Revista Montes. Número 122, IV trimestre 2015

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En el cuarto trimestre de 2015 se publica este ejemplar, especialmente cargado de contenidos, cuyo Editorial, sección de Cuál es tu opinión y sección de Internet para forestales tratan el tema de los Programas de Desarrollo Rural. También en Decíamos ayer se contempla en cierto modo este tema, justificando las inversiones en lo forestal como especialmente generadoras de empleo. Se publica una entrevista a Víctor Sarabia, Ingeniero de Montes que trabaja como Director General de limpieza y residuos de la ciudad de Madrid. Además en Actualidad se incluye un interesante artículo sobre la nueva Ley de Montes. http://www.revistamontes.net

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Revista Montes Nº 122 Cuarto Trimestre 2015

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 3 –

Sumario

EDITA:Colegio y Asociación de Ingenieros de Montes

DIRECTORA:Susana Leblic González

COORDINADORA DE REDACCIÓN:Isabel Ramírez Grand

CONSEJO DE REDACCIÓN:José Ceballos ArandaServicio Territorial de Medio Ambiente, Ávila. Junta de Castilla y LeónMiguel Esteban HerreroUniversidad Politécnica de MadridAntonio García ÁlvarezAsociación de Ingenieros de MontesLuis García BenedictoInstituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía. IDAEJosé Luis García RodríguezUniversidad Politécnica de MadridFernando García RobredoUniversidad Politécnica de MadridFdco. Jover Fdez. de BobadillaDr. Ingeniero de MontesAntonio López SantallaSubdirección General de Silvicultura y Montes. Dirección General de Desarrollo Rural y Política Forestal. MAGRAMAFernando Magdaleno MásCentro de Estudios y Experimentación de Obras Pú-blicas (CEDEX) y Universidad Politécnica de MadridRosa Mª Marazuela EstebanIngeniera de Montes e Ingeniera Técnica ForestalAntonio Morcillo San JuanServicio de Conservación de Zonas Verdes. Ayuntamiento de Madrid; y Universidad Politécnica de MadridPilar Quijada GaraballuIngeniera de Montes y redactora ABCJosé Luis Rodríguez GamoFerrovial Servicios S.ARicardo Vélez MuñozSociedad Española de Ciencias Forestales

COLABORADORES INSTITUCIONALES:ANDALUCÍA: Eduardo Muñoz-Cobo RosalesARAGÓN: Ignacio Pérez-Soba Díez del CorralBALEARES: Oriol Domenech AgenjoCANARIAS: Juan Carlos Santamarta CerezalCANTABRIA: Óscar González ÁlvarezCASTILLA LA MANCHA: Ángel Roldán Martínez, CASTILLA Y LEÓN: Alfredo Rodríguez GaragorriCATALUÑA: Jordi Roma VegaEXTREMADURA: Adolfo Díaz-Ambrona GarcíaGALICIA: Juan Picos MartínLA RIOJA: Marta Cejudo FernándezMURCIA: Enrique Díaz ReygosaNAVARRA: Ana Isabel Ariz ArgayaPAÍS VASCO: Alejandro Cantero AmianoVALENCIA: Fernando Catalá Minaya

Dirección, Redacción y Administración: C/ Cristóbal Bordiú, 19-21. 28003 Madrid Teléfono : 91 534 60 [email protected]@revistamontes.netsecretaria@revistamontes.netwww.revistamontes.netwww.facebook.com/revistamontes www.twitter.com/RevistaMontes @RevistaMonteswww.linkedin.com/company/montes-revista-forestal

Diseño, Maquetación e Impresión:Editorial Solitario S.L.

ISSN 0027-0105Depósito legal M-20978-1984Suscripción anual nacional: 30€Suscripción anual Extranjero: 40€Ejemplar suelto: 10€ + gastos de envíoDescuento librerías: 10%Cierre de edición de este número: 23 de octubreFechas de distribución de la Revista: www.revistamontes.net

La Revista MONTES es un medio de comunicación ante la sociedad que trata de favorecer la difusión de estudios proyectos y técnicas de naturaleza educativa, científica o cultural, relativas al mundo forestal y al medio natural en el sentido más amplio

El material (textos, fotografías…) que se publica en la Revista Montes, es facilitado por las personas que lo firman, y son ellas las responsables del contenido de sus trabajos. La Revista Montes acepta, de buena fe, que este material es inédito y pertenece a quienes lo firman, o que disponen de los permisos pertinentes. Además dichos contenidos no son necesariamente compartidos por los editores de la revista.

