Argumentos a favor del ateísmo

Argumentos a favor del ateísmo

“La religión es el suspiro de la criatura oprimida... el opio del pueblo que hace tolerable su sufrimiento.”

-Karl Marx


Es un hecho innegable que la religión es una realidad que toca la vida de todas las personas, sea uno creyente o no.


Quizás, el primer problema que tiene un ateo para creer en Dios es el hecho de aceptar la existencia de un ser trascendente, creador del universo, omnipotente, omnisciente, benevolente y capaz de interactuar con el hombre.

Esto suena demasiado inventado.


Los agnósticos dicen que si no se puede probar la existencia de Dios, tampoco se puede probar su inexistencia, por lo que el agnosticismo parece ser la única posición coherente. La verdad parece muy razonable; en vez de decir “creo” o “no creo” es mejor decir “no sé; estoy esperando alguna evidencia…”


Pero la verdad también es muy clara, todos somos ateos con respecto a la existencia de Zeus, Afrodita, o Tláloc o cualquiera de los miles de dioses que los humanos han fabricado a lo largo de la historia. Realmente no tenemos la más mínima duda sobre la existencia de esas ficciones.


Ningún cristiano duda sobre la existencia de Tláloc, ni se está cuestionando en este momento sobre la posibilidad de la existencia de Tláloc. Hay muchos dioses en los que los cristianos no creen.

La diferencia entre un cristiano y un ateo es que en esa larga lista de dioses en los que no creen, los ateos agregan uno más: el Dios cristiano.


Ahora, pero si ningún ateo es capaz de probar la inexistencia de Dios, ¿qué argumentos tiene para ser ateo?

LA EXISTENCIA DE LA CREENCIA RELIGIOSA.


Esta creencia de puede basar históricamente en la ignorancia, y actualmente en el miedo y en hábitos psicológicos muy comunes.


La Biblia dice que el hombre fue creado a la imagen y semejanza de Dios. Pero de hecho es al revés, Dios fue creado a la imagen del hombre, específicamente hombres de sociedades primitivas que se espantaban por rayos, la erupción de volcanes y terremotos.


El hombre proyectaba su capacidad de hacer ruido y destruir cosas y lo reflejaba en un hombre muy grande en el cielo: el dios Zeus.

Sin embargo, hoy en día podemos estudiar las causas verdaderas de estos fenómenos.


Fue en su juventud que la humanidad fue hechizada por la idea religiosa porque no había llegado a la edad de la razón.

De la misma manera, la mayoría de los individuos creyentes son hechizados por la religión en su juventud, a los 5, 6 ó 7 años de edad cuando no tienen uso de la razón.


Si los primitivos hubieran tenido conocimiento científico, a lo mejor no habría surgido la hipótesis de Dios.


Y si los niños crecieran en un entorno sin iglesias y pastores y sermones, si no fueran adoctrinados en el seno familiar y social, podrían de adultos leer la Biblia y el Corán y todas las demás escrituras religiosas del mundo y a ver si alguna les convence. Seguro habría muchos menos creyentes si las cosas se hicieran así. ¿Por qué?


Pero la ignorancia no es la única ni la más potente razón para explicar la creencia religiosa. El miedo ejerce una fuerza mucho mayor: el miedo a la muerte.


Y también: el miedo a la propia vida: esa necesidad de dejarle todo a la voluntad de Dios y a sus deseos, cuando realmente somos nosotros quienes somos al causa de lo que sucede en nuestra vida y en la de quienes nos rodean.

Las cosas no pasan porque Dios quiere, las cosas pasan porque yo quiero.


Pregunta: ¿Es mejor creer en Dios y que al final resulte que no existe, que no creer en él y que resulte verdadero todo lo que ha dicho la iglesia?


¿Acaso es Dios como un típico político que acarrea gente para que estén en la plaza adulándolo y gritando su nombre?

Todos sabemos la farsa que es eso.


No es posible que a un Dios con un intelecto infinito le pueda importar los halagos y adulación de personas hipócritas que sólo creen en él por miedo, por ignorancia o por conveniencia.


Entonces, ¿Qué fuentes podríamos tener para creer que Dios existe? Las únicas posibles serías éstas:

1. Alguna evidencia empírica, científica, cosa que no tenemos.


2. Un argumento lógico, como veremos en los argumentos a favor de la existencia de Dios: el cosmológico, el teleológico o el argumento ontológico.

Aun cuando esos argumentos fueran sólidos y nos convencieran de la existencia de Dios, lo único que podríamos concluir es que ese Dios es un principio abstracto, un motor inmóvil, creador del cosmos, mas no nos diría si tiene una voluntad buena, si quiere que hagamos ciertas cosas, si nos ama, etc.


3. Una revelación. Eso que para los cristianos se encuentra en la Biblia.

Cuestión que a final de cuentas se vuelve un asunto de fe y no de verdaderas pruebas.


4. La única otra fuente sería la experiencia personal de cada quién, sea Dios hablando directamente a la persona o un sentir personal acerca de su naturaleza.

Pero no nos podemos basar en la experiencia personal de las personas para decir que Dios existe porque para empezar son muy variadas y, además: ¿Cómo podríamos saber con certeza que esa experiencia no es más que un invento propio que la persona se hace a sí misma?

Argumentos a favor del ateísmo

Education

Transcript of Argumentos a favor del ateísmo