estrutural: não pode ser resolvida com paliativos, mas
com a invenção de um novo sistema. Esta é a famosa bifurcação, em que há
duas saídas possíveis – uma melhor e outra pior que o sistema existente. Um
jogo em que todos nós estaremos envolvidos.
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Sobre o mesmo tema:
16/03/2009Doze pontos para uma nova economia(3)
23/04/2013Como era tranquilo mover fábricas…(1)
27/04/2012Noam Chomsky escreve – e fala – sobre o Occupy(0)
25/11/2011Patrick Viveret: para salvar a Europa e o planeta(9)
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Bio
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Immanuel Wallerstein Immanuel Wallerstein é um dos intelectuais de maior projeção internacional na atualidade. Seus estudos e análises abrangem temas sociólogicos, históricos, políticos, econômicos e das
relações internacionais. É professor na Universidade de Yale e autor de dezenas de livros. Mantém um site onde publica seus textos (http://www.iwallerstein.com/).
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is there life after Brics?
Jun 27, 2013 4:00am by beyondbrics( Financial Times)
By Sammy Suzuki of AllianceBernstein
For more than a decade, Brazil, Russia, India and China have dominated conversations about emerging market investments.
But as the BRICs-driven commodities boom wanes, it may be time for investors to rethink their approach to emerging market investing. Commodities demand has been the fuel for explosive emerging-markets growth since the Brics era began in 2001. At that time, China joined the World Trade Organization and launched land reforms that triggered a vast building construction boom in the world’s most populous nation. China’s insatiable appetite for commodities benefited Russia and Brazil, while India was widely seen as the next big thing. Soaring commodity prices drove economic growth and some key countries also enjoyed a private credit boom as their currencies and inflation stabilised. For example, in Brazil, private credit as a percentage of GDP doubled from about 30 per cent in 2005 to about 60 per cent by 2011. With commodity prices falling sharply in recent months as China’s growth slows, the forces that have driven emerging-market growth – and outsized stock returns – have been thrown into question. Perhaps emerging markets have lost their luster, and investors will need to refocus their quest for higher returns elsewhere? We don’t think so. In our view, there are still big opportunities in emerging-market equities – but things have definitely changed. The key is to understand how emerging markets have evolved and which countries and companies are more likely to thrive in an environment of lower commodity demand, moderating credit and shifting currency dynamics. Key areas to watch include: • Commodity importers – lower prices might hurt commodity producing countries but importers should benefit. These include the Philippines, the Czech Republic, India, Korea, Thailand and Turkey. • Competitive labor – countries that can grab market share from China, as its labor rates rise, should do well. Vietnam, Bangladesh and Mexico have improved their relative competitiveness versus China in recent years by containing labor costs (Display below). • Currency beneficiaries – weakening currencies are good for exporters. So a regional jetmaker in Brazil or a software house in Russia may enjoy a new catalyst for sales growth. Import substitution is another effect. For example, a domestic apparel–maker in South Africa could lower its prices versus importers, possibly taking market share from global giants like Levi’s and Zara. • Crossover opportunities – small, innovative companies with access to the global supply chain can succeed in ways that would have been impossible a decade or two ago. For example, a company based in an emerging market, with production in a frontier market like Vietnam or Cambodia, that sells products in developed markets could do especially well by capturing the best of both worlds. • Developed winners – large, developed market companies with sales in emerging markets might also cash in on competitive advantages. Think about a dominant global toothpaste brand that could win big as its product proliferates in fast-growing markets. Source: AllianceBernstein Of course, the end of the commodity boom will usher in a sea of change for emerging-market companies. In the past, they could throw capital at low-return projects and get bailed out thanks to roaring economic growth. Those days are gone. Without the enormous macroeconomic tailwinds they enjoyed, hidden weaknesses will suddenly become more visible in many companies. As a result, investors will need to scrutinise emerging-market countries and companies more thoroughly than ever. But by focusing on good stewards of capital with solid business dynamics and profitability prospects, we think investors will find that there is definitely life after Brics in emerging markets.
Sammy Suzuki is Portfolio Manager of Emerging Markets Core Equities and Director of Research of Emerging Markets Value Equities at AllianceBernstein.
BRICS: Um Acrônimo contra o Anacronismo
Marcelo Zero
Quando o economista do Goldman Sachs, Jim O´Neill, cunhou, em 2001, o
acrônimo BRIC, referindo-se aos megapaíses emergentes Brasil, Rússia, Índia
e China, o termo não passava de uma expressão vazia, um mero exercício
intelectual que pretendia denotar a crescente importância desses países para
os investidores das nações mais desenvolvidas e seu potencial de gerar bons
negócios para as firmas das grandes nações industrializadas. Os BRICs eram
apenas uma nova fronteira de investimentos que se abria, no quadro de uma
geoeconomia rigorosamente dominada pelos mesmos players de sempre.
Mal sabia ele que, 13 anos depois, em Fortaleza, os BRICs, agora
transformados em BRICS, com a adição da África do Sul, já seriam um
importantíssimo e atuante bloco, que vem transformando a velha geoeconomia
mundial.
Com efeito, na recente cúpula realizada na capital do Ceará, os BRICS fizeram
algo que era impensável há uma década. Eles criaram seu próprio banco de
investimentos, o Banco dos BRICS, e seu próprio Arranjo de Contingente de
Reservas para ajudar países em dificuldades.
Esses dois arranjos financeiros não surgiram por acaso ou por mera afirmação
de status econômico. Eles sugiram de uma necessidade: as velhas instituições
multilaterais surgidas no longínquo ano de 1944, em Bretton Woods, o FMI e o
Banco Mundial, já não conseguem lidar com os desafios postos pela nova
geoeconomia mundial.
Trata-se de instituições esclerosadas, cuja governança não incorpora os
interesses e os anseios dos novos atores globais. Elas continuam nas velhas
mãos das antigas potências, agora fortemente atingidas pela crise mundial. A
tentativa de abrir mais espaço para os países emergentes nessas instituições
multilaterais esbarrou no Congresso dos EUA, o qual não aprovou a
modificação nas cotas e no sistema de votação do FMI e do Banco Mundial. Os
EUA e a Europa continuam a ser seus mandantes privilegiados.
É uma situação absurda. Afinal, os BRICS têm 42% da população mundial e
26% do território do planeta. São responsáveis por 20% da economia mundial e
15% do comércio internacional. Não bastasse, eles detêm 75% das reservas
monetárias internacionais. Além disso, os BRICS foram responsáveis por 36%
do crescimento da economia mundial, na primeira década deste século. Com a
recessão nos países mais desenvolvidos, esse número pulou para cerca de
50%, mesmo com a desaceleração recente do crescimento desse bloco.
Em outras palavras, a importância dos BRICS não é só avassaladora, como
vem crescendo ano a ano.
Esses países precisam de novas fontes de financiamento para criar a
infraestrutura que vai sustentar seu desenvolvimento. As velhas instituições
não atendem mais a essa e outras necessidades. E elas não atendem não
somente por insuficiência de recursos e porque são dominadas pelas potências
tradicionais, mas também pela forma como operam. São instituições
dominadas por ideias obsoletas.
No caso do FMI, isso é evidente. Esse fundo sempre funcionou para a
implantação de políticas pro-cíclicas em países em dificuldades. Políticas que
agravam as recessões e impõem um fardo pesadíssimo às populações dos
países “beneficiários”. Nossa população e a população da América do Sul de
um modo geral sabem bem disso. A da Grécia também.
Em contraste, o Arranjo de Contingência criado pelos BRICS para socorrer
nações em dificuldades financeiras não deverá impor políticas suicidas e
contraproducentes para levar efetivo alívio a países em crise. A Argentina,
ameaçada pelos “fundos abutres” e pela decisão monocrática de um juiz norte-
americano que coloca em xeque a sua soberania, poderá ser o primeiro
beneficiário dessa nova alternativa ao velho FMI.
Com essas iniciativas reveladas em Fortaleza, os BRICS assumiram um
protagonismo à altura do seu peso e influência na nova geoeconomia mundial.
Mais: eles contribuíram para deitar as bases para a construção de uma ordem
econômica mais solidária e mais aberta aos interesses, normalmente
negligenciados, dos países em desenvolvimento. Uma ordem econômica mais
voltada ao combate às assimetrias entre os países e à inclusão social. Uma
ordem econômica mais dedicada à redução da pobreza e mais consentânea
com os novos Objetivos do Milênio da ONU.
Na reunião de Fortaleza, a aproximação dos BRICS à Unasul, promovida pelo
Brasil, também denotou a preocupação do BRICS com a promoção da
prosperidade dos demais países em desenvolvimento.
Enganam-se, contudo, aqueles que consideram os BRICS somente uma
associação de caráter econômico. Na realidade, com a nova geoeconomia, na
qual os BRICS são grandes atores em ascensão, cria-se também,
inexoravelmente, uma nova geopolítica e uma nova geoestratégia.
Portanto, é inevitável que os BRICS assumam, cada vez mais, uma atitude
propositiva no cenário mundial, inclusive no que tange às questões relativas à
segurança e à paz internacional.
A este respeito, alguns analistas conservadores gostam de assinalar que os
BRICS incluem países muito diversos, que têm dificuldades em identificar
interesses comuns, principalmente em áreas sensíveis e estratégicas.
De fato, há ampla diversidade nos BRICS. Diversidade geográfica, econômica,
social e cultural. Nesse bloco, há países da Ásia, da América Latina, da África e
da Europa. Há economias importadoras de commodities e exportadoras de
commodities. E não só há diferentes culturas nos BRICS, mas também
distintas civilizações. China e Índia têm civilizações próprias e milenares. Brasil,
África do Sul e Rússia são, até certo ponto, caudatários da civilização
ocidental, com nuances culturais muito significativas e específicas.
Porém, tal diversidade não está impedindo que os BRICS venham assumindo,
em período recente, um papel propositivo e uma voz alternativa ao discurso
dominante das velhas potências, em várias questões globais e regionais.
Isso ficou muito claro após a reunião de cúpula dos BRICS na África do Sul, em
2013. Com efeito, a Declaração de E-Thekwini, dela emanada, abordou temas
sensíveis e importantes da geopolítica mundial, tais como Síria, Palestina, o
processo de paz no Oriente Médio, Irã e seu programa nuclear, Afeganistão,
terrorismo, segurança cibernética, a situação na República Democrática do
Congo, etc. Em todos esses complexos tópicos, já há uma notável
convergência de posições, que tende a se aprofundar ainda mais.
Mais recentemente, a crise na Ucrânia, que afeta diretamente a segurança da
Rússia, estimulou maior aproximação desse país com a China, o que tende a
isolar e enfraquecer as ações dos EUA e da Europa na Eurásia. Tal
aproximação, embora não envolvesse todos os BRICS, é uma demonstração
evidente da disposição de alguns de seus membros de se antepor diretamente,
quando necessário, às pretensões hegemônicas das velhas potências.
Mas a voz alternativa dos BRICS é ainda mais consistente e relevante em dois
temas cruciais para o mundo e para a constituição de uma nova ordem mundial
mais simétrica e multipolar: a preservação do sistema de segurança coletiva da
ONU, frequentemente enfraquecido por ações unilaterais, e o fortalecimento do
multilateralismo assentado no direito internacional público.
Os BRICS defendem a exclusiva legitimidade da ONU na promoção de
intervenções que visem à manutenção paz e da segurança internacionais. Os
países que o compõem apoiam os princípios da Responsabilidade de Proteger,
emanado, em 2005, da Assembleia Geral das Nações Unidas, mas defendem
que qualquer ação feita com base nesse princípio deva ter um claro mandato
do Conselho de Segurança da ONU.
Essas posições políticas crescentemente convergentes dos BRICS são
importantes não apenas pela relevância desses países no cenário mundial,
mas justamente por sua ampla diversidade. Com efeito, a diversidade dos
BRICS, é, nesse sentido, uma óbvia vantagem, pois ela, juntamente com a
importância dos seus países, dá grande legitimidade às suas declarações e
ações.
Quando os BRICS falam, falam três bilhões de pessoas, falam quatro
continentes, fala o novo polo dinâmico da economia mundial e falam também
três grandes civilizações do planeta e suas distintas variantes culturais. Por
conseguinte, trata-se de uma voz que tem muito mais legitimidade que o ruído
das bombas das ações unilaterais realizadas sem a anuência do Conselho de
Segurança da ONU.
Os BRICS, além de indutores do desenvolvimento, são, por conseguinte, uma
nova e poderosa voz numa velha ordem mundial unipolar, que vem perdendo,
dia após dia, legitimidade e capacidade de mediar conflitos e promover a paz e
a segurança.
Essa velha ordem mundial está assentada no aprofundamento das assimetrias
e na força militar da grande superpotência, que, em conjunto, geram
insegurança e o agravamento dos conflitos. Sua célere obsolescência advém
precisamente dessa característica combinada da ilegitimidade no uso da força
com a incompetência na mediação e solução dos conflitos.
Quando essa ordem unipolar surgiu, após o fim da Guerra Fria, alguns, como
Francis Fukuyama, vaticinaram o fim da história, e outros vislumbraram a
possibilidade da realização do velho sonho kantiano da paz perpétua. Contudo,
passadas duas décadas, o que vê pelo mundo não é um sonho de Kant, mas
um pesadelo de Clausewitz, tal a violência e o número dos conflitos sem
mediação e solução.
Trata-se, assim, de uma ordem mundial inteiramente obsoleta e anacrônica,
que necessita de reformas urgentes em todos os níveis: econômico, financeiro,
político e institucional. Não obstante, os grandes beneficiários dessa ordem
resistem à sua mudança e se aferram ao velho poder, que decresce com as
mudanças que ocorrem na economia mundial.
Nesse contexto, os BRICS podem e devem ter voz ativa e papel propositivo na
construção de uma nova ordem mundial mais justa, democrática, simétrica,
inclusiva e multipolar. E o Brasil, país que se destaca entre os BRICS por seu
soft power e pelo êxito na redução de suas desigualdades, pode contribuir
muito com esse objetivo maior.
Assim sendo, a reunião de Fortaleza, na medida em que aprovou ações
concretas e decisivas desse novo e poderoso bloco, deve ser considerada,
com toda justiça, como um marco histórico nas relações internacionais.
Órgãos da imprensa mundial assim a reconheceram. Pena que a nossa mídia
tenha decidido tratá-la com certa indiferença, tendo sido até levianamente
sugerido, por alguns velhos “formadores de opinião”, que o objetivo da cúpula
era dar palanque à presidenta.
Nossa mídia, ou parte dela, demonstra, desse modo, que pode ser bem mais
anacrônica que a obsoleta ordem mundial. Merece até um novo acrônimo: VIL
(Velha Imprensa Leviana).
BRICS: a Geostratégia por trás da Nova Geoeconomia
Marcelo Zero- 2015 julho,10
Quando o economista do Goldman Sachs, Jim O´Neill, cunhou, em 2001, o
acrônimo BRIC, referindo-se aos megapaíses emergentes Brasil, Rússia, Índia
e China, o termo não passava de uma expressão vazia, um mero exercício
intelectual que pretendia denotar a crescente importância desses países para
os investidores das nações mais desenvolvidas e seu potencial de gerar bons
negócios para as firmas das grandes nações industrializadas. Os BRICs eram
apenas uma nova fronteira de investimentos que se abria, no quadro de uma
geoeconomia rigorosamente dominada pelos mesmos players de sempre.
Mal sabia ele que, 14 anos depois, em Ufá, Rússia, os BRICs, agora
transformados em BRICS, com a adição da África do Sul, já seriam um
importantíssimo e atuante bloco, que vem transformando a velha geoeconomia
mundial e revolucionando a arquitetura financeira internacional.
Com efeito, na recente cúpula realizada na cidade fundada por Ivã, o Terrível,
os BRICS fizeram algo que era impensável há uma década. Eles concretizaram
seu próprio banco de investimentos, o Novo Banco de Desenvolvimento dos
BRICS (NDB), e seu próprio Arranjo de Contingente de Reservas (CRA) para
ajudar países em dificuldades. Criados na Reunião de Fortaleza, eles agora
passam a operar. Os BRICS são, hoje, um bloco institucionalizado, que atua
com desembaraço sobre a ordem mundial.
Esses dois arranjos financeiros não surgiram por acaso. Eles sugiram de uma
necessidade: as velhas instituições multilaterais surgidas no longínquo ano de
1944, em Bretton Woods, o FMI e o Banco Mundial, já não conseguem lidar
com os desafios postos pela nova geoeconomia mundial. A UNCTAD, agência
especializada da ONU para o comércio e o desenvolvimento, estima que os
países em desenvolvimento precisariam de US$ 1 trilhão para aprimorar a sua
infraestrutura. FMI e Banco mundial são incapazes de responder a esse
desafio.
Afinal, trata-se de instituições esclerosadas, cuja governança não incorpora os
interesses e os anseios dos novos atores globais. Elas continuam nas velhas
mãos das antigas potências, agora fortemente atingidas pela crise mundial.
Para se ter uma ideia, a China, segunda economia mundial, tem menos votos
no FMI que o Benelux ( Bélgica, Holanda e Luxemburgo). Além disso, são
organismos dominados por obsoletas ideias paleoliberais, e exigem
condicionalidades draconianas para fazer empréstimos.
A tentativa de abrir mais espaço para os países emergentes nessas instituições
multilaterais esbarrou no Congresso dos EUA, o qual até hoje não aprovou a
modificação nas cotas e no sistema de votação do FMI e do Banco Mundial. Os
EUA e a Europa continuam a ser seus mandantes privilegiados.
É uma situação absurda. Afinal, os BRICS têm 42% da população mundial e
26% do território do planeta. São responsáveis por 23% da economia mundial e
15% do comércio internacional. Não bastasse, eles detêm 75% das reservas
monetárias internacionais. Além disso, os BRICS foram responsáveis por 36%
do crescimento da economia mundial, na primeira década deste século. Com a
recessão nos países mais desenvolvidos, esse número pulou para cerca de
50%, mesmo com a desaceleração recente do crescimento desse bloco.
Em outras palavras, a importância dos BRICS não é só avassaladora, como
vem crescendo ano a ano, mesmo com a crise tendo se abatido recentemente
sobre seus membros.
Enganam-se, contudo, aqueles que consideram os BRICS somente uma
associação de caráter econômico. Na realidade, com a nova geoeconomia, na
qual os BRICS são grandes atores em ascensão, cria-se também,
inexoravelmente, uma nova geopolítica e uma nova geoestratégia.
É aí que a coisa se complica e surgem as resistências e as críticas ao bloco.
Por trás da nova geoeconomia, há uma surda luta geopolítica e geoestratégica.
A China está passando por um processo de transição econômica que inclui
uma calculada desaceleração. A economia chinesa, baseada em investimentos
volumosos e em exportações de manufaturados, tem atualmente excesso de
capacidade instalada em muitos segmentos econômicos (construção civil,
energia, etc.) e precisa refazer a sua estratégia econômica, face à
desaceleração do comércio mundial.
Nesse sentido, a China vem fazendo um duplo movimento. Primeiro, aumentar
o consumo doméstico, de modo a compensar o baixo dinamismo do comercio
mundial.
Segundo, e mais importante, reduzir a sua dependência em relação ao dólar e
sua exposição às crises norte-americanas, face às suas gigantescas reservas
nessa moeda, diminuindo a hegemonia do dólar norte-americano como grande
meio de troca mundial e como reserva internacional de valor.
A criação do NDB e do CRA e a expansão do banco da China, bem como os
maciços investimentos desse país no exterior são parte de um processo que
troca investimentos em títulos do tesouro americano (reservas) por
investimentos em infraestrutura em países em desenvolvimento. Com isso, a
China não apenas assegura o afluxo de commodities e influência geopolítica,
como prepara as condições para que o renmimbi seja uma moeda mundial,
competindo com o dólar.
Outra disputa surda, mas intensa, que envolve o BRICS tange ao domínio da
Eurásia.
Em 1997, Zbigniew Brzezinski, scholar extremamente influente, que fora
assessor presidencial para assuntos de segurança nacional no período de
1977 a 1981, publicou, na Foreign Affairs, um artigo intitulado Uma
Geoestratégia para a Eurásia, que já antecipava algumas teses de seu livro O
Grande Tabuleiro de Xadrez.
Nesse artigo, ele argumenta, com razão, que a Eurásia é o eixo geoestratégico
do mundo, já que esse supercontinente, além concentrar boa parte do território
e dos recursos naturais do planeta, conecta os dois grandes polos econômicos
do mundo além dos EUA, a União Europeia e o Leste da Ásia. Para Brzezinski,
é vital que os EUA tenham o controle desse supercontinente, caso queiram
permanecer como a única e inconteste superpotência.
Pois bem, a geoestratégia concebida por Brzezinski implicava várias ações de
longo prazo concomitantes. Em primeiro lugar, o fortalecimento da Europa
unida, sob a liderança dos EUA. Para tanto, Brzezinski já sugeria, inclusive, a
celebração de um tratado de livre comércio transatlântico, como o anunciado
recentemente. Em segundo, o fortalecimento das novas nações independentes
da Ásia Central e do Leste Europeu, que surgiram após o colapso da União
Soviética, e a consequente expansão da OTAN até a Ucrânia. Em terceiro
lugar, e mais importante, a geoestratégia de Brzezinski previa o
enfraquecimento da Rússia e o enquadramento de sua política externa nos
imperativos geopolíticos dos EUA e seus aliados.
Essa geoestratégia colidiu, obviamente, com o fortalecimento da Rússia sob
Putin e a formação do BRICS. A crise da Ucrânia nada mais é que a expressão
visível e aguda desse choque geoestratégico.
Para fazer frente a esses novos desafios, os EUA reordenaram sua
geoestratégia, que antes estava centrada na luta contra o terrorismo e no
Oriente Médio. A nova geoestratégia norte-americana, explicitada em 2012
com o documento “Sustentando a liderança global dos EUA: Prioridades para a
Defesa do Século 21”, pretende se contrapor à crescente erosão de poder
econômico e geopolítico dos EUA e aliados europeus e realizar movimentos de
contenção da ascensão de países emergentes, notadamente os reunidos no
BRICS.
Fazem parte dessa contraofensiva a TPP, a Trasn-Pacific Partnership, que
inclui países asiáticos próximos à China, mas que exclui Beijing, e a
Transatlantic Trade and Investment Partnership (TTIP), que pretende reforçar
os laços econômicos entre os EUA e a União Europeia.
Essa contraofensiva também implica o abandono parcial da política
unilateralista de confrontação no Oriente Médio, que não funciona e consome
volumosos recursos militares e estratégicos. Os investimentos no shale oil,
mesmo com todos os problemas ambientais que geram, se inserem nessa
tentativa de diminuir a importância do Oriente Médio, na nova geoestratégia
norte-americana.
E o Brasil, como se insere, nesse tabuleiro geoestratégico?
Em primeiro lugar, é preciso considerar que o Brasil também é alvo da
contraofensiva norte-americana.
A recente distensão das relações entre os EUA e Cuba, por exemplo, faz parte
de um movimento de reaproximação da única superpotência do planeta à
América Latina e ao Brasil. O conflito com Cuba sempre significou um entrave
desnecessário e obsoleto para uma relação mais fluida com os EUA. A
eliminação desse entrave, do ponto de vista dos EUA, ajuda a abrir caminhos
para uma retomada de sua histórica influência na região.
A Aliança do Pacífico, um factoide do ponto de vista econômico e comercial,
representa, na realidade, uma ofensiva geopolítica direcionada contra a
integração regional, sob o disfarce de um regionalismo aberto voltado à
integração assimétrica com os EUA e outras potências tradicionais. O alvo é o
Mercosul e sua união aduaneira.
A contraofensiva geoestratégica dos EUA passa, na América Latina, pela
tentativa de desarticulação da integração regional liderada pelo Brasil e pela
limitação da influência da China e da Rússia na região.
Entretanto, essa contraofensiva não é necessariamente ruim para o país. Ao
contrário, o Brasil pode se aproveitar dessas disputas para se projetar ainda
mais no cenário mundial.
Essa possibilidade esbarra, contudo, na total cegueira estratégica das nossas
elites.
Com o arrefecimento (não o fim) do ciclo das commodities e a crise que agora
também afeta países emergentes e em desenvolvimento, ressurgiu com plena
força o mito de que a recente política externa brasileira é equivocada e precisa
se reorientar em direção ao seu “leito natural”, isto é, os EUA e demais
potências tradicionais. Critica-se o Mercosul, a integração regional, a
cooperação Sul-Sul, a parceria com os países emergentes e, é claro, também
os BRICS, grande foro que o Brasil utiliza para se consolidar como liderança
mundial.
Para os que padecem dessa irremediável cegueira estratégica, o Brasil deve
renunciar ao Mercosul e sua união aduaneira, à cooperação Sul-Sul e a um
BRICS politicamente mais atuante e investir em acordos de livre comércio com
os EUA e a União Europeia, de modo a se inserir celeremente nas cadeias
internacionais de produção. Com a crise e a baixa das commodities, que
demanda esforços para se aumentar as exportações, principalmente as
exportações de manufaturados, em razão da óbvia contração da demanda
interna acarretada pelo ajuste, essas teses ganharam contornos preocupantes
de urgência.
Ora, isso seria um erro gravíssimo. A integração regional absorve mais
produtos manufaturados brasileiros que todos os países desenvolvidos
somados. A competitividade dos nossos produtos manufaturados em nosso
entorno regional está relacionada justamente à união aduaneira. Sem ela,
nossos produtos não poderiam competir com bens chineses, norte-americanos,
europeus, etc. O mesmo ocorre com os outros vetores da nossa política
externa, como a cooperação Sul-Sul e as parcerias estratégicas com países
emergentes. Foram esses vetores que nos permitiram expandir nossa
participação no comércio mundial, de 0,88%, em 2000, para 1,43%, em 2011, e
elevaram substancialmente o protagonismo internacional do Brasil.
É claro que o Brasil, em sua condição de global player, tem de se aproximar
mais dos EUA, da União Europeia e qualquer país ou bloco que queria, nesse
momento de baixo crescimento do comércio mundial, estreitar seus laços de
cooperação conosco. Mas o país tem de fazer isso a partir da posição de
relevo e de alto protagonismo que conquistou justamente com esses vetores da
política externa ativa e altiva, que nos livrou da antiga dependência e
fragilidade dos tempos paleoliberais. Como membro do Mercosul e do BRICS,
o Brasil pode muito mais.
A celebração açodada de acordos de livre comércio assimétricos com
potências tradicionais, somada a uma desarticulação da integração regional e a
um baixo investimento no BRICS e nas demais parcerias estratégicas com
países emergentes, acabaria transformando o Brasil num grande México, o
país da América Latina, que nos últimos 12 anos, apresentou o menor
crescimento do PIB per capita na América Latina, à exceção da Guatemala. O
país que tem 51% da sua população abaixo da linha da pobreza.
Na recente viagem de Dilma aos EUA, Obama declarou, em alto e bom som,
que seu país considera o Brasil não somente uma potência regional, mas
também uma potência mundial. Não foi mera retórica diplomática. Foi
constatação da verdade.
Contudo, o Brasil só adquiriu esse status perante os EUA e os demais países
do mundo porque fez aposta geoestratégica correta de investir na integração
regional, na cooperação Sul-Sul e nas parcerias com os demais BRICS. O
Brasil se converteu em grande ator mundial porque, em essência, investiu em
seus próprios interesses.
O grande risco do Brasil no atual cenário mundial não vem, portanto, do
arrefecimento do ciclo das commodities e da crise internacional, que afeta todo
o mundo. Na realidade, o grande risco do país provém de sua situação política
interna e da cegueira estratégica de uma elite neocolonial que aposta
obtusamente na volta a um passado de dependência e fragilidade.
O centro da política externa brasileira tem de continuar a ser a integração
regional a cooperação Sul-Sul e as parcerias estratégicas com emergentes,
particularmente com o BRICS, que se tornou, de fato, um novo polo político
que contribui para o multilateralismo e uma ordem mundial menos assimétrica.
É isso que nos cacifa para termos uma relação mais proveitosa com os EUA. É
isso que nos faz potência.
Entretanto, se os interesses retrógados internos preponderarem, talvez na
próxima viagem aos EUA o Brasil não seja saudado nem como potência
mundial, nem como potência regional. Seremos, de novo, apenas o quintal.
IV - MERCOSUL x NAFTA x PACÍFICO
Para Patriota, Aliança do Pacífico é mais "êxito de marketing"
20/06/13
O ministro das Relações Exteriores, Antonio Patriota, negou nesta quinta-feira, em
audiência pública na Comissão de Relações Exteriores (CRE) do Senado, que o Mercosul
esteja passando por uma "suposta paralisia", que seja um modelo "antiquado e
desvantajoso" para seus países membros e que tenha sido "ultrapassado" pela formação
da Aliança do Pacífico, novo bloco comercial que reúne México, Colômbia, Peru e Chile.
Para Patriota, houve mais "êxito de marketing" com relação à Aliança do Pacífico e não há
motivos de preocupação com a união desses países em um novo bloco. "É uma
embalagem nova a uma situação já existente. Não há nada novo no que os países
membros prometem fazer em relação à realidade atual. Já existe livre comércio para
quase todos os países integrantes", disse.Considerou natural que os países busquem
"outras formas para maximizar ganhos", mas afirmou que há, por parte do Brasil e do
Mercosul, "atenção permanente" a tudo que acontece na região.
Segundo Patriota, os resultados do Mercosul são "positivos, concretos e reais". Quanto
ao comércio, por exemplo, ele disse que, apesar dos efeitos da grave crise econômica de
2008, o desempenho do intercâmbio entre os membros do bloco é superior ao do
comércio internacional.
"O Mercosul é a mais bem sucedida iniciativa de integração profunda e abrangente na
América do Sul", afirmou. No caso do Brasil, especialmente, o Mercosul se constitui,
segundo o ministro, como "importantíssimo" instrumen to para expansão das
exportações, em especial de produtos industrializados.
Citou que, enquanto as trocas globais cresceram 13%, a corrente de comércio entre os
membros do Mercosul cresceu mais de 20%. Nos pouco mais de 20 anos de existência, o
valor do comércio entre os países do Mercosul cresceu mais de nove vezes, enquanto a
corrente comercial do bloco com o resto do mundo multiplicou menos, oito vezes apenas.
Com relação ao Brasil, Patriota disse que em 2012, depois de quatro anos de crise
internacional, o Mercosul ocupou a quarta posição como destino das mercadorias, com
9%, depois de União Europeia, China e Estados Unidos.
"E, quando se leva em conta a composição da pauta de exportações, a importância do
Mercosul se destaca. Cerca de 90% exportações brasileiras para bloco foram de
manufaturados. Para União Europeia, China e Estados Unidos são de 36%, 5% e 50%.
Logo, muito menores. Ou seja, a indústria brasileira tem no Mercosul seu mais importante
mercado externo", disse.
O Mercosul afunda na sua irrelevancia –
Editorial O Globo - 22 de maio de 2013
Comentário
Um pequeno problema com esse editorial: o retrocesso a uma ZLC, em lugar de uma UA
esfarrapada e ridícula como é hoje, não vai tirar o Mercosul de sua irrelevância, e tampouco
ajudar o Brasil, cujos instintos protecionistas são quase tão fortes quanto os da Argentina.
Paulo Roberto de Almeida - http://diplomatizzando.blogspot.com.br/2013/05/o-mercosul-afunda-
na-sua-irrelevancia.html
Brasil imobilizado pela crise do Mercosul (Editorial)
O Globo, 22/05/2013
Não se pode menosprezar o papel do Mercosul na distensão geopolítica no extremo do
continente, e como alavanca no comércio entre os países do bloco.
Foi graças à perspicácia dos presidentes José Sarney e Raúl Alfonsin que Brasil e Argentina, no
início dos respectivos processos de redemocratização, em meados da década de 80,
estabeleceram as bases diplomáticas para a criação do bloco comercial, com a adesão de
Uruguai e Paraguai.
Assim como é preciso reconhecer os avanços, tem-se de admitir os problemas. Faz tempo que o
Mercosul, como união aduaneira, não atende mais aos interesses brasileiros e passou a servir
de camisa de força para o país.
O bloco trincou, por força da crise econômica e institucional argentina, e entrou em crise pelo
crescente protecionismo do vizinho. Uma contradição em termos com o conceito de união
aduaneira, cujo mecanismo básico da tarifa externa comum foi jogado no lixo pela Casa Rosada.
Tanto quanto isso, o Brasil atola na anemia do Mercosul numa fase em que no mundo se
multiplicam acordos comerciais, com novos blocos e/ou acertos bilaterais, e o país, por força do
tratado do qual passou a fazer parte a Venezuela, fica de mãos atadas por necessitar da
aprovação de todos os parceiros para assinar algum desses tratados.
O Uruguai, por exemplo, só faltou sentar-se à mesa para selar um acordo comercial com os
Estados Unidos. Foi impedido pelo Mercosul.
No fim de semana, O GLOBO trouxe uma radiografia dos danos já sofridos pelo comércio
exterior brasileiro no próprio mercado latino-americano, amplificados pela perda de
competitividade da indústria nacional, causada por erros internos de política econômica.
O peso brasileiro nas importações no continente, entre 2008 e 2011, caiu de 11% para 9,7%,
espaço ocupado por China, Estados Unidos, Índia e União Europeia. O Brasil perdeu vendas no
valor de US$ 7,4 bilhões, basicamente manufaturados.
Entre as causas, destaca-se o protecionismo argentino, diante do qual Brasília é muito
condescendente, a perda de competitividade em si brasileira e a agressividade chinesa. Com a
consolidação da Aliança do Pacífico (Chile, Colômbia, México e Peru), mais aberta a acordos, e
próxima aos EUA, o peso brasileiro ficará ainda menor.
O Itamaraty precisa analisar com seriedade a conversão do Mercosul de união aduaneira numa
área de livre comércio, como já foi.
A integração econômica continua, mas, com o fim da tarifa externa única — como se o Mercosul
fosse um único país, o que já não é —, cada membro tem liberdade para negociar acordos
bilaterais com quem quiser. Sem vetos.
Argentina e Venezuela, refratários ao livre comércio, podem praticar o retrocesso que desejarem.
Mantém-se a relativa coesão geopolítica no Cone Sul, e o Brasil fica em condições de rever sua
política de inserção nas cadeias produtivas globais, algo urgente para o setor industrial.
O BRASIL E O PACÍFICO
Mauro Santayana - 24/05/2013 – www.maurosantayana.com
(JB)-Não foi uma caminhada fácil, nem se iniciou ontem, mas o Brasil deixou para trás a situação
acanhada, quando, de tempos em tempos, nossos ministros da Fazenda viajavam aos Estados
Unidos, de chapéu na mão. A dívida externa nacional, sempre acumulada, pelos juros brutais,
tinha que ser “rolada” de maneira humilhante. Os que procuraram escapar ao “contrato de
Fausto com o diabo”, conforme Severo Gomes, sofreram a articulação golpista comandada de
fora, como ocorreu a Vargas, a Juscelino e a João Goulart.
Livramo-nos, durante o governo Lula, do constrangimento de abrir a contabilidade nacional aos
guarda-livros do FMI, que vinham periodicamente ao Brasil dizer como devíamos agir, em
relação à política fiscal ou na direção dos parcos investimentos do Estado. Ainda temos débitos
com o exterior, mas as nossas reservas cobrem, com muita folga, os compromissos externos.
Não obstante isso, os nossos adversários históricos não descansam. Ontem, na cidade
colombiana de Cali, os governos do México, do Chile, da Colômbia e do Peru se reuniram para
mais um passo na criação da Aliança do Pacífico — sob a liderança dos Estados Unidos e da
Espanha — claramente oposta ao Mercosul. O Tratado que reúne, hoje, o Brasil, a Argentina, a
Venezuela e o Uruguai — e que deverá ampliar-se ao Paraguai e à Bolívia — representa
poderoso mercado interno, com um dinamismo que assegurará desenvolvimento autônomo e
relações de igualdade com outras regiões do mundo.
Os norte-americanos, em sua política latino-americana, agem sempre dentro do velho princípio,
que Ted Roosevelt atribuía aos africanos, de falar mansinho, mas levar um porrete grande.
Ainda agora, preparam uma recepção de alto nível para a chefe de Estado do Brasil, que visitará
Washington, em outubro — e será recebida com todas as homenagens diplomáticas. Ao mesmo
tempo montam o esquema de cerco continental ao nosso país.
Sendo assim, foi importante a visita que fez anteontem a Washington o presidente da Câmara
dos Deputados, Henrique Alves, a convite do Instituto do Brasil, do Centro Woodrow Wilson, e do
US Businness Council. O parlamentar, exibindo números bem conhecidos em Washington,
mostrou que o Brasil deixou de ser país em desenvolvimento, para tornar-se uma potência
consolidada. Ele argumentou que o Brasil é investidor importante na economia norte-americana,
e, embora não o tenha feito, poderia lembrar que somos o país que tem o terceiro maior crédito
junto ao Tesouro dos Estados Unidos.
Os espanhóis que, em troca do tratamento privilegiado que lhes damos no Brasil, tratam de nos
prejudicar, estão exultando com a Aliança do Pacífico. No entender de seus analistas, a nova
organização vai sufocar o Mercosul. Ainda que alguns de nossos parceiros estejam encontrando
dificuldades ocasionais, a pujança conjunta supera, de longe, a economia dos países da Aliança.
A economia mexicana depende de empresas norte-americanas, que se aproveitam de seus
baixos salários e outras vantagens para ali montar seus automóveis e “maquiar” outros produtos.
A força da economia brasileira, na indústria de porte — em que se destaca a engenharia de
excelência na construção pesada — reduz a quase nada a importância dos países litorâneos do
Pacífico, em sua realidade interna. Os Estados Unidos os querem no Nafta, e é provável que
consigam esse estatuto de vassalagem. Nós, no entanto, não podemos deixar os nossos
vizinhos da América do Sul isolados, em troca de uma parceria com Washington que de nada
nos serve.
É hora também de dar um chega pra lá com a Espanha de Juan Carlos, Rajoy e Emilio Botin, o
atrevido presidente do Banco Santander, que consegue ser recebido no Planalto com mais
frequência do que alguns ministros de Estado. O Brasil deve manter as melhores relações
diplomáticas com os Estados Unidos, desde que as vantagens sejam recíprocas. Mas se, ao
contrário deles, não levarmos o big steak, estaremos advertidos de que “os Estados Unidos não
têm amigos: os Estados Unidos têm interesses”, conforme a frase atribuída a Sumner Welles e
repetida depois por Kissinger.
La disputa por nuestra América: Unasur en la mirilla yanqui.
Ángel Guerra Cabrera
Lo que se disputa hoy en América Latina y el Caribe es si se consolida el proyecto bolivariano de independencia e integración regional, o si Washington y las derechas locales consiguen derrotarlo. En esta batalla, los enemigos de nuestros pueblos utilizan los cuantiosos recursos materiales –incluyendo militares- y culturales acumulados por siglos de explotación, saqueo y opresión. Nuestros pueblos, a su vez, se valen de la rica experiencia de sus tradiciones patrióticas y revolucionarias, forjadas en la resistencia anticolonial y antiesclavista, las revoluciones por la primera independencia y las luchas antineocoloniales posteriores, inscriptas en la marcha hacia la segunda y definitiva independencia.
Es muy valioso el cúmulo de saberes políticos adquirido en las contiendas antineoliberales: desde el caracazo(1989) al levantamiento indígena de Chiapas(1994) y, en especial, durante los años de estelar liderazgo nacional y regional del comandante Hugo Chávez(1999-2013). Todavía no nos hemos dado cuenta cabalmente de cuánto alcanzó con su incansable batallar el meteórico venezolano.
Inspirado, como lo afirmaba con orgullo, por el ejemplo y la amistad de Fidel Castro y la Revolución Cubana, Chávez logró articular un magnífico equipo con Néstor y Cristina Kirchner, Lula da Silva, Evo Morales y Rafael Correa, entre otros líderes populares latino-caribeños. La derrota del Alca(Mar del Plata, 2005) fue una de sus grandes victorias, que sentó las bases para el auspicioso e inédito surgimiento de la Alba, Petrocaribe, la Unasur, la Celac, el Mercosur ampliado, organizaciones que han puesto coto al arrogante monroísmo e impulsado un sentimiento de independencia, fraternidad y solidaridad regional. Ahora los pueblos y gobiernos de América Latina y el Caribe hablan con voz propia.
Eso es lo que no soportan los imperialistas yanquis. Tener que tratarnos de igual a igual pese a que el secretario de Estado Kerry nos siga llamando traspatio. Que le digan con la frente alta, como le tocó a Obama en la Cumbre de las Américas de Cartagena, que no podía haber más cumbres sin Cuba y que debía ponerse fin al criminal bloqueo. Que las Malvinas son argentinas, idea intragable no solo para la elite británica con su nostalgia imperial. También y, sobre todo, para su socio estadunidense que codicia el petróleo de su suelo marino y quiere utilizarlas como una base de intervención contra nuestra América.
En los feroces y persistentes planes desestabilizadores yanqui-oligárquicos contra los gobiernos dignos y soberanos de Venezuela, Bolivia, Ecuador y Argentina se observa nítidamente la creciente relevancia tomada por el ejército mediático imperial. Capriles Radonsky, por ejemplo, existe políticamente gracias a su fabricación mediática. Subestimar la ruin tarea de ese ejército en la descerebración o la siembra de la confusión y la división en importantes sectores, incluso populares, puede costar muy caro.
La Alianza del Pacífico(AP), que reúne a Chile, Perú, Colombia y México y cuya cumbre se inicia hoy en Cali, es una daga apuntada al cuello de las ya mencionadas instituciones de unidad e integración latino-caribeña, en particular al de Unasur. Es también un intento de reflotar el Alca. Los países que lo integran tienen tratados de libre comercio con Europa y Estados Unidos, instrumentos que como está ampliamente documentado han ocasionado ya una tragedia económica, social y cultural de grandes proporciones en los países del sur que los han aplicado, y que más allá del comercio –nada con Washington es libre- implican la veloz anexión y subordinación de los estados al norte revuelto y brutal. La AP, con más de 200 millones de habitantes, una extensión territorial de más de cinco millones de kilómetros cuadrados y 40 por ciento del PIB regional se mete como una cuña en el cuerpo de Unasur.
La AP se une al Acuerdo de Asociación Transpacífico, un hecho muy grave pues este está concebido por Washington para enrolar a sus integrantes en el cerco y creciente hostilidad contra China, pero también contra Brasil. Estados Unidos alucina por su ascenso como potencia suramericana y mundial, aliado a Argentina e instalado en el BRICS.
Los procesos trasformadores no se rinden y combaten con un arma formidable: el apoyo popular y su credibilidad. Hoy lo veremos en el gigantesco cabildo de La Paz en apoyo a Evo Morales (http://www.rebelion.org/noticia.php?id=168384&titular=¿qué-clase-de-clase-es-esa?)
Twitter: @aguerraguerra
Movimiento de Solidaridad Nuestra América\
Santos, la conjura contra Venezuela y la Alianza del Pacífico
Attilio Boron
31.5.2013 - http://www.atilioboron.com.ar/2013/05/santos-la-conjura-contra-venezuela-y-la.html
Hola todas y todos. Comparto una nota sobre el tema. Una versión reducida saldrá publicada
mañana en Página/12.
Fraternalmente,
Atilio
(Atilio A. Boron) Por más que se lo suela poner en cuestión, todo acuerdo económico es a la vez
un compromiso político. El pensamiento neoliberal presenta sus opciones políticas (por ejemplo,
promover un modelo económico que enriquece a los ricos y espolia a los pobres) como si fueran
el resultado de un cálculo técnico o de una racionalidad abstracta, cuando lo cierto es lo
contrario.
Lo anterior vale tanto para los acuerdos sellados en el plano doméstico como en el
internacional. Por eso no puede causar sorpresa la provocación en que incurrió el gobierno de
Juan M. Santos –ahora dice que todo fue un “malentendido”- al recibir al perdidoso candidato de
la derecha venezolana, Henrique Capriles. Al hacerlo, el presidente colombiano le confirió
legitimidad a sus escandalosas denuncias –refutadas por sucesivas auditorías practicadas sobre
los resultados electorales del 14 de Abril- y se alineó irresponsablemente con el líder del ala
fascista y más radical y golpista de la derecha venezolana.
¿Sólo con ésta? No, porque la estrategia de desgaste del antichavismo no es creación
original venezolana sino expresión de las directivas que emanan desde Washington para
concretar su proyecto destituyente y tratar de borrar al chavismo de la faz de la tierra. Por eso la
Casa Blanca continúa sin reconocer la legalidad y la legitimidad del triunfo de Nicolás Maduro en
las pasadas elecciones presidenciales. El empecinamiento del insólito Premio Nobel de la Paz
no es inquina personal sino el meticuloso cumplimiento del proyecto de reversión de la
correlación internacional de fuerzas en el hemisferio que en el 2005 provocara el naufragio del
ALCA en Mar del Plata. Componente fundamental de ese proyecto es el permanente acoso, la
deslegitimación y la desestabilización de los gobiernos bolivarianos y progresistas de la región.
El sueño imposible del imperio es restablecer en Latinoamérica una situación anterior a la
Revolución Cubana, cuando las órdenes de la Casa Blanca eran obedecidas sin chistar por los
gobiernos de la región. Este es el sentido fundamental de la tan publicitada y alentada Alianza
del Pacífico conformada por México, Colombia, Perú y Chile, que a instancias de Washington
organizó nada menos que siete Cumbres en poco más de un año. El objetivo de este
hiperactivismo diplomático es principalmente político y, en menor medida, económico. Lo
primero, porque pretende rehacer el mapa sociopolítico regional acabando con los gobiernos de
los países del ALBA e inclusive con sus aliados, como los de Argentina y Brasil, “cómplices”
según Washington de la derrota del ALCA. Y en lo económico, porque la AP es la más
importante pieza de la contraofensiva imperialista destinada ahora, ya mismo, a concretar un
ALCA con otro nombre y, a la vez, para potenciar el papel de “caballos de Troya” que
Washington les tiene asignados a los gobiernos de la AP para socavar desde dentro a proyectos
que suscitan el visceral rechazo de la Casa Blanca como la UNASUR, la CELAC y, en menor
medida, el Mercosur. No sorprende que los gobiernos y políticos más reaccionarios del
continente, ¡y los de Europa! compitan entre sí para ver quién entra primero a esa alianza
concebida y orquestada por los Estados Unidos para defender sus propios intereses utilizando a
sus peones latinoamericanos y europeos. ¿Qué sentido tiene que países como España,
Australia, Uruguay y Japón, que hoy día tienen el estatus de observadores, hayan declarado que
solicitarán su adhesión para convertirse en miembros plenos de la AP durante el 2013.” Australia
y Japón, ¿necesitan de este instrumento norteamericano para vincularse con el nuevo centro de
gravedad de la economía mundial que se halla, precisamente, en su entorno inmediato, o es que
se trata de dos países sometidos militar, económica y diplomáticamente a la voluntad de la Casa
Blanca y que por lo tanto actúan según se les ordena?
Claro está que este engendro norteamericano, del cual Santos es el principal articulador
(recordar que la última y fundamental reunión se hizo el 22/23 de Mayo en Cali) requiere de sus
protagonistas una abyecta sumisión a los edictos y las prioridades imperiales. Para la Casa
Blanca hoy nada es más importante que aprovechar el momentáneo desconcierto provocado por
la muerte de Hugo Chávez para reordenar lo que el Secretario de Estado John Kerry denominara
-en una expresión que por su carácter despectivo había caído en desuso- al “patio trasero” de
Washington. Y Santos obedeció el mandato y recibió a un desprestigiado político amparado por
lo peor de la derecha latinoamericana y europea -principalmente el corrupto Partido Popular de
España, cuyo jefe en las sombras es José M. Aznar- y culpable de haber instigado actos
criminales que culminaron con la muerte de once chavistas y más de un centenar de heridos
amén de la destrucción de numerosos centros de salud y oficinas públicas. El objetivo de la gira
latinoamericana de Capriles es desprestigiar al gobierno de su país a cualquier precio, inclusive
deteriorando las ya de por sí difíciles relaciones colombo-venezolanas. Pero Washington hace
saber a sus clientes que no hay límites éticos ni escrúpulos de ningún tipo a la hora de aislar al
gobierno de Venezuela, caracterizándolo como un “estado canalla” y debilitarlo para facilitar su
indefensión ante los ataques de Washington. Para ello se combinarán estrategias de hipócrita
seducción –Joe Biden bendiciendo a Brasil como potencia ya “emergida” pero sin hablar de que
es el país al cual EEUU ha rodeado con más bases militares en toda Latinoamérica- con otras
más brutales, como las que seguramente habrá comunicado Roger Noriega en su viaje a
Colombia al presidente Santos, y con iniciativas como las de la AP, que dados sus objetivos y
extraordinaria movilización de recursos sería muy peligroso no tomar seriamente en cuenta.
Todo indica que el pueblo y el gobierno venezolanos son plenamente conscientes de esta
amenaza, y están preparados para resistir y no sólo eso, sino también prevalecer. Saben que
contarán con la solidaridad militante de la mayoría de los pueblos y los gobiernos de Nuestra
América que con sus luchas derrotarán esta nueva tentativa de establecer un ALCA, ahora con
otro nombre. En el nauseabundo contexto internacional arriba señalado cabe destacar el
honroso gesto del presidente Rafael Correa que, por boca de su Canciller, hizo saber que
Ecuador jamás recibiría a Capriles.
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NOTAS ECONÔMICAS LATINO-AMERICANAS! (AGÊNCIAS)!
Cesar Maia NL
1. Os membros fundadores da Aliança do Pacífico (Chile, Peru, Colômbia e México) combinaram
na cúpula de Cali (Colômbia), que terão até 30 de junho para chegar a um acordo sobre os
detalhes do desmantelamento alfandegário que deve afetar, na primeira fase, cerca de 90% do
comércio entre os quatro membros. A cúpula serviu para dar um impulso a este ambicioso
processo de integração regional e não apenas na área do comércio. Os líderes concordaram em
criar um visto único de turista válido para os quatro países e realizar campanhas de promoção
turística conjunta. Eles também concordaram em compartilhar embaixadas e expandir a rede de
escritórios comerciais conjuntos.
2. A prova de sua força está nas presenças da cúpula de Cali: além dos presidentes dos países
membros – Eduardo Santos (Colômbia), Sebastián Piñera (Chile), Ollanta Humala (Peru) e
Enrique Peña Nieto (México) – os presidentes de dois países candidatos para entrar no clube,
Laura Chinchilla (Costa Rica) e Otto Perez Molina (Guatemala), e os primeiros-ministros dos dois
países observadores, o espanhol Mariano Rajoy e o canadense Stephen Harper -, além de
delegações da Austrália, Nova Zelândia, Japão e Uruguai.
3. O Chile está sempre dependente do preço do cobre. Se em 2012 o preço do cobre voltasse a
seu nível de antes de 2003, o déficit da balança de pagamentos foi de 18% do PIB, bem acima
do que foi em 1981 (13%) ou em 1982 (9 %), na época da grande crise chilena. Em 2012 o país
gastou quase 10 bilhões de dólares a mais do que tinha. O balanço de pagamentos, considerado
o melhor indicador de sustentabilidade econômica, passou nos últimos anos de um superávit de
5% para um déficit de 4%: o excesso de 3,2 bilhões de dólares de três anos atrás, se tornou um
déficit de 9,5 bilhões dólares.
4. Relações agrícolas entre a China e a América Latina no período 2009-2011: (i) as exportações
de commodities agrícolas continuam desempenhando papel importante em diversos países, em
especial Argentina (80% das exportações para a China no período), Brasil e Guatemala. Os
países que possuem uma baixa importância relativa das exportações de produtos agrícolas são,
em geral, grande exportadores de commodities minerais como Chile, Colômbia, Bolívia e
Venezuela; (ii) Argentina, Bolívia, Brasil, Guatemala, México, Panamá, Paraguai, Peru e
Venezuela apresentaram apenas um produto concentrando cerca de 80% das exportações
agrícolas por pelo menos dois anos; (iii) as exportações de commodities agrícolas da AL para a
China estão concentradas (90%) na Argentina e no Brasil; (iv) todo o aumento da safra de soja
no Brasil nos últimos três anos foi absorvido pela China.
La Alianza del Pacífico, el Mercosur y la integración
latinoamericana
Adolfo Aguirre (ACTA) - J U E V E S , 6 D E J U N I O D E 2 0 1 3
http://www.argenpress.info/2013/06/la-alianza-del-pacifico-el-mercosur-y.html
Suenan las campanas de la división en América Latina. Con la última reunión en Cali, Colombia,
la Alianza del Pacífico (Chile, México, Colombia y Perú) anuncia un nuevo proceso de
integración regional, aparentemente más dinámico, moderno y abierto que lo conocido (el
Mercosur principalmente). Cuánto tiene de cierta esta alianza, cuánto de operación marketinera,
y cuánto de viabilidad política y económica.
Comencemos primero por los datos de la realidad. Desde hace varios años, pero con especial
fuerza desde la constitución formal en junio del 2012, la denominada Alianza del Pacífico busca
ser un eje de promoción de la integración regional a través de tratados de libre comercio, en
contraposición con el modelo del Mercosur, que si bien también promueve la apertura comercial,
busca ser una unión aduanera con algunos elementos de complementariedad económica entre
los socios y protección de los mercados internos. En la última reunión de la Alianza del Pacífico
(AP), los países participantes, con el liderazgo de México y Colombia, decidieron eliminar los
aranceles aduaneros en un 90 por ciento de los productos y con perspectivas de negociar la
eliminación restante en los próximos meses. Este proyecto tiene como eje promover el libre
comercio entre estos países y mirar con una perspectiva común al Pacífico, con eje en las
potencias de países asiáticos. El Mercosur, en cambio, parte de una base más sólida (existe
hace más de 20 años), ha sumado nuevos miembros (Venezuela recientemente y se negocia
con Ecuador y Bolivia) y opera en algunos niveles como bloque unificado (en especial en
acuerdos comerciales con terceros países o bloques). Sin embargo, en los últimos años se ha
visto jaqueado por las discrepancias comerciales entre los dos grandes socios, Argentina y
Brasil, y también por las justificadas quejas de los socios más pequeños, en especial Uruguay.
La situación no es tan sencilla, ya que no se trata de un simple duelo entre la AP y el Mercosur.
Hay elementos claves que los oponen, en especial la característica ideológica de los gobiernos y
la presencia de Estados Unidos, pero también hay diversos aspectos que interpelan a todos los
países. En el aspecto comercial, cabe decir que tanto Chile, como Perú, Colombia y México tiene
Acuerdos Preferenciales con el Mercosur, que llevan a una relación comercial muy cercana entre
ellos. Chile tiene una economía íntimamente conectada con la Argentina, tanto como Colombia
exporta gran parte de su producción industrial a Venezuela. Sumado a esto, Perú, Chile y
Colombia son parte de la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR) y, con sus diferencias,
han estado alineados en la integración política promovida desde esta organización. Sin ir más
lejos, luego de la muerte de Néstor Kirchner la Secretaría General de UNASUR quedó en manos
de Colombia. A este dato sumamos la conformación de la Comunidad de Estados
Latinoamericanos y del Caribe (CELAC), que sí integra México y cuya presidencia pro-témpore
acaba de pasar de Chile a Cuba. La CELAC está compuesta por miembros de todos los
gobiernos de América Latina y también se ha planteado como un espacio de unidad, en
oposición a la presencia norteamericana en la región. En base a estas realidades, se torna
complejo hablar de una competencia entre un supuesto grupo “bueno” (la AP) y uno “malo”
(Mercosur), ya que la integración se viene construyendo en conjunto y las economías se
conectaron entre sí mucho más en la última década que en el pasado.
La geopolítica tiene mucho que ver en la búsqueda de una oposición entre la AP y el Mercosur.
Está el interés de Estados Unidos, que luego de la derrota sufrida a manos principalmente de
Argentina, Brasil y Venezuela en la propuesta del ALCA, tomó el rumbo de los acuerdos de libre
comercio bilaterales. Los cuatro miembros de la Alianza del Pacífico han firmado el libre
comercio con Estados Unidos. Este dato es relevante, e influye a la hora de analizar las posturas
de los gobiernos. Para EEUU, la conformación de la AP tiene relevancia en su proyecto más
global, el de competir con la potencia comercial que propone China. Esta perspectiva de EEUU
tiene dos ejes: uno es el Acuerdo del Transpacífico, que agrupa económicamente a países del
pacífico asiático (menos China) con sus pares latinoamericanos (todos los miembros de AP); la
otra perspectiva es el acercamiento a través de un tratado de libre comercio con la Unión
Europea (todavía en discusión). El inconveniente mayor de esta estrategia es que, si bien China
tiene lazos comerciales principalmente con Argentina y Brasil, los países de la AP también han
firmado acuerdos con China. Sin ir más lejos, Perú, Chile y recientemente Costa Rica firmaron
tratados de libre comercio con ese país. De la misma manera la comunidad económica del
sudeste asiático (ASEAN) firmó acuerdos comerciales con China sin la participación de EEUU.
La firma del acuerdo comercial entre los principales países del pacífico de América Latina tiene
como contrapartida la expansión del Mercosur con nuevos miembros, confirmado ya Venezuela y
en tratativas con Ecuador y Bolivia. Más allá de estos hechos, y tal como lo expresamos en esta
columna, las coincidencias (políticas y económicas) en la actualidad latinoamericana, son
mayores que las diferencias. La búsqueda de una competencia entre estos dos sectores (AP y
Mercosur) en realidad trata de dividir el espectro y poner en duda los procesos de integración
económica y política de nuestra región.
Está demostrado que los modelos únicos de integración (es decir aquellos que plantean una
hegemonía de pensamiento y práctica) no han dado frutos. Este es el caso tanto para el Área de
Libre Comercio de las Américas (ALCA) como también, debemos decirlo, para la Alianza
Bolivariana de las Américas (ALBA) que se planteaba como alternativa. Los hechos dan prueba
de que ninguno de los modelos absolutos han logrado imponerse y que lo que mejor han hecho
los gobiernos actuales de la región es debatir y negociar en conjunto, aceptando los distintos
paradigmas y a la par ir profundizando la integración regional.
Las potencias, y en especial Estados Unidos, siempre van a estar presentes buscando dinamitar
los esfuerzos de integración autónomos. La promoción principalmente mediática de la Alianza
del Pacífico como el nuevo bloque que confronta con el Mercosur es parte de una estrategia de
división. Experiencias como la UNASUR y CELAC son una demostración de la capacidad de
nuestros países de articular (aún con sus contradicciones) un proyecto común en la región. El
camino es continuar profundizando ese proceso, aceptando visiones diversas y no buscando
remarcar las diferencias, que a la larga sólo servirá para perjudicar nuestra independencia.
Adolfo Aguirre es Secretario de Relaciones Internacionales de la CTA
Ofensiva imperialista em grande escala
– Não é só a Venezuela que está na mira, é o continente
por
Carlos
Aznárez [
*]
O ambiente latino-americano está rarefeito. Há sinais muito claros de que o Império decidiu impulsionar uma contra-ofensiva de grande porte. Tanto é que o próprio secretário de Estado estado-unidense John Kerry voltou a desenterrar um conceito que nos últimos anos parecia esquecido. Por ocasião do seu discurso perante o Comité de Assuntos Externos da Câmara de Representantes dos EUA afirmou com muita tranquilidade: "A América Latina é o nosso pátio traseiro (...) temos que nos aproximar de maneira vigorosa". Disso se trata, precisamente o que vem: do vigor com que se estão "a aproximar", tentando aproveitar de algo que talvez eles mesmos tenham provocado (tudo está para ver e investigar), como a morte do Comandante Hugo Chávez. A Venezuela continua a ser o prato especial do seu apetite voraz, mas enquanto isso vão gerando acontecimentos nos arredores que não podem nem devem passar desapercebidos. Aí está por exemplo a reconstituição de uma coligação que mira por outra vez na superfície uma espécie daquela ALCA derrotada em Mar del Plata pela dignidade latino-americana e caribenha no ano de 2005. Agora chamam-na Aliança do Pacífico e aos seus sócios fundadores (México, Chile, Colômbia e Peru) somar-se-á em breve a Costa Rica, enquanto fazem fila, ansiosos por entrar no barco uma longa dezena de países dentre os quais figuram alguns que até ontem diziam estar do lado correcto da rua, como o Uruguai e El Salvador. Estes últimos, entretanto, já haviam subscrito acordos económicos e militares bilaterais com Washington. A Aliança do Pacífico, sem dúvida, será o porta-aviões a partir do qual se tentará atacar duramente a ALBA , assim como a UNASUL e a CELAC . De facto, um dos seus filhos pródigos, o presidente chileno Sebastián Piñera, recentemente
mimado até fartar pelo seu protector Obama, acaba de desembarcar em El Salvador, para por em prática um acordo "estratégico" bilateral que será usado como modelo para operações vindouras. Por outro lado, está o avanço realizado pelo sionismo para institucionalizar o que já era uma prática constante. A embaixadora israelense na Argentina, Dorit Shavit, acaba de dar um passo decisivo em assuntos de ingerência em temas do continente ao firmar com o presidente direitista paraguaio Horacio Cartes um convénio de cooperação em assuntos de segurança, educação e gestão da água. Isto significa que a Mossad israelense institucionaliza desta maneira algo que já vinha realizando desde há tempos: assessorar as forças policiais e militares paraguaias "na sua luta contra a subversão". Para isso, em princípios do ano, peritos em segurança provenientes da Mossad, que trabalham para o presidente eleito, Cartes, já realizaram um percurso pelos departamentos de San Pedro, Concepción e Amambay. O objectivo dos especialistas foi "reconhecer e analisar" as zonas consideradas como as mais conflituosas do país em questões de segurança e onde operam as guerrilhas do Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). A tudo isto há que somar a recente disposição expressa pelo presidente colombiano Juan Manuel Santos de aproximar o seu país à NATO, um pormenor que sem dúvida surge da estrita recomendação formulada pelo vice-presidente estado-unidense Joe Biden na sua visita a Bogotá para "estreitar relações com um aliado fundamental da nossa política externa", segundo esclareceu. Santos não é um recém chegado à política e portanto não ignorava o efeito que o seu desejo de pertencer à família NATO ia gerar no continente. No imediato, ajudou a por entre parênteses as conversações em busca da paz, que prossegue em Havana com as FARC. Logicamente, ninguém em sã consciência pode sentir-se seguro nem imaginar cenas pacificadoras quando o maior exército do continente (e o mais agressivo) não só continua a receber milhões de dólares para aumentar seu equipamento como além disso faz coincidir esta iniciativa com querer aderir à organização internacional que mais pratica o terrorismo de estado no mundo. Venezuela assediada por dentro e por fora Neste quadro tão complexo e perigoso que apresenta a realidade continental, o processo revolucionário bolivariano continua a lutar por avançar, cumprindo com as políticas delineadas pelo Comandante Chávez e agora defendidas com toda dignidade e valentia por Nicolás Maduro. Contudo, não é mistério para ninguém que a luta contra aqueles que hostilizam a Revolução internamente se torna cada vez mais cruenta. Trata-se de um inimigo que, como exprimiu sua referência eleitoral, Humberto Capriles, está disposto a aplicar todas as fórmulas, inclusive as mais violentas (aí estão os 14 chavistas mortos dos últimos meses) para exprimir o seu não reconhecimento dos resultados eleitorais que consagraram a vitória bolivariana. Capriles, que em breve será recebido pelo papa Francisco (nada é casual nos tempos que vivemos) é o principal responsável pela criminosa ofensiva interna que não hesita em assassinar os seus próprios compatriotas. A esta oposição de traços tipicamente fascistas não lhe chega a sabotagem eléctrica, ou as manobras de desabastecimento, ambas já controladas pela decisão do governo. Na sua ânsia
de imaginar um cenário de maior conflituosidade, chegaram a apelar aos seus cúmplices internacionais a adquirir nos EUA, tal como denunciou o ex-vice-presidente José Vicente Rangel, 18 aviões de guerra que foram instalados numa base norte-americana na Colômbia. Este anúncio coincide com um novo apresamento [nos departamentos de] Táchira e Portuguesa de núcleos paramilitares com fins belicosos que haviam entrado na Venezuela vindos da Colômbia. Pelo seu lado, os apaniguados de Capriles continuam a visitar "amigos" e "aliados" têm em países onde geralmente governa a direita, procurando construir, com base em mentiras e exageros, a ideia de que o actual governo venezuelano é "ilegítimo" e perdeu apoio. O plano conspirativo choca, entretanto, com algo que a direita não pode modificar. Nicolás Maduro, como "filho de Chávez", tal como o reconhece seu povo, não perdeu nem um instante e, desde que assumiu o cargo, está a batalhar em todas as frentes. Governando de maneira directa com aqueles que nele votaram, mas tentando por sua vez estender sua influência sobre aqueles que não o fizeram. O processo de fortalecer as Comunas, estender e fortalecer as Missões, intensificar a formação e a instalação de milícias populares e na ocasião devida avançar decididamente nas metas fixadas no Programa de la Patria. Quanto à política externa (reforço da ALBA, criação do Banco do Sul, maior cuidado das relações na UNASUL), esta neutraliza por agora qualquer tentativa de desestabilização interna. Mais ainda se se leva em conta que os altos comandos militares estão firmemente alinhados com o seu novo comandante em chefe. Por isso, o maior dos perigos continua a estar nos arredores. Por um lado, nas incursões do Império (mais bases militares e "humanitárias", mais ajuda económica a países subordinados e cooptação de outros que se encontram indecisos) e, por outro lado, está a constante agressividade desse vizinho que até ontem exercia o cargo de ministro da Defesa de Álvaro Uribe e comandava as operações de extermínio contra guerrilheiros e camponeses colombianos. O mesmo homem que deu a ordem de invadir o Equador e bombardear impunemente o acampamento de Raúl Reyes, justamente quando estavam a avançar possibilidade de encontros como os que agora avançam em Havana. Esse mesmo personagem que agora, da sua omnipotência, quer uma mais uma mostra de "liderança" dentro da direita continental, aderindo àqueles que arrasaram Belgrado, o Iraque e a Líbia com as suas bombas de urânio empobrecido e agora brigam por entrar na Síria. Santos é amigo de Joe Biden e protector de Pedro Carmona, o frustrado golpista venezuelano.
[*] Editor do Resumen Latinoamericano
O original encontra-se em www.resumenlatinoamericano.org/...
Este artigo encontra-se em http://resistir.info/
Implicaciones geopolíticas del
ingreso de Colombia a la OTAN
Atilio Boron
ALAI AMLATINA, 04/06/2013.- El anuncio del presidente de Colombia Juan Manuel Santos de que “durante este mes de Junio suscribirá un acuerdo de cooperación con la Organización del Tratado Atlántico Norte (OTAN) para mostrar su disposición de ingresar a ella” ha causado una previsible conmoción en Nuestra América. Lo pronunció en un acto de ascensos a miembros de la Armada realizado en Bogotá, ocasión en la cual Santos señaló que Colombia tiene derecho a "pensar en grande", y que él va a buscar ser de los mejores "ya no de la región, sino del mundo entero". Continuó luego diciendo que "si logramos esa paz –refiriéndose a las conversaciones de paz que están en curso en Cuba, con el aval de los anfitriones, Noruega y Venezuela- nuestro Ejército está en la mejor posición para poder distinguirse también a nivel internacional. Ya lo estamos haciendo en muchos frentes", aseguró Santos. Y piensa hacerlo nada menos que asociándose a la OTAN, una organización sobre la cual pesan innumerables crímenes de todo tipo perpetrados en la propia Europa (recordar el bombardeo a la ex Yugoslavia), a Libia y ahora su colaboración con los terroristas que han tomado a Siria por asalto. Jacobo David Blinder, ensayista y periodista brasileño, fue uno de los primeros en alarmarse ante esta decisión del colombiano. Hasta ahora el único país de América Latina “aliado extra OTAN” era la Argentina, que obtuvo ese deshonroso status durante los nefastos años de Menem, y más específicamente en 1998, luego de participar en la Primera Guerra del Golfo (1991-1992) y aceptar todas las imposiciones impuestas por Washington en muchas áreas de la política pública, como por ejemplo desmantelar el proyecto del misil Cóndor y congelar el programa nuclear que durante décadas venía desarrollándose en la Argentina. Dos gravísimos atentados que suman poco más de un centenar de muertos –a la Embajada de Israel y a la AMIA- fue el saldo que dejó en la Argentina la represalia por haberse sumado a la organización terrorista noratlántica. El status de “aliado extra OTAN” fue creado en 1989 por el Congreso de los Estados Unidos –no por la organización- como un mecanismo para reforzar los lazos militares con países situados fuera del área del Atlántico Norte pero que podrían ser de alguna ayuda en las numerosas guerras y procesos de desestabilización política que Estados Unidos despliega en los más apartados rincones del planeta. Australia, Egipto, Israel, Japón y Corea del Sur fueron los primeros en ingresar, y poco después lo hizo la Argentina, y ahora aspira a lograrlo Colombia. El sentido de esta iniciativa del Congreso norteamericano salta a la vista: se trata de legitimar y robustecer sus incesantes aventuras militares -inevitables durante los próximos treinta años, si leemos los documentos del Pentágono sobre futuros escenarios internacionales- con un aura de “consenso multilateral” que en realidad no tienen. Esta incorporación de los aliados extra-regionales de la OTAN, que está siendo promovida en los demás continentes, refleja la exigencia impuesta por la transformación de las fuerzas armadas de los Estados Unidos en su tránsito desde un ejército preparado para librar guerras en territorios acotados a una legión imperial que con sus bases militares de distinto tipo (más de mil en todo el planeta), sus fuerzas regulares, sus unidades de “despliegue rápido” y el creciente ejército de “contratistas” (vulgo: mercenarios) quiere estar preparada para intervenir en pocas horas para defender los intereses estadounidenses en cualquier punto caliente del planeta. Con su decisión Santos se pone al servicio de tan funesto proyecto. A diferencia de la Argentina (que por supuesto debería renunciar sin más demora a su status en una organización criminal como la OTAN), el caso colombiano es muy especial, porque desde hace décadas recibe, en el marco del Plan Colombia, un muy importante apoyo económico y militar de Estados Unidos –de lejos el mayor de los países del área- y sólo superado por los desembolsos realizados en favor de Israel, Egipto, Irak y Corea del Sur y algún que otro aliado estratégico de Washington. Cuando Santos declara su vocación de proyectarse sobre el “mundo
entero” lo que esto significa es su disposición para convertirse en cómplice de Washington, para movilizar sus bien pertrechadas fuerzas más allá del territorio colombiano y para intervenir en los países que el imperio procura desestabilizar, en primer lugar Venezuela. Es poco probable que su anuncio signifique que está dispuesto a enviar tropas a Afganistán u a otros teatros de guerra. La pretensión de la derecha colombiana, en el poder desde siempre, ha sido convertirse, especialmente a partir de la presidencia del narcopolítico Álvaro Uribe Vélez, en la “Israel de América Latina” erigiéndose, con el respaldo de la OTAN, en el gendarme regional del área para agredir a vecinos como Venezuela, Ecuador y otros -¿Bolivia, Nicaragua, Cuba?- que tengan la osadía de oponerse a los designios imperiales. Eso y no otra cosa es lo que significa su declaración. Pero hay algo más: con su decisión Santos también pone irresponsablemente en entredicho la marcha de las conversaciones de paz con las FARC en La Habana (uno de cuyos avales es precisamente Venezuela), asestando un duro golpe a las expectativas de colombianas y colombianos que desde hace décadas quieren poner fin al conflicto armado que tan indecibles sufrimientos deparó para su pueblo. ¿Cómo podrían confiar los guerrilleros colombianos en un gobierno que no cesa de proclamar su vocación injerencista y militarista, ahora potenciada por su pretendida alianza con una organización de tintes tan delictivos como la OTAN? Por otra parte, esta decisión no puede sino debilitar –premeditadamente, por supuesto- los procesos de integración y unificación supranacional en curso en América Latina y el Caribe. La tesis de los “caballos de Troya” del imperio, que repetidamente hemos planteado en nuestros escritos sobre el tema, asumen renovada actualidad con la decisión del mandatario colombiano. ¿Qué hará ahora la UNASUR y cómo podrá actuar el Consejo de Defensa Suramericano cuyo mandato conferido por los jefes y jefas de estado de nuestros países ha sido consolidar a nuestra región como una zona de paz, como un área libre de la presencia de armas nucleares o de destrucción masiva, como una contribución a la paz mundial para lo cual se requiere construir una política de defensa común y fortalecer la cooperación regional en ese campo? Es indiscutible que detrás de esta decisión del presidente colombiano se encuentra la mano de Washington, que paulatinamente convirtió a la OTAN en una organización delictiva de alcance mundial, rebalsando con creces el perímetro del Atlántico Norte que era su límite original. También se advertía la mano de Obama al impulsar, poco después de lanzada la Alianza del Pacífico (tentativa de resucitar el ALCA con otro nombre), la provocadora recepción por parte de Santos del líder golpista venezolano Henrique Capriles. Lo mismo puede percibirse ahora, con todas las implicaciones geopolíticas que tiene esa iniciativa al tensar la cuerda de las relaciones colombo-venezolanas; amenazar a sus vecinos y precipitar el aumento del gasto militar entre sus vecinos; debilitar a la UNASUR y la CELAC; alinearse con Gran Bretaña en el diferendo con la Argentina por Las Malvinas, dado que esa es la postura oficial de la OTAN. Y quien menciona esta organización no puede sino recordar que, como dicen los especialistas en el tema, el nervio y músculo de la OTAN los aporta Estados Unidos y no los otros estados miembros, reducidos al triste papel de simples peones del mandamás imperial. En suma: una nueva vuelta de tuerca de la contraofensiva imperialista en Nuestra América, que sólo podrá ser rechazada por la masiva movilización de los pueblos y la enérgica respuesta de los gobiernos genuinamente democráticos de la región. Esa será una de las pruebas de fuego que tendrán que sobrellevar en las próximas semanas. - Dr. Atilio Boron, director del Programa Latinoamericano de Educación a Distancia en Ciencias Sociales (PLED), Buenos Aires, Argentina www.atilioboron.com.ar
Facebook: http://www.facebook.com/profile.php?id=596730002 Twitter: http://twitter.com/atilioboron URL de este artículo: http://alainet.org/active/64478
Mercosur, Unasur y la indecisión del Brasil
Atilio Boron
ALAI AMLATINA, 11/07/2013.- Las últimas semanas fueron pródigas en acontecimientos
reveladores de los alcances de la contraofensiva desplegada por Washington a los efectos de
dinamitar los diversos procesos integracionistas en marcha en Latinoamérica. Hoy por hoy el
Mercosur y la Unasur son los blancos más obvios, pero la CELAC está también en la mira y en
cuanto demuestre una mayor gravitación en los asuntos del hemisferio será también ella objeto
de los más encarnizados ataques. Una de las armas más recientemente pergeñadas por la Casa
Blanca ha sido la Alianza del Pacífico, engendro típico de la superpotencia para movilizar a sus
peones al sur del Río Bravo y utilizarlos como eficaces “caballos de Troya” para cumplir con los
designios del imperio. Otra alianza, la “mal nacida” según el insigne historiador y periodista
argentino Gregorio Selser, la inventó a comienzos de los sesentas del siglo pasado John F.
