Francisco Villaespesa - La Copa Del Rey de Thule

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  • La Copa del Rey de Thule

    de

    Francisco Villaespesa

    edicin: 1900

    Con notas y ortografa actualizad por P. Delgado.

    1

  • O rinovarse o morireG. D' Annunzio

    2

  • Ofrenda.

    Si penas y dudas olvidar ansassu clsica copa te ofrece el poeta.En marfil y oro la escupi un atleta...Fue cliz de besos en noche de orgas.

    Hoy es santuario de las Musas mas:de Chipre, bacante lasciva y discreta,del Champaa, el oro de la vida inquieta,y el Jerez, la rosa de mis alegras.

    La copa te brinda divinos amores.En ella la virgen deshoja las floresdel Epitalamio,1 y escancia la estrella

    el vino celeste de plidas Thules...Alma soadora, embrigate de ellade rojos delirios y ensueos azules!

    1 Composicin potica del gnero lrico, en celebracin de una boda

    3

  • Silencio.

    Para Rubn Daro.

    El silencio! La Esfinge con el dedo en el labio...Azahar inviolado de la frase no escrita...La flor a quien consulta amores Margarita...2El libro donde siembra sus mximas el sabio...

    El ensueo tranquilo del amor sin agravio...Oracin sin palabras de espectral cenobita...3Majestad de la estatua...La tristeza infinita...El silencio!... La Esfinge con el dedo en el labio...

    Oh los reyes que duermen en las piedras tumbales!Oh las almas sufridas que se callan sus males!.................................................................................En la celda ms triste del oscuro convento

    viejo monje contempla, silencioso e inerte,sobre la abierta hoja de infolio amarillentoel borroso esqueleto de la plida Muerte...

    2 Margarita: En el Fausto de Gohete es el nombre de la mujer de la que se enamora el protagonista mediante la intervencin de Mefistfeles y por la que pierde su alma.3 Cenobita: Persona que profesa la vida monstica.

    4

  • Los crepsculos de sangre.

    Para Juan R. Jimnez.

    En los labios la sonrisa dolorosa de los mrtires,a las luces moribundas y sangrientas de la tarde que se apaga;l mirndose en los ojos de la virgen soadora,y ella oculta en negros tules,4 ojerosa, triste y plida,por la senda ms floridadel jardn de la Esperanza,bajo un palio de claveles, de jazmines, de laureles y de adelfas,el poetay su musa favorita, la que tiene la tristeza de la luna en la mirada,lividices5 sepulcrales en las hmedas mejillasy jirones de tinieblas en la oscura cabellera destrenzada,silenciosos atraviesancon los labios sonrientes y las manos enlazadas.

    A su paso, como besos lujuriososde unos labios de escarlata,triunfalmente se entreabren los claveles;y sus rojos dientes muestran, sonriendo,como lbricas bacantes, las granadas.

    La pureza de sus senos les ofrecen los jazmines,y se agitan rumorosos, entonando himnos de gloria,los laureles que despiden resplandores de esmeralda.

    As cantan los claveles:El Sol vierte en nuestras venaslos ardores tropicales de su sangre epitalmica.Florecemos en los labios que se funden en un besoy en el rostro de la virgen que se entrega enamorada.

    4 Tul: Tejido delgado y transparente de seda, algodn o hilo, que forma malla, generalmente en octgonos 5 Palideces

    5

  • Somos himnos luminosos y triunfales en las rojas epopeyas;regia prpura en los mantos fastuosos del monarca;tibia lluvia de rubes que enrojece los azahares de la novia;llanto rojo sobre el oro seorial de las tiaras ,y en el fondo de los lagos, pabellones de coralesdonde duermen las princesas y las reinas encantadas.Reflejamos en la sangre de los vinos de los vinos que enloquecenel incendio lujurioso que devora nuestras almas,y en los rizos destrenzados de la lbrica bacante,agoniza lentamente, como lvido crepsculo, el fulgor de nuestras llamas.Ven poeta,y corona con nosotros los cabellos ondulantes de tu amada...

    Y el poetay su musa favorita, atraviesan el sendero, sin pararse,con los labios sonrientes y las manos enlazadas.