La Revista Montes cumple con los criterios de calidad Editorial del CSIC y Latindex.

4 Editorial5 Actualidad

— En marcha la Conferencia sobre la Profesión de Ingeniero de Montes (pág. 5) — Breve repaso de los principales aspectos de la reforma de la Ley Básica de Montes (Ley 21/2015), por Ignacio Pérez-Soba Diez del Corral (pág. 6)

13 Entrevista a Víctor Manuel Sarabia Herrero

15 Ciencia y Técnica — Comparación de la eficacia del mulching y la siembra para reducir la erosión post-incendio en Galicia, por J. A. Vega Hidalgo, C. Fernández Filgueira y T. Fonturbel Lliteras (pág. 15)

— Evolución de parámetros físico-químicos de los suelos forestales. El caso del País Vasco, por A. Cantero Amiano (pág. 20)

26 Divulgación — MeFiTu, un proyecto educativo de sensibilización sobre los incendios forestales, por H. Ballart Pastor (pág. 26)

— Los Parques Forestales en la legislación de la Comunidad de Madrid: Desarrollo autonómico y desarrollo local, por M. C. Alcalá Gómez (pág. 30)

34 Opinión — Los Juegos del Hambre, por Miguel Cabrera Bonet (pág. 34) — Incendio de Sierra de Gata; ¿Qué está fallando?, por Blas Curado Fuentes (pág. 36) — 12º Conama: Oportunidad perdida para el Sector Forestal y los ingenieros de Montes, por Andrés López-Cotarelo (pág. 38)

39 Cuál es tu opinión: Los planes de desarrollo rural y lo forestal

42 Actividad colegial58 Caza y Pesca

— De la corrupción política a la corrupción técnica, por Alejandro Chinchilla Rodríguez (pág. 58)

— Importancia de la conectividad longitudinal en los ecosistemas fluviales, por Gonzalo Rincón Sanz (pág. 60)

62 Jardines y Paisaje: Los tesoros verdes de nuestras ciudades, por Laura Santiago Subero

64 Internet forestal: La PAC y los Fondos FEADER, por Jesús Mª González Capitán

65 Árboles singulares: La Farga de Arion, por Elsa Martín Díaz

66 Europa Forestal: Madrid, capital europea de los Ministros Forestales, por José María Solano López

69 Forestales Ilustres: Hilarión Ruiz Amado (1832-1906): Un estudioso de la topografía, por Francisco Grimalt Falcó

70 Decíamos ayer: Efectos económicos marginales de las inversiones del Estado en el área forestal, por Javier Prats Llaurado

71 Fue noticia74 In memoriam75 Agenda77 Libros y Revistas80 Anuncios por palabras82 Normas de publicación83 Tarjetero comercial

Revista Montes Nº 122Cuarto Trimestre 2015

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Foto de portada: Serbal bajo la nieve (Valle de Ordesa). Autor: Gonzalo Varas. Blog “CorZalografías”. http://www.corzo.info/v_portal/apartados/apartado.asp?te=73&kw=01-Reportajes

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Editorial

El dinero sí creceen los árboles

Un dicho común cuando los gastos o ingresos parecen poco realis-tas o excesivos es “el dinero no crece en los arboles”. Así, irónica-mente, podemos decir que esta afi rmación es especialmente cierta

en el sector forestal. Por una parte, salvo excepciones, el crecimiento de los árboles es relativamente lento en comparación con el de otros cultivos, las extracciones de madera son poco frecuentes y los precios de los productos forestales se mantienen bajos a causa de la competencia de otros materia-les. Y por otro lado, el hecho de que la gestión forestal solo da resultado a largo plazo, constituye un factor importante de disuasión para los posibles inversores.

En los últimos 30 años España ha aumentado su suelo forestal, y sin em-bargo, el dinero destinado por las administraciones para su conservación se ha reducido un 30 por ciento. En estos momentos nos llegan noticias de que la fi nanciación procedente de los fondos de la UE movilizará en el periodo 2014-2020, a través de los 17 Planes de Desarrollo Rural autonómicos y el estatal, 13.000 millones de euros; y de ellos, 2.000 millones estarán desti-nados a impulsar medidas de carácter forestal.