Kennedy para destruir a la Revolución Cubana. Aquella, la Alianza para el Progreso, que en su
momento dio pábulo a algunos pesimistas pronósticos entre las fuerzas anti-imperialistas,
fracasó estrepitosamente. La actual no parece destinada a correr mejor suerte. Pero derrotarla
exigirá, al igual que ocurriera con su predecesora, de toda la firmeza e inteligencia de los
movimientos sociales, las fuerzas políticas y los gobiernos opuestos –en diversos grados, como
es evidente al observar el panorama regional- al imperialismo. Flaquezas y debilidades
políticas y organizativas unidas a la credulidad ante las promesas de la Casa Blanca, o las
absurdas ilusiones provocadas por los cantos de sirena de Washington, señalarían el
camino de una fenomenal derrota para los pueblos de Nuestra América.
En este sentido resulta más que preocupante la crónica indecisión de Brasilia en relación al
papel que debe jugar en los proyectos integracionistas en curso en Nuestra América. Y esto por
una razón bien fácil de comprender. Henry Kissinger, que a su condición de connotado criminal
de guerra une la de ser un fino analista de la escena internacional, lo puso de manifiesto cuando,
satisfecho con el realineamiento de la dictadura militar brasileña luego del derrocamiento de
Joao Goulart, acuñó una frase que hizo historia. Sentenció que “hacia donde se incline Brasil se
inclinará América Latina”. Esto ya no es tan cierto hoy, porque la marejada bolivariana ha
cambiado el mapa sociopolítico regional para bien, pero aun así la gravitación de Brasil en el
plano hemisférico sigue siendo muy importante. Si su gobierno impulsara con resolución los
diversos procesos integracionistas (Mercosur, Unasur, CELAC) otra sería su historia. Pero
Washington ha venido trabajando desde hace tiempo sobre la dirigencia política,
diplomática y militar del Brasil para que modere su intervención en esos procesos, y se ha
anotado algunos éxitos considerables. Por ejemplo, explotando la ingenua credulidad de
Itamaraty cuando desde Estados Unidos se les dice que va a garantizar para Brasil un asiento
permanente en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, mientras la India y Pakistán,
(dos potencias atómicas) o Indonesia (la mayor nación musulmana del mundo) y Egipto, Nigeria
(el país más poblado de África) y Japón y Alemania, sin ir más lejos, tendrían que conformarse
con mantener su status actual de transitorios miembros de ese organismo. Pero otra hipótesis
dice que tal vez no se trate sólo de ingenuidad, porque la opción de asociarse íntimamente a
Washington seduce a muchos en Brasilia. Prueba de ello es que pocos días después de asumir
su cargo, el actual canciller de Dilma Rousseff, Antonio Patriota, otorgó un extenso reportaje a
Paulo Cesar Pereira, de la revista Veja. La primera pregunta que le formulara el periodista fue la
siguiente: “En todos sus años como diplomático profesional, ¿qué imagen se formó de Estados
Unidos?” La respuesta fue asombrosa, sobre todo por provenir de un hombre que se supone
debe defender el interés nacional brasileño y, a través de las instituciones como el Mercosur, la
Unasur y la CELAC, participar activamente en promover la autodeterminación de los países de
los países del área: “Es difícil hablar de manera objetiva porque tengo una involucración
emocional (¡sic!) con los Estados Unidos a través de mi familia, de mi mujer y de su
familia. Existen aspectos de la sociedad americana que admiro mucho.”(1)
Lo razonable hubiera sido que se le pidiera de inmediato la renuncia por “incompatibilidad
emocional” para el ejercicio de su cargo, para decirlo con delicadeza, cosa que no ocurrió. ¿Por
qué? Porque es obvio que coexisten en el gobierno brasileño dos tendencias: una,
moderadamente latinoamericanista, que prosperó como nunca antes bajo el gobierno de
Lula; y otra que cree que el esplendor futuro del Brasil pasa por una íntima asociación con
Estados Unidos y, en parte, con Europa, y que recomienda olvidarse de sus revoltosos
vecinos. Esta corriente todavía no llega a ser hegemónica al interior del Palacio del Planalto
pero sin duda que hoy día
encuentra oídos mucho más receptivos que antes.
Este cambio en la relación de fuerzas entre ambas tendencias salió a luz en numerosas
ocasiones en los últimos días. Pese a ser uno de los países espiados por Estados Unidos, y a
que Brasilia dijera que el hecho era “extremadamente grave” tras cartón se hizo público que
no se le asignaría asilo político a Edward Snowden, quien denunció la gravísima
ofensa inferida al gigante sudamericano. Otro: la muy lenta reacción de la presidenta brasileña
ante el secuestro del que fuera víctima Evo Morales la semana pasada: si los presidentes de
Cuba, Ecuador, Venezuela y Argentina (amén del Secretario General de la Unasur, Alí
Rodríguez) se tardaron apenas unos pocos minutos luego de conocida la noticia para expresar
su repudio a lo ocurrido y su solidaridad con el presidente boliviano, Rousseff necesitó casi
quince horas para hacerlo. Después, inclusive, de las duras declaraciones del mismísimo
Secretario General de la OEA, cuya condena se conoció casi en coincidencia con la de los
primeros. Conflictos y tironeos al interior del gobierno que aduciendo un inverosímil pretexto (las
masivas protestas populares de los días anteriores, ya por entonces apagadas) impidieron que la
mandataria brasileña no asistiera al encuentro de presidentes que tuvo lugar en Cochabamba,
una ciudad localizada a escasas dos horas y media de vuelo desde Brasilia, debilitando el
impacto global de esa reunión y, en el plano objetivo, coordinándose con la estrategia de los
gobiernos de la Alianza del Pacífico que, como lo sugiriera el presidente Rafael Correa,
bloquearon lo que debió haber sido una cumbre extraordinaria de presidentes de la Unasur.
Para una América Latina emancipada de los grilletes neocoloniales es decisivo contar con Brasil.
Pero ello no será posible sino a cuentagotas mientras no se resuelva a favor de América Latina
el conflicto entre aquellos dos proyectos en pugna. Esto no sólo convierte a Brasil en un actor
vacilante en iniciativas como el Mercosur o la Unasur, lo que incide negativamente sobre su
gravitación internacional, sino que lo conduce a una peligrosa parálisis en cruciales cuestiones
de orden doméstico. Por ejemplo, a no poder resolver desde el 2009 dónde adquirir los 36
aviones caza que necesita para controlar su inmenso territorio, y muy especialmente la gran
cuenca amazónica y sub-amazónica, a pesar del riesgo que implica dilatar la adquisición de las
aeronaves aptas para tan delicada tarea. Una parte del alto mando y la burocracia política y
diplomática se inclina por un re-equipamiento con aviones estadounidenses, mientras que otra
propone adquirirlos en Suecia, Francia o Rusia. Ni siquiera Lula pudo zanjar la discusión. Esta
absurda parálisis se destrabaría fácilmente si los involucrados en la toma de decisión se
formularan una simple pregunta: ¿cuántas bases militares tienen en la región cada uno de los
países que nos ofertan sus aviones para vigilar nuestro territorio? Si lo hicieran, la respuesta
sería la siguiente: Rusia y Suecia no tienen ni una; Francia tiene una base aeroespacial en la
Guayana francesa, administrada conjuntamente con la OTAN y con presencia de personal militar
estadounidense; y Estados Unidos tiene, en cambio, 76 bases militares en la región, un puñado
de ellas alquiladas a -o co-administradas con- terceros países como el Reino Unido, Francia y
Holanda. Algún burócrata de Itamaraty o algún militar brasileño entrenado en West Point podría
aducir que esas se encuentran en países lejanos, que están en el Caribe y que tienen como
misión vigilar a la Venezuela bolivariana. Pero se equivocan: la dura realidad es que mientras
ésta es acechada por 13 bases militares norteamericanas instaladas en sus países
limítrofes, Brasil se encuentra literalmente rodeado por 23, que se convierten en 25 si sumamos
las dos bases británicas de ultramar con que cuenta Estados Unidos –vía la OTAN- en el
Atlántico ecuatorial y meridional, en las Islas Ascensión y Malvinas respectivamente. De pura
casualidad los grandes yacimientos submarinos de petróleo de Brasil en encuentran
aproximadamente a mitad de camino entre ambas instalaciones militares.(2)
Ante esta inapelable evidencia, ¿cómo es posible que aún se esté dudando a quién no comprarle
los aviones que el Brasil necesita? La única hipótesis realista de conflicto que tiene ese país (y
toda América Latina, digámoslo de paso) es con Estados Unidos. En esta parte del mundo hay
algunos que pronostican que el enfrentamiento será con China, ávida por acceder a los
inmensos recursos naturales de la región. Pero mientras China invade la región con un
sinnúmero de supermercados, Washington lo hace con toda la fuerza de su fenomenal músculo
militar, pero rodeando principalmente a Brasil. Y, por si hiciera falta George W. Bush reactivó
también la Cuarta Flota (¡en otra de esas grandes “casualidades” de la historia!) justo pocas
semanas después que el presidente Lula anunciara el descubrimiento del gran yacimiento de
petróleo en el litoral paulista. Pese a ello persiste la lamentable indefinición de Brasilia. ¿O es
que ignoran sus dirigentes las enseñanzas de la historia? ¿No sabían que John Quincy Adams,
el sexto presidente del país del Norte, dijo que “Estados Unidos no tiene amistades
permanentes, sino intereses permanentes”? ¿Desconocen los funcionarios a cargo de estos
temas que ni bien el presidente Hugo Chávez comenzó a tener sus primeros diferendos con
Washington, la Casa Blanca dispuso el embargo a todo envío de partes, repuestos y renovados
sistemas de aeronavegación y combate para la flota de los F-16 que tenía Venezuela, misma
que por eso mismo quedó inutilizada y tuvo que ser reemplazada? No hace falta demasiada
inteligencia para imaginar lo que podría ocurrir en el para nada improbable caso de que se
produjera un serio diferendo entre Brasil y Estados Unidos por la disputa del acceso a, por
ejemplo, algunos minerales estratégicos que se encuentran en la Amazonía; o al petróleo del
“pre-sal”; o, el escenario del “caso peor”, si Brasilia decidiera no acompañar a Washington en
una aventura militar encaminada a producir un “cambio de régimen” en algún país de América
Latina y el Caribe, replicando el modelo utilizado en Libia o el que se está empleando a sangre y
fuego en Siria. En ese caso, la represalia que merecería el “aliado desleal”, en ese hipotético
caso el Brasil, que renuncia a cumplir con sus compromisos sería la misma que se le aplicara a
Chávez, y Brasil quedaría indefenso. Ojalá que estas duras realidades pudieran comenzar a
discutirse públicamente y que esa gran nación sudamericana pueda comenzar a discernir con
claridad donde están sus amigos y quiénes son sus enemigos, por más que hoy se disfracen con
una piel de oveja. Esto podría poner término a sus crónicas vacilaciones. Ojalá que la reunión de
hoy del Mercosur en Montevideo y la próxima de la Unasur puedan convertirse en las ocasiones
propicias para esta reorientación de la política exterior del Brasil.
- Dr. Atilio Boron, director del Programa Latinoamericano de Educación a Distancia en Ciencias
Sociales (PLED), Buenos Aires, Argentina. Premio Libertador al Pensamiento Crítico
2013. www.atilioboron.com.ar Twitter: http://twitter.com/atilioboron
Facebook: http://www.facebook.com/profile.php?id=596730002
Banco del Sur se consolida como instrumento financiero
para integración latinoamericana
AVN / Agencia Venezuelana de Noticias 13 de junio 2013 El Banco del Sur es la institución dirigida a impulsar la integración de los países latinoamericanos y la creación de proyectos conjuntos para el desarrollo de los pueblos con respeto a la soberanía y con total independencia de los grandes centros financieros mundiales. Esta es una apreciación en que coincidían las autoridades financieras de Argentina, Bolivia, Brasil, Ecuador, Uruguay y Venezuela, quienes se encontraron en Caracas en la primera reunión de ministros de Finanzas y Hacienda de la naciente entidad, cuyo convenio constitutivo entró en vigencia el 3 de abril de 2012. Durante este encuentro, que se llevó a cabo en las instalaciones del Banco Central de Venezuela, los equipos técnicos de las distintas naciones adelantaron aspectos organizativos y operativos y se estima que en al menos 15 días se reúna el consejo de administración. Una de las principales funciones del Banco del Sur es el financiamiento de proyectos de desarrollo en áreas estratégicas para las naciones miembros, en particular en sectores claves de la economía y en materia social dirigidos a disminuir la pobreza y exclusión social. También prevé la conformación de fondos especiales de solidaridad social y para la atención de
emergencias producto de desastres naturales. Recursos para financiar proyectos conjuntos de integración El ministro para las Finanzas venezolano, Nelson Merentes, explicó que el Banco del Sur financiará la creación de proyectos comunes de desarrollo e integración de nuestras naciones. “Acabamos de concluir la primera reunión de ministros de Finanzas y Hacienda para poner en marcha rápidamente el Banco del Sur. Se habló del capital, los estados tienen los activos correspondientes, el consejo administrativo está instalado y los presidentes (de las respectivas naciones miembros) se comunicarán para decidir el presidente del Banco”, explicó. Consideró que esta institución financiera nace como un instrumento novedoso que se irá adaptando a la realidad de esta nueva visión política que se tiene en América del Sur. “Es la conclusión de un trabajo técnico que se viene realizando desde los últimos días en Caracas y hoy avanzamos bastante, dentro de 15 días máximo se reúne el gabinete administrativo y pronto estaremos dando el primer crédito”, refirió. Explicó para julio próximo se tiene prevista otra reunión del consejo de ministros del Banco del Sur, aunque antes habrá otra reunión del consejo administrativo para adelantar los aportes iniciales de capital, que se llevará a cabo por fases. “Recuerden que esto es por fases. En la primera cada país va a poner un porcentaje (del aporte que debe dar al banco). A nosotros nos corresponden 80 millones de dólares, para los primeros días, después se va ir capitalizando”, indicó. En el encuentro estuvieron presentes el canciller venezolano, Elías Jaua, el ministro de Economía y Finanzas Públicas de Argentina, Hernán Lorenzino; el ministro de Economía de Bolivia, Luis Arce; el secretario de Asuntos Internacionales del Ministerio de Hacienda brasileño, Carlos Marcio Cozendey; el ministro de Relaciones Exteriores de Ecuador, Ricardo Patiño; el ministro coordinador de la Política Económica, Patricio Rivera, y el máximo responsable en el área de Finanzas ecuatoriano, el ministro Fausto Herrera.
Brasil, EUA e o "hemisfério ocidental"
Valor 29 janeiro 2014 ,
Por José Luís Fiori
As terras situadas ao sul do Rio Grande constituem um mundo diferente do
Canadá e dos Estados Unidos. E é uma coisa desafortunada que as partes de fala inglesa e latina do continente tenham que ser chamadas igualmente de América, evocando similitudes entre as duas que de fato não existem". N.
Spykman, "America's Strategy in World Politics, Harcourt, Brace abd Company, New York, 1942, p: 46
Tudo indica que os Estados Unidos serão o principal contraponto da política externa brasileira, dentro do Hemisfério Ocidental, durante o século XXI. E quase ninguém duvida, também, que os EUA seguirão sendo por muito tempo
a principal potência militar e uma das principais economias do mundo. Por isto
é fundamental compreender as configurações geopolíticas da região e a
estratégia que orienta a política hemisférica americana deste início de século.
Ao norte do continente, o poder americano foi, é e seguirá sendo incontrastável, garantindo-lhe fronteiras continentais absolutamente seguras.
Além disto, a assimetria de poder dentro da América do Norte é de tal ordem que o Canadá e o México tendem a convergir cada vez mais, atraídos pela força gravitacional do poder econômico e militar dos EUA. O que não significa,
entretanto, que o Canadá e o México ocupem a mesma posição junto aos EUA e dentro do tabuleiro geopolítico e econômico regional, apesar dos três países participarem do "Tratado Norte-Americano de Livre Comercio" (Nafta) desde
1993.
O Canadá ocupa uma posição única, como ex-colônia e ex-domínio britânico,
que, depois da sua independência e da Segunda Guerra Mundial, transferiu-se para a órbita de influência direta dos EUA, transformando-se em sócio comercial, aliado estratégico e membro do sistema de defesa e informação
militar dos povos de "língua inglesa", comandado pelos EUA, e composto pela Inglaterra, Austrália e a Nova Zelândia. Neste contexto, o México ocupa apenas a posição de enclave militar dos EUA, uma espécie de "primo pobre",
de "fala latina", ao lado das potências anglo-saxônicas.
Mais do que isto, o México é hoje um país dividido e conflagrado por uma verdadeira guerra civil que escapa cada vez mais ao controle do seu governo
central, mesmo depois do acordo de colaboração militar assinado com os EUA em 2010. E mesmo com relação ao Nafta, a economia mexicana se beneficiou em alguns poucos setores dominados pelo capital americano, como
automobilística e eletrônica, mas ao mesmo tempo, nestes últimos vinte anos, o México foi o único dos grandes países latino-americanos em que a pobreza cresceu, atingindo hoje, 51,3% da sua população. Hoje a economia mexicana
é inseparável da americana e a política externa do país tem escassíssimos graus de liberdade, atuando quase sempre como ponta de lança da política econômica internacional dos EUA, como no caso explícito da "Aliança do
Pacífico".
Do ponto de vista estritamente geográfico, a América do Norte inclui o istmo centro-americano, que Nicholas Spykman coloca ao lado dos países
caribenhos, e da Colômbia e Venezuela, dentro de uma mesma zona de influência americana, "onde a supremacia dos EUA não pode ser questionada. Para todos os efeitos trata-se um mar fechado cujas chaves pertencem aos
EUA o que significa que ficarão sempre numa posição de absoluta dependência dos EUA" (N.S, p: 60). O que explica as 15 bases militares dos EUA, existentes na América Central e no Caribe. Foi uma região central na
2ªGuerra Fria de Ronald Reagan e será muito difícil que se altere a posição americana nas próximas décadas, muito além da das "dissidências" cubana e venezuelana.
Por último, a política externa americana diferencia claramente os países situados ao sul da Colômbia e da Venezuela, onde seu principal objetivo estratégico foi sempre impedir que surgisse um polo alternativo de poder no
Cone Sul do continente, capaz de questionar a sua hegemonia hemisférica. Com relação a estes países, os EUA sempre utilizaram a mesma linguagem, com duas tônicas complementares: a dos acordos militares bilaterais e a das
zonas de livre comércio.
Os acordos militares começaram a ser assinados no fim do século XIX e a
primeira proposta de uma zona pan-americana de livre comércio foi apresentada pelo presidente Grover Cleveland, em 1887, um século antes da Alca, proposta em 1994 e rejeitada em 2005, pelos principais países sul-
americanos. Não existe uma relação mecânica entre os fatos, mas chama atenção que pouco depois desta rejeição os EUA tenham reativado sua IV Frota Naval, com objetivo de proteger seus interesses no Atlântico Sul. A este
propósito cabe lembrar o diagnóstico e a proposta de Nicholas Spykman (1893-1943), o teórico geopolítico que exerceu maior influência sobre a política externa dos EUA no século XX: "fora da nossa zona imediata de
supremacia americana, os grandes estados da América do Sul (Argentina, Brasil e Chile) podem tentar contrabalançar nosso poder através de uma ação
comum[...] e uma ameaça à hegemonia americana nesta região do hemisfério (a região do ABC) terá que ser respondida por meio da guerra" (N.S p: 62 e 64). Estes são os termos da equação, e a posição americana foi sempre muito
clara. O mesmo não se pode dizer da política externa brasileira.
José Luís Fiori, professor titular de economia política internacional da UFRJ, é autor do livro "O Poder Global", da Editora Boitempo, e
coordenador do grupo de pesquisa do CNPQ/UFRJ "O Poder Global e a Geopolítica do Capitalismo". Escreve mensalmente às quartas-feiras.
Washington, finalmente, rende-se à Unasul
http://independenciasulamericana.com.br/2014/05/wash
ington-finalmente-rende-se-a-unasul/
Conselho Editorial Sul-Americano em 08/05/2014
Demorou, mas, finalmente, o governo americano caiu na real. A Casa Branca não conseguirá mais nada de positivo para os seus interesses, na América
Latina, se não der total atenção à União das Nações Sul-Americanas, a Unasul. O Secretário de Estado, John Kerry pediu a inrtermediação da Unasul, para abrir diálogo entre Estados Unidos e Venezuela. Kerry ainda adota aquela
linguagem superior, de querer ditar, por cima, as diretrizes, destacando que está empenhado em ajudar o governo Maduro a superar os graves problemas econômicos venezuelanos, afetados por crise cambial e inflação alta. Porém, o
que se vê por trás das palavras do representante do governo Obama é o reconhecimento de que não será possível qualquer diálogo entre Estados
Unidos e Venezuela, se não forem obedecidas as regras de não intervenção tradicional americana nos assuntos sul-americanos e latino-americanos. Essa
prática vem desde a segunda metade do século 19 e permaneceu durante todo o século 21, intensificando, sobremaneira, no pós segunda guerra mundial.
Demorou, mas, finalmente, o governo americano caiu na real. A Casa Branca não conseguirá mais nada de positivo para os seus interesses, na América
Latina, se não der total atenção à União das Nações Sul-Americanas, a Unasul.
O poder americano sobre a Organização dos Estados Americanos(OEA) virou apenas ficção, para manter o jogo de antigamente, baseado na interferência,
no desrespeito à soberania dos povos latino-americanos, visto que os interesses dos Estados Unidos sempre prevaleceram, dobrando os governos dependentes do jogo da Casa Branca. A situação mudou inteiramente, depois da emergência da Unasul, legítima porta voz dos pontos de vista da América
do Sul e de toda a América Latina. Tornou-se, por isso, indispensável na condução das controvérsias políticas internas e a real condutora da política de
integração continental. Essa direção, evidentemente, bate de frente com a política americana de promover, como sempre aconteceu, a desintegração,
como forma de dominação. O Secretário de Estado, John Kerry, agora, pede a intermediação da Unasul, para abrir diálogo entre oposição e situação na
Venezuela, governada pelo nacionalista Nicolas Maduro. Kerry partiu para essa manobra diplomática porque fracassou completamente a política americana de
tentar destruir o nacionalismo sul-americano, expresso mais fortemente na Venezuela, nos últimos 15 anos, depois que Hugo Chavez alcançou o poder,
deslocando as forças obedientes a Washington. Durante esse período, a Casa Branca utilizou de intensas escaramuças para derrubar o governo chavista, que
feriu interesses vitais dos Estados Unidos, ligados ao petróleo, dentro da Venezuela. Tornou-se difícil, senão impossível, à Casa Branca, manter o jogo de antigamente. Por isso, partiu para os golpes. Mas, a política nacionalista chavista colocou o dinheiro do petróleo, para fortalecer as causas sociais, o fortalecimento do mercado interno, favorecido pelo melhor poder de compra dos salários etc. Conquistou, dessa maneira, o apoio popular. A melhoria do
poder aquisitivo da população, as políticas sociais, a aposta decisiva na educação e na cultura etc, criaram mundo novo na Venezuela, reagente àquele
vigente anteriormente sob as forças políticas obedientes a Washington. Para tentar reverter essa desvantagem, os golpes políticos foram instalados pela
Casa Branca na pátria chavista, que enfrentou 19 eleições democráticas sob Constituição bolivariana, das quais 17 foram vencidas pelo governo Chavez.
Incontestável. Emergiu nova psicologia social, nova consciência política, ancorada nos direitos de cidadania, que despertaram a população para as lutas
sociais e políticas em defesa da melhor distribuição da renda nacional, centrada no poder do petróleo. A Casa Branca, em 2002, tentou dar um golpe
de Estado em Chavez, mas o povo reagiu, e o presidente, que fora sequestrado, teve que ser restituído, sob pena de explodir guerra civil no País.
As barbas de molho da Casa Branca ficaram abaladas. Embora o império mantivesse inconformado, até hoje, com tal situação, não descansou, e insistiu
em manobrar a seu favor. Se lascou, apostando numa oposição que se desmoralizou, quando, em 2005, diante do avassalador apoio popular a
Chavez, fugiu das urnas. Resultado: Chavez fez maioria absoluta na Assembleia Nacional. A oposição, com apoio do poder midiático conservador,
acusou Chavez de absolutista, de promover democracia falsa, dirigida pelo Estado centralizado etc, quando, na verdade, o que se revelou, como verdade absoluta, foi que a oposição tentou um golpe, ao fugir das eleições, pensando
que o povo acompanharia ela, não indo às urnas, seguindo o protesto dos oposicionistas de fugirem da prática democrática representativa, reforçada por uma defesa constitucional das conquistas participativas. Dançou bonito. Como efeito dessa mancada política monumental da oposição, Chavez aprofundou o discurso socialista em meio a uma Assembleia totalmente governista, não por
culpa do governo, de Chavez, mas por erro de cálculo político da própria oposição. O erro histórico levou os oposicionistas ao descrédito. Tentaram
superá-lo, não fazendo um mea culpa diante da população, mas intensificando práticas golpistas, com apoio dos Estados Unidos. Nicolas Maduro, como
sucessor de Chavez, segue o nacionalismo econômico. É verdade, no entanto, que os problemas econômicos estruturais da Venezuela estão presentes e com
grande carga de destruição, expressos nos desajustes econômicos que o processo de avanço social traz em si por conta do aumento da demanda dos
mais pobres que antes não tinham acesso às rendas capazes de elevar o poder de compra disponível para elevar o consumo, produzindo,
consequentemente, inflação em um país cuja base industrial, praticamente, inexiste. Historicamente, a Venezuela, rica em petróleo, importou tudo para
sustentar a demanda interna. Nem Chavez, com todo seu esforço nacionalista, conseguiu superar, inteiramente, os gargalos. Cuidou do consumo popular,
distribuindo a riqueza produzida pelo petróleo, mas as bases produtivas, expressas na existência de uma burguesia comercial, ancorada na burguesia financeira internacional, especulativa, não se efetivaram em forças industriais,
capazes de mudar a composição da estrutura produtiva e ocupacional, de modo a completar a infraestrutura nacional, algo, por exemplo, do qual o Brasil,
também, ainda padece. Maduro tenta seguir adiante com a política chavista, que dificilmente sofrerá retrocesso em suas bases ancoradas no apoio popular, mas terá que fazer uma composição política com a burguesia comercial forte,
para apoiar o processo de industrialização, com apoio estatal. Será possíve? É aí que entram os conflitos, porque a oposição conservadora e reacionária joga contra a estratégia nacionalista, tentando inviabilizá-la, no momento em que os problemas conjunturais, como a inflação, mostram-se resistentes às terapias
heterodoxas. A oposição tentou jogar contra Maduro para derrubá-lo. Recorreu ao golpismo, com a ajuda da Casa Branca. Não conseguiu, porque a herança distributiva da renda deixada por Chavez se mantém forte. A oposição, ao que
tudo indica, não desistiu de dar golpes, tentando o apoio americano, mas a Casa Branca, mais realista que os conservadores venezuelanos, está
chegando à conclusão de que somente se desgastará perante os venezuelanos e aos sul-americanos, em geral, se insistir nas práticas golpistas.
Não é à toa que está, aparentemente, mais humilde, recorrendo a quem não estava dando muito valor, pelo menos até agora, ou seja, à União das Nações Sul-Americanas. Como a Unasul defende o discurso da integração e a prática
da Casa Branca promove a desintegração como arma de dominação, o impasse somente será superado, se a oposição venezuelana, diante do
governo Maduro, reconhecer que não chegará ao poder na marra, provocando agitação com dinheiro de Washington, contando com a ajuda dos mercenários,
arrebanhados pela CIA, como os que promoveram o banho de sangue em Odessa, na Ucrânia. O papel da Unasul ganha maioridade. O contrapolo desse novo poder sul-americano, ao qual John Kerry recorre, tem, naturalmente, de ser a defesa do instrumento de integração sul-americano, que é o Mercosul,
bombardeado pelos americanos, nos últimos anos, com a contribuição de forças internas sul-americanas reacionárias, como a dos tucanos, no Brasil. A
América do Sul, governada pelos nacionalistas, arranca, portanto, nova postura dos Estados Unidos, de recorrem à Unasul, uma novidade espetacular, uma vantagem comparativa que deve ser complementada, naturalmente, por uma agenda sul-americana abrangente do ponto de vista da integração econômica
continental. Eis um grande momento histórico, posto pela crise do capitalismo americano, implodido pela bancarrota financeira de 2007-2008, responsável por abalar os alicerces do unilateralismo de Washington. A Casa Branca vai
mudando de posição, apesar de manter a pose orgulhosa, egoísta, prepotente. Se não fizer isso, irá dando espaço para a penetração, na América do Sul, da
força dos BRICS, encabeçada, nesse momento, pela China e pela Rússia, que se unem para uma formação de uma nova conjuntura internacional, com cara
de multilateralismo, abalando, claro, o poder do dólar.
V - BRASIL X USA
Brasil - EUA, muy amigos...
José Carlos Ruy
http://www.vermelho.org.br/noticia.php?id_secao=1&id_noticia=149910 - 20 DE MARÇO DE 2011 - 8H00
As relações entre o Brasil e os EUA começaram antes mesmo da Independência, e sempre
foram marcadas pelo esforço norte-americano de impor seus interesses. Ao iniciar por Brasília
seu giro sul-americano, o presidente Barack Obama se defronta com uma realidade marcada
pela independência e autonomia da diplomacia brasileira
por José Carlos Ruy
“Não está muito longe o dia em que o hemisfério será nosso em sua totalidade, como de direito já o é em virtude da superioridade da nossa raça”. Robert Taft, presidente dos EUA (1909-1913). O primeiro encontro entre chefes de Estado do Brasil e dos EUA ocorreu em 1876, quando o imperador D. Pedro II estava na Filadélfia. Ele e o presidente americano Ulysses Grant inauguraram a Exposição Universal que comemorou os cem anos da independência dos EUA. A visita do imperador deslumbrou a imprensa de Nova York. Em abril daquele ano, um editorial do New York Herald (que destacou o repórter James J. O’Kelly para acompanhar a viagem imperial desde o Rio de Janeiro até os EUA) dizia ser D. Pedro “um príncipe de elevadíssima linhagem. Descende diretamente das casas de Bragança, Bourbon e Habsburgo, três das dinastias que dominam o mundo. Só desde ponto de vista, tanto quanto este livre e fácil país queria considerá-lo, o Imperador é credor de especiais considerações”. Acima de tudo, dizia “o Imperador é chefe de uma grande nação, a maior depois da nossa, em todo o Continente”, “chefe de uma poderosa nação com quem vivemos em perfeita harmonia, e a cujo governante devemos ter ufania em prestar homenagem”.
A república burguesa do norte extasiava-se com a presença de uma cabeça coroada num momento em que, às vésperas de tornar-se uma potência mundial imperialista, o poderio dos dois países era equilibrado e as contradições amadureciam. Os EUA haviam posto fim à escravidão com uma sangrenta guerra civil cujo efeito foi acelerar a expansão das forças produtivas no país e acelerar o desenvolvimento do capitalismo. No Brasil o trabalho forçado
sobreviveria por mais de uma década, mantendo as forças do atraso à frente do país. Outra contradição eram as formas de governo e os alinhamentos internacionais decorrentes delas; enquanto os EUA eram uma república democrática burguesa, o Brasil era uma monarquia ligada politicamente e por laços familiares do Imperador à dinastias europeias feudais e atrasadas e, comercialmente, à Inglaterra. Era uma situação que, naqueles anos, começava a mudar aceleradamente. Quando a República foi proclamada no Brasil, em 1889, os EUA preparavam o início de sua expansão imperialista. O acelerado crescimento industrial posterior à Guerra Civil transformou o país na principal potência industrial, e a guerra com a Espanha, em 1898, terminou com a anexação de antigos domínios espanhóis, como Cuba, Filipinas, Porto Rico e Guam. Uma Alca neocolonial no século 19 Naquela época o monarquista Eduardo Prado denunciava, no livro A ilusão americana (1893), o unilateralismo norte-americano, cobrindo um período de mais de cem anos, desde o final do século 18. Seu livro tem relatos preciosos que ainda continuam atuais. Ele descreve, por exemplo, a 1ª Conferência Pan Americana, patrocinada pelo governo dos EUA, que se reuniu no final de 1889 para debater a adoção de arbitragem para resolver conflitos internacionais, a celebração de tratados de livre comércio e (“apenas para encher tempo”, escreveu Eduardo Prado), a construção de uma ferrovia dos EUA à Patagônia. Um exemplo do unilateralismo dos EUA ficou evidente no tratado comercial assinado com o Brasil em 1891. O governo dos EUA isentava de taxas a importação do café brasileiro (mas o “café já não pagava direitos nos Estados Unidos desde 1873”, indigna-se Eduardo Prado), e alguns tipos de açúcar que acabaram sem valor quando, em seguida, os americanos eliminaram as tarifas de importação do açúcar de Cuba e de Porto Rico, prejudicando as exportações brasileiras. Em troca, o Brasil isentou a importação de farinha de trigo dos EUA e outros produtos americanos, e reduziu em 25% as tarifas alfandegárias sobre vários outros, causando graves prejuízos às indústrias brasileiras: houve uma quebradeira geral dos moinhos de trigo no Brasil, provocando forte perda de captais nacionais e de empregos. O tratado acabou sendo revogado em 1895. Cem anos depois, os norte-americanos voltaram à carga ao insistir na aprovação de um tratado de livre comércio, a Alca, igualmente unilateral, favorável a seus interesses e lesivo para a indústria, a economia e a soberania do Brasil e dos demais países alvo desta operação imperialista. “Os Estados Unidos não têm amigos, têm interesses” – esta frase, dita pelo secretário de Estado John Foster Dulles na década de 1950, pode ser encarada como uma espécie de lema, de longa duração, da diplomacia dos EUA. Sua crueza já havia sido manifestada no final do no século 18, quando emissários dos Inconfidentes Mineiros esperavam a solidariedade da República do norte para romper com Portugal. Em 1786, José Joaquim da Maia procurou inutilmente o apoio de Thomas Jeferson, um dos fundadores da República americana e só obteve uma resposta evasiva. Numa nota ao secretário de Estado John Jay, Jefferson resumiu o que disse ao brasileiro: os EUA davam grande importância à amizade com Portugal, com quem tinham assinado um “tratado vantajoso”, mas veriam com “interesse” uma “revolução feliz no Brasil”. Sem compromissos ou promessas... A América para os americanos... do norte A visão que o governo dos EUA tinha do continente americano tornou-se explicita em 1823
quando o presidente James Monroe formulou a doutrina que leva seu nome, traduzida no princípio “a América para os americanos”, ao qual aqueles que querem ressaltar seu sentido acrescentaram jocosamente a expressão “do norte”. Temia-se que a Santa Aliança (a reacionária coligação que reunia a monarquia russa ao império austro-húngaro e era aliada da Espanha, Portugal e outras cortes europeias) ajudasse a Espanha a reconquistar as colônias americanas que haviam proclamado a independência, situação que os EUA consideravam perigosa para sua segurança. Apesar disso, quando o governo do nascente Estado brasileiro enviou a Washington um emissário para negociar o reconhecimento da Independência, ele foi questionado sobre a forma monárquica de governo e sobre sua capacidade para manter a unidade do país. Mesmo assim, os EUA foram o primeiro país a reconhecer a independência brasileira, em 1824. O governo dos EUA nunca deixou de encarar o Brasil, como os demais países da América Latina, como uma área de seu domínio exclusivo. Exemplo disso foram as reiteradas vezes em que manifestou, ao longo do século 19, a intenção de ocupação da Amazônia e sua defesa da livre navegação no rio Amazonas ou da colonização do vale amazônico com ex-escravos libertados em seu país que formariam, na floresta, uma cabeça de ponte para a ocupação territorial. Com a República, onda de americanismo Quando a República foi proclamada, em 1889, houve uma onda de americanismo no Brasil e a própria bandeira proposta inicialmente era uma cópia verde-amarela do pavilhão norte-americano. Mesmo a Constituição republicana foi fortemente inspirada na norte-americana. Mas a potência dominante continuava sendo, como fora no Império, a Inglaterra, e o período entre 1889 e 1930 foi uma época em que os EUA disputaram essa primazia. Chegou a mostrar as garras com a política do big stick (grande cassetete) do presidente Theodore Roosevelt. Com a I Grande Guerra (1914-1919) a balança do poder regional começou a pender a favor dos EUA, e o Brasil trocou Londres por Nova York como centro financeiro. Com a crise financeira de 1929, a revolução liberal brasileira de 1930 e a busca de autonomia foram embaraços ao domínio automático dos EUA. Desde 1931 o governo Vargas tomava iniciativas nacionalistas, como o favorecimento do Lloyd Brasileiro para a navegação litorânea no Brasil, ou a imposição de multa às grandes distribuidoras de gasolina (entre elas muitas multinacionais americanas) por sonegação de impostos. Getúlio Vargas consolidava assim uma imagem de nacionalista inaceitável para os norte-americanos, como havia ficado claro na 8ª Conferência Pan Americana, em 1938/1939. Mesmo assim, aqueles foram os anos em que o imperialismo norte-americano consolidou sua posição, econômica e militarmente. Mas essa hegemonia só pode ser exercida plenamente depois do fim da Segunda Grande Guerra. Durante a guerra, Vargas negociou duramente com os norte-americanos em busca de apoio para o desenvolvimento da siderurgia nacional e para a instalação de uma fábrica de motores e de caminhões. Em 1936 e 1943 ele se encontrou no Brasil com o presidente norte-americano Franklin Delano Roosevelt e o acordo entre eles levou à instalação de uma base militar norte-americana em Natal (RN); em contrapartida os americanos comprometeram-se a apoiar o desenvolvimento exigido por Vargas.
Durante a guerra, alguns oficiais brasileiros serviram na Itália junto a generais norte-americanos e voltaram para o Brasil fortemente influenciados por eles, devido principalmente ao temor anticomunista com que encaravam as mudanças democráticas do pós-guerra. Para eles, essa ameaça cresceu no final de 1945 quando Getúlio Vargas aproximou-se dos trabalhadores e aceitou o apoio do Partido Comunista do Brasil. Em conseqüência, Vargas foi deposto por um conluio de generais e liberais brasileiros, com o apoio ativo do embaixador Adolf Berle, dos EUA. Aliança da direita brasileira com os EUA Estava aberto um período de relações profundas entre a extrema-direita brasileira, inclusive militares, com agentes norte-americanos para combater o nacionalismo e aquilo que consideravam como ameaça comunista. Juntamente com os comunistas, Vargas era o grande alvo daquela articulação. Um dos aspectos principais dessa conjuntura foi a interferência aberta de agentes de multinacionais norte-americanas na Assembleia Constituinte de 1946, principalmente a petroleira Standad Oil of New Jersey e a Internacional Telephone Telegraph Co., de telefonia. Durante os debates da assembleia, o norte-americano Paul Howard Schoppel, da Standard Oil, pressionou os constituintes e chegou a distribuir dinheiro a deputados e senadores aliados e a ameaçar os adversários do imperialismo. Quando Vargas voltou ao governo, em 1951, a direita militar passou a defender uma estreita colaboração militar e econômica com os Estados Unidos e a repressão dos comunistas no Brasil. Naquela ocasião, o governo Vargas assinou, em março de 1952, um acordo militar com os EUA, prevendo o fornecimento de armas ao Brasil em troca de minerais estratégicos. Aquele foi um tempo de luta aberta entre aqueles que preconizavam um desenvolvimento autônomo e soberano para o país, contra os partidários do alinhamento automático e subordinado do país com os EUA. Essa luta chegou ao clímax em 1954 com a crise que levou ao suicídio de Vargas. Os anos seguintes foram turbulentos, com a crescente articulação entre os setores oligárquicos e agromercantis brasileiros com agentes norte-americanos. As relações Brasil-EUA foram atribuladas durante o mandato do presidente Juscelino Kubitschek, que adotou uma política desenvolvimentista e, em 1960, rompeu com o FMI por não aceitar as pressões para aplicar um rígido programa monetarista (hoje chamado de neoliberal). Sob a curta presidência de Jânio Quadros, em 1961, a chamada política externa independente procurou fortalecer o comércio externo brasileiro e atrair novos parceiros, principalmente a União Soviética, criando atritos nas relações Brasil EUA. Elas azedaram ainda mais depois da nacionalização de empresas norte-americanas, como a Cia de Energia Elétrica Riograndense, filial da norte-americana Bond & Share, a Cia Telefônica Riograndense, filial da ITT (ambas pelo governo de Leonel Brizola), e do escândalo da Amforp (American Foreign and Power Co.), empresa norte-americana do setor elétrico cuja compra foi anunciada pelo presidente João Goulart em 1963. O Congresso brasileiro também debatia a lei de remessa de lucros, repudiada pelos norte americanos mas sancionada por Goulart em janeiro de 1964, poucas semanas antes do golpe militar que o tiraria do poder. Ação da embaixada dos EUIA contra Goulart em1964 A conspiração contra João Goulart foi talvez o cenário para a maior e mais direta intervenção norte-americana na política brasileira. Naqueles anos, principalmente na eleição de 1962, houve
uma verdadeira derrama de dólares (cerca de 20 milhões, uma fortuna na época) para apoiar candidatos conservadores, comprometidos com os interesses dos EUA. O epicentro da conspiração que articulava grandes empresários brasileiros e estrangeiros, generais, parte do clero e demais lideranças conservadoras era a embaixada dos EUA, dirigida por Lincoln Gordon. Depois de 1964, os governos militares tentaram impor um regime de alinhamento automático com os EUA e o marechal Castello Branco chegou a defender a limitação da soberania brasileira num discurso pronunciado no Itamaraty em 31 de julho daquele ano. Essa política esbarrou, contudo, nas contradições vividas pela ditadura militar; quando militares da linha dura militar assumiram a presidência, sob o marechal Costa e Silva, seu nacionalismo direitista foi um obstáculo à subserviência completa, embora o alinhamento automático com os EUA nunca tenha sido descartado. O regime dos generais aplicou uma política ajustada aos interesses norte-americanos; favorecia as empresas estrangeiras no país e alinhava-se, na política externa, com a orientação ideológica anticomunista. Assim, apoiou golpes de estado na Bolívia (1971), Uruguai (1971-1973) e Chile (1973). Ao mesmo tempo, aproveitou brechas comerciais na América Latina, Oriente Médio e África e não hesitou, em função desses interesses comerciais, em fazer do Brasil um dos primeiros países a reconhecer a independência de Angola (1975), provocando forte irritação no governo americano. Já o governo do general Ernesto Geisel incentivou a indústria bélica brasileira, assinou um inaceitável para os norte-americanos acordo nuclear com a Alemanha, rompeu o acordo militar Brasil-EUA, de 1952, fomentou o desenvolvimento de uma indústria de computadores no Brasil, criando novas arestas nas relações entre os dois países. Política externa independentes sob Lula e Celso Amorim Nos últimos vinte anos, as relações entre o Brasil e os EUA oscilaram entre a adesão acrítica e subserviente de Fernando Collor de Mello e Fernando Henrique Cardoso, e a retomada de uma política externa independente e da busca de uma inserção soberana do Brasil no mundo, com ênfase na diversificação dos parceiros comerciais, no fortalecimento da unidade sul-americana e do Mercosul, e na consolidação de parcerias estratégicas com a China, a Índia, a África do Sul e a Rússia, promovida pelo governo do presidente Lula. O melhor exemplo dos resultados da nova política externa brasileira e de seu impacto nas relações com os EUA foi a paralisia das negociações em torno da Alca (Área de Livre Comércio das Américas). Durante a década neoliberal, o esforço por sua criação foi a tônica nas relações entre o Brasil e os EUA. A ideia fora lançada pelos norte-americanos, em 1994, para eliminar as barreiras alfandegárias ao comércio e à circulação de capitais, e 2005 foi fixado como data final para a conclusão do acordo. Mas logo ficaram claros os objetivos anexacionistas da Alca e seu unilateralismo favorável aos norte-americanos, repetindo o expansionismo que já havia sido registrado na 1ª Conferência Pan Americana, de 1889. O acordo esperado pelos EUA para implantar a Alca, em 2005, fracassou e aquele projeto neocolonialista foi retirado da agenda dos países latino americanos. Os tempos mudaram desde o governo Lula e a diplomacia dirigida pelo chanceler Celso Amorim. O Brasil voltou a ter um protagonismo soberano no mundo, deixando para trás a época em que embaixadores brasileiros precisavam ouvir, antes, a opinião de seus colegas do Departamento de Estado. Este período tem sido marcado por uma série de desentendimentos entre a
diplomacia dos dois países. Em 2003, por exemplo, o governo Lula foi contrário à invasão do Iraque por tropas dirigidas pelos EUA. Foi um importante sinal de independência, reiterado ao longo dos dois mandatos do presidente Lula. Hoje, o Brasil e os EUA têm posições diferentes, e em alguns casos antagônicas, em uma série de temas internacionais, como a defesa pelo Brasil do direito do Irã desenvolver um programa nuclear pacífico, inaceitável para os EUA; a interferência direta dos EUA em países da América Latina, como o Haiti para onde, depois do terremoto de janeiro de 2010, foi enviada uma tropa americana que passou a funcionar como força de ocupação, ou Honduras, onde o governo de Washington apoiou uma eleição ilegítima para a sucessão do presidente deposto. Além disso, Brasil e EUA tem se defrontado em algumas disputas comerciais no âmbito da Organização Mundial do Comércio (OMC), onde o Brasil tem obtido sucessivas vitórias em queixas contra práticas comerciais americanas lesivas aos interesses brasileiros. Mais do que isso, a diplomacia brasileira teve um papel destacado na integração da América do Sul, favorecendo desde a integração física dos países, com a construção de uma infraestrutura física para a integração e o fortalecimento das relações econômicas no continente, até a institucionalização da integração, com a constituição de organismos regionais como a Comunidade Sul Americana de Nações (Unasul), a partir de 2004, e o Conselho de Defesa Sul-Americano, em 2008.
***
O dissenso de Washington
Rubens Antonio Barbosa http://www.rbarbosaconsult.com.br/publicacoes_o_dissenso_de_washington.asp O Dissenso de Washington retrata o panorama das relações entre o Brasil e os Estados Unidos e os principais temas regionais e globais, alem dos conflitos políticos domésticos na dividida sociedade norte-americana e descrever os muitos desencontros dos Estados Unidos em relação ao Brasil e à América Latina durante o período de 1999 a 2004. Nem sempre o trabalho de um embaixador, nos postos de maior importância política e diplomática, coincide com acontecimentos especialmente marcantes na história do país onde está acreditado e também de seu próprio. Nos cinco anos em que representou o Brasil nos EUA, o Embaixador Rubens Barbosa pode presenciar fatos especialmente importantes como as eleições presidenciais com vitória do partido oposicionista, tanto nos Estados Unidos quanto no Brasil; os ataques terroristas de 11 de Setembro, a eclosão das guerras no Afeganistão e no Iraque e a eleição do Presidente Luiz Inácio Lula da Silva. A partir do privilegiado posto de observação que é a embaixada na capital americana, Barbosa também viveu a excepcional experiência de acompanhar de perto um longo período do relacionamento entre o Brasil e os Estados Unidos sob a ótica de dois governos que desenvolveram políticas externas bem distintas, o que por vezes acarretou desencontros no entendimento entre os dois países.
\ A EROSAO DAS PREFERENCIAS COMERCIAIS BRASILEIRAS NA A.LA.
http://www.rbarbosaconsult.com.br/publicacoes/documento_final.pdf
14/05/2013
O Brasil isolado
Rubens Barbosa em O Globo 14 maio 2013
Poucos no governo, e mesmo no setor privado, parecem estar atentos às profundas mudanças que estão ocorrendo no comércio internacional e às suas consequências sobre o setor externo brasileiro. Com a eleição, agora, de um brasileiro para o comando da OMC talvez surja um maior interesse nas implicações desse novo cenário sobre a economia brasileira, em especial sobre nossa política industrial e de comércio exterior. Em termos geoeconômicos, está ocorrendo a transferência do eixo econômico e comercial do Atlântico para o Pacífico, com a emergência da China como o maior importador e exportador global. As transformações no processo de globalização estão sendo aceleradas pela tendência de concentração da produção de manufaturas em poucos países: EUA, Alemanha, Japão e China. Algumas consequências dessa tendência já podem ser identificadas: -A capacidade de cada pais de vender passa a depender da capacidade de compra do resto do mundo, como mostra a Embraer. -Fora do circuito das cadeias produtivas globais, a maioria dos países em desenvolvimento está concentrando suas exportações em commodities. Estamos assistindo a uma proliferação de mega-acordos regionais e bilaterais de comércio. Dos 543 acordos de livre comércio em negociação, 354 entraram em vigor. Dois mega-acordos estão em marcha: o a Parceria Transpacífica na Ásia e a Parceria Transatlântica entre os EUA e a Europa. Japão e China mudaram sua política e passaram a negociar acordos bilaterais. Na América do Sul, países como Chile, Colômbia e Peru assinaram acordos comerciais com os EUA e a Europa e estão negociando acordos na Ásia. Esses acordos estão criando diferentes regras sobre investimento, compras governamentais, serviços, entre outras. A revolução energética nos EUA, em consequência do aproveitamento do folhelho (gás de xisto), está acelerando o processo de reindustrialização da economia americana. A renovada
agressividade comercial dos EUA vai propiciar a abertura de mercados para seus produtos manufaturados e aumentar a pressão para que os países adiram às novas normas. Nunca a influência de fatores alheios ao comércio esteve tão presente nas negociações comerciais. Considerações de natureza geopolítica estão se sobrepondo a diferenças internas para permitir a prevalência de interesses concretos (contenção da China) e ao estabelecimento de regras e padrões (standards), como no caso do acordo EUA-UE e no da Ásia. O Brasil, sem estratégia de negociação comercial e com dificuldades para criar um mercado regional para seus produtos, integrando os demais países em um intercâmbio de cadeia produtiva, a exemplo do que ocorre na Ásia e na Europa, está cada vez mais isolado. E, se persistir a política de ignorar o que ocorre no mundo, dificilmente poderá associar-se às novas tendências do comércio internacional.
O BRASIL E AS AMEAÇAS DO PODER IMPERIAL DOS
EUA
meaças de projeto imperial dos EUA
26/10/2013 - Copyleft
Moniz Bandeira: O Brasil e as ameaças de projeto
imperial dos EUA
A definição do Brasil como alvo de espionagem dos EUA não é de hoje,
diz o historiador e cientista político Moniz Bandeira, em entrevista à Carta
Maior.
Marco Aurélio Weissheimer =
http://www.cartamaior.com.br/?/Editoria/Internacional/Moniz-Bandeira-O-Brasil-
e-as-ameacas-de-projeto-imperial-dos-EUA/6/29340
Em 2005, o cientista político e historiador Luiz Alberto de Vianna Moniz Bandeira apontou
em seu livro “Formação do Império Americano” as práticas de espionagem exercidas pelas
agências de inteligência dos Estados Unidos. Uma prática que, segundo ele, já tem
aproximadamente meio século de existência. Desde os fins dos anos 60, diz Moniz
Bandeira, a coleta de inteligência econômica e informações sobre o desenvolvimento
científico e tecnológico de outros países, adversos e aliados, tornou-se uma prioridade do
trabalho dessas agências.
Em seu novo livro, “A Segunda Guerra Fria - Geopolítica e dimensão estratégica dos
Estados Unidos – Das rebeliões na Eurásia à África do Norte e Oriente
Médio” (Civilização Brasileira), Moniz Bandeira defende a tese de que os Estados Unidos
continuam a implementar a estratégia da full spectrum dominance (dominação de espectro
total) contra a presença da Rússia e da China naquelas regiões. “As revoltas da Primavera
Árabe”, afirma o embaixador Samuel Pinheiro Guimarães, que assina o prefácio do livro,
“não foram nem espontâneas e ainda muito menos democráticas, mas que nelas tiveram
papel fundamental os Estados Unidos, na promoção da agitação e da subversão, por meio
do envio de armas e de pessoal, direta ou indiretamente, através do Qatar e da Arábia
Saudita”,
Nesta nova obra, Moniz Bandeira aprofunda e atualiza as questões apresentadas em
“Formação do Império Americano”. “Em face das revoltas ocorridas na África do Norte e no
Oriente Médio a partir de 2010, julguei necessário expandir e atualizar o estudo. Tratei de
fazê-lo, entre e março e novembro de 2012”, afirma o autor. É neste contexto que o
cientista político analisa as recentes denúncias de espionagem praticadas pelos EUA em
vários países, inclusive o Brasil.
A definição do Brasil como alvo de espionagem também não é de hoje. Em entrevista à
Carta Maior, Moniz Bandeira assinala que a Agência Nacional de Segurança (NSA)
interveio na concorrência para a montagem do Sistema de Vigilância da Amazônia
(SIVAM), pelo Brasil, e assegurou a vitória da Raytheon, a companhia encarregada da
manutenção e serviços de engenharia da estação de interceptação de satélites do sistema
Echelon. Na entrevista, o cientista político conta um pouco da história desse esquema de
espionagem que, para ele, está a serviço de um projeto de poder imperial de proporções
planetárias.
Moniz Bandeira defende que o Brasil, especialmente a partir da descoberta das reservas
de petróleo do pré-sal, deve se preparar para defender seus interesses contra esse projeto
imperial. “As ameaças existem, conquanto possam parecer remotas. Mas o Direito
Internacional só é respeitado quando uma nação tem capacidade de retaliar”, afirma.
Carta Maior: O seu livro "Formação do Império Americano" já tratava, em 2005, do
tema da espionagem praticada por agências de inteligência dos Estados Unidos.
Qual o paralelo que pode ser traçado entre a situação daquele período e as
revelações que vêm sendo feitas hoje?
Moniz Bandeira: Sim, em “Formação do Império Americano”, cuja primeira edição foi
lançada em 2005, mostrei, com fundamento em diversas fontes e nas revelações pelo
professor visitante da Universidade de Berkeley (Califórnia), James Bamford, que o sistema
de espionagem, estabelecido pela National Security Agency (NSA), começou a funcionar
há mais de meio século. O objetivo inicial era captar mensagens e comunicações
diplomáticas entre os governos estrangeiros, informações que pudessem afetar a
segurança nacional dos Estados Unidos e dar assistência às atividades da CIA.
Com o desenvolvimento da tecnologia eletrônica, esse sistema passou a ser usado para
interceptar comunicações internacionais via satélite, tais como telefonemas, faxes,
mensagens através da Internet. Os equipamentos estão instalados em Elmendorf (Alaska),
Yakima (Estado de Washington), Sugar Grove (Virginia ocidental), Porto Rico e Guam
(Oceano Pacífico), bem como nas embaixadas, bases aéreas militares e navios dos
Estados Unidos.
A diferença com a situação atual consiste na sua comprovação, com os documentos
revelados por Edward Snowden, através do notável jornalista Gleen Greenwald, que
mostram que a espionagem é feita em larga escala, com a maior amplitude.
Desde os fins dos anos 60, porém, a coleta de inteligência econômica e informações sobre
o desenvolvimento científico e tecnológico de outros países, adversos e aliados, tornou-se
mais e mais um dos principais objetivos da COMINT (communications inteligence),
operado pela NSA), dos Estados Unidos, e pelo Government Communications
Headquarters (GCHQ), da Grã-Bretanha, que em 1948 haviam firmado um pacto secreto,
conhecido como UKUSA (UK-USA) - Signals Intelligence (SIGINT). Esses dois países
formaram um pool - conhecido como UKUSA - para interceptação de mensagens da União
Soviética e demais países do Bloco Socialista, a primeira grande aliança de serviços de
inteligência e à qual aderiram, posteriormente, agências de outros países, tais como
Communications Security Establishment (CSE), do Canadá, Defense Security Directorate
(DSD), da Austrália e do General Communications Security Bureau (GCSB), da Nova
Zelândia. Essa rede de espionagem, chamada de Five Eyes e conhecida também como
ECHELON - só se tornou publicamente conhecida, em março de 1999, quando o governo
da Austrália nela integrou o Defence Signals Directorate (DSD), sua organização de
SIGINT.
Carta Maior: Qual sua avaliação a respeito da reação (ou da falta de) da União
Europeia diante das denúncias de espionagem?
Moniz Bandeira: Os serviços de inteligência da União Europeia sempre colaboraram,
intimamente, com a CIA e demais órgãos dos Estados Unidos. Os governos da Alemanha,
França, Espanha, Itália e outros evidentemente sabiam da existência do ECHELON e
deviam intuir que o ECHELON - os Five Eyes - trabalhasse também para as corporações
industriais. As informações do ECHELON, sobretudo a partir do governo do presidente Bill
Clinton, eram canalizadas para o Trade Promotion Co-ordinating Committee (TPCC), uma
agência inter-governamental criada em 1992 pelo Export Enhancement Act e dirigida pelo
Departamento de Comércio, com o objetivo de unificar e coordenar as atividades de
exportação e financiamento do dos Estados Unidos. Corporações, como Lockheed,
Boeing, Loral, TRW, e Raytheon, empenhadas no desenvolvimento de tecnologia,
receberam comumente importantes informações comerciais, obtidas da Alemanha, França
e outros países através do ECHELON.
O presidente Clinton recorreu amplamente aos serviços da NSA para espionar os
concorrentes e promover os interesses das corporações americanas. Em 1993, pediu à
CIA que espionasse os fabricantes japoneses, que projetavam a fabricação de automóveis
com zero-emissão de gás, e transmitiu a informação para a Ford, General Motors e
Chrysler. Também ordenou que a NSA e o FBI, em 1993, espionassem a conferência da
Asia-Pacific Economic Cooperation (APEC), Seattle, onde aparelhos foram instalados
secretamente em todos os quartos do hotel, visando a obter informação relacionada com
negócios para a construção no Vietnã, da hidroelétrica Yaly. As informações foram
passadas para os contribuintes de alto nível do Partido Democrata. E, em 1994, a NSA não
só interceptou faxes e chamadas telefônicas entre o consórcio europeus Airbus e o
governo da Arábia Saudita, permitindo ao governo americano intervir em favor da Boeing
Co, como interveio na concorrência para a montagem do SIVAM (Sistema de Vigilância da
Amazônia), pelo Brasil, e assegurou a vitória da Raytheon, a companhia encarregada da
manutenção e serviços de engenharia da estação de interceptação de satélites do sistema
ECHELON, em Sugar Grove.
Carta Maior: Um dos temas centrais de seus últimos trabalhos é a configuração do
Império Americano. Qual é a particularidade desse Império Americano hoje? Trata-se
de um Império no sentido tradicional do termo ou de um novo tipo?
Moniz Bandeira: Todos os impérios têm particularidades, que são determinadas pelo
desenvolvimento das forças produtivas. Assim, não obstante a estabilidade das palavras, o
conceito deve evoluir conforme a realidade que ele trata de representar. O império, na
atualidade, tem outras características, as características do ultra-imperialismo, o cartel das
potências industriais, sob a hegemonia dos Estados Unidos, que configuram a única
potência capaz de executar uma política de poder, com o objetivo estratégico de assegurar
fontes de energia e de matérias primas, bem como os investimentos e mercados de suas
grandes corporações, mediante a manutenção de bases militares, nas mais diversas
regiões do mundo, nas quais avança seus interesses, através da mídia, ações encobertas
dos serviços de inteligência, lobbies, corrupção, pressões econômicas diretas ou indiretas,
por meio de organizações internacionais, como Banco Mundial, FMI, onde detém posição
majoritária. As guerras, para o consumo dos armamentos e aquecimento da economia,
foram transferidas para a periferia do sistema capitalista.
É óbvio, portanto, que o Império Americano é diferente do Império Romano e do Império
Britânico. Ainda que informal, isto é, não declarado, os Estados Unidos constituem um
império. São a única potência, com bases militares em todas as regiões do mundo e cujas
Forças Armadas não têm como finalidade a defesa das fronteiras nacionais, mas a
intervenção em outros países. Desde sua fundação, em 1776, os Estados Unidos
estiveram at war 214 em seus 236 anos do calendário de sua existência, até dezembro de
2012. Somente em 21 anos não promoveram qualquer guerra. E, atualmente, o governo
do presidente Barack Obama promove guerras secretas em mais de 129 países. O Império
Americano (e, em larga medida, as potências industriais da Europa) necessita de guerras
para manter sua economia em funcionamento, evitar o colapso da indústria bélica e de sua
cadeia produtiva, bem como evitar o aumento do número de desempregados e a
bancarrota de muitos Estados americanos, como a Califórnia, cuja receita depende da
produção de armamentos.
Ademais do incomparável poderio militar, os Estados Unidos também detém o monopólio
da moeda de reserva internacional, o dólar, que somente Washington pode determinar a
emissão e com a emissão de papéis podres e postos em circulação, sem lastro, financiar
seus déficits orçamentários e a dívida pública. Trata-se de um "previligégio exorbitante",
conforme o general Charles de Gaulle definiu esse unipolar global currency system, que
permite aos Estados Unidos a supremacia sobre o sistema financeiro internacional.
Carta Maior: Qual a perspectiva de longo prazo desse império?
Moniz Bandeira: Os Estados Unidos, como demonstrei nesse meu novo “A Segunda
Guerra Fria”, lançado pela editora Civilização Brasileira, estão empenhados em consolidar
uma ordem global, um império planetário, sob sua hegemonia e da Grã-Bretanha,
conforme preconizara o geopolítico Nicholas J. Spykman, tendo os países da União
Européia e outros como vassalos. O próprio presidente Obama reafirmou, perante o
Parlamento britânico, em Westminster (maio de 2011) que a “special relationship” dos dois
países (Estados Unidos e Grã-Bretanha), sua ação e liderança eram indispensáveis à
causa da dignidade humana, e os ideais e o caráter de seus povos tornavam “the United
States and the United Kingdom indispensable to this moment in history”. Entremente, o
processo de globalização econômica e política, fomentado pelo sistema financeiro
internacional e pelas grandes corporações multinacionais, estava a debilitar cada vez mais
o poder dos Estados nacionais, levando-os a perder a soberania sobre suas próprias
questões econômicas e sociais, bem como de ordem jurídica.
O Project for the New American Century, dos neo-conservadores e executado pelo ex-
presidente George W. Bush inseriu os Estados Unidos em um estado de guerra
permanente, uma guerra infinita e indefinida, contra um inimigo assimétrico, sem
esquadras e sem força aérea, com o objetivo de implantar a full spectrum dominance, isto
é, o domínio completo da terra, mar, ar e ciberespaço pelos Estados Unidos, que se
arrogaram à condição de única potência verdadeiramente soberana sobre a Terra, de
"indispensable nation" e “exceptional”.
O presidente Barack Obama endossou-o, tal como explicitado na Joint Vision 2010 e
ratificado pela Joint Vision 2020, do Estado Maior-Conjunto, sob a chefia do general de
exército Henry Shelton. E o NSA é um dos intrumentos para implantar a full spectrum
dominance, uma vez que monitorar as comunicações de todos os governantes tanto
aliados quanto rivais é essencial para seus propósitos. Informação é poder
Carta Maior: Qual o contraponto possível a esse império no ambiente geopolítico
atual?
Moniz Bandeira: Quando em 2006 recebi o Troféu Juca Pato, eleito pela União Brasileira
de Escritores "Intelectual do ano 2005", por causa do meu livro “Formação do Império
Americano”, pronunciei um discurso, no qual previ que, se o declínio do Império Romano
durou muitos séculos, o declínio do Império Americano provavelmente levará
provavelmente algumas décadas. O desenvolvimento das ferramentas eletrônicas, da
tecnologia digital, imprimiu velocidade ao tempo, e a sua queda será tão vertiginosa,
dramática e violenta quanto sua ascensão. Contudo, não será destruído militarmente por
nenhuma outra potência. Essa perspectiva não há. O Império Americano esbarrondará sob
o peso de suas próprias contradições econômicas, de suas dívidas, pois não poderá
indefinidamente emitir dólares sem lastros para comprar petróleo e todas as mercadorias
das quais depende, e depender do financiamento de outros países, que compram os
bonus do Tesouro americano, para financiar seu consumo, que excede a produção, e
financiar suas guerras.
É com isto que a China conta. Ela é o maior credor dos Estados Unidos, com reservas de
cerca US$ 3,5 trilhões, das quais apenas US$ 1,145 trilhão estavam investidos em U.S.
Treasuries. E o ex-primeiro-ministro Wen Jiabao previu o “primeiro estágio do socialismo
para dentro de 100 anos”, ao afirmar que o Partido Comunista persistiria executando as
reformas e inovação a fim de assegurar o vigor e vitalidade e assegurar o socialismo com
as características chinesas, pois “sem a sustentação e pleno desemvolvimento das forças
produtivas, seria impossível alcançar a equidade e justiça social, requesitos essenciais do
socialismo.”
Carta Maior: Na sua opinião, o que um país como o Brasil pode fazer para enfrentar
esse cenário?
Moniz Bandeira: O ministro-plenipotenciário do Brasil em Washington, Sérgio Teixeira de
Macedo, escreveu, em 1849, que não acreditava que houvesse “um só país civilizado onde
a idéia de provocações e de guerras seja tão popular como nos Estados Unidos”.
Conforme percebeu, a “democracia”, orgulhosa do seu desenvolvimento, só pensava em
conquista, intervenção e guerra estrangeira, e preparava, de um lado, a anexação de toda
a América do Norte e, do outro, uma política de influência sobre a América do Sul, que se
confundia com suserania.
O embaixador do Brasil em Washington, Domício da Gama, comentou, em 1912, que o
povo americano, formado com o concurso de tantos povos, se julgava diferente de todos
eles e superior a eles. E acrescentou que “o duro egoísmo individual ampliou-se às
proporções do que se poderia chamar de egoísmo nacional”. Assim os Estados Unidos
sempre tenderam e tendem a não aceitar normas ou limitações jurídicas internacionais, o
Direito Internacional, não obstante o trabalho de Woodrow Wilson para formar a Liga das
Nações e de Franklin D. Roosevelt para constituir a ONU. E o Brasil, desde 1849, esteve a
enfrentar a ameaça dos Estados Unidos que pretendiam assenhorear-se da Amazônia.
Agora, a situação é diferente, mas, como adverti diversas vezes, uma potência,
tecnologicamente superior, é muito mais perigosa quando está em declínio, a perder sua
hegemonia e quer conservá-la, do que quando expandia seu império. Com as descobertas
das jazidas pré-sal, o Brasil entrou no mapa geopolítico do petróleo. As ameaças existem,
conquanto possam parecer remotas. Mas o Direito Internacional só é respeitado quando
uma nação tem capacidade de retaliar. O Brasil, portanto, deve estar preparado para
enfrentar, no mar e em terra, e no ciberespaço, os desafios que se configuram, lembrando
a máxima “se queres a paz prepara-te para a guerra” (Si vis pacem,para bellum)
V- BRASIL E O MUNDO _ COMPETITIVIDADE INDUSTRIAL E PODER MILITAR
O Brasil no contexto regional e global –
CELSO LAFER * - domingo, 19 de maio de 2013 - O Estado de S. Paulo,
O Brasil na América do Sul
A análise dos atuais desafios relacionados à presença do Brasil na América do Sul, e mais amplamente na América Latina, beneficia-se de considerações históricas que esclarecem o pano de fundo da singularidade brasileira na região. Nosso processo de independência fez do Brasil um Império em meio a Repúblicas, o diferente na região em matéria de regimes políticos.