    As cantan los jazmines:Somos risas hechas flores en los labios del Ensueo.Nuestra cuna fue la nieve que corona las montaas.Nuestro besos son los rayos temblorosos de la luna,y morimos en la sombra de las noches enlutadas.

    Florecemos en el velo vaporoso de las vrgenes:a los cisnes les prestamos su blancura inmaculada,a los reyes el armio de las tnicas triunfales,y a Pierrot6 las cadavricas palideces de la mscara.

    Somos nveas7 mariposas que entre flores aletean;en los cielos azulados pasajeras nubes blancas;hostia mstica en los clices que en el templo se consumen;apagados resplandores en el mrmol de la estatua,y en los luctuosos8 del Invierno taciturno,blancos copos de la nieve que desciende silenciosa y solitaria.

    Nos abrimos, al incendio de unos labios febricientes,9en los senos palpitantes y desnudos de la joven desposada,y a la virgen que agoniza de ternuras y de olvidosle servimos de mortaja.

    6 Especie de mimo o payaso; se representa maquillado de blanco y enfundado en un elegante vestido brillante. De apariencia fra y lunar, representa la ley, el orden, el mundo adulto y la represin.

    7 De nieve o semejante a la nieve, por extensin blancas8 Triste, fnebre y digno de llanto. Por extensin das tristes9 Febricientes: Ardorosos

    6

  • Ven, poeta,y corona con nosotros los cabellos ondulantes de tu amada.

    Y el poetay su musa favorita, atraviesan el sendero, sin pararse,con los labios sonrientes y las manos enlazadas.

    As cantan los laureles:Nos alzamos en las cumbresdonde anida el Sol y el guila,y sonren las estrellas fulgurantes de la Gloria.

    En las rojas epopeyas somos palmasque arcos fingen, cuando alegres, entre vtores y aplausos,relinchando los corceles y desnudas escapadas,los guerreros victoriososen tropel cantando vuelven de los campos de batalla.

    Alentamos en el Circo la agona de los mrtiresdevorados por las fieras. Coronamos las estatuasvencedoras del Olvido, y en la frente de los nobles paladinesflorecemos como triunfo de inmortales esmeraldas.Son eternos nuestros xtasis gloriosos...El mar besa con sus olas nuestras plantas,y los rubios huracanes, que deshojan las florestas, acariciancon sus dedos temblorosos nuestra verde cabellera destrenzada...

    Ven poeta, y eterniza con un ramo de laurelesla hermosura pasajera de tu amada...

    Y el poetay su musa favorita, atraviesan el sendero, sin pararse,con los labios sonrientes y las manos enlazadas...

    As cantan las adelfas:Nuestras flores son sangrientascomo carnes desgarradasa mordiscos lujuriosos.Florecemos con la fiebre...Entonamos en el hachareluciente del verdugo la epopeya de la sangre...

    7

  • Somos copas de diablicos ensueos, cinceladasen el crneo de las brujas, donde vierten ponzoalas serpientes del Delirio..., las serpientes que enrojecen nuestras almas...Alumbramos los oscuros calabozos donde ruge la Locura,y las celdas solitariasdonde en msticos espasmos las histricas novelasde lujuria se embriagancon la sangre de los Cristos...

    Ven, poeta, y corona con nosotros la cabeza soadora de tu amada...

    Y el poetay su musa favorita se pararon un instante...

    En la negra cabellera de la virgen, triste y plida,florecieron las adelfas................................................................................El jardn de la Esperanzaalumbraron los relmpagos de locuras y de fiebres.................................................................................Los claveles, los jazmines, los laureles, las adelfas, se agitaron;y sus hojas arrastradaspor la brisa gemebunda10 de la tarde que mora,se perdieron para siempre por las sendas solitarias,lentamente...lentamente, como plidas visionesde un ensueo misterioso que se espuma en la distancia..................................................................................En un lnguido martirio de oro y prpurael crepsculo mora...Suspirabantemblorosas las adelfas.Y al empuje de los vientos, las simblicas granadas,como lgrimas de sangre, sobre el suelo gris y hmedosus rubes desgranaban...

    10 Que gime profundamente.

    8

  • Histrica.

    Para Guillermo Valencia

    Enferma de nostalgias, la ardiente cortesana,al rojizo crepsculo que incendia el aposento,su anhelo lanza al aire, como un halcn hambriento,tras la ideal paloma de una Thule11 lejana.