Esperamos y deseamos que la mayor parte de dichos fondos vayan des-tinados a acciones que contribuyan a conservar, recuperar y crear masas forestales, como base de la protección de los suelos y de la gestión sosteni-ble de los recursos generados por el monte, tanto directos como indirectos, dando respuesta no sólo a los grandes retos de carácter medioambiental de este siglo, como la lucha contra el cambio climático, la protección del suelo y los recursos hídricos, la prevención de incendios, etc., sino también a la generación de empleo a corto y largo plazo por las administraciones que gestionan el sector forestal.

Es responsabilidad de las Administraciones públicas el fomento de nuevos bosques y el mantenimiento de un medio natural, que garantiza servicios básicos para la vida: oxígeno, agua y recursos naturales renovables. Una mayor inversión en nuestras zonas forestales, además de crear un importante número de empleos directos, contribuye a mejorar su conservación y gestión, reduciendo los grandes incendios forestales y sus perjuicios ecológicos, ma-teriales y humanos. Invertir en gestión forestal sostenible es invertir en desarro-llo rural y en la calidad de vida de los ciudadanos. Invertir en los montes haría que el dinero, en cierto modo, sí cayera de los árboles.

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Actualidad

Como ya sabéis, el Colegio está organizando la Con-ferencia sobre la Profesión de Ingeniero de Montes, a celebrar los días 15 y 16 de enero de 2016 en la sede del Instituto de la Ingeniería de España, con el objetivo de debatir y extraer conclusiones sobre el estado de la profesión, sus posibilidades de desarrollo con la situa-ción actual de los estudios y títulos por un lado, y con el marco regulatorio y las condiciones del mercado laboral por otro.

Como consecuencia de la Adaptación al Espacio Eu-ropeo de Educación Superior, se está produciendo una reorganización de la formación universitaria. Por otra parte, los cambios habidos en la legislación sobre servi-cios y colegios profesionales y la previsible modifi cación que se va a producir en un futuro en esta materia van a generar un marco diferente en el ejercicio profesional de la ingeniería de Montes.

Entre estos cambios destaca la Ley 17/2009 sobre el libre acceso a las actividades de servicios y su ejercicio, la Ley 25/2009, conocida como Ley Ómnibus, y el R.D. 1000/2010 sobre visado colegial obligatorio, además del borrador de Anteproyecto de Ley de Colegios y Servicios Profesionales, que podría afectar a la colegia-ción, al aseguramiento y a las reservas de actividad de la ingeniería.

Por este motivo es interesante refl exionar juntos sobre temas como el alcance de la habilitación profesional de los nuevos títulos de ingeniería y sus equivalencias, los cambios regulatorios en el marco legislativo que regula la actividad de la profesión y la situación del mercado.

Otro asunto importante a analizar es la necesidad de difundir las múltiples capacidades que tienen los ingenie-ros de Montes, con la fi nalidad de posicionarnos, por un lado, como auténticos expertos en el ámbito forestal y por otro, como técnicos competentes en un amplio abanico de actividades cubiertas por nuestro plan de estudios, a pesar de no estar socialmente asociadas a nuestra titulación.

A partir del análisis de la situación, se intentará esta-blecer una estrategia para dar un futuro sólido a la Inge-niería de Montes, para lo cual, aparte de lo expuesto, también es vital que las empresas, las administraciones y la sociedad en general, conozca las capacidades del ingeniero de Montes.

Las áreas temáticas serán las siguientes:•  La formación académica•  El marco regulatorio•  La actividad profesional

– Administración – Empresas

La inscripción a la conferencia será GRATUITA y se tramitará exclusivamente de forma telemática a través de www.conferencia.ingenierosdemontes.org, hasta el 31 de diciembre de 2015.

El seguimiento de la Conferencia podrá realizarse de forma presencial u online.

Cualquier interesado podrá enviar sugerencias y apor-taciones acerca de esta conferencia profesional al mail [email protected] acerca de esta conferencia profesional al mail