O diferente era também o de um Estado com grande massa territorial e uma população de língua portuguesa que permaneceu unida num só Estado. Em contraste, o mundo hispânico, de fala castelhana, fragmentou-se em vários países nos processos da independência.
A manutenção da unidade nacional foi o grande e bem-sucedido objetivo do Brasil Império e o seu legado para o País. A construção desse legado fez, no século 19, da política interna e da política externa as duas faces de uma mesma moeda: a da consolidação do Estado brasileiro numa região instável e centrífuga.
A República preservou a herança do Império e, graças à obra de Rio Branco, foram dirimidos, pelo Direito e pela diplomacia, os temas pendentes de fronteiras. Equacionou-se assim o primeiro item da agenda da política externa de um Estado independente, o da clareza quanto ao que é "interno" ao País e o que a ele é "externo". O Brasil é raro caso de país com abrangente vizinhança sem contenciosos territoriais.
Desses elementos defluem desdobramentos que podem ser considerados "forças profundas" da visão brasileira sobre sua presença na região e no mundo. Primeiro, um nacionalismo voltado para dentro, não para fora, preocupado e dedicado ao desenvolvimento do grande espaço nacional. Segundo, um interesse específico em contribuir para a paz e o progresso na América Latina, com ênfase na América do Sul. Terceiro, a aspiração, com o lastro de um país consolidado e de escala continental, de ter presença na definição das regras de funcionamento do sistema internacional.
Essa leitura, com ajustes e mudanças em função das transformações internas e externas, explica a importância atribuída pelo Brasil ao entendimento com os vizinhos e à cooperação latino-americana, que teve novo impulso com os processos de redemocratização no Cone Sul no contexto do fim da guerra fria. Isso trouxe significativa aproximação entre Argentina e Brasil, levou ao Mercosul, induziu a uma tentativa de integração energética de gás com a Bolívia e chegou, por iniciativa do presidente Fernando Henrique Cardoso, à inédita reunião em 2000 de todos os países da América do Sul, que propiciou o IRSA, conjunto de projetos de integração logística, energética e de infraestrutura para fazer a melhor economia da nossa geografia comum.
Isso tudo mudou nestes últimos dez anos - os dez anos do governo do PT -, de maneira que os caminhos anteriores não dão resposta aos problemas do presente. De certo modo, creio que se configura, em novos moldes, a singularidade do Brasil na região e no mundo.
O Brasil é hoje, mais do que antes, um ator global, com um patamar no mundo distinto de outros países da nossa região. O eixo regional tornou-se mais assimétrico. São maiores as expectativas dos vizinhos quanto ao papel do País na sustentabilidade de cooperação. Também são maiores os desafios relacionados às ambições do Brasil num mundo multipolar fragmentado, com tendências centrífugas e muitas tensões de hegemonia.
A fragmentação alcança nossa região, que se tornou mais heterogênea nas suas visões da economia e da política. Nas instâncias de concertação política e nos processos de integração não ocorrem apenas os naturais conflitos de interesses, mas múltiplos conflitos de concepção, até sobre o valor da democracia e dos direitos humanos. Esses conflitos de concepção explicam a perda do impulso original do Mercosul, que se "aladifica", ou seja, torna-se um mecanismo de cooperação que deixou de ter o foco de uma dimensão transformadora, voltada para lidar com um mundo globalizado. A visão dos países com tendências economicamente liberalizantes que integram a Aliança do Pacífico (Chile, Peru, Colômbia, México) contrasta com a dos bolivarianos, de discutíveis credenciais democráticas e orientação estatizante nacionalista (Venezuela, Equador, Bolívia). Ora, o Brasil não se enquadra em nenhuma dessas concepções: não é liberalizante à moda da Aliança do Pacífico nem é bolivariano; e a Argentina, com seus problemas internos, imobiliza, no Mercosul, a nossa ação externa comercial.
Essa singularidade não nos está favorecendo. Os acordos comerciais inter e extrazona estão minando nossas preferências comerciais na região e comprometendo nossas exportações de manufaturados, que enfrentam a concorrência da China. O IRSA está em compasso de espera diante da dificuldade de elaboração de um marco regulatório comum. O papel do País na formulação das regras de funcionamento do comércio internacional reduz-se, seja pela longa paralisia das negociações da Rodada Doha, seja porque novas normas se elaboram em dois mega-acordos comerciais, a Parceria Trans-Pacífico e a Parceria de Comércio e Investimento Transatlântica, de que não participamos. Corremos o risco de ser, como notou Vera Thorstensen nesta página em 6/5, rule takers, seguidores da irradiação de normas impostas por outros, não rule makers, papel que, na nossa singularidade, buscamos tradicionalmente exercer.
Um grafite recente num país latino-americano dizia: "Cuando teníamos las respuestas nos cambiaran las preguntas". Mudaram as perguntas relacionadas ao como melhor conduzir de forma cooperativa nossa inserção na América do Sul. Falta ao governo brasileiro não só uma nova e necessária visão estratégica apta a lidar com a nossa singularidade, agravada por um processo decisório fragmentário que, à deriva, reitera respostas inadequadas e tópicas para uma realidade que mudou.
* PROFESSOR EMÉRITO DO INSTITUTO DE RELAÇÕES INTERNACIONAIS DA USP, FOI MINISTRO DAS RELAÇÕES EXTERIORES (GOVERNO FHC)
Da politica industrial para o simples bom senso - IEDI e CNI (mas nao contem com o
governo) - sábado, 25 de maio de 2013
http://diplomatizzando.blogspot.com.br/2013/05/da-politica-industrial-para-o-simples.html
Pedro Passos e o Novo Mapa de Competitividade da Indústria
Mansueto Almeida
22/05/2013
Já há algum tempo tenho observado as opiniões do empresário Pedro Passos da Natura e presidente do IEDI. As suas declarações agradam tanto defensores quanto críticos da política industrial e mostra que, talvez, suas ideias seja o que se poderia chamar de o “denominador comum” nesse debate.
O empresário deu uma entrevista para a coluna da Maria Cristina Farias, na Folha (clique aqui), e deu uma palestra no fórum de BioEconomia, em outubro de 2012(vídeo pode ser assistido aqui), onde destaca que: (i) o governo ajuda excessivamente o setor automobilístico, que para ele é desnecessário; (ii) fala que os incentivos à inovação no Brasil são baixos e a economia ainda é excessivamente fechada, (iii) o Mercosul hoje mais atrapalha do que beneficia a inserção externa de empresas brasileiras, (iv) precisamos estabelecer metas para educação – conseguir nos próximos vinte anos estar entre os dez melhores países do mundo na qualidade de educação (medida pelo PISA), (v) reduzir a proteção da economia, etc. Quais setores da indústria o Brasil deverá promover para ser mais competitivo?Nos pronunciamentos do empresário isso não parece ser importante. O que parece ser mais relevante é o fomento à inovação e maior integração com o resto do mundo que, naturalmente, favoreceria os setores da indústria mais ligados aquelas cadeias produtivas que Brasil já tem vantagem comparativa. Assim, nossa política seria diferente tanto do modelo Coreano quanto da política de estímulos setoriais que o Brasil tem feito intensivamente desde 2008. O pensamento do presidente do IEDI me parece algo muito particular dele, não sei se é consenso no próprio IEDI. No entanto, e para a minha surpresa, o novo mapa estratégico da indústria da CNI (clique aqui), divulgado esta semana, vai ao encontro das opiniões que Pedro Passos vem defendendo. O novo mapa estratégico da indústria da CNI parece corroborar a tese de críticos da política industrial de que a competividade da indústria depende pouco ou nada de estímulos a setores da indústria (política industrial) e muito mais de medidas horizontais e consistência das políticas macroeconômicas.
O mapa fala de controle dos gastos públicos, aumento do investimento público, melhoria da qualidade da educação, segurança jurídica, produtividade, eficiência do Estado, tributação, produtividade, etc. O documento quando fala de políticas setoriais na p. 59 –exatamente três parágrafos- o faz de maneira tímida. Assim, ao que parece, a própria CNI não acredita mais em política industrial. Não seria então o caso de a entidade deixar isso claro para o governo?
É verdade que no mapa há uma macrometa de aumentar de 1,7% para 2,2% a participação do valor adicionado da manufatura no Brasil em relação ao valor adicionado da manufatura no mundo, mas isso pode ser alcançado com a sensível diminuição da participação de vários setores da indústria de transformação (o que é provável acontecer) na economia brasileira.
Adicionalmente, ao contrário do Política de Desenvolvimento Produtivo (PDP), de 2008, ou do Plano Brasil Maior, de 2011, o mapa estratégico da indústria não cita um única vez, nas suas 141 páginas, nenhum setor econômico específico como confecção, têxtil, química, etc. Ou seja, o mapa de competitividade da indústria é talvez o melhor documento contra a política indústria nos moldes que se faz hoje. Resta saber se de fato ele reflete o pensamento dominante da CNI ou se é um conjunto de idéias além das políticas setoriais que a instituição tradicionalmente defende.
Fonte: Mapa Estratégico da CNI
Brasil: próxima potencia militar
Santiago Pérez, Do Esglobal
Las capacidades militares de un Estado aumentan junto con su crecimiento económico y sus
necesidades políticas. He aquí los múltiples motivos que impulsan el desarrollo militar brasileño.
Durante los últimos ocho años Brasil ha incrementado sus inversiones militares casi en un 500%.
Si bien la economía brasileña ha crecido sustancialmente durante la última década, la pobreza
continúa siendo la principal problemática social. ¿Por qué entonces destinar estos cuantiosos
recursos a desarrollos militares? Una mirada estratégica a largo plazo, las nuevas necesidades
derivadas del ascenso económico nacional, la defensa de las riquezas naturales y el
posicionamiento brasileño dentro del concierto geopolítico global son, a grandes rasgos, algunas
de las respuestas.
Para comenzar es necesario recordar que Brasil es un país con una extensa, diversa y rica
geografía. Cuenta con una superficie de 8,5 millones de kilómetros cuadrados y 23.102
kilómetros de fronteras terrestres y marítimas. El país es propietario de las mayores reservas de
agua dulce en todo el mundo, activo de incalculable valor en un mundo cada vez más sediento.
Se estima que en la actualidad 1.000 millones de personas no tienen acceso al agua potable y
es por esto que la administración del recurso acuífero será, sin dudas, uno de los grandes
asuntos de la política internacional del siglo XXI. La Amazonia, considerada el pulmón del
planeta, es un elemento de importancia para el equilibrio climático global por su inmensidad y
características de su vegetación. Esta selva de 6 millones de kilómetros cuadrados se encuentra
en un 63% dentro de territorio brasileño. El petróleo es otro recurso estratégico. Durante años el
desarrollo industrial del país había estado cuestionado por su dependencia de la importación de
combustibles. Tras años de inversión, la empresa estatal Petrobras ha encontrado importantes
reservas submarinas en la cuenca denominada pre sal, la cual podría abastecer a cerca del 40%
de la demanda petrolífera del país a medio plazo. La defensa y correcto monitoreo de tan amplia
geografía requiere de una compleja logística la cual se encuentra dentro de la lógica de defensa
nacional y es allí donde las Fuerzas Armadas cumplen un rol de gran importancia.
Al mismo tiempo, Brasil limita con 10 países a lo largo de 15.735 kilómetros. El incremento de los
flujos migratorios como consecuencia del crecimiento económico y la problemática del
contrabando requieren de una estricta vigilancia. Otro asunto delicado es el narcotráfico. Perú,
Colombia y Bolivia, países que comparten límites con Brasil, son los tres principales productores
de cocaína del mundo y Brasil es el segundo mayor consumidor mundial (solo superado por
Estados Unidos). La frontera brasileña con estas naciones es de una accidentada geografía,
atravesada por cadenas montañosas, múltiples ríos y áreas selváticas de difícil acceso. La
imperiosa necesidad de fiscalizar esta permeable frontera es un factor más por el que el país
precisa de unas Fuerzas Armadas a la altura de las circunstancias.
Es también interesante el modo en el que el incremento de los gastos de defensa arrastra el
beneficio del derrame hacia el complejo militar e industrial. En el caso brasileño este fenómeno
se ve materializado en el sector aeroespacial donde la empresa Embraer tiene el papel
protagonista. La compañía cuenta con aeronaves de reconocimiento y vigilancia con tecnología
del más alto nivel. En lo que respecta a transporte militar la empresa está desarrollado el más
ambicioso de sus proyectos. Se trata del Embraer KC-390, un avión capaz de trasladar 21
toneladas, incluyendo vehículos blindados. La unidad gozará de prestaciones superiores a la de
su competidor, el Lockheed Martin Super Hércules. Distintos Ejércitos latinoamericanos e
inclusive europeos ya han mostrado su interés por la mencionada aeronave, quedando así
demostrado como la inversión en tecnología armamentística puede derivar en exportaciones de
bienes industriales de alto valor agregado.
Sin dudas las necesidades de la política exterior ocupan un lugar principal dentro de la estrategia
de desarrollo militar. Por sus dimensiones geográficas, demográficas y económicas Brasil es el
líder político natural de América del Sur. La supremacía militar en el ámbito regional es un factor
de importancia para la consolidación de dicho liderazgo. No es casualidad que el Estado
brasileño cuente con el mayor presupuesto de defensa de la región que triplica al de Colombia,
su más inmediato perseguidor. Sucede que cuando de analiza sus objetivos, Brasilia observa
más de cerca los pasos de otras potencias emergentes del planeta que los movimientos de sus
vecinos. Los 31.576 millones de dólares que destina a su defensa lo posicionan como el décimo
primer país que más invierte en dicho sector globalmente. El segundo del continente americano
(detrás EE UU) y el sexto del hemisferio occidental. De estos números se desprende que la
mirada de las autoridades brasileñas apunta más hacia el equilibrio de poder global que hacia la
cuestión regional. La vocación es la de ocupar un espacio de importancia dentro del emergente
sistema internacional multipolar. El asunto del statu quo del Consejo de Seguridad de Naciones
Unidas también se encuentra sobre la mesa. Por ahora la discusión del actual modelo de cinco
miembros permanentes heredado de la Segunda Guerra Mundial está cerrada. Una eficaz fuerza
militar será una cuestión necesaria, pero no suficiente, para que una futura eventual apertura del
órgano a nuevos integrantes contemple la posibilidad de incluir a Brasil.
La construcción de submarinos de propulsión nuclear, en cooperación tecnológica con Francia,
ya se encuentra en marcha. La marina brasileña trabaja en su base de Itaguaí, ubicada en el
estado de Río de Janeiro, desde donde operaran las unidades. Si bien se trata de un proyecto
que no mostrará naves funcionales hasta después de 2020, demuestra que la visión es de largo
plazo y que la Defensa es una real política de Estado y no la prioridad de una administración en
particular. ¿Para que un submarino de propulsión nuclear? Los 7.367 kilómetros de costas y la
protección de las riquezas minerales que allí descansan así lo requieren. Por otro la discusión
por la soberanía o la explotación de los recursos en la Antártida podría abrirse a largo plazo (por
el momento cualquier reclamo se encuentra congelado por el Tratado Antártico). En Itamaraty
observan la cuestión del sexto continente como un asunto regional y no exclusivo de los países
del Cono Sur, principalmente Argentina y Chile, quienes suelen referirse a la Antártida como un
área sobre la cual sus derechos son los más legítimos.
Por último, y como consecuencia de los grandes eventos que Brasil albergará en los próximos
años, las Fuerzas Armadas han cumplido una importante función en la escena interno. Río de
Janeiro será sede de los Juegos Olímpicos en 2016. La necesidad de garantizar la seguridad en
un evento de esta magnitud requiere la utilización de carros blindados de la Marina para dar
soporte a las fuerzas policiales. La recuperación del control estatal en ciertas favelas, barrios
hasta hace poco dominados por grupos de narcotraficantes, fue posible gracias al apoyo militar.
De todas formas si medimos el presupuesto de defensa en relación al PIB, Brasil invierte todavía
muy poco, solo el 1,6%. Algunos ejemplos de países equivalentes así lo demuestran. India
destina el 2,5%, Francia el 2,3%, Rusia el 4,4% y China el 2%. En otras palabras, los gastos
brasileños tienen margen de crecimiento lo que abre un horizonte de posibilidades hacia el
futuro. Como sucedió a lo largo de la historia con distintas potencias, las capacidades militares
de un Estado aumentan junto con su crecimiento económico y sus necesidades políticas. Dentro
de esta lógica, Brasil, no es una excepción.
Industrialização comparada
Marcelo Miterhof 2014
É necessária uma política industrial que exponha as empresas brasileiras ao mercado global
Está no prelo o livro "Padrões de Desenvolvimento Econômico, Estudo Comparativo de 13 Países: América Latina, Ásia e Rússia", editado pelo CGEE (Centro de Gestão e Estudos Estratégicos) e organizado pelo professor da UFRJ Ricardo Bielschowsky. A obra retoma tradição de análises de padrões e singularidades nas trajetórias de desenvolvimento.
Ao comparar AL (América Latina) e Ásia, o livro permite completar uma avaliação feita na coluna retrasada sobre a industrialização por substituição de importações (ISI) ocorrida no pós-Guerra. A partir dos anos 1970, os choques do petróleo e dos juros americanos e a liberalização financeira interromperam a ISI, o que significou na AL um longo período de baixo crescimento e de reversão da aproximação em relação à renda per capita e à estrutura produtiva dos países ricos.
Porém na Ásia não houve tal descarrilhamento. Há razões para isso.
Ambas as experiências recorreram a protecionismo, subsídios, financiamento público, estatais e coisas afins para superar a inércia de uma industrialização tardia.
A AL teve como traço marcante o recurso a empresas transnacionais para acelerar a absorção de tecnologias e a criação de setores. Isso atendeu aos interesses da firmas estrangeiras, em especial as que à época não tinham posição competitiva de destaque na Europa e nos EUA e procuravam novos mercados.
Se propiciava crescimento e mudança estrutural mais velozes, o capital externo também trouxe graves limitações. O capital privado nacional permaneceu frágil e mais voltado a setores de bens não transacionáveis, como bancos e construção.
A internalização de plantas prontas de diferentes origens dificultou a articulação entre as matrizes industriais e dessas com os produtores de bens de capital.
De início, a busca de exportações nem sequer era questão posta, pois não fazia parte da lógica da vinda das transnacionais.
Frações reduzidas das populações ascenderam, tendo acesso a empregos de alta produtividade e remuneração. O caráter restritivo fez a industrialização concentrar renda, o que em certa medida foi funcional ao criar mercado para bens de grande valor. Mas a fragilidade do consumo de massas ampliou a falta de autonomia do capitalismo na região.
Como pontua o capítulo do México, feito pelo professor da USP João Furtado, a ISI era uma bola de neve: o aumento de renda e consumo eleva as importações, o que, sem o crescimento das exportações, amplia o deficit comercial, exigindo um novo passo na substituição de importações e, assim, reforçando qualitativamente a dependência externa.
A Ásia, por seu turno, teve a vantagem de ter sido palco-chave da Guerra Fria, levando os EUA a conceder substanciais ajudas financeiras a aliados e permitir arranjos mais autônomos de desenvolvimento.
A escassez de recursos naturais e o primado do longo prazo à custa do bem-estar presente (principalmente da elite) levaram ditaduras asiáticas a: rejeitar o capital externo ou exercer alto controle sobre ele; priorizar a criação de competências, em vez de simplesmente transplantar setores; buscar novas tecnologias, em vez de apenas incorporar técnicas existentes; e expor as empresas locais à competição global, fixando metas de exportação em contrapartida aos benefícios concedidos.
A conquista de autonomia tecnológica e empresarial e a manutenção de um maior controle sobre a movimentação de capitais, juros e câmbio permitiram que os países asiáticos, com destaque para a Coreia do Sul, enfrentassem os choques dos juros e do petróleo, continuando a crescer desde a década de 1980. Hoje, países da região são líderes tecnológicos e econômicos mundiais.
Na AL, a reação liberal à crise da ISI levou à desindustrialização, embora o México tenha encontrado nas "maquiladoras" uma radicalização da industrialização dependente e o Brasil resista como exceção parcial.
Diante desse alento, o caminho é o do aprendizado, sem amaldiçoar ou defender acriticamente a ISI. Claro, não é possível replicar experiências datadas. Além disso, é desejável que o desenvolvimento seja puxado pelo mercado interno. Mas é preciso, entre outras coisas, que uma política industrial exponha as empresas brasileiras ao mercado global e que o ambiente macroeconômico favoreça tal esforço.
Nas próximas semanas, tratarei de experiências de países abordados no livro.
--
Para calcular o futuro José Luís Fiori
As "grandes potências" se protegem coletivamente, impedindo o surgimento de novos
estados e economias líderes, através da monopolização das armas, da moeda e das
finanças, da informação e da inovação tecnológica. Por isto, uma "potência emergente"
é sempre um fator de desestabilização e mudança do sistema mundial, porque sua
ascensão ameaça o monopólio das potências estabelecidas". J.L.F. "História,
Estratégia e Desenvolvimento. Para uma Geopolítica do Capitalismo", Editora
Boitempo, 2014, SP, p: 35 (no prelo)
No século XX, o Brasil deu um passo enorme e sofreu uma transformação profunda e
irreversível, do ponto de vista econômico, sociológico e político. No início do século,
era um país agrário, com um Estado fraco e fragmentado, e com um poder econômico e
militar muito inferior ao da Argentina. Hoje, na segunda década do século XXI, o Brasil
é o país mais industrializado da América Latina e a sétima maior economia do mundo;
possui um estado centralizado e democrático, uma sociedade altamente urbanizada -
ainda que desigual - e é o principal player internacional do continente sul-americano.
Além disso, é um dos países do mundo com maior potencial de crescimento pela frente,
se tomarmos em conta seu território, sua população e sua dotação de recursos
estratégicos, sobretudo se for capaz de combinar seu potencial exportador de
commodities com a expansão sustentada do seu próprio parque industrial e tecnológico.
Tudo isto são fatos e conquistas inquestionáveis, mas estes fatos e conquistas colocaram
o Brasil frente a um novo elenco de desafios internacionais, e hoje, em particular, o país
está enfrentando uma disjuntiva extremamente complexa.
Brasil deve buscar novo caminho de afirmação do seu poder dentro e fora de sua
zona de influência imediata
As próprias dimensões que o Brasil adquiriu, e as decisões que tomou no passado
recente, colocaram o país dentro do grupo dos estados e das economias nacionais que
fazem parte do núcleo de poder do "caleidoscópio mundial": um pequeno número de
estados e economias nacionais que exercem - em maior ou menor grau- um efeito
gravitacional sobre todo o sistema, e que são capazes, simultaneamente, de produzir um
"rastro de crescimento" dentro de suas próprias regiões. Queiram ou não queiram, esses
países criam em torno de si "zonas de influencia", onde têm uma responsabilidade
política maior que a dos seus vizinhos, enquanto são chamados a se posicionar sobre
acontecimentos e situações longe de suas regiões, o que não acontecia antes de sua
ascensão.
Mas, ao mesmo tempo, os países que ingressam neste pequeno "clube" dos países mais
ricos e poderosos têm que estar preparados, porque entram automaticamente num novo
patamar de competição, cada vez mais feroz, entre os próprios membros desse "núcleo"
que lutam entre si para impor a todo o sistema, os seus objetivos e as suas estratégias
nacionais de expansão e crescimento.
Neste momento o Brasil já não tem como recuar sem pagar um preço muito alto. Mas,
por outro lado, para avançar, o Brasil terá que ter uma dose extra de coragem,
persistência e inventividade. Além disto, terá que ter objetivos claros e uma
coordenação estreita, entre as agências responsáveis pela política externa do país,
envolvendo a sua diplomacia, a sua política de defesa, articuladas com sua política
econômica e com sua política de difusão global de sua cultura e dos seus valores.
E o que é mais importante, o Brasil terá que sustentar uma "vontade estratégica"
consistente e permanente, ou seja, uma capacidade social e estatal de construir
consensos em torno de objetivos internacionais de longo prazo, junto com a capacidade
de planejar e implementar ações de curto e médio prazo, mobilizando os atores sociais,
políticos e econômicos relevantes, frente a cada situação e desafio em particular.
Mais difícil do que tudo isto, entretanto, será o Brasil descobrir um novo caminho de
afirmação da sua liderança e do seu poder internacional, dentro e fora de sua zona de
influência imediata. Um caminho que não siga o mesmo roteiro das grandes potências
do passado, e que não utilize a mesma arrogância e a mesma violência que utilizaram os
europeus e os americanos para conquistar, submeter e "civilizar" suas colônias e
protetorados. Em segundo lugar, como todo país que ascende dentro do sistema
internacional, o Brasil terá que questionar de forma cada vez mais incisiva, a ordem
institucional estabelecida e os grandes acordos geopolíticos em que se sustenta.
Mas o Brasil terá que fazê-lo sem o uso das armas, e por meio de sua capacidade de
construir alianças com quem quer que seja desde que o Brasil mantenha seus objetivos e
valores, e consiga expandir-se e conquistar novas posições dentro da hierarquia política
e econômica internacional. Este objetivo já não obedece mais a nenhum tipo de
ideologia nacionalista, nem muito menos a qualquer tipo de cartilha militar, obedece a
um imperativo "funcional"' do próprio "sistema interestatal capitalista": neste sistema,
"quem não sobe cai".
Mas ao mesmo tempo, "quem sobe", tem que estar preparado, porque será atacado e
desqualificado inevitavelmente e de forma cada vez mais intensa e coordenada, dentro e
fora de suas próprias fronteiras, caso não se submeta à vontade estratégica dos antigos
donos do poder global. Em qualquer momento da história é possível acovardar-se e
submeter-se, mas atenção, porque o preço desta humilhação será cada vez maior e
insuportável para a sociedade brasileira.
José Luís Fiori, professor titular de economia política internacional da UFRJ, é
autor do livro "O Poder Global", da Editora Boitempo, e coordenador do grupo de
pesquisa do CNPQ/UFRJ "O Poder Global e a Geopolítica do Capitalismo".
Escreve mensalmente às quartas-feiras.
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La Guerra Fría cultural: intelectuales al servicio de la
CIA
Por Ernesto Carmona*
Las 600 páginas de "La CIA y la Guerra Fría cultural", de Frances Stonor Saunders, recorren los millonarios esfuerzos de EE.UU. por imponerse sobre la cultura y el arte del campo socialista.
Saunders caracteriza la Guerra Fría como la lucha por el control de las mentes entre los dos bloques políticos -socialismo versus capitalismo- que se
confrontaron hasta fines de los 80. La eficacia del lavado de cerebro implementado por la CIA explicaría la sumisión europea de hoy a la política imperial de George W. Bush.
“...Y la verdad os hará libres (Juan 8:32)” reza en las paredes de la CIA en Langley, Virginia. Sin embargo, la agencia elevó el embuste a la categoría de ideario filosófico. Acuñó la doctrina de “la mentira necesaria”, puso los dólares y aportó la retórica sobre “libertad” y “cultura”.
Esta prédica libertaria inundó Europa y América Latina mientras EE.UU. aún aplicaba el apartheid y experimentaba fármacos de “control mental” en pacientes siquiátricos. En esos años, el FBI llevó a la silla eléctrica a Ethel y Julius Rosenberg, en un juicio amañado mientras el macarthismo arruinaba la vida de miles de ciudadanos acusados de pro comunistas.
La CIA sostenía que la Unión Soviética perseguía a los artistas e intelectuales disidentes, justo cuando en EE.UU. ocurría lo mismo bajo el imperio de la delación y la caza de brujas. El pasado que abordó la escritora es prácticamente igual al presente. Sólo que ahora el “comunismo” tiene como sustituto al “terrorismo”.
El Congreso por la Libertad de la Cultura (CLC) fue el instrumento central de la operación ideológica de la CIA, constituido como una organización asentada en París con apoyo de los servicios de inteligencia francés y británico. Washington “pagó la música”… sin fijarse en gastos. Entre crímenes y golpes de Estado, la CIA se dio tiempo para funcionar también como ministerio de la Cultura.
SARTRE NO SE CONTAGIÓ
La revista Encounter -Encuentro- fue el “acorazado insignia” de esta operación. O más bien el transatlántico de lujo del Congreso norteamericano, porque pagó viajes, hoteles, becas, artículos, ediciones, conciertos y exposiciones. Pocos artistas e intelectuales se resistieron a aparecer en las 50 revistas “culturales” de la CIA y el CLC, a publicar sus libros en grandes tiradas, a que sus piezas musicales fueran ejecutadas por la Sinfónica de Boston o que sus obras fueran mostradas en exposiciones itinerantes del Museo de Arte Moderno de Nueva York.
La CIA embaucó o utilizó a sabiendas a la intelectualidad europea y latinoamericana durante más de dos décadas. Cuando The New York Times destapó la olla, en mayo de 1967, todos dijeron “yo no sabía”. Encounter se hundió ese mismo año, lentamente, como el Titanic, pero... en 1996 fue reflotada en España como Encuentro.
Excepto Jean Paul Sartre, Albert Camus y otros pocos, la Europa pensante cayó en las redes de la fachada cultural de la CIA, urdida por el agente Michael Josselson. La intelectualidad se mostró dispuesta a ingerir el discurso de “libertad cultural” y a repeler todo lo que oliera a Unión Soviética. Especial mención merece en este libro el "anarquista" inglés George Orwell, que fungió como activo militante reclutando a intelectuales que dudaban de ingresar a esta mafia.
Desde el filósofo pacifista británico Bertrand Russell al ideólogo demócrata cristiano Jacques Maritain, las mentes más brillantes del Viejo Mundo se pusieron al servicio de EE.UU. La cruzada cultural fue financiada con partidas secretas del Plan Marshall y dinero lavado por la CIA a través de una docena de fundaciones estadounidenses.
Bertrand Russell presidió la telaraña del CLC internacional. Dimitió cuatro veces, hasta que en 1956 se alejó para siempre. El centro en París tuvo también sucursales en otros países de Europa, América Latina y en India, además del American Committee for Cultural Freedom, que se disolvió en Nueva York en 1957, tras grandes pleitos internos entre “duros” y “blandos”.
El CLC acogió como directivos, participantes activos o simpatizantes a Igor Stravinsky, Benedetto Croce, T.S. Elliot, Karl Jaspers, André Malraux, Ignacio Silone, Jean Cocteau, Isaiah Berlin, Ezra Pound, Claude Debussy, Laurence Oliver, Salvador de Madariaga y muchos otros. El líder del CLC en Chile fue Jaime Castillo Velasco, ideólogo de la DC y valiente defensor de derechos humanos durante la dictadura.
Cuando el CLC se constituyó en Berlín, en 1950, la CIA pagó los gastos de 200 delegados y 4.000 asistentes recibidos por el alcalde Ernest Reuter, un ex comunista que conoció a Lenin. Entre otros acudieron Arthur Koestler, Arthur Schlesinger Jr. (después asesor de J.F. Kennedy), Sydney Hook (ex izquierdista radical), James T. Farrel, Tennessee Williams, el actor Robert Montgomery, David Lilienthal (jefe de la Comisión de Energía Atómica de
EE.UU.), Sol Levitas (editor de New Leader), George Schuyler (editor del Pittsburg Courier) y el periodista negro Max Yergan. La presencia de “gente de color” contrarrestaba las críticas europeas a la segregación racial.
También participaron los británicos Hugh Trevor-Roper (que resultó crítico y desde el principio sospechó la injerencia de la CIA), Julian Amery, A.J. Ayer, Herbert Read, Harold Davis, Christopher Hollis, Peter de Mendelssohn. Desde Francia llegaron Malraux, Jules Romain, Raymond Aron, David Rousset, Rèmy Roure, Ander Phillip, Claude Mauriac y George Altman. De Italia, Ignacio Silone, Guido Piovene, Altiero Spinelli, Franco Lombardi, Muzzio Mazzochi y Bonaventura Tecchi.
En el festival Berliner Festwochen, convocado en 1964 por el alcalde de Berlín, Willy Brand, el CLC financió la participación de Günther Grass, Jorge Luis Borges, Langston Hughes, Roger Caillois, Woly Soyinka, Cleant Brooks, Robie Macauley, Robert Penn, Warren James Merrill, John Thompson, Ted Hughes, Herbert Read, Peter Russel, Stephen Spender, Pierre Emmanuel, Derek Walcott y muchos más, entre ellos Keith Botsford, encargado de la CIA-CLC para América Latina.
La Fundación Fairfield fue la principal tapadera de la CIA para encubrir los gastos. En el rubro “Viajes y estudios” hubo una multitud de beneficiarios, entre otros Mary McCarthy, el pintor chileno Víctor Sánchez Orgaz, el poeta Derek Walcott, Patricia Blake, Margerita Buber-Neumann, Lionel Trilling y Alfred Sherman, colaborador de The Spectator.
Los líderes del Comité Americano fueron Hook, Irving Kristol -después ferviente partidario de Reagan- y Sol Stein, un trío de ex izquierdistas. Entre los “blandos” figuraron Schlesinger, Koestler, Reinhold Niebuhr, Henry Luce, dueño de Time-Life, James T. Farrel, Richard Rovere, de The New Yorker, Norman Thomas, ex presidente del Partido Socialista y candidato a la Casa Blanca en seis ocasiones, y Phillip Rahv, director de Partisan Review.
El CLC prefirió a intelectuales de Izquierda no comunistas o, al menos, a anticomunistas moderados tipo Bertrand Russell. Pero en Nueva York se impusieron los “duros”, como Lionel y Diana Trilling, y la conexión sionista de Jason Epstein, James Burnham, Arnold Beichmann, Peter Viereck, Clement Greenberg, Elliot Cohen, director de Commentary, y los izquierdistas Mark Rothko y Adolph Gottlieb. Pocos escritores y artistas de EEUU desoyeron los llamados del CLC, entre otros Arthur Miller, Norman Mailer, Erskine Caldwell, Upton Sinclair, Howard Fast, Ben Shahn, Ad Reinhart, Paul Robeson, George Padmore y John Steinbeck, quien después sucumbió, al final de su vida, apoyando la guerra en Vietnam.
LA CIA PAGÓ LA MÚSICA
EE.UU. estimó que la música calaba la mente y la sensibilidad europeas más rápido que otras artes. Por eso, el lavado de cerebro comenzó con grandes conciertos, organizados por el agente Nicolás Nabokov, un mediocre y frustrado compositor ruso -primo del autor de Lolita-, quien organizó conciertos
y festivales reclutando músicos alemanes, sin asco por su pasado nazi. Bien pagados, actuaron la Sinfónica de Boston y la soprano negra Leontine Pryce. Yehudi Menuhin, su maestro rumano Georges Enesco y los ex nazis Herbert Von Karajan y Wilhelm Furtwängler que recibieron becas y dinero.
Desde su primer festival musical de 1951, Nabokov consiguió obras o actuaciones de Igor Stravinsky, Aaron Copland, Samuel Barber, del New York City Ballet, la Boston Simphony Orchestra, James T. Farell, W.H. Auden, Gertrude Stein, Virgil Thompson, Allen Tate, Glenway Westcott, la participación del Museo de Arte Moderno de Nueva York y de muchos otros.
Tampoco negaron su colaboración Cocteau, Malraux, De Madariaga, Oliver, William Walton, Benjamin Britten, la Opera de Viena, la Opera del Covent Garden, la Trouppe Balanchine, Czeslaw Milosz, Ignacio Silone, Denis de Rougemont y Guido Piovene. El elenco de setenta artistas negros de la ópera Porgy and Bess hizo presentaciones por casi diez años. También actuaron Dizzy Gillespie, Marian Anderson, William Walfield, y multitud de artistas seleccionados por un comité secreto de presentaciones culturales coordinado con el Departamento de Estado.
PROMOCIÓN DEL LIBRO Y LA LECTURA
La CIA no descuidó los libros. Publicó millones de ejemplares además de lanzar tras “la cortina de hierro” miles de biblias. “Los libros son diferentes a todos los demás medios de propaganda -escribió uno de los jefes del Equipo de Acciones Encubiertas de la CIA-, fundamentalmente porque un solo libro puede cambiar de manera significativa las ideas y la actitud del lector hasta un grado que no se puede comparar con el efecto de los demás medios, (por lo que) la publicación de libros es el arma de propaganda estratégica (de largo alcance) más importante”.
“Hacer que se publiquen o distribuyan libros en el extranjero sin que aparezca la influencia de EE.UU., subvencionando de forma encubierta a las publicaciones extranjeras o a los libreros” fue un objetivo de la CIA. “Hacer que se publiquen libros que no estén ‘contaminados’ por ninguna vinculación pública con el gobierno de los EE.UU., especialmente si la situación del autor es “delicada”.
Cuatro cuartetos, de T.S. Elliot, fue arrojado como arroz sobre los países socialistas, mientras La tierra baldía se reproducía una y otra vez. Hubo versiones cinematográficas de los libros de George Orwell y se reprodujo Regreso de la URSS: el cero y el infinito, de André Gide y El libro blanco de la revolución húngara, de Melvin Lasky, un ex marxista que merodeó en el Cominform, la contraparte soviética del CLC. A fin de cuentas, los soviéticos no hicieron más que responder a lo que hacía la CIA.
También se publicaron títulos de Herbert Lüthy, Patricia Blake, Max Hayward, Leopoldo Labedz, Bertrand de Jouvenel, Nicolo Tucci, Luigi Berzini, Boris Pasternak, Nicolás Maquiavelo, André Gide, Louis Fischer, Richard Wright, y... Anton Chéjov, traducido y publicado por la Chekhov Publishing Co., editorial
subsidiada en secreto. La CIA también publicó a agentes de sus propias filas, como John Hunt, James Michener y William Buckley, a quien la agencia encomendó “que ayudase a otro intelectual, el marxista peruano Eudocio Ravines, a terminar su influyente libro El camino de Yenán.
El esfuerzo editorial CIA-CLC reprodujo también La nueva clase, de Milovan Djilas, un estudio sobre la nomenklatura, y otros textos “significativos” editados por Frederick A. Prager Inc. Los “intelectuales propios”, en tanto, publicaban artículos en todos los medios influidos o controlados por la CIA.
COMPAÑEROS DE VIAJE
La CIA llamaba “compañeros de viaje” a los amigos de los comunistas, pero también reclutó los suyos para el CLC, de preferencia intelectuales progresistas bien vacunados contra el virus del comunismo. William Donovan, uno de los fundadores de la CIA, se hizo amigo en Europa de Antoine de Saint-Exúpery y de Ernest Hemingway. Hemingway, sin embargo, jamás se interesó en el CLC y terminó siendo espiado por el FBI durante 25 años, hasta su muerte en 1961. Edgard J. Hoover supo cuando el Nobel se internó con nombre falso en una clínica de Minnesota para tratarse una depresión que lo condujo al suicidio.
Notorias compañeras de viaje del CLC-CIA fueron Hanna Arendt, ex pareja del filósofo alemán Martin Heidegger -quien no se llevó mal con los nazis-, y su íntima amiga, Mary McCarthy.
También se involucraron, participaron y/o beneficiaron otros notables como Alberto Moravia, quien asistió a un evento “cultural” armado por Nabokov en 1960 en la isla veneciana San Giorgio, junto con John Dos Passos, Julian Huxley, Mircea Eliade, Thornton Wilder, Guido Piovene, Herbert Read, Lionel Trilling, Robert Pen Warren, Stephen Spender, Isak Dinesen, Naum Gabo, Martha Graham, Robert Lowell, Robert Richman, Franco Venturi, Iris Murdoch, Daniel Bell, Armand Gaspard, Anthony Hartley, Richard Hoggart y el indio Jaya Praksash Narayan, entre muchos otros. La Fundación Ford fue la más relevante lavadora de dinero para actividades “culturales”, aunque la CIA también levantó tapaderas propias y seguras como la Fundación Farfield, cuyo “palo blanco” fue “Junkie” Fleischmann, folclórico millonario que terminó creyéndose “mecenas” a costa del dinero ajeno.
Además se usaron las fundaciones y/o fondos Andrew Hamilton, Bacon, Beacon, Borden Trust, Carnegie, Colt, Chase Manhattan, Edsel, Florence, Gotham, Hobby, Hoblitzelle, Kentfield, Josephine and Winfield Baird, J.M. Kaplan, Lucious N. Littauer, M.D. Anderson, Michigan, Rockefeller, Ronthelyn Charibable Trust, Shelter Rock, Price, etc.
El dinero circuló por una maraña de sociedades culturales en cuyos consejos se repetían los nombres de directores de fondos, fundaciones, bancos y hasta agentes de la CIA. La agencia adquirió maestría en evadir impuestos por sus “donaciones” encubiertas y dificultó las investigaciones que en los 60 haría el congresista Wright Patman y en los 80, el senador Frank Church.
LAS REVISTAS
Las revistas financiadas por el CLC-CIA dieron trabajo a una multitud de colaboradores mediocres y desconocidos. El plan era “poner a navegar en primera clase a figuras de segunda”, en compañía de intelectuales relevantes que sabían o no para quién trabajaban. La agencia de noticias Forum World Features y las radios Europa Libre y Liberty emplearon una multitud de periodistas e intelectuales. La primera revista fue Der Monat, fundada en Berlín en 1949, como un “puente ideológico” con los escritores europeos, dirigida por Lasky, del trío que forjó estas redes (con Nabokov y Joselsson).
Encounter llegó a ser la más importante, también dirigida por Lasky, gran censurador de los artículos críticos a EE.UU. de autores que de verdad creyeron estar haciendo “periodismo libre de opinión”. Preuves se fundó en París en 1951, como antagonista de Les Temps Modernes de Sartre y Simone de Beauvoir. Paris Review apareció en 1953, animada por George Plimpton y el agente de la CIA Peter Matthiessen: allí trabajó Frances Fitzgerald, hija del jefe de la CIA encargado de planificar el asesinato de Fidel Castro.
En Italia aparecieron Libertá della Cultura y Tiempo Presente (1956), animadas por Silone y Nicola Chiaromonte como desafío a Nuovi Argumenti (1954), de Alberto Moravia. Nuova Italia, dirigida por Michael Goodwin, sólo recibió subsidios. Otro grupo, en el que también estuvo Silone, animó en Londres Censorship (1964-67), que en 1972 reapareció como Index on Censorship, financiada esta vez por la Fundación Ford. El periódico izquierdista francés Franc-Tireur recibió subsidios del CLC cuando lo dirigía George Altman, al igual que el Figaro Littéraire. En lengua árabe apareció Hiwar, en 1962. Transition, en Uganda, 1968; Quadrant, en Australia -todavía existe-; Quest en la India, 1955; y Jiyu, en Japón. Hubo otras que integraron la vasta madeja, como Forum, National Review, Science and Freedom y Soviet Survey.
En EE.UU. hubo publicaciones propias y otras subsidiadas mediante compra de ejemplares que la CIA-CLC distribuía en Europa y el resto del mundo:
Partizan Review, Daedalus, Hudson, Kenyon, Poetry, Sewanee y The Journal of the History of Ideas. La CIA aportaba las plumas de Kostler, Chiaromonte, Mary McCarthy, Alfred Kazin y otros, por cuenta del American Committee. New Leader, a cargo de Levitas, recibía subsidios de Times Inc. a cambio de “información sobre tácticas y personalidades del comunismo en todo el mundo”.
LIBRO CON FINAL ABIERTO
Cuadernos fue lanzada en París en 1953 para penetrar el mundo intelectual de América Latina. Su primer director fue Julián Gorkin, dramaturgo y novelista hispano, co-fundador, en 1921, del Partido Comunista de Valencia, España, y ex activista del Cominform. Después que Cuba popularizó la revista Casa de las Américas, Cuadernos se transformó en los 60 en Mundo Nuevo, bajo la conducción del uruguayo Emir Rodríguez Monegal. Los grandes de la literatura regional, como el argentino Julio Cortázar, rehusaron publicar en sus páginas.
Ya no existe el CLC, pero la CIA no ha abandonado su misión. En 1996 lanzó en Madrid la revista Encuentro, dirigida por el cubano Jesús Díaz, con financiamiento de la Fundación Ford y del Fondo Nacional para la Democracia, “organización privada sin fines de lucro” creada en 1983 “para promover la democracia a través del mundo”. También financia en Venezuela a las organizaciones empresariales que conspiran contra el gobierno de Hugo Chávez.
“Siempre cabe la posibilidad de que un libro de ficción arroje alguna luz sobre las cosas que antes fueron contadas como hechos”, escribió Hemingway, en el prólogo de París era una fiesta. Saunders hizo lo contrario: relató hechos verídicos para desmontar una ficción que también atañe al presente. Una vez más, la realidad es superior a la ficción. Como el juego sucio no ha terminado, la historia tiene abierto el final.
El hispano Javier Ortiz se formuló una pregunta inevitable: “¿Qué profesionales españoles de la comunicación serán los que trabajan para la CIA? No me refiero a gente que lo esté haciendo sin conciencia de ello -que de ésos puede haber toneladas-, sino a los que lo hacen a sabiendas, porque están en nómina”. Las dudas de Ortiz son válidas en todo el planeta y para todas las profesiones vinculadas a la cultura.
Fuentes: La Haine / cubarte.cu
Tomado de Cubaperiodistas
*Ernesto Carmona Ulloa es escritor y periodista chileno, nacido en Temuco. Se formó como periodista en la escuela de Periodismo de la Universidad de Chile y es columnista de varias publicaciones de América Latina, EEUU y Europa.
Lic. Rosa Cristina Báez Valdés "La Polilla Cubana"
Moderadora Lista Cuba coraje, miembro de Red Social
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VI – OS RISCOS DA III GUERRA MUNDIAL
Um Mundo em Guerra
http://www.afamilia.org/futuro/leituras/um-mundo-em-guerra/imprimir
“Ouvireis de guerras e rumores de guerras. […] Levantar-se-á nação contra nação, e reino contra reino."
O mundo nunca viveu completamente livre do tormento da guerra, desde o passado mais remoto. Entretanto, em nenhum outro período de toda a História se testemunhou um número de guerras ou destruições maiores provocadas por conflitos armados, como nos últimos cem anos.
Até 1914, jamais havia sido travada uma guerra global, o que aconteceu na Primeira e na Segunda Guerra Mundial. Nesta, apenas 12 pequenos países não participaram militar ou tecnicamente nos conflitos que envolveram cerca de 93 milhões de pessoas que serviram nas forças armadas de ambos os lados. 25 milhões desses militares morreram. O número de vítimas civis foi sem precedentes: 20 milhões, só na antiga União Soviética. O jornal Washington Post publicou:
As guerras do século 20 têm sido “guerras totais” contra militares e civis. […] Em comparação, as guerras bárbaras dos séculos passados foram brigas de rua.^1^
Outros jornais e comentaristas têm discutido a carnificina causada pelos conflitos armados:
Desde o fim da Segunda Guerra Mundial, houve pelo menos 130 guerras, as quais causaram diretamente mais de 23 milhões de mortes, além das outras 20 milhões resultantes da escassez de alimentos e demais consequências dos conflitos. Enquanto a média anual de guerras de maior porte —com pelo menos mil mortos— travadas na década de 1950 foi cerca 12 e não passou de 20 nas de 1960 e 1970, superou a marca dos 30 no início dos anos 1980.^2^
Nos anos 1990, travaram-se 56 guerras em 44 países, na maior parte dos casos, foram revoltas civis pelo controle de governos ou de territórios.^3^
Em 2007, registraram-se 34 conflitos armados em todo o mundo.^4^ [“Gasto militar global atinge $1,2 trilhões” Compilado de artigos veiculados pela agência Reuters ou publicados na coluna semanal de David R. Francis, Christian Science Monitor "Panorama Econômico ", edição de 26 de março de 2007]
No século 20, morreram 110 milhões de pessoas por causa das guerras, o triplo das mortes registradas em todos os conflitos desde o primeiro século depois de Cristo até 1899. Cerca de 70% de todas das vítimas dessas lutas armadas desde a Segunda Guerra Mundial foram civis, um índice superado pelos 90% da década de 1990.^5^
Os inocentes têm pagado os preços mais elevados nas guerras, indicam as estatísticas. Somente entre os anos 1990 e 2000, 2 milhões de crianças foram mortas. Desde 1945, as guerras já produziram 35 milhões de refugiados.^6^
Desde que a Guerra contra o Terror foi declarada após 11 de setembro, até julho de 2007, estima-se que 832.962 pessoas foram mortas e 1.590.895 ficaram gravemente feridas no Afeganistão e no Iraque, considerados os dois principais palcos dessa guerra. Isso equivale a 16 vezes o número de mortos em ataques terroristas no mundo desde 1968.^7^ Segundo outros estudos, somente no Iraque, a guerra já matou 1,2 milhão de pessoas.^8^
O mundo esperava que a queda do Muro de Berlim em novembro de 1989 significasse não só o fim da Guerra Fria entre as superpotências, mas que também trouxesse uma nova era de paz global. Infelizmente, não foi o que aconteceu.
Faxina Étnica e Terror Tribal
A palavra grega usada originalmente para “nação” na profecia “levantar-se-á nação contra nação" é ethnos, cuja tradução mais precisa é “uma raça” ou “uma tribo”. Em outras palavras, Jesus estava dizendo que grupos étnicos se levantariam uns contra os outros, o que foi tragicamente cumprido em tempos recentes. O historiador Arthur Schlesinger (1917-2007), vencedor do Prêmio Pulitzer, advertiu: “O século 20 [foi] um século de guerras ideológicas: democracia contra fascismo, democracia contra comunismo. Mas o fim da Guerra Fria abriu espaço para antagonismos nacionais, raciais, étnicos e linguísticos em todo o mundo, os quais, havia tempo, estavam enterrados. […] O século 21 promete ser um período de guerras étnicas”9
A Associated Press (AP) informa que, ao longo do século 20, os homicídios perpetrados por nações contra o seu próprio povo excederam o número de mortes causado por guerras contra rivais fora das suas fronteiras. Levando em consideração, dentre outras atrocidades, os expurgos promovidos por Stalin, a Revolução Cultural de Mao, os “campos de matança” de Pol Pot, a chamada faxina étnica na Bósnia e os horrores perpetrados em Ruanda, chega-se a este assombroso veredicto:
Guerras à parte, o século 20 está banhado em sangue. Em todos os continentes, com exceção da América do Norte e Austrália, os governos assassinaram o povo que governavam aos milhares e aos milhões, para o que, muitas vezes, provocaram a inimizade entre vizinhos. Neste século mais civilizado, uma das estimativas aponta que a febre de assassinatos acabou com 170 milhões de vidas. […] Foi neste século [século 20] que o termo “genocídio” foi criado."^10^
De todos os conflitos armados em andamento hoje, 95% acontecem dentro de Estados.^11^ Dentre essas lutas, destaca-se o perene conflito entre palestinos e israelenses, que dura sessenta anos e já causou milhares de mortos e muitos mais feridos, além de milhões de refugiados, alguns dos quais desalojados há gerações.
Embora a perspectiva pareça sombria, o dia logo virá quando o próprio Deus intervirá neste mundo violento e a guerra será para sempre abolida. A Bíblia nos diz que, quando Cristo retornar à Terra, “Ele exercerá o Seu juízo entre as nações, e repreenderá a muitos povos. Estes converterão as suas espadas em arados e as suas lanças em podadeiras. Não levantará espada nação contra nação, nem aprenderão mais a guerra” (Isaías 2:4).
Mais adiante, voltaremos a falar sobre o futuro reino de paz mundial, mas, por enquanto, continuaremos a discutir as importantes realidades do presente.
Rússia neutraliza ataque dos EUA à Síria... Se essa notícia corresponde aos
fatos, e creio que correspondem, nos encontramos historicamente num
momento que significa um ponto de inflexão na geopolítica mundial, tal qual foi
o da derrocada do socialismo na URSS...
http://correiodobrasil.com.br/destaque-do-dia/ataque-dos-eua-a-siria-e-repelido-
pela-russia-no-mediterraneo/644809/
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NA SÍRIA, O BICHO PEGA
Jaime Sautchuk Entre o tropel dos camelos e a mira certeira dos lança-mísseis dos Estados Unidos, no caso da Síria, há uma boa carga de complicadores para o presidente Barack Obama. Mas, ironicamente, quem o está tirando da enrascada é seu adversário predileto, o presidente russo, Vladimir Putin. Na jornada de negociações realizada semana passada em Genebra (Suiça), um território tido como neutro, chegou-se até aqui a um acordo cuja pauta foi colocada na mesa pelo chefe da diplomacia russa, o chanceler Sergei Lavrov. E este, parece claro, acertou os bigodes com o governo sírio antes de propor o ajuste. Ficou acertado que a Síria entregará até 21 de setembro próximo a lista dos
locais onde armazena armas químicas. Os sítios serão vistoriados por inspetores da Organização das Nações Unidas (ONU) até meados de novembro vindouro. Confirmada a existência e os locais, os artefatos serão destruídos pela ONU até fins de 2014. A proximidade com a Rússia é o que abre caminhos pra conversas. Afinal, a Síria hospeda a única base militar russa em território estrangeiro, o que é um exemplo do nível dessas relações entre os dois países. Essa afinidade, aliás, vem desde a antiga União Soviética, que apoiou os sírios após a criação do estado de Israel, especialmente na Guerra dos Seis Dias, em 1967, quando tropas e bombardeiros israelenses tiraram da Síria as Colinas de Golan. Além do mais, a Síria não é uma republiqueta qualquer, onde a invasão de tropas ou mesmo bombas lançadas à distância passem batido, como se nada ocorresse. Trata-se de um país com 22 milhões de habitantes, que tem uma economia diversificada, com parque industrial, agropecuária e infraestrutura turística modernas. Damasco, a capital, é uma espécie de Brasília, ou seja, uma cidade voltada para sediar o governo e oferecer serviços, como o turismo, com 2,7 milhões de habitantes. A São Paulo de lá seria Aleppo, que controla a atividade econômica e é também o centro urbano mais populoso, com 3,2 milhões de habitantes. A localização estratégica do país é outro aspecto levado em conta. Seu litoral é o belicoso mar Mediterrâneo. E faz fronteira terrestre com outros cinco países: Israel, Turquia, Iraque, Jordânia e Líbano. Qualquer conflito armado, ali, tem repercussão em toda a região. Um ataque externo pode, desde logo, envolver gravemente Israel. As forças armadas, bem equipadas, estão sob controle do Baath, o partido do presidente Bashar al-Assad, que está no poder desde o ano 2000, quando morreu seu pai, Hafez al-Assad. Este governou o país desde 1970, quando pôs fim a um suceder de golpes militares e conflitos internos. Seu governo manteve uma postura laica, autônoma, e chegou a apoiar os EUA na dramática invasão do Iraque, em 1991. Não nos esqueçamos de que algumas fronteiras nacionais no Oriente Médio são bastante artificiais, já que guardam as distorções de partilhas feitas durante o domínio colonial, em especial da Grã-Bretanha e da França, até a 2ª Guerra Mundial. A Palestina, embora reconhecida como estado autônomo pela ONU, tem um território esfacelado. Os atuais conflitos internos na Síria envolvem diferentes facções, sendo que as forças de oposição a al-Assad têm muitas divergências entre si, de modo que não se pode sequer apontar um comando político com o qual se possa negociar. Quem arma esses grupos é uma informação que o presidente Obama poderia dar ao mundo. No momento, a possibilidade de os EUA atacarem o país responde a pressões da sua indústria de armamentos, como denunciou o Papa Francisco em recentes pronunciamentos no Vaticano. É um setor com enorme força política, que financia campanhas eleitorais, mas precisa de guerras pra manter seus bombásticos lucros. Ocorre, contudo, que o mundo vive um momento diferente, sob o impulso de movimentos populares que se espraiam por todos os quadrantes. Obama já percebeu que uma ação unilateral não terá apoio internacional, pois a maioria dos blocos e países consultados, inclusive o Brasil, é contra ação unilateral.
Mas o pior, pra ele, é a oposição interna, já que o próprio congresso dos EUA promete lhe negar uma carta branca, que se tornou imperiosa. Segue, em verdade, pesquisas de opinião pública que revelam desaprovação da sociedade americana a um possível ataque sem o beneplácito da ONU. Uma nova guerra, agora, seria um desastre pros EUA. Especialmente no caso da Síria, onde o bicho pode pegar. Portanto, a proposta russa de obter uma clara promessa síria de destruir armas químicas que o país possua é o que dá argumentos ao recuo de Obama. Até porque o mesmo compromisso não está sendo cobrado de aliados seus naquela região, como Israel e Arábia Saudita. js-15set13
Ataque dos EUA à Síria é repelido pela Rússia no Mediterrâneo - CdB
correiodobrasil.com.br
O ataque dos EUA à Síria já começou e já acabou, segundo fonte ouvida, nesta sexta-feira, por jornalistas no Oriente Médio.
Terceira guerra mundial em marcha
Conselho Editorial Sul-Americano em 25/01/2012
O oculto e o latente não conseguiram se disfarçar no discurso do
presidente Barack Obama nessa terça feira 24, ou seja, a disposição do
governo americano de barrar o avanço da moeda chinesa, o yuan, que
ameaça o dólar, abalado pela crise financeira internacional, detonada
pelos próprios Estados Unidos. O titular da Casa Branca se dispõe, com
todo o arsenal armamentístico atômico do império americano a impedir
que o Irã e o Oriente Médio, nesse momento, avancem em negociações
com os chineses, trocando mercadorias da China pelo petróleo dos
árabes, envolvendo o yuan em lugar do dólar. Assim, a disposição de
confrontar o Irã não tem por motivação essencial a vontade soberana do
governo Ahmadinejad de construir armas nucleares, algo que já se
tornou possível pela humanidade, sem maiores mistérios, diante dos
avanços científicos e tecnológicias disponíveis. A posição radical
americana que tende a avançar é no sentido de buscar a defesa da
expressão maior do poder do império americano , o dólar, que os árabes
começam a desdenhar, em face da crescente fragilidade dele nas
relações de trocas globais, decorrente da crise mundial, produzida pelo
excesso de oferta da moeda americana, no plano especulativo, dado
pela supressão da regulamentação do mercado financeiro dos Estados
Unidos como estratégia de reprodução ampliada do capitalismo
financeiro, em estresse total depois da crise de 2008. A moeda papel
que substituiu o padrão ouro, levado de roldão pela crise de 29,
responsável por jogar o mundo na segunda guerra mundial, entra em
bancarrota, sinalizando perigo da terceira guerra, porque,
evidentemente, o império americano tentará de todas as formas manter
as aparências de que continua com o poder total, quando a prática
demonstra estar ele sustentado em alicerçes cada vez mais fragilizados.
O grito de Obama de que o império está forte é a expressão cabal de
que ocorre o inverso, pois, afinal, como destaca Freud, as palavras
servem para esconder o pensamento. Mas, quem ainda se engana com
o dólar em colapso por conta do excessivo endividamento que fragiliza
Tio Sam?
A crise de 1929 levou o mundo à segunda guerra mundial. A crise de 2008,
mais poderosa que o crash dos anos de 1930, levará ele à terceira? Como
demonstram as crises do capitalismo, os movimentos começam de cima para
baixo, a partir dos paises ricos, simplesmente, porque elas, invariavelmente,
são iniciadas neles, no estouro das contradições que buscam suas superações,
detonando-as, impondo mudanças quantitativas e qualitativas inevitáveis,
quanto mais são bloqueadas a reprodução ampliada de capital. Por exemplo:
no plano da moeda, a crise de 1929 abriu espaço para o rompimento do padrão
ouro, vigente no século 19, durante o qual reinou a libra esterlina inglesa,
afinal, detonada pela deflação, no início do século 20. Vigorou, no século
passado, o reinado do dólar, justamente, porque, com o fim do ouro como
mediador das relações de troca, entrou em cena o governo emissor de papel
moeda, para puxar a demanda global, num ambiente em que os vencedores
dos conflitos, saindo deles todos poderosos, foram os Estados Unidos. E,
agora, na crise de 2008, passado mais de meio século de dominação do dólar,
na cena internacional, o que se vê? O esgotamento da moeda americana, no
sentido de continuar mantendo a hegemonia econômico-financeira dos Estados
Unidos, devido, claro, ao esgotamento das finanças do império, visto que não
pode mais continuar se endividando por meio da continuidade, sem fim, da
emissão de papel moeda, sem lastro, que deixou de merecer a confiança
internacional, como outrora. O perigo, portanto, é o mesmo que sinalizou a
segunda guerra. A derrocada das moedas dos impérios é parteira dos conflitos
globais. De posse do poder imperial de emitir, os Estados Unidos, seguindo os
conselhos dos estrategistas econômicos conscientes de que os gastos do
governo em guerra seriam a solução, construíram o todo poderoso estado
industrial militar norte-americano. A partir dele, a economia ganhou fôlego, para
puxar a demanda global, ao mesmo tempo em que a capacidade de emitir
moeda sem lastro real garantiu aos americanos poder ilimitado, somente,
contido, evidentemente, pelo esgotamento da capacidade de endividar, que foi
o sinal claro dado pela crise de 2008, como resultado das decisões do poder
imperial, nos anos anteriores, de eliminar toda a regulamentação prudencial ao
mercado financeiro dos Estados Unidos, conferindo a ele poder de ampliar
suas ações em todas as partes do mundo.
Yuan desloca o dólar na crise
Os chineses, que não acreditam mais na potencialidade do dólar,
ameaçado pela crise mundial, buscam valorizar sua moeda, o yuan,
acertando acordos comerciais com os árabes e com o Irã, para trocar
mercadorias chinesas pelo petróleo passando ao lado das verdinhas de
Tio Sam. Detentores de reservas cambiais na casa dos 3 trilhões de
dólares, os chineses podem manobrar seu poderio cambial no mundo,
jogando para cima e para baixo a cotação da moeda americana, na
medida em que elevam ou diminuem a oferta dela, em escala global, ao
mesmo tempo em que com as trocas comerciais firmes, acertadas em
yuan, com seus parceiros, fortalece, relativamente, o poderio chinês na
cena internacional. Ou seja, lenta e gradualmente, a China vai minando
o poder imperial da moeda americana, enquanto, internamente, nos
Estados Unidos, a saúde das finanças da economia americana vão
sendo esvaziadas pela própria divisão política interna entre republicanos
e democratas, em torno de providências macroeconômicas capazes de
sustentar a potencialidade econômica do império, abalado pela
incapacidade de concorrer com os produtos chineses, japoneses e sul-
coreanos, agora, dispostos, para horror da Casa Branca, em partirem
para uma união comercial asiática pautada pelas moedas dos três
países. Estes, por sua vez, necessitados do petróleo do Irã, fortalecem a
disposição da China de intensificar o comércio com o Oriente Médio,
passando ao largo das relações de trocas tendo a moeda ameicana
como equivalente geral, progressivamente, esvaziado. Eis os reais
codimentos explosivos que preparam a terceira guerra mundial.
A capacidade dos Estados Unidos de se endividarem chegou ao limite, a partir
das contradições que implodiram dentro do próprio sistema político dos
Estados Unidos, com os republicanos entrando em campo para conter o poder
dos democratas por intermédio do cerceamento da ação governamental no
sentido de continuar expandindo o endividamento do governo, cujo eventual
estouro financeiro provocaria, evidentemente, hiperinflação exponencial. A
descrença na moeda dos Estados Unidos se estabelece, portanto, na medida
em que as divisões políticas internas se acentuam, ampliando as posições
radicalizadas da direita americana, manifestando, sem meias palavras,
posicionamentos políticos fascistas. O resultado das divisões internas, que
fazem explodir as contradições inerentes ao sistema econômico ancorado em
moeda que paulatinamente vai deixando de ser acreditada em sua capacidade
de gerir as trocas comerciais, expressa-se, por sua vez, em desenvolvimento
de estratégias econômicas dos aliados, concorrentes e adversários dos
Estados Unidos, todos em busca de alternativas salvacionistas. Da parte dos
aliados, vê-se a Europa atolada em situação que se desenvolveu a partir da
expansão da desregulamentação do mercado financeiro americano cujos
tentáculos alcançaram os países europeus, ampliando a ação dos derivativos
dolarizados tóxicos, largamente produzidos pela expansão da bolha imobiliária
nos Estados Unidos. Inicialmente, expandida, sem limite, até estourar, tal bolha
especulativa teve seu corresponde na Europa, especialmente, nos emergentes.
Estes seguiram a onda, até, também, estourarem. Os bancos americanos
financiaram bancos europeus que passaram dinheiro aos governos que
emprestaram ao mercado, puxando uma corrente da felicidade, cujos
resultados estão à mostra, ou seja, a prostração econômica européia. Por essa
razão, os europeus estão mais do que nunca desconfiados do dólar, que
bichou geral o euro, colocando em risco total a união monetária continental. Se
da parte dos aliados dos Estados Unidos, como os europeus, a disposição de
fugirem do dólar é crescente, o mesmo, em escala, igualmente, ascendente
ocorre relativamente aos concorrentes da economia americana, com destaque
para os chineses.
Parceiros desconfiados entre si
Depois de detonarem a Líbia, incensados pelo governo americano,
interessado no petróleo líbio, os líderes europeus, igualmente, de olho
naquele ouro negro, aliados desconfiados de Obama, ameaçam o Irã,
agora, com as forças da OTAN, para que os iranianos sejam impedidos
de levar adiante o comércio do petróleo com a China, pautado pelo yuan
e não mais pelo dólar. O problema é que a Europa se encontra em
enrrascada econômico-financeira justamente por conta da política
monetária dos Estados Unidos. A expansão ilimitada de dólares pelo
Banco Central dos Estados Unidos, responsável por detonar o mercado
imobiliário americano e produzir a crise de 2008, atingiu, em cheio o
euro, levando a moeda européia, igualmente, à bancarrota, afetada
pelos efeitos contagiantes intoxicantes letais dos derivativos dolarizados,
responsáveis por colocar em risco tanto o sistema financeiro como os
governos europeus, agora, envolvidos nos perigos inafastáveis das
recessões econômicas, tendentes a se prolongarem pelos próximos dez
anos. Como os europeus confiarão num parceiro dessa natureza,
responsáveis por levarem eles ao colapso? Ao mesmo tempo, a Europa
mira a China como possível saída salvacionista, como já se cogita de os
chineses comprarem dívidas dos europeus, reciclando-as, em troca de
ativos, de modo a reanimar a economia européia, amenizando os
perigos da recessão. Se os europeus seguirem cegamente Washington,
detonando o Irã, que fornece petróleo para a China, Japão e Coreia do
Sul, motivados a ser unirem em torno de um mercado livre que dispense
a utilização do dólar, a fidelidade canina da Europa relativamente aos
Estados Unidos poderá ser abalada, por chifradas inevitáveis, dadas
pela realplitik mundial. Por que ficar ao lado do dólar, se o seu poder nas
relações de troca passa a ser mal negócio para os parceiros, visto que
seu resultado tende a ser pressões inflacionárias inevitáveis no
compasso da guerra cambial em curso?
Abarrotada de moeda americana em seus cofres, acumulada nos anos de
bonança do mercado consumidor dos Estados Unidos, antes do estouro da
crise de 2008, a China, agora, busca fugir do dólar, fechando negócios com os
parceiros em moeda própria, o yuan. O acerto que o presidente chinês, Hu Jin
Tao acaba de fazer comos árabes, de trocar petróleo por moeda e mercadorias
chinesas, desloca a moeda americana na área dos petrodólares. O que,
realmente, está por trás da disposição do governo dos Estados Unidos de
detonarem o governo do Irã não é outra coisa senão a decisão dos aiatolás de
comerciarem com os chineses ao largo do dólar, trocando, como começou a
fazer a Arábia Saudita, petróleo por yuan. O discurso da União de Obama, já
em campanha eleitoral, dando o recado de que fará tudo para evitar que o Irã
consiga desenvolver armas nucleares, tem tudo para ser mera cortina de
fumaça. O que o titular da Casa Branca teme, na verdade, é a bancarrota total
da expressão do poder imperial, isto é, a moeda, o dólar, que, graças ao
excessivo endividamento dos Estados Unidos, vai perdendo o poder de
determinar, em favor dos americanos, a deterioração nos termos de troca, dado
pelo poderio cambial das verdinhas. Estas passaram a encardir no bolso dos
seus detentores, depois do estouro da crise de 2008, da mesma forma que o
estouro da crise de 29 soou o fim da hegemonia da libra esterlina inglesa. O
império, ou seja, o dólar, está ferido e ruge, criando argumentos diversionistas
para confundir. Na prática, o que o imperialismo americano, sob comando de
Obama, orientado pelos falcões do Pentágono, desejam é barrar as vendas de
petróleo do Oriente Médio para os chineses, colocando em risco o
abastecimento de energia para o maior adversário comercial e industrial dos
Estados Unidos. Para alcançar esse objetivo, tem que detonar os aliados dos
chineses que lhe fornecem essa energia, o Irã, principalmente. Entra nessa
geopolítica de guerra a Síria, aliada do Irã. Destruir o governo sírio, amigo dos
aiatolás, representa criar estado de guerra geral no Oriente Médio, para
obstruir o avanço do comércio Irã-China, pautado em yuan e não em dólar.
Nada mais temido e indesejado pelos americanos.
América do Sul busca união
Brasil e Venezuela, os dois maiores produtores de petróleo da América
do Sul, que, juntos, representam a maior produção mundial do ouro
negro, colocam suas barbas de molho diante do avanço do espírito
guerreiro de Washington, na tentativa de impedir o progresso comercial
do Irã com os chineses e asiáticos em geral, em detrimento da moeda
americana. Reunidos nessa terça feira em Caracas, o presidente Hugo
Chavez e o ministro da Defesa do Brasil, Celso Amorim, discutirem os
rumos da crise internacional e as estratégias de defesa conjunta a ser
desenvolvidas pelos dois países, visto que ambos, estrategicamente,
podem se transformar no fiel da balança, no plano global, se a guerra
estourar entre Estados Unidos e China, a partir do Oriente Médio, que
pega fogo, com a disposição dos governos da Síria, do Irã e da Arábia
Saudita de intensificarem comercialização do seu petróleo com os
chineses, sem utilização do dólar como equivalente monetário das
relações comerciais, colocando, realmente, em risco o império
americano, cuja moeda perde credibilidade, no compasso do aumento
do endividamento público dos Estados Unidos, sob desconfiança
generalizada do mercado financeiro global. Chegou a hora de acelerar a
união sul-americana, quando todas as forças da guerra colocam suas
unhas de fora, sinalizando que Estados Unidos e China, as duas
maiores potencias mundiais, se estranham em escala crescente, no
compasso da guerra cambial total.