    Suea con las ergstulas12 de la Roma pagana;cruzar desnuda el Cosso,13 con el cabello al viento,y embriagarse de amores en el Circo sangrientocon el vino purpreo de la vendimia humana.

    Suea... Un len celoso veloz salta a la arena,ensangrentada el oro de su rubia melena.Abre las rojas fauces... A la bacante mira,

    salta sobre sus pechos, a su cuerpo se abraza...Y ella, mientras la fiera sus carnes despedaza,los prpados entorna, y sonriendo expira!

    11 En la geografa clsica era el lugar ms septentrional de la Tierra12 Ergstulo: Lugar en que vivan hacinados los trabajadores esclavos o en que se encerraba a los esclavos sujetos a

    condena.

    13 Coso

    9

  • Flores de ensueo.

    Para Manuel Daz Rodrguez

    Con las manos cruzadas sobre el pechoentre nubes de encaje mal velado,por el tibio alabastro de los hombroslos flotantes cabellos descentrados,plida como mstica azucenaque se marchita en el jardn del claustro,la virgen duerme. Oculto entre la prpura del rico lecho de marfil y sndalo,el ngel del Pudor vea su sueocon el ndice puesto sobre el labio.

    Ensueo Azul: El Hada de la dichadesciende de los cielos en su carroun gigantesco cliz de magnoliapor dos gallardos cnifes14 tirado,y la conduce a los floridos bosquesdel misterioso reino del Encanto.

    All florecen lirios que son rostrode rubios serafines; en sus lagos,eternamente azules, bogan cisnesde nieve y de ilusin; ritman sus cantosel ruiseor en la frondosa orilla;los cien ojos floridos de su mantoabre el pavo real con regia pompa;y en medio del jardn alza un palaciosus altos muros de marfil y oro,por dragones de fuego vigilados,donde las magas del amor preparansus venenosos filtros encantados,y las princesas de los viejos cuentosmueven la rueca, su cario hilando.

    14 Mosquitos

    10

  • Ensueo rojo: en el jardn de Marta,15a la luz moribunda del Ocaso,contempla los fulgores que despidenlas ricas joyas del collar de Fausto.16Y siente que sus prpados se cierrany los besos florecen en sus labios...Y ve cmo entreabre su corolaa las bruscas caricias de un abrazohostia sagrada en el altar de Venusun misterioso lirio ensangrentado...

    Con las manos cruzadas sobre el pechoentre nubes de encaje mal velado,por el tibio alabastro de los hombros,los flotantes cabellos destrenzados,plida como mstica azucenaque se marchita en el jardn del claustro,dormida est. De pie en la cabeceradel rico lecho de marfil y sndalo,descorriendo el purpreo cortinajeSatans re, y a sus pies postradoel ngel del Pudor suspira y lloracon la cabeza oculta entre las manos.

    15 Marta: Personaje del Fausto de Goethe. y amiga de Margarita16 Fausto es un personaje de ficcin, protagonista de varias obras literarias y musicales, inspirado en un alquimista que

    se supone que vivi entre el s.XV y el XVI. Proclamaba que haba vendido su alma al diablo para obtener sabidura

    11

  • Paisaje interior.

    Para G. Martnez Sierra

    Cual Sol en los cielos entreabre el Deliriosu enorme pupila torva y sanguinaria,y en la roja tarde vaga solitaria el alma marchita de crdeno lirio.

    Lenta nube vierte sangre de martirio,el ciprs eleva su negra plegaria,y enciende en el cliz de la pasionaria,lvida lucirnaga, fantstico cirio.

    Sollozan los vientos. En lago de llantolos cisnes heridos apagan su canto.Sobre las palomas vuelan los nebles,17

    y entre las adelfas alza lentamentesu verde cabeza la Eterna Serpientede escamas de oro y ojos de rubes.

    17 Nebles: Ave de rapia

    12

  • Epitalamio.

    Para Luis Belisso

    A las luces espectrales de las plidas auroras,recitando misteriosas letanas,por el bosque van pasando las simblicas Teorasde las Horas.