En marcha la Conferencia sobre la Profesión de Ingeniero de Montes

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Actualidad

1. INTRODUCCIÓN

Mediante la Ley 21/2015, de 20 de julio, por la que se modifica la Ley 43/2003, de 21 de noviembre, de Montes (en adelante, LMLM), y que ha entrado en vigor el 21 de octubre de 2015 conforme señala su Disposición final séptima, se ha reformado ampliamente la citada Ley de Montes de 2003, que constituye la norma básica estatal prevista en el artículo 149.1.23ª de la Constitución, y cuya importancia para el sector forestal, por tanto, no es preciso subrayar. La intención de este artículo, correspondiendo a lo que esta Revista nos ha pedido, no es hacer un análisis académico por-menorizado de la LMLM, sino presentar un primer juicio (exclusivamente personal y divulgativo, y lo más breve posible) sobre lo que supone la Ley en su conjunto, y so-bre las novedades que ha introducido en la legislación forestal básica. En este sentido, hemos optado por anali-zar cinco de los principales aspectos del sector forestal: la defensa de la propiedad de los montes públicos; la regulación de los montes privados especiales; la ordena-ción forestal y el uso y aprovechamiento de los montes; los incendios forestales; y la fiscalidad y profesionalidad del sector. Esta impuesta brevedad conlleva dejar fuera de nuestros análisis algunos relevantes aspectos de la Ley, pero facilita a la vez la valoración global de la oportunidad y acierto de la norma.

Hay que subrayar que el Colegio de Ingenieros de Montes hizo un notable esfuerzo, a lo largo del largo período de debate de la LMLM, para contribuir a su me-jora: remitió al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) varios y extensos escritos de alegaciones, participó en numerosos foros y debates públicos y realizó contactos con los grupos parlamen-tarios. Es de lamentar que este esfuerzo no haya sido más fructífero: pocas de las propuestas del Colegio han sido recogidas en el texto final (y algunas, sólo en el último momento del debate parlamentario) y en cambio sí figuran en él algunos preceptos sobre cuya objetiva in-conveniencia alertó en reiteradas ocasiones el Colegio.

2. ASPECTOS GENERALES DE LA LEY

2.1. La coherencia interna

La reforma producida por la LMLM es amplia, deci-mos, ya que su artículo único realiza 95 cambios en la Ley de Montes, de los cuales la gran mayoría (82) son de modificación; sólo hay ocho adiciones de pre-ceptos y cinco supresiones. Además, y siguiendo una práctica que desde hace años es frecuente, el legislador ha aprovechado el cajón de sastre de las disposiciones adicionales, finales, derogatorias y transitorias, para re-

gular materias que en absoluto están relacionadas con el objeto de la norma, y cuya inclusión sólo ha servido, desde el punto de vista forestal, para incrementar la ya notable polémica que ha acompañado a la tramitación de la Ley. Así, la regulación del trasvase Tajo-Segura ocupa nada menos que cinco preceptos, y en otros dos se habilita al Gobierno para reglamentar el cobro de ayudas directas de la Política Agraria Común y para aprobar un texto refundido de la Ley de prevención y control integrados de la contaminación y de las Leyes so-bre emisiones industriales. Algo parecido podría decirse de las referencias a la caza y a la pesca continental con-tenidas en todo el texto de la Ley, incluyendo su artículo único. Aunque son materias evidentemente propias de la profesión de Ingeniero de Montes, no debe olvidarse que, desde el punto de vista jurídico, la pesca continen-tal no es un aprovechamiento forestal (art. 6.i) de la Ley 43/2003), por lo que no debiera figurar en una Ley de Montes, mientras que la caza, que sí lo es, tiene su pro-pia legislación sectorial en la cual debiera tratarse. Este modo de actuar, que como hemos dicho es frecuente, constituye sin embargo una deficiente técnica legislativa que resta coherencia a las normas, implica una evidente dispersión de la normativa, y otorga rango legal a dis-posiciones que alcanzan las páginas del Boletín sin un debate social suficiente.

2.2. La necesidad de la ley

De toda legislación cabe esperar un mínimo de esta-bilidad, pues es un aspecto esencial de la seguridad jurídica: la obligación que pesa sobre todo ciudadano español (en virtud del artículo 6.1 del Código Civil) de respetar la Ley aunque la ignore, se corresponde con la obligación del legislador de asegurar que la norma pue-da ser conocida y comprendida por todos, para lo cual no ayudan en absoluto las reformas frecuentes, contra-dictorias, y a menudo dispersas, de las Leyes. Guardan permanente actualidad las palabras que Santo Tomás Moro, el gran humanista inglés del Renacimiento (quien por cierto fue proclamado en 2000 santo patrono de los gobernantes y de los políticos) escribía en su celebé-rrimo libro “Utopía” (1516), que trata del país ideal cuyos habitantes “lo que primeramente critican en los demás pueblos es el infinito número de leyes (...) Consideran ex-tremadamente injusto encadenar a los hombres con tales leyes, tan numerosas que es imposible leerlas todas, y tan obscuras que bien pocos pueden comprenderlas”. Esta obligación general es especialmente conveniente en el sector forestal: si en pocos ámbitos la realidad si-gue con rapidez a las leyes, en el forestal menos que en ninguno, puesto que los plazos de éxito o de fracaso se miden en décadas, como mínimo. Así se entendió hasta