Os chineses assustam demasiadamente a Casa Branca. A disposição em
marcha na Ásia de construção de um mercado livre, envolvendo China-Japão-
Coréia do Sul, com o compromisso de que as relações comerciais sejam
pautadas por moedas locais, sem utilização do dólar, no qual ninguém mais
confia, acendeu o sinal vermelho que leva o Pentágono à aceleração de
procedimentos guerreiros no Oriente Médio, abastecedor de petróleo, tanto da
China, como da Coréia e do Japão. Os asiáticos, sem o petróleo dos árabes,
que já acertam com os chineses trocas comerciais em yuan e não em dólar,
entrariam em crise total, pois não dispõem de fontes energéticas sustentáveis
capazes de tocarem seus colossos industriais que estão ganhando os
mercados consumidores do mundo, colocadando em segundo ou terceiro plano
as mercadorias americanas. Os avanços do yuan prosseguem em todas as
partes do mundo. Não estaria fora de propósito que eles se deem, até mesmo,
com os europeus. Em crise total, a Europa não dispensaria o apoio financeiro
do colosso asiático, se a China resolvesse, para valer, comprar parte da dívida
européia com os dólares americanos que dispõe em caixa, alavancando, em
seguida, trocas comerciais pautadas, totalmente, não mais entre euro e dólar,
mas uma parte em dólar outra em yuan, como já se cogita e se realiza em
outras dimensões. Os europeus estão vulneráveis, justamente, porque foram
detonados pelo dólar, cuja expansão, sem limites, por conta da
desregulamentação financeira americana, acabou por bichar a moeda européia
e, por tabela, comprometendo a união monetária da Europa. No momento, os
chanceleres europeus, como aconteceu, no início dessa semana, anunciam
crescentes embargos ao Irã, algo que prejudicaria os interesses chineses, mas
até que ponto a Europa avançaria contra os interesses da China, se esta se
dispor a adquirir ativos europeus, para erguer a economia do velho continente,
abalada, especialmente, pela expansão da moeda americana, que
comprometeu a saúde da moeda européia? Da mesma forma, a estratégia
chinesa, de trocar mercadorias produzidas na China por petróleo onde este
existe em abundancia prossegue por todas as partes. Por exemplo, na América
do Sul. Argentina e Venezuela já ensaiam ações comerciais nesse sentido,
assustando, sobremaneira, os americanos. Os governos brasileiro e
venezuelano se reunem para discutir ações comuns, no plano da segurança da
América do Sul, em face das incertezas crescentes que ameaçam a paz
mundial, com a disposição do governo americano de ir à guerra contra o Irã, na
tentativa de obstaculizar o avanço da moeda chinesa frente ao dólar. Por essas
e outras razões, não está fora de cogitação, a partir de agora, no calor do
espírito guerreiro em marcha, em Washington, maiores pressões da Casa
Branca sobre o pré-sal brasileiro, por parte de multinacionais americanas,
forçando realização de leilões, de modo que elas possam ampliar participação
na riqueza nacional, como antídoto ao que está ocorrendo no Oriente Médio,
antes que a China comece negociações com o Governo Dilma, na mesma linha
em que abre relativamente aos árabes, aos iranianos e aos venezuelanos. A
onda nacionalista em torno do pré-sal, por essas e outras, tenderia a crescer,
no ambiente de sinaliza terceira guerra mundial.
III GUERRA ?
Arnaldo Mourthé
07 ago 2013
Papa Francisco, durante o Angelus de ontem, 7 de setembro de 2013: “Rezemos a fim de que, sobretudo na Síria, cessem imediatamente a violência e a devastação"... "Para
que serve fazer guerras, tantas guerras, se não se é capaz de fazer essa guerra profunda contra o mal? Não serve para nada. Não está bem”.
Prezadas (os) amigas (os),
Há poucos dias enviei-lhes um vídeo. Nele uma senhora americana extravasa sua revolta, denunciando que Obama mente para justificar sua guerra contra a Síria.
Um dos meus amigos disse: “achei os argumentos da senhora americana fracos. Aliás, nem argumentos são, mas uma peroração abstrata.” Ele não entendeu que a
senhora falou com o coração, foi uma manifestação radical de sentimento. A expressão que mais ela destacou foi a de saturação: “eu estou cheia de mentiras...
você não está?” Meu amigo caiu na armadilha da falsa razão: a lógica aplicada sobre falsas informações.
Para ele não se decepcionar estou enviando-lhe, e também para vocês outros amigos, o vídeo abaixo com as racionalidades que ele não encontrou no outro.
Este novo é também contundente e perfeitamente verdadeiro. Eu o testemunho, porque todas as denúncias que estão nele estão também no meu livro História e
Colapso da Civilização, neste distribuídas no contexto histórico da primeira guerra mundial até nossos dias.
Veja o vídeo. Você ocupará alguns minutos para obter informações que poderá salvar milhões de vidas e o futuro dos seus. Que tenhamos consciência na necessidade de
nossa participação para alcançarmos um mundo de paz.
http://www.youtube.com/watch?v=dz8_R99xUYI
Se você não recebeu o primeiro vídeo, acesse o link abaixo:
http://www.youtube.com/watch?feature=player_detailpage&v=W6DHwyavri0
Que todos nós façamos nossa reflexão sobre a guerra e sobre a paz. Afinal não somos obrigados a viver apenas na iniquidade. Paz e fraternidade é muito melhor.
====================
Veja o vídeo. Você ocupará alguns minutos para obter informações que poderá salvar milhões de vidas e o futuro dos seus. Que tenhamos consciência na necessidade de nossa participação para alcançarmos um mundo de paz.
http://www.youtube.com/watch?v=dz8_R99xUYI
EUA arrastam o mundo à guerra
Paul Craig Roberts – http://goo.gl/A8AmkE = 26/4/2014,
Paul Craig Roberts foi Secretrário Adjunto do Tesouro no governo de Richard
Reagan e Nixon, é professor em universidades americanas, escritor e
jornalista.
O regime Obama, chafurdando em húbris e arrogância, escalou
temerariamente a crise ucraniana e fez dela uma crise com a Rússia.
Intencionalmente, ou por estupidez, as mentiras de propaganda de Washington
estão agora fazendo da crise, guerra. Cansada de ouvir as ameaças
tresloucadas de Washington, Moscou já nem atende telefonemas de Obama e
dos principais funcionários dos EUA.
>
> A crise na Ucrânia começou quando Washington derrubou o governo
democrático eleito e o substituiu por idiotas escolhidos a dedo por Washington.
Os idiotas puseram-se a atacar, com palavras e à bala, as populações de ex-
territórios soviéticos que líderes comunistas soviéticos anexaram à Ucrânia.
Consequência dessa política de doidos, é a agitação da população que fala
russo, e que escolheu voltar a ser parte da Federação Russa. A Crimeia já se
uniu à Rússia. Agora, o leste da Ucrânia e outras partes do sul da Ucrânia
provavelmente também se unirão à Rússia.
> Em vez de ver seus próprios erros, o regime Obama estimulou os idiotas que
Washington instalou em Kiev a usar de violência contra as áreas onde vivem
falantes de russo, que querem organizar referendos, para que possam votar e
aprovar a reintegração das áreas em que vivem, à Rússia. O regime Obama
encorajou os idiotas a usarem de violência, apesar da clara declaração do
presidente Putin, de que nenhuma força militar russa jamais ocuparia a
Ucrânia, a menos que os manifestantes ucranianos que se opunham ao
governo dos idiotas em Kiev fossem vítimas de violência.
> A única conclusão possível é que ou Washington nada ouve do que lhe
digam, ou, então, que Washington deseja violência.
> Se nem Washington nem a OTAN estão posicionadas dessa vez para mover
força militar significativa para a Ucrânia, suficientes para confrontar o Exército
Russo, por que o regime Obama tanto se esforça para provocar a ação dos
militares russos?
> Uma possível resposta é que, agora que o plano de Washington de expulsar
a Rússia de sua base naval no Mar Vermelho foi derrotado, Washington abraça
o plano de sacrificar a Ucrânia a uma invasão russa, para que Washington
ponha-se a demonizar a Rússia e force vasto aumento nos gastos militares e
no orçamento da OTAN e deslocamento de tropas da OTAN.
>
> Em outras palavras, o negócio é uma nova guerra fria e mais milhões de
dólares em lucros para o complexo militar/de segurança de Washington.
>
> A meia dúzia de soldados e aviões que Washington mandou para “garantir”
os regimes incompetentes naqueles pontos perenes de problemas para o
Ocidente – Polônia e países do Báltico – e os navios armados com mísseis
enviados para o Mar Negro são nada. São só provocação simbólica.
>
> Sanções econômicas aplicadas a funcionários e milionários russos só fazem
comprovar a impotência de Washington. Sanções reais feririam os estados da
OTAN, fantoches de Washington, muito mais do que feririam a Rússia.
>
> É claro que Washington não tem qualquer intenção de acertar coisa alguma
com o governo russo. As ‘exigências’ de Washington foram ‘impostas’, porque
não são aceitáveis. Washington está ‘exigindo’ que o governo russo puxe o
tapete debaixo dos pés dos manifestantes pacíficos no leste e no sul da
Ucrânia e force populações russas na Ucrânia a submeterem-se aos idiotas de
Washington em Kiev. Washington também ‘exige’ que a Rússia renegue a
reunificação da Crimeia e devolva a Crimeia a Washington, para que
Washington consiga, assim, completar o projeto de expulsar a Rússia de sua
base no Mar Negro.
>
> Em outras palavras, Washington quer que a Rússia cole outra vez os cacos
que resultaram da loucura de Washington na Crimeia e entregue a coisa,
recomposta, a Washington.
>
> É ‘exigência’ tão irrealista, tão alucinada, que ultrapassa qualquer arrogância.
O Doido da Casa Branca está dizendo a Putin: “Me danei, quando tentei invadir
seu quintal. Ordeno que você, agora, invada o seu quintal e me dê o seu
quintal, para que eu me safe com uma boa “ameaça estratégica” que me
permita expulsar você do seu quintal.”
>
> A imprensa-empresa prostituta, a press-tituta mídia ocidental e os estados-
fantoches de Washington na Europa estão apoiando essa ‘exigência’
alucinada. Consequentemente, os líderes russos perderam qualquer confiança
que tivessem nas palavras e nas intenções do ocidente, e é assim que
começam as guerras.
>
> Governos europeus estão pondo os próprios países em grave risco. E para
ganharem o quê? Os líderes europeus são chantageados, ameaçados,
subornados com sacos de dinheiro? Ou estão tão viciados em seguir o
comando de Washington que só sabem fazer isso, obedecer Washington? O
que Alemanha, Grã-Bretanha e França teriam a ganhar, por deixar que
Washington os empurre a um confronto com a Rússia?
>
> A arrogância de Washington é coisa jamais vista e pode arrastar o mundo à
destruição. Que fim levou o senso de autopreservação da Europa? Por que a
Europa não emite mandados de prisão contra todos os membros do governo
Obama? Sem a cobertura que lhe dão a Europa e a imprensa-empresa press-
tituta, Washington não conseguiria arrastar o mundo à guerra. *****
S U N D A Y , J U N E 1 5 , 2 0 1 4
A scorecard for the US "lukewarm war" on Russia - strategic and tactical levels
First, I have to explain the title: "A scorecard for US war on Russia": what we
are witnessing today is beyond any doubt a US war on Russia, except that it
that is is neither quite "cold" nor "hot": it's tepid, lukewarm. Not for the people
dying of course, but by it's choice of methods. It is not a Cold War because
people are dying, because tanks, artillery and airpower is being used on a daily
basis now, but it is not a Hot War either, because while people in the Ukraine
are being killed, the real target of this war is, of course, Russia. In other words,
this is not a Russian-Ukrainian war, nor is it a US-Ukrainian war, it is a US-
Russian war, fought in the Ukraine with "Hot War" methods, but whose real
target are not the murdered people in the Ukraine but Russia as a country and a
civilizational project. I think that it is crucial to state that to make a correct
analysis of what is going on.
STRATEGIC LEVEL ANALYSIS
The USA has no special interests in the Ukraine at all. The only reason why
Uncle Sam got so heavily involved is the (totally mistaken) belief - expressed by
Zbigniew Brzezinski and Hillary Clinton - that "without the Ukraine Russia
cannot be a superpower" and that "Putin is trying to recreate the Soviet Union".
Since a reborn USSR would be the single major threat to the US domination of
the planet, the US shall spare no effort into making sure that the Ukraine not
only breaks away from Russia, but turns into a US colonial protectorate like
Poland or Lithuania: rabidly anti-Russian, administered by the EU and
controlled by NATO. Of course, the "prize of prizes" would have been Crimea
with Sevastopol as a base for the USN and a fantastic "unsinkable carrier" to
project US subversive efforts throughout southern Russia, the Caucasus and
even the Middle- East. Alas, Putin's lightening fast action in Crimea completely
foiled this part of the plan: instead of getting the entire Ukraine including its
crown jewel, Crimea, the AngloZionists were left in full control of West-Central
Ukraine (aka "Banderastan") and an uprising in East-Central Ukraine (aka
"Novorossia). However, Uncle Sam also walked away with some real
successes: not only was the democratically elected President Yanukovich
"regime-changed", the secession of Crimea and the uprising in the Donbass
made the "more or less election" of a pro-US puppet like Poroshenko finally
possible. So far so good, but remember, this is not about the Ukraine at all,
this is about Russia and only Russia. So the relevant question is not whether
the US succeeded in putting a puppet regime in power, but what good it does to
the AngloZionist Empire to have Poroshenko in power in Kiev. The answer to
that is, of course, very little, if any.
Again, to understand the US position you have to stop thinking like a rational
and mentally sane person, and try to think like an imperialistic maniac hell-bent
on world domination who sincerely sees Russia at the #1 obstacle to the
realization of this goal. Such a maniac will ask himself a basic question: how
much, if at all, is Russia weakened by the current situation in the Ukraine? And,
again, the obvious answer is only marginally. Here is how a hypothetical US
"1% deep-stater" will think about Russia's current position:
They got Crimea, so all our hopes about the Black Sea region, the Caucasus
and the Middle-East are gone. In fact, now that Crimea is fully Russia, it is the
Russian position in the Black Sea region, the Caucasus and even the Middle-
East which has become stronger, much stronger in fact. Worse, by chopping
off the Crimea from the rest of the Ukraine, the Russikies have not only created
a very dangerous precedent, they have deeply destabilized the richest and best
educated part of the Ukraine - the Donbass - leaving us with the a poor,
phenomenally corrupt basically broke "Banderastan" to run. Worse, if we did
not have our various CIA run death-squads ("Maindanites", "Right Sector",
"National Guard", "soccer hooligans", etc.) then Poroshenko would probably last
less than 1 month in power anyway, especially with the accursed Russikes
about to turn off the gas spigot if the Ukies don't come up with a payment plan
they cannot afford anyway. The only thing our symbolic pseudo-sanctions
against Russia have achieved so far was to push the Russkies to do what they
should have done a decade ago: to lower their dependence on the US-
controlled banking system, to sever their ties with the Ukie military-industrial
complex and to push the Russian business community towards seeking
stronger ties with Asia.
The bottom line is that at least so far the AngloZionist Empire has failed to
secure any strategic objective. Russia is as powerful as ever, arguably even
more powerful than before the crisis began.
What about the association agreement with the EU then? It means nothing to
the Americans. All that agreement would really achieve would be to further
impoverish the rump-Ukraine and create a bloody mess for the EU. Yes, for
Russia this would mean maybe two to three years of minor headaches (dealing
with illegal immigrants, finding new suppliers, etc.) but nothing truly meaningful.
And since it was the EU the broke the Ukraine, they now own it, but then since it
is the US which own the EU to begin with, you might as well say that the US
now owns what is left of the Ukraine. Hardly a coveted prize...
There is only one way for the AngloZionists to turn defeat into victory and
that way is most obviously to pull Russia into an overt military
intervention in the Donbass. An overt Russian military intervention in the
Donbass would achieve all the following goals:
Create a fantastic justification for the continued existence of NATO.
Create a fantastic justification for a new Cold War in Europe which would
strengthen the US grip on the Old Continent.
Create a fantastic justification for an increase in military spending for all
NATO states.
Create a fantastic scapegoat upon which to blame upcoming economic
collapse of Banderastan.
Create a fantastic opportunity to demonize Russia and Putin personally.
Create a perfect justification for the CIA to initiate another Operation
Cyclone, this time in Novorossia.
Create a great way to show the US public opinion that Obama is a tough,
"war President", with "hair on his chest" and who can show the
Russkies who is boss thereby overturning the image of a flaccid and
incompetent loser which Obama presently "enjoys".
Make the Russians pay for the failed war in Syria.
Show all the BRICS countries that nobody can defy Uncle Sam
Re-vitalize the currently comatose and desperate (CIA-controlled)
"liberal" opposition in Russia.
Needless to say, seen this time from the point of view of Russia, all of the above
are crucial reasons to avoid being sucked into an overt military intervention in
the Ukraine. However, non-intervention by itself is hardly a "policy" and it
cannot constitute a strategic goal. So let us now look at the strategic goals of
Russia.
Initially, Russia wanted something rather basic: an independent, more or less
neutral, but prosperous Ukraine. Not because Russians are inherently just so
nice and compassionate, but because the best thing for Russia is to have a
prosperous neighbor for which she hold no responsibility but with which she can
built mutually beneficial economic ties. Yes, sure, Kiev is the mother of all
Russian cities, and the so-called Ukraine is an invention - no such state of
nation ever existed before - and it is true that the "Small Russia" (in the
meaning of "Core" or "Central" Russia) is the cradle of the Russian civilization,
but these are all things of the past. Nowadays, if the Ukies want to call
themselves something other than "Russians", and if they want to try to re-invent
themselves a culture ex nihilo - let them. Who cares really? It's their loss:
instead being a part of one of the (relatively) ancient nations and cultures in
history they chose to become, well, who knows what? But who cares, it's their
right after all. Their "arguments" might not get much traction with most
Russians, especially the educated ones, but this is hardly a reason for conflict.
Over the past two decades there never has been a movement of any relevance
in Russia to oppose the Ukrainian independence. Basically, most Russians did
not give a damn and, frankly, they were right.
But, again, we need to remember that this is not a Russian-Ukrainian problem.
It is a US-Russian problem. And for the USA, the kind of independent and more
or less prosperous Ukraine which Russia would have been happy to have as a
neighbor was absolutely unacceptable. If Russia wanted a "Ukrainian Finland",
the USA wanted a "Ukrainian Poland". That is something which Russia cannot
allow to happen. So, in strategic terms, the three key strategic goals for Russia
are, by order of importance:
1. To prevent the creation of a "Banderastan" on Russia's borders
2. To avoid being sucked into an overt military intervention
3. To protect the people of Novorossia
Two comments about these goals:
First, you will notice that if the choice comes down to an overt military
intervention and the creation of a Banderastan on the western border of Russia
a military intervention is preferable, at least in my opinion. I have no way of
knowing whether the folks in the Kremlin would agree with me or not, but my
sense is that that would if only because of the long-term consequences of
having a Banderastsan along over 2'000km of its western border and less than
500km from downtown Moscow. So make no mistake - Russia will intervene
militarily in Novorossia if there is absolutely no other choice. Even if that means
a risk of war with NATO. Even if that means a war with NATO. For Russia, this
is not an elective conflict, but an existential threat and there is a national
consensus on that.
Second, there is the issue of human rights and the plight of the people of
Novorossia.
Considering how many of us have become disillusioned with our fellow human
being and cynics about any and all politicians, I won't even go into the "brother
nations" argument, nor will I claim that Putin, Lavrov or anybody else in the
Kremlin sincerely cares about the atrocities committed against what are, of
course, really fellow Russians who happened to live in what is called "the
Ukraine" because of Soviet internal administrative borders. I personally am
convinced that Putin and Lavrov really do care - but I will not use that personal
belief of mine as an argument. I will use only a fully pragmatic argument which
is fully compatible with the hypothesis that the folks in the Kremlin care only
about their own narrow self-interest. And the argument is this:
There is a lot of pent-up rage and outrage in Russia. Unlike the western MSM,
the Russian media is full of daily reports about the atrocities committed by the
Ukie death squads. Day after day after day the Russians see neo-Nazi thugs
marching around Kiev, Odessa and other cities with neo-Nazi symbols, they see
the bombed out houses of Slaviansk and Kramatorsk, they see the endless
interviews with maimed civilians and terrified refugees. Day after day after day
the most famous Russian journalists and reporters openly pour out their scorn
and disgust for the lying bastards of the junta in Kiev, the the West's endless
double-standards, on the fact that there is apparently no such crime or action
which the West would not approve of as long as it is committed by neo-Nazis
and against Russians. So whether Putin, Lavrov & Co. are bleeding hearts or
cynical politicians makes no difference at all: they cannot, repeat, cannot,
ignore the atrocities committed by the Ukie death-squads in Novorossia. So far,
Putin's ratings are sky high (in the 80% range), but this can change, rapidly if
events get out of hands. Furthermore, while the current three official
"opposition" parties are more or less a joke (LDPR and Just Russia will fall in
line if/when needed, the Communists are really a lame joke), there are other
parties being formed right now who have a huge political potential, such as
Starikov's "Great Fatherland Party". And Putin is acutely aware that the only
real danger to his rule comes not from the completely tiny discredited "liberal"
"non-system" opposition parties (no more than 1%-3% of popular support) or
from the hopelessly antiquated and clueless "official" or "system" opposition
parties, but from the "next generation" young, dynamic and visionary parties
lead not by clowns, but by very sharp young men like Starikov (don't judge all
Russian Communists by the likes of Zyuganov!). And, remember, Putin did
promise to intervene and protect the people of Novorossia if a real bloodbath
begins there. So this is why I do believe that protecting the people of
Novorossia (point #3 above) is crucial even if we assume that Putin would be
willing to betray and sacrifice the Russian population of the Donbass (which,
again, I personally do notbelieve!).
At this point the Russian policy becomes, I think, clear: to covertly support the
resistance movement of Novorossia without yielding any proof of
intervention which could be used by the AngloZionists to demonize
Russia (they already do that, but with very little credibility in the public opinion).
Now that we have identified the strategic goals of both sides, we can look at the
methods (tactics) they are using to achieve them.
TACTICAL LEVEL ANALYSIS
On the US side the plan is simple: to provoke Russia in every possible way. So
far these have include (in no special order):
Recognition of an illegal regime which came to power with violence.
Support for a neo-Nazi regime.
Massive anti-Russian propaganda.
Limitless amount of double-standards.
Repeated kidnapping of fully accredited journalists.
Whitewashing of massacres (Odessa, Mariupol).
Support for armed assaults on opposition politicians (Tsarev).
Murder of political opponents (murdered Communists Party members).
Attacks on political parties (torched Communist Party offices).
Illegal use of cluster bombs on civilians.
Illegal use of White Phosphorus on civilians.
Use of heavy weapons against entire towns.
Assault and murder of opposition journalists
Attacks on the Russian Embassy in Kiev
Overt glorification of Stepan Bandera by Ukie officials
Blocking by the AngloZionists of Russian UNSC Resolution condemning
the attack on its embassy
Denial of anti-Jewish hatred amongst the Ukie nationalists
Invention of anti-Jewish feelings in Novorossia
Car-bombing of Novorossian officials
Probable use of gas in the Odessa massacre
Creation of a hysterically russophobic campaign in the MSM
Attempts at imposing sanctions on Russia
Covert sending by NATO countries of fixed and rotary wing aircraft
Covert use of several hundred western mercenaries (Academi)
Massacres of wounded soldiers in a hospital
Sniper killing of random civilians
Systematic rejection of any negotiations with the people of Novorossia
Almost systematic rejection of any negotiation with Russia
Systematic violation of any agreement reached with Russia
Bombing of churches and hospitals (just happened in the last 24 hours)
Refusal to provide real escape corridors for trapped civilians
Illegal cutting-off of water supplies to Crimea (now provided from Russia
courtesy of the corps of Russian military engineers)
This is not a full list, of course, just those events which first came to my mind.
Connecting the dots here is easy: to provoke Russia at all costs. Well, provoke
it does. Does that achieve anything else? Specifically, if we take a more
"macro" point of view and ask ourselves this: ifwe accept that the Ukie goal of
war in Novorossia is to get the Russians to intervene and if we accept that the
Russian goal is to stay out, and ifwe finally accept that the crucial factor which
will eventually decide of the outcome is the ability of the Novorossians to
defend themselves without overt Russian intervention - then who does the
tactical scorecard look?
From my point of view - one of an ex-military analyst - I would say that I
am extremely unimpressed by the junta's performance so far.
The junta's death squads have used all the means at their disposal to try to
terrorize the people of Novorossia: they began with baseball bats, then knives,
then guns, they assault-rifles, then machine guns, then heavy machine guns,
then mortars, then heavy mortars, then regular artillery, then multiple rocket
launchers, then attack helicopters, then attack aircraft, then cluster munitions,
now even white phosphorus. And what did they achieve in military terms:
1) they are more or less holding an airport and one hill near
Slaviansk/Kramatorsk
2) they have taken Krasnyi Liman (and committed a massacre in its hospital)
3) they apparently have 1000 or so men surrounded in the Lugansk airport
That's it. They could not even take Slaviansk! This is with force ratios
anywhere between 5:1 to 100:1, with heavy firepower, armor and total air
supremacy. Sub-pathetic, really...
And, in the process, they have lost hundreds of soldiers who defected to the
other side - often with weapons - they have gotten a huge number of their own
conscripts killed, one group of senior "Alpha" officers was caught and several
paratrooper recon units were made prisoner (the latest one yesterday). In
Lugansk Ukie forces appear surrounded and the latest shooting down of an Il-
76 by the NDF air defense forces was part of a desperate attempt of the junta to
free these forces or, at least, to resupply them. In fact, there are all the signs of
a desperate movement by land of Ukrainian armor and infantry to break through
these units some of which, according to unconfirmed reports, have already
switched sides.
As for the Novorossian Defense Forces (NDF), they now clearly have a solid
air-defense network up and running, they seem to have plenty of weapons
(even though they still lack some specific types) and most, but not all, of these
weapons are truly trophy weapons taken from the Ukies (such as the 3 T-64
tanks recently shown in the news). The initial trickle of volunteers has slowly
but steadily become larger (including volunteers from Russia proper) and the
NDF is now clearly enjoying some fancy systems which could have only have
been provided by Russia (electronic warfare, advanced anti-air systems, etc.).
Yes, there are lots of Ukie tanks around Luganks, but as late as this morning a
senior NDF officer in the area has said that "we can hold them for at least
several months". Finally, and for the very first time, there are signs that the
NDF are mounting offensive operations.
I am basing all of the above on admittedly partial information, but to me all the
signs are clear and point to one and only one reality: the Ukie offensive is going
absolutely nowhere and unless Uncle Sam comes up with a dramatic way of
changing the face of the battle, Novorossia will probably withstand the Ukie
assault without over Russian intervention.
(TEMPORARY) CONCLUSION:
So far, I see the strategic-level scorecard for the AnlgoZionist as a complete
failure. As for the tactical-level scorecard, it is probably too early to call, but I
would say that it looks like the Empire is headed for a complete defeat. Of
course, these are temporary conclusions and I don't want to sound like Dubya
with his notorious "Mission accomplished". But I think that for all of us who get
sick in their stomachs each time we hear of the latest Ukie atrocity it is
important to keep in mind that so far the neo-Nazis and their AngloZionist
masters are losing and that there is no reason to suspect that this trend will
somehow reverse itself in the foreseeable future.
We have to also always keep in mind that "lukewarm" as it may be, this is a
major war of planetary importance because as Dugin correctly points it is the
future of Russia, and therefore of all of Eurasia, which is being decided.
Russian parity (I would even argue superiority) in strategic nuclear weapons
have made a hot war impossible (at least for a rational actor), but that does not
mean that both sides are not engaged in this apparently "lukewarm" war with
every bit of energy and power they got! What we are witnessing today is nothing
short of a major struggle for survival between the AngloZionist Empire and the
"Eurasian project" (for lack of a better word) centered around Russia and China
and their attempt to replace the old order by new, multi-polar, dollar-
independent, militarily balanced one. Hegemony vs collective security for
the entire planet is what is at stake. This is why every time we listen to the
latest reports out of Novorossia we have to constantly keep in mind that in
reality this is a US-Russian war over the future international order of the planet
and not an "ethnic civil war".
As you know, I have been living with a knot in my stomach for weeks now, and
with each additional report about the neo-Nazi atrocities committed against the
people of Novorossia I get more desperate, more angry and more frustrated.
And I have to admit that if the Russians finally openly intervene and beat the
crap out of the Ukie death squads (which won't last 24 hours against a real
military force) I won't be able to contain myself - I will open a bottle of
champagne and dance with my wife across the house. But I also know that the
right thing to do is keep our "eyes on the prize" and let this abomination I called
"Banderstan" self-destruct without any over Russian help. The latest attack on
the Russian embassy in Kiev is not only an outrageous violation of the Vienna
Convention, it is also a fantastic admission of impotence, of powerlessness, of
irrelevance really. Think of it, a crowd of neo-Nazi thugs overturns a few cars
and tosses eggs and stones at an embassy building in downtown Kiev and all
the Ukie authorities can do is to order the cops to move out of the way and to
send the deputy Foreign Minister to express his support for the crowd. "Слава
Україні — Героям Слава" (glory to the Ukraine - to the Heroes Glory!) indeed -
some heroic Ukie nationalism at work, there is an "operation" the Ukies can be
proud of, something to add to the pantheon of Ukrainian national pride.
[They are as pathetic as they are disgusting, of course. I really wonder how any
putative "sane Ukrainian" can live without dying of a combination of shame and
self-disgust. But then, that ain't my problem, thank God.]
There is probably more of that sickening Ukie mix of atrocities and buffoonery
on the way. Normal civilized people cannot imagine the kind of stuff that these
hate-filled psychopaths can come up with. Frankly, I would not put it past them
to try an air or missile strike on, say, a kindergarten in Crimea or even in
Belgorod. They could also kidnap a delivery man for a Russian company still
operating in Kiev or heroically massacre of minibus with an Aeroflot crew on the
way to the airport. Whatever! We have to accept the inevitability of such
actions because this is all this junta can do - they simply have no civilized
diplomatic, commercial, military or other means to prevail against Russia and
their own people. But always always keep this in mind: with each such action
the Ukies are confessing to their own impotence while digging their own grave.
So even if "ще не вмерла україна" ("the Ukraine is not dead yet" - from the
Ukie "national anthem" with words copied from the Polish one and a melody
composed by [what else?] a Uniat priest), it's days are counted and, as doctors
like to say, the prognosis is poor.
PAUL CRAIG ROBERTS: WASHINGTON PREPARA A TERCEIRA GUERRA
MUNDIAL.
Tradução do russo: Giovanni G. Vieira
"MAXPARK"---MOSCOU, 27/6/2014
O ex-vice-secretário do Tesouro dos EUA no governo do presidente
Richard Nixon, Paul Craig Roberts, é economista, professor de
universidades americanas, cientista político, diretor do Instituto de
Economia Política, membro sênior do Instituto Hoover da Universidade de
Stanford (EUA), ex-editor e colunista do Wall Street Journal, Business
Week e Washington Times.
Certa vez ele criticou as políticas de George W. Bush, e desde 2004 não
tem autorização para publicar seus artigos nos principais jornais dos
Estados Unidos.
Comentário do tradutor: Caraca! Per la Madonna! Ma come signori, Paul
Craig Roberts vive na terra "da liberdade de expressão"(?), da
"democracia"(?), dos "direitos humanos"(?) e o escambal....
============================================================
Paul Craig Roberts teme que a Ucrânia possa ser o detonador de um conflito
militar mundial.
A doutrina militar dos Estados Unidos mudou. As forças nucleares são agora
vistas não como "arma de retaliação", mas sim como principal força de ataque
preventivo. Washington rompeu o acordo sobre a limitação dos sistemas de
defesa antimíssil, firmado com a União Soviética em 1972 ( continuou
vigorando até 1990).
Washington demoniza a Rússia e o presidente russo, usando para tal as
mentiras mais descaradas e a propaganda no sentido de preparar a opinião
pública americana e dos países "sátrapas" para um guerra com a Rússia.
As forças neoconservadoras e de direita convenceram Washington de que as
forças estratégicas russas são antiquadas, obsoletas e imprestáveis e, por isso,
tornaram-se um excelente alvo para destruição. Este engano está baseado em
uma informação publicada na revista Foreing Affairs de 2006 -- órgão do
Conselho de Relações Internacionais da organização " elite americana".
Segundo material do conhecido especialista, S. Starra, não haverá
vencedores nessa guerra. Todos perecerão.
Em artigo publicado em dezembro de 2008, na revista "Phisics Today", três
cientistas meteorológicos provam que mesmo em caso de redução dos
armamentos nucleares isso não será suficiente para impedir a destruição de
toda forma de vida na Terra. Os centros de estudo chegaram à conclusão que
milhões morrerão logo no início da guerra. A camada de fumaça e
micropartículas provenientes das explosões nucleares subirão à estratosfera
provocando um "inverno nuclear" e morte de todas as culturas agrícolas.
Aqueles que não morrerem por força das explosões e da radiação intensa, vão
morrer de fome.
Ao contrário de seus antecessores, o atual governo dos Estados Unidos se
recusa em reconhecer esta constação científica.
O fato é que os políticos norte-americanos estão convencidos de que uma
guerra nuclear pode ser vencida, pode ser usada para impedir o crescimento
da Rússia e da China, e estabelecer o domínio do mundo pelos Estados
Unidos.
O governo norte-americano, independente do partido no poder, é uma
grande ameaça à vida na Terra.
A ideologia que acredita que os EUA são uma "nação excepcional e
indispensável", e destinada a dominar a política mundial é o principal perigo
para todo o mundo.
Leia: www.desenvolvimentistas.com.br
28/06/2014 - Copyleft
E Lenin tinha razão: a grande guerra interimperialista
A previsão de Lenin se cumpriu de forma dramática. As duas grandes
guerras que marcaram a história da humanidade no século XX foram
guerras interimperialistas.
por Emir Sader em 28/06/2014 - http://www.cartamaior.com.br/?/Blog/Blog-
do-Emir/E-Lenin-tinha-razao-a-grande-guerra-interimperialista/2/31268
Em 1884, as grandes potências coloniais se reuniram em Berlim para decidir sobre
a dominação da África entre elas. Consagraram o critério da “ocupação efetiva”,
segundo o qual a potencia que ocupasse realmente um pais tinha direitos sobre
ele. Há fronteiras no norte da África que visivelmente foram definidas com regra,
riscando sobre uma mesa, para facilitar a troca de territórios entre as 14 potências
reunidas, sem importar que povos viviam aí.
Se terminava a divisão do mundo entre os colonizadores. A partir dali, segundo
Lenin, cada um só poderia expandir-se às custas de outros. E como a tendência
expansiva do capitalismo é permanente, Lenin previa que a humanidade entrava
numa época de guerras interimperialistas.
A previsão de Lenin se cumpriu de forma rigorosa e dramática. As duas grandes
guerras que marcaram a história da humanidade na primeira metade do século XX
foram exatamente isso – guerras interimperialistas. Dois grandes blocos entre, por
um lado as potencias que tinham se apropriado inicialmente de grande parte do
mundo, lideradas pela Inglaterra e pela França, enfrentadas às que chegavam à
repartição do mundo tardiamente – Alemanha, Itália, Japão – que buscavam uma
redivisão dos territórios colonizados.
Por terem resolvido a questão nacional, com a instalação de Estados nacionais
antes que os outros países europeus, sobretudo a Inglaterra e a França puderam
construir sua força militar – em particular marítima – e colocar-se em melhor
situação para a conquista e consolidação de um império colonial.
A Alemanha, a Itália e o Japão demoraram mais para sua unificação nacional, pela
forca relativa das burguesias regionais, com o que chegaram à arena mundial em
inferioridade de condições. Tiveram que se valer de regimes autoritários para
acelerar seu desenvolvimento econômico, recuperando o atraso em relação às
outras potências mundiais.
A primeira guerra mundial, mais além das contingencias do seu começo, foi isso:
uma grande batalha entre os dois blocos pela repartição do mundo, especialmente
dos continentes periféricos. (A Alemanha chegou a propor ao México que lhe
devolveria os territórios que os EUA lhe haviam arrebatado caso se somasse ao
bloco liderado por ela.)
Por trás das duas grandes guerras havia a disputa pela hegemonia mundial. A
decadência inglesa via assomarem-se duas potencias emergentes – os EUA e a
Alemanha. No começo da primeira guerra predominava nos EUA a corrente
isolacionista, como se a guerra fosse uma questão europeia. Mas conforme a
Alemanha avançava para ganhar a guerra, o governo dos EUA colocou em pratica
rapidamente uma campanha ideológica para mobilizar os norteamericanos para a
participação na guerra.
1917 foi um ano decisivo na guerra, com a revolução bolchevique fazendo com que
a Rússia se retirasse da guerra – seguindo as orientações do Lenin de que se
tratava de uma guerra interimperialista -, enquanto os EUA entravam na guerra,
fazendo com que a balança se inclinasse a favor do bloco anglo-francês.
Com a segunda guerra – na realidade o segundo round de uma mesma guerra,
com as mesmas características e um intervalo de poucos anos – e a segunda
derrota do bloco formado pela Alemanha, a Itália e o Japão – se abria o caminho
para a hegemonia imperial norteamericana. Guerras interimperialistas, as mais
cruéis de todas as guerras, no continente que se considerava o mais civilizado do
mundo, para dirimir a disputa hegemônica entre as potencias capitalistas sobre a
dominação global. O início da primeira, de que se cumpre agora um século, foi o
começo dessa grande debacle europeia.
O Discurso de PUTIN no G20 2014
A maioria dos habitantes das áreas que usam a língua inglesa no mundo,
perdeu o discurso de Putin na conferência Valdai ,em Sochi, há poucos dias, e
as chances são de que não o recuperem, perdendo sua oportunidade. Os
meios de comunicação ocidentais fizeram o seu melhor para ignorá-la ou torcer
seu significado. Independentemente do que você pessoalmente pensa sobre
Putin , este é, provavelmente, o discurso político mais importante desde
"Cortina de Ferro" o discurso de Churchill de 05 de março, 1946.
Neste discurso, Putin mudou abruptamente as regras do jogo. Anteriormente, o
jogo da política internacional foi jogado da seguinte forma: os políticos fizeram
pronunciamentos públicos, em prol da manutenção de uma ficção agradável da
soberania nacional, mas eles eram estritamente para o show e não tinha nada
a ver com a substância da política internacional, isto é, as negociações de
porão, em que os negócios reais foram impostos de dentro para fora, sob
várias versões. Anteriormente, Putin tentou jogar este jogo, esperando apenas
que a Rússia fosse tratada como um igual. Essas esperanças foram frustradas,
e, nesta conferência, ele declarou que o jogo acabou, violando explicitamente o
tabu ocidental, ao falar diretamente para as pessoas além dos chefes das
clãs de elite e dos líderes políticos.
O blogueiro russo chipstone resumiu os pontos mais salientes do discurso
Putin como segue:
1. A Rússia não vai mais jogar e se engajar em negociações de bastidores
sobre ninharias. Mas a Rússia está preparada para conversas sérias e
acordos, se estes são propícios para a segurança coletiva, baseando-se na
justiça e tendo em conta os interesses de cada lado.
2. Todos os sistemas de segurança coletiva mundial encontram-se agora
em ruínas. Já não há quaisquer garantias de segurança internacional em tudo.
E a entidade que eles destruíram tem um nome: Os Estados Unidos da
América.
3. Os construtores da Nova Ordem Mundial falharam, tendo construído um
castelo de areia. Seja ou não uma nova ordem mundial de qualquer tipo está a
ser construída, esta não é apenas a decisão da Rússia, mas é uma decisão
que não será feita sem a Rússia.
4. Rússia favorece uma abordagem conservadora para a introdução de
inovações na ordem social, mas não se opõe a investigar e discutir tais
inovações, para ver se a introdução de qualquer um deles pode ser justificada.
5. A Rússia não tem intenção de ir à pesca nas águas turvas criadas pela
permanente expansão da América "império do caos", e não tem interesse em
construir um novo império de sua própria lavra (os desafios da Rússia se
aplicam no desenvolvimento de seu já vasto território). Nem está a Rússia
disposta a agir como um salvador do mundo, como ela tinha o hábito no
passado.
6. A Rússia não irá tentar reformatar o mundo em sua própria imagem,
mas nem ela permitirá que qualquer pessoa tente reformatá-la à sua
imagem. A Rússia não vai fechar-se fora do mundo, mas quem tentar isolá-la
do resto do mundo pode estar certa de colher um redemoinho.
7. A Rússia não deseja que o caos se espalhe, e não quer a guerra, nem tem
intenção de começar uma, ou favorecer o caos. No entanto, hoje a Rússia
observa o início da guerra global como quase inevitável, está preparada
para isso, e continua a se preparar para isso. A Rússia não deseja a guerra,
mas não a teme.
8. A Rússia não tem intenção de assumir um papel ativo em frustrar aqueles
que ainda estão tentando construir sua Nova Ordem Mundial, se seus esforços
não ponham em causa os interesses fundamentais da Rússia. A Rússia prefere
permanecer perto e observá-los dar-se mal, às voltas com os problemas
provocados por suas pobres cabeças. Mas àqueles que tentarem arrastar a
Rússia para este processo, através do desrespeito com seus interesses, será
ensinado o verdadeiro significado da dor.
9. Em sua política externa, e ainda mais, em sua política interna, Rússia não
pretende contar com as elites e suas negociações de bastidores, mas basear-
se na vontade do povo.
A esses nove pontos, Putin acrescentou um décimo:
10. Há ainda uma chance de construir uma nova ordem mundial que evite
uma guerra mundial. Essa nova ordem mundial deve necessariamente
incluir os Estados Unidos, mas só pode fazê-lo nas mesmas condições
que todos os outros: sujeito ao direito internacional e acordos internacionais;
abstendo-se de toda ação unilateral; no pleno respeito da soberania de outras
nações.
Para resumir tudo: o tempo do jogo acabou. Às crianças, compete arrumar
seus brinquedos. Chegou a hora de os adultos tomarem decisões. A
Rússia está pronta para isso; e o mundo?
* Texto completo do discurso de Vladimir Putin[1]
e uma sessão de perguntas e respostas na reunião plenária final da sessão da XI Valdai
Internacional Discussão Club em Sochi, em 24 de Outubro de 2014.
Foi já referido que o clube tem novos co-organizadores deste ano. Elas incluem as
organizações não-governamentais russas, grupos de peritos e melhores universidades.
Também foi levantada a idéia de ampliar as discussões para incluir não apenas questões
relacionadas com a própria Rússia, mas também a política mundial e da economia.
Uma organização e conteúdo vai reforçar a influência do clube como um fórum importante de
discussão de perito. Aos mesmo tempo, espero que o “Valdai espírito” permanecerá - este
ambiente livre e aberto e chance de expressar frfancamente opiniões muito diferentes.
Deixe-me dizer a este respeito que eu também não vou subestimar vocês, e vou
falar diretamente e com franqueza. Algumas das coisas que eu digo, podem parecer um pouco
duras, mas se não falarmos direta e honestamente sobre o que realmente pensamos, não vale
a pena falar. Nesse caso, seria melhor manter encontros diplomáticos, onde ninguém diz nada
de verdadeiro e com sentido, e, recordando as palavras de um diplomata famoso, percebe-se
que os diplomatas têm linguajares que próprios para não falar a verdade.
Nós nos reunimos por outras razões. Nós nos reunimos para falar francamente com o outro.
Precisamos ser diretos e francos: não, de modo a trocar farpas, mas de forma a tentar chegar
ao fundo do que está realmente acontecendo no mundo, tentar entender porque o mundo está
se tornando menos seguro e mais imprevisível, e por isso, os riscos estão aumentando em
todos os lugares ao nosso redor.
A discussão de hoje discorreu sobre o tema: Novas Regras ou Um Jogo sem Regras. Eu acho
que essa fórmula descreve com precisão o ponto de viragem histórico a que chegamos hoje, e
a escolha que todos nós enfrentamos. Não há nada de novo. Está claro que o mundo está
mudando muito rápido. Eu sei que isso é algo que vocês falaram muito nas discussões de hoje.
É difícil não notar as transformações dramáticas na política global e na economia, na vida
pública e na indústria, informação e tecnologias sociais.
Deixe-me perguntar-lhes agora e pedir-lhes que me perdoem se eu acabar repetindo o que
alguns dos participantes do debate já disseram. É praticamente impossível evitar isso. Vocês já
fizeram discussões detalhadas, mas eu vou definir o meu ponto de vista. Ele coincidirá com a
opinião de outros participantes sobre alguns pontos e divergirá em outros.
Ao analisar a situação atual, não esqueçamos as lições da História. Primeiro de tudo, as
mudanças na ordem mundial - e o que estamos vendo, são eventos nesta escala - geralmente
têm sido acompanhadas por - se não pela guerra mundial, por cadeias de conflitos intensivos
em nível local. Em segundo lugar, a política global é, acima de tudo, em termos de liderança
econômica, questões de guerra e paz, e dimensão humanitária, incluindo os direitos humanos.
O mundo está cheio de contradições. Precisamos ser francos em perguntar uns aos outros se
temos uma rede de segurança confiável. Infelizmente, não existe qualquer garantia e não há
certeza de que o atual sistema de segurança global e regional seja capaz de nos proteger de
convulsões. Este sistema tornou-se seriamente enfraquecido, fragmentado e deformado. As
organizações de cooperação internacional e regional, políticas, económicas e culturais também
estão passando por momentos difíceis.
Sim, muitos dos mecanismos que temos para garantir a ordem mundial, foram criados muito
tempo atrás, inclusive e, sobretudo, no período imediatamente após a Segunda Guerra
Mundial. Deixe-me enfatizar que a solidez do sistema criado naquela época não descansou
apenas no equilíbrio de poder e nos direitos dos países vencedores, mas no fato de que os
“pais” fundadores deste sistema, tinham respeito uns pelos outros, não tendiam pressionar aos
demais, mas chegar a acordos.
A principal observação é de que esse sistema precisa, para se desenvolver - apesar de suas
várias deficiências - ser capaz de manter os problemas atuais do mundo dentro de certos
limites, regulando a intensidade da concorrência natural entre os países.
É minha convicção que não poderíamos tomar este mecanismo de freios e contrapesos que
construímos ao longo das últimas décadas, às vezes com tanto esforço e dificuldade, e
simplesmente acabar com ele, sem construir qualquer coisa em seu lugar. Caso contrário,
ficaria o instrumento à mercê da força bruta.
Precisávamos prov idenciar numa reconstrução racional do sistema, adaptando-o às novas
realidades dentro das relações internacionais.
Mas os Estados Unidos, depois que se declarou vencedor da Guerra Fria, não vê a
necessidade disso. Em vez de estabelecer um novo equilíbrio de poder, essencial para a
manutenção da ordem e estabilidade, eles tomaram medidas que jogou o sistema num
desequilíbrio agudo e profundo.
A Guerra Fria terminou, mas não terminou formalmente, pela assinatura de um tratado de paz
com acordos claros e transparentes no respeito das regras existentes ou na criação de novas
regras e normas. Isso criou a impressão de que os chamados “vencedores” da Guerra Fria
haviam decidido ações de pressão para remodelar o mundo atendendo às próprias
necessidades e interesses. Se o atual sistema de relações internacionais, direito internacional,
e os pesos e contrapesos se colocam no caminho desses objetivos, o sistema é declarado sem
valor, desatualizado, e exigindo demolição imediata.
Perdoem a analogia, mas esta é a maneira como os novos ricos se comportam quando de
repente se vêem na posse de uma grande fortuna, neste caso, sob forma de liderança mundial
e dominação. Em vez de gerir sua riqueza com sabedoria, também para seu próprio benefício
, eles cometeram muitos desatinos.
Entramos num período de interpretações divergentes e silêncios deliberados na política
mundial. O direito internacional foi forçada a recuar mais e mais pelo ataque do niilismo legal.
Objetividade e justiça foram sacrificadas no altar da conveniência política. Interpretações
arbitrárias e avaliações tendenciosas substituíram as normas legais. Ao mesmo tempo, o
controle total da mídia de massa mundial tornou possível, quando desejado, retratar o branco
como preto e o preto como branco[2].
Numa situação onde houve a dominação de um país e seus aliados, ou seus satélites, a busca
de soluções globais muitas vezes se transforma numa tentativa de impor as suas próprias
receitas universais. As ambições desse grupo cresceu a ponto de forjar políticas tanto em seus
corredores do poder como à vista de toda a comunidade internacional. Mas não é esse o caso.
A própria noção de “soberania nacional” tornou-se um valor relativo para a maioria dos países.
Em essência, foi proposta a fórmula: quanto maior a lealdade para com o centro de poder único
do mundo, maior a legitimidade deste ou daquele governante ou do regime.
Faremos depois uma discussão livre, e me sentirei feliz em responder suas perguntas,
apreciando usar meu direito de também fazer-lhes perguntas. Será ocasião para que alguém
refute os argumentos que coloquei.
As medidas tomadas contra aqueles que se recusam a submeter-se, são bem conhecidas e
têm sido usadas e testadas muitas vezes. Elas incluem o uso da força, a pressão econômica e
propaganda, a ingerência nos assuntos internos dos países, apelando a uma espécie
de legitimidade “supra-legal”, quando eles desejam justificar uma intervenção ilegal neste ou
naquele conflito ou derrubar regimes inconvenientes. Cada vez, temos mais provas de que
muita chantagem pura e simples tem sido usada em relação a um certo número de líderes.Não
é à toa que o “Big Brother” está gastando bilhões de dólares para manter todo o mundo sob
vigilância, incluindo seus próprios aliados mais próximos.
Perguntemos: o quanto isso nos deixa confortáveis, seguros, felizes, por viver neste mundo, e
conhecendo como se tornou justo e racional? Talvez não tenhamos motivos reais para nos
preocuparmos, discutir e fazer pergunta embaraçosas? Talvez a posição excepcional dos
Estados Unidos e a maneira como eles estão desempenhando sua liderança realmente seja
uma bênção para todos nós, assim como sua intromissão em eventos em todo o mundo, está
trazendo a paz, a prosperidade, o progresso, o crescimento e a democracia, e nós devemos
talvez apenas relaxar e desfrutar de tudo isso?
Deixe-me dizer-lhes que este não é o caso, absolutamente não é o caso.
Uma ditadura unilateral que impõe seus modelos próprios, produz o resultado oposto. Em vez
de resolver os conflitos, ela leva a sua escalada; em vez de Estados soberanos e estáveis,
vemos a crescente disseminação do caos, e, em vez de democracia, há suporte para um
público muito duvidoso que vão desde abertos neo-fascistas a radicais islâmicos.
Por que eles apóiam essas pessoas? Simplesmente porque decidiram usá-los como
instsrumentos ao longo do caminho para alcançar seus objetivos, mas, ao queimar seus dedos,
eles recuam. Eu nunca deixarei de me surpreender com a forma como nossos parceiros
continuam fazendo a mesma coisa, “piando no mesmo ancinho”, como dizemos aqui, ou seja
cometer o mesmo erro várias vezes.
Eles ja patrocinaram uma vez movimentos extremistas islâmicos para lutar contra a União
Soviética. Esses grupos tiveram sua experiência de batalha no Afeganistão, o que mais tarde
deu origem ao Talibã e ao Al-Qaeda. Se o Ocidente não os apoiou, pelo menos, fechou os
olhos, e, eu diria, prestou informações, deu apoio político e financeiro à invasão da Rússia
pelos “terroristas internacionais” (não esquecemos isso) e aos países da Ásia Central. Somente
quando os ataques terroristas foram cometidos em solo americano, os Estados Unidos
assumiram a ameaça comum do terrorismo. Deixe-me lembrá-lo que nós éramos o primeiro
país a apoiar o povo americano na época, o primeiro a reagir como amigos e parceiros na
terrível tragédia do 11 de Setembro[3].
Durante minhas conversas com os líderes americanos e europeus, sempre falamos sobre a
necessidade de combater o terrorismo em conjunto, como um desafio à escala global. Não
podemos nos resignar a aceitar essa ameaça, não podemos cortá-la em pedaços usando
padrões duplos. Nossos parceiros manifestaram acordo, mas em pouco tempo, acabamos de
volta onde começamos. Primeiro, foi a operação militar no Iraque, depois na Líbia, que foi
desmantelada a beira de desmoronar. Por que a Líbia foi empurrada a esta situação?[4] Hoje é
um país em risco de rompimento e se tornou um campo de treinamento para terroristas.
Apenas a determinação e sabedoria do líder egípcio atual salvou esse país árabe a partir do
caos e assolado por extremistas de forma desenfreada. Na Síria, como no passado, os
Estados Unidos e seus aliados começaram a financiar diretamente e armar os rebeldes, o que
lhes permite preencher suas fileiras com mercenários de vários países. Deixe-me perguntar de
quem esses rebeldes recebem seu dinheiro, armas e especialistas militares? Qual a
procedência desse abastecimento? Como o ISIL notório consegue tornar-se um grupo tão
poderoso, e essencialmente, uma força armada real?[5]
Quanto a fontes de financiamento, hoje, o dinheiro está vindo não apenas de drogas, cuja
produção não aumentou apenas por alguns pontos percentuais, mas muitos vezes, já que as
forças da coalizão internacional estiveram presentes no Afeganistão. Estamos cientes disso.
Os terroristas estão recebendo dinheiro da venda de petróleo também. O petróleo é produzido
em território controlado pelos terroristas, que o vendem a preços de dumping, o produzem e
transportam. Mas alguém compra este óleo, revende-o, e lucra com isso, não importando o fato
de estarem financiando terroristas que poderão, mais cedo ou mais tarde, assolar e semear
destruição em seus próprios países.
De onde eles obtêm novos recrutas? No Iraque, depois que Saddam Hussein foi derrubado, as
instituições do Estado, incluindo o exército, ficaram em ruínas. Nós dissemos na época, ser a
situação muito perigosa. Impelem-se as pessoas para a rua, e que farão elas? Não
esqueçamos que les estavam na liderança de uma grande potência regional (legitimamente ou
não) e agora estão transformados em quê?
Qual foi o resultado? Dezenas de milhares de soldados, policiais e ex-militantes do Partido
Baath estavam voltados para as ruas, e hoje aderiram às fileiras dos rebeldes. Talvez isso
explique por que o grupo Estado Islâmico se tornou tão eficaz. Em termos militares, ele está
agindo de forma muito eficiente e dispõe de elementos muito profissionais. A Rússia advertiu
repetidamente sobre os perigos de ações militares unilaterais, intervindo nos assuntos internos
de estados soberanos, e flertando com extremistas e radicais. Insistimos em ter os grupos de
combate ao governo sírio central, acima de tudo, o Estado Islâmico, incluído nas listas de
organizações terroristas. Mas não obtivemos sucesso. Recorremos em vão.
Às vezes tenho a impressão de que os nossos colegas e amigos estão constantemente lutando
contra as conseqüências de suas próprias políticas, jogando todo o seu esforço para enfrentar
os riscos que eles mesmos criaram, e pagando um preço cada vez maior.
Colegas, este período de dominação unipolar demonstrou de forma convincente que apenas
um centro de poder não produz procedimentos globais gerenciáveis. Pelo contrário, esse tipo
de construção instável mostrou a sua incapacidade de lutar contra as ameaças reais, como os
conflitos regionais, terrorismo, tráfico de drogas, fanatismo religioso, chauvinismo e neo-
nazismo. Ao mesmo tempo, ele abriu o caminho para o orgulho nacional inflado, a manipulação
da opinião pública, deixando o forte intimidar e reprimir os fracos.
Essencialmente, o mundo unipolar é simplesmente um meio de justificar a ditadura sobre os
povos e países. O mundo unipolar acabou muito desconfortável, pesado e incontrolável, um
fardo, mesmo para o líder auto-proclamado. Comentários nesse sentido foram feitos aqui antes
e eu concordo plenamente. É por isso que vemos tentativas nesta nova fase histórica, para
recriar a aparência de um mundo quase bipolar como um modelo conveniente para perpetuar a
liderança americana. Não importa o que toma o lugar do centro do mal na propaganda
americana, antigo lugar da URSS como o adversário principal. Poderia ser o Irã, como um país
que pretende adquirir tecnologia nuclear, a China, como a maior economia do mundo, ou a
Rússia, como uma superpotência nuclear[6].
Hoje, estamos vendo novos esforços para fragmentar o mundo, desenhar novas linhas
divisórias, coligações construídas sem fins construtivos, mas com o objetivo de combater
alguém, criando-se a imagem de um suposto inimigo, como foi o caso durante os anos da
Guerra Fria, para obter essa liderança ditatorial. Foi essa a situação durante a Guerra Fria,
como chegamos a compreender. Os Estados Unidos sempre disseram a seus aliados: "Nós
temos um inimigo comum, um inimigo terrível, o centro do mal, e estamos a defender vocês,
nossos aliados, a partir deste inimigo, e por isso temos o direito de pedir-lhe um retorno,
sacrificando seus interesses políticos e econômicos para pagar sua parte nos custos dessa
defesa coletiva, ainda que sejamos os responsáveis por tudo, é claro”. Em resumo, vemos hoje
tentativas de um mundo novo, com reprodução dos modelos familiares da gestão global, de
forma a garantir a posição excepcional dos EUA, e colher dividendos políticos e econômicos.
Essas tentativas, porém, estão cada vez mais divorciadas da realidade, e em contradição com
a diversidade do mundo. Passos desse tipo para criar confronto e represálias costumam ter
efeito oposto ao esperado. Nós vemos o que acontece quando a política precipitadamente
começa a intrometer-se na economia e a lógica de decisões racionais dá lugar à lógica de
confronto que só prejudicará as próprias posições e interesses econômicos, incluindo os meios
empresariais nacionais.
Projetos econômicos conjuntos e investimentos mútuos objetivam aproximar os países e
amenizar os problemas nas relações entre os estados . Mas hoje a comunidade empresarial
mundial enfrenta uma pressão sem precedentes por parte dos governos ocidentais. Como
entendermos o negócio como oportunidade econômica pragmática, quando ouvimos palavras
de ordem como “a pátria está em perigo”, “o mundo livre está sob ameaça” e “a democracia
está em perigo”? Segundo elas, todo o mundo precisa se mobilizar. Isso seria uma política de
verdadeira mobilização, ao que parece.
Muitas sanções já estão minando as bases do comércio mundial, as regras da OMC e o
princípio da inviolabilidade da propriedade privada. O poder unilateral está assestando um
golpe com o modelo liberal de globalização baseado em mercados, na liberdade e na
concorrência, um modelo que tem beneficiado precisamente os países ocidentais. E agora
correm eles o risco de perder a confiança pretendida pelos líderes da globalização. Temos que
nos perguntar, por que isso era necessário? Afinal de contas, a prosperidade dos Estados
Unidos repousa em grande parte na confiança dos investidores e detentores de dólares e
títulos americanos. Esta confiança está sendo claramente minada e sinais de decepção quanto
aos frutos da globalização são visíveis em muitos países. O precedente Chipre, bem
conhecido, e as sanções politicamente motivadas apenas reforçaram a tendência de reforçar a
soberania econômica e financeira dos países ou dos seus grupos regionais no “desejo de
encontrar formas de se proteger contra os riscos de pressão externa”. Nós já percebemos que
mais e mais países estão buscando formas de se tornarem menos dependente do dólar, com a
criação de sistemas financeiros e de pagamentos alternativos e moedas de reserva. Eu acho
que nossos amigos americanos estão simplesmente cortando o galho em que estão sentados.
Não se pode misturar política e economia, mas isso é o que está acontecendo. Eu sempre
pensei e continuo a pensar, que as sanções foram politicamente um erro que vai prejudicar a
todos, mas tenho certeza de que vamos voltar a este assunto mais tarde.
Sabemos que essas decisões foram tomadas como forma de pressão. Mas deixem-me
salientar que a Rússia não vai ficar magoada, ofendida ou virá mendigar na porta de alguém.
A Rússia é um país auto-suficiente. Vamos trabalhar dentro do ambiente econômico externo
que tem tomado forma, no desenvolvimento da produção e tecnologia nacionais e agir com
mais determinação para realizar a transformação. Pressão de fora, como foi o caso em
ocasiões anteriores, só vai consolidar nossa sociedade, manter-nos alerta e concentrados em
nossas principais metas de desenvolvimento.
É claro que as sanções são um obstáculo. Eles estão tentando nos prejudicar através dessas
sanções, no sentido de bloquear nosso desenvolvimento e nos levar para o isolamento político,
econômico e cultural, impelir-nos a um atraso forçado, em outras palavras. Mas deixem-me
dizer mais uma vez, que o mundo hoje é um lugar muito diferente. Nós não temos nenhuma
intenção de fechar-nos e escolher algum tipo de caminho de desenvolvimento fechado,
tentando viver em autarquia. Estamos sempre abertos ao diálogo, inclusive para normalizar as
nossas relações econômicas e políticas. Contamos aqui com a abordagem pragmática e a
posição das comunidades empresariais dos países líderes.
Alguns estão dizendo que a Rússia está supostamente virando as costas à Europa – estas
palavras provavelmente já foram faladas aqui também, durante as discussões – e que está à
procura de novos parceiros de negócios, sobretudo na Ásia. Deixem-me dizer que este não é
absolutamente o caso. Nossa política ativa na região da Ásia-Pacífico não começou ontem e
não é uma resposta às sanções, e sim, uma política que temos seguido por muitos anos. Como
muitos outros países, incluindo países ocidentais, vimos que a Ásia está desempenhando um
papel cada vez maior no mundo, na economia e na política, e não podemos nos dar ao luxo de
ignorar esse desenvolvimento.
Deixem-me dizer-lhes mais uma vez que todo o mundo está agindo igual, e nós vamos fazê-lo
considerando ainda mais que uma grande parte do nosso país se situa geograficamente na
Ásia. Por que não faríamos uso das nossas vantagens competitivas nessa área? Seria
extremamente míope não fazê-lo.
O desenvolvimento de laços econômicos com esses países, e a realização de projetos
conjuntos de integração, também criam grandes incentivos para nosso desenvolvimento
nacional. Tendências demográficas, econômicas e culturais sugerem que a dependência de
uma única superpotência tende a diminuir.. Isso é algo que europeus e norte-americanos
especialistas também têm observado e comentado.
A evolução da política global espelhará, talvez, a evolução que vemos na economia global, ou
seja, uma concorrência intensa para nichos específicos, e mudanças freqüentes de líderes em
áreas específicas. Isso é perfeitamente possível.
Não há dúvida de que os fatores humanitários, tais como educação, ciência, saúde e cultura
estão desempenhando um papel mais importante na competição global. Isso também tem um
grande impacto sobre as relações internacionais, inclusive porque este recurso 'soft power'
dependerá, em grande medida, de conquistas reais no desenvolvimento do capital humano, em
vez de truques de propaganda sofisticados.
Ao mesmo tempo, a formação de um chamado mundo policêntrico (eu também gostaria de
chamar a atenção para isso, colegas) por si só, não melhora a estabilidade; na verdade, é mais
provável que seja o oposto. A meta de atingir o equilíbrio global está-se transformando num
quebra-cabeça bastante difícil, uma equação com muitas incógnitas.
Então, o que está colocado para nós, se não vivermos pelas regras a escolher? – mesmo que
possam ser rigorosas e inconvenientes – mas, sim, viver sem quaisquer regras em tudo? E
esse cenário é perfeitamente possível; não podemos descartá-lo, dadas as tensões na situação
global. Muitas previsões já podem ser feitas, tendo em conta as tendências actuais, e,
infelizmente, elas não são otimistas. Se não criarmos um sistema claro de compromissos e
acordos mútuos, se não construirmos os mecanismos de gestão e resolução de situações de
crise, os sintomas da anarquia global vão inevitavelmente crescer.
Hoje, já vemos um grande aumento na probabilidade de um conjunto de conflitos violentos com
qualquer participação direta ou indireta das grandes potências do mundo. E os fatores de risco
incluem não apenas os conflitos multinacionais tradicionais, mas também a instabilidade
interna em estados separados, especialmente quando falamos de países localizados nas
intersecções das principais interesses geopolíticos dos Estados, ou na fronteira dos
continentes civilizados a níveis culturais, históricos e econômicos .
Ucrânia, que eu tenho certeza de ter sido discutida longamente, e ainda será discutida um
pouco mais, é um dos exemplo de tais tipos de conflitos que afetam o equilíbrio do poder
internacional, e eu acho que certamente não será o último. A partir daqui, emana a próxima
ameaça real de destruir o atual sistema de acordos no controle de armas. E este processo
perigoso foi lançado pelos Estados Unidos da América, quando se retirou unilateralmente do
Tratado de Mísseis Anti-Balísticos em 2002, e, em seguida, começou, e continua hoje, a
propiciar activamente a criação de seu sistema de defesa antimísseis global.
Colegas, amigos, eu quero ressaltar que nós não começamos isso. Mais uma vez, estamos
deslizando para momentos em que, em vez do equilíbrio de interesses e garantias mútuas,
temos o medo da destruição mútua, que impedem as nações de se envolver em conflito direto.
Na ausência de instrumentos jurídicos e políticos, as forças são mais uma vez o ponto focal da
agenda global; usadas onde e como se quiser, sem quaisquer sanções do Conselho de
Segurança da ONU. E se o Conselho de Segurança se recusa a produzir tais decisões, então
ele deve ser imediatamente declarado como um instrumento ultrapassado e ineficaz.
Muitos estados não vêem quaisquer outras formas de garantir sua soberania, a não ser obter
suas próprias bombas. Isto é extremamente perigoso. Insistimos em conversas contínuas; não
estamos apenas em favor de negociações, mas insistimos em continuar as negociações para
reduzir os arsenais nucleares. Quanto menos armas nucleares tivermos no mundo, tanto
melhor. E estamos prontos para as mais sérias e concretas discussões sobre o desarmamento
nuclear – mas apenas discussões sérias, sem padrões duplos.
O que quero dizer? Hoje, muitos tipos de armamento de alta precisão se aproximam de armas
de destruição em massa em termos de suas capacidades, e em caso de renúncia total de
armas nucleares ou redução radical do potencial nuclear, as nações que são líderes em
criação e produção de altos sistemas de precisão, terão uma vantagem militar clara. A paridade
estratégica será interrompida, e isso é susceptível de trazer desestabilização. A utilização de
um chamado primeiro ataque preventivo global pode tornar-se tentador. Em suma, os riscos
não diminuem, mas se intensificam.
A próxima ameaça óbvia é a nova escalada de conflitos étnicos, religiosos e sociais. Tais
conflitos são perigosos não só em si, mas também porque eles criam zonas de anarquia,
anarquia e caos em torno deles, lugares que são confortáveis para os terroristas e criminosos,
onde a pirataria, o tráfico humano, o tráfico de drogas, etc.
Aliás, no momento, nossos colegas tentaram gerir de alguma forma esses processos,
utilizando conflitos regionais e de design “revoluções coloridas”[7] para atender os seus
interesses, mas o gênio escapou a garrafa. Parece que os pais da teoria do caos controlado
próprios não sabem o que fazer com ele; há desordem em suas fileiras.
Acompanhamos de perto as discussões, tanto pela elite dominante como pela comunidade de
especialistas. É suficiente olhar para as manchetes da imprensa ocidental ao longo do último
ano. As mesmas pessoas são chamados de combatentes pela democracia e, em seguida
islâmicos; primeiro a mídia chama os processos de revoluções e, em seguida, de tumultos e
convulsões. O resultado é óbvio: a expansão do caos global.
Colegas, dada a situação global, é hora de chegar a um acordo sobre as coisas fundamentais.
Isso é extremamente importante e necessário; isso é muito melhor do que voltar para nossos
próprios cantos. Quanto mais todos nós enfrentarmos problemas comuns, mais nos
perceberemos no mesmo barco, por assim dizer. E o caminho lógico para sair disso, é a
cooperação entre as nações, sociedades, na busca de respostas coletivas para desafios cada
vez maiores, e na gestão do risco comum. Concedido, alguns dos nossos parceiros, por algum
motivo, lembram-se disso só quando convém aos seus interesses.
A experiência prática mostra que as respostas conjuntas para os desafios nem sempre são
uma panacéia; e precisamos entender isso. Além disso, na maioria dos casos, elas são de
difícil acesso; não é fácil superar as diferenças dos interesses nacionais, a subjetividade de
diferentes abordagens, principalmente quando se trata de países com diferentes tradições
culturais e históricas. Mas, no entanto, temos exemplos de que, com objetivos comuns e
agindo-se com base nos mesmos critérios, juntos alcançaremos o sucesso real.
Deixe-me lembrá-los sobre como resolver o problema das armas químicas na Síria, e o diálogo
substantivo sobre o programa nuclear iraniano, bem como o nosso trabalho sobre as questões
da Coreia do Norte, que também tem alguns resultados positivos. Por que não podemos usar
essa experiência no futuro para resolver os desafios locais e globais?
Qual poderia ser a base jurídica, política e econômica para uma nova ordem mundial que
permitisse a estabilidade e a segurança, sem deixar de incentivar a competição saudável, não
permitindo a formação de novos monopólios, que dificultam o desenvolvimento? É improvável
que alguém possa fornecer soluções prontas, agora. Vamos precisar de um extenso trabalho
com a participação de uma ampla gama de governos, empresas globais, a sociedade civil e as
plataformas, e especialistas.
No entanto, é óbvio que o sucesso e os resultados reais só serão possíveis se os participantes-
chave nos assuntos internacionais concordem em harmonizar os interesses básicos, sobre a
auto-contenção razoável, dando o exemplo de uma liderança positiva e responsável. Temos de
identificar claramente onde as ações unilaterais acabam, e precisamos aplicar mecanismos
multilaterais, e, como parte da melhoria da eficácia do direito internacional, temos de resolver o
dilema entre as ações pela comunidade internacional para garantir a segurança e os direitos
humanos e o princípio da soberania nacional e não-ingerência nos assuntos internos de
qualquer Estado.
Essas mesmas colisões tendem a levar a interferência externa arbitrária nos processos
internos complexos cada vez mais, e uma e outra vez, elas provocam conflitos perigosos entre
os jogadores globais líderes. A questão da manutenção da soberania torna-se primordial na
manutenção e reforço da estabilidade global.
Na discussão dos critérios para o uso da força externa, é extremamente difícil; é praticamente
impossível, separá-los dos interesses de determinados países. No entanto, isso é muito mais
perigoso quando não há acordos e regras claras para todos, quando não há condições claras e
definidas para a interferência necessária e legal.
Vou acrescentar que as relações internacionais devem ser baseadas no direito internacional,
que devem repousar sobre princípios morais, como a justiça, a igualdade e a verdade. Talvez o
mais importante é o respeito por cada um do sócios e seus interesses. Esta é uma fórmula
óbvia, mas simplesmente seguindo-a, poderiamos mudar radicalmente a situação global.
Estou certo de que, se há vontade, podemos restaurar a eficácia do sistema de instituições
regionais e internacionais. Nós nem sequer precisamos, – para construir qualquer coisa de
novo, – partir do zero; este não é um "greenfield", especialmente desde que as instituições
criadas após a Segunda Guerra Mundial são bastante universais e podem ser determinadas as
especificidades modernas adequadas para gerir a situação atual.
Isto é verdade para a melhoria do trabalho da ONU, cujo papel central é insubstituível, assim
como a OSCE, que, ao longo de 40 anos, provou ser um mecanismo necessário para garantir a
segurança ea cooperação na região euro-atlântica . Devo dizer que, mesmo agora, na tentativa
de resolver a crise na Ucrânia sudeste, a OSCE tem um papel muito positivo.
À luz das mudanças fundamentais no ambiente internacional, o aumento da incontrolabilidade
e várias ameaças, precisamos de um novo consenso global de forças responsáveis. Não se
trata de alguns negócios locais ou uma divisão de esferas de influência no espírito da
diplomacia clássica, ou dominação global completa de alguém. Eu acho que precisamos de
uma nova versão de interdependência. Não devemos ter medo dela. Pelo contrário, este é um
bom instrumento para harmonizar posições.