    Enlazadas de las manos cruzan lentascual fantasmas sepulcrales que caminan al osario.Gime el viento entre los pliegues de sus tnicas sangrientas.Lanza el bho en los cipreses la agona de su canto funerario.

    Doblan roncas las campanas en su crcel de granito,y a sus ecos moribundos que se apagan en la bruma,la cadena de fantasmas en el gris de lo infinito,en las tenues palideces de las nbulas18 se esfuma.

    Solo queda bajo el palio de un naranjo florecido,una virgen que piadosa, con las manos enlazadas, mira al cielo.Con jazmines y con nieve los ensueos candorosos han tejidola blancura deslumbrante de su tnica y su velo.

    De sus lnguidas pupilas la purprea luz evocael incendio del crepsculo que ensangrienta los rosales,y la sangre que enrojece los claveles de su bocacanta el triunfo de las rosas en los tlamos19 nupciales.

    Al mirarme solo y triste, con la cruz de mis doloresen la cumbre del olvido,la Hora Blanca se aproxima... Me sostiene entre sus brazos, y a mi odocanta el dulce Epitalamio de sus lricos amores.

    En mis brazos de su carne siento peso...Nuestros cuerpos funde lazode un abrazo...Nuestras almas liga un beso...

    Fue un instante. Nuevamente se acercaron las simblicas Teoras,y a su hermana fugitiva silenciosas arrastraron en su rpida cadena,y bebiendo con mis lgrimas la amargura de mi pena,vi los pliegues de su tnica esfumarse entre las sombras de confusas lejanas.

    18 Nebulosas19 Lugar preeminente donde los novios celebraban sus bodas y reciban los parabienes; tambin el lecho de estos.

    13

  • ENVIO

    Oh, Princesa, junto al Prncipe soado, toda blanca y ruborosa,te arrodillas en el templo... Muere Cristo en el altar...Yo te mando, como ofrenda, mi poesa... Mariposade las alas negras, desde el fondo de mi alma luctuosavuela en busca de la nieve de tu ramo de azahar!

    14

  • Ave, Fmina. 20

    Para Csar Zumeta

    Te vi muerta en la luna de un espejo encantado.Has sido en todos tiempos Helena21 y Margarita.En tus rostros florecen las rosas de Afroditay en tu seno las blancas magnolias del pecado.

    Por ti mares de sangre los hombres han llorado.El fuego de tus ojos al sacrlego excita,y la eterna sonrisa de tu boca malditade plidos suicidas el infierno ha poblado.

    Oh, encanto irresistible de la Eterna Lujuria!Tienes cuerpo de ngel y corazn de Furia,y el spid,22 en tu beso, su ponzoa destila.......................................................................Yo evoco tus amores en medio de mi pena...Sansn, agonizante, se acuerda de Dalila,y Cristo, en el Calvario23, recuerda a Magdalena!

    20 Ave, Fmina: Salutacin al ideal femenino aqu representa la mujer fatal: Elena, Margarita, Dalila, Magdalena.21 Mujer de Menelao, personaje de la Iliada. 22 Vbora que apenas se diferencia de la culebra comn ms que en tener las escamas de la cabeza iguales a las del

    resto del cuerpo. Es muy venenosa y se encuentra en los Pirineos y en casi todo el centro y el norte de Europa. 23 Calvario o Glgota es el nombre dado al monte en las afueras de Jerusaln donde Jess fue crucificado. Su nombre

    proviene de rocas en forma de calaveras en uno de los lados de la colina.

    15

  • Los Murcilagos.

    Para Pedro Csar Dominici

    De la tarde que moraa los crdenos reflejos,lentamente caminabas deshojando margaritaspor la senda que perfuman los floridos limoneros...

    No te acuerdas?... De repente, temblorosa, abrazndote a mi cuello,Mira, mira murmuraste,en el nudo de mis brazos de terror desfalleciendocmo en torno de las floresgiran locos los murcilagos!.......................................................................Y en las sombras que avanzaban las lucirnagascomo cirios sepulcrales se encendieron...Y doblaron lentamente las campanascon el fnebre gemido de tu acento...Y en el nuevo catafalco24 te vi inmvil, coronado de azahares, con las manos amarillas enlazadas sobre el pecho...