Breve repaso de los principales aspectos de la reforma de la Ley Básica de Montes

(Ley 21/2015)Ignacio Pérez-Soba Diez del Corral

Doctor Ingeniero de MontesDecano del Colegio de Ingenieros de Montes en Aragón

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Actualidad

puede negar, pero se olvida que también (y sin que la reforma de 2006 corrigiera nada al respecto) supri-mió numerosos mecanismos de defensa de los montes de utilidad pública que estaban recogidos en la Ley de Montes de 1957, y que resultaban de extraordina-ria importancia. Esta recuperación de las garantías de defensa de los MUP que estuvieron vigentes de 1957 a 2003 fue propuesta en las alegaciones del Colegio de Ingenieros de Montes, con éxito en parte, puesto que cuatro modifi caciones de la LMLM incorporan esas alegaciones:

— La recuperación de la presunción posesoria “iuris tantum” del Catálogo de MUP (nueva redacción del art. 18.1), que es adicional a la del Registro de la Propiedad, y según la cual el propietario público se presume poseedor legal del monte salvo prueba en contrario. Esta presunción constituye una base de extraordinaria importancia para la defensa de la propiedad de los montes catalogados, y su su-presión en 2003 provocaba también problemas de constitucionalidad de varias leyes autonómicas.

— La inmediata nulidad de las actuaciones judiciales sobre MUP en las que no ha sido citada la Adminis-tración Forestal (nueva redacción del art. 18.2). Esta mejora, como la anterior, no fi guraba en el proyecto de Ley aprobado por el Consejo de Ministros, sino que fue introducida en el trámite parlamentario.

— La nueva redacción del artículo 24.5 establece una mayor exigencia para la validez de los títulos de propiedad en los deslindes, superando la ambigüe-dad de la Ley de 2003, que daba valor a los títulos “que la Administración titular y el órgano forestal de la Comunidad Autónoma consideren con valor po-sesorio sufi ciente”.

— La nueva redacción del artículo 16.5 previene la excesiva discrecionalidad para la exclusión del Ca-tálogo de todo o parte de un monte por motivos excepcionales: en la Ley de 2003, cabía la desca-

2003: la primera Ley de Montes española (la de 24 de mayo de 1863) estuvo en vigor noventa y cuatro años, mientras que la segunda (la de 8 de junio de 1957), lo estuvo cuarenta y seis.

En cambio, la LMLM supone la tercera reforma que sufre la Ley básica de Montes de 2003 en menos de doce años, pues ya había sufrido numerosos cambios en virtud de la Ley 10/2006, de 28 de abril, y una reforma mucho menor (la introducción del artículo 15.5) como consecuencia de la llamada “Ley Ómnibus” (Ley 25/2009, de 22 de diciembre, de modifi cación de di-versas leyes para su adaptación a la Ley sobre el libre acceso a las actividades de servicios y su ejercicio). De hecho, la LMLM no sólo altera el texto original de la Ley, sino que con frecuencia cambia también las modi-fi caciones introducidas en 2006, de manera que hay preceptos que desde 2003 han tenido tres redacciones distintas. Como, a su vez, la reforma de la Ley básica implica la necesidad de adecuación de las leyes au-tonómicas a su nuevo texto, se crean incoherencias y contradicciones entre el nuevo texto básico y las leyes autonómicas que fueron aprobadas teniendo a la vista legislaciones básicas distintas, según se redactaran an-tes de 2003, entre 2003 y 2006, entre 2006 y 2015, o a partir de ahora.

En este sentido, el preámbulo de la LMLM no se es-fuerza demasiado, a nuestro juicio, en justifi car su pro-pia necesidad, que resuelve del siguiente modo: “se han detectado algunos aspectos que es conveniente mejorar; otros que, debido al desarrollo posterior de la legislación nacional o autonómica, es preciso adaptar; y, fi nalmente, otros en cuyo desarrollo hay que avanzar más”. Es cierto que tanto la Ley de 2003 como su refor-ma de 2006 no destacan por su calidad técnica, y han creado no pocos problemas, pero la LMLM no parece seguir en sus reformas ningún plan coherente, y en par-ticular no atiende las críticas que la doctrina jurídica y los agentes del sector han hecho de las leyes que ahora se modifi can.

3. DEFENSA DE LA PROPIEDAD FORESTAL