Isto é particularmente relevante dado o fortalecimento e crescimento de determinadas regiões
do planeta, processo que requer a institucionalização desses novos pólos, criando poderosas
organizações regionais e desenvolvimento de regras para sua interação. A cooperação entre
esses centros adicionaria à estabilidade da segurança global, política e econômica. Mas, a fim
de estabelecer esse diálogo, é preciso partir do pressuposto de que todos os centros regionais
e projetos de integração que se formam em torno deles, precisam ter direitos iguais para o
desenvolvimento, de modo que eles podem complementar-se mutuamente e ninguém poderá
forçá-los a entrar em conflito ou em oposição artificialmente. Tais ações destrutivas quebrariam
os laços entre os estados, e os próprios Estados seriam submetidos à extrema dificuldade, ou
talvez até mesmo, à destruição total.
Gostaria de lembrá-lo de eventos do ano passado. Temos dito a nossos parceiros americanos
e europeus que as decisões de bastidores precipitadas, por exemplo, sobre a associação da
Ucrânia com a União Europeia, estão repletas de riscos graves para a economia. Nós nem
sequer falamos sobre política; falamos apenas sobre a economia, dizendo que tais passos,
feitos sem quaisquer acordos prévios, tocam nos interesses de muitos outros países, incluindo
a Rússia como o principal parceiro comercial da Ucrânia. Portanto, uma ampla discussão das
questões é necessária. Aliás, a este respeito, eu vou lembrá-los de que, por exemplo, as
negociações sobre a adesão da Rússia à OMC durou 19 anos. Este foi um trabalho muito
difícil, e um certo consenso foi alcançado.
Por que eu estou trazendo isso? Porque, na implementação do projeto “associação da
Ucrânia”, os nossos parceiros vêm até nós com os seus produtos e serviços pela porta traseira,
por assim dizer, e nós não concordamos com isso, ninguém nos consultou sobre isso. Tivemos
discussões sobre todos os temas relacionados com a associação da Ucrânia com a União
Europeia, as discussões persistentes, mas quero salientar que isso foi feito de uma forma
totalmente civilizada, indicando possíveis problemas, mostrando o raciocínio óbvio e
argumentos. Ninguém queria ouvir-nos e ninguém queria falar. Eles simplesmente nos disse:
isso não é da sua empresa, ponto, fim da discussão. Em vez de um abrangente, mas – insisto
– o diálogo civilizado, tudo se resumia a uma derrubada do governo; que mergulhou o país no
caos, em colapso econômico e social, numa guerra civil com enormes baixas.
Por quê? Quando pergunto aos meus colegas porque, eles já não têm uma resposta; ninguém
diz nada. É isso aí. Todo mundo está em perda, dizendo que só saiu dessa forma. Essas ações
não deveriam ter sido incentivadas – não teria funcionado. Afinal (já falei sobre isso), o ex-
presidente ucraniano Yanukovych assinou tudo, concordou com tudo. Por que fazer isso? Qual
foi o ponto? O que é isso, uma forma civilizada de resolver os problemas? Aparentemente,
aqueles que constantemente jogam juntos novas “revoluções coloridas” consideram-se “artistas
brilhantes” e simplesmente não podem parar.
Estou certo de que o trabalho das associações integradas, a cooperação das estruturas
regionais, devem ser construídas sobre uma base clara e transparente; o processo de
formação da União Econômica da Eurásia é um bom exemplo desse tipo de transparência. Os
Estados que são partes no presente projeto, informaram seus planos a seus parceiros com
antecedência, especificando os parâmetros da nossa associação, e os princípios de seu
trabalho, que correspondem plenamente com as regras da Organização Mundial do Comércio.
Vou acrescentar que também teria saudado o início de um diálogo concreto entre a Eurásia e a
União Europeia. Porém esta se recusou quase completamente, o que não está claro porque –
o que seria tão assustador nesse assunto?
Naturalmente, com esse trabalho conjunto, precisaríamos nos engajar num diálogo (eu falei
sobre isso muitas vezes e ouvi a concordância de muitos dos nossos parceiros ocidentais, pelo
menos na Europa) sobre a necessidade de criar um espaço comum para a cooperação
econômica e humanitária que se estende por todo o caminho desde o Atlântico até o Oceano
Pacífico.
Colegas, a Rússia fez a sua escolha. Nossas prioridades são melhorar ainda mais as nossas
instituições democráticas com economia aberta, desenvolvimento interno acelerado, levando-
se em conta todas as tendências modernas positivas no mundo, além da consolidação da
sociedade baseada em valores tradicionais e patriotismo.
Temos uma agenda positiva, pacífica, orientada para a integração; estamos trabalhando
ativamente com nossos colegas na União Econômica da Eurásia, a Organização de
Cooperação de Xangai, BRICS e outros parceiros. Esta agenda visa o desenvolvimento de
laços entre os governos, não os dissociando. Nós não estamos planejando remendar quaisquer
blocos ou nos envolvermos numa troca de golpes.
Os argumentos e declarações de que a Rússia está tentando estabelecer algum tipo de
império, invadindo a soberania de seus vizinhos, são infundadas. A Rússia não precisa de
nenhum tipo de lugar especial, exclusivo do mundo – eu quero enfatizar isso. Embora
respeitando os interesses dos outros, simplesmente queremos ter em conta nossos próprios
interesses e quer a nossa posição seja respeitada.
Estamos bem conscientes de que o mundo entrou numa era de mudanças e transformações
globais, quando todos nós precisamos de um determinado grau de cautela, e capacidade de
evitar medidas impensadas. Nos anos após a Guerra Fria, os participantes da política mundial
perderam um pouco essas qualidades. Agora, precisamos nos lembrar deles. Caso contrário,
as esperanças de um desenvolvimento pacífico e estável, será uma ilusão perigosa, enquanto
o tumulto de hoje vai servir simplesmente como um prelúdio para o colapso da ordem mundial.
Sim, claro, eu já disse que a construção de uma ordem mundial mais estável é uma tarefa
difícil. Estamos falando de um trabalho longo e difícil. Fomos capazes de desenvolver regras
para a interação após a Segunda Guerra Mundial, e fomos capazes de chegar a um acordo em
Helsínqui em 1970. Nosso dever comum é resolver este desafio fundamental neste novo
estágio de desenvolvimento.
Muito obrigado pela sua atenção.
http://wikispooks.org/
ver: https://wikispooks.com/wiki/National_Endowment_for_Democracy
http://www.sourcewatch.org/index.php/Talk:National_Endowment_for_Democracy
http://www.sourcewatch.org/index.php?title=National_Endowment_for_Democracy
http://www.sourcewatch.org/index.php/Talk:National_Endowment_for_Democracy
Sexta-feira, outubro 31, 2014 em 12:23:00 EDT
http://www.sourcewatch.org/index.php?title=National_Endowment_for_Democracy
(E para ler a página REAL, você tem que clicar na aba "discussão". Claramente Wikispooks e
Sourcewatch são potencialmente utilizados como pontos de coleta de dados / propaganda
disfarçadas de agências de inteligência dos Estados Unidos.
http://www.salon.com/2014/11/07/the_new_york_times_doesnt_want_you_to_understa
nd_this_vladimir_putin_speech/
[1] comentários de TJF nos rodapés, comparando com informações anteriores.
[2] de se notar que essa comparação nada tem a ver com racismo ou cor de pele, já que esse problema não existe na Federação Russa, mas como simples metáfora das falsas versões servidas pela mídia internacional.TJF.
[3] ressalvamos que Putin não tem maiores suspeitas de que os atentados das Torres Gêmeas foram ação provocativa dos próprios meios de segurança norte-americanos para justificar a suspensão dos direitos civis dos cidadãos e permitir prisõe e execuções ilegais. Como se observa nos filmes gravados na ocasião, não houve explosão mas implosão (isto é, os prédios não explodiram, mas arriaram por efeito de terem minadas suas estruturas como já observamos em demolições legais em áreas urbanas, trabalho interno, pois (TJF).
[4] Kadhafi foi um dos primeiros líderes da Região a desafiar o dólar, trocando petróleo por ouro com seus clientes internacionais. Era também um líder carismático que conseguia unificar as diversas tribos do deserto num projeto comum. Seu assassinato a sangue frio obedeceu ao interesse de eliminar essa liderança e o desafio ao dólar (TJF)
[5] Sabe-se que foram recrutados em muitos países, inclusive nos EUA e América Latina, através do Facebook, com promessa de grandes salários para tarefas de segurança privada. CIA e Mossad tiveram seu papel nesse treinamento - e o objetivo certamente é o domínio total da bacia petrolífera da região (TJF).
[6] Putin mostra-se muito moderado e cortês, como se acreditasse em “erros” da superpotência, a qual também está fadada a desaparecer, se o projeto da Nova Ordem Mundial for realizável. Não são os governos que dirigem as políticas dos países na atualidade, mas diretamente o poder econômico, que antes apenas os influenciava. Assim, a ética convencional da política internacional, apesar de constantemente violada mas sempre prestigiada a nível da opinião pública, não tem mais razão de ser apresentada, como justificativa. A justificativa é a ânsia de um sistema econômico que não tem saída, a não ser reduzir a população mundial,que não pode ser arrastada ao mercado em vista de sua precariedade pecuniária, e torná-la toda uma colônia sua, com eliminação das nacionalidades e das culturas próprias. Assim, a redução da população também reduzirá o potencial do mercado que não absorve o excesso da produção, e teoricamente daria fôlego ao Sistema para adaptar-se a um novo Orb e et Urbe. (TJF).
[7] É nesse capítulo que entra a teoria da Guerra Assimétrica, de Gene Sharp, que foi posta em execução através do aparelhamento da organização Otpor, da Sérvia, hoje denominada CANVAS, treinada e equipada pela CIA, e hoje uma organização profissional de subversão política em países constitucionais, que utiliza largamente o Facebook, e além da primavera árabe, interferiu na Ucrânia, na Venezuela, no Equador, e fez suas tentativas no Brasil e outros países. Até 2013, a Otpor gabava-se de ter feito intervenções “criativas” em 35 países. TJF
segunda-feira, 24 de novembro de 2014
Nouriel Roubini sobre a Russia putinesca, e sobre duas integracoes
concorrentes Um artigo amplo, tratando menos de economia (que é a especialidade de Nouriel Roubini, o Mister Doom da crise de
2007-2008) e bem mais de política, e até de geopolítica e de geoeconomia.
Vale a pena ler com atenção.
Paulo Roberto de Almeida
Russia: 21st Century Empire?
Nouriel Roubini
Roubini's Edge - Economic Insights of a Global Nomad
Nouriel Unplugged, November 24, 2014
Russian President Vladimir Putin has gone on record stating that the breakup of the Soviet Union was one of the worst
catastrophes of the 20th century.
Putin’s statement—which is ominous in its own right—takes on an even more menacing tone in light of recent events in
the nations of the former Soviet Union. The most obvious example is Ukraine’s conflict with Russia, which perhaps more
than any other recent event in the region, has seized the attention of the West.
During the last year, the conflict in Ukraine has come perilously close to a state of full-blown though undeclared war.
Looking back over the past 12 months, we’ve seen a seismic shift in the political makeup of the region. Russia has
effectively annexed the Crimean Peninsula, which includes the city of Sevastopol, home of the Russian Black Sea
Fleet—and critically, the Russian Navy’s only warm-water port. In the political sphere, Ukraine’s unpopular president,
Viktor Yanukovych, abandoned his vast estate along the Dnieper River, fled into exile in Russia, and was soon after
impeached by the Ukrainian parliament.
Despite these momentous events, the conflict, which began on November 21, 2013 in Kiev’s Independence Square,
grinds on. In Eastern Ukraine, Russian separatists—some wearing what appear to be Russian military uniforms—
continue to battle the Ukrainian Army, with both sides suffering casualties despite several cease-fire agreements.
But in a larger sense, the crisis in Ukraine represents a metaphor for Putin’s increasingly imperial ambition. While the
situation in Ukraine is grave and could escalate into an even more dangerous crisis, it’s still just one piece of a much
broader puzzle.
Unlocking that puzzle begins with Vladimir Putin—and what are, by all appearances, his plans for reconstituting the
Russian Empire.
Moscow’s Long Arm—A Firsthand Experience
I personally experienced the long arm of Vladimir Putin’s political machine two years ago, just as I was preparing for a
trip to Moscow.
In May of 2012, the Financial Times published an op-ed piece I had written with my good friend, the political scientist Ian
Bremmer. In the article, Ian and I said we believed that Russia was on the wrong path.
We listed many reasons why: Russia’s intervention in state capitalism; a pervasive sense of authoritarianism; and a
population in demographic decline, as well as rampant socially driven diseases like alcoholism. We recognized early on
some of the problems—economic, political, and social—that Russia might face.
A few days after the FT ran our op-ed piece, Ian and I were going to meet with senior policymakers in Moscow. When I
arrived, half of the people I was scheduled to meet with suddenly decided to cancel.
I suppose there could have been a nasty spring flu going around the United Russia party that May; but more likely,
people who hold dissenting views from Russia’s party in power will suddenly have their meetings politely canceled.
This isn’t surprising: corruption in Russia has become endemic to the political system.
Transparency International’s Corruption Perceptions Index, which measures the way public-sector institutions are
perceived, ranks the Russian government 127th out of a total of 177 countries rated—which is hardly an endorsement of
Mr. Putin’s style of governance.
Empire Building, 21st-Century Style
Russia has always considered itself an empire—even before the Bolshevik Revolution.
In Tsarist days, Imperial Russia was a great power that believed buffer states were necessary to maintain its security
and its place in the world. After the Bolshevik Revolution, during the era of the Soviet Union, Russia maintained client
states in Eastern and Central Europe to control a sphere of influence far larger than its own national territory.
During the time of the tsars, Ivan the Terrible expanded the Russian Empire by enlisting the support of the Cossacks.
Now the organizational complexity of the 21st century has given empire builders a new tool to consolidate their power:
the supranational union.
The Creation of the European Union
On January 1, 1999, 11 democratic European countries, including the most economically powerful nations in Western
Europe, officially united to create a common currency—the euro.
The eurozone, along with its free-trade counterpart, the European Union, represents a culmination of work toward a
united Europe that had begun decades earlier.
Perhaps it isn’t surprising that Putin’s latest attempt at empire building has taken on this distinctly modern form, using
the European Union and the eurozone as templates for consolidating power.
The Eurasian Economic Union (EEU), which will formally go into effect on January 1, 2015, is Putin’s latest bid to unite
the territories of the former Soviet Union. The original territories to be included in the union were Russia, Belarus, and
Kazakhstan—but the treaty was amended in October to include Armenia. The nation of Kyrgyzstan may soon follow
suit.
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The Eurasian Economic Union: A Rival EU?
The Eurasian Economic Union is something economists refer to as a “customs union”—a free-trade zone with a
common tariff applied to foreign goods.
But the EEU is still in a gestational phase. The history of the European Union suggests that over time, the integration of
a free-trade area expands—which may well be Putin’s goal.
Putin doesn’t want to simply create another North American Free Trade Agreement (NAFTA). His aim is to create
another EU—a rival EU—with the Kremlin exercising the real power behind the scenes.
To understand the empire-building project that Putin has embarked upon, it makes sense to think of the EEU as a
political union first. Putin’s ability to consolidate power politically was a necessary first step, leading to progressively
greater economic integration.
As a customs union grows, it establishes trade, financial, and investment links among its constituent states. Then, as
time goes on, member states may stabilize their currency exchange rates, eventually becoming interconnected enough
to develop a common currency.
The eurozone experiment suggests that sustaining a monetary union requires banking, fiscal, and full economic union.
When you begin to trace the trajectory of the eurozone experiment, the outlines of Mr. Putin’s plan begin to come into
focus.
If Russia wants to establish the Eurasian Economic Union as a rival to the EU, then it must include Ukraine, Russia’s
largest neighbor to the west.
As Jimmy Carter’s National Security Advisor Zbigniew Brzezinski once wrote: “Without Ukraine, Russia ceases to be an
empire, but with Ukraine suborned and then subordinated, Russia automatically becomes an empire.”
And indeed, what started as a customs union is now becoming a broader economic union for the three members of the
EEU in 2015. Russia has already heavy-handedly suggested to Kazakhstan and Belarus that they should start to
stabilize their currencies and eventually think about a common currency in the future. There are even proposals for the
beginning of a banking union, with joint regulation and supervision for banks in the EEU. Kazakhstan has already balked
at the idea of a common currency that would be a stepping stone for a fuller banking, fiscal, economic and eventually
political union.
But Russia is pressing the issue, and the delicate political transition in Kazakhstan may give Russia an opportunity to
“pull a Ukraine” in Kazakhstan, as we will discuss below.
Putin’s rhetoric is that Russia should protect Russian ethnic minorities wherever they are in the former Soviet Union—
and about 25 million ethnic Russians live in those former Soviet republics.
What a Sanctions War Would Do
In the geostrategic sense, Ukraine plays a key role in the development of the EEU, but there are additional risks to an
escalation of the conflict there.
The nightmare scenario for the West—and for investors—is an escalating sanctions war with Russia.
Thus far, Western sanctions have targeted only key individuals and companies in Russia, and have been limited mostly
to specific organizations, such as the energy sector, the military, and state banks. Essentially, the sanctions have tried
to encourage financial markets to price in a greater risk premium for Russian investments, but have steered clear of
broad trade restrictions.
Russia retaliated with counter-sanctions, specifically a ban on food imports and restrictions on imported clothing, cars,
and other products for government ministries. Coupled with a much weaker Russian ruble, which reduces Russia’s
purchasing power in the world, Russian imports from Europe have collapsed. The Russian government is now trying to
replace these goods with domestic production.
But the real concern is energy. Approximately one-third of Europe’s gas supply comes from Russia—and about half of
that gas is transported through Ukraine.
According to Eurostat, the EU’s official statistics reporting agency, Germany gets about one-third and Sweden almost
one-half of their imported energy from Russia. Poland, Slovakia, Bulgaria, and Lithuania depend on Russia for 90% or
more of their imported energy, excluding intra-EU trade.
Europe’s Energy Imports
Source: New York Times
If the West were to impose stricter sanctions against Russia, Russia might then retaliate with the supreme sanction
against the West—cutting off the supply of natural gas to Europe.
If the conflict between Ukraine and Russia were to escalate into a full-blown war, which for the moment at least does not
seem likely, the risk of a disastrous energy embargo would rise dramatically—though this would damage the Russian
economy as much, perhaps even more, than it would hurt Europe.
As recently as 2009, a pricing quarrel arose between Russia and Ukraine when Gazprom, the Russian gas giant,
refused to renew a contract due to concerns over Ukraine’s outstanding debt. The dispute was ultimately resolved by
Vladimir Putin and then Ukrainian Prime Minister Yulia Tymoshenko, but not before it threatened real catastrophe.
By the time the two leaders had brokered an accord, gas pressure had already dropped in Poland and the Czech
Republic—sending ripples of fear about energy supply through Western Europe that winter and causing waves of selling
in European equities.
Russian gas lines crisscross Ukraine
Source: BBC
So in the event of a Russian gas embargo of Western Europe, where would Russia sell its natural gas?
While Putin could attempt to redirect sales of natural gas to his trading partner China, the infrastructure required to
transport that gas has not yet been completed, and the construction required to make it operational will take years to
complete.
Despite limitations in the transportation infrastructure, the Russians already have a steady agreement in place to sell
gas to China—driven in some measure by Russia’s insecurity about its relationship with the West.
On the other side of the equation, tensions with Russia have already led some European countries to sign contracts with
the United States for future natural gas delivery. (At present, US law does not allow for the export of meaningful
amounts of liquefied natural gas [LNG], but new LNG licenses are being issued.) The US is also increasingly exporting
its excess supply of coal to Europe, as the domestic shale gas and oil boom reduce US coal consumption.
It’s Not Just Ukraine
I recently traveled to the Central Asian nation of Kazakhstan, which is a former Soviet republic and founding member of
Putin’s Eurasian Economic Union. Russia has deep and longstanding economic ties with Kazakhstan, especially in the
trade of raw materials and finished goods.
Kazakhstan is the largest landlocked nation in the world, and the ninth-largest country by overall landmass. Its northern
border with Russia is longer than 4,000 miles. Roughly one-quarter of Kazakhstan’s population of 17 million is ethnic
Russian—but in the north and west of the country, ethnic Russians account for between 40-50% of the population.
This August, in a disturbing turn of events, President Putin remarked that Kazakhstan has never had independent
statehood and was historically “part of the large Russian world.” He also said that Kazakhstan’s citizens of Russian
descent needed to be protected—and that they would insist on protection if tensions were rising.
The Kazakhstanis naturally bristled at this rhetoric, made especially ominous by the fact that Putin had made nearly
identical remarks about the ethnic Russians in Ukraine. Putin also made special mention of Kazakhstan’s current
president, Nursultan Nazarbayev, praising him for having “created a nation” where none had existed before.
This leaves many Kazakhstanis concerned about what Putin’s plans for Kazakhstan may be after Nazarbayev
eventually disappears from the scene. Nazarbayev is now in his mid-70s and has run the country since its
independence without a clear plan of succession. There are also additional concerns about whether the ethnic Russian
population of Kazakhstan will rise to the bait and begin to assert their “rights” with force, as they already have in
Ukraine. President Nazarbayev has already responded to this perceived risk by appointing more Russian ministers to
participate in his government.
Kazakhstan has played a fascinating balancing act between Russia, China, and to a lesser extent, the West. Indeed,
Kazakhstan now sells more than half of its resource exports to China.
I don’t believe there is any reason for great concern about Kazakhstan in the short term—but the uncertainty about
succession after Nazarbayev leaves the presidency could make Kazakhstan vulnerable.
Unlike many other countries in the region, Kazakhstan has some significant economic advantages—including sizable
resource exports and earnings, the fact that it has managed to save some of its oil earnings in its sovereign wealth fund.
All of this gives Kazakhstan some bargaining power vis-à-vis Russia—at least as much bargaining power as a country a
tenth the size of Russia can command.
Source: RT
Putin has also engaged in similar bullying tactics in Armenia, Moldova, Kyrgyzstan, and Tajikistan—all of which are
relatively poor, landlocked nations, with few resources and limited wealth, and which now seem likely to join the EEU at
some point in the future.
While these territorial conflicts may seem distant from Western investors, taken as a whole, they amount to a pattern of
behavior in a potentially volatile region of the world that investors should not ignore.
Challenging Global Infrastructure
Also on the geopolitical front, Russia and its BRICS partners—Brazil, India, China, and South Africa—are working on
creating a development bank that will serve as a BRICS alternative to the Western-controlled International Monetary
Fund (IMF) and the World Bank. This is yet another troubling example of Russia’s apparent desire to turn its back on the
West.
In another example, there has been speculation that Russia and China are planning to create an international payment
system to replace the SWIFT system in order to limit the capacity of the US and Europe to impose financial sanctions
against them. Support for some of these ideas has cooled in China, though, where the notion of replacing the SWIFT
system has been rejected, while many analysts in the West think the idea is nothing but a pipe-dream.
In addition, recent revelations of electronic surveillance by the US may lead Russia and other illiberal states to restrict
Internet access and create their own nationally controlled data networks.
Creating a full Eurasian Economic Union that is less tied to the West through trade, financial integration, electronic
payment, and communication may be a romantic fantasy for Russia given the fiscal costs the project would entail—
costs that Russia cannot afford.
Moreover, the recent fall in oil prices—which is perhaps driven in part by Saudi Arabia’s goal of punishing Russia for its
role in Syria and the Middle East, as well as the sanctions against Russia by the West—have led to a free-fall of the
Russian ruble and a near-recession in Russia this year and possibly next year as well.
Despite these headwinds, Putin is still very popular at home where a controlled media has spun a tale of a strong
Russia helping its ethnic cousins in Ukraine. But as the economy falters, the neoimperial goals of Putin will be
increasingly challenged.
Nevertheless, for now the Eurasian Economic Union dream is a dream to which Putin dearly clings—and he is nothing if
not tenacious.
Final Thoughts
Taken as a whole, Vladimir Putin’s behavior suggests that his endgame is to keep the former member states of the
Soviet Union unstable enough to give up on closer ties with the West. His plan is multifaceted—part political, part
military, part geostrategic—and focused on maximizing Russia’s influence in the region as well as increasing the power
of the fledgling Eurasian Economic Union.
Counterbalancing those risks in the region are the central banks of the G4—the Fed in the United States, the European
Central Bank, the Bank of England, and the Bank of Japan—which have kept interest rates low enough to suppress
market volatility.
So far, that support from central banks has served as an effective counterweight to the perception of geopolitical risk in
places like Ukraine. With a few short-term exceptions, stock market prices have remained relatively stable since the
crisis in Ukraine began almost a year ago.
There’s still plenty of risk in the world today. As an investor, you should pay attention to those events, but don’t
automatically assume that geopolitical risk will translate into a massive correction in asset prices.
Vigilance and careful observation are a must—panic is not required.
Cordially,
Nouriel Roubini
Chairman
Roubini's Edge
http://www.RoubinisEdge.com
- See more at:
http://diplomatizzando.blogspot.com.br/2014/11/nouriel-roubini-sobre-russia-putinesca.html#sthash.MiFBmQHY.s6PqcS9o.dpuf
Pilger: à sombra de uma Terceira Guerra Mundial? POR
JOHN PILGER – ON 09/12/2014CATEGORIAS: CAPA, COMUNICAÇÃO, GEOPOLÍTICA, JORNALISMO, MUNDO
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Cena de “Doutor Fantástico”, de Stanley Kubrick. Para Pilger, “mundo está diante do risco de grande guerra, talvez nuclear. EUA provocam Rússia e
China. Estas verdades estão sendo invertidas por jornalistas”
Ocultações, silêncios, mentiras: alinhamento da mídia ocidental às
manipulações dos EUA revela nítida escalada bélica — e terrível declínio do
velho jornalismo
Por John Pilger | Tradução: Vila Vudu
Por que o jornalismo sucumbiu tão completamente à propaganda? Por que
censura e distorção são a prática padrão? Por que a BBC é, tão
frequentemente, porta voz dos poderosos mais rapaces? Por que o New York
Times e o Washington Post mentem diariamente aos seus leitores-
consumidores?
Por que não se ensina os jovens jornalistas a compreender as agendas dos
veículos e a se contrapor a elas, denunciando a distância que separa os altos
objetivos declarados e a realidade da “objetividade” mais falsa? E por que não
compreendem que a essência de praticamente tudo que costumamos chamar
de “imprensa dominante” nunca é informação, mas é só e sempre, poder?
Essas são perguntas que clamam por respostas urgentes. O mundo está diante
do risco de grande guerra, talvez guerra nuclear – com os EUA claramente
decididos a isolar e provocar a Rússia e provavelmente, em breve, também a
China. Essa verdade está sendo invertida, apresentada de cabeça para baixo
por jornalistas – entre os quais, é claro, também os que divulgaram como se
fossem notícias, as mentiras que levaram ao banho de sangue no Iraque em
2003.
Vivemos tempos tão perigosos e tão distorcidos, para a percepção pública, que
a propaganda deixou de ser, como Edward Bernays a chamou, “um governo
invisível”. Ela é o governo. Governa diretamente, sem medo de ser
contraditada, e seu principal objetivo é nos conquistar: nosso sentido de
mundo, nossa capacidade de separar mentiras e verdade.
A era da informação é, na verdade, uma era da mídia. A mídia produz guerra; a
mídia censura; a mídia demoniza quem queira; a mídia vinga-se; a mídia afasta
a atenção dos eleitores do que a imprensa não quer que seja sabido – a mídia
é uma linha de montagem surreal de clichês de rendição e pressupostos
mentirosos.
Esse poder para criar uma nova “realidade” foi construído ao longo de muito
tempo. Há 45 anos, um livro intitulado The Greening of America fez furor. Na
capa, lia-se: “Há uma revolução em marcha. Não será como as revoluções
passadas. Dessa vez, a revolução nascerá com o indivíduo.”
Eu trabalhava como correspondente nos EUA e lembro bem como, da noite
para o dia, o autor – Charles Reich, um jovem aluno de Yale – recebeu status
de guru. A mensagem era que a ação política e o trabalho de informar a
verdade haviam fracassado, e só a “cultura” e a introspecção poderiam mudar
o mundo.
Em poucos anos, movido pelas forças do lucro, o culto do “eu-mesmismo” já
atropelara mortalmente nosso senso de ação conjunta, de justiça social e de
internacionalismo. Classe, gênero e raça foram separados. Se era individualista
e pessoal… era “político”. E imprensa, já então chamada “mídia”, era a
mensagem.
Ao fim Guerra Fria, a fabricação de novas “ameaças” completou o serviço de
desorientação política para todos que, vinte anos antes, ainda teriam
constituído uma oposição veemente.
Em 2003, filmei uma entrevista em Washington com Charles Lewis, respeitado
jornalista investigativo norte-americano. Discutimos a invasão ao Iraque,
acontecida meses antes. Perguntei-lhe: “E se a imprensa mais livre do mundo
tivesse denunciado as mentiras de George Bush e Donald Rumsfeld e
investigado tudo que eles diziam, em vez de pôr em circulação tudo que, como
em seguida se viu, não passava de propaganda a mais nua e crua?”
Lewis respondeu que se nós jornalistas tivéssemos feito o que era nosso
trabalho e nosso dever “haveria boa, muito boa probabilidade de que os EUA
não tivessem feito guerra ao Iraque.”
É conclusão estarrecedora, mas apoiada por outros jornalistas aos quais fiz a
mesma pergunta. Dan Rather, ex-CBS, deu-me a mesma resposta. David Rose
do Observer e consagrados jornalistas e produtores na BBC, que pediram para
que seus nomes não fossem divulgados, disseram a mesma coisa.
Em outras palavras: se os jornalistas tivessem feito jornalismo, se tivessem
perguntado e investigado, em vez de só repetir e amplificar a propaganda que
recebiam pronta, centenas de milhares de homens, mulheres e crianças não
teriam morrido; milhões não teriam perdido as próprias casas; e a guerra
sectária entre sunitas e xiitas não teria sido insuflada; e talvez nem existisse o
famigerado Estado Islâmico.
Ainda hoje, apesar dos milhões que tomaram as ruas em protestos, a maioria
das populações nos países ocidentais absolutamente ainda não tem nem ideia
da escala gigante do crime que os governos ocidentais cometeram no Iraque.
Menos gente ainda sabe que, nos 12 anos antes da invasão, os governos de
EUA e Grã-Bretanha puseram em movimento um holocausto – negando à
população civil iraquiana os meios mínimos para a sobrevivência.
Essa são as palavras do principal funcionário britânico responsável por
sanções impostas ao Iraque nos anos 1990 – um cerco medieval que provocou
a morte de meio milhão de crianças com menos de cinco anos, como a Unicef
relatou. O nome do funcionário é Carne Ross. No Ministério de Relações
Exteriores em Londres, ficou conhecido como “Mr. Iraq”. Hoje, ocupa-se de
contar, afinal, a verdade, sobre como o governo britânico mentia e os
jornalistas acorriam, lépidos, sempre dispostos a divulgar o mais possível toda
e qualquer mentira que lhes chegasse aos ouvidos. “Alimentávamos os
jornalistas com factoides que os serviços inteligência nos passavam, depois de
‘aprovados’” – disse-me ele. – “Ou os mantínhamos absolutamente longe de
qualquer fato.”
O principal sentinela, durante aquele período sombrio de informação falsificada,
foi Denis Halliday. Então secretário-geral assistente da ONU e alto funcionário
da ONU no Iraque, Halliday renunciou ao cargo e à carreira, para não ter de
implementar políticas que ele descreveu como “genocidas”. Halliday estima que
as sanções impostas por EUA e Grã-Bretanha ao Iraque mataram mais de um
milhão de iraquianos.
O que então aconteceu a Halliday é muito instrutivo. Foi apagado do mundo.
Ou foi convertido em agente do mal. No programa “Newsnight”, da BBC, o
apresentador Jeremy Paxman berrou-lhe: “Você não é defensor de Saddam
Hussein?” Recentemente, oGuardian descreveu essa cena como um dos
“momentos memoráveis” da carreira de Paxman. Semana passada, Paxman
assinou contrato de 1 milhão de libras, para escrever um livro.
Os faxineiros da supressão do jornalismo fizeram bem feito o seu trabalho
imundo. Considerem os efeitos. Em 2013, pesquisa da ComRes descobriu que
a maioria da população britânica acreditava que haviam morrido no Iraque
“menos de 10 mil pessoas” – fração ínfima da verdade. O rastro de sangue que
vai do Iraque a Londres havia sido esfregado a golpes de mídia, até quase
sumir.
Rupert Murdoch é conhecido como o chefão da “máfia midiática”, e ninguém
deve duvidar do estarrecedor poder de seus jornais – são 127, com circulação
somada de 40 milhões de exemplares, mais a rede Fox. Mas a influência
nefasta do império de Murdoch não é maior nem mais nefasta que a influência
do que se conhece como “a mídia mais ampla”.
A propaganda mais efetiva não se encontra nem no Sun nem no Fox News de
Murdoch – mas nos jornais e televisões ditos “sérios”, acobertados por um halo
de jornalismo liberal e supostamente “civilizado”.
Quando o New York Times publicou a notícia inventada segundo a qual
Saddam Hussein teria armas de destruição em massa, todos acreditaram,
porque o veículo não era o canal Fox News de Murdoch: era o New York
Times.
O mesmo vale para o Washington Post e o Guardian, jornais que, ambos,
tiveram função criticamente decisiva no condicionamento dos seus leitores, até
que aceitassem uma nova e perigosa guerra fria. Todos esses veículos da
imprensa liberal falsearam o noticiário dos eventos na Ucrânia, apresentado
como se a Rússia tivesse cometido algum crime – quando, na verdade,
aconteceu ali um golpe fascista liderado pelo EUA, ajudado pela Alemanha e
pela OTAN.
A inversão da verdade e do fato é tão generalizada que já nem se discutem,
nos EUA, os movimentos de intimidação e provocação militar que Washington
realiza contra a Rússia, nem se ouve qualquer oposição a eles. Não se ouve
notícia alguma, todas suprimidas e censuradas por trás de uma campanha de
geração de medo social, do tipo sob o qual cresci, durante a primeira guerra
fria.
Mais uma vez, o império do mal vem nos pegar, liderado por um novo Stalin ou,
perversamente, por novo Hitler. Escolha seu judas e pode malhá-lo até a
morte.
A ocultação dos fatos reais sobre a Ucrânia é um dos mais completos
blecautes de notícias de que me recordo em toda a minha vida. A maior
concentração de militares ocidentais no Cáucaso e no leste da Europa, desde o
final da 2ª Guerra Mundial, é escondida. A ajuda secreta que Washington deu a
Kiev e às suas brigadas neonazistas responsáveis por crimes de guerra contra
a população do leste da Ucrânia foi apagada do mundo. Todas as provas que
desmentem a propaganda segundo a qual a Rússia teria sido responsável por
abater em pleno voo um avião civil malaio com 300 passageiros foram
apagadas do mundo.
E, mais uma vez, quem censura é a imprensa supostamente liberal. Sem que
se apresente um único fato ou evidência, um jornalista “identificou” um líder
pró-Rússia na Ucrânia como o homem que, pessoalmente, teria derrubado o
avião. Esse homem, escreveu o tal jornalista, é conhecido como O Demônio.
Sujeito assustador, que apavorou o jornalista. Pronto. Está tudo investigado e
comprovado.
Muitos, na mídia ocidental, trabalharam duro para apresentar a população
etnicamente russa étnicos que vive na Ucrânia como outsider, forasteira em
seu próprio país — nunca como ucranianos que desejam ser integrados à
Federação Russa, como cidadãos ucranianos em luta de resistência, diante de
um golpe orquestrado contra um governo que eles elegeram.
O que o presidente da Rússia tenha a dizer não importa; é o vilão da
pantomima que se pode malhar à vontade, sem consequências. Um general
norte-americanos que dirige a OTAN e é perfeita reencarnação do Dr.
Strangelove, o “Dr. Fantástico”. O tal generalPhilip Breedlove reclama todos os
dias de invasões russas, sem um fiapo de comprovação. É a personificação do
general Jack D. Ripper, de Stanley Kubrick.
Quarenta mil russos estariam reunidos na fronteira, fortemente armados, disse
o Dr. Fantástico — digo, o general Breedlove. Pois foi o que bastou para
alimentar o “noticiário” do New York Times, do Washington Post e
do Observer – esse último, depois de ter-se destacado pelo empenho com que
publicou, como se fosse informação, as mentiras e delírios que serviram de
“base” para a invasão ao Iraque ordenada por Blair – como revelou um ex-
repórter, David Rose.
Há quase que o “prazer espiritual” de uma reunião de classe. Os batedores-de-
tambor do Washington Post são exatamente os mesmos redatores de editoriais
para os quais a existência das armas de destruição em massa de Saddam
Houssein seria “fato comprovado”.
“Se você se pergunta” – escreveu Robert Parry – “como é possível que o
mundo tenha chegado às portas da terceira guerra mundial, do mesmo modo
como chegou às portas da primeira guerra mundial há um século, tudo que tem
de fazer é observar a loucura que tomou contra de virtualmente toda a
estrutura político-informacional nos EUA, sobre a Ucrânia. Uma falsa narrativa
de bons contra maus tomou conta de tudo desde o início. E, com o tempo,
tornou-se impenetrável a qualquer fato ou informação racionalmente
produzidos.”
Parry, o jornalista que investigou e expôs todo o caso Irã-“contras”, no governo
Reagan, é um dos poucos profissionais que investiga o papel crucialmente
decisivo desempenhado pela mídia no que o ministro de Relações Exteriores
da Rússia chamou de “jogo das galinhas assustadas” [que correm cacarejando
alto, antes até de saberem o que realmente está acontecendo]. Mas será
mesmo jogo? No momento em que escrevo esse texto, o Congresso dos EUA
está votando a Resolução n. 758 que, em resumo, ordena: “vamos nos
preparar para a guerra contra a Rússia.”
No século 19, o escritor Alexander Herzen descreveu o liberalismo secular
como “a última religião, embora sua igreja não seja do outro mundo, mas
deste.” Hoje, esse direito divino é muito mais violento e perigoso que qualquer
coisa que o mundo muçulmano produza, embora seu principal triunfo seja,
talvez, a ilusão da informação livre e aberta.
Nos noticiários, países inteiros desaparecem. A Arábia Saudita, fonte do
extremismo e do terror apoiado pelo ocidente, não é assunto – exceto quando
reduz o preço do petróleo, e é então apresentada praticamente como
associação de filantropia universal. O Iêmen sofreu 12 anos sob ataques
de drones norte-americanos. Quem soube? Quem se incomoda?
Em 2009, a Universidade do Oeste da Inglaterra [orig. University of the West of
England] publicou os resultados de um estudo de dez anos sobre a cobertura
que a BBC dera à Venezuela. Das 304 matérias levadas ao ar, só três
mencionavam qualquer das políticas socialmente mais importantes introduzidas
pelo governo de Hugo Chávez. O maior programa de alfabetização em
massa (que erradicou o analfabetismo na Venezuela) da história da
humanidade recebeu duas linhas de comentário.
Na Europa e nos EUA, milhões de leitores e de telespectadores não sabem
praticamente nada sobre as mudanças dramáticas, de melhoria na qualidade
de vida que foram implantadas na América Latina, muitas delas inspiradas em
Chávez. Como na BBC, também as matérias publicadas no New York Times,
no Washington Post, no Guardian e no resto de toda a “respeitável” imprensa
‘séria’ no ocidente, tudo foi sempre redigido e distribuído de má fé. Zombaram
de Chávez até em seu leito de morte. E fico a pensar: como se explica isso,
nas escolas de jornalismo?
Por que milhões de pessoas na Grã-Bretanha aceitam e deixam-se convencer
de que esse castigo coletivo chamado “austeridade” seria necessário?! Logo
depois do crasheconômico em 2008, o que se viu exposto foi um sistema
apodrecido. Por um átimo de segundo os bancos foram “noticiados” como
escroques, com dívidas para com o público, que haviam assaltado e traído.
Mas em apenas poucos meses – exceto uma poucas pedras lançadas contra
“bônus” corporativos exagerados, pagos aos executivos – a mensagem já
mudara completamente. As caricaturas e as críticas contra banqueiros-
bandidos desapareceram da midia. E começou o tempo de glorificar algo
chamado “austeridade” – para a desgraça de milhões de pessoas comuns.
Houve algum dia tunga mais ousada que essa?
Hoje, muitas das bases e fundamentos da vida civilizada na Grã-Bretanha
estão sendo desmanteladas, para pagar dívida fraudulenta, dívida de
escroques. Os cortes de “austeridade” parecem chegar a 83 bilhões de libras.
É quase exatamente o total de impostos sonegados por aqueles mesmos
bancos e imprensa escroques, como a Amazon britânica e o jornal britânico de
Murdoch, News UK. E os bancos dos escroques estão recebendo subsídio
anual de 100 bilhões de libras, em avais, garantias e seguros grátis – dinheiro
suficiente para financiar toda a Saúde Pública Nacional.
A crise econômica é pura propaganda. Hoje, a Grã-Bretanha, os EUA, grande
parte da Europa, Canadá e Austrália são governados por políticos extremistas.
Quem fala pela maioria? Quem está construindo a narrativa da maioria? Quem
oferece informação confiável? Quem organiza e preserva registros corretos de
fatos reais? Não é para isso que existem os jornalistas?
Em 1977, Carl Bernstein, apoiado na justa fama que adquiriu em Watergate,
revelou que mais de 400 jornalistas e executivos da mídia trabalhavam para
a CIA. A lista incluía jornalistas do New York Times, Time e das redes de
televisão. Em 1991, Richard Norton Taylor, do Guardian, revelou números
semelhantes, sobre seu país.
Hoje já nada disso é necessário. Duvido muito que alguém tenha tido de pagar
aoWashington Post e a muitos outros veículos para que se pusessem a acusar
Edward Snowden de ajudar terroristas. Duvido que alguém precise pagar os
que rotineiramente ofendem Julian Assange – embora, sim, haja muitas
recompensas.
Para mim, é perfeitamente claro que a principal razão pela qual Assange atraiu
tanta ira, violência e inveja é que o WikiLeaks pôs a nu toda uma elite política
corrupta que é mantida à tona e no poder exclusivamente por jornalistas e
jornalismos. Ao inaugurar uma extraordinária era de abertura e transparência,
Assange fez inimigos mortais, porque iluminar o papel dos cães de guarda da
mídia e envergonhá-los. Assange tornou-se o arqui-inimigo, um alvo
preferencial — mas, simultaneamente, galinha dos ovos de outro. Assinaram-
se contratos lucrativos para livros e para filmes hollywoodianos, e carreiras
chegaram aos píncaros da glória, nas costas de WikiLeaks e seu criador. Muita
gente ganhou muito dinheiro, enquanto o WikiLeaks lutava para não morrer.
Nada disso foi mencionado em Estocolmo, dia 1ª/12, quando o editor
do Guardian, Alan Rusbridger, partilhou com Edward Snowden o “Right
Livelihood Award”, conhecido como o Prêmio Nobel da Paz alternativo. O mais
chocante daquele evento foi que Assange e o WikiLeaks foram apagados do
mundo. Como se não tivessem existido. Como se fossem não-pessoas.
Ninguém falou em defesa do criador, do pioneiro absoluto do movimento de
soar o alarme, de avisar do perigo mortal que se esconde na manipulação do
noticiário pela imprensa. O homem que deu de presente ao Guardian um dos
maiores furos de toda a história. E o mais importante de tudo: foram Assange e
sua equipe de WikiLeaks quem, de fato – e brilhantemente – resgataram
Edward Snowden em Hong Kong e o puseram em total segurança [em Moscou,
onde hoje vive e trabalha]. Nem uma palavra.
O que tornou ainda mais gritante, irônica e desgraçada aquela censura por
omissão, foi que a tal cerimônia realizava-se no Parlamento da Suécia –
parlamento e autoridades cujo vergonhoso silêncio no caso construído contra
Assange colaborou para um dos maiores golpes jamais assestados contra a
justiça em Estocolmo.
“Quando a verdade é substituída pelo silêncio” – disse o dissidente soviético
Yevtushenko – “o silêncio torna-se mentira.”
Esse tipo de silêncio mentira tem de ser quebrado pelos jornalistas. Que todos
olhemos nossa própria cara no espelho. Temos de chamar às falas a imprensa
submissa ao poder e ao dinheiro, e a psicose que mais uma vez ameaça
arrastar o mundo à guerra.
No século 18, Edmund Burke descreveu o papel da imprensa como um Quarto
Poder que fiscalizaria os poderosos. Não sei sequer se alguma imprensa
algum dia fez tal coisa. Mas sei, com certeza absoluta, que, hoje, nenhuma faz.
Acho que precisamos de um Quinto Estado: jornalismo que monitore, que
desconstrua e que enfrente a propaganda e que ensine os mais jovens a
defender os mais fracos e mais pobres, não os mais ricos e mais poderosos.
Para mim, jornalismo tem de ser a insurreição do saber subjugado.
Estamos diante do centenário da 1ª Guerra Mundial. Na época os jornalistas
foram recompensados e prestigiados por seu silêncio e covardia. No auge do
banho de sangue, o primeiro-ministro britânico David Lloyd George
confidenciou a C.P. Scott, editor do Manchester Guardian: “Se as pessoas
conhecessem a verdade, a guerra acabaria amanhã cedo. Mas não conhecem
nem podem conhecer.”
Ainda não conhecem. Mas, com certeza, já é hora de conhecerem.
Terceira Guerra é contra a Rússia
BOAVENTURA DE SOUSA SANTOS – ON 10/12/2014 - HTTP://OUTRASPALAVRAS.NET/DESTAQUES/BOAVENTURA-A-TERCEIRA-GUERRA-
E-CONTRA-A-RUSSIA/
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Bombardeiro B-52 equipado com armas atômicas. Para Boaventura, “várias agências de segurança [norte-americanas] fazem planos já para o Day After de um confronto nuclear”
Washington provoca Moscou em três frentes, atiça possível conflito nuclear e
ignora opinião da sociedade norte-americana. Em nome da “democracia”?
Por Boaventura de Sousa Santos
Tudo leva a crer que está em preparação a terceira guerra mundial. É uma
guerra provocada unilateralmente pelos EUA com a cumplicidade ativa da UE.
O seu alvo principal é a Rússia e, indiretamente, a China. O pretexto é a
Ucrânia. Num raro momento de consenso entre os dois partidos, o Congresso
dos EUA aprovou no passado dia 4 a Resolução 758, que autoriza o
Presidente a adotar medidas mais agressivas de sanções e de isolamento da
Rússia, a fornecer armas e outras ajudas ao governo da Ucrânia e a fortalecer
a presença militar dos EUA nos países vizinhos da Rússia. A escalada da
provocação da Rússia tem vários componentes que, no conjunto, constituem a
segunda guerra fria. Nesta, ao contrário da primeira, assume-se agora a
possibilidade de guerra total e, portanto, de guerra nuclear. Várias agências de
segurança fazem planos já para o Day After de um confronto nuclear.
Os componentes da provocação ocidental são três: sanções para debilitar a
Rússia; instalação de um governo satélite em Kiev; guerra de propaganda. As
sanções são conhecidas, sendo a mais insidiosa a redução do preço do
petróleo, que afeta de modo decisivo as exportações de petróleo da Rússia,
uma das mais importantes fontes de financiamento do país. Esta redução trará
o benefício adicional de criar sérias dificuldades a outros países considerados
hostis (Venezuela e Irã). A redução é possível graças ao pacto celebrado entre
os EUA e a Arábia Saudita, nos termos do qual os EUA protegem a família real
(odiada na região) em troca da manutenção da economia dos petrodólares
(transações mundiais de petróleo denominadas em dólares), sem os quais o
dólar colapsa enquanto reserva internacional e, com ele, a economia dos EUA,
o país com a maior e mais obviamente impagável dívida do mundo.
O segundo componente é controle total do governo da Ucrânia de modo a
transformar este país num estado satélite. O respeitado jornalista Robert Parry
(que denunciou o escândalo do Irã-contra) informa que a nova ministra das
finanças da Ucrânia, Natalie Jaresko, é uma ex-funcionária do Departamento
de Estado, cidadã dos EUA, que obteve cidadania ucraniana dias antes de
assumir o cargo. Foi até agora presidente de várias empresas financiadas pelo
governo norte-americano e criadas para atuar na Ucrânia. Agora compreende-
se melhor a explosão, em Fevereiro passado, da secretária de estado norte-
americana para os assuntos europeus, Victoria Nulland, “Fuck the EU”. O que
ela quis dizer foi: “Raios! A Ucrânia é nossa. Pagámos para isso”. O terceiro
componente é a guerra de propaganda. Os grandes media e seus jornalistas
estão a ser pressionados para difundirem tudo o que legitima a provocação
ocidental e ocultarem tudo o que a questione. Os mesmos jornalistas que,
depois dos briefings nas embaixadas dos EUA e em Washington, encheram as
páginas dos seus jornais com a mentira das armas de destruição massiva de
Saddam Hussein, estão agora a enchê-las com a mentira da agressão da
Rússia contra a Ucrânia. Peço aos leitores que imaginem o escândalo midiático
que ocorreria se se soubesse que o Presidente da Síria acabara de nomear um
ministro iraniano a quem dias antes concedera a nacionalidade síria. Ou que
comparem o modo como foram noticiados e analisados os protestos em Kiev
em Fevereiro passado e os protestos em Hong Kong das últimas semanas. Ou
ainda que avaliem o relevo dado à declaração de Henri Kissinger de que é uma
temeridade estar a provocar a Rússia. Outro grande jornalista, John Pilger,
dizia recentemente que, se os jornalistas tivessem resistido à guerra de
propaganda, talvez se tivesse evitado a guerra do Iraque em que morreram até
ao fim da semana passada 1.455.590 iraquianos e 4801 soldados norte-
americanos. Quantos ucranianos morrerão na guerra que está a ser
preparada? E quantos não-ucranianos?
Estamos em democracia quando 67% dos norte-americanos são contra a
entrega de armas à Ucrânia e 98% dos seus representantes votam a favor?
Estamos em democracia na Europa quando uma discrepância semelhante ou
maior separa os cidadãos dos seus governos e da Comissão da UE, ou quando
o parlamento europeu segue nas suas rotinas enquanto a Europa está a ser
preparada para ser o próximo teatro de guerra, e a Ucrânia, a próxima Líbia?
A Terceira Guerra Mundial? 22/12/2014 - Copyleft - http://cartamaior.com.br/?%2FColuna%2FA-Terceira-Guerra-Mundial-%2F32494
Boaventura de Sousa Santos
É uma guerra provocada unilateralmente pelos EUA com a cumplicidade
da Europa. O alvo principal é a Rússia e, indiretamente, a China. O
pretexto é a Ucrânia.
Tudo leva a crer que está em preparação a terceira guerra mundial, se
entendermos por “mundial” uma guerra que tem o seu teatro principal de
operações na Europa e se repercute em diferentes partes do mundo. É uma guerra
provocada unilateralmente pelos EUA com a cumplicidade ativa da Europa. O seu
alvo principal é a Rússia e, indiretamente, a China. O pretexto é a Ucrânia. Num
raro momento de consenso entre os dois partidos, o Congresso dos EUA aprovou
no passado dia 4 de dezembro a Resolução 758 que autoriza o Presidente a
adotar medidas mais agressivas de sanções e de isolamento da Rússia, a fornecer
armas e outras ajudas ao governo da Ucrânia e a fortalecer a presença militar dos
EUA nos países vizinhos da Rússia. A escalada da provocação à Rússia tem
vários componentes que, no conjunto, constituem a segunda guerra fria. Nesta, ao
contrário da primeira, a Europa é um participante ativo, ainda que subordinado aos
EUA, e assume-se agora a possibilidade de guerra total e, portanto, de guerra
nuclear. Várias agências de segurança fazem planos já para o Day After de um
confronto nuclear.
Os componentes da provocação ocidental são três: sanções para debilitar a
Rússia; instalação de um governo satélite em Kiev; guerra de propaganda. As
sanções são conhecidas, sendo a mais insidiosa a redução do preço do petróleo,
que afeta de modo decisivo as exportações de petróleo da Rússia, uma das mais
importantes fontes de financiamento do país. O orçamento da Rússia para o
próximo ano foi elaborado com base no preço do petróleo à razão de 100 dólares
por barril. A redução do preço combinada com as outras sanções e a
desvalorização do rublo agravarão perigosamente o déficit orçamental. Esta
redução trará o benefício adicional de criar sérias dificuldades a outros países
considerados hostis (Venezuela, Irã e Equador). A redução é possível graças ao
pacto celebrado entre os EUA e a Arábia Saudita, nos termos do qual os EUA
protegem a família real (odiada na região) em troca da manutenção da economia
dos petrodólares (transações mundiais de petróleo denominadas em dólares), sem
os quais o dólar colapsa enquanto reserva internacional e, com ele, a economia
dos EUA, o país com a maior e mais obviamente impagável dívida do mundo.
O segundo componente é o controle total do governo da Ucrânia de modo a
transformar este país num estado satélite. O respeitado jornalista Robert Parry
(que denunciou o escândalo do Irã-contra) informa que a nova ministra das
finanças da Ucrânia, Natalie Jaresko, é uma ex-funcionária do Departamento de
Estado, cidadã dos EUA, que obteve cidadania ucraniana dias antes de assumir o
cargo. Foi até agora presidente de várias empresas financiadas pelo governo
norte-americano e criadas para atuar na Ucrânia. Agora compreende-se melhor a
explosão, em fevereiro passado, da secretária de estado norte-americana para os
assuntos europeus, Victoria Nulland: “Fuck the EU”. O que ela quis dizer foi:
“Raios! A Ucrânia é nossa. Pagamos para isso”.
O terceiro componente é a guerra de propaganda. Os grandes media e seus
jornalistas estão a ser pressionados para difundirem tudo o que legitime a
provocação ocidental e ocultarem tudo o que a questione. Os mesmos jornalistas
que, depois dos briefings nas embaixadas dos EUA e em Washington, encheram
as páginas dos seus jornais com a mentira das armas de destruição massiva de
Saddam Hussein, estão agora a enchê-las com a mentira da agressão da Rússia
contra a Ucrânia. Peço aos leitores que imaginem o escândalo mediático que
ocorreria se se soubesse que o Presidente da Síria acabara de nomear um
ministro iraniano a quem dias antes concedera a nacionalidade síria. Ou que
comparem o modo como foram noticiados e analisados os protestos em Kiev em
fevereiro passado e os protestos em Hong Kong das últimas semanas. Ou ainda
que avaliem o relevo dado à declaração de Henri Kissinger de que é uma
temeridade estar a provocar a Rússia. Outro grande jornalista, John Pilger, dizia
recentemente que, se os jornalistas tivessem resistido à guerra de propaganda,
talvez se tivesse evitado a guerra do Iraque em que morreram até ao fim da
semana passada 1.455.590 iraquianos e 4801 soldados norte-americanos.
Quantos ucranianos morrerão na guerra que está a ser preparada? E quantos não-
ucranianos?
Estamos em democracia quando 67% dos norte-americanos são contra a entrega
de armas à Ucrânia e 98% dos seus representantes votam a favor? Estamos em
democracia na Europa quando países da UE membros da NATO podem estar a
ser conduzidos, à revelia dos cidadãos, a travar uma guerra contra a Rússia em
benefício dos EUA, ou quando o parlamento europeu segue nas suas rotinas de
conforto enquanto a Europa está a ser preparada para ser o próximo teatro de
guerra, e a Ucrânia, a próxima Líbia?
As razões da insanidade
Para entender o que se está a passar é preciso ter em conta dois fatos: o declínio
dos EUA enquanto país hegemônico; o negócio altamente lucrativo da guerra. O
declínio do poder econômico-financeiro é cada vez mais evidente. Depois do 11 de
Setembro de 2001, a CIA financiou um projeto chamado “projeto profecia”
destinado a prever possíveis novos ataques aos EUA a partir de movimentos
financeiros estranhos e de grande envergadura. Sob diferentes formas, esse
projeto tem continuado, e um dos seus participantes prevê o próximo crash do
sistema financeiro com base nos seguintes sinais: a Rússia e a China, os maiores
credores dos EUA, têm vindo a vender os títulos do tesouro e em troca têm vindo a
adquirir enormes quantidades de ouro; estranhamente, este títulos têm vindo a ser
comprados em grandes quantidades por misteriosos investidores belgas e muito
acima da capacidade deste pequeno país (especula-se se o próprio banco de
reserva federal não estará envolvido nesta operação); aqueles dois países estão
cada vez mais a usar as suas moedas e não os petrodólares nas transações de
petróleo (todos se recordam que Saddam e Kadafi procuraram usar o euro e o
preço que pagaram pela ousadia); finalmente, o FMI (o cavalo de Troia) prepara-se
para que o dólar deixe de ser nos próximos anos a moeda de reserva e seja
substituída por uma moeda global, os SDR (special drawing rights).
Para os autores do projeto profecia, tudo isto indica que um ataque aos EUA está
próximo e que para este se defender tem de manter os petrodólares a todo o custo,
assegurando o acesso privilegiado ao petróleo e ao gás, tem de conter a China e
tem de debilitar a Rússia, idealmente provocando a sua desintegração, tipo
Jugoslávia. Curiosamente, os “especialistas” que veêm na venda da dívida uma
atitude hostil por parte de potências agressoras são os mesmos que aconselham
os investidores norte-americanos a procederem da mesma maneira, isto é, a
desfazerem-se dos títulos, a comprar moedas de ouro e a investirem em bens sem
os quais os humanos não podem viver: terra, água, alimentos, recursos naturais,
energia.
Transformar os sinais óbvios de declínio em previsões de agressão visa justificar a
guerra como defesa. Ora a guerra é altamente lucrativa devido à superioridade dos
EUA na condução da guerra, no fornecimento de equipamentos e nos trabalhos de
reconstrução. E a verdade é que, como escreveu Howard Zinn, os EUA têm estado
permanentemente em guerra desde a sua fundação. Acresce que, ao contrário da
Europa, a guerra nunca será travada em solo norte-americano, salvo, claro, o caso
de guerra nuclear. Em 14 de Outubro de 2014, o New York Times divulgava o
relatório da CIA sobre o fornecimento clandestino e ilegal de armas e
financiamento de guerras nos últimos 67 anos em muitos países, entre eles, Cuba,
Angola e Nicarágua. Esta notícia serviu para que Noam Chomsky dissesse em
“The Laura Flanders Show” que aquele documento só podia ter o seguinte título:
“Yes, we declare ourselves to be the world´s leading terrorist state. We are proud of
it” (“Sim, declaramos que somos o maior estado terrorista do mundo e temos
orgulho nisso”).
Um país em declínio tende a tornar-se caótico e errático na sua política
internacional. Immanuel Wallerstein refere que os EUA se transformaram num
canhão descontrolado (a loose canon), um poder cujas ações são imprevisíveis,
incontroláveis e perigosas para ele próprio e para os outros. A consequência mais
dramática é que esta irracionalidade se repercute e intensifica na política dos seus
aliados. Ao deixar-se envolver na nova guerra fria, a Europa, não só atua contra os
seus interesses económicos, como perde a relativa autonomia que tinha construído
no plano internacional depois de 1945. A Europa tem todo o interesse em continuar
a intensificar as suas relações comerciais com a Rússia e em contar com esta
como fornecedora de petróleo e gás. As sanções contra a Rússia podem a vir a
afetar mais a Europa que a Rússia. Ao alinhar-se com o militarismo da OTAN onde
os EUA têm total preponderância, a Europa põe a economia europeia ao serviço
da política geoestratégica dos EUA, torna-se energeticamente mais dependente
dos EUA e dos seus estados satélites, perde a oportunidade de se expandir com a
entrada da Turquia na União Europeia. E o mais grave é que esta irracionalidade
não é o mero resultado de um erro da avaliação dos interesses dos europeus. É
muito provavelmente um ato de sabotagem por parte das elites neoconservadoras
europeias no sentido de tornar a Europa mais dependente dos EUA, tanto no plano
energético e económico, como no plano militar.
Por isso, o aprofundamento do envolvimento na OTAN e o tratado de livre
comércio entre a UE e os EUA (parceria transatlântica de investimento e comércio)
são os dois lados da mesma moeda.
Pode argumentar-se que a nova guerra fria, tal como a anterior, não conduzirá a
um enfrentamento total. Mas não esqueçamos que a primeira guerra mundial foi
considerada, quando começou, uma escaramuça que não duraria mais de uns
meses. Durou quatro anos e custou entre 9 e 15 milhões de mortos.
O que Putin quer?
22/4/2015, [*] Rostislav Ishchenko – The Vineyard of the Saker
What does Putin want? A major analysis by Rostislav Ishchenko (must read!)
Traduzido pelo pessoal da Vila Vudu
Blog do Castor Filho.
The Saker
Introdução do Saker: A análise que segue é, de longe, a melhor que li desde o início do conflito na Ucrânia.
Tenho postado regularmente nesse blog escritos de Ishchenko, porque o considero um dos melhores analistas russos. Mas desta vez Ishchenko realmente produziu uma obra prima, uma análise ampla da posição geoestratégica da Rússia, análise muito clara e, me parece, absolutamente acurada, de toda a “estratégia de Putin” para a Ucrânia.
Tenho dito sempre que esse conflito não é sobre a Ucrânia, mas sobre o futuro do planeta e que não há solução “novorrussa” nem, sequer, solução “ucraniana”, mas o único resultado possível é uma vitória estratégica, ou da Rússia ou dos EUA, que afetará todo o planeta. Ishchenko oferece aí um panorama soberbo dos riscos e opções para os dois lados e oferece uma “chave” muito ampla para o comportamento aparentementeincompreensível da Rússia, nesse conflito.
Por fim, Ishchenko compreende também perfeitamente a dinâmica complexa e sutil dentro da sociedade russa. Quando escreve que “o poder russo é poder por autoridade-conhecimento-reconhecimento, não autoritário”[orig. authoritative, [1] rather than authoritarian] acerta na mosca, e explica mais, em sete palavras [ing.] do que nos bilhões de palavras inúteis escritas pelos ditos “experts” tentando descrever a realidade russa.
Todos temos enorme dívida de gratidão com Denis, Gideon e Robin, pela tradução, do russo ao inglês, desse texto seminal e muito difícil de traduzir. Só podemos ler esse artigo em inglês, graças às incontáveis horas de trabalho desses voluntários, decididos a produzir a tradução de alta qualidade que a análise merece.
Recomendo que todos leiam atentamente o que aí vai. Releiam. O artigo muito merece leitura e releitura.
The Saker
Vladimir Putin em 16/4/2015
A seguir o artigo: “O que Putin quer?” Já é gratificante que os “patriotas” não tenham instantaneamente culpado Putin por não ter varrido do Donbass as tropas de Kiev, em janeiro e fevereiro, ou pelas consultas de Moscou com Merkel e Hollande. Mesmo assim, estão ainda impacientes por uma vitória. Os mais radicais estão tão convencidos como antes, de que Putin “submeterá a Novorrússia”. E os moderados temem que aconteça tão logo seja assinada a próxima trégua (se houver), por causa da necessidade de reagrupar e reabastecer o exército da Novorrússia (o que de fato já poderia ter sido feito sem desengajamento das operações militares), para pôr-se em dia com as novas circunstâncias do front internacional e preparar-se para novas batalhas diplomáticas. De fato, apesar de toda a atenção que diletantes políticos e/ou militares (os Talleyrands e os Bonapartes da Internet) estão dando à situação no Donbass e na Ucrânia em geral, trata-se só de um ponto num front global: o resultado da guerra está sendo decidido não no aeroporto de Donetsk ou nas colinas em torno de Debaltsevo, mas nos gabinetes da Praça Staraya [2] e da Praça Smolenskaya [3] e em gabinetes em Paris, Bruxelas e Berlim. Porque a ação militar é apenas um de muitos componentes da briga política. É o componente mais áspero e derradeiro, que traz grande risco, mas a questão não começou com a guerra e não terminará com guerra. A guerra é apenas um passo intermediário que mostra a impossibilidade de acordo. O objetivo da guerra é criar novas condições que tornem possível o acordo, ou mostrar que já não há necessidade de acordo algum, com o desaparecimento de um dos lados do conflito. Quando chega a hora dos acordos, quando a batalha já acabou, os soldados voltaram aos quartéis e os generais já começaram a escrever memórias e preparar-se para a guerra seguinte, aí, afinal, é que o resultado real do confronto é determinado por políticos e diplomatas, à mesa de negociações. Raramente a população em geral ou os militares compreendem decisões políticas. Por exemplo, durante a guerra austro-prussiana de 1866, o chanceler da Prússia Otto Von Bismarck (depois chanceler do Império Alemão) não deu ouvidos às repetidas ordens do rei Wilhelm I (futuro Imperador Alemão) e aos pedidos dos generais prussianos para que tomasse Viena, no que fez muito bem. Assim, conseguiu acelerar a paz em termos que interessavam à Prússia e também garantiu que a Austro-Hungria se tornasse para sempre (OK, até o desmembramento em 1918) parceira júnior da Prússia e, mais tarde, do Império Alemão. Para compreender como, quando e sob que condições pode chegar ao fim qualquer atividade militar, temos de saber o que desejam os políticos e como eles veem as condições do acordo pós-guerra. Só assim se compreenderá claramente por que a ação militar converteu-se em guerra civil de baixa
intensidade com tréguas ocasionais, e não só na Ucrânia, mas também na Síria. Obviamente, não nos interessa o que pensem os políticos de Kiev, porque não decidem coisa alguma. O fato de que a Ucrânia é governada por estrangeiros já não é segredo. Não importa que os membros do Gabinete sejam estonianos ou georgianos; mesmo assim, são sempre norte-americanos. E também seria grave erro levar em conta o que pense sobre como qualquer dos líderes da República Popular de Donetsk (RPD) e da República Popular de Lugansk (RPL) veem o futuro. Essas repúblicas só existem com o apoio russo e, enquanto a Rússia as apoiar, há interesses russos a serem protegidos, inclusive de decisões e iniciativas independentes. Há coisas demais em jogo, para que seja possível permitir que [Alexander] Zakharchenko ou [Igor] Plotnitzky ou qualquer outro, em qualquer caso, tome decisões independentes.
Alexander Zakharchenko em 6/9/2014
Tampouco nos interessa a posição da União Europeia. Até o verão do ano passado, muita coisa dependia da União Europeia, quando a guerra ainda poderia ter sido evitada ou detida no início. Qualquer posição antiguerra firme, fundamentada, que a União Europeia tivesse tomado teria bloqueado as iniciativas dos EUA para começar a guerra e teria convertido a União Europeia em ator geopolítico independente relevante. A União Europeia perdeu essa oportunidade e, em vez de mostrar-se ator independente, agiu como vassalo confiável dos EUA. Resultado disso, a União Europeia vê-se hoje à beira de preocupante levante por lá mesmo. Nos anos vindouros, a União Europeia tem toda a chance de ter
destino igual ao da Ucrânia, só que com rugidos mais ferozes, mais sangue derramado e menos chances de que as coisas venham a acalmar-se em futuro próximo – em outras palavras, com menos chances de que apareça alguém e ponha as coisas em ordem. De fato, hoje a União Europeia pode escolher se permanece como ferramenta dos EUA ou se se aproxima mais da Rússia. Dependendo dessa escolha, a Europa pode safar-se só com escoriações leves, como o desligamento de partes periféricas e possível fragmentação de alguns países, ou pode sofrer colapso total. A julgar pela relutância das elites europeias ante a decisão de abertamente romper com os EUA, o colapso é quase inevitável. O que nos deve interessar são as opiniões dos dois principais players que determinam a configuração do front geopolítico e, de fato, estão disputando a vitória na guerra de última geração – a IIIª Guerra Mundial redecêntrica. Esses players são EUA e Rússia. A posição dos EUA é visível e transparente. Na segunda metade dos anos 1990s, Washington deixou passar a única oportunidade que havia para reformar sem obstáculos a economia da Guerra Fria e, assim, evitar a crise que já se anunciava num sistema cujo desenvolvimento é limitado pela natureza limitada, exaurível, do planeta Terra e de seus recursos, inclusive os recursos humanos, o que conflita com a necessidade infinita de imprimir dólares. Perdida aquela oportunidade, o saque contra o resto do mundo passou a ser o único meio pelo qual os EUA conseguiriam prolongar a agonia do sistema. Primeiro, saíram à caça dos países do Terceiro Mundo. Depois, atacaram concorrentes potenciais. Depois, aliados e até amigos íntimos. E esse saque só poderá continuar se e somente se os EUA permanecerem o único e incontestado hegemon planetário. Assim, quando a Rússia declarou o próprio direito de tomar decisões políticas independentes – decisões que tinham a ver com a região, não com o planeta – tornou-se inevitável o confronto contra os EUA. Não há como esse confronto chegar ao fim num pacto de paz de mútuo compromisso. Para os EUA, pacto de compromisso com a Rússia significaria renúncia voluntária à hegemonia, o que levaria a rápida catástrofe sistêmica – crise que não seria só política e econômica, mas paralisaria as instituições do Estado, com o quê o governo ficaria impedido de funcionar. Em outras palavras, qualquer pacto de compromisso com a Rússia implica a inevitável desintegração dos EUA. Mas se os EUA vencem, então será a Rússia a conhecer sua catástrofe sistêmica. Consequência de qualquer tipo de “rebelião”, as classes dominantes russas serão punidas com confisco e liquidação de propriedades, e com cadeia, claro. O Estado seria dividido, territórios substanciais seriam anexados, e todas as forças militares russas seriam destruídas.
Portanto, a guerra atual prosseguirá até que só reste um dos dois contendores. Qualquer acordo será sempre trégua temporária – pausa necessária para reagrupar, mobilizar novos recursos e fazer (i.e., pôr no fogo) aliados adicionais. Para completar esse quadro da situação, só nos falta a posição da Rússia. É essencial compreender o que a liderança russa deseja obter, especialmente o Presidente da Rússia, Vladimir Putin. Estamos falando do papel chave que Putin desempenha na organização da estrutura russa de poder. O sistema russo de poder é sistema de poder por autoridade - conhecimento - reconhecimento, não é, como dizem muitos, sistema autoritário [orig. authoritative, rather than authoritarian]. Significa que não se baseia em alguma consolidação legislativa da autocracia, mas na autoridade-conhecimento de quem criou o sistema e, como operador dele, o faz efetivamente funcionar. Durante os 15 anos de Putin no governo da Rússia, apesar da difícil situação externa e interna, ele tentou maximizar o papel do governo, da assembleia legislativa e, até, das autoridades locais. São passos completamente lógicos, tomados para dar completude, estabilidade e continuidade ao sistema. Dado que nenhum político governa para sempre, a continuidade política, independente de quem chegue ao poder, é chave para que o sistema permaneça estável. Infelizmente, ainda não se alcançou na Rússia o total controle autônomo, a saber, a habilidade para funcionar sem que o presidente tenha de estar supervisionando. Putin continua a ser o componente chave do sistema, porque o povo deposita sua confiança nele, pessoalmente. O povo russo confia muito menos no sistema, representado pelas autoridades públicas e agências individuais. Por isso, as opiniões e planos políticos de Putin tornaram-se o fator decisivo em áreas como, dentre outras, a política externa da Rússia. Se há exagero na frase “sem Putin, não há Rússia”, a frase “o que Putin deseja, a Rússia também deseja” reflete muito acuradamente a situação, na minha avaliação. Primeiro, observemos que o homem que durante 15 anos cuidadosamente guiou a Rússia para seu renascimento fez o que fez sob condições de hegemonia dos EUA na política mundial, sob muitas oportunidades significativas para que Washington influenciasse a política interna russa. Com certeza Putin teve de compreender a natureza da luta e do adversário. Sem isso, jamais teria permanecido por tanto tempo no posto. O nível de confrontação que a Rússia permitiu-se entrar contra os EUA cresceu muito lentamente e, até certo ponto, quase sem que ninguém percebesse o que acontecia. Por exemplo, a Rússia não reagiu (nenhuma reação) contra a primeira tentativa de “revolução colorida” na Ucrânia em 2000-2002 (o caso Gongadze, [4] o Escândalo do Cassette [5] e o movimento de protesto “Ucrânia sem Kuchma” [6]).