    Y trazando en torno tuyola fatiga tenebrosa de su vuelo,con el fro mortuorio de sus alas membranosas,te rozaban los Murcilagos...

    Los Murcilagos son sabios: En los viejos pergaminosque en las celdas del Conventoimpasibles contemplaron el martirio de los monjes;en las ruinas donde tejen su tristeza las esclavas del Misterio;en los altos torreones donde el mago se embriaga con el mstico perfume de las flores de los cielos;en los antros donde impera la sonrisa de la esfinge...de la vida los ocultos jeroglficos leyeron.................................................................................

    24 Tmulo adornado con magnificencia, el cual suele ponerse en los templos para las exequias solemnes.

    16

  • Son poetas: A las harpas olvidadas en las naves del castillo;a los rganos que gimen en las bvedas del templo;al pausado clavicordio que una mano aristocrtica,del saln en la penumbra, para siempre dej abierto;a los rojos violines que suspiran silenciososen las lbregas buhardillas de los plidos bohemios...con sus alas temblorosas arrancaronfugitivas vibraciones de suspiros y de besos...

    Junto al Cristo que sucumbe en el mstico madero,de las lmparas de oro parpadean los agnicos reflejos;y a ellas vuelan, con las alas extendidas,los fatdicos Murcilagos...

    Y las lmparas se extinguen...Y profanan el silenciode las bvedas sombras, las siniestras carcajadas del herejey las roncas maldiciones del blasfemo...

    A los ltimos fulgores de la tarde moribundaaparecen los Murcilagos...Son suspiros que se escapan de los labios de la Sombra...Viven slo en los sepulcros del ruinoso cementerio...

    Se alimentan con los lvidos gusanos que devoran a las vrgenes...Se emborrachan con la sangre coagulada de los muertos...

    Al contacto de sus alas, los rosales se estremecen,y las rosas con el llanto luminoso de sus ptalosensangrientan las mortales palideces del crepsculoque al son ronco de las fnebres campanas lentamente va muriendo...

    Oh amarguras infinitas!...Oh recnditos pesares!... Oh Murcilagos!...Vuestras alas oscurecen los fulgores de las lmparasque iluminan los altares melanclicos del templo,donde exange, coronado de nostalgias y de espinas,muere el Cristo triste y plidode mi loco Pensamiento...

    17

  • Anidasteis en la tumba de mis muertas ilusiones...Vuestro fnebre contacto ha dejado sin un cliz al rosal de mis Ensueos;y en las hondas sepulturasdonde yacen enterrados mis recuerdos,se enrojece vuestro hocico vuestro hocico repugnante de vampiros -con la sangre coagulada de mis muertos...de las vrgenes difuntas que se pudren en sus tlamos de piedra,con las manos amarillas enlazadas sobre el pecho!...

    Se marcharon mis alegres camaradas...En las calles alla un perro...Agonizan los fulgores de mi lmpara,y en el aire, ebrios de sombra, giran los Murcilagos.....................................................................................................................................Oh, mi virgen! No te acuerdas? En mis brazos apoyandola escultura dolorosa de tu cuerpo,a los rayos de la luna, lentamente caminabasdeshojando margaritas por la nieve del sendero.....................................................................De repente, nuestras frentes roz el ala de un fatdico Murcilagoque en la calma de la noche se perdi como un presagiode amarguras infinitas......................................................................Las estrellas como cirios sepulcrales se encendieron;y doblaron lentamente las campanascon el fnebre gemido de tu acento...Y en el negro catafalco te vi inmvil, coronada de azahares,con las manos amarillas enlazadas sobre el pecho.......................................................................El terror abri mis ojos... Los fulgores de la lmpara moran,y turbaban el silencio de mi alcoba solitaria los medrosos aletazosde un fatdico Murcilago...

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  • Pagana.

    Para Enrique Gmez Carrillo

    El cisne se acerc. Trmula25 Leda26 la mano hunde en la nieve del plumaje...Y se adormece el alma del paisajeen un rojo crepsculo de seda.

    La onda azul al morir suspira queda;27gorjea el ruiseor entre el ramaje,y un toro, ebrio de amor, muge salvajeen la sombra nupcial de la arboleda.

    Tendi el cisne la curva de su cuelloy con el ala, cndido abanico,acarici los senos y el cabello...

