Julia de Burgos-Yarielis González
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Por: Yarielis González Aponte
Esc.Bella Vista
Estudios Sociales
Maestra: Lourdes
Julia Constancia Burgos García nació
el 17 de febrero de 1914 en el barrio
Santa Cruz en Carolina, Puerto Rico.
Fallece a los 39 años de edad el 6 de
julio de 1953 en la ciudad de Nueva
York.
Es la primogénita de trece hermanos
y vivió en un ambiente donde sus
condiciones económicas eran
precarias, lo que le afectó
emocionalmente.
Fue poeta, periodista, maestra de
escuela y dramaturga.
Durante 1936 comienza a darse a conocer en el ambiente literario y publica su poema Es nuestra la hora en una hoja suelta.
Su muerte fue bien trágica, pues fue encontrada inconsciente en una de las calles de Nueva York, y declarada muerta de pulmonías más tarde en el hospital.
Al no llevar ninguna identificación, la entierran bajo el nombre “Jane Doe” (anónimo). Un mes más tarde, su familia da con el paradero de sus restos y los trasladan a Puerto Rico.
La poesía de Julia de Burgos narra su
propia vida y se caracteriza por la
fuerza y la pasión con la que
transmitía sus sentimientos.
Además, se destacó por ser una poeta
que promovió una nueva imagen de la
mujer puertorriqueña al reflejar en sus
poemas los problemas de la mujer de
su tiempo.
En sus poemas trataba temas
como el amor, la muerte, la
mujer, la crítica social, la
justicia, entre otros.
El Parque Julia de Burgos, localizado
en Carolina, posee un museo, un
extenso paseo peatonal, gazebos,
anfiteatro, salas de reunión y un
mausoleo dedicado a la poetisa nacional
Julia De Burgos.
La Casa Protegida Julia de Burgos, también
fue creada con la intención de honrar su
memoria. Ésta se localiza en el municipio de
San Juan y ofrece servicios para víctimas de
violencia doméstica.
Estatua en el mausoleo de Julia
en Carolina, su ciudad natal
Otras instituciones bajo su nombre
son la Escuela Julia de Burgos,
localizada en el pueblo de
Canóvanas, el Centro Latino
Julia de Burgos en Manhattan y el
Centro de Arte Julia de Burgos en
Harlem, NY.
Río Grande de Loíza
Yo fui la más callada
Poema para mi muerte
No hay abandono
¡Oh mar, no esperes más!
Te llevarán
Poema para las lágrimas
Canción amarga
Alba de mi silencio
Alta mar y gaviota
Desde el puente Martín Peña
Ay ay ay de la grifa negra
La obra poética de Julia de Burgos hizo grandes aportaciones a la
literatura puertorriqueña. Sus poemas reflejan el sentir de una
verdadera puertorriqueña, ya que están llenos de pasión, sentimiento y
mucha dedicación, y además, sirven como inspiración a todo el que los
lea. Julia de Burgos dejó un buen legado que perdurará en las
siguientes generaciones, ya que a través de su obra, logró fomentar una
imagen de la nueva mujer puertorriqueña y rompió con muchos
estándares sociales.