A Rússia tomou posição de oposição, mas não agiu nos golpes que aconteceram de novembro 2003 até janeiro 2004 na Geórgia e de novembro 2004 até janeiro de 2005 na Ucrânia. Em 2008, na Ossétia e Abecásia, a Rússia usou suas tropas contra a Geórgia, aliada dos EUA. Em 2012, na Síria, a frota russa mostrou prontidão para confrontar os EUA e seus aliados na OTAN.
Mapa étnico da região inter mari (Cáspio e Negro) (clique na imagem para aumentar)
Em 2013, a Rússia começou a tomar medidas econômicas contra o governo de [Victor] Yanukovich, o que contribuiu para que Yanukovich se desse conta do perigo que seria firmar acordo de associação [com a União Europeia]. Moscou não pôde salvar a Ucrânia do golpe, por causa da incompetência, da covardia, da estupidez dos líderes ucranianos – não apenas Yanukovich, mas todos eles, sem exceção. Depois do golpe armado em Kiev em fevereiro de 2014, a Rússia entrou em confronto aberto contra Washington. Antes disso, os conflitos eram alternados com melhorias nas relações, mas, no início de 2014 as relações entre Rússia e os EUA deterioraram rapidamente e quase instantaneamente chegaram a um ponto em que, na era pré-nuclear, a guerra já estaria automaticamente declarada. Significa que em cada um e em todos os momentos, Putin envolveu-se sempre precisamente no nível de confronto com os EUA que a Rússia conseguia manobrar. Se a Rússia, agora, não está impondo limites no nível de confronto é porque Putin acredita que, na guerra de sanções, na guerra de nervos, na guerra de informação, na guerra civil na Ucrânia e na guerra econômica, a Rússia está em posição da qual pode sair vencedora. Aí está a primeira importante conclusão sobre o que Putin quer e o que espera. Putin espera vencer. E se se sabe que Putin prefere sempre abordagens meticulosas e trabalha para antecipar qualquer surpresa, pode-se ter certeza de que, quando foi tomada a decisão de não retroceder sob pressão dos EUA, e reagir, a liderança russa tinha duplas, se não triplas, garantias de vitória.
Gostaria de destacar que a decisão de entrar em conflito com Washington não foi tomada em 2014, nem em 2013. A guerra de 8/8/2008 (guerra entre a Rússia e a Geórgia) foi desafio que os EUA não poderiam deixar passar sem retaliação. Depois disso, a cada novo estágio do confronto, as apostas só subiram. De 2008 a 2010, a capacidade dos EUA – não apenas militar ou econômica, mas a capacidade total – declinou; a da Rússia aumentou significativamente. Assim se vê que o objetivo principal foi subir lentamente as apostas, não de modo explosivo. Em outras palavras, confronto aberto, quando caem todas as máscaras e pretextos, e todos sabem que há guerra, será adiado pelo maior tempo possível. Melhor se tivesse sido descartado já desde antes, completamente. A cada ano, os EUA foram enfraquecendo, e a Rússia foi-se fortalecendo. Foi processo natural e impossível de deter, e se pode projetar com alto grau de certeza que, à altura dos anos 2020-2025 – e sem qualquer confronto – estará terminado o tempo da hegemonia dos EUA. Os EUA, hoje, muito melhor fariam, se pensassem mais, não sobre como conseguir mandar no mundo, e sim sobre como deter seu rápido declínio interno. Aí se vê claramente o segundo desejo de Putin: manter a paz ou uma aparência de paz, pelo maior tempo possível.A paz é vantajosa para a Rússia, porque, em condições de paz, sem despesas gigantescas, a Rússia obtém o mesmo resultado político, mas em situação geopolítica muito melhor. Por isso a Rússia frequentemente estende o ramo de oliveira. Assim como a Junta-de-Kiev entra em colapso em condições de paz no Donbass, o complexo militar-industrial e o sistema financeiro criado pelos EUA, havendo paz, ficam condenados a se autodestruir. As atitudes do governo russo confirmam a lição de Sun Tzu: A maior vitória é a batalha que não houve.
É claro que Washington não é governada por idiotas, não importa o que digam os programas de televisão e blogs. Os EUA compreendem perfeitamente a situação em que estão. Compreendem, sobretudo, que a Rússia não tem planos de destruir os EUA e está realmente preparada para cooperar de igual para igual. Mas, por causa da situação política e socioeconômica nos EUA, essa cooperação não é aceitável para os norte-americanos. Haverá colapso econômico e explosão social, muito provavelmente, antes que Washington (mesmo com ajuda e apoio de Moscou e Pequim) tenha tempo para introduzir as reformas de que precisa, especialmente se se considera que a UE também terá de passar por reformas ao mesmo tempo. Para piorar, a elite política que emergiu nos EUA nos últimos 25 anos acostumou-se ao status de donos do mundo. Eles sinceramente não compreendem como alguém pode desafiá-los.
Para a elite governante nos EUA (nem tanto a classe empresarial, mas a burocracia do governo), deixar de ser país que decide o destino de povos inferiores, e tornar-se país que negocia com eles em pés de igualdade é intolerável. Corresponde, provavelmente, a oferecer a Gladstone ou a Disraeli o posto de primeiro-ministro do Reino Zulu, recebendo instruções do rei Cetshwayo kaMpande. Assim, diferente da Rússia, que precisa de paz para desenvolver-se, para os EUA, vitalmente importante, só a guerra. Em princípio, qualquer guerra é disputa por recursos. Tipicamente, o vencedor é quem tem mais recursos e pode pois mobilizar mais soldados e fabricar mais tanques, navios e aviões. Apesar disso, às vezes os menos favorecidos do ponto de vista estratégico, podem virar a situação, com alguma vitória tática no campo de batalha. Há muitos exemplos, das guerras de Alexandre Magno e Frederico O Grande, à campanha de Hitler de 1939-1940. Potências nucleares não se podem confrontar diretamente. Mas a base de recursos dessas potências tem importância decisiva. Por isso exatamente, Rússia e EUA estiveram em disputa alucinada por aliados ao longo do ano passado. Essa disputa foi vencida pela Rússia. Os EUA só podem contar, como aliados, com UE, Canadá, Austrália e Japão (e nem sempre incondicionalmente). A Rússia obteve o apoio dos países BRICS – o que lhe dá um firme ponto de apoio na América Latina e permite começar a deslocar os EUA de seus postos na Ásia e no Norte da África. É claro, embora não seja visível a olho nu. Mas se se consideram os resultados das votações na ONU, assumindo que, se não há apoio aos EUA há discordância e, portanto, o apoio vai para a Rússia, o que se vê é que os países alinhados com a Rússia, somados, controlam cerca de 60% do PIB mundial, têm mais de 2/3 da população e cobrem mais de ¾ da superfície do planeta. A Rússia, portanto, conseguiu mobilizar mais recursos a favor dela. Aí, os EUA têm duas opções táticas. A primeira parecia ter grande potencial e os EUA a usaram nos primeiros dias da crise ucraniana. Foi tentativa de obrigar a Rússia a escolher entre uma situação ruim e outra ainda pior. A Rússia seria obrigada a aceitar um estado nazista junto às fronteiras e, assim, sofreria perda dramática de autoridade no plano internacional e no plano do apoio de seus aliados; assim, passado algum (pouco) tempo, já estaria vulnerável à ação interna e externa de forças pró-EUA, sem chance de derrotá-las.
O BLEFE
Ou, então, a Rússia poderia mandar soldados para a Ucrânia, varrer de lá a Junta antes que pudesse organizar-se, e restaurar o legítimo governo de Yanukovich. Mas esse segundo movimento provocaria acusações de agressão contra estado independente e repressão contra a revolução do povo. A situação assim criada resultaria em altos níveis de desaprovação pelos ucranianos, o que tornaria indispensável consumir repetidas vezes muitos recursos militares, políticos, econômicos e diplomáticos para manter um regime-fantoche [dos russos] em Kiev, porque nenhum outro governo seria possível sob tais condições. A Rússia evitou esse dilema-arapuca. Não houve invasão direta. O Donbass é quem combate contra Kiev. E são os norte-americanos quem tem de aplicar recursos escassos para defender aquele regime-fantoche em Kiev. A Rússia pode ficar à margem, dedicada a fazer propostas de paz. Por isso, agora, os EUA estão trabalhando na segunda opção – velha como as colinas no horizonte. O que não se conseguirá mesmo conservar e acabará tomado pelo inimigo, tem de estar o mais destruído possível, para que a vitória do inimigo saia-lhe mais cara que qualquer derrota, e o inimigo tenha de consumir todos os seus recursos para reconstruir o território destruído. Portanto, os EUA já não fornecem coisa alguma à Ucrânia, além de retórica política; agora só encorajam Kiev a expandir a guerra civil pelo país inteiro. A terra ucraniana tem de arder, não só em Donetsk e Lugansk, mas também em Kiev e Lvov. A tarefa é simples: destruir a infraestrutura social o mais completamente possível, e deixar a população no limite mínimo da sobrevivência. Com isso a população ucraniana será convertida em milhões de pessoas famélicas, desesperadas e pesadamente armadas, gente em situação tal que se matarão uns os outros por comida. O único meio para deter esse banho de sangue será intervenção internacional massiva na Ucrânia (só as milícias das Repúblicas Populares e de defesa nacional da Ucrânia não serão
suficientes) e injeções massivas de fundos para alimentar a população e reconstruir a economia, até que a Ucrânia consiga recomeçar a se autoalimentar. Evidentemente, esses custos recairão sobre a Rússia. Putin avalia corretamente que não apenas o orçamento, mas todos os recursos públicos em geral, incluindo os recursos militares da Rússia, serão superexigidos e provavelmente insuficientes. Portanto, o objetivo imediato é não permitir que a Ucrânia exploda, antes que as milícias possam repor a situação sob controle. É crucial minimizar as baixas e a destruição de patrimônio, e salvar o máximo que seja possível, dos recursos econômicos e da infraestrutura das grandes cidades, de modo que a população sobreviva. Então, os próprios ucranianos darão conta dos bandidos nazistas. Nesse ponto, Putin encontrará um aliado: a União Europeia. Porque os EUA sempre tentaram usar a maior quantidade possível de recursos europeus na luta dos EUA contra a Rússia, a União Europeia que já está enfraquecida hoje, até lá terá chegado à total exaustão; e terá, afinal, de enfrentar seus problemas, que há muito tempo sofrem processo acelerado de infecção grave.
Rotas das máfias de drogas através da Ucrânia
A Europa tem hoje, na fronteira oriental, uma Ucrânia totalmente destruída. Daí fugirão milhões de pessoas armadas e furiosas, não só para a Rússia, mas também para a União Europeia, levando com elas passatempos alucinógenos como tráfico de drogas, mercado negro de armas e terrorismo. A União Europeia não sobreviverá. Mas a Rússia estará razoavelmente bem protegida: entre a Rússia e a União Europeia em colapso lá estarão, como amortecedor de choques, as repúblicas populares da Novorrússia. A Europa não pode desafiar os EUA, mas padece de medo mortal de uma Ucrânia destruída. Por isso, pela primeira vez no conflito, Hollande e Merkel não apenas tentam sabotar as exigências dos EUA (impuseram sanções, mas limitadíssimas), mas, também começaram a empreender ações bastante
independentes, com o objetivo de conseguir algum pacto – talvez não a paz, mas, pelo menos, um cessar fogo, uma trégua, na Ucrânia. Se a Ucrânia pegar fogo, queimará muito depressa. E se a União Europeia se tiver convertido em parceiro pouco confiável, pronto, se não para passar-se para o campo russo, pelo menos para assumir posições independentes, nesse caso, Washington, fiel à sua imutável estratégia, será obrigada a pôr fogo na Europa. Claro que um quadro de várias guerras civis e interestatais num continente superpopuloso, atopetado de armas de todos os tipos, onde vivem mais de meio bilhão de seres humanos, é muitíssimo pior que uma guerra civil na Ucrânia. O Atlântico separa EUA e Europa. Até a Grã-Bretanha pode tentar manter-se lá, do outro lado do Canal. Mas Rússia e União Europeia partilham fronteira muito muito longa. Absolutamente não interessa à Rússia ter conflagração que se estenda do Atlântico até os Cárpatos, quando o território dos Cárpatos até o [rio] Dnieper ainda fumega. Daí que o outro objetivo de Putin é, na medida do possível, prevenir os efeitos mais negativos de uma conflagração na Ucrânia e de uma conflagração na Europa. Dado que é impossível prevenir completamente esse desdobramento (quando os EUA querem incendiar alguma coisa eles incendeiam), é imprescindível ser capaz de extinguir rapidamente o fogo para salvar os itens mais valiosos. Assim, para proteger interesses legítimos da Rússia, Putin avalia que a paz é item de importância vital, porque a paz é o fator que tornará possível alcançar o objetivo ao qual ele visa, com máximo efeito e com o menor custo possível. Mas, porque a paz já não é possível, e as tréguas estão-se tornando cada dia mais teóricas e mais frágeis,Putin realmente precisa que a guerra termine o mais depressa possível. Mas é preciso não esquecer que, se há um ano teria sido possível firmar algum compromisso em termos os mais favoráveis para o ocidente (a Rússia também obteria o que queria, mas adiante, o que é pequena concessão), hoje já não é possível, e as condições só fazem piorar progressivamente. À primeira vista, a situação permanece a mesma; a paz ainda interessa à Rússia sob quase quaisquer condições. Só uma coisa mudou, mas é item de máxima importância: a opinião pública. A sociedade russa anseia pela vitória e por retaliação. Como disse acima, “o poder russo é poder por autoridade-conhecimento-reconhecimento, não é poder autoritário”; na Rússia portanto a opinião pública realmente conta – diferente do que se vê em “democracias tradicionais”. Putin só pode manter seu papel como eixo de distribuição do sistema se tiver o apoio da maioria da população. Se perder esse apoio, e porque não emergiu qualquer outro nome de sua estatura na elite política russa, todo o sistema perderá a estabilidade. Mas o poder só pode manter a própria autoridade se encarna com sucesso os desejos das massas. Assim a derrota do nazismo na
Ucrânia, ainda que seja diplomática, tem de ser clara e indiscutível – só nessas condições é possível qualquer pacto de paz com a Rússia.
... novamente não tem nada..! ... outro jogo..?
Por tudo isso – independente do que Putin deseje e dos interesses da Rússia, e dado o equilíbrio geral de poder, bem como as prioridades e capacidades dos protagonistas –, uma guerra que deveria ter acabado no ano passado dentro das fronteiras da Ucrânia quase com certeza respingará para dentro da Europa. Pode-se apenas supor ou tentar adivinhar quem será mais efetivo: os norte-americanos com suas bombas de gás, ou os russos com seu extintor de incêndios? Mas uma coisa é absolutamente clara: as iniciativas de paz dos líderes russos serão limitadas não só pela vontade deles, mas por suas capacidades reais. É perda de tempo tentar ir contra os desejos do povo ou o curso da história; mas quando coincidem, só resta, ao político sábio, compreender os desejos do povo e a direção para a qual caminha o processo histórico. Depois, é apoiar e defender essas duas forças, custe o que custar. As circunstâncias expostas acima tornam extremamente improvável que o estado independente da Novorrússia venha a ver atendidos os seus desejos. Dada a escala da conflagração que se aproxima, nem chega a ser muito difícil determinar o destino da Ucrânia como tal, mas, ao mesmo tempo, não é destino que venha sem custos.
É perfeitamente lógico que o povo russo pergunte: se russos que nós salvamos dos nazistas vivem na Novorrússia, por que teriam de viver em estado separado? E se eles querem viver em estado só deles, por que a Rússia teria de reconstruir as fábricas e as cidades deles? Essas duas respostas só têm uma resposta razoável: a Novorrússia tem de ser integrada à Rússia (especialmente porque eles tem bons combatentes por lá, mas a “elite” governante é problemática). Bem, se parte da Ucrânia pode unir-se à Rússia, por que toda a Ucrânia não poderia? Com alta probabilidade, essa questão já está na agenda, sobretudo porque a União Europeia não continuará a ser alternativa [para a Ucrânia] à União Econômica Eurasiana. Consequentemente, a decisão de reunir-se à Rússia terá de ser tomada por uma Ucrânia federada, e não só por algumas entidades sem status claro. Parece-me prematuro redesenhar o mapa político. É provável que o conflito na Ucrânia esteja concluído à altura do fim de 2015. Mas se os EUA conseguirem estender a guerra para dentro da União Europeia (e os EUA tentarão), a solução final das questões territoriais exigirão alguns anos, talvez muitos. Em qualquer situação, a paz beneficia a Rússia. Em condições de paz, com a base de recursos russos crescendo e com mais e mais novos aliados (ex-parceiros dos EUA) aproximando do lado russo – e com Washington sendo cada vez mais marginalizada – a reestruturação territorial tornar-se-á muito mais simples, e temporariamente menos significativa, sobretudo para os que estejam sendo reestruturados.
___________________________________________________________ Notas de rodapé [1] O dicionário de língua portuguesa da ABL não registra “autoritativo” na acepção que seria útil aqui, e que se aproxima do uso da palavra “autoridade” em expressão como “o prof. X é autoridade em Idade Média”. Tentamos aí uma tradução expletiva, que, nos parece, põe em evidência os traços relevantes do termo: “autoridade por conhecimento [do que faz ou diz/fala] e por reconhecimento [pelos pares e/ou eleitores], sem perder completamente o efeito, que há em inglês, com authoritative / authoritarian. [NTs] [2] Rua, em Moscou, onde ficam os prédios e gabinetes da presidência da Rússia. [3] Praça, em Moscou, onde está localizado o Ministério de Relações Exteriores da Rússia. [4] Georgiy Gongadze, jornalista ucraniano e diretor de cinema nascido na Geórgia, que foi sequestrado e assassinado em 2000. [5] O Escândalo do Cassette irrompeu em 2000 quando se divulgaram gravações em fita nas quais Leonid Kuchma estaria falando sobre a necessidade de silenciar Gongadze, por estar noticiando corrupção no alto nível do governo. [6] Efeito do Escândalo do Cassete, houve um movimento de massa com protestos anti-Kuchma, na Ucrânia em 2000-2001. _______________________________________________________________
[*] Rostislav Shchenko é Presidente do Centro de Análise Sistemática e Previsões políticas da Ucrânia
GENERAIS DA ANTIGA RDA ADVERTEM CONTRA RISCO DE GUERRA
“As guerras recentes dos EUA/OTAN não provocaram males suficientes?" Como militares que tiveram posições responsáveis nas forças armadas da RDA, dirigimo-nos à opinião pública alemã com grande apreensão quanto à manutenção da paz e a sobrevivência da civilização na Europa. Nos anos da guerra-fria, nos quais vivemos longos períodos de confrontação militarização à beira de conflito aberto, utilizamos nossa perícia militar para a manutenção da paz e a proteção da nossa República Democrática Alemã socialista. O Exército Nacional Popular não esteve envolvido num único dia em conflito armado e, nos eventos de 1989-90, desempenhou um papel importante procurando não chegar ao uso de armas. A paz sempre foi a regra de conduta número um do nosso comportamento. E isto porque nos opomos com firmeza à utilização do fator militar como instrumento de política. A experiência torna claro que as questões candentes do nosso tempo não são resolvidas por meios militares. É importante recordar que o Exército Soviético suportou a carga principal da demolição do fascismo na Segunda Guerra Mundial. Nada menos que 27 milhões de cidadãos soviéticos deram as suas vidas para esta vitória histórica. Nós lhes devemos, e aos aliados, nossa gratidão neste 70º aniversário da libertação. Notamos agora que a guerra se tornou outra vez companhia constante da espécie humana. A nova ordem mundial dirigida pelos EUA e seus aliados nos últimos tempos levou a guerras na Iugoslávia, Afeganistão, Iraque, Iemen e Sudão, na Líbia e na Somália. Cerca de dois milhões de pessoas são vítimas destas guerras e milhões tornaram-se refugiados. Agora os ventos da guerra atingiram a Europa. É simples ver que a estratégia dos EUA é eliminar a Rússia como competidora e enfraquecer a UE. Nos últimos anos a OTAN tem rastejado cada vez mais perto das fronteiras da Rússia. Com a tentativa de colocar a Ucrânia dentro da OTAN, o cordon sanitaire seria fechado desde os Estados bálticos até o Mar Negro, a fim de isolar a Rússia do resto da Europa. De acordo com o planejamento americano, qualquer aliança alemã-russa seria difícil ou impossível. A fim de influenciar o público nesta direção, uma campanha midiática sem precedentes está em plena atividade, onde os políticos incorrigíveis e os jornalistas corruptos estão a rufar os tambores da guerra. A República Federal Alemã, nesta atmosfera aquecida, devia estar a desempenhar um papel para o avanço da paz. A posição geopolítica da Alemanha e sua experiência histórica e os interesses objetivos do seu povo pedem isto, exatamente ao contrário dos apelos do presidente federal por maior responsabilidade militar e da histeria de guerra e russofobia instigada pela mídia. Encorajar a militarização da Europa Orienta não é brincar com o fogo, é brincar
com a guerra! Tendo consciência da natureza destrutiva da guerra moderna e em cumprimento das nossas responsabilidades como cidadãos, dizemos com plena clareza: aqui, neste momento, começa um crime contra a humanidade. Será que os muitos mortos da Segunda Guerra Mundial, a enorme destruição por toda a Europa, os fluxos de refugiados e os infindáveis sofrimentos da humanidade já foram esquecidos? Será que as guerras mais recentes dos EUA e da OTAN não trouxeram bastante dor? Será que já não ceifaram bastantes vidas humanas? Não entendem o que significaria um conflito militar no continente europeu densamente povoado? Aqui viriam aviões de guerra às centenas, drones armados carregados com bombas e mísseis, milhares de tanques e veículos blindados, sistemas de artilharia. No Mar do Norte, no Mar Báltico e no Mar Negro os mais modernos navios de guerra combateriam e, à espera nas asas, bombas atômicas. Não haveria distinção entre frente (militar) e não frente. Mães, aos milhões, chorariam seus filhos, maridos, pais e irmãos. A paisagem da Europa seria a de uma terra devastada. Deveríamos chegar a isto? Não, mil vezes, NÃO! Portanto voltamo-nos para o público alemão: Um tal cenário deve ser travado. Não precisamos de qualquer retórica de guerra; precisamos, ao invés, de polemistas da paz. Não precisamos de quaisquer missões no exterior da Bundeswehr e não precisamos de qualquer Exército da União Europeia. Não precisamos de mais financiamentos para objetivos militares; precisamos de financiamentos para necessidades sociais e humanitárias. Não precisamos de qualquer guerra febril contra a Rússia; precisamos de mais entendimento mútuo, coexistência e boa vizinhança. Não precisamos de qualquer dependência militar dos EUA; precisamos da nossa própria responsabilidade pela paz. Ao invés de uma "Força de Reação Rápida da OTAN" nas fronteiras a Leste, precisamos de mais turismo, intercâmbios de juventude e passos rumo à paz com os nossos vizinhos do Leste. Precisamos de uma Alemanha pacífica e uma Europa pacífica. Possam nossos filhos, nossos netos, nossos bisnetos, recordar-nos este caminho. Porque conhecemos demasiado bem o que significa a guerra, elevamos nossas vozes contra ela; elevamos nossas vozes pela paz. Assinaturas : O General de Exército na reforma, Heinz Keßler; Almirante na reforma Theodor Hoffmann; Generais-coroneis (Generaloberste) na reforma Horst Stechbarth; Fritz Streletz; Fritz Peter ; Generais-tenentes (Generalleutnante) na reforma Klaus Baarß; Ulrich Bethmann; Max Butzlaff; Manfred Gehmert; Manfred Grätz; Wolfgang Kaiser; Gerhard Kunze; Gerhard Link; Wolfgang Neidhardt; Walter Paduch; Werner Rothe; Artur Seefeldt; Horst Skerra; Wolfgang Steger; Horst Sylla; Ehrenfried Ullmann; Alfred Vogel; Manfred Volland; Horst Zander ; Vice-Almirante na reforma Hans Hofmann; Generais-Majores (Generalmajore) na reforma Olivier Anders; Heinz Bilan; Bernhard Beyer; Günter Brodowsky; Kurt Brunner; Heinz Calvelage; Sebald Daum; Willi Dörnbrack; Alfred Dziewulski; Johannes Fritzsche; Egon Gleau; Otto Gereit; Roland Großer; Peter Herrich; Karl-Heinz Hess; Günter Hiemann; Lothar Hübner; Siegmund Jähn; Günter Jahr; Manfred Jonischkies; Günter Kaekow; Johannes Kaden; Helmut Klabunde; Klaus Klenner; Raimund Kokott; Kurt Kronig; Manfred Lange; Bernd Leistner; Hans Leopold; Klaus Listemann; Heinz Lipski; Hans Georg Löffler; Rudi Mädler; Manfred Merkel; Günter Möckel;
Dieter Nagler; Johannes Oreschko; Rolf Pitschel; Hans Christian Reiche; Fritz Rothe; Günter Sarge; Dieter Schmidt; Horst Schmieder; Gerhard Schönherr; Gerhard Seifert; Kurt Sommer; Erich Stach; Manfred Thieme; Wolfgang Thonke; Henry Thunemann; Walter Tzschoppe; Günter Voigt; Gerd Weber; Dieter Wendt; Klaus Wiegand; Heinrich Winkler; Heinz-Günther Wittek; Erich Wöllner; Werner Zaroba; Manfred Zeh; Alois Zieris Os Contra-Almirantes na reforma Herbert Bernig; Eberhard Grießbach; Hans Heß; Werner Henniger; Klaus Kahnt; Werner Kotte; Helmut Milzow; Gerhard Müller; Joachim Münch Grande número de Coronéis e Capitães na reforma: Volker Bednara; Frithjof Banisch; Bernd Biedermann; Karl Dlugosch; Thomas Förster; Günter Gnauck; Günter Leo; Friedemann Munkelt; Werner Murzynowski; Gerhard Matthes; Lothar Matthäus; Friedrich Peters; Helmut Schmidt; Fritz Schneider; Heinz Schubert; Helmar Tietze; Wilfried Wernecke; Rolf Zander; Oberstleutnant a.D. Günter Ganßauge Grande número de oficiais, candidatos a oficiais, sub-oficiais e soldados do Exército Nacional do Povo manifestou o seu apoio. 07/Maio/2015 O original encontra-se em Junge Welt e a versão em inglês em:
http://fortruss.blogspot.pt/…/a-warning-from-generals-of-fo…
https://www.jungewelt.de/2015/05-06/023.php
Assim se prepara uma nova Guerra Mundial
Publicado em Domingo, 13 Dezembro 2015 -
http://www.diarioliberdade.org/mundo/direitos-nacionais-e-
imperialismo.html
Trad. Via Vudu
Os eventos da semana passada passarão à história como divisor de águas na constituição do imperialismo no século XXI. No período de poucos dias, EUA, Grã-Bretanha e Alemanha ampliaram o respectivo envolvimento militar na Síria, depois que a França intensificou sua campanha de bombardeio no mês passado.
O pretexto para essas operações são os ataques terroristas de 13 de novembro em Paris, seguido agora pelo horrendo ataque a tiros em San Bernardino, Califórnia, na 4ª-feira passada. As razões declaradas publicamente, contudo, pouco têm a ver com discussões estratégicas que estão acontecendo nos escalões superiores das forças militares e das agências de inteligência.
Por trágica que seja a matança de 130 pessoas em Paris e 14 em San Bernardino, não explicam a repentina convulsiva escalada militar das principais potências imperialistas, contra o Oriente Médio. Não é difícil ver semelhanças/diferenças em relação a 1915, quando os EUA recusaram-se a entrar na 1ª Guerra Mundial, mesmo depois do afundamento do RMS Lusitania, com perda de 1.198 vidas. Naquele momento, a classe capitalista norte-americana ainda estava dividida sobre se seria aconselhável intervir na então
chamada “Grande Guerra” (que só passou a ser chamada “primeira guerra mundial”, depois que houve a segunda).
A força básica por trás da guerra na Síria é a mesma que motivou a formatação imperialista de todo o Oriente Médio: os interesses do capital financeiro internacional. As grandes potências imperialistas sabem que, se quiserem pôr a mão no butim, têm também de fazer sua parte da matança.
Esse movimento de guerra no Oriente Médio é altamente impopular, o que explica o frenesi para utilizar os ataques recentes na Europa, além da atmosfera de medo que a mídia-empresa cria e infla, para ativar as ações o mais rapidamente possível. Considerem-se os eventos da semana passada:
Na 3ª-feira, o governo Obama anunciou que estaria enviando novo contingente de Forças de Operações Especiais, oficialmente contra o Estado Islâmico no Iraque e Levante [ing. ISIL] e/ou Síria [ing. ISIS]. Em conferência de imprensa no mesmo dia, Obama repetiu que qualquer acordo na Síria terá de incluir a derrubada do presidente Assad da Síria, aliado chave da Rússia.
Na 4ª-feira, o parlamento britânico aprovou apoio a ação militar na Síria, depois de o líder do Partido Labour, Jeremy Corbyn, desimpediu qualquer caminho rumo à guerra, ao aceitar “livre votação” sobre o tema, para os deputados de seu partido. Aviões britânicos decolaram imediatamente para bombardear alguns alvos na Síria já na 4ª-feira à noite, com o primeiro-ministro Cameron declarando “simpatizante de terroristas” quem se opusesse à guerra.
Na 6ª-feira, o parlamento alemão correu a aprovar moção para que a Alemanha também se juntasse à guerra contra a Síria, praticamente sem nem discutir a questão. A aprovação parlamentar ao envolvimento da Alemanha na guerra veio depois da decisão do governo Merkel, no início da semana, de enviar 1.200 soldados, seis jatos Tornado e um navio de guerra para a região.
E então, durante o fim de semana, a mídia-empresa nos EUA e todos os políticos doestablishment dedicaram-se a explorar o tiroteio em San Bernardino, Califórnia, para pressionar a favor da expansão da guerra no Oriente Médio. Os candidatos Republicanos à presidência dispararam ‘declarações’ beligerantes insistindo em que os EUA estariam diante da “próxima guerra mundial” (governado de New Jersey, Chris Christie); que “o país precisa de presidente para tempos de guerra” (senador Ted Cruz, do Texas), e que “eles declararam guerra contra nós e nós temos de declarar guerra contra eles” (ex-governador da Flórida, Jeb Bush).
Em discurso no domingo à noite, Obama defendeu, contra os críticos Republicanos, a própria política na Síria; repetiu que se opõe ao envio massivo de soldados de solo para a área de Iraque e Síria, e que é a favor de acelerar os ataques aéreos; o financiamento para grupos dentro da Síria; e o uso de tropas de países vizinhos. Elogiou os movimentos de França, Alemanha e Reino Unido, e declarou: “Desde os ataques em Paris [dia 13/11], nossos mais próximos aliados (...) aceleraram a contribuição deles à nossa campanha militar, que nos ajudará a acelerar nossos esforços para destruir oISIL.”
Por mais que pressionem e pressionem a favor de mais guerra, nem Obama nem qualquer outro setor do establishment político nos EUA diz sequer uma palavra sobre as raízes reais do ISIS, que já serviu de pretexto para a “guerra ao terror” a partir do qual começou, e nunca mais se alterou, a política externa dos EUA para 15 anos.
No discurso de domingo, Obama fez uma referência oblíqua ao crescimento do ISIS “em pleno caos da guerra do Iraque e depois na Síria” – como se nada tivesse a ver com a própria política dos EUA. A verdade é que EUA e aliados é que ocuparam (ilegalmente) e devastaram (consequentemente) o Iraque, e na sequência criaram e ou inflaram grupos de islamistas fundamentalistas na Síria, a partir dos quais o ISIS emergiu como cabeça de ponte da guerra contra o presidente Bashar al-Assad da Síria.
Os terroristas do ISIS que executaram os atentados em Paris puderam viajar livremente, entrando e saindo da Síria, porque milhares de jovens como eles viajavam da Europa para a Síria, livremente, e com o apoio de autoridades, para que se unissem ao golpe e à guerra contra Assad.
Quanto ao ataque em San Bernardino, funcionários citaram a viagem dos dois atiradores à Arábia Saudita e seus contatos com indivíduos da Frente Al-Nusra, para poderem referir-se ao tiroteio como ataque terrorista. A Arábia Saudita, centro de financiamento e apoio para os grupos fundamentalistas islamistas em todo o Oriente Médio, é aliada chave dos EUA na região, e a Frente Al-Nusra, afiliada da Al-Qaeda, é aliada de factodos EUA na Síria.
Em vez de resposta contra os ataques recentes, as ações das potências imperialistas são a realização de planos já existentes e de ambições já conhecidas há muito tempo.
Na Grã-Bretanha, votação dessa semana reverteu a decisão de 2013, da Câmara de Comuns, segundo a qual o país não participaria de guerra planejada e liderada pelos EUA contra a presidência da Síria. A elite governante alemã não para de ‘exigir’ que o país participe mais ativamente do avanço militar na Síria, para afirmar a própria posição como potência dominante na Europa.
Nos EUA, antes dos ataques em San Bernardino, ouviam-se vozes insistentes doestablishment político e da mídia-empresa a favor do envio de tropas de solo e da imposição de uma zona aérea de exclusão sobre a Síria.
Com os EUA à frente, as potências imperialistas já se engajaram numa guerra infinita, centrada no Oriente Médio e Ásia Central, já há um quarto de século. Mais de um milhão de pessoas já foram mortas e outros muitos milhões foram convertidos em refugiados. Depois das guerras no Afeganistão e no Iraque durante o governo Bush, Obama supervisionou a guerra na Líbia e as campanhas conduzidas pela CIA para mudança de regime na Ucrânia e na Síria. As consequências desastrosas de cada operação prepararam o terreno para que o governo Obama expandisse e intensificasse a guerra.
O que se vê hoje é uma reformatação para recolonização do mundo. Todas as velhas potências levantam-se, exigindo a parte de cada uma no neobutim. Embora hoje centrado no Oriente Médio rico em petróleo, o conflito na Síria já se vai convertendo em ‘guerra por procuração’ contra a Rússia. Do outro lado da massa de terra eurasiana, os EUA dedicam-se a ações cada vez mais provocativas contra a China no Mar do Sul da China.
A situação geopolítica é hoje mais explosiva que em qualquer outro momento anterior, desde as vésperas da 2ª Guerra Mundial. Acossada por crise econômica e social para a qual a classe das elites governantes não tem resposta progressista a oferecer, aquela classe das sempre mesmas elites cada vez mais recorre à guerra e ao saque, como a única resposta que conhecem para quaisquer das suas dificuldades.
VII - GUERRA FRIA
Recordar lições importantes da Guerra Fria 8/5/2014, The Saker, The Vineyard of the Saker
http://vineyardsaker.blogspot.com.br/2014/05/remembering-important-lessons-of-cold.html
REPASSEM “Segundo, Obama, Merkel & Co. estão tentando aplicar a Putin uma jogada temerária,[1] na
esperança de que Putin esteja blefando e que a Rússia aceite um Banderastão governado por
neonazistas, que será histericamente russofóbico, membro da OTAN e, sem dúvida possível,
será convertido em estado fantoche anglo-sionista, feito Polônia ou Latvia. Mas isso, meus
amigos, nunca acontecerá.”
__________________________________________
Se as últimas 24 horas provaram alguma coisa, foi, mais uma vez, que EUA e OTAN
opõem-se a todas e quaisquer modalidades de negociações, de medidas para
construir confiança ou qualquer outro tipo de negociação com o Donbass e com a
Rússia.
Por mais que Putin tenha realmente se esforçado para falar em tom de acomodação, e
mostrar-se aberto a uma solução negociado, a política de EUA/OTAN é visivelmente
política de provocação e confrontação contra a Rússia e seus aliados, em todos os
pontos e modos imagináveis.
O mesmo vale, é claro, para dos doidos da junta golpista, cujas forças agiram com
brutalidade crescente nas operações repressivas na cidade de Mariupol. Quanto ao
Império Anglo-sionista, está organizando o diabo em matéria de manobras militares na
Polônia, nos Estados Bálticos e em outros pontos.
Bem logicamente, muitos de vocês estão chegando à conclusão de que possibilidade
real de guerra existe, e muito real; assim sendo, quero repetir aqui, mais uma vez,
algumas coisas.
Primeiro, não há opção militar para os anglo-sionistas na Ucrânia, pelo menos não
contra a Rússia. Isso, basicamente efeito de três fatos: geografia, a excessiva
distensão, superforçada, dos EUA no espaço; e a política dos EUA. Geografia: é muito
mais fácil para a Rússia mover forças em solo para a Ucrânia, do que para os
EUA/OTAN, especialmente no que se trate de unidades pesadas (mecanizadas,
armadas, blindados, tanques).
Segundo, há número gigantesco de forças norte-americanas já comprometidas em
guerras em vários pontos do mundo, para que os EUA possam manter grande guerra
contra a Rússia no leste da Europa.
Terceiro, por hora, a opinião pública ocidental ainda está sendo engambelada pelo
servicinho da imprensa-empresa ocidental, que continua a inflar a ficção de que os
russos não passariam de “tigre de papel”. Mas no instante em que houver combates
reais, europeus e norte-americanos rapidamente começarão a pensar melhor, sobre
se vale a pena morrerem tantos dos seus, pela Ucrânia. Porque, se começar guerra
real entre EUA e Rússia, todos nós estaremos na linha de tiro (mais sobre isso,
adiante).
Lembram-se como a mesma imprensa-empresa garantia que os infelizes militares
russos, mal equipados, mal treinados, mal comandados, mal motivados jamais
conseguiriam romper a ‘carapaça’ dos militares georgianos treinados pela OTAN?
Em segundo lugar, temos de lembrar que nunca se podem opor forças sobre uma
folha de papel e ‘declarar’ que “A” é mais forte que “B”. Não faz sentido. Afeganistão e
Iraque são exemplos perfeitos do tipo de conclusão errada a que pode ser arrastado
um líder político autoiludido, se começa a acreditar, ele também, nas próprias
mentiras.
Assim sendo, sem cometer o crime dos crimes no campo político e sugerir que os
militares norte-americanos seriam invencíveis – e absolutamente não são –, permitam-
me sugerir o seguinte:
– se se criar situação em que as forças convencionais russas estejam sob risco de
serem derrotadas, toooooooooooooooooooodos podem ter total, absoluta, certeza de
que a Rússia mobilizará suas capacidades táticas nucleares, ponto no qual a situação
escalará para um bem conhecido impasse de Guerra Fria.
A teoria da contensão sugere que você responde no mesmo nível, mas não em nível
superior, contra o primeiro movimento do seu adversário. Assim sendo, um ataque
nuclear tático russo contra, digamos, a Polônia, ou mesmo contra a Ucrânia, teria de
ser respondido por ataque similar norte-americano. Mas... onde? Onde está o
equivalente russo da Polônia, para os EUA? Bielorrússia? Mais provável um ataque
russo ao Canadá, realmente pertinho dos EUA. Atacariam onde? No Cazaquistão?
Seria ridículo, é longe demais. Armênia? Obviamente não. Quero dizer: os EUA
retaliariam ONDE?
Contra forças russas no Donbass, mas é logo ali, do outro lado da fronteira. Talvez,
contra território da própria Rússia? Mas, nesse caso, o que faria a Rússia? Atacaria a
Polônia? A Alemanha? Resposta ‘equivalente’ seria ataque no território dos EUA, é
claro, mas seria como convocar retaliação em escala total, pelos EUA, depois do qual,
inevitavelmente, viria ataque russo, também em escala total. E, dado que um lado
jamais conseguirá desarmar o outro, estamos falando de guerra atômica à moda do
Dr. Fantástico [orig. à la Dr. Strangelove], com inverno nuclear e tudo.
Há de haver quem considere ridículo esse raciocínio, mas qualquer pessoa que tenha
participado da Guerra Fria pode testemunhar que os melhores cérebros dos EUA e da
URSS operavam, em tempo integral, em torno dessas questões. E sabem o que
concluíram? Que não é possível vencer guerra atômica. Mas, também, que nenhuma
guerra entre EUA e Rússia poderá jamais ser vencida nem por um lado nem pelo
outro, porque qualquer guerra entre EUA e Rússia inevitavelmente se converterá em
guerra atômica, antes que o lado mais fraco renda-se.
Permitam-me oferecer formulação tola, mas bem verdadeira: a sobrevivência dos EUA
depende de a Rússia não perder guerra alguma. É. É isso mesmo. E a inversa
também é verdade: a sobrevivência da Rússia depende também de os EUA não
serem derrotados.
Por isso o ministro de Relações Exteriores da Rússia Serguey Lavrov vive a repetir e
repetir que nenhum dos lados pode sentir-se seguro à custa da segurança do outro
lado; e que segurança tem de ser coletiva e, mesmo, mútua.Mas quem lhe dá ouvidos,
do outro lado do Atlântico?
Claro que por hora e considerado o futuro perscrutável, essa verdade só valerá para
guerra que oponha diretamente forças militares russas e dos EUA. Guerras em
distância (guerras por procuração), tudo bem; tudo bem também com guerras
clandestinas e guerras contra terceiros. Mas por enquanto, só Rússia e EUA têm as
capacidades nucleares de pleno espectro necessárias para destruir completamente o
outro lado, ‘não importa o que aconteça’. Explico melhor.
Diz-se com frequência que as forças nucleares russas e dos EUA têm de estar em
alerta máximo e que, para evitar ser destruídas num contra-primeiro-ataque militar, o
contra-ataque tem de ser ordenado enquanto os mísseis do outro lado estão viajando
e antes de que atinjam os alvos. Fato é que os dois países praticam o que se conhece
como “lançado sob ataque”, que significa ser lançado ao mesmo tempo em que alguns
mísseis inimigos já acertaram alvos. Mas a verdade é que os dois países, EUA e
Rússia, podem também fazer o que se chama “atacar acima do ataque”
completamente, e, mesmo assim, ainda ter armas nucleares estratégicas em
quantidade suficiente para destruir toda a população dos centros chaves do lado
oposto. É consequência das forças nucleares estratégicas de alta redundância. Assim
sendo, se, digamos, os EUA conseguirem destruir, digamos, todos os bombardeiros
russos e todos os silos nucleares russos, e todos os submarinos e respectivos mísseis
nucleares estratégicos que transportem, inclusive os que estejam no porto (e que
podem ser lançados de lá mesmo, se necessário), a Rússia ainda assim teria número
suficiente de road-mobile ICBMs para varrer do mapa do mundo os EUA como país.
E o mesmo se pode dizer de um primeiro-ataque russo contra os EUA, o qual, ainda
que venha a ser irrealistamente bem-sucedido, mesmo assim exporá a Rússia a uma
retaliação massiva, a partir dos submarinos armados com bombas atômicas da
Marinha dos EUA. E, no mundo real, nenhum primeiro ataque é 100% bem
sucedido. 95% de sucesso é péssimo resultado, se os 5% restantes são armas
atômicas viradas para o seu lado.
Civis costumam reclamar que Rússia e EUA têm armas atômicas em quantidade
suficiente para destruir várias vezes o planeta, como se fosse sinal de loucura. É
exatamente o contrário: é porque Rússia e EUA têm capacidade, em tempo de paz,
para destruir várias vezes o planeta, que, em tempo de guerra, nem um lado nem o
outro pode sequer delirar com obter algum primeiro ataque e evitar retaliação
massiva. Sim, sim, no mundo da bomba atômica, mais é melhor, pelo menos no que
tenha a ver com o que se conhece como “estabilidade de primeiro ataque”.
Eis o que realmente destaca Rússia e EUA, dentre todas as nações da Terra:
nenhuma outra potência nuclear tem força nuclear com capacidade para sobreviver
ao primeiro ataque que se compare à de Rússia e EUA, no atual momento e em futuro
próximo; todas as demais potências podem ser desarmadas logo ao primeiro ataque.
Deixem-me dar mais um exemplo de como a guerra nuclear é contraintuitiva, em
vários sentidos da palavra. Ouve-se falar muito de níveis de alerta (os DEFCONs, nos
EUA[2]), e assume-se que melhor seria sempre estar num nível abaixo de alerta. Nada
disso. De fato, quanto mais alto o nível de alerta, melhor, do ponto de vista da
estabilidade de primeiro ataque. Eis por quê:
Em tempos de paz, (DEFCON 5), a maior parte dos bombardeiros estão pousados nos
aeroportos e pistas, a maioria das tripulações está ocupada em treinamento, a maioria
dos submarinos estão atracados nos portos e a maioria do pessoal crítico está
ocupado com as respectivas tarefas diárias. É quanto essas forças são mais
vulneráveis a um primeiro ataque que as desarme. Em níveis mais altos de alerta, as
tripulações são convocadas para as bases; em níveis ainda mais altos, já estarão
acomodadas dentro dos aviões, com motores acionados; e no nível máximo, os
bombardeiros estarão com motores ligados em máxima rotação; os submarinos
estarão já no mar; todo o pessoal estará nos respectivos postos e, nos EUA, o
presidente já estará recolhido, com os auxiliares-chaves, ou no ar, no Air Force 1, ou
num bunker subterrâneo. Em outras palavras: quanto mais alto o nível de alerta, muito
menor a vulnerabilidade a um primeiro ataque, o que, por sua vez, significa
mais tempo para negociar, descobrir o que realmente esteja acontecendo e mais
tempo para evitar uma guerra.
O que estou tentando ilustrar aqui é que os dois lados, Rússia e os EUA,
desenvolveram um sistema muito sofisticado para tornar impossível que o outro lado
‘vença’ alguma guerra. Esse sistema ainda está implantado até hoje; de fato, Putin
acaba de convidar outros chefes de Estado da Organização do Tratado de Segurança
Coletiva, OTSC,[3] para assistirem ao teste em grande escala das forças estratégicas
russas de contenção (nada tem a ver com a Ucrânia: esse exercício já estava
agendado há mais de um ano).
Em outras palavras, significa que EUA/OTAN sabem que não podem ‘vencer’ guerra
contra a Rússia, nem guerra convencional, nem guerra nuclear. Os que insistam em
repetir coisa diferente não sabem o que dizem.
O que deixa duas explicações possíveis para o atual comportamento do ocidente, e
nenhuma delas é muito estimulante.
Primeiro, Obama, Merkel & Co. são doidos varridos, obcecados com iniciar a 3ª
Guerra Mundial. Bem sinceramente, essa hipótese não me convence.
Segundo, Obama, Merkel & Co. estão tentando aplicar a Putin uma jogada
temerária,[4] na esperança de que Putin esteja blefando e que a Rússia aceite um
Banderastão governado por neonazistas, que será histericamente russofóbico,
membro da OTAN e, sem dúvida possível, será convertido em estado fantoche anglo-
sionista, feito Polônia ou Latvia.
Isso, meus amigos, não acontecerá. E por isso escrevi em março desse ano, um
postado em que alertava que a Rússia está pronta para ir à guerra.[5] E nada tem a
ver com Putin, com imperialismo russo ou qualquer dessas tolices que a imprensa-
empresa ocidental vive a disseminar; só tem a ver com o fato de que os EUA querem
converter a Ucrânia em ameaça existencial contra a Rússia, ao mesmo tempo em que
vão mantendo artificialmente vivo um país de ficção, inventado pelas mentes
ensandecidas de papas e jesuítas, sem vida real; e país que, se deixado entregue a
ele mesmo, não sobreviveria sequer por 24 horas.
O que me faz crer que estejamos numa crise potencialmente muito mais perigosa que
a Crise dos Mísseis de Cuba é que, daquela vez, ambos, EUA e a URSS
compreendiam plena e completamente o quanto a situação era grave; e entendiam
também que o mundo tinha de ser resgatado da posição à que chegara, à beira de
uma guerra nuclear.
Mas hoje... é só ouvir o que dizem imbecis do quilate de Obama, Kerry, Psaki & Co.
Estou aterrado, boquiaberto, com o quanto essa gente pode ser estúpida e
continuarem estupidificados, o quanto se podem estar autoiludindo. E estão jogando
não só com a nossa vida, mas também com a vida deles mesmos; e continuam a agir
como se Putin fosse alguma espécie de senhor-da-guerra somaliano, que deva a ser
mantido em estado de pânico e medo, para ser subjugado. Mas se a tática deles já
não funciona nem com senhores-da-guerra somalianos... por que eles ainda supõem
que funcionará com Putin?
Quero me obrigar a crer que por trás de todos esses doidos, lunáticos, imbecis, há
militares, soldados, comandantes, que foram formados e treinados durante a Guerra
Fria e que com certeza não se esqueceram das muitas, muitas horas em frente aos
computadores, rodando modelos e modelos e mais modelos, e todos os modelos,
todos, todos, sempre e sempre, levando ao mesmo resultado: a vitória é impossível. A
guerra, portanto, simplesmente não era opção.
Também é possível que o Império deseje escalar a situação na Ucrânia o suficiente
até forçar uma intervenção dos russos, mas não o bastante para que se entre em
confronto real de guerra. Se é esse o caso, então, é estratégica alucinadamente
arriscada. Pode-se dizer criminosamente temerária. Uma coisa é pôr-se a dar xiliques
‘muito machos’ e ameaçar explodir e desexplodir a República Popular Democrática da
Coreia [Coreia do Norte]; outra, muito diferente, é tentar o mesmo truque com uma
superpotência nuclear.
O que há de mais assustador é que esses amaldiçoados Democratas têm longa
tradição de temeridade criminosa, muito, muito ativa.
Lembram-se de 1995, quando Clinton mandou dois porta-aviões dos EUA para o
Estreito de Taiwan,[6] em show de exibicionismo de cowboy-machão? Daquela vez, os
chineses resolveram, sabiamente, não responder ação estúpida com reação
igualmente estúpida. Mas... e se dessa vez Obama decidir que ele é
suuuuuuuuuuuuuper macho-durão, durão-mesmo? E se Putin sentir-se encurralado,
sem espaço para recolher-se?
É muito, muito assustador, é apavorante, pensar que o fato de que russos e chineses
estejam agindo hoje de modo sempre responsável pode ir, aos poucos, ‘libertando’ os
EUA para que ajam de modo cada vez mais temerário, mais alucinado, mais
irresponsável. Mas, não, não parece ser esse o caso, sobretudo dessa vez, com um
Democrata na Casa Branca.
Quando, que vocês recordem, foi a última vez que alguém aí viu/ouviu algum
presidente dos EUA assumir a responsabilidade por apresentar proposta construtiva
para evitar ação militar? Quando? Quando? Pessoalmente, não sei dizer. Acho que
nunca aconteceu. Nunca, nem uma vez.
Para concluir, só posso repetir o que já disse tantas vezes: não há opção militar para
EUA/OTAN contra a Rússia. Quanto a determinar se a plutocracia anglo-sionista do
1% que nos governa enlouqueceu completamente, é possível que sim, mas o palpite
de vocês vale tanto quanto o meu.
[assina] The Saker
[1] Orig. “Chicken game” [jogo do ‘frango’ (no sentido de covarde, assustadiço,
medroso)]. Sobre o jogo, nos termos da Teoria dos Jogos,
ver http://pt.wikipedia.org/wiki/Jogo_da_galinha [NTs].
[2] http://en.wikipedia.org/wiki/DEFCON
[3] Organização do Tratado de Segurança Coletiva,
OTSC. http://en.wikipedia.org/wiki/Collective_Security_Treaty_Organization
[4] Orig. “Chicken game” [lit. “jogo do ‘frango’” (no sentido de covarde, assustadiço,
medroso)]. Sobre o jogo, nos termos da Teoria dos Jogos,
ver http://pt.wikipedia.org/wiki/Jogo_da_galinha [NTs].
[5] 1/3/2014, “Obama piorou muito a situação na Ucrânia. Agora, a Rússia está pronta
para ir à guerra”, The Saker,The Vineyard of the Saker, traduzido
em http://redecastorphoto.blogspot.com.br/2014/03/obama-piorou-muito-situacao-na-
ucrania.html [NTs].
[6] http://en.wikipedia.org/wiki/Third_Taiwan_Strait_Crisis
3 de maio de 2014 - 15h28
Estratégia de Guerra Fria dos EUA: Da Ucrânia às Filipinas
O presidente Barack Obama e a sua equipe de segurança nacional já olham para além da crise
ucraniana porque estão ocupados em “criar uma atualização de uma estratégia da guerra fria para
conter a Rússia”. O que os funcionários da administração fazem saber, de quando especificando o
objetivo sobre o qual o presidente se concentra, é que o objetivo aqui seria o de “isolar a Rússia de
Putin através de cortar os seus elos econômicos e políticos com o mundo exterior”.
Por Manlio Dinucci, no Irã News
Irã News
De acordo com
Dinucci, a estratégia dos Estados Unidos é isolar economicamente a Rússia
O primeiro passo nessa direção seria o de ir sempre reduzindo, até ao interromper, o
fornecimento do gás russo à Europa, para poder substituí-lo, principalmente, por
aquele fornecido pelas companhias americanas explorando as reservas do Oriente
Médio, as reservas africanas e outras, incluindo-se aqui a dos Estados Unidos, que
estão se preparando para exportar gaz liquificado extraído da ardósia betuminosa.
Aqui os Estados Unidos estão mostrando suas cartas. A margem de superioridade
econômica dos Estados Unidos a escala mundial se reduz mais e mais.
A China já está em segundo lugar com o seu gráfico mostrando um forte crescimento
já equivalente a metade da dos Estados Unidos, sendo seguida aqui então pelo Japão
e a Alemanha, sendo que também, em gráfico, se poderia ver que os 28 países da
União Europeia já ultrapassaram os Estados Unidos. Para conservar a sua
supremacia econômica eles se baseiam no sector financeiro, no qual eles mantém
vantagens, assim como na capacidade de suas multinacionais de conquistar novos
mercados e fontes de matéria prima. Com esse objetivo Washington põe na balança o
peso de sua própria superioridade militar, assim como da OTAN, a qual vem mesmo
abaixo do comando deles. Nesse cenário então entra a demolição sistemática, através
de instrumentos militares, de países inteiros (como na Iugoslávia, Líbia e atualmente
também na Síria) e a anexação, por intermédio da OTAN de todos os países do ex-
pacto de Varsóvia, assim como dois da ex Iugoslávia, e três da ex-URSS.
Na verdade esses últimos denominados serão mesmo quatro, porque a Ucrânia já
estava de fato sob o controle da OTAN, mesmo antes da crise. Será suficiente esperar
as eleições de 2015 para se ter na Ucrânia um presidente que irá acelerar uma
entrada oficial do país na aliança. Porque se teria então tomado em Washington a
decisão de organizar o golpe de estado que acabaria por derrubar o presidente
Yanukovich (que estava longe de ser hostil ao ocidente) e de instalar no governo, em
Kiev, os representantes os mais hostis contra a Rússia, e aos russos da Crimeia e da
Ucrânia do Leste? Ao que tudo indica, isso teria sido para fazer Moscou reagir e poder
lançar, então sem constrangimentos, a estratégia de isolamento.
Coisa não fácil: a Alemanha, por exemplo, é a maior importadora do gás russo e
acabaria sofrendo danos com uma eventual interrupção de fornecimento do gás.
Entretanto, Washington já se decidiu por não esperar os governos europeus para
impor à Rússia as mais duras sanções. Ele já tem o ok, ou seja a luz verde, de Roma
(da qual já se conhece a fidelidade) e ele já está a caminho de entrar em um acordo
com Berlim e outras capitais.
O objetivo estratégico aqui seria o de criar uma frente Anti-Rússia, frente essa
constituída dos EUA-UE e consolidada por um acordo de livre comércio entre esses o
que permitiria aos Estados Unidos de aumentar sua influência na Europa. Tem-se
nesse cenário também a estratégia de tensão na região Ásia-Pacífico, onde os
Estados Unidos tem em vista o conter a China. Aquele que se aproximar da Rússia,
exercerá um peso crescente não só regional como também global, o que poderia fazer
com que as sanções contra Moscou fossem em vão, pois essa aproximação lhe abriria
uma possibilidade de um futuro comércio suplementar, ao leste, e isso seria muito
importante para as exportações energéticas.
Nesse cenário e de quebra, Obama já efetuou uma visita oficial na Ásia. Entretanto,
nessa o Japão se recusou a assinar um acordo de livre comércio o qual teria aberto
um mercado aos produtos agrícolas dos Estados Unidos. Em compensação, a Filipina
concluiu com os Estados Unidos um novo acordo de decênio que permite aos Estados
Unidos aumentar sua presença militar no arquipélago, isso tendo uma função
claramente anti-chinesa.
Tem-se que onde o dólar fracassa, a espada sucede.
EUA e Otan martelam para criar à força uma Guerra Fria 2.0
Clique aqui para ver a notícia no site
Vladimir P. Kozin
A continuação da Guerra Fria 1.0 criou uma série de ameaças e provocações
contra a Europa e, em particular, contra a Rússia. Hoje, especialistas insistem em
que uma nova Guerra Fria está em curso: alguns dizem que é continuação da
anterior; outros que inclui um fenômeno qualitativamente novo, o que justifica
defini-la como Guerra Fria 2.0.
Os que propõem a teoria de uma nova Guerra Fria (2.0) argumentam que a atual
crise tem realmente nova dimensão, que o padrão anterior da Guerra Fria 1.0
morreu oficialmente em novembro de 1990, quando nações europeias decretaram
solenemente seu final oficial, na Carta para uma Nova Europa, assinada em Paris.
Pessoalmente, sou de opinião que a Guerra Fria 1.0 terminou em 1990 – pelo
menos entre as maiores potências globais e pelo menos politicamente. A diferença
radical entre as Guerras Frias 1.0 e 2.0 é que a primeira teve dimensão global, e a
segunda ocorre, realmente, em modo bilateral: entre EUA e Rússia, e Otan e
Rússia.
Mas infortunadamente, uma nova Guerra Fria 2.0 emergiu em 2014 – 24 anos
depois do fim da primeira. É per se um grande desafio-ameaça contemporâneo
para a Europa. Apareceu muito depressa e intencionalmente, embora alguns
fatores objetivos e reais tenham criado terreno sólido para esse renascimento.
Apesar do fim da Guerra Fria 1.0 há quase 24 anos, as velhas linhas divisórias
permaneceram discerníveis.
Quais são as grandes "velhas" provocações e ameaças?
Primeiro, aconteceu vasto aumento da Otan, que cresceu em direção ao leste: do
fim da Guerra Fria 1.0 até o início da Guerra Fria 2.0, o número de membros
daquela Aliança quase dobrou (de 1999 até 2009, 12 estados – 43% do número
total de membros – foram acrescentados à lista). Mais importante que o número de
estados até hoje é que a Otan continua empenhada nessa expansão: há mais
quatro estados na lista de espera, dentre os quais a Geórgia e a Ucrânia. Robert
Pzschel, representante oficial da Otan, confirmou, no final de outubro, que ambas,
Geórgia e Ucrânia, podem vir a tornarem-se membros-plenos da Otan. O novo
secretário-geral da Otan, Jens Stoltenberg em seu discurso de posse, dia 1º de
outubro, disse que a Aliança assinara acordos com Finlândia e Suécia que lhe
permitiriam cooperação mais íntima com o bloco militar ocidental.
Dia 15 de outubro, em discurso no Simpósio da Associação do Exército dos EUA
[orig. Association of the US Army (AUSA) Symposium], Chuck Hagel, do
Pentágono, criticou a Rússia por levantar-se no caminho, ''às portas'' da Otan,
impedindo o avanço da Otan. [1] Como se a Rússia estivesse caminhando todos
os dias para oeste, para mais perto das ''portas'' da Otan. A realidade é o contrário
disso: a Aliança Atlântica, desde o dia em que foi constituída, só faz caminhar
todos os dias, cada vez para mais perto da Rússia, para as portas da Rússia. O
ministro russo da Defesa Sergey Shoigu disse que essa declaração de Chuck
Hagel é prova de que os EUA estão preparando um cenário para ações militares
próximas às fronteiras da Rússia.
A verdade é que os EUA sempre se esforçaram muito para manter "robustas forças
avançadas de modelagem" [orig. "robust shaping forces forward"], como o vice-
secretário de Defesa dos EUA Bob Work admitiu no Conselho de Relações
Exteriores [orig. Council on Foreign Relations], em Washington, D.C., dia 30 de
setembro, mesmo num momento em que o Pentágono combatia em duas grandes
guerras – no Iraque e no Afeganistão. A expressão "forças avançadas" [orig."forces
forward"] é terminologia norte-americana para designar "forças avançadas
alocadas permanentemente" nas bases norte-americanas de além-mar; e "forças
avançadas alocadas rotativamente" [orig. "rotationally forward-deployed forces"]
espalhadas pelo planeta: 80 mil no Pacífico; 20 mil na Coreia do Sul; 40 mil sob
ordens do Comando Central; 28 mil na Europa, mais na África, na América Latina,
etc. Hoje, como disse Chuck Hagel no Simpósio da AUSA, há soldados norte-
americanos alocados ou "avançados" em quase 150 locações em todo o mundo.
Não apenas "às portas" de vários países, mas, na realidade, diretamente em solo
de outros países.
Segundo, os EUA retiraram-se unilateralmente, em meados de 2002, do Tratado
Antimísseis Balísticos [orig. ABM Treaty] – tratado que, para todos os governos
anteriores dos EUA, havia sido a "pedra basilar da estabilidade estratégica global".
Terceiro, as decisões, dos presidentes Clinton e Obama de instalar um Sistema
Global de Mísseis Balísticos de Defesa [ing. BMDS] mirado contra vários estados:
as etapas básicas desse movimento são: em dezembro de 2002, a Diretiva
Presidencial sobre instalação "limitada" do BMDS; em fevereiro de 2005, a criação
do Comando Conjunto Funcional dos EUA para Defesa de Mísseis Integrados
[orig. US Joint Functional Command for Integrated Missile Defense]; em fevereiro
de 2007, os EUA apresentaram oficialmente os detalhes para o BMDS na Polônia
e na República Checa; e em setembro de 2009, Barack Obama anunciou o plano
US EPAA BMD. [2]
Quarto, o início da primeira fase da implantação da Abordagem Adaptativa em
Fases, para a Europa (EPAA) em 2011, e o lançamento das capacidades
preliminares no mesmo processo, continuação da 2ª fase e promessa de ter as
quatro fases operantes a partir de 2022 e daí em diante.
Quinto, uma decisão tomada por Washington, em 2010, de base ampla, para
modernizar as armas do arsenal nuclear tático dos EUA, o chamado tipo B-61,
inclusive as armas alocadas em quatro países da Europa e na parte asiática da
Turquia, ao mesmo tempo em que se ampliam as capacidades de penetração
daquelas armas para atingir alvos reforçados.
Sexto, essa provocação está conectada ao problema do Tratado das Forças
Convencionais na Europa [ing. Conventional Forces in Europa Treaty, CFE-1] e
sua versão adaptativa CFE-1A] que deixou de facto de ser vigente em 2007,
porque todos os membros da Otan que participaram das negociações daqueles
acordos recusaram a ratificá-lo e a definir a expressão-chave "forças convencionais
substanciais".
Sétimo, a Otan posicionou-se ao lado da Geórgia quando atacaram a Ossétia do
Sul, em agosto de 2008 (Operation "Empty Field" [Operação Campo Vazio]).
Oitavo, pela primeira foi criada a "tríade de Chicago" – "uma mistura apropriada de
armas de defesa nucleares, convencionais e mísseis", na Reunião da Otan em
maio de 2012, em Chicago, e foi confirmada em recente reunião da Otan realizada
em setembro passado em Newport, no Reino Unido.
E finalmente, o nono desafio-provocação-ameaça: em fevereiro de 2014, os EUA
organizaram e executaram golpe de estado (inconstitucional) na Ucrânia, que pôs
no poder em Kiev um regime ultranacionalista e anti-Rússia, que já praticou
massivos crimes de guerra contra cidadãos pacíficos no Donbass – que são, de
facto e de jure, cidadãos ucranianos – usando armamento pesado, inclusive MRLS
"Grad", "Smerch" e "Uragan", bombas de fósforo branco e bombas de
fragmentação (proibidas por duas Convenções Internacionais). A Human Rights
Watch já identificou como bombas de fragmentação o material empregado em
outubro, por tropas ucranianas, contra civis pacíficos. Esses crimes cometidos por
militares são crimes contra a humanidade e já mataram cerca de 4 mil pessoas,
com mais de 9 mil feridos no Donbass nos últimos seis meses, como reconheceu o
Gabinete do Alto Comissariado da ONU para Direitos Humanos, em Relatório
divulgado dia 8 de outubro.
As hostilidades que Kiev introduziu geraram resultados negativos: o
comportamento de agressão de Kiev levou grande número de pessoas a fugir
daquela área (280 mil moveram-se para outras áreas da Ucrânia; e quase 900 mil
refugiaram-se na Rússia. Apesar do Acordo de Cessar-Fogo anunciado em Minsk
dia 5 de setembro e reiterado dia 19 de setembro, as tropas de Kiev continuam a
violar sistematicamente esses importantes acordos: mais 330 morreram depois de
anunciado o cessar-fogo. Depois do cessar-fogo, tropas regulares de Kiev e
formações irregulares já praticamente já se reorganizaram no sudeste. As
potências ocidentais continuam a agir ilegalmente, de um modo que estimula e
encoraja o governo de Kiev a só procurar soluções militares para aquele conflito,
que só podem levar a um beco sem saída.
O custo da violência militar de Kiev contra o resto da Ucrânia pesará muito sobre
as áreas sitiadas de Donetsk e Lugansk, com os danos causados pela guerra já
estimados pelos combatentes da resistência na Novorússia, na primeira semana
de outubro, em cerca de US$ 1 bilhão. Esse número é bem semelhante ao que
Kiev divulgou. Segundo os números do governo da Ucrânia, serão necessários
US$ 911 milhões para reconstruir as cidades no Donbass destruídas pela guerra.
65% dos prédios residenciais e moradias e 10% das escolas e jardins de infância
foram destruídos no Donbass. O exército da Ucrânia não criou zonas
desmilitarizadas com o Donbass. 40 mil empresas de médio porte na região
pararam de funcionar. O nível de desemprego na Ucrânia alcançou 40% da força
nacional de trabalho. Atualmente, a dívida externa da Ucrânia já alcança algo entre
US$ 35 e US$ 80 bilhões. Kiev não pode pagar pelo gás que compra, porque
gastou demais em guerra contra o próprio povo. Como já disse a ex-premiê
ucraniana Iúlia Timochenko, a corrupção pós-Maidan já ultrapassou a corrupção
pré-Maidan.
Por causa do movimento do exército ucraniano na direção do sudeste do país em
abril, a região passa por severa catástrofe humanitária, com muitos cidadãos
forçados a lutar para sobreviver sem água limpa, eletricidade e outros itens
necessários à sobrevivência básica. [3]
Um novo relatório da ONU sobre a situação dos direitos humanos na Ucrânia,
distribuído no início de outubro, diz que há violações continuadas das leis
humanitárias, por grupos e batalhões de voluntários armados controlados pelas
forças armadas ucranianas.
No período relatado, a lei humanitária, incluídos os princípios militares de
necessidade, diferenciação, proporcionalidade e precauções tem sido
continuadamente violada por grupos armados e algumas unidades de batalhões
voluntários sob o controle das forças armadas ucranianas – diz o Relatório.
A quarta vala comum foi encontrada numa vila no leste da Ucrânia. A vala foi
descoberta poucos dias depois de a Missão de Monitoramento da Organização de
Segurança e Cooperação da Europa (OSCE) ter confirmado a descoberta de três
covas para enterro em massa, em áreas que as forças de Kiev abandonaram
recentemente. No total foram encontrados mais de 400 cadáveres, vários dos
quais mostrando ferimento de bala na cabeça, com características de execução à
queima-roupa.
Infelizmente, muitas ONGs europeias e internacionais muito conhecidas fingem
que não veem essas grandes violações de direitos humanos na Ucrânia. Os
prisioneiros de guerra devolvidos ao Donbass pelas autoridades ucranianas
chegam em condições físicas terríveis, não raro sem qualquer documento de
identidade. Kiev frequentemente prende gente inocente pelas ruas, para exibir
aquelas pessoas como "rebeldes" e oferecê-las como prisioneiros de guerra reais,
em trocas de prisioneiros com o lado oposto.
Outra provocação relacionada à Ucrânia: as autoridades ucranianas continuam a
impedir que especialistas malaios visitem o local onde caiu o avião MH17,
impedindo assim qualquer exame objetivo na área da queda e escondendo todas
as provas de que a área foi intencionalmente e diretamente bombardeada depois
da queda do avião, dia 17 de julho, para destruir provas que houvesse do crime
que ali foi cometido. O desafio-provocação, nesse caso, é que, até agora, não há
qualquer investigação séria em andamento. As Forças Armadas da Ucrânia
impedem ininterruptamente que equipes internacionais de investigação visitem o
local em que o avião caiu. Kiev, de fato, trabalha para esconder verdade já
conhecida, para que não se possa provar o que muitos já sabem: que a Força
Aérea Ucraniana derrubou, deliberadamente, aquele avião. Um magnata
ucraniano, Igor Kolomoiskiy, que é também governador da Região Dnepropetrovsk,
confessou recentemente que as Forças Armadas Ucranianas estavam tentando
destruir outro avião de passageiros no dia 17 de julho, quando, "sem intenção", nas
palavras dele, derrubaram o Boeing 777 da companhia malaia, matando quase 300
passageiros.
Há ainda outro fator relacionado à Ucrânia: a disseminação massiva de ideologia
fascista ultranacionalista de linha duríssima hostil a não ucranianos e pessoas de
outras nacionalidades. O principal e mais grave risco nesse caso é que uma
geração de jovens ucranianos está ativamente envolvida nos processos de
disseminação e absorção dessas ideologias, que recebem apoio e incentivo, além
do consentimento, das supremas autoridades do governo da Ucrânia. Glorificação
de nazistas alemães e o reconhecimento, como veteranos de guerra, do Exército
Ucraniano Insurgente [orig. Ukrainian Insurgent Army (UPA)] na Ucrânia, acusado
pela prática de crimes de guerra, inclusive de assassinatos em massa de judeus e
de poloneses na Ucrânia, é sinal alarmante para a Europa que tanto sofreu nas
mãos dos nazistas, na Segunda Guerra Mundial.
Infelizmente, nenhuma nação europeia, nem EUA ou Canadá, denunciaram o
evento desse reconhecimento. É como se o remédio gerado para combater e
erradicar o "vírus do fascismo" – remédio produzido pelo Tribunal de Nuremberg
em 1945-1946 – já tivesse perdido qualquer eficácia no momento pelo qual a
Europa passa hoje.