    Leda dio un grito, y se qued extasiada...Y el cisne levanto su rojo picocomo triunfal insignia ensangrentada.

    25 Que tiembla 26 Hija de Testio y Etolia y mujer de Tindreo de Esparta, gozaba de una excelsa belleza, despertando por ello el deseo

    de Zeus que la acosa y posee transmutado en cisne.27 Queda: Quieta o lentamente.

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  • Medieval.

    Para Jos Betancort

    Bajo dosel de prpura, que el sol poniente besa,con sus dedos de nieve la plida princesa

    el azahar de una margarita deshoja,y tras los almos28 cisnes de sus sueos, arroja

    halcn con garras vrgenes su enferma Fantasaque se pierde en las brumas de la Melancola.

    Es bella y dolorosa. Parece la Quimerade amor que un pincel mstico traz en la vidriera

    de la claustral ojiva. En la cndida aurorade sus ojos un ngel nostalgias de Azul llora.

    En sus albas mejillas hay sangrientos martiriosde rosas. Palidecen en su mano los lirios...

    Bajo el trono se enroscan bufones y lebreles.........................................................................En la liza piafan los fogosos corceles

    que impacientes escarban con sus cascos la arena...La trompeta de oro del Heraldo resuena...

    Alzadas las viseras, desnudos los aceros,invaden el palenque los bravos caballeros

    que a enamorar vinieron de bravos pasesa la blanca princesa gemela de los lises..........................................................................Entre jvenes pajes, que le sirven de corte,llega Lohengrin,29 el rubio caballero del Norte.

    De su casco brillante sobre el oro bruidoel alma de los cisnes las alas ha extendido,

    y el Amor en su escudo a recitar se atreveuna cancin de lirios sobre un campo de nieve.

    28 adj. pot. Excelente, benfico, santo, digno de veneracin 29 Lohengrin: Caballero del Grial e hijo de Perceval. Wagner escribi una pera muy famosa sobre dicho personaje.

    20

  • En un corcel alado ms rojo que el Deseocabalga la romntica figura de Romeo.

    En su fulgente casco de plata, brilla inquietala rubia cabellera de la ideal Julieta;

    y en su escudo, que sangre de claveles colora,agoniza la alondra en un beso de Aurora.

    Rugiendo de coraje, como len en celo,sobre un corcel de Arabia la lanza esgrime Otelo.30

    Est de celos loco...Est de espanto mudo;y en la profunda noche que circunda el escudo,

    con un arpn clavado en la nieve del anca,baada de sangre espira una gacela blanca...........................................................................Vibr el trueno de oro de [a]lejados31 clarines.Temblaron en sus sillas los bravos paladines...

    Y tras negro escudero, que sus hazaas nombra,en un corcel salvaje que apacent la Sombra,

    calada la visera, y desnudo el acero,penetra en el palenque un Negro Caballero.

    Junto al tlamo regio de azahares y rosaslos amantes enlazan sus manos temblorosas.

    - Mirar tu rostro anso... Besar tus labios quiero - murmur la princesa. Y el Negro Caballero

    con ruda mano alzose de pronto la visera...Y floreci la Risa en una Calavera...

    30 Otelo: Personaje moro protagonista de la obra homnima escrita por Shakespeare hacia 1603-0431 En el original lejados

    21

  • Los Cruzados de Thule.

    Para Miguel Eduardo Pardo

    Son los Cristos que enrojecen los laureles del Calvariocon la prpura triunfante de su sangre generosa;rosas msticas que mueren en el seno de una hermosa,mirra que arde entre las ascuas del simblico incensario.

    Soadores cenobitas que en el yermo solitariocon sus lgrimas fecundan una flora milagrosa;argonautas que navegan en la noche silenciosatras el oro de un remoto vellocino imaginario.

    Son los cisnes que agonizan en el lago de los cielos;peregrinos que caminan por la noche de los hielos...Estn ebrios de nostalgias. Su mirada entristecida

    bebe el rayo tembloroso que al morir la luna vierte.Marchan solos... Y se pierden por las sendas de la Vidaen silencio dialogando con la sombra de la Muerte...

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  • Neurtica.

    ( De mis afrodisias)

    Para Julio Pellicer

    En la copa de Venus fulgura,sangre de claveles y alma rubes,la divina embriaguez de los stiros,el vino purpureo que escancian las vrgenes.

    Sobre el lago vuelanen un sueo de nieve los cisnes,los cndidos cisnes ebrios de azahares...

    Y al pie de la Esfingedel Amor Eterno,busto femenino con garras de tigre,los lascivos labios de Afrodita ren.........................................................

    Ya no hay vino de amor en las copas.Sobre el lago los cisnes no juegan.

    El alma sombra del lgubre Otooentre los marchitos rosales se queja...

    Una blanca visin, temblorosa,a travs de la oscura arboleda,en el viejo jardn encantadocomo un rayo de luna penetra...............................................................................................................Oh, mi plida virgen, la musa de mis viejas canciones, no vengasa apagar en mis brazos tu fiebre,porque ya no quedani una gota de llanto en mis ojos,ni una gota de sangre en mis venas!

    23

  • La sonrisa del Fauno. 32

    Para Manuel Machado

    Hay rosas que se abren en selvas misteriosasy mustias languidecen, nostlgicas de amores,sin que haya quien aspire sus pdicos olores...Hay almas que agonizan lo mismo que esas rosas!

    Las mariposas tienden sus alas temblorosas,y en una loca orga de luces y colores,ebrias de amor espiran en tlamos de flores...Hay vidas que se acaban como esas mariposas!

    Oh, pdicas vestales! Oh, locas meretrices!Quines son ms hermosas? Quines son ms felices?Los hombres preguntaron, en una edad lejana,

    a un Fauno que en las frondas oculto sonrea...Hace ya muchos siglos... Y en la conciencia humanael Fauno a esa pregunta sonre todava.

    32 Fauno: Semidis romano de las llanuras y los campos y protector de los pastores.

    24

  • Parbolas

    Para Jos Durbn OrozcoFue una noche tenebrosa del Walpurgis.33A la tierra cual mortaja las tinieblas envolvan,y los rojos cazadores del infierno,con sus gritos, azuzaban las diablicas jaurasde los roncos huracanes que, mugiendo como bfalos fantsticos,por la selva oscura y lbrega de la noche se perdan.

    En el bratro34, las brujas, el urdimbre misterioso de la Vida,con las cuerdas del ahorcado, con las llagas del leprosoy la sangre venenosa de los lgubres suicidas,a comps de sus blasfemias,como araas monstruosas enredaban y tejan...

    Y entre nieves y entre escarchas, saludado por los truenos,a las luces del relmpago abri un nio las pupilas!Fue un crepsculo de Invierno. En el bosque gris y hmedolentamente la nevada silenciosa descenda.................................................................................................Ya trajeron la mortaja. Sobre el negro catafalcolas violetas se deshojan y los cirios funerales agonizan.Cerca gimen los responsos... En cerrar la negra caja,carpintero, date prisa!....................................................................................................Las tinieblas avanzaron. Y a los rayos mortecinos de la luna,que luchando con las sombras se apagaba y encendacomo cirio agonizante combatido por los vientos,ante un hurfano enlutado, que solloza de rodillasabrazado a una cruz negra, cruza lenta y silenciosadespidiendo fuegos fatuos35, una fnebre Teora.

    Ya lleg la Primavera...Nievan blancas mariposas los almendros.Hay arrullos de palomas en las ramas florecidasy sonrisas de liblulas en los clices abiertos.Bajo el palio perfumado de un naranjo, los amantescon las manos enlazadas se contemplan en silencio...................................................................................................

    33 Walpurgis: Festividad celebrada en la noche del 30 de abril al 1 de mayo en grandes regiones de Europa Central y el Norte.

    34 El Infierno35 Fuego fatuo: Inflamacin de ciertas materias que se elevan de sustancias animales o vegetales putrefactas, y

    forman pequeas llamas a poca distancia de la tierra, especialmente en los lugares pantanosos y en los cementerios.

    25

  • Oh, las tmidas promesas de los labios juveniles,los callados juramentosque se pierden como msticas palomasen la risa luminosa de los cielos!................................................................................................Canta un ave en la espesura.El Sol muere como un Prncipe en su lechode oro y prpura,y el naranjo, a la caricia lujuriosa de los vientos,vierte lluvia de azahares sobre el llanto de dos almasque agonizan abrazadas en el tlamo de un beso.