Quais as implicações potenciais desses nove problemas-desafios-ameaças-
provocações listados acima?
Depois de 2014 a segurança e a estabilidade da Europa, considerada como um
todo, deixaram, de fato, de existir – sem espaço para qualquer aprimoramento nem
para o curto nem para o longo prazo. Eis por que está sendo fechada a janela de
oportunidades para que se construa qualquer pouca e pequena confiança, que
seja, que unifique toda a Europa. A Europa ligada por laços de confiança que a
unificaram é capítulo definitivamente encerrado na história europeia
contemporânea.
Quem é responsável por lançar a Guerra Fria 2.0 e novas ameaças e provocações-
desafios?
O otimismo ocidental associado ao final da Guerra Fria 1.0 foi muito exagerado. Na
verdade, só emergiu uma "Paz Fria" na Europa, entre a Guerra Fria 1.0 e a Guerra
Fria 2.0. EUA e Otan supuseram, erradamente, que o crescimento militar de ambos
durante esse período permaneceria invisível ou que seria interpretado como
entertainment inocente.
Assim sendo, a Nova Guerra Fria é o principal desafio-provocação e a mais grave
ameaça que se ergue hoje contra a estabilidade e a segurança da Europa.
A Nova Guerra foi intencionalmente iniciada pelo presidente Barack Obama, por
razões óbvias: para aumentar a margem de gastos militares para a Otan; para criar
mais estados pró-"Ocidente" em torno das fronteiras do território russo; para
derrubar o presidente da Rússia; para minar o potencial militar e econômico da
Rússia; e para arruinar a segurança e a economia da Europa – principal
concorrente econômico dos EUA. Infelizmente, todos os 28 estados-membros da
Otan e da União Europeia abraçaram a mesma escolha do presidente Obama.
Hoje, essa nova guerra já está plenamente em curso.
A União Europeia, no que pese a "tendência" a seguir Washington, tem voz que se
pode fazer ouvir e tem potencial para agir com independência. Mas são voz e
potencial que permanecem quase totalmente inúteis. É muito triste, porque a União
Europeia, se falasse pela própria voz, poderia adicionado equilíbrio real nas
discussões e nos esforços internacionais para resolver vários problemas.
A Guerra Fria 2.0 e suas ameaças e provocações, é fator de deterioração global,
porque promovem a deterioração do clima político, militar, econômico e financeiro.
E está muito próxima da terra russa. Afeta muitos países europeus. Afeta a
Federação Russa. Como o prof. Stephen Cohen, norte-americano de visão ampla
e cabeça aberta, disse em encontro internacional no verão passado em
Washington: "O epicentro da Nova Guerra Fria não está Berlim, mas junto às
fronteiras russas, na Ucrânia, região absolutamente essencial, na visão de
Moscou, para a segurança global e, até, para a sobrevivência da civilização russa".
A Guerra Fria 2.0 traz, de fato, seus próprios novos desafios-provocações e
ameaças, com impacto orientado para incidir sobre o futuro.
Novas provocações-desafios e ameaças, no controle de armas?
A Guerra Fria 2.0 já congelou completamente o processo de controle de armas.
Durante a Guerra Fria 1.0, EUA, União Soviética e Rússia firmaram vários acordos
bilaterais e multilaterais no campo do controle da corrida armamentista (7 acordos
para limitação e redução de armas estratégicas ofensivas [Strategic Offensive
Arms (SOA)]; acordos para desassociar mísseis nucleares e respectivos alvos; os
tratados INF e Open Skies; o Tratado CFE, etc.). Hoje, o processo de controle de
armas entre EUA/Otan e Rússia está completamente paralisado, sem chances
imediatas de qualquer tipo de ressurreição. Há 15 questões não resolvidas entre
Moscou e Washington – em algumas áreas de importância capital. São todos, ao
mesmo tempo, ameaças, provocações e desafios à estabilidade regional e global.
Dentre eles: o deslocamento/realocamento de mísseis norte-americanos de
defesa; conversão dos submarinos estratégicos norte-americanos equipados com
mísseis balísticos com ogivas nucleares (US SSBN), em submarinos estratégicos
norte-americanos equipados com mísseis cruzadores (US SSGN); nenhum
empenho dos EUA para contar as ogivas estratégicas ofensivas armazenadas na
reserva ativa dos EUA; os EUA sistematicamente descartam qualquer proposta
para controlar mísseis cruzadores portadores de ogivas nucleares lançados do mar
(US SLCM); os EUA ainda têm armas nucleares táticas estacionadas na Europa
(fora, portanto, de território norte-americano); os EUA não têm qualquer intenção
em ampliar a aplicação do acordo INCSEA (para prevenção de incidentes no mar)
de modo a que inclua submarinos movidos a energia nuclear (até hoje, já foram
relatadas 12 colisões entre submarinos movidos a energia nuclear dos EUA e da
URSS/Rússia); os EUA ainda mantêm doutrina nuclear ofensiva baseada na
"contenção" nuclear em geral e da "contenção" nuclear estendida – com "regras"
sobre primeiro ataque, ataques preventivos e para impedir retaliação; os EUA não
manifestam qualquer intenção em redigir acordo CFE qualitativamente novo (CFE-
2); os EUA não manifestam qualquer desejo de firmar qualquer acordo PAROS
(para impedir que se instalem armas no espaço sideral); os EUA não têm qualquer
plano para assinar algum acordo ASAT (acordo antissatélite); os EUA violam o
Tratado INF sempre que, para testar mísseis interceptadores de defesa, usam
mísseis balísticos de médio alcance (1.000-5.500 km) e mísseis balísticos de
"alcance intermediário" (3.000-5,500 km); os EUA e a Otan estão mantendo a
Operação da Força Aérea "Policiamento Aéreo do Báltico" por 24 horas/dia, 365
dias/ano com aeronaves de dupla capacidade [DCA, dual-capable aircraft], que
podem transportar bombas atômicas de queda livre; Washington continua a
escapar da ratificação do Tratado para Banimento Amplo de Testes [CTBT
(Comprehensive Test Ban Treaty)] – 18 anos depois de o tratado ter sido assinado;
os EUA não querem limitar o uso de veículos aéreos comandados à distância
[UAVs (unmanned aerial vehicles)] armados e continuam a usá-los contra civis,
especialmente no Paquistão, Afeganistão e outras nações; e, finalmente, os EUA
recusam-se a impor limites ao lançamento de armas convencionais hipersônicas
de acuidade máxima, a serem lançadas dentro da estratégia de "Rápido Ataque
Global" ["Prompt Global Strike"].
Perigos que se consumarão nos próximos vários anos, se não forem contidos.
Nas forças nucleares: Os EUA completarão a substituição de sua tríade tradicional
de armas estratégicas ofensivas (strategic offensive arm (SOA)] – criarão novos
[mísseis] ICBMs, SLBMs e novos bombardeiros estratégicos pesados. As suas
ogivas serão modernizadas. Será desenvolvido novo combustível para os novos
mísseis ICBMs, serão criados motores mais potentes para os novos mísseis ICBMs
e SLBMs e aumentará a capacidade para atingir alvos predefinidos. O Pentágono
tem planos para desenvolver novo míssil cruzador lançado do ar ALCM e para
converter submarinos nucleares lançadores de mísseis balísticos (SSBNs) em
submarinos nucleares lançadores em mísseis teleguiados (SSGNs) (4 submarinos
da classe "Ohio" já foram convertidos). Há intenções de longo alcance dentro do
Pentágono para modernizar o arsenal ofensivo estratégico até o final do século 21,
e o arsenal nuclear tradicional pelo menos até 2075. [4]
A rotação de forças pela Europa Ocidental para exercício ganhará padrão de
rotina. A Otan montará a Spearhead Force [Força Ponta de Lança], – de modo que
suas tropas mantenham-se em permanente estado de prontidão, para ação "em
questão de dias". No próximo mês de fevereiro, ministros de defesa da Otan
definirão o design, a composição e o tamanho dessa "Força Ponta de Lança".
Os EUA abriram oito novas bases militares na Europa: incluindo duas bases navais
na Bulgária e na Romênia, e seis bases aéreas na Bulgária, Estônia, Lituânia,
Romênia e Polônia. E dois novos centros C3I da Otan serão inaugurados na
Polônia e na Lituânia. Os EUA usam áreas continentais europeias para instalação
de seus sistemas de mísseis balísticos de defesa, e também as áreas para as
quais a Otan se desloca, cada vez mais para leste. Em breve serão abertas mais
duas bases de sistemas de mísseis balísticos de defesa – na Romênia e na
Polônia. Sem dúvida, essas bases, ou quaisquer outras, serão automaticamente
posicionadas como alvos pelos sistemas de mísseis balísticos de defesa e outros
sistemas de armas russos.
A deterioração do relacionamento da Rússia com a aliança da Otan, sobretudo no
que tenha a ver com a crise ucraniana, deixou muito obviamente evidente a
inabilidade da aliança para alterar o código genético político-militar que a aliança
incorporou durante a era da Guerra Fria 1.0. As capacidades militares da Otan, que
se acumularam nas vizinhanças da terra e dos litorais da Rússia pode ser tomada
como demonstração de intenções hostis e esquema de projeção provocativa de
poder. Na verdade, foi a Otan quem se moveu até se plantar "às portas" da Rússia.
Mais uma provocação-desafio: acusações hostis e retórica de provocar guerra
Declarações hostis saídas da Casa Branca e dirigidas à Rússia, como "dar uma
lição [à Rússia]", "Rússia pagará caro pela intervenção militar na Ucrânia",
"anexação da Crimeia" e, finalmente, que a Rússia ficaria em segundo lugar [como
graves perigos] entre o ebola (o vírus) e o Estado Islâmico", como Barack Obama
disse em recente sessão da Assembleia Geral da ONU, em setembro de 2014, são
absolutamente sem qualquer fundamento. Vladimir Putin respondeu de forma
perfeitamente clara: esse tipo de abordagem, associada às sanções é
"comportamento hostil".
Moscou jamais promoveu qualquer intervenção militar, nem na Crimeia nem no
Donbass, embora tenha havido muitas vozes a pedir que a Rússia enviasse
contingentes militares para as Repúblicas Populares de Donetsk e de Lugansk.
Quanto à Crimeia, sempre houve tropas russas lá estacionadas, desde muito antes
de a República da Crimeia tomar a decisão de solicitar sua reintegração à
Federação Russa – aquelas tropas lá estavam sob vários tratados bilaterais
assinados entre Rússia e Ucrânia sobre a permanência ali da Frota do Mar Negro,
e jamais excederam o número limite de 25 mil homens. A reintegração da Crimeia
à Rússia cumpriu-se sem que se disparasse sequer um tiro. A Crimeia já foi russa
(desde 1783) e será terra russa para sempre. Jamais, em tempo algum, será
"dada" a quem for, como presente ou incentivo para expandir "laços de amizade".
A Rússia não aceitará em nenhum caso a palavra "anexação". Depois da dita
"anexação", só 3.500 crimeanos optaram por mudar-se para a Ucrânia, por livre e
espontânea vontade. Por outro lado, praticamente todos os soldados e policiais
ucranianos que serviam na Crimeia optaram por servir às Forças Armadas Russas.
Essa reintegração da Crimeia à Rússia aconteceu pacificamente, como efeito de
referendo democrático realizado na Crimeia em março passado.
Para Washington, a coisa mais fácil a fazer seria reconhecer a reintegração da
Crimeia à Rússia. Mas entre os dois estados – Ucrânia e Rússia – Washington
infelizmente optou um estado falhado, imprevisível, perigosamente
ultranacionalista, estado cujas declarações são mentiras integrais, do começo ao
fim, estado que rouba gás e carvão pelos quais não pode pagar e que não paga,
tampouco, créditos e empréstimos que receberam antes de começarem a roubar
gás e carvão.
Quanto aos desenvolvimentos no Donbass, não é preciso mandar para lá tropas
russas, simplesmente porque o número de combatentes que operam ali a favor da
liberdade e da democracia é suficiente para repelires o genocídio que Kiev tenta
consumar mediante sua "Operação Antiterror". A Rússia jamais ocupou sequer
uma polegada de terra ucraniana e não tem qualquer intenção de fazê-lo. É
verdade: dez militares russos perderam-se numa estrada, certa vez, e apareceram
em território da Ucrânia. Teria sido a "agressão" de que alguns falam?
Não houve luta. Os dez voltaram à Rússia. Se isso foi "agressão", que nome se dá
quando 460 soldados ucranianos cruzaram a fronteira da Rússia em vários
grupos? "Mega agressão"?
Os dramáticos desenvolvimentos na Ucrânia revelaram crise em grande escala em
termos da legislação internacional, das normas básicas da Declaração dos Direitos
Humanos e da Convenção para Prevenção e Punição do Crime de Genocídio.
Temos visto numerosas violações dos artigos 3, 4, 5, 7 e 11 da Declaração
Universal dos Direitos Humanos, da ONU, de 1948; e do artigo 3 da Convenção
para Prevenção e Punição do Crime de Genocídio, do dia 9 de dezembro de 1948.
Mais um desafio-provocação: sanções econômicas e financeiras
Há também sanções econômicas e financeiras contra a Rússia e contra vários
altos funcionários do governo russo, em número superior, hoje, a medidas
restritivas similares que já se aplicaram contra a União Soviética no passado – por
conta do envolvimento dos soviéticos no Afeganistão –, ou contra a Rússia,
quando a Geórgia atacou a Ossetia do Sul, em 2008.
A Rússia não compreende por que essas sanções foram introduzidas. Moscou
nada fez de errado para ser castigada. Ao mesmo tempo, cresce entre os russos a
clara convicção de que as sanções de estilo colonialista que o ocidente aplica à
Rússia contribuem com pouco ou nada para resolver a crise ucraniana. Os
verdadeiros objetivos dessas restrições são alterar e reformatar a Rússia; levar a
Rússia a mudar suas posições em questões internacionais chaves que são as mais
fundamentais para os russos e obrigar a Rússia a aceitar as inaceitáveis visões do
ocidente. "É ainda o pensamento do século passado, de épocas passadas,
pensamento colonialista combinado com inércia" – disse Sergey Lavrov, ministro
de Relações Exteriores da Rússia, dia 19 de outubro. É improvável que essas
sanções demovam a Rússia de suas posições atuais. E quanto mais sanções anti-
Rússia se criem, mais forte o apoio que o Ocidente estará dando a Kiev e mais
estarão "aos tropeços, rumo a um desastre" [orig "Blundering Into A Disaster"],
como se lê no título que Robert McNamara, ex-secretário de Defesa dos EUA, deu
a suas conhecidas memórias.
O presidente Vladimir Putin chamou recentemente de "perfeita tolice" as atuais
medidas econômicas e financeiras ocidentais, e acrescentou que não causariam
qualquer dano aos programas sociais e econômicos do estado russo. 94% dos
russos disseram que não temem as sanções dos EUA e da União Europeia e
tolerarão qualquer efeito negativo que as sanções por acaso venham a gerar. Para
os russos, as tais sanções não são "nem quentes demais nem frias demais", como
disseram. O Banco Central Russo admitiu que as sanções ocidentais afetaram
apenas a atividade operacional de alguns bancos russos, mas que não tiveram
qualquer impacto negativo mais amplo. Pelo contrário, até aumentou a confiança
dos clientes nos Bancos "Rússia" e SMP que foram incluídos nas sanções: os
depósitos aumentaram em cerca de 20%. Mas as sanções estão afetando
gravemente as próprias fundações do comércio mundial, as regras da Organização
Mundial do Comércio e o princípio da inviolabilidade da propriedade privada.
As sanções não produzirão qualquer efeito profundo sobre a economia da Rússia,
como supuseram os que inventaram as sanções. A produção industrial da Rússia
nos últimos oito meses aumentou cerca de 2,5% (ano passado, o produto industrial
crescera apenas 1,5% no mesmo período). Ano passado, a agricultura russa
cresceu apenas 2,5% durante os primeiros oito meses do ano; esse ano, tivemos
crescimento de 4,9% no mesmo período. Esse ano, o orçamento russo mostrou
superávit de mais de 1 trilhão de rublos, cerca de 200 bilhões de euros. E a Rússia
mantém suas reservas de US $ 450 bilhões em ouro e em moedas fortes.
Mas as sanções ocidentais são, isso sim, faca de dois gumes: até agora, os países
europeus já perderam US$ 1 trilhão, desde a imposição das sanções contra a
Rússia. À parte as óbvias consequências econômicas, as sanções da UE contra a
Rússia têm implicações políticas danosas contra os próprios europeus. Sabe-se,
claro, que as sanções também tiveram algum efeito danoso, limitado, sobre a
economia russa. Mas no mesmo período, a economia europeia sofreu muito.
Muitas empresas europeias de vários ramos industriais vinham cooperando com a
comunidade empresarial russa. Depois que as sanções foram introduzidas, aquela
cooperação tornou-se impossível, e os investimentos de parceiros ocidentais na
Rússia podem não gerar os resultados antes previstos. Não há dúvidas de que as
empresas que mais sofreram foram os pequenos e médios negócios que se
organizaram em toda a Europa e orientados diretamente para aquela cooperação
com a Rússia. Claro que essas falências levarão a demissões em massa em
praticamente todos os países europeus. E, resultado disso, é possível que se
observe crescimento no desemprego, descontentamento em massa contra
políticas do estado e queda nos índices de confiança entre a população.
Nos últimos anos, condições assemelhadas parecem ter levado às chamadas
"revoluções coloridas" ou "revoluções provocadas por caos controlado" em vários
países. Hoje, o que se vê é que começam a configurar-se mais ameaças contra a
segurança na Europa.
As sanções ocidentais voam como bumerangues. Por exemplo, a Polônia
introduziu sanções contra a Rússia e imediatamente perdeu acesso ao gigantesco
mercado russo consumidor de maçãs: há muitos anos a Polônia vende anualmente
à Rússia 900 mil toneladas de maçã, 90% de todas as maçãs que a Polônia
exportava. Atualmente, a Rússia está comprando maçãs da Sérvia, Nova Zelândia
e África do Sul. A indústria polonesa de industrialização de maçãs está em ruínas:
foi arruinada pelos próprios poloneses. As sanções fizeram os preços caírem
alucinadamente: ninguém quer comprar maçãs polonesas nem a 10 centavos de
euro o quilo.
Outras sanções ocidentais são irrelevantes, como a sanção introduzida contra
Nikolai, de 10 (dez) anos, filho do presidente Aleksander Lukachenko de Belarus;
ou contra a deputada russa Elena Mizulina, que se opõe ao casamento
homoafetivo. Há também sanções cômicas, como as que foram impostas a um
cavalo que vive num estábulo que pertence ao presidente checheno Ramzan
Kadyrov. [5]
Os EUA e nações europeias que se serviram do mecanismo de sanções terão
dificuldades para reparar os danos que causaram à própria reputação. Christine
Lagarde, Diretora-Gerente do Fundo Monetário Internacional disse, dia 9 de
outubro, que
Embora até aqui o impacto do conflito na Ucrânia tenha sido relativamente contido,
qualquer escalada gerará, com certeza, efeitos negativos, tanto regionalmente
como globalmente.
Novo pacote de sanções foi introduzido pelos EUA contra a Rússia, como tentativa
primitiva de "vingar-se", num momento em que a situação na Ucrânia não se
desenvolve conforme o cenário que Washington rabiscou atrabiliariamente.
Para seja qual for a finalidade, é inútil tentar falar com a Rússia na língua das
sanções. Na atmosfera em que se cozinham precipitadamente massivas sanções
ocidentais anti-Rússia, Moscou tem o direito de impor ininterruptamente suas
próprias sanções contra os EUA, em qualquer e em todos os domínios, como
resposta. Mas, como se pode ver, Moscou não respondeu com sanções às nações
que decidiram começar por usar sanções, e sem nenhum motivo real.
Kiev, para começar, em vez de pagar dívidas conhecidas e assumidas, abarrotou a
Corte de Arbitragem de Estocolmo com montanhas de arquivos irrelevantes e de
origem suspeita, e iniciou várias ações contra a Rússia. Em termos gerais,
pergunta justa é:
"Como é possível alguém falar em des-escalar a situação na Ucrânia, enquanto,
simultaneamente, os mesmos que inventam novas e novas sanções contra a
Rússia também assinam acordos de paz que jamais cumprem?"
A Ucrânia ainda não pagou por 11,5 bilhões de metros cúbicos de gás que
comprou da Rússia, e por 100 mil toneladas de carvão que comprou da Polônia.
Somadas com dívidas anteriores, a Ucrânia deve um total de US$ 9,8 bilhões à
Rússia. Nada desse dinheiro foi pago até agora. E a Rússia não é organização de
caridade, para continuar a fornecer gás gratuito à Ucrânia, sem esperar
pagamento. De 1991 a 2014, a Rússia deu à Ucrânia cerca de US$ 200 bilhões.
Isso tudo prova que a Ucrânia já é, hoje, comprador extremamente suspeito e
perigoso, para toda a economia mundial. Como disse Robert Fico, Primeiro-
Ministro da Eslováquia, em outubro de 2014:
"Algo me diz que a Ucrânia está esperando de outros, não dela mesma, a solução
de suas dificuldades."
Justo seria, isso sim, que as atuais sanções tivessem sido forçadas contra o atual
governo da Ucrânia, pelas atrocidades que cometeu contra seus próprios cidadãos;
e pelas muitas evidências de que a Ucrânia nunca foi e jamais será contraparte
econômica e financeira confiável. Impor sanções é resultado de desacordos
políticos. Se a Rússia, a UE e os EUA tivessem imposto sanções contra a Ucrânia,
Kiev talvez tivesse posto fim à prática de seus muitos crimes de guerra massivos,
no sudeste, contra a própria população ucraniana.
Mas a política de sanções tem, sempre, caráter contraproducente. Quando se
impõem sanções, não há vencedores. E, nesse caso especial, a Rússia está de um
lado; e EUA, Europa e outros estados pró-ocidente estão do lado oposto.
Obviamente, alguém vai sofrer mais, outros sofrerão menos. Os EUA, distantes da
Rússia em termos geográficos, está conduzindo uma política externa "norte-
americanista" e independentemente da política externa da UE. Ao mesmo tempo,
porque optou por confrontar a Rússia econômica e politicamente, a Casa Branca
exige que a Europa a apoie; ao fazê-lo, a Casa Branca empurra os estados-
membros da UE para uma posição muito precária.
Como se não bastasse, quando se comprovam as consequências econômicas e
políticas obviamente negativas para a Europa, vê-se que a atividade da
"comunidade de inteligência" dos EUA, que já infligiu outras perdas diretas aos
interesses da segurança europeia, só faz jogar mais gasolina à fogueira. Os
serviços especiais dos EUA estão manipulando a opinião pública mundial,
servindo-se para isso dos meios globais de comunicação e da atividade da
imprensa-empresa global e seus jornalistas. Para ter certeza, basta lembrar o
papel que se acredita que tenham tido vários agentes pró-guerra, operantes nos
jornais e redes de televisão.
Mais um perigo-provocação: Revoluções Coloridas e Guerras Híbridas
O número de casos de intervenção direta em estados soberanos, pelos EUA e
seus aliados próximos, aumentou nos últimos tempos. Washington já declarou
abertamente o direito que supõe ter para usar unilateralmente a força em qualquer
lugar do mundo, para defender seus "interesses vitais". A interferência militar
tornou-se norma – apesar do lastimável resultado de todas as operações de força
que os EUA tentaram nos últimos 70 anos.
Onde quer que se constate presença militar dos EUA, logo se veem instabilidade,
calamidades, hostilidade e derramamento de sangue. Washington criou mais
estados falidos nos últimos anos, do que jamais antes, durante toda a Guerra Fria
1.0.
Madame Sharon Tennison, presidenta do Centro para Iniciativas Cidadãs, nos
EUA, tem pedido insistentemente que os governantes dos EUA não façam mais
guerras distantes, não mais desestabilizem governos eleitos, não demonizem
outros líderes e países, e que parem de usar força militar para intervir por todos os
cantos, pelo planeta. E disse, em termos eloquentes:
Todos os países que os EUA invadiram nos últimos 12 anos estão hoje em
situação muito pior do que estavam antes de coturnos e armas norte-americanas
aparecerem na terra deles.
Em carta que escreveu a Nancy Pelosi, ex-candidata ao governo dos EUA, Sharon
Tennison diz também que jamais antes vira coisa mais carregada de erros e
distorções, mais mal intencionada e mais perigosa que a atual política dos EUA
contra a Rússia. E propõe perguntas bastante lógicas: O que fariam os EUA se a
Rússia pusesse as forças armadas e todos os mísseis do Pacto de Varsóvia ao
longo da fronteira EUA-México e EUA-Canadá? O que farão os EUA quando, sim,
já há possibilidade real de a Rússia instalar armas em Cuba?
À parte empregar força militar massiva para derrubar "governos pouco amigáveis"
como na Líbia, no Iraque (e em inúmeros outros países no passado, como, dentre
outros Guatemala, Cuba, Vietnã do Norte, Coreia do Norte...), os EUA também
usam massivamente seus agentes de serviços secretos, sempre que parece aos
EUA que usar força militar seria ou caro demais ou criminoso demais
(consideradas as infrações da lei internacional). Vários casos de tentativas para
encenar "revoluções coloridas" no espaço pós-soviético são exemplos flagrantes
desses "esquemas". Já se sabe, dito diretamente pelo Comando de Operações
Especiais dos EUA, que EUA estão prontos para provocar guerras secretas e não
declaradas servindo-se de "rebeldes" contra vários governos legalmente
constituídos, e explorando métodos de guerra econômica, política, militar,
psicológica contra qualquer tipo de adversário.
Um dos métodos já explorados pelos EUA é substituir governos mediante eleições,
nas quais se mobilizam quantidades gigantescas de dinheiro, para comprar votos,
comissões eleitorais, e dali até ''a cabeça'', servindo-se dos serviços de jornalistas
cuidadosa e especificamente treinados, agências de notícias, fraudes nas urnas ou
apurações dos votos e distorções nos números finais de votos contados.
O processo foi exposto em tons vívidos pelo embaixador dos EUA na Rússia,
Michael McFaul, antes de ser nomeado embaixador e antes de ter trabalhado
como Conselheiro de Segurança Nacional dos EUA – quer dizer, quando ainda era
professor na Stanford University e estudava a Rússia.
Na aula pública que ministrou num país do leste europeu há alguns anos, Michael
McFaul revelou abertamente ao público presente, o número de agências dos EUA
(p. ex., USAID) que davam dinheiro a ONGs ucranianas e a empresas-imprensa
(jornais impressos, televisão e grupos ativos nas "redes sociais") na Ucrânia, para
que pusessem no governo o presidente – pró-ocidente – Viktor Youschenko, em
2004, que pregava a imediata integração da Ucrânia à Otan. O prof. McFaul
conhecia a específica quantia de dinheiro canalizado para ONGs ucranianas já
existentes ou especificamente criadas para a finalidade de interferir nas eleições
presidenciais de 2004 na Ucrânia, sob o "lema" de "promover a sociedade civil"
naquele país. A CIA também abasteceu com recursos substanciais a oposição
russa, servindo-se de ONGs russas e de outras nacionalidades implantadas na
Rússia para impedir que o presidente Putin fosse eleito em 2012.
O padrão de interferência mais recentemente posto em prática é o que se viu na
Ucrânia. A ideia de usar força aérea para derrubar o presidente Viktor Yanukovich
jamais foi discutida ou interessou ao Pentágono. A principal tarefa da CIA e de
outros serviços secretos foi derrubá-lo e substituí-lo servindo-se de outros padrões
de ação, inclusive operações clandestinas dentro da Ucrânia. O método mais
recentemente utilizado para golpe de mudança de governo foi, na Ucrânia, incitar
"tumultos de praça" massivos ("manifestações em praças centrais de grandes
cidades"). Por esse padrão, treinam-se e pagam-se "manifestantes pacíficos" que
se reúnem, no primeiro movimento, para protestar contra um ou outro ato de
corrupção, a má qualidade dos serviços públicos, crimes de vários tipos etc..
Quando os protestos pacíficos na Praça Maidan e ruas próximas em Kiev
começaram a dar sinais de exaustão, os serviços secretos da Ucrânia (SBU)
distribuíram atiradores treinados pelo alto de prédios em torno da praça, para atirar
a esmo em qualquer pessoa, dos dois lados das barricadas, tanto contra
manifestantes quanto contra policiais.
Os serviços secretos dos EUA estiveram muito amplamente envolvidos na
"produção" e implantação de um governo fracassado, mas pró-ocidente, em Kiev,
em fevereiro passado: fontes públicas dizem que foram gastos US$ 10 bilhões em
toda a operação, e que ainda mais dinheiro foi levado para Kiev, por malotes
diplomáticos, no final de 2013 e início de 2014. Um comentário crítico sobre a CIA
dos EUA: a Agência é capaz de inventar, do nada, um golpe; é capaz de fazer toda
a engenharia do golpe. Mas não é capaz de prever o que acontecerá depois. A
tragédia na Ucrânia é o mais vívido exemplo dessa ignorância.
Washington coordenou os tumultos da Praça Maidan em fevereiro passado e levou
ao poder personalidades de Kiev nada experimentadas no governo, não
profissionais. Funcionário aposentado da CIA confessou, no verão passado, que o
planejamento de uma operação clandestina desse tipo exigiria, no mínimo, um ano.
O ocidente não se deu o tempo necessário. Agora, diz que não compreende que o
povo do Donbass tenha decidido fazer a história andar noutra direção, que não é a
que a CIA "planejara". Ninguém nunca mais conseguirá "reunificar" a Ucrânia.
Nunca mais. O sangue derramado foi demasiado, morreu gente demais, há
destruição e sofrimento demais, por lá. Acumularam-se quantidades imensas de
rejeição, de antipatia. O Donbass simplesmente não quer viver sob o mando da
Ucrânia, preso em algemas ucranianas. Querem estado separado, dentro dos
limites administrativos de sua própria terra.
Ao pôr no poder seu "íntimo aliado" como presidente da Ucrânia, os serviços
secretos dos EUA continuam a manter a Ucrânia como entidade 100% pró-EUA e
pró-Otan. Para reforçar os sentimentos anti-Rússia e pró-ocidente na opinião
pública naquele país, os serviços secretos dos EUA mantêm lá "instrutores" e
"conselheiros" em praticamente todos os ministérios e sessões e departamentos do
governo da Ucrânia, todos trabalhando ativamente na guerra de informações
contra a Rússia e contra outros países que não apoiaram o golpe sangrento e
ilegal em Kiev e no resto da Ucrânia.
Como "método", é simples: usam a internet para martelar e martelar, por repetição,
qualquer notícia falsa ou duvidosa que lhes pareça útil; na sequência, extraem
daquelas "notícias" as "conclusões" mais estapafúrdias e de mais longo alcance,
que mais interessem aos EUA; passo seguinte, aquelas "conclusões" são
apresentadas aos políticos dos EUA e ao público em geral como se fossem "fato",
vale dizer, como se fossem a realidade. Exemplo recente desse "golpe" foi a
"notícia", distribuída pelas Forças de Segurança da Ucrânia, segundo a qual
cadetes da Academia Russa de Artilharia (ARA, desativada há seis anos) estariam
atacando no Donbass.
Outra história: documentos falsos de identidade russa foram exibidos a
"jornalistas", como prova de que haveria soldados russos comandando a "agressão
contra a Ucrânia".
Incompetência, porque o serviço secreto ucraniano SBU e a CIA dos EUA tinham
de saber que aqueles documentos foram cancelados há muitos anos. No verão
passado, o SBU distribuiu nota oficial na qual afirmava que Vasiliy Geranin,
suposto oficial ucraniano, teria tido uma conversa por telefone com um resistente,
no Donbass, de nome Igor Bezler. Mas, quando vi a foto do dito "Vasiliy Geranin",
vi que era Musa Khamzatov, que conheço pessoalmente, de nossos contatos no
Instituto para Relações Internacionais em Moscou.
Em termos gerais, a CIA manipula as percepções do público sobre o que se passa
efetivamente no mundo; interfere na vida privada de alguns líderes mundiais e
homens e mulheres "de poder". No ambiente em que se vive hoje e no que se pode
prever para o futuro, os serviços secretos dos EUA têm de parar de intrometer-se
em assuntos internos de outros países e na vida pessoal das pessoas. Só assim
conseguirão fazer bem feito o que existem para fazer: manter e promover a
segurança dos EUA e de seus aliados.
Nesse contexto, pôr-se a ouvir telefonemas e a ler e-mails de praticamente todos
os norte-americanos nos EUA e de mais de 30 governantes eleitos em outros
pontos do mundo é prática a ser evitada – talvez deva ser proibida? – porque
essas práticas agridem as liberdades individuais, direitos humanos fundamentais e
a lei internacional.
E como sair do impasse gerado pela Guerra Fria 2.0
Em intervenção na reunião do Club Valdai em Sochi, dia 24 de outubro, o
presidente Putin observou que o mundo está menos seguro e mais imprevisível, a
cada dia que passa; e que os riscos só fazem aumentar, por todos os lados. Todo
o sistema de segurança foi seriamente enfraquecido, fragmentado e deformado.
Um diktat unilateral para impor sempre e só os próprios modelos produziu
resultado oposto e não gerou mais segurança. Em vez de reduzir e superar
conflitos, levou a uma escalada dos conflitos, ao caos sempre crescente, a um
apoio sob todos os títulos suspeito garantido a neofascistas e a islamistas radicais.
O mundo é testemunha de mais e mais esforços para fragmentar a situação global,
para traçar mais e mais linhas divisórias, para montar coalizões que não obram a
favor de coisa alguma, sempre contra quem tenha opinião diferente, com os EUA
tentando fabricar a imagem de um inimigo, como se viu nos anos da Guerra Fria, e
tentando também impor algum modelo; de fato, qualquer modelo, desde que seja
conveniente à perpetuação da "liderança" norte-americana.
Os EUA, depois de se autodeclararem vencedores da Guerra Fria, em vez de
manterem a ordem e a estabilidade, puseram-se imediatamente a obrar para
destruir o equilíbrio do sistema vigente de segurança. Os autoproclamados
"vencedores" da Guerra Fria decidiram reformatar o mundo para aproveitar aos
seus próprios interesses e carências "vitais".
Relatório preparado pelo Instituto Polonês de Relações Internacionais em outubro
de 2014 [6] deixou claro que as razões da crise Rússia-Ocidente são mais fundas
que algum déficit de confiança ou a falta de canais adequados de comunicações
entre as partes. A desconfiança não é resultado de não se compreenderem bem os
motivos do outro lado, mas reflete, isso sim, diferenças fundamentais na esfera dos
valores e da conceptualização dos interesses entre o ocidente e a Rússia.
Infelizmente, daí em diante o Relatório atribui toda a culpa, por tudo,
exclusivamente à Rússia. Verdade é que a chance é pequena, praticamente
nenhuma, de que se reconstrua a confiança entre o Ocidente e a Rússia, sem que
se enfrentem as diferenças reais, fundamentais, que há entre ambos.
Como Jeffrey Tayler, editor de The Atlantic, observou recentemente [7]:
"Os EUA embarcam nessa estrada de confrontação [com a Rússia] sem ter mão
firmes, equilibradas, de temperança, no volante da Casa Branca; na história
moderna, nenhum governo norte-americano jamais se mostrou mais incapaz, mais
inepto, nas tratativas com a Rússia. (...) Os norte-americanos estão sendo
mandados a uma nova guerra – fria, por enquanto – sem terem nem ideia do que
virá como resultado. É imprescindível que todos os norte-americanos perguntem
ao governo Obama: "Digam-nos: como terminará isso?."
Falando sério: como terminar isso?
Primeiro. Os EUA e seus aliados na Otan devem parar de reunir exércitos perto
das fronteiras da Rússia. O arsenal nuclear tático dos EUA – com toda a
infraestrutura relevante e os itens do sistema de mísseis balísticos de defesa – tem
de ser removido da Europa e devolvido ao território continental dos EUA. Deve-se
desenvolver um novo Tratado de Mísseis Anti-Balísticos, multilateral, que limite o
número de interceptores estratégicos. Deve-se elaborar e assinar um acordo CFE
qualitativamente novo (CFE-2), entre todos os estados-membros da Otan, incluídos
os membros recém admitidos, e a Rússia. Todos devem assinar tratado
internacional para banir instalação de quaisquer armas no espaço sideral. E
estados nucleares de facto e de jure terão de assumir o compromisso de não usar
armas nucleares em nenhum caso, no primeiro ataque. O Novo [tratado] Tratado
para Redução de Armas Estratégicas [Strategic Arms Reduction Treaty-4 (START-
4)] EUA-Rússia pode ser discutido, desde que todos os itens previamente
acordados sejam implementados. EUA e Otan devem considerar a Rússia como
sua aliada permanente, não como permanente inimiga.
Segundo. Todas as sanções econômicas e financeiras criadas contra a Rússia
devem ser levantadas integralmente e sem demora, porque são medida injusta e
ilegítima que infringem princípios da Organização Mundial do Comércio e do
comércio justo. A Rússia não tomará quaisquer medidas ou condições que visem
ao fim das sanções como fator de troca para que modifique suas posições sobre a
crise ucraniana que a Rússia não provocou
Terceiro. A Ucrânia terá de comprometer-se a manter para sempre o status de país
não alinhado e não nuclear. O povo do Donbass terá garantido o direito de decidir
sobre o próprio futuro – sem agressões ou ações punitivas dentro de suas
fronteiras administrativas dentro da Ucrânia. Uma solução pacífica para a crise
ucraniana exige não só um cessar-fogo, mas retirada completa de todas as tropas
regulares ucranianas e formações irregulares, para fora do território das
Repúblicas Populares de Donetsk e de Lugansk. As autoridades em Kiev devem
assinar um pacto de não agressão com aquelas Repúblicas Populares. Kiev deve
também compensar todas as perdas humanas e materiais que causou à região de
Novorússia – imediatamente e sem quaisquer atrasos.
A elite militar e política dos EUA tem de entender que a Ucrânia é uma espécie de
Rubicão geopolítico e político-militar, de onde a Federação Russa não retrocederá
e onde de modo algum desistirá de seus princípios fundantes. Ninguém pode
intervir, de modo algum, nas próximas eleições no Donbass, que cumprem
rigorosamente o que ficou acordado no Acordo de Minsk, marcadas para 4/11/2014
[foram realizadas (NTs)] – assim também, ninguém interveio nas recentes eleições
parlamentares realizadas na Ucrânia.
Quarto. Em termos gerais, é chegada a hora de abandonar para sempre, em todas
as relações internacionais, todas as ameaças feitas pretextos frouxos e
explicações vagas. O presidente Vladimir Putin disse recentemente: [8]
Esperamos que nossos parceiros percebam a futilidade de tentar chantagear a
Rússia e que se lembrem das consequências que pode ter, para a estabilidade
estratégica, a discórdia entre as duas principais potências atômicas do mundo.
A comunidade mundial como tal deve opor-se com firmeza a qualquer tentativa
para ressuscitar os resultados da IIª Guerra Mundial; e deve combater
consistentemente a quaisquer formas e manifestações de racismo, xenofobia,
nacionalismo agressivo e chauvinismo.
É importante que se organize uma reunião de cúpula EUA-Rússia, necessária e
urgente para atacar todos esses problemas e encaminhar essas soluções. Mas
não com Barack Obama. É impossível pensar em reunião séria, desse tipo, sob
essa presidência.
Conclusão
O mundo no qual vivemos e onde sucessivas gerações viverão deve ser erguido
sobre o princípio da multipolaridade: um mundo multipolar, com "segurança
assegurada mutuamente" para todos, depois de reduzido o número de armas, em
vez de depois de "mutuamente garantida" a destruição de todos.
A destruição mútua mutuamente garantida foi lema que EUA e Otan inventaram
durante a Guerra Fria 1.0. Mas, diferente da Guerra Fria 1.0 que proliferou por todo
o mundo, a nova Guerra Fria até agora só foi imposta à Rússia: entre EUA e
Rússia e entre Otan e Rússia. Essa guerra tem potencial mortal para respingar, se
não for detida. Pode gerar dificuldades para muitos países. Por isso essa Guerra
Fria 2.0 não pode espalhar-se para outras áreas do globo.
Ao mesmo tempo, têm de ser erradicados todos e quaisquer tipos de guerra
híbrida, nessa conotação moderna: guerras convencionais "mais" ciberguerras e
guerras de informação, com infiltração nos assuntos internos de outros estados,
sob a forma de "caos controlado" ou "guerras à distância".
Se essas medidas não forem implementadas, há alta probabilidade de que a
Federação Russa tenha de repensar medidas de resposta, sobretudo em relação
aos EUA e à Otan e suas políticas, e que introduza necessárias mudanças de
atualização em sua Doutrina Militar, substituindo a que foi aprovada em 2010 e
incluída no Livro Branco da Defesa, a ser divulgado no próximo ano, pelo Ministério
da Defesa da Rússia.
Pincelada Final: Há necessidade urgente de promover a reconstrução racional da
situação atual, e de adaptar [a Doutrina Militar da Rússia] às novas realidades no
sistema de relações internacionais.
Em vez de impor a Guerra Fria 2.0 que EUA e Otan já iniciaram, e de produzir
ameaças-provocações-desafio qualitativamente novas, toda a Europa e todo o
mundo, em geral terão de iniciar uma verdadeira détente global, que esteve em
andamento, bastante bem-sucedida, durante o século 20.
1- El imperialismo viene aplicando una nueva guerra contra la liberación de los pueblos
ASIMETRICA-DE 4A GENERACION: LA GUERRA DE DOMINACION
Destinada a las mentes, al control de la conducta social, es dirigida mediáticamente
Las fuerzas denominadas regulares o tropas militares, ya no serán necesarias en las guerras asimétricas, denominadas así porque conforman la cuarta fase de la guerra, o sea “la guerra de cuarta generación”. En esta fase la guerra se trasforma en algo diferente previéndose la desaparición de los sistemas de combate habituales y su mutación hacia conflictos de baja intensidad (revolución de colores, golpes suaves, primaveras) llamados también “Guerras Asimétricas”.
Evolución de las fases de la guerra hasta la de cuarta generación:
§ Fase inicial: arranca con la aparición de las armas de fuego y alcanza su expresión máxi ma en las guerras napoleónicas. La Guerra de Primera Generación corresponde a los enfrentamientos con tácticas de líneas y columnas, como la de la Independencia.
§ Segunda fase: comienza con la llegada de la Revolución Industrial y la disponibilidad en el campo de batalla de medios capaces de desplazar grandes masas de personas y de desatar poderoso fuego de artillería. La 1ª Guerra Mundial es su ejemplo paradigmático.
§ Tercera fase: se caracteriza por la neutralización de la potencia del enemigo mediante la localización de flancos débiles con la finalidad de anular su capacidad operativa, sin necesidad de destruirlo físicamente. La Guerra de Tercera Generación fue desarrollada por el Ejercito Alemán en el conflicto mundial de 1939-1945 y es comúnmente conocida como “guerra relámpago” (Blitz-krieg). No se basa en la potencia de fuego, sino en la velocidad y sorpresa. Se identifica esta etapa con el empleo de la guerra psicológica y tácticas de infiltración en la retaguardia del enemigo durante la 2ª Guerra Mundial.
§ Cuarta fase: En 1991, Martín Van Creveld publicó un libro titulado “La transformación de la guerra”, que aportaría sustento a la teoría de la Guerra de Cuarta Generación (G4G). El autor sostiene que la guerra ha evolucionado hasta el punto en que Clausewitz resulta inaplicable. Van Creveld prevé que en el futuro las bases militares serán reemplazadas por escondites y depósitos y el control de la población se efectuará mediante una mezcla de propaganda y terror. Las fuerzas regulares se irán trasformando en algo diferente a lo que han sido previéndose la desaparición de los principales sistemas de combate y su conversión en conflictos de baja intensidad (llamados Guerras Asimétricas).
La “Guerra Contraterrorista” (una variante complementaria de la G4G) borra las fronteras tradicionales entre "frente amigo" y "frente enemigo" y sitúa como eje estratégico la guerra contra un enemigo universal invisible diseminado por todo el planeta: el terrorismo.
La lógica del “nuevo enemigo” de la humanidad, identificada con el terrorismo tras el 11-S, se articula operativamente a partir de la guerra contraterrorista que compensa la desaparición del enemigo estratégico del capitalismo en la Guerra Fría: la URSS.
La “guerra preventiva” contra el “terrorismo” produce un salto cualitativo en la metodología y en los recursos estratégicos de la Guerra de Cuarta Generación al servicio de los intereses hegemónicos que regentan el sistema capitalista: EEUU-UE
El desarrollo tecnológico e informático, la globalización del mensaje y las capacidades para influir en la opinión pública mundial, convertirán a la Guerra Psicológica Mediática en el arma estratégica dominante de la G4G, en su variante contraterrorista. Las operaciones son sustituidas con unidades mediáticas, y la acción psicológica con el “terror” sustituye a las armas en el teatro de la confrontación. A partir del 11-S, la “Guerra Contraterrorista” y la “Guerra Psicológica”, conforman las dos columnas estratégicas que sostienen a la Guerra de IV Generación, con los mass media convertidos en los nuevos ejércitos de conquista.
“Guerra Psicológica”, o “Guerra sin Fusiles”, es el empleo planificado de la propaganda y de la acción psicológica orientadas a direccionar conductas, en la búsqueda de objetivos de control social, político o militar, sin recurrir al uso de la armas. Los ejércitos son sustituidos por grupos operativos descentralizados especialistas en insurgencia y contrainsurgencia y por expertos en comunicación y psicología de masas. Un plan de guerra psicológica está destinado a: aniquilar, controlar o asimilar al enemigo. Las bases de planificación militar son sustituidas por pequeños centros de comando y planificación clandestinos, desde donde se diseñan las modernas operaciones tácticas y estratégicas.
Características de la guerra de cuarta generación
§ Las grandes batallas son sustituidas por pequeños conflictos localizados, con violencia social extrema, y sin orden aparente de continuidad.
§ Las grandes fuerzas militares son sustituidas por pequeños grupos opera tivos (Módulos de Guerra Psicológica) dotados de gran movilidad y de tecnología de última generación, cuya función es detonar desenlaces sociales y políticos mediante operaciones de guerra psicológica.
§ Los módulos de Guerra Psicológica son complementadas por Grupos de Operaciones, infiltrados en la población civil con la misión de detonar hechos de violencia y conflictos sociales.
§ Las tácticas y estrategias militares, son relevadas por tácticas y estrategias de control social, mediante la manipulación informativa y la acción psicológica orientada a direccionar la conducta social masiva.
§ Los blancos ya no son físicos (como en el orden militar tradicional) sino psico lógicos y sociales. El objetivo no apunta a la destrucción de elementos materiales (bases militares, soldados, infraestructuras civiles...), sino al control del cerebro humano.
§ Las grandes unidades militares (barcos, aviones, tanques, submarinos, etc.) son sustituidas por un gran aparato mediático compuesto por hackers, la Web, twiteros, grandes redacciones y estudios de radio y televisión.
§ El bombardeo militar es sustituido por el cañoneo mediático: Las consignas y las imágenes sustituyen a las bombas, misiles y proyectiles del campo militar.
§ El objetivo estratégico ya no es la toma y control de áreas físicas (poblaciones, territorios, etc.) sino el apoderamiento y control de la conducta social masiva.
§ Las unidades tácticas de combate (operadores de la guerra psicológica) ya no disparan balas sino consignas dirigidas a conseguir un objetivo de control y manipulación de la conducta social masiva.
§ El armamento táctico es sustituido por los medios de comunicación (los ejércitos de cuarta generación) y las operaciones psicológicas se constituyen en el arma estratégica y operacional dominante.
Objetivos de la guerra de cuarta generación
En la Guerra sin Fusiles, la Guerra de Cuarta Generación (también llamada Guerra Asimétrica), el campo de batalla ya no está en el exterior, sino dentro de la cabeza de la población. Las operaciones ya no se trazan a partir de la colonización militar para controlar un territorio, sino a partir de la colonización mental para controlar una sociedad.
§ Los soldados de la G4G son expertos comunicacionales en insurgencia y contra insurgencia, que sustituyen operaciones militares por operaciones psicológicas.
§ Los misiles son sustituidos por consignas mediáticas que no destruyen el cuerpo, sino que anulan la capacidad cerebral del pueblo para decidir por sí mismo.
§ Los bombardeos mediáticos están destinados a destruir el pensamiento reflexivo (información, procesamiento y síntesis) y a sustituirlo por una tanda de imágenes sin resolución de tiempo y espacio (alienación controlada).
§ Los bombardeos mediáticos no operan sobre la inteligencia, sino sobre la psiquis: no manipulan la conciencia sino los deseos y temores inconscientes.
§ Durante las 24 horas de todos los días, hay un ejército invisible que: no utiliza los tanques, aviones ni submarinos, sino información direccionada y manipulada por medio de imágenes y titulares.
§ Los guerreros psicológicos no quieren que el pueblo piense información, sino que consuma información: noticias, títulos, imágenes, que excitan sus sentidos y su curiosidad, sin conexión entre sí.
§ El cerebro está sometido a la lógica de Maquiavelo: "divide y reinarás": Cuando la mente se fragmenta con titulares desconectados entre sí, deja de analizar (el qué, porqué y para qué de cada información) y se convierte en consumista de órdenes psicológicas direccionadas a través de consignas.
§ Los titulares y las imágenes son los misiles de última generación que las grandes cadenas mediáticas disparan con demoledora precisión sobre el cerebro de cada uno convertido éste en el teatro de operaciones de la llamada Guerra de Cuarta Generación.
Algo de historia
La historia de la humanidad es la del imperialismo y la de la dominación del hombre por el hombre (en distintos estadios), cuyas estrategias fueron evolucionando de lo simple a lo complejo:
A. Guerra militar (conquista territorial) = Control político
B. Guerra económica (conquista de recursos) = Control económico
C. Guerra Social (conquista de las sociedades) = Control social
D. Guerra Psicológica (conquista de las mentes) = Control ideológico
Con el Imperio capitalista, la guerra por el dominio y el control completa su ciclo evolutivo con la guerra social (conquista de las sociedades) y la guerra psicológica (conquista de las mentes). La guerra por el dominio y control de las sociedades y de las mentes, sólo se produce a partir de la interacción funcional de la tecnología (medios de comunicación) y de la informática (electrónica y computación) orientada a un objetivo de control y dominio mediante una estrategia comunicacional. Esos tres factores posibilitan que la guerra por el control y el dominio imperial capitalista toque su máximo estadio de desarrollo estratégico: la Guerra de Cuarta Generación.
La Guerra Psicológica imperial-capitalista actual se orienta en 3 objetivos clave:
1. Conquista de mercados emergentes (sociedades y países periféricos), median te la imposición de la "cultura consumista" nivelada y globalizada por los medios masivos de comunicación (mass media), actuando sobre la psicología del hombrealienado, convertido en individuo-masa.
2. Control y dominación social (en los países dependientes), orientados a la repre sión y/o neutralización de conflictos sociales que amenacen el desarrollo de los planes empresariales y la acumulación-expansión de la ganancia trasnacional capitalista.
3. Disputas ínter-potencias por los mercados, destinada a sustituir a la guerra militar por áreas de influencia (y por conquista de mercados) enterrada con la guerra Fría, hoy revividas en Eurasia y Asia Central.
Objetivo estratégico clave de la Guerra Psicológica de última generación:
Manipular, controlar, y convertir al individuo-masa en potencia social dirigida o direccionada con fines de control y dominio político-social, que responda, como fin último, a las políticas de dominio imperialista.
Ejemplos de guerra de cuarta generación
La Guerra de cuarta generación es una denominación dentro de la doctrina militar que comprende:
§ La Guerra de guerrillas
§ La Guerra asimétrica
§ La Guerra de baja intensidad
§ La Guerra Sucia
§ El Terrorismo de Estado u operaciones similares y encubiertas
§ La Guerra popular
§ La Guerra civil
§ El Terrorismo y el Contraterrorismo
§ La Propaganda, en combinación con estrategias no convencionales de combate que incluyen la Cibernética, la Población civil y la Política.
En este tipo de guerras no hay enfrentamiento entre ejércitos regulares ni necesaria mente entre Estados, sino entre un estado y grupos violentos o mayormente entre grupos violentos de naturaleza política, económica, religiosa o étnica. La guerra de cuarta generación va dirigida a la conciencia de los pueblos, a conquistar lo volitivo a través de la colonización del pensamiento. Buena parte de esta guerra se despliega en un ambiente denominado Infoesfera que es la comunidad virtual de las redes de comunicación eficaces dentro de la cibernética.
A caminho de uma guerra grande ou de uma grande guerra? José Milhazes 3/2/2015 – OBSERVADOR PT
Será que esta guerra só será travada num limiar igual ou semelhante ao da Crise das Caraíbas de 1962? A julgar pela propaganda russa, parece que sim e o desfecho deverá estar para os próximos meses.
A situação no Leste da Ucrânia continua a agravar-se rapidamente e as partes beligerantes não dão sinais de que a solução do conflito esteja para breve, bem pelo contrário: ambas accionaram planos de mobilização geral.
“Dentro de dez dias, na República Democrática de Donetsk terá lugar uma mobilização geral, planeia-se mobilizar até 100 mil homens”, declarou Alexandre Zakhartchenko, chefe dessa auto-proclamada república pró-russa.
Se ele, como já aconteceu várias vezes, não vier desmentir as suas próprias afirmações, as forças militares da sua república irão juntar-se às da auto-proclamada República Democrática de Lugansk.
A justificação para esta medida é a resposta à mobilização por etapas anunciada por Kiev, que promete mobilizar 104 mil homens durante 2015.
Quanto às conversações de paz, a situação vai de mal a pior. Os separatistas pró-russos alegam que não assinaram qualquer documento sobre a linha de separação das partes beligerantes, elaborando em Setembro do ano passado, no âmbito dos Acordos de Minsk. Kiev diz que esse documento é para ser cumprido, mas os separatistas exigem que passe a servir de linha de separação a actualmente existente no terreno, que lhes permitirá controlar os novos territórios conquistados na ofensiva iniciada em Janeiro.
Quanto aos jogadores externos, a Rússia continua a fornecer aos separatistas armamentos cada vez mais modernos e a deixar entrar no país vizinho
milhares de “voluntários” para combater contra o “regime fascista” de Kiev. Serguei Choigu, ministro da Defesa da Rússia, anunciou reforçar tropas e forças nas direcções estratégicas devido à situação político-militar criada em torno do seu país e o Presidente russo, Vladimir Putin, esclarece o alvo dessa política: “já não são forças armadas [ucranianas], mas uma legião estrangeira, neste caso uma legião estrangeira da NATO”.
Do outro lado, a NATO decidiu criar “postos de comando” em seis dos países membros próximos da Rússia: Polónia, Roménia, Bulgária, Estónia, Letónia e Lituânia, mas não existe unanimidade entre os países membros sobre a forma como reagir à política expansionista de Moscovo. Se os Estados Unidos se inclinam cada vez mais para a decisão de fornecer à Ucrânia “armamentos letais”, a chanceler alemã Angela Merkel continua a insistir no diálogo como forma de travar o alastramento do conflito com base nos Acordos de Minsk. Mesmo que a situação continuar a deteriorar-se, é difícil acreditar que os países da União Europeia cheguem a uma decisão unânime sobre o fornecimento de armas a Kiev e o mais provável é que alguns países da UE se juntem aos Estados Unidos na realização dessa tarefa.
Anton Tchekhov, clássico da literatura russa, escreveu: “Não se pode colocar no palco uma espingarda carregada se ninguém tencionar abrir fogo”. Neste conflito, resta esperar para ver que tipo de armas vão ser colocadas no teatro de guerra, sabendo à priori que elas poderão ser utilizadas.
Será que esta guerra só será travada num limiar igual ou semelhante ao da Crise das Caraíbas de 1962? A julgar pela propaganda russa, parece que sim e o desfecho deverá estar para os próximos meses.
P.S. Independentemente do tempo que irá durar este conflito, já há um vencido claro: Vladimir Putin. O Presidente russo colocou o seu povo e país numa aventura em que eles irão pagar um alto e doloroso preço. Putin revelou ser um mau táctico e um mau estratega no conflito da Ucrânia.
Império anglo-sionista e Rússia, em rota de colisão
6/5/2015, The Saker, The Vineyard of the Saker http://thesaker.is/more-signs-of-preparations-for-war/ Como muitos de vocês já sabem, a Marinha Chinesa enviou dois navios de guerra para o Mar Negro. Estão a caminho da base naval russa em Novorossiysk. Várias razões circularam sobre as razões dessa movimentação: – os navios são parte dos preparativos para a visita de Xi Jinping, para as comemorações do 9 de maio; – são parte de uma possível venda de fragatas chinesas à Rússia; – são parte dos preparativos para exercícios conjuntos sino-russos no Mediterrâneo.
Todas me parecem plausíveis. Embora alguns tenham especulado que a compra de fragatas chinesas pela Rússia seria grave desfeita contra a indústria russa, discordo. Se um país prepara-se para guerra, a quantidade de equipamento de defesa é muito mais importante que a nacionalidade do fabricante. Além disso, sabe-se que o desenho das naves da Marinha Chinesa é baseado no desenho dos navios russos. Assim sendo, não é caso de “a Rússia não pode fazer tal coisa”, mas é, sim, caso de “os estaleiros russos estão operando em plena capacidade, e os chineses podem entregar encomendas imediatamente”. Como solução rápida, faz perfeito sentido comprar equipamento de um aliado, especialmente se o desenho desse equipamento é baseado no seu. Seja o caso qual for, a chegada desses navios da Marinha Chinesa é uma bofetada nos EUA e no resto da OTAN, que têm feito de tudo para mostrar o que chamam de “ação decisiva” no Mar Negro... Até que aparece a China e indica claramente que está com a Rússia. O fato de que russos e chineses estarão em manobras conjuntas no Mediterrâneo, que a OTAN sempre considerou como mare nostrum, é afronta ainda maior ao aspirante a hegemon global eterno. Enquanto isso, vejam aí esse vídeo que acabo de receber de um amigo. Quando vi esse vídeo, pensei ‘é o exato tipo de ‘vídeo de mobilização’ que um país produz quando se prepara para a guerra’. Não há nada de errado com o patriotismo, desde que não degenere em nacionalismo, mas a repetição, feito mantra, de “Rússia! Rússia! Rússia! Rússia!” faz-me sentir muito desconfortável, porque ou visa a provocar “sentimentos de mobilização” ou, ainda pior, visa a aproveitar o estado já ‘mobilizado’ da população. Não estou dizendo que a Rússia está pronta para atacar alguém. O que estou dizendo é que há numerosos sinais de que a Rússia está agindo como país que se prepara para guerra. Tampouco estou criticando a Rússia por estar-se preparando para a guerra. Estou apenas triste (e assustado) pelo fato de a Rússia sentir que tenha de preparar-se para guerra. Para encerrar, acho ao mesmo tempo assustador e desanimador que a opinião pública no ocidente em geral seja mantida na mais nebulosa ignorância do fato de que, como está acontecendo nesse exato instante, o Império Anglo-sionista e a Rússia estão em rota de colisão. Como poderia alguém se opor a algo que não sabe que está acontecendo? Essa é a razão pela qual continuarei a soar o alarme, na esperança de que essa “barreira de silêncio” possa ser derrubada, antes que seja tarde demais. [assina] The Saker
__._,_.___
Enviado por: Vila Vudu <[email protected]>
VIII – ESPECIAL: GEOPOLÍTICA DO FUTEBOL
Pepe Escobar: “Geopolítica da Copa do Mundo”
12/6/2014, [*] Pepe Escobar, Asia Times Online − The Roving Eye
“The geopolitics of the World Cup”
Traduzido pelo pessoal da Vila Vudu
Seleção alemã confraterniza com índios Pataxós na Bahia (10/6/2014)
SÃO PAULO – Numa das imagens que, até aqui, definem a Copa do Mundo, vê-se
a Mannschaft alemã – a seleção alemã de futebol – confraternizando com índios
pataxó, a poucas centenas de metros de distância de onde o Brasil foi “descoberto”, em
1500. Praticamente, um redescobrimento dos trópicos exóticos.
E há também a Seleção Inglesa, deitando e rolando à beira-mar, numa base militar,
com o Pão de Açúcar como deslumbrante pano de fundo, sob uma parafernália de
equipamentos e respectivo especialista científico em umidade e ventiladores industriais
(afinal, haverá o “Duelo na Selva” contra a Itália, no próximo sábado, “nas profundezas
da Floresta Tropical Amazônica”, como dizem tabloides britânicos).
A Copa do Mundo – o maior espetáculo da Terra – começa no momento em que uma
incansável campanha de propaganda de demonização contra-China e contra-Rússia,
inventada no Ocidente (estados-fregueses incluídos), fez subir ao topo os níveis de
histeria universal.
Significa que os BRICS estão no olho do alvo; no caso do Brasil, é a potência emergente
localizada estrategicamente sobre a parte mais rica da Floresta Tropical Amazônica, em
tempos em que uma integração progressista da América Latina ousou reduzir a papel
higiênico (Marca Registrada) a Doutrina Monroe.
Nos anos recentes, o Brasil tirou pelo menos 30 milhões de pessoas, da miséria. A
China investe em atenção pública à saúde e à educação. A Rússia recusa-se a se deixar
abusar, como nos anos de Ieltsin, o bebum. Nos anos recentes, a Copa do Mundo tem
sido assunto, sempre, de países BRICS: África do Sul em 2010, Brasil agora, e Rússia
em 2018. Qatar em 2022 – como acontece sempre – parece mais um programa de
chantagem movido a petrodólares do Golfo, que saiu pela culatra.
É interessante verificar como a City de Londres – que ama o dinheiro russo, anseia por
investimentos chineses e tem uma quedinha pelo poder soft do Brasil –
está analisando o quadro. Com um toque de humor britânico, poderiam facilmente
interpretar o Duelo na Selva, como a OTAN combatendo na muito ambicionada floresta
tropical (pensem nas guerras da água que virão em futuro próximo).
Aquela outra Copa do Mundo
E então, apenas dois dias depois de iniciada a Copa do Mundo, a Bolívia, vizinha do
Brasil, estará hospedando nada menos que uma reunião de cúpula do G-77+China – de
fato, é reunião das 133 nações-membro da ONU, a coisa toda lá presidida pelo
presidente Evo Morales, da Bolívia, que é uma espécie de primo andino distante dos
Pataxós que tanto fascinaram os alemães.
Trata-se, pode-se dizer, de uma reunião da ALBA (Aliança/Alternativa Bolivariana para
as Américas e que inclui Cuba) e dos BRICS (só a Rússia não estará presente). Os
excepcionalistas norte-americanos estão furiosos, porque os BRICS estão conduzindo a
transição na direção de um mundo multipolar – que já existe no futebol (pense em
Espanha, Alemanha, Itália, de um lado; e Brasil, Argentina e Uruguai, do outro).
E tem a ver também com promover o futebol, com uma espécie de contragolpe Sul-Sul
à hegemonia do norte industrializado. Brasil, China e Rússia, com suas diferentes
estratégias, todos apostam em mais integração sul-sul – do Banco do Sul, ao banco de
desenvolvimento dos BRICS, em constituição (há reunião de cúpula dos BRICS,
crucialmente importante, mês que vem, em Fortaleza), na via para um sistema mais
igualitário que, idealmente, poderia ser financiado por uma porcentagem da dívida
externa, uma porcentagem dos gastos militares e um imposto global sobre transações
financeiras especulativas.
E sempre vale a pena recordar que o G-77 é sobre descolonização; nada de Império de
Bases; nada de interferência pelo complexo orwelliano/Panopticon da Agência de
Segurança Nacional dos EUA no Sul Global.
Agora comparem tudo isso com a Copa do Mundo Adidas; Coca-Cola; Hyundai; Kia
Motors; Emirates; Sony; Visa; Anheuser-Busch InBev (Budweiser); Castrol;
Continental; Johnson & Johnson; McDonald's; Itaú; FIFA, festa e entretenimento de
2014-Brasil, que a bíblia da indústria, Advertising Age apresentou como “umSuper
Bowl todos os dias, o mês inteiro”.
Patrocinadores da Copa do Mundo no Brasil-2014
Em firme oposição, há uma coorte de movimentos Sul-Sul sociais/de solidariedade que
denunciam tudo que, de ruim, esteja envolvido na super empreitada, de neocolonização
pós-capitalista hardcore a furiosa criminalização dos mais pobres.
E entre esses movimentos, não surpreendentemente, lá está o ícone do Sul Global,
Diego “Mão de Deus” Maradona, que disse essa semana que:
(...) a FIFA tira US$4 bilhões (da Copa) e a nação campeã só US$35
milhões. Não está certo. É a empresa desfechando golpe mortal contra o
futebol.
Futebol é guerra
Muito se tem ouvido sobre o paralelo entre a globalização hiper-capitalista – como se
vê bem graficamente na Copa do Mundo e nos meganegócios do futebol
contemporâneo – e o nacionalismo.
Ora, o mundo não é e jamais será plano. É um Himalaia/Pamir/Hindu Kush de
diferentes altitudes da desigualdade, exposto a avalanches de neve, de comércio, trocas,
fluxos de imigrantes e terremotos tecnológicos. Nada disso desfaz os tecidos/fibras
nacionais. Ainda é “nós” contra “eles”, com o Sul Global a definir norte-americanos e
europeus como “gringos”, tanto quanto levas do Norte industrializado a
patrocinar/lucrar no/do “exótico” Sul Global.
Nada há de pós-nação ou pós-nacional, na Copa do Mundo. No terreno da geopolítica
mais hardcore, a supercentralizada União Europeia vai-se fragmentando sob o peso de
um bando de partidos nacionalistas de direita ou de extrema-direita; no futebol, a
maior diferença, na comparação com a geopolíticahardcore, é que não há só uma
potência excepcionalista, mas um punhado, de Espanha ao Brasil, de Alemanha a Itália,
de Argentina a França.
Rinus Michels
Rinus Michels, técnico do “Carrossel Holandês”, seleção nacional que deslumbrou o
mundo em 1974 (mas não levou a taça), disse certa vez que futebol é guerra (feito
Samuel Fuller, diretor de cinema e gênio solitário, que disse que o cinema é um campo
de batalha). A Copa do Mundo é guerra por outros meios; um duelo oficial, permitido,
ritualizado, entre nacionalismos. É questão, só, de escolher sua tribo; só depois que sua
tribo já tiver saído da competição, escolha uma tribo substituta – que, para qualquer
epicuriano afetado atenderá provavelmente pelo nome de Itália. Afinal, é o mais
entusiasmante hino nacional. A melhor comida. Os melhores ternos. E, claro, eles
também têm Andrea “O Mago” Pirlo.
Novo jeito de jogar bola?
Brasil, justamente elogiado como Terra do Futebol, é também líder mundial na redução
das emissões de carbono, segundo pesquisa recentemente publicada na
revista Science – e simultaneamente conseguiu aumentar a produção agrícola, ao
mesmo tempo em que diminuiu o desmatamento, salvando mais florestas.
Mas, como sempre em tudo que tenha a ver com Brasil e Copa do Mundo, tudo se
misturou – metáfora ao vivo do típico conjunto variado de problemas que o Sul Global
tem de enfrentar. A presidenta Dilma Rousseff do Brasil foi forçada a apelar ao
estereótipo do brasileiro “homem cordial”, e falou muito de tolerância, diversidade,
necessidade de diálogo e até de sustentabilidade, tanto quanto condenou o racismo e os
preconceitos, para exortar a população a dar um tempo nas dificuldades locais e do dia
a dia, para receber bem uma legião de visitantes estrangeiros.
Quase desnecessário, se se considera que o brasileiro médio é naturalmente caloroso e
muito amigável; mas o demônio está nos detalhes – por exemplo, em pelo menos 200
mil pessoas deslocadas de onde moravam, ou, no mínimo, ameaçadas de expulsão, para
dar lugar a grandes obras para aumentar a “mobilidade urbana”. OK. Só 10% dessas
obras foram concluídas, em vários casos por culpa da corrupção massiva. No Rio de
Janeiro, não se investiu um único real num sistema de transportes caótico usado pelo
crescente proletariado das periferias urbanas.
O ex Presidente Lula recebe a camisa 13 do Corinthians ao lado do prefeito de São
Paulo, Fernando Hadad, na inauguração da Arena Corinthians
Lula, o ex-presidente ainda super, super, super popular, disse, quando estava na
presidência, em 2009, que não seria gasto nenhum dinheiro de impostos, na Copa do
Mundo. De fato, não, diretamente. Os financiamentos saíram do BNDES, Banco
Nacional de Desenvolvimento Econômico, que empresta dinheiro a bancos. E as
empresas que construíram os novos estádios também se beneficiaram de várias
isenções de impostos.
Resumo da história é que o governo da presidenta Dilma acabou perdendo a batalha
“midiática”. Várias vezes a presidenta teve de explicar que a Copa custaria o
correspondente a uma pequena fração do que é investido em saúde e educação (tema
sobre o qual ainda cabe discussão). Pode dizer que metade da população brasileira ou
não entendeu ou não foi convencida.
E nada garante, até agora, que uma vitória do Brasil na Copa do Mundo garanta
automaticamente a re-eleição da presidenta Rousseff. [1] Mas é preciso dizer que as
recentes ondas de protesto, onda após onda, começaram, de fato, antes do governo da
presidenta Rousseff. É como se todos esses diversos movimentos sociais estivessem
manifestando agora, concentradamente, o mais radical e utópico dos desejos: apagar,
de uma só varrida, séculos de injustiças perpetradas pelas elites brasileiras
notoriamente rapinantes e arrogantes e ignorantes – as quais mesmas elites sempre
implementaram políticas de total exclusão política e econômica, baseadas na mais
abjeta segregação racial e de classe.
A Presidenta Dilma Rousseff na abertura da Copa ladeada pelo Presidente da FIFA e
sua filha
Significa que o drama todo não é simplesmente sobre tendências “antineoliberais” ou
“anticapitalistas”. Vai muito além do nacionalismo. E bem pode ser muito mais
profundo e importante que um manual de revolução que use o futebol como pretexto.
Seja qual for o resultado dessa guerra que se trava em torno do futebol, mesmo assim o
Brasil ainda poderá ensinar boa lição a todo o Sul Global.
Na vitória, ou mesmo na derrota gloriosa, talvez o Brasil encontre a estamina
necessária para tentar uma nova abertura estratégica – um novo modo, novo, não
arrogante, não neocolonial, não armado, não excepcionalista de liderar e usar o poder,
para construir alianças e firmar grandes acordos geopolíticos em mundo multipolar.
Um jeito novo de jogar o jogo. Que comece, então, o Novo Grande Jogo.
Nota dos tradutores:
[1] 8/6/2014, The Guardian em: “Brazil’s politicians banking on World Cup victory
to help soothe unrest” [Mas, sinceramente, caro Pepe Escobar, e muito cá entre
nós: essa matéria do The Guardian é uma merda, e o livro do cara-lá TAMBÉM é
uma merda]
______________________
[*] Pepe Escobar (1954) é jornalista, brasileiro, vive em São Paulo, Hong Kong e Paris, mas
publica exclusivamente em inglês. Mantém coluna (The Roving Eye) no Asia Times Online; é
também analista de política de blogs e sites como: Tom Dispatch, Information Clearing
House, Red Voltaire e outros; é correspondente/ articulista das redes Russia Today, The Real
News Network Televison e Al-Jazeera. Seus artigos podem ser lidos, traduzidos para o
português pelo Coletivo de Tradutores da Vila Vudu e João Aroldo, no blog redecastorphoto.