    Suenan blicos clarines en el patio del castillo.Un caballo de la Arabia de impaciencia tasca el freno..................................................................................................Campen de la Locuraa la lid marcha el guerrero.

    En la cima de su casco tiembla el guila.Las estrellas resplandecen en la banda de su pecho.Los heraldos van delante. Visten prpura y brocado.Son los Versosde la Gloria, los que vibran triunfalmentecomo aurferos36 clarines en la arena del torneo.

    Detrs marchan, coronados de laureles y de rosas,los gallardos paladines...rubios pajes de la Reina Ensueo...Es de oro su armadura. Sus corceles son de nieve.El amor es su divisa. Su acicate es el Deseo.................................................................................................De las altas ojivales en los vidrios de colores,temblorosa la alborada deja un besode oro y rosa. Vibra el rganobajo el ritmo de los dedosmusicales de una plida novicia de ojos tristes y enlutados...............................................................................................Ante el Cristo silencioso, que agoniza en el madero,hay dos novios de rodillas,con las manos enlazadas y los labios entreabiertos...............................................................................................Vierte el cirio la tristeza luminosa de sus lgrimas de oro.Como flor mstica exhala sus perfumes el inciensoy en el cliz sacrosanto resplandecenla pureza inmaculada de la sangre del Cordero.

    36 Que lleva o contiene oro.

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  • En la torre grazna el bho, y la luna melanclica deshojala tristeza de sus rayos en la copa azul del cielo.

    Coronado de laurelesde la lid torna el guerrero.............................................................................................Suea, suea que le aguardan, entre rosas y azahares,unos brazos extendidos..., unos labios entreabiertos...

    Ebria el alma de amarguras, de rencores y venganzas,a la lid vuelve el guerrero.

    Cubre un pjaro fatdico la cimera de su casco.Es ms negra su armadura que las alas de los cuervos.

    Hay blasfemias infernales en su boca...Lloran sangre sus pupilas en silencio.Y le siguen, cual famlicas jauras,en caballos montaraces, cien legiones de diablicos espectros.

    Van aullando negra historia de perfidias y de amores,de venganzas y de celos...Y al oros, en las noches tenebrosas por las selvas solitarias,se estremecen y asustados se santiguan los viajeros.

    Un extrao peregrino cruza el pramo...Ve una palma...Mas desprecia la frescura que le brinda.No es tu sombra lo que busco dice lgubre y sombro,y de nuevo por la arena del desierto se encamina.

    Cruza el valle que embalsama los jardines florecientes.Entre rosas una virgen amorosa sonrea...Y el viajero, sin pararse, dice triste y melanclico:La sonrisa que yo busco no es tu lbrica sonrisa!

    Sube al monte. Los seores del castillo: Honra dicennuestra mesa. Pasa y bebe en nuestra orga. Y el viajero, sin pararse, les responde tristemente:Vuestra mesa no es mi mesa! Vuestra copa no es la ma!

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  • Huella el cielo de las cumbres. En la cima de un convento.De Jess dicen los monjes el apoyo solicita...Vuestro credo no es mi credo les contesta el peregrino,y en silencio por la nieve lentamente se encamina...........................................................................................Han pasado varios siglos. Y an por valles y montaas,despreciando los placeres y consuelos que le brindan,va el viajero misterioso lentamente...lentamente caminando todava...

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  • ndice de poemas:

    Ofrenda ................................................................Pag 3

    Silencio ............................................................Pag 4

    Los crepsculos de sangre ...............................Pags 5/8

    Histrica ...........................................................Pag 9

    Flores de ensueo .............................................Pags 10/11

    Paisaje interior .................................................Pag 12

    Epitalamio ........................................................Pags 13/14

    Ave, Fmina ......................................................Pag 15

    Los Murcilagos ...............................................Pags 16/18

    Pagana ...............................................................Pag 19

    Medieval................................................................Pags 20/21

    Los cruzados de Thule ......................................Pag 22

    Neurtica ...........................................................Pag 23

    La sonrisa del Fauno .........................................Pag 24

    Parbolas ...........................................................Pags 25/28

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