Livros:
− Globalistan: How the Globalized World is Dissolving into Liquid War, Nimble Books, 2007.
− Red Zone Blues: A Snapshot of Baghdad During the Surge, Nimble Books, 2007.
− Obama Does Globalistan, Nimble Books, 2009.
www.desenvolvimentistas.com.br
IX – GEOPOLÍTICA DO NARCOTRÁFICO
La captura criminal del Estado
1 ENERO, 2015
Héctor Aguilar Camín http://www.nexos.com.mx/?p=23798
Héctor Aguilar Camín
Es una exageración decir que México ha vivido los primeros años del siglo XXI
una guerra civil. Quizá sea también una exageración sostener lo contrario. La
llamada guerra mexicana contra las drogas ha sido a su manera una guerra
civil: de las bandas del crimen organizado entre sí, y de éstas con las fuerzas
de seguridad del Estado.
La ausencia de bandos discernibles, batallas formales y causas invocadas
públicamente por los combatientes, desmienten el cuadro clásico de lo que
llamamos guerra civil, pero la intensidad de la violencia, la regularidad de los
enfrentamientos y, sobre todo, la cantidad de las bajas impiden mirar la
violencia mexicana sólo como una epidemia criminal.
Las 80 mil muertes y los 22 mil desaparecidos atribuibles a la guerra contra el
narco entre los años de 2008 y 2013 entran en el rango numérico de conflictos
bélicos recientes. Son una cifra muy superior a las 23 mil bajas en combate de
la primera Guerra del Golfo de 1990-91, y a las 50 mil de la guerra entre Etiopía
y Eritrea de 1998-2000. Están en la escala de los 112 mil civiles muertos en
Irak, durante la segunda Guerra del Golfo de 2002.1 Son cifras de violencia sin
precedente en el México moderno. Creo que la guerra de los años recientes
entre las bandas criminales ha sido una forma de guerra civil, y la guerra entre
estas bandas y las fuerzas de seguridad del Estado ha tenido por momentos la
forma de una rebelión o al menos de una resistencia armada. En todo caso, se
trata de una alteración radical de la paz en un país que había registrado en las
últimas décadas una disminución sostenida de la violencia. Otro rasgo que
acerca el fenómeno a la experiencia de la guerra: su aparición relativamente
inesperada.
En 1990 México tenía una tasa de 19 homicidios por cada 100 mil habitantes.
Para 2007 la había reducido casi a la mitad: ocho por cada 100 mil. En los
siguientes cinco años los homicidios dolosos se triplicaron. Fueron ocho mil
867 en 2007 y 27 mil 199 en 2011. La tasa pasó de un moderado ocho por
cada 100 mil habitantes, cercano a las tasas de Estados Unidos y Canadá
(cuatro y cinco por cada 100 mil, respectivamente), a un escandaloso 24 por
cada 100 mil.2
La pregunta no contestada sigue ahí: por qué esta espiral de muerte en un
cielo razonablemente despejado. El hecho central es, desde luego, la
declaración de la guerra al narcotráfico y al crimen organizado hecha
precisamente en 2007 por el gobierno de México y el despliegue
correspondiente de la fuerza pública.
Fernando Escalante Gonzalbo ha ofrecido la explicación más compleja de las
consecuencias de esta decisión y, por ello mismo, la más difìcil de historiar.
Según Escalante, la guerra del Estado contra el crimen, iniciado con el
operativo militar del Ejército en Michoacán al empezar el año 2007, fracturó un
territorio regido por previos acuerdos de tolerancia y contención de la violencia,
rompió códigos funcionales no sólo de la violencia de los narcotraficantes y sus
bandas, sino de muchos otros grupos, vecinos e inquilinos del submundo de la
violencia legal. Aquella decisión echó al espacio público la propia máquina
violenta del Estado, que se desplegó sobre estados y municipios en
innumerables operativos de ocupación territorial: retenes, batidas, redadas,
enfrentamientos y persecuciones. El choque de la máquina de la violencia legal
del Estado con las redes ilegales, no sólo del narco sino también del crimen
organizado y el desorganizado del país, abrió un espacio de choques y
secuelas de violencia en lugares no buscados. La intervención del Estado
multiplicó la violencia y la contraviolencia de muchos actores, invisibles o
latentes hasta entonces, pero de pronto amenazados e inducidos a una mayor
violencia por el mismo aumento geométrico de ésta.3
Complementaria de esta explicación es la de Eduardo Guerrero sobre la
estrategia misma de la guerra, que consistió en fragmentar a las grandes
bandas del narcotráfico para volverlas pandillas más manejables, aunque
acaso más violentas, que pudieran ser neutralizadas en el ámbito local. La
política de descabezamiento de las organizaciones criminales fue un surtidor
de violencia debido a la lucha interna por el poder que seguía al
descabezamiento y por la agresión de las bandas rivales suponiendo débil a la
descabezada. Algo semejante, aunque de menor intensidad, producía cada
gran decomiso de cargamentos de drogas prohibidas. Era atribuido por los
afectados a complicidades de las bandas rivales con la autoridad o a
delaciones internas. En ambos casos había que extender castigos ejemplares,
que no eran otra cosa que ejecuciones.4
Todo empieza en el narcotráfico pero no todo regresa a él. Al principio, hasta
los años cuarenta del siglo pasado, el narcotráfico tiene en México la forma de
redes familiares toleradas, cuando no organizadas, por políticos y autoridades
locales. Para los años ochenta del siglo pasado, cuando se cierra la ruta del
Caribe y México se vuelve un lugar de paso alternativo a la cocaína
colombiana, el negocio crece. Adquiere la forma de una primera red
monopólica, análoga a la del poder hegemónico del Estado, en cuyo seno el
narcotráfico tiene cómplices del tamaño de la policía política del régimen, la
Dirección Federal de Seguridad, radicada en la Secretaría de Gobernación,
cuyos comandantes muestran a los jefes del narco sinaloense el camino de la
ciudad de Guadalajara y apadrinan su traslado en los años ochenta.5 La
hegemonía sinaloense es desmontada por el propio Estado, en los mismos
años ochenta, a raíz del asesinato del agente de la DEA Enrique Camarena, en
1985, precisamente en Guadalajara. El asesinato crea un problema diplomático
y convierte en persecución la antigua tolerancia y la antigua complicidad con
los narcos. La destrucción del incipiente monopolio, cuyo líder es un antiguo
policía, Miguel Ángel Félix Gallardo, deja en el negocio un escenario de bandas
rivales, hijas de la misma mata.
Desde la prisión Félix Gallardo convoca a un encuentro en Acapulco para que
sus bandas herederas se repartan pacíficamente el negocio. El reparto
encumbra a personajes menores que con el tiempo serán legendarios del
narcotráfico mexicano. Los hermanos Arellano Félix reciben Tijuana; Sinaloa es
para Ismael El Mayo Zambada, Héctor El Güero Palma y Joaquín El
Chapo Guzmán; Ciudad Juárez para Amado Carrillo, el futuro Señor de los Cielos,
y Tamaulipas para la banda del Golfo, un gang de viejos contrabandistas que
incursiona tarde en el narcotráfico, a final de los ochenta, aprovechando
justamente el vacío sinaloense.
El reparto se acuerda pero no se cumple. Pronto las bandas herederas luchan
entre sí. La pequeña historia de sus rupturas formaría un libro de intensidades
shakesperianas. La destrucción del monopolio rompe la posibilidad de un
manejo centralizado del negocio, mejor opción para la paz pública que la
guerra intestina que siguió. Digamos para economistas ortodoxos que en el
caso de los mercados ilegales lo que conviene a la sociedad y a los
consumidores no es la competencia sino el monopolio. La presencia y la
permanencia en esos mercados se consigue a tiros. Lo que puede esperarse
de una mayor competencia en ellos no son mejores precios sino mayor
violencia.
La guerra de las bandas domina los años noventa, pero da un salto cuántico al
empezar el nuevo siglo cuando la presión de la guerra intestina lleva al Cártel
del Golfo a hacerse de un brazo armado sin precedentes, formado por militares
venidos de cuerpos especiales del Ejército. Este hecho singular da carta de
ciudadanía al grupo de sicarios que cambia para siempre la lógica y la
intensidad de la violencia del narcotráfico en México. Ese grupo de sicarios son
Los Zetas.
Volveré con detalle al momento de la creación de Los Zetas, pero la explicación
de su impacto requiere un contexto.
Al empezar el siglo XXI diversos hechos convergen para debilitar al Estado y
potenciar la guerra de las bandas.
El año 2000 es el de la primera alternancia pacífica en el poder que registra la
historia de México. Termina ahí la hegemonía del PRI y aparece la realidad
institucional que esa hegemonía encubre, a saber: la de un gobierno débil si no
cuenta con las facultades extralegales que lo hacían fuerte en los hechos.
Buena parte de su eficacia era su arbitrariedad. La pluralidad del Congreso,
donde el nuevo gobierno federal es minoría desde 1997, y la permanencia en la
mayor parte de los gobiernos locales con gobernadores de origen priista,
agudiza la debilidad federal y da lugar a formas extrañas de autonomía política
en los estados. La naciente democracia mexicana ve propagarse una forma de
federalismo en la que los estados son menores de edad en dos cuestiones
centrales del gobierno: cobrar impuestos y aplicar la ley. Cuando se trata de
contener a las bandas del narcotráfico en su expansión territorial, los gobiernos
locales —sus policías, sus aparatos de seguridad y de procuración de justicia—
son fáciles presas del terror y del dinero.
Sobre esta debilidad institucional crece la tormenta perfecta de la guerra contra
el crimen, alimentada por los siguientes hechos:
1. 1995. Estados Unidos adopta una política de sellamiento de su frontera sur.
Se propone cerrar el paso de dos de las cosas que más compra de México:
droga y mano de obra, ambas prohibidas. Entre 2001 y 2008 Estados Unidos
duplica el número de agentes de la Patrulla Fronteriza. El cruce de la frontera
se vuelve más duro y más caro. Se duplica también el número de migrantes
que mueren queriendo cruzar por lugares cada vez más peligrosos: 263 en
1998, 463 en 2012. La política de sellamiento incluye la deportación. Durante el
último gobierno de George Bush el número de mexicanos deportados crece
hasta los 400 mil por año. Como parte de esa ola, entre 2002 y 2008 aumentan
35% las deportaciones de presos mexicanos que purgan condenas en cárceles
estadunidenses. Un número creciente de ex convictos sin oficio ni beneficio es
soltado en las ciudades fronterizas mexicanas, bullentes de ofertas criminales.
100 ex convictos son soltados cada año en las calles de Ciudad Juárez.
2. 2004. Estados Unidos levanta el embargo de armas de asalto que pende
sobre su industria riflera. A partir de ese año pueden comprarse rifles de alto
poder muy baratos en las ocho mil armerías de la frontera. El poder de fuego
de las bandas del narcotráfico crece exponencialmente con esta medida.
Miembros de la Patrulla Fronteriza y del Ejército mexicano son sorprendidos en
más de una ocasión por la inesperada superioridad del armamento de las
bandas criminales.
3. 2006. El gobierno colombiano aumenta sus decomisos de cocaína en 65%.
Como consecuencia de la escasez, durante los siguientes dos años se duplica
el precio de esta droga, la más rentable del mercado, que se vuelve a la vez
más atractivo, más complicado y más violento que nunca para los
competidores.
4. 2008. México establece que los vuelos privados que entran a su territorio
desde el sur deben tener un primer punto de contacto fronterizo en Cozumel o
Tapachula. La medida interrumpe el canal de transporte que hizo la grandeza
del Cártel de Juárez, cuyo jefe, Amado Carrillo Fuentes, era llamado El Señor de
los Cielos porque en su flotilla de aviones con cocaína proveniente de
Sudamérica no se ponía el sol. Bajo las nuevas restricciones del flujo aéreo el
paso de la droga por tierra se vuelve asunto de vida o muerte para las bandas
mexicanas. Se crea una nueva realidad territorial: para tener control del tráfico
hay que controlar las rutas y las ciudades por donde cruza la droga. Las
bandas son obligadas a desplegarse físicamente por toda la República.
Empieza la gran batalla no por los cargamentos sino por los territorios. El
narcotráfico mexicano sigue siendo un negocio de venta de estupefacientes,
pero se vuelve también un negocio de dominio territorial. La lucha por el
dominio territorial reproduce las rivalidades de las bandas, a las que además
persigue el Estado, con Ejército, Marina y Policía Federal. El narcotráfico se
vuelve en estos años una guerra de múltiples frentes. En prácticamente todo el
territorio nacional hay disputas armadas de las bandas entre sí y de ellas contra
los cuerpos del Estado por el control del territorio.6
Se consolida así una lógica de guerra universal entre bandas bien armadas,
que luchan a muerte por el dominio territorial de plazas y rutas hacia los pasos
fronterizos de mayor rendimiento: Tijuana, Ciudad Juárez, Nuevo Laredo,
Matamoros, Reynosa. El Cártel del Golfo y Los Zetas luchan por el control de
Tamaulipas contra el Cártel de Sinaloa de El Chapo Guzmán y El
Mayo Zambada. El Cártel de Sinaloa pelea por Ciudad Juárez contra el Cártel
de Juárez de Amado Carrillo Fuentes, y mantiene su guerra contra el Cártel de
Tijuana de los Arellano Félix. Ambiciones y traiciones rompen el Cártel de
Sinaloa y desatan otra guerra intestina, ésta contra sus antiguos aliados, los
hermanos Beltrán Leyva. Para el año 2010 el Cártel de Sinaloa mantiene
cuatro guerras simultáneas: contra Los Zetas y el Cártel del Golfo, contra el
Cártel de Juárez, contra el Cártel de Tijuana y contra su propia escisión.
Las guerras del Cártel de Sinaloa son las más mortíferas, explican 67% de las
ejecuciones de aquellos años: más de 40 mil muertes.7 Pero el grupo criminal
que cambia el eje de las cosas y hace la diferencia para la sociedad mexicana
es el de Los Zetas.
Conviene detenerse en la gestación de Los Zetas porque introducen en las
guerras del narco una forma de control territorial inexistente hasta entonces. De
su modus operandi derivará un método de captura criminal de los gobiernos
locales y, como consecuencia de ésta, una captura de la sociedad local,
mediante diversas formas de amedrentamiento, control social, despojo,
secuestro y un sistema de pago de cuotas y derechos que envidiaría el sistema
impositivo de cualquier Estado. Éste es el eslabón último del crimen, el lugar
donde habría que dejar de llamarlo crimen pues empieza a ser otra cosa: no el
Estado paralelo de que nos hablan las historias de la mafia siciliana, sino una
especie de propietario sustituto del Estado, en particular de sus formas
municipales. Los Zetas son la organización criminal que inicia este camino de
captura de los gobiernos locales ya no por la complicidad interesada,
aquiescente o temerosa de éstos, sino por su poder de coacción directa sobre
el espacio público y sus instituciones. El lugar de la República donde llegó a
sus últimas consecuencias este proceso fue Michoacán y, según muestran los
acontecimientos recientes, su vecino estado de Guerrero.
Los Zetas nacen como una guardia personal del jefe del Cártel del Golfo, Osiel
Cárdenas Guillén, un pequeño contrabandista de cocaína, dueño de un taller
mecánico, que fue escalando el mando del cártel conforme sus cabecillas eran
presos o asesinados, alguno de ellos por el propio Osiel. Para no negar el
dicho de que hampa y crimen son caras de la misma moneda, se dice que
quien hace entrar en el negocio del narcotráfico al Cártel del Golfo, hasta
entonces sólo una máquina de contrabando tradicional, es el comandante José
González Calderoni, personaje inverosímil de las guerras mexicanas del narco.
Entre los hechos de su leyenda se cuenta el haber detenido al capo Miguel
Ángel Félix Gallardo, hasta ese momento, 1989, su cómplice y amigo. Se dice
que González Calderoni mantenía con su dinero una nómina paralela de
policías en la Procuraduría General de la República, donde fungía como un
comandante más. Se dice que estuvo presente en la reunión convocada en
Acapulco por el propio Félix Gallardo, ya preso, para definir los territorios que
heredarían sus bandas filiales. En esa reunión González Calderoni habría
reservado para sí, y para otro comandante, Carlos Aguilar Zárate, veterano de
la Operación Cóndor de los años setenta, el territorio tamaulipeco, con su
generosa red de pequeñas y grandes ciudades fronterizas: Nuevo Laredo,
Reynosa, Matamoros, Ciudad Alemán.
Las bandas filiales de Félix Gallardo saldrían de aquella reunión a no respetar
lo acordado y a pelear entre sí con celo fratricida. González Calderoni habría
seguido con su proyecto de Tamaulipas para lo cual habría detenido el mismo
año de 1989 al viejo capo del Cártel del Golfo, Juan Nepomuceno Guerra, y
apadrinado el ascenso de un sobrino de éste, Juan García Ábrego, hermano de
Mario, amigo de la infancia de González Calderoni en Reynosa. Juan García es
detenido el 14 de enero de 1996 y deportado a Estados Unidos, en lo que
muchos señalan como el fin de la protección política que el Cártel del Golfo
recibió del gobierno federal durante el gobierno de Salinas de Gortari, el mismo
de la preponderancia de González Calderoni.8 El hermano del preso Juan
García Ábrego, Humberto, es el único de la familia que puede heredar el
mando pero Humberto cae preso, acusado de lavado de dinero, y cuando sale
libre en 1997 decide retirarse con sus ganancias. No vuelve a saberse de él.
No hay más familia disponible para tomar el mando en el Cártel del Golfo. Será
desde entonces el único cártel que no es un negocio fundado en redes
familiares
Desde la prisión García Abrego entrega el mando a su lugarteniente Oscar
Malherbe, pero Malherbe es arrestado en la ciudad de México en febrero de
1997. Su detención deja tres aspirantes menores a la jefatura criminal:
Baldomero Medina, que lleva y trae droga en tractocamiones de su propiedad y
le llaman por eso El rey de los tráileres; Salvador Gómez,El Chava, un temido y
temible pistolero que se dedica al robo de autos en gran escala, y Osiel
Cárdenas Guillén, un pequeño contrabandista de cocaína, crecido a la sombra
de los comandantes de la policía que comparten el negocio del tráfico en la
ciudad fronteriza de Miguel Alemán, del brazo de un capo local, Gilberto García
Mena, El June. Nadie sabe cómo se conocen El Chava y Osiel, pero sí que se
caen bien y se unen, bajo el mando tácito de El Chava, para hacerse de la
jefatura del cártel. El Chava ordena el asesinato de El rey de los tráileres, quien
no muere en el ataque pero queda paralítico y se retira de la competencia a un
tranquilo segundo plano de negocios en Tampico. Chava dispone también la
ejecución de un policía de la judicial federal, Antonio Dávila, El Comandante
Toño, que pretende quedarse con el negocio. Chava y Osiel matan
al Comandante Toño en un enfrentamiento donde muere uno de los sicarios
de Chava. La investigación del asesinato es suspendida mediante un soborno
de 40 mil dólares pagados al procurador de Tamaulipas, Guadalupe Herrera,
nada menos que por su hermano Ariel Herrera, apodadoEl Tigre, sicario de El
Chava.9
Chava y Osiel se quedan con el campo en pie de igualdad,
aunque Chava procede como pareja dominante. Somete a sangre y fuego a los
grupos criminales sueltos del estado, controla la prensa, intimida y compra.
Osiel establece el canal de paso de la cocaína que viene de Colombia, cruza
Centroamérica, entra por Chiapas, sube por Veracruz, llega a la frontera y pasa
al otro lado. En el año 2009 un kilo de coca pura vale dos mil 147 dólares al
salir de Colombia. Al llegar a una ciudad fronteriza estadunidense vale 34 mil
700 y 120 mil en las calles de Nueva York.10
Osiel y Chava son buena mancuerna. “Medio Tamaulipas es de Osiel y la otra
parte delChava Gómez”, dice Ricardo Ravelo, autor de un muy legible retrato de
Osiel Cárdenas. Juntos, Chava y Osiel dominan Tamaulipas por dos años,
1996-97, sin que nadie lo sepa. Juntos caen presos por azar en 1998 sin que
nadie comprenda lo que ya son. Juntos se escapan de una casa de arraigo de
la SIEDO en la ciudad de México y regresan al dominio invisible de su feudo.
Pero el celo ha tomado ya su lugar entre ellos. Chava actúa como jefe y pide
constantes sumas de dinero a Osiel, como a un subordinado. “Oye compadre,
necesito que me mandes 50 mil dólares por favor”, dice Chava por el teléfono.
“Está bien, compadre. Te los mando este mismo día”, responde Osiel. Pero al
colgar dice a su séquito. “Mi compadre ya me tiene hasta la madre. Me exige
como si él no pudiera generar ingresos”.11 Chava pide a Osiel que le entregue el
control de Reynosa. Osiel se resiste, no está dispuesto a trabajar como
empleado de Chava. Empieza a creer que su resistencia hará que Chava lo
traicione. Pensar que lo traicionan es una especialidad de la cabeza de Osiel.
Confiesa su temor a un agente federal, ex soldado, a quien tiene en su nómina
en la ciudad fronteriza de Miguel Alemán. El agente federal se llama Arturo
Guzmán Decena, un teniente del Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales
(GAFE), cuerpo de elite del Ejército destacado con funciones policiales en la
frontera de Tamaulipas. Guzmán Decena propone a Osiel crearle una guardia
pretoriana formada por militares que lo protejan de Chava y de todos. Osiel
acepta y da el siguiente paso en su cabeza: debe matar a Chava Gómez.
Osiel Cárdenas se somete a una cirugía plástica en Jalisco para ponerse pelo y
hacerse la barba partida, razón por la cual no acude al bautizo de su hija en
Tuxpan, Veracruz. Deja los preparativos en manos del propio Chava Gómez,
padrino de bautismo de la criatura. Repuesto de la operación, Osiel se cita
con Chava en el puerto de Mezquital, un punto del sistema lagunario de
Tamaulipas al que llevan droga en lancha desde las costas de Veracruz. Osiel
recoge a Chava Gómez en el muelle de Mezquital y lo sienta en el lugar del
copiloto de la camioneta que él maneja. En el asiento de atrás viaja Guzmán
Decena. Todos son bromas y risas en el trayecto hasta que Guzmán Decena
saca una pistola y le dispara a Chava en la cabeza. Los gatilleros de Chava que
vienen atrás son asesinados. El cuerpo de Chava es tirado en un zacatal con
una pistola en la mano para sugerir que fue muerto en un tiroteo. Nadie
encuentra el cuerpo sino tres días después, cuando un lugarteniente de Osiel
llama a un periódico diciendo dónde está. El rumor de la verdadera historia de
la muerte de Chava Gómez le gana a Osiel el apodo de El Mata Amigos.12
No es el primer amigo que ha hecho matar Osiel Cárdenas. Años atrás, se ha
enamorado de Hilda Flores González, la Güera, esposa de su socio Rolando
Gómez Garza, El Roluys, a quien conoce en la cárcel en 1994 y de quien se
dice amigo entrañable. Rolando descubre un día la relación de su mujer con
Osiel. Osiel se entera y se adelanta a lo que supone que será la venganza de
Rolando: ordena a sus sicarios que lo maten y le envíen la foto del cadáver:
quiere cerciorarse de que ha muerto.
La ejecución de Rolando Gómez, El Roluys, es una exhibición del nuevo estilo
de los sicarios del Golfo, el estilo Zeta. Rolando Gómez es sorprendido en su
casa con toda su banda. Para evitarse tiroteos, Guzmán Decena y su gente
vuelan los tanques de gas de la casa con todos los que están adentro. Mandan
luego la foto del cadáver de Rolando a Osiel. Cuando la imagen entra al fax de
su casa de Tomatlán, en la costa de Jalisco, Osiel dice a Paquito, su amigo y
valet: “Ahora sí, Paquito, la Güera es sólo mía”. El recuerdo de su amigo
Rolando perseguirá las noches alcohólicas de Osiel. A la vista de la foto del
cadáver de su amigo suele quejarse y burlarse: “¡Ay, pinche compadrito
puto!”.13
Me detengo en estos detalles de la conducta criminal porque sus raptos y
desmesuras me parecen inherentes a la naturaleza del fenómeno. Sin
asomarse aunque sea un momento al interior violento y caprichoso de los jefes
criminales, es imposible entender la lógica a menudo atrabiliaria del narco, sus
cadenas causales impredecibles y la profundidad de las consecuencias que
pueden derivarse de un arranque de cólera o de la hipótesis de una traición.
Osiel Cárdenas Guillén es un paranoico pero es también un estratega. Sueña
con un imperio criminal, y lo va construyendo. Asegura de sus pares
colombianos el abasto de cocaína, extiende su red de policías compradas a
todas las plazas por donde pasa su mercancía desde Centroamérica, forma
una red de abogados y una cadena de periodistas que callan y hablan lo que
les pide. Es clara su necesidad de una red de sicarios que le permita hacer
todo esto: expandirse y defenderse, pues la guerra de las bandas de principios
de siglo incluye la batalla contra el Cártel del Golfo.
Los Zetas se expanden con el imperio criminal de Osiel bajo la guía de
Guzmán Decena. En julio de 1998, cuando Osiel confiesa sus temores a
Guzmán Decena y acepta que le forme un círculo de protección, el militar
deserta de su puesto y procede a crear la guardia del capo. Contrata a
miembros del GAFE y de otros cuerpos del Ejército: el 7º Batallón de Infantería,
el 15 Regimiento de Caballería Motorizada. Los bautiza como Zetas y a sí
mismo como Z-1, en recuerdo, se dice, de que los primeros que acudieron a su
llamado estaban adscritos a la base Zeta de la ciudad de Miguel Alemán, cuna
criminal de Osiel Cárdenas y lugar de encuentro de éste con Guzmán Decena,
el Z-1.
Los primeros Zetas no son más de 60 miembros, pero su perfil es letal. Decir
que vienen del GAFE, recuerda Guillermo Valdés, es decir que “han sido
entrenados por militares de fuerzas especiales estadunidenses e israelíes”.
Saben sobrevivir “en las circunstancias más adversas”, han aprendido
“métodos de inteligencia, contrainteligencia y contrainsurgencia”, son expertos
“en telecomunicaciones, en operativos de ataque y rescate, en tácticas de
interrogatorio, y en fabricación y uso de explosivos”.14
Son parte de un cuerpo de elite que el gobierno ha puesto en contacto con las
plazas dominadas por narcos a falta de policías capaces de lidiar con el
problema. A juzgar por el tono de las invitaciones a desertar que les hace
Guzmán Decena, son cuerpos mal pagados y mal tratados por el Ejército. Las
mantas dejadas por los primeros Zetas para atraer a sus pares dicen: “El grupo
operativo Los Zetas te necesita, soldado o ex soldado”. “Te ofrecemos un buen
salario, comida y atención para tu familia: Ya no sufras hambre ni abusos
nunca más”. “Únete al Cártel del Golfo. Te ofrecemos beneficios, seguro de
vida, casa para tu familia. Ya no vivas en tugurios ni uses los peseros. Tú
escoges el coche o la camioneta que quieras”. El reclutamiento Zeta se
extiende pronto a Guatemala y a su temible cuerpo de Kaibiles.15
Como he dicho antes, de todas las redes del narcotráfico, la del Cártel del
Golfo es la única que no está cruzada por lazos familiares. Es una red sin una
lógica de complicidad o confianza por razones de parentesco. Los Zetas
agregan a esta impersonalidad familiar la impersonalidad del orden y la
disciplina militar. Son la primera organización paramilitar del narco mexicano,
quizá del narco en general. Escribe Ioan Grillo:
Los Zetas basan inicialmente su cadena de mando en el Ejército mexicano del
que procedían. Había jefes y subjefes, como en el Ejército… Tienen campos de
entrenamiento, con campos de tiro y terrenos para simular ataques (donde) se
han encontrado arsenales de armas pesadas, incluso cajas de bombas de
mano. Los cursillos duran dos meses, y en ellos se enseña a utilizar
lanzagranadas y ametralladoras de 0.5.16
Al empezar el siglo, en el año 2000, la nómina de sicarios y sobornos del
imperio de Osiel Cárdenas, lo que él llama “mi empresa”, alcanza los dos
millones y medio de dólares.17 Se dice que los altos costos de mantenimiento
de Los Zetas llevan a Osiel Cárdenas a autorizarles que se busquen sus
propios ingresos. El negocio grande de la droga será del cártel, pero Los Zetas
podrán conseguirse sus propias rentas en los lugares donde operan. Es una
decisión de largas consecuencias en la evolución criminal de Los Zetas. A
partir de entonces pueden y deben conseguir sus propios ingresos. Su primer
paso es someter y extorsionar los circuitos ilegales de las ciudades donde
cuidan el paso de la droga: robo, prostitución, juego, piratería. Luego vendrán
la venta de protección, el tráfico de personas, el despojo y el secuestro.
En la primera década del siglo Los Zetas dejan de ser una banda, empiezan a
volverse una federación. Tienen un jefe en cada plaza y una formación de
unidades militares llamadas “estacas”, a la vez escoltas del jefe y células
primeras de acción y vigilancia en el lugar. No sólo pelean por el control de las
rutas del narcotráfico, también buscan el control de los territorios. Empiezan por
ganar a las autoridades locales, en particular a los policías, sometiéndolas a la
disyuntiva de colaboración o ejecución. Someten luego a las bandas del crimen
local mediante el mismo dilema de plata o plomo. Establecen finalmente
derechos de piso y el cobro de cuotas para autoridades políticas y negocios
legales. Pronto sus ingresos por narcotráfico, origen del despliegue territorial,
no son su principal fuente de dinero. Su principal negocio ahora es la exacción
de la comunidad y de la economía local.
Los Zetas son la punta de lanza de la expansión del Cártel del Golfo hacia
Michoacán en el año 2001. La expansión es consecuencia de una idea
estratégica de Osiel Cárdenas: quiere abrir una ruta de tráfico que una el
Pacífico y el Golfo para tres negocios. Primero, la marihuana y la amapola que
se cultivan en las barrancas michoacanas. Segundo, las anfetaminas que son
la mercancía de moda y han hecho la fortuna de un cártel local, asociado a los
Arellano Félix. Tercero, el control de puerto industrial Lázaro Cárdenas, el
mayor del Pacífico, por el que pueden llegar todas las cosas necesarias para el
tráfico, empezando por la cocaína sudamericana, terminando por la
seudoefedrina, precursor químico de las drogas de diseño cuyo comercio está
prohibido en Estados Unidos pero permitido en México. Osiel quiere ir de
Michoacán a Tamaulipas para evitar el paso por las ciudades del noroeste y el
norte, rumbo a Tijuana y Ciudad Juárez, que no controla. Quiere dirigir el flujo
hacia las ciudades fronterizas tamaulipecas, que en principio son suyas.
Al empezar el siglo el cártel que domina el negocio de drogas prohibidas en
Michoacán es el llamado Cártel del Milenio, una suma de dos redes locales, la
de la familia Valencia, que opera en Michoacán en alianza con el Cártel de
Tijuana, de los Arellano Félix, y la banda de los Amezcua, que ha construido
discretamente un pequeño emporio de producción de metanfetaminas en el
estado vecino de Colima. Osiel se une en Michoacán a una pequeña banda
llamada La Empresa, que ha roto con el Cártel del Milenio, y se ofrece como
aliado en el territorio. El jefe de La Empresa es Carlos Rosales, apodado El
Tísico, un guerrerense que al parecer fue un tiempo guardia comunitario, cuyos
lugartenientes son Nazario Moreno, El Chayo, un migrante entrenado en el
tráfico y la religión durante su estadía en Estados Unidos, y José de Jesús
Méndez, El Chango, un traficante de marihuana de Michoacán hacia Reynosa.18
El Tísico ha tenido un problema personal con Armando Valencia, uno de los
jefes del Cártel del Milenio. Su esposa Inés Hernández Oseguera, con quien El
Tísico ha tenido un hijo, se ha puesto a vivir con Valencia, a quien le ha dado
otro hijo. El Tísico ha roto entonces con el Cártel del Milenio y ha creado La
Empresa y ofrecido a Osiel Cárdenas y al Cártel del Golfo una base de entrada
a Michoacán.19
Los Zetas entran a Michoacán de la mano de La Empresa, pero se toman
pronto todo el cuerpo. Establecen su base en Apatzingán, corazón de la Tierrra
Caliente, y se despliegan sobre la zona. Es un despliegue particularmente
violento que desplaza al Cártel del Milenio, con 100 ejecutados en 18 meses y
el control sobre la región, la ruta y el puerto Lázaro Cárdenas ambicionado por
Osiel Cárdenas. Las extorsiones crecen como plaga sobre productores de
aguacate y limón, muy prósperos en la Tierra Caliente, pero también sobre
otros negocios, grandes y pequeños que engrosan “las filas de contribuyentes
forzados del impuesto zeta”.20
En 2002 matan a Guzmán Decena, con relativa facilidad para tratarse de quien
se trata: mientras come en un restorán de mariscos. Pero Los Zetas siguen,
ahora bajo el liderato, más impersonal y temible aún, de Heriberto Lazcano, El
Lazca, cuya fama sanguinaria no hace sino crecer.
En 2003 cae preso Osiel Cárdenas en una historia digna a la vez de la tragedia
clásica y de una mala novela moderna: una gitana le lee la mano y le dice que
alguien cercano habla mal de él. El único cercano que hay en el entorno de
Osiel, que vive en eterna fuga, es su valet y amigo Paquito, de quien empieza a
sospechar. Cuando Paquito descubre que Osiel sospecha de él, sabe que
irremisiblemente lo matará. Se entrega a las autoridades como testigo
protegido y les da las claves para detener a Osiel, entre ellas su hábito de
hablar todos los días con su familia en Matamoros y los números de los 30
teléfonos celulares que el propio Paquito ha organizado para que su jefe y
amigo hable por uno distinto cada día y sea inmune a las intervencions
telefónicas.21
Al momento de la detención de Osiel Cárdenas, Los Zetas son ya 300. No sólo
militares de elite, también sicarios selectos de otras procedencias, pero todos
con la disciplina del origen. Máquinas disciplinadas de matar. La prueba de que
hay ese nuevo actor mortífero en las guerras del narco llega para los enemigos
del Cártel del Golfo en el año de 2004, cuando el Cártel de Sinaloa, luego de
un reagrupamiento y algún pacto con el Cártel de Juárez, decide tomar la plaza
de Nuevo Laredo para dar inicio a la conquista de Tamaulipas. El jefe del brazo
armado del cártel sinaloense, Arturo Beltrán Leyva, recluta pandilleros de la
frontera y miembros de los temidos maras salvatruchas para asaltar Nuevo
Laredo. En enero de 2004 hay más de 100 asesinatos en la ciudad fronteriza.
Más de 600 en todo el estado de Tamaulipas ese año. Casi todos del lado de
los invasores.
Los Zetas explican a sus rivales la razón de los muchos cadáveres que
aparecen tirados en las calles de Nuevo Laredo. Dejan una manta que dice:
“Chapo Guzmán y Arturo Beltrán Leyva. Manden más pendejos como estos
para seguirlos matando”.22 La masacre de Nuevo Laredo deja claro que los
temibles sicarios de las guerras previas nada tienen que hacer en la era de Los
Zetas. Se trata, dice Guillermo Valdés, de “un verdadero punto de inflexión en
la historia de la delincuencia organizada en México: el de organizaciones
criminales apoyadas en verdaderas maquinarias para matar”.23
La epidemia criminal de Nuevo Laredo produce el primer operativo de
ocupacion militar y policiaca de una ciudad: la operación México Seguro, del
año 2005, último de la presidencia de Vicente Fox. Será el modelo de
intervenciones posteriores, en particular la de Michoacán, de 2007.
En octubre de 2004, en otro escenario, aunque en una vía parelela del conflicto
que estallará años más tarde, es detenido Carlos Rosales, El Tísico, jefe de La
Empresa michoacana. Sus herederos, Nazario Moreno, El Chayo, y José de
Jesús Méndez, El Chango, descubren al subir en la escala que la cuenta de sus
negocios con Los Zetas les son desfavorables. El grueso de las rentas
criminales va para Tamaulipas o se queda en Los Zetas. En particular parece
haber una disputa por las rentas del puerto Lázaro Cárdenas, la verdadera
gallina de los huevos de oro de la ocupación de Michoacán.24 Al liderato de El
Chayo Moreno y el Chango Méndez, se ha incorporado en esos años Servando
Gómez, La Tuta, profesor normalista cercano a las células del llamado Ejército
Popular Revolucionario, un linaje resistente de la guerrilla de los setenta que
sobrevive en la montaña de Guerrero y en la Tierra Caliente michoacana.
El Chayo, El Chango y La Tuta diseñan su separación de Los Zetas con singular
astucia. A mediados de 2006 formalizan el nacimiento de una nueva
organización llamada La Familia Michoacana, cuyo objetivo es expulsar a Los
Zetas de la Tierra Caliente. La oferta criminal de La Familia Michoacana es
increíble en sus términos y sorprendente en su efectividad: una mezcla de
redentorismo social, patriotismo michoacano, exaltación religiosa, autoridad
sustituta y terror criminal. La resume Eduardo Guerrero:
Servando Gómez La Tuta consideraba que un elemento clave para el éxito de
La Familia Michoacana era construir una relación armónica con las
comunidades basada en la cooperación y en una lógica de beneficios mutuos,
sin terror ni amenazas. Nazario Moreno fue especialmente receptivo a las ideas
de La Tuta, a las que les imprimió un carácter evangélico de salvación personal.
Justificaron sus acciones bajo la idea de que obedecían a una moral superior.
Mediante un discurso que combinaba elementos de reivindicación social,
evangelismo y exaltación de la identidad regional, esta nueva organización se
presentó en las comunidades de Tierra Caliente como aquella que los liberaría
de la opresión de Los Zetas. El elemento clave que permitió a La Familia
Michoacana contar con una base social fue su capacidad para distribuir bienes
y servicios. Para lograrlo el cártel puso en práctica una estrategia novedosa,
pues además de construir una amplia red de vínculos con la policía municipal,
extendió su presencia en las áreas de desarrollo social y obra pública de los
ayuntamientos. De esta forma, las comunidades veían recompensada su
colaboración mediante la construcción de un hospital, la pavimentación de una
calle o el acceso a agua potable y a La Familia le permitió presentarse como
una “autoridad” más eficaz para responder a las demandas sociales que el
mismo gobierno.25
En su primera aparición pública, el 6 de septiembre de 2006, La Familia
Michoacana arroja seis cabezas cortadas en una pista de baile de Uruapan. Su
mensaje adjunto dice: “La Familia no mata por dinero, no mata mujeres, no
mata inocentes, muere quien debe morir, sépalo toda la gente. Esto es Justicia
Divina”. Días después explican que su organizaciòn está formada por
trabajadores de Tierra Caliente y que su objetivo es terminar con la opresión
criminal.
En los siguientes meses la feria de ejecuciones de la guerra de La Familia
Michoacana y Los Zetas sacude al estado. Éste es el litigio de sangre que
decide la intervención del presidente Felipe Calderón en Michoacán, en los
primeros días del año de 2007, el primer paso de lo que será un proceso
sostenido de intervenciones militares y policiacas en gran escala para contener
el crimen organizado durante todo el gobierno de Calderón (2006-2012) y hasta
ahora.
La intervención militar en Michoacán tiene el efecto buscado de contener la
espiral de homicidios pero el efecto no buscado de golpear más a Los Zetas
que a La Familia Michoacana, dejando a ésta quedarse con el campo y
garantizar, con su propio ejercicio de captura del territorio, cierta estabilización
de la violencia, incluso cierto clima de tranquilidad pública, en el contexto de un
más amplio dominio criminal.26
Durante los siguientes años, hasta la rebelión de las llamadas autodefensas de
la Tierra Caliente en el año 2013, la Familia ejercerá sobre Michoacán el
modelo Zeta de control y expoliación territorial, pero con una dimensión
completamente nueva en la guerra del narco, la del control político y la
solidaridad social del territorio. En 2009 algunos miembros de la organización
dicen ser nueve mil hombres armados, todos con adoctrinamiento religioso en
la funambulesca religión inventada por Nazario Moreno y resumida en su
libroPensamientos. Muchos de cuyos pasajes, dice Ioan Grillo, que lo ha tenido
en sus manos, “tienen ese estilo de autoayuda evangélica que puede oírse en
sermones que se pronuncian desde Mississippi hasta Río de Janeiro”. Por
ejemplo:
Le pedí a Dios fuerza, y me dio dificultades para hacerme fuerte. Pedí
sabiduría, y me dio problemas para resolver. Pedí prosperidad, y me dio
cerebro y músculo para trabajar.27
A plata y plomo, dice Eduardo Guerrero, la Familia se hace de lealtades en
todos los ayuntamientos. Si el funcionario no accede a colaborar a cambio de
una cuota o se descubre que trabaja para Los Zetas o el Cártel del Milenio, es
eliminado. Sólo en 2006 son “ejecutados en Tierra Caliente un total de cinco
directores y un subdirector de seguridad pública municipal, un comandante y
siete policías municipales, presumiblemente por no alinearse con La Familia
Michoacana”. El control llega a ser tan efectivo que Servando Gómez, La Tuta,
puede hacer una asamblea de presidentes municipales para no tener que
hablar uno por uno con ellos. Les dice que todos deben pagar “diezmo”, es
decir, un porcentaje fijo de la nómina municipal y otro tanto del destinado a
obras públicas.28
Rafael García, presidente municipal de Coalcomán, describe la captura de esos
años:
Cuando yo ingresé a la administración, el primer mes de enero, tuvimos una
reunión en Las Bateas, en Apatzingán. Ahí se nos dijo que finalmente les
teníamos que dar el diezmo de lo que era del ramo de obras, y aparte de lo que
se consiguiera, ya fuera obra convenida u obra federal. No había necesidad de
que nos dijeran los vamos a matar, vamos a secuestrarlos, era por demás.
Mientras estuviéramos pagando no había amenaza, todos felices y contentos.
La policía municipal nos la tenían sometida, yo no mandaba. A mí me
mandaban a través de los comandantes de la policía municipal. Es una gran
presión sobre todo de la población, con la gente que tú te comprometiste de
que vas a hacer obra y programas sociales y no poder hacerlo. Es que tú estás
metido, estás coludido pero ¿yo qué hago? El que se atrevió a ponerles el dedo
ya no está aquí.29
El dominio sobre la economía local y sus rentas es efectivo también. A
semejanza de lo que hace con los alcaldes, La Tuta puede convocar a una
asamblea de productores de aguacate, limón o ganado para fijarles las cuotas
que van a pagar por sus huertos y ranchos. Más tarde tendrán el control directo
de los huertos y dirán cuánto y cuándo puede cosechar cada quien.
La Familia Michoacana y luego Los Caballeros Templarios, alcanzan también
un grado de solidaridad social y de respaldo a sus métodos sin antecedentes
en otras organizaciones criminales, entre otras cosas garantizando la
seguridad, ejerciendo funciones de policía y protección contra otras bandas, en
particular Los Zetas. Es el momento culminante de lo que se ha llamado la pax
narca: ser los criminales más eficaces y confiables que la autoridad en materia
de seguridad pública.
Fátima Monterrosa, reportera del programa noticioso Punto de partida, tuvo una
experiencia directa de este fenómeno una noche de agosto de 2013, en
Tumbiscatío.
En la madrugada tocaron a su puerta y era Servando Gómez, La Tuta, líder de
Los Templarios. Le dijo que quería hablar, darle una entrevista. A la mañana
siguiente, a plena luz del día y con la gente reunida, se presentó La Tuta en la
plaza central de Tumbiscatío. Quería que lo grabáramos, que fuéramos testigos
de cómo lo recibía la gente. Una niña se apresuró a besarle la mano, lo llamó
padrino. La Tuta, con una pistola al cinto con incrustaciones de metales y
piedras, saludaba y ordenaba. Las mujeres competían por ganar su atención,
pedían dinero, favores, lo halagaban. La presencia de la cámara no las
disuadió.30
En el entorno de la pax narca las fuerzas federales que actuaban en Michoacán
terminaron siendo vistas como “fuerzas de ocupación”, en parte, dice Denise
Maerker, porque el enfoque general de la intervención policiaca y militar se
planteó en términos tajantes de buenos y malos, de federación contra estado,
de delincuentes y sospechosos locales contra incontaminados miembros de las
fuerzas federales.31 Sigue Denise Maerker:
Plantearse el problema del crimen organizado y de su arraigo en Tierra
Caliente como un asunto de buenos contra malos fue uno de los errores del
gobierno de Felipe Calderón. Vistos desde afuera, sin un conocimiento de la
zona y de su historia, todos los habitantes de la región podían entrar en la
definición de malos.
De la Tierra Caliente michoacana ha escrito el historiador Luis Gonzalez y
González que es un “infierno fértil” donde la gente sabe “matar y morir sin
aspaviento”. Es una de las zonas frágiles, indomesticables de México, refugio
histórico de guerrillas y delincuentes desde la Independencia.32
No obstante su identificación con el entorno, en muchos sentidos su condición
de pez en el agua, La Familia Michoacana y luego Los Caballeros Templarios,
son ante todo una organización criminal. Su estructura organizativa, como se
ha dicho, procede de Los Zetas,33 pero ellos añaden a la brutalidad Zeta su
propia dimensión feroz. Más que elocuente al respecto es el testimonio de un
instructor de reclutas de La Familia llamado Miguel Ortiz, El Tyson, detenido en
2010. El Tyson cuenta a sus interrogadores que una noche, en un monte
próximo a la ciudad de Morelia, le reunieron a 40 reclutas de La Familia para
que los entrenara como sicarios. Junto con los reclutas le llevaron unos
prisioneros zetas. “Los pusimos a que los mataran, los degollaran, los
destazaran”, dice El Tyson, para que fueran “perdiendo el miedo a cortar una
pierna, un brazo”.
Usamos un cuchillo de carnicero de unos treinta centímetros, un machetito…
No es fácil porque hay que cortar el hueso y todo, pero se busca que sufran
para que pierdan el miedo a ver sangre. [En descuartizar una víctima tardan]
aproximadamente diez minutos. Es mucho, puede durar mucho menos, pero
ahí se van poniendo a prueba los muchachos, para que no se pongan
nerviosos. Aproximadamente duran diez minutos. [Yo tardo] tres, cuatro
minutos”.
Uno de los interrogadores, citado por Grillo, añade un detalle de cotidianidad
siniestra. Los nuevos reclutas se mostraban “particularmente aptos para
despedazar cadáveres porque muchos miembros de la primera etapa eran
carniceros. Los reclutas posteriores trabajaban por lo general en taquerías”.34
La Familia Michoacana da el salto cualitativo que sigue al de Los Zetas en la
historia reciente del crimen organizado de México. Como Los Zetas, los
miembros de La Familia Michoacana son sicarios profesionales, disciplinados,
con una estructura paramilitar, y ejercen una captura territorial y expoliadora de
su entorno. Pero su captura va más allá de la extracción de rentas. Llega al
control político y social. Es la captura no sólo de las rentas, sino de la
autoridad, de los gobiernos locales y de la sociedad: la forma más penetrante y
compleja que haya alcanzado nunca el crimen organizado en el país. Este salto
cualitativo del dominio criminal se da en otros sitios de la República, es parte
de la lógica de la guerra contra las drogas. Pero en ningún trayecto es más
nítido como en el que va del Cártel del Golfo a Los Zetas a la Familia
Michoacana y a la sucesión de ésta, Los Caballeros Templarios.
El dominio de La Familia sobre Michoacán, siempre desafiado por Los Zetas,
no deja de producir episodios de violencia sorprendentes. El 15 de septiembre
de 2008 alguien hace explotar unas granadas entre la multitud que acude en
Morelia a la ceremonia popular del Grito de la Independencia. El hecho es
calificado como el primer “acto de narcoterrorismo” de la guerra mexicana
contra las drogas. Los Zetas y la Familia se culpan mutuamente del atentado.
Cualquiera de los dos pudo haberlo hecho siguiendo el mandato de la
costumbre, común a las bandas criminales, de “calentar” las plazas controladas
por los adversarios para echar sobre ellos el escándalo, y a continuación la
intervención urgida y redoblada del Estado.
Los saltos de violencia de Michoacán bajo el dominio de La Familia
Michoacana, y luego de Los Caballeros Templarios, siguen los patrones
comunes también a las epidemias de violencia de la guerra contra las drogas.
Se producen por captura o muerte de jefes de las bandas o por decomisos de
grandes cargamentos que las bandas atribuyen a golpes de sus rivales o a
delaciones internas, con la consecuente imposición de escarmientos
ejemplares: ejecuciones visibles con cuotas ascendentes de brutalidad y
sevicia. Los escarmientos incluyen con frecuencia a policías y soldados que las
bandas juzgan cómplices de sus rivales.
La captura del hijo de La Tuta, Luis Servando Gómez, El Pelón, el 28 de enero
de 2009, deja tras de sí una ristra de cadáveres que aparecen acompañados
de mensajes contra Los Zetas, sugiriendo que éstos han vuelto a
Michoacán.35 El 23 de marzo de ese mismo año el Ejército decomisa 8.5
toneladas de anfetaminas en Apatzingán, con valor de 187 millones de dólares.
El 19 de abril siguiente la Policía Federal detiene a 44 miembros de La Familia
Michoacana. En mayo y junio siguientes son detenidos 38 funcionarios
públicos, entre ellos 12 alcaldes de la Tierra Caliente, como sospechosos de
complicidad con la Familia. Finalmente, el 13 de julio es detenido un
lugarteniente veterano, Arnoldo Medina Rueda,El Minsa, quien trabajaba con La
Familia desde que se llamaba La Empresa. Como represalia a todos estos
golpes, Nazario Moreno, El Chayo, ordena la ejecución de 12 policías federales
el 13 de julio de 2009. El ejecutor de la emboscada es El Tyson, que gana con
eso su promoción a jefe de La Familia Michoacana en Morelia, la capital del
estado.36
El 10 de diciembre de 2010 la Policía Federal cerca a Nazario Moreno en
Apatzingán. Sigue un largo tiroteo después del cual Nazario Moreno,
“consciente de que las comunicaciones del cártel están intervenidas, ordena
que se difunda la noticia de que ha muerto”. El gobierno da por buena la
noticia, que parece tener consecuencias cuando el 24 de enero de 2011,
mediante desplegados, mantas y volantes, La Familia Michoacana anuncia su
disolución. Se disgrega, dice, “en respuesta a todas las atrocidades, abusos y
violaciones que ha venido haciendo la PF contra la sociedad civil de
Michoacán”. La disolución no es sino una estrategia para trasvasar las redes de
La Familia Michoacana a una nueva organización, Los Caballeros Templarios,
que se presenta en sociedad en marzo de 2011 declarando que continuará con
“las actividades altruistas que antes realizaba La Familia Michoacana”.37
Los Caballeros Templarios conservan y amplían el dominio sobre Michoacán
que tuvo La Familia. Lo hacen visible en las elecciones estatales de 2011 con
intimidación a actividades proselitistas, bloqueos carreteros para evitar acceso
a casillas y un caudal extra de 26 mil votos, totalmente fuera del patrón de
votación de la Tierra Caliente, que da el triunfo al candidato del PRI.
Epidemias de violencia en el norte del país, particularmente en Nuevo León,
por una nueva etapa de la guerra intestina de las bandas, ahora de Los Zetas
contra su organización madre, el Cártel del Golfo, distrae la atención federal de
Michoacán y permite la consolidación del dominio de Los Caballeros
Templarios en ese extraño clima de estabilización e incluso baja de la violencia
que suele darse cuando un grupo criminal tiene dominio cabal sobre un
territorio: la pax narca. La guerra contra el narco nos ha enseñado que falta de
violencia no quiere decir ausencia de dominio criminal. A veces quiere decir lo
contrario: dominio pleno.
La crisis que hace evidente la persistencia de ese dominio aparece en la Tierra
Caliente michoacana en 2013. Es lo que propiamente puede describirse como
un “levantamiento”, el de los llamados grupos de autodefensa.
Dos líderes del levantamiento, Hipólito Mora de La Ruana y José Mireles de
Tepalcatepec, emblematizan en sus razones los polos intolerables de la
opresión templaria. La gota que derrama el vaso de la paciencia de Hipólito
Mora es que le impiden a su hijo cortar limones en su huerto. La que agota la
paciencia de Mireles es la cadena de raptos, violaciones y embarazos de las
muchachitas de la secundaria de Tepalcatepec que él atestigua como médico.
Ambas experiencias se dan en el contexto de un aumento de las cuotas y las
conductas predatorias de Los Templarios al parecer por un descenso de las
rentas venidas del narcotráfico. Escribe Denise Maerker:
En un dato coinciden todos los testimonios. A partir de 2010 se empieza a
incrementar la actividad de extorsión de los grupos criminales en la zona. El
relato del doctor Mireles refiere que el negocio del tráfico de drogas se les
empezó a dificultar y los criminales se volcaron sobre una población indefensa y
relativamente rica para extraer recursos y compensar sus pérdidas. ¿Qué fue
exactamente lo que pasó? Es difícil decirlo y no tenemos aún información
suficiente para concluir en una causa determinada. Surge naturalmente como
hipótesis la guerra emprendida por el gobierno de Felipe Calderón contra el
tráfico de drogas. Ya sea porque cortó los contactos entre diferentes grupos o
porque volvió complicado o imposible el trasiego en un corredor determinado
hacia el norte y Estados Unidos. En enero de este año, dentro de los aparatos
de seguridad del gobierno, se consideraba que Los Caballeros Templarios
acabaron obteniendo sólo el 30% de sus ingresos del tráfico de drogas, lo
demás era producto de los secuestros, de la extorsión, de la producción
agropecuaria y de la actividad minera.
El levantamiento de los autodefensas de la Tierra Caliente, en buena medida
bajo la protección o la tolerancia del Ejército y la Policía Federal, desembocó
en una nueva intervención federal en toda forma en Michoacán, a principios de
2014, mediante el nombramiento de un comisionado con amplios poderes que
desplazó al gobierno local y arbitró lo que parecia una inminente guerra entre
Los Caballeros Templarios y las autodefensas. La intervención, con un un
acento menos militar y más político que las anteriores, pareció devolver al
estado un horizonte de tranquilidad pública ajena a la lógica de la pax narca.
¿La guerra contra el narco de los últimos años ha sido una guerra fallida o sólo
una guerra sangrienta?
Eduardo Guerrero fue el primero en fijar analíticamente, con rigor estadístico, la
estrategia de la guerra contra las drogas emprendida en el año 2007 por el
gobierno mexicano.
Las líneas de esa estrategia eran que había que golpear a los grandes cárteles,
descabezarlos, fragmentarlos en bandas de menor tamaño que dejaran de ser
una amenaza para la seguridad nacional y se convirtieran, con el tiempo, sólo
en un problema de seguridad pública: bandas quizá más violentas pero de
menor capacidad logística y financiera, cuyos crímenes pudieran atenderse en
escenarios locales.
Guerrero mostró con rigurosas mediciones que los costos de la estrategia eran
particularmente sangrientos, no tanto por el daño directo que la fuerza pública
causaba sobre la organizaciones, sino por la dinámica de destrucciòn y
autodestrucción que se generaba entre ellas. La captura o la muerte de cada
jefe producía un doble efecto violento: el de la lucha interna para suplir al capo
caído y el de la ofensiva de las bandas rivales para aprovechar la debilidad de
la banda descabezada. Nadie pensó que la sangría fuese tan larga y que
pudiera prolongarse en el tiempo tanto como se ha prolongado.
No obstante, con un ajuste de prioridades hecha a partir de 2011, en el sentido
de concentrar los esfuerzos de persecución sobre las bandas más violentas,
ésta fue la estrategia sostenida. Puede decirse de dicha estrategia que ha
costado más sangre de la que nadie previó. Pero quizá no puede decirse que
no ha funcionado porque lo previsto por ella es exactamente lo que ha
sucedido en estos años. Los grandes cárteles se han visto debilitados por la
captura y la eliminación de sus jefes y sicarios mayores y lo que queda de ellos
son bandas menores, desplazadas de las grandes ciudades y refugiadas por su
mayor parte en ciudades pequeñas y municipios aislados sobre cuya población
y territorio ejercen un dominio criminal de delitos cada vez menos vinculados
con las rentas del tráfico de drogas y cada vez más con la extorsión, el derecho
de piso, el secuestro, el robo y el terror criminal.38
A partir del cambio de gobierno federal, en el año 2012, la estrategia de
combate al crimen organizado se vio reforzada en la idea de perseguir
prioritariamente a los grupos más violentos y completada con una discreta pero
efectiva decisión de no perseguir el narcotráfico si éste no altera con sus luchas
intestinas la paz pública.
Quizás sea cierto que la estrategia funcionó y que asistimos a las convulsiones
finales de la violencia prevista: bandas que pueden ser más peligrosas pero no
son más poderosas. Es posible que lo que hemos visto en Michoacán y en
Guerrero, en materia de dominio y salvajismo criminal, sean los últimos
estertores de una guerra y no el principio revitalizado de otra. El paisaje
después de la batalla parece ser un periodo todavía largo de captura criminal
en zonas débiles, municipios aislados, ciudades menores y espacios urbanos
marginales.
A estas alturas del desarrollo de aquella estrategia es difícil sostener que no se
ha librado en México una guerra civil. La pregunta es si esa guerra ha valido la
pena y si ha conseguido algo de valor equivalente a la destrucción de vidas y a
la expansión criminal que produjo.
La respuesta es, desde luego, negativa. Ha sido una guerra cuyos daños son
evidentes y cuyos beneficios es imposible describir.
23 de octubre de 2014
Héctor Aguilar Camín
Escritor. Su novela más reciente es Adiós a los padres.
El presente texto fue escrito para el congreso “La paz alterada”, celebrado el 23
y 24 de octubre de 2014 en Zamora, bajo los auspicios de El Colegio de
Michoacán.
1 Steven Pinker, The Better Angels of our Nature: Why Violence Has Declined, New
York, Viking, 2011. No sé si es exacta para referirse a este fenómeno la
palabra insurgencia utilizada por Ioan Grillo en su magnífico libro sobre el
narco, o la expresiòn narcoinsurgencia, utilizado por la secretaria de Estado
Hillary Clinton, en algún momento de su gestión (6 de septiembre de 2010),
pero alude también a la dimensión extra o supracriminal del problema. Ioan
Grillo, El Narco. En el corazón de la insurgencia criminal mexicana, Ediciones
Urano, México, 2012. El título original en inglés: El Narco. The Bloody Rise of
Mexican War Cartels, London, Berlin, New York, Sidney, Bloosbury, 2001.
2 Fernando Escalante Gonzalbo, El homicidio en México entre 1990 y 2007.
Aproximación estadística, Secretaría de Seguridad Pública, México, 2009;
Eduardo Guerrero, “La muerte tiene permiso”, nexos, enero 2011; Guillermo
Valdés, Historia del narcotráfico en México, Aguilar, México, 2013, pp. 400 y ss.
3 Fernando Escalante, “Crimen organizado. La dimensión imaginaria”, nexos,
octubre 2012.
4 Eduardo Guerrero, “La raíz de la violencia”, nexos, enero 2011.
5 Guillermo Valdés, Historia del narcotráfico en México, pp. 91 y ss; Elaine
Shannon,Desperados. Latin Drug Lords. U.S. Lawmen, and the War America can’t
Win, New York, Viking, 1988, pp. 107 y ss.
6 Un análisis de hechos y procesos convergentes al fenómeno en Alejandro
Hope: “Violencia 2007-2011. La tormenta perfecta”, nexos, noviembre 2013.
7 Valdés, op. cit., p. 408.
8 Termina también en esos años la actividad de González Calderoni, quien en
1994 desaparece de la luz pública huyendo de una orden de aprehensión.
Reaparecerá como testigo protegido de la justicia estadunidense. En esa
calidad es asesinado años más tarde, en febrero de 2003, en la ciudad de
MacAllen, de un tiro al cuello, mientras manejaba su automóvil luego de una
visita a su abogado. La historia de González Calderoni en Valdés,op. cit., pp.
208 y ss., y en las notas periodísticas “Matan en EU a Guillermo González
Calderoni. Vivía en McAllen como informante de la DEA”, La Jornada, 6 de
febrero de 2003 y “La caída del comandante”, El País, 20 de febrero, 2003.
9 La pequeña historia de este dúo en Valdés, op. cit., pp. 245 y ss., y Ricardo
Ravelo, Osiel. Vida y tragedia de un narco, México, Grijalbo, 2009, pp. 91 y ss.
10 Grillo, op. cit., p. 222.
11 Ravelo, op. cit., p. 135.
12 Ibíd., pp. 137-39.
13 Ravelo, op. cit., p. 102; Valdés, op. cit., p. 256.
14 Los Zetas funcionan también al principio como una red de espionaje interno
sobre la lealtad de los propios cuadros. Osiel Cárdenas premia a quienes
pasan la prueba y mata a quienes piensa que lo traicionan o pueden
traicionarlo. Cárdenas puede haber ordenado la muerte de hasta 60 personas,
muchos de ellos miembros de su organización. Valdés, op. cit., pp. 254-256;
Ravelo, op. cit., pp. 172 y ss.
15 Valdés, op. cit., p. 255; Grillo. op. cit.
16 Grillo, op. cit., p. 333. “Durante el primer decenio de democracia —añade
Grillo—, hasta 2010, desertaron 100 mil soldados del ejército mexicano. Hay
una consecuencia asombrosa en este fenómeno: los jóvenes del campo y los
barrios urbanos se alistan en el ejército, reciben la paga del ejército por
entrenarse y luego ganan dinero de verdad en la mafia”: p. 336.
17 Ravelo, op. cit., p. 189.
18 Eduardo Guerrero, “La dictadura criminal”, nexos, abril 2014; “¿Quién es El
ChangoMéndez?”, Excélsior, 7 de enero de 2013.
19 Leticia Pineda, “La autodefensa de Aguililla”, nexos, abril 2014.
20 Valdés, op. cit., 267.
21 Ravelo, op. cit., p. 195 y ss.
22 Grillo, op. cit., p. 211.
23 Valdés, op. cit., p. 257.
24 “¿Quién es El Chango Méndez?”, Excélsior, 7 de enero de 2013.
25 Guerrero, “La dictadura criminal”, op. cit.
26 “El despliegue de elementos de las agencias federales de seguridad tuvo el
efecto de contener el conflicto entre Golfo/Zetas y La Familia Michoacana. La
primera organización, a pesar de contar con mayores recursos, fue la más
golpeada durante los primeros meses del operativo conjunto. En 2007 fue
detenido Cipriano Mendoza Contreras, líder del Cártel del Golfo en Michoacán.
Aunque en los siguientes años Los Zetas continuaron enviando células de
sicarios para atacar a La Familia Michoacana, a partir de entonces no tuvieron
una presencia fija en el estado. Por lo tanto, además de atemperar la violencia,
el operativo conjunto tuvo también el efecto de consolidar la posición de La
Familia como la organización criminal predominante en Michoacán”. Ídem.
27 Grillo, op. cit., pp. 310, 312.
28 Guerrero, “La dictadura criminal”, op. cit.
29 Denise Maerker, “Auxilio. ¿Dónde está el Estado?”, nexos, abril 2014.
30 Ídem.
31 “Así los empezó a ver en poco tiempo la Federal. Nadie se salvaba, ni los
presidentes municipales, ni los policías locales, ni los comerciantes, ni los
limoneros, ni los aguacateros, ni los ganaderos, menos los dueños de bares y
las prostitutas. Y en efecto la inmensa mayoría tenía o había tenido tratos con
miembros de La Familia o de Los Templarios. Se podía fácilmente documentar
reuniones de los presidentes municipales con líderes de La Familia o de Los
Templarios en sitios apartados”. Ídem.
32 Luis González, “La tierra caliente”, en La querencia, Clío/Colegio Nacional,
México, 1997. Obras completas, vol. X.
33 Grillo, op. cit.: “Los jefes de plaza dirigen células, que son semiautónomas.
Ganan dinero en su territorio y lo pasan al mando, que a su vez es el que trata
con los capos. Más abajo están los sicarios, y por debajo de éstos están los
halcones, que son los espías e informadores del cártel. Todos utilizan apodo
para saber el mínimo unos de otros. Cuando encargan un trabajo a unos
sicarios, éstos por lo general no saben por qué se busca ese objetivo. Se
limitan a cumplir las órdenes”.
34 Ibíd., p. 334.
35 “Varios mensajes atribuidos a La Familia Michoacana se dirigían en contra
de Valdemar Alvarado Benítez, El Rufo, líder de una célula de sicarios de Los
Zetas que operaba de forma intermitente en Michoacán durante 2009 y 2010”.
Guerrero, “La dictadura criminal”, op. cit.
36 Ídem.
37 Un jefe clave, El Chango Méndez, se separa de Los Caballeros Templarios y
sigue con la etiqueta de La Familia para operar en adelante con el apoyo de
Los Zetas. La batalla entre los nuevos Caballeros Templarios y la vieja Familia
Michoacana terminará con la detención de El Chango Méndez el 21 de junio de
2011. La caída de Méndez fragmenta su organización en pequeñas bandas,
algunas de las cuales se unen a Los Caballeros Templarios, otras al Cártel del
Milenio que sigue operando desde Jalisco, otras más se establecen en
municipios vecinos de los estados de México y Guerrero. Ídem.
38 Eduardo Guerrero, “La raíz de la violencia”, op. cit. A propósito del estallido
criminal de Iguala, que dejó un saldo de seis muertos y 43 desaparecidos en
una sola noche de complicidad policiaca y ejecuciones bárbaras de los dueños
narcos de la plaza, incluida en ella la presidencia municipal, el propio Eduardo
Guerrero ha escrito: “Las organizaciones criminales han reducido su presencia
visible en las zonas metropolitanas y al parecer están cocentrando sus
operaciones (al menos las que generan más violencia, como la extorsión) en
ciudades pequeñas y en el ámbio rural”. Esto, añade Guerrero, “supone un
riesgo en el largo plazo para la gobernabilidad en amplias zonas del país, pues
fuera de los grandes centros urbanos las instituciones tienden a ser más
débiles, la cobertura de los medios de comunicacióbn es menor y la población
tiene menos recursos y alternativas para hacer frente a amenazas”: “Guerrero, la
crisis que se anunciaba”, nexos, noviembre 2014.
2015 Enero, Expediente.
Geopolitical Asian
Asia’s New Geopolitics Takes Shape Around India,
Japan, and Australia
Japan, India, and Australia will be instrumental in determining Asia’s fate in
the 21st century.
By Harsh V. Pant
July 28, 2015
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New configurations in Asian geopolitics are emerging thick and fast. Last month saw the
initiative of a new trilateral involving India, Japan, and Australia when Indian Foreign
Secretary S. Jaishankar met his Australian counterpart and the Japanese vice foreign
minister. Japan will also be a part of bilateral India-U.S. annual naval exercises–the
Malabar–slated to be held over the next few months. Though Japan has participated in
these exercises in the past as well, this will be only the second time when Japan will join
these exercises in the geostrategically critical Indian Ocean region.
There is a growing convergence in the region now that the strategic framework of the Indo-
Pacific remains the best way forward to manage the rapidly shifting contours of Asia.
Proposed first by Japan and adopted with enthusiasm by Australia under the Tony Abbott
government, in particular, the framework has gained considerable currency, with even the
U.S. now increasingly articulating the need for it. Though China views the framework with
suspicion, many in China are acknowledging that the Indo-Pacific has emerged as a critical
regional space for India and China needs to synchronize its policies across the Indian Ocean
region and the Pacific.
These developments underscore the changing regional configuration in the Indo-Pacific on
account of China’s aggressive foreign policy posture as well as a new seriousness in India’s
own China policy. Indian Prime Minister Narendra Modi’s outreach to Japan and Australia
has been a significant part of his government’s foreign policy so far as strong security ties
with Tokyo and Canberra are now viewed as vital by Delhi.
China’s increasing diplomatic and economic influence, coupled with domestic nationalistic
demands, has led to an adjustment of its military power and the adoption of a bolder and
more proactive foreign policy. From China’s unilateral decision in 2013 to extend its
air defense identification zone (ADIZ) over a contested maritime area in the East China Sea
overlapping with the already existing Japanese ADIZ to announcing new fishing regulations
for Hainan province in January 2014 to ensure that all foreign vessels need fishing permits
from Hainan authorities to operate in more than half of South China Sea, the list of
assertive moves has been growing in recent years. China’s land reclamation work in the
Spratly Islands has been the most dramatic affirmation of Beijing’s desire to change the
ground realities in the region in its favor. This has generated apprehensions about a
growing void in the region to balance China’s growing dominance.
With the U.S. consumed by its own domestic vulnerabilities and never ending crises in the
Middle East, regional powers such as India, Japan, and Australia have been more proactive
than in the past in managing this turbulence. The new trilaterals emerging in Asia go
beyond past attempts at rudimentary joint military exercises. In December 2013, the
Japanese Maritime Self-Defense Force (JMSDF) conducted its first bilateral maritime
exercise with the Indian Navy in the Indian Ocean Region. With growing strategic
convergence between the two, in 2014 India invited the JMSDF to participate in the annual
Malabar exercises with the U.S. Navy in the Pacific waters.
India and Japan have an institutionalized trilateral strategic dialogue partnership with the
United States, initiated in 2011. Maintaining a balance of power in the Asian-Pacific as well
as maritime security in the Indo-Pacific waters has become an important element of this
dialogue. A similar dialogue exists between the U.S., Japan, and Australia. And now a new
trilateral involving India, Japan, and Australia has joined these initiatives, which can
potentially to transform into a ‘quad’ of democracies in the Indo-Pacific region. The roots of
this potential partnership were laid as early as late-2004, when navies from the U.S., India,
Japan, and Australia collaborated in tsunami relief operations all across the Indian Ocean.
Japan was one of the earliest vocal supporters of such initiatives. In 2007, Japanese Prime
Minister Shinzo Abe, in his earlier stint as prime minister, lobbied for Asia’s democracies to
come together in a ‘quadrilateral.’ This was also actively supported by the United States.
Such an initiative resulted in a five nation naval exercise in Bay of Bengal in September
2007. However, China, perceiving a possible ganging-up of Asia’s democracies, issued
demarches to New Delhi and Canberra, causing this initiative to lose steam, since both
Australia and New Delhi felt it unwise to provoke China. However, as China becomes more
aggressive in the region, there are signs that India and Australia may be warming up to the
idea again.
The uncertainty of Chinese power and intentions in the region as well as the future of
American commitment to maintaining the balance of power in Asia rank high in the
strategic thinking of regional powers. This rapidly evolving regional geopolitics is forcing
Asia’s middle powers – India, Japan and Australia – to devise alternative strategies for
balancing China. Though still continuing their security partnership with the United States,
these powers are actively hedging against the possibility of America’s failure to eventually
balance China’s growing power. Asia’s geopolitical space is undergoing a transformation.
While China’s rise is the biggest story still unfolding, other powers are also recalibrating
and their influence will be of equal, if not greater, consequence in shaping the future of
global politics in the Asia-Pacific. http://thediplomat.com/2015/07/asias-new-geopolitics-
takes-shape-around-india-japan-and-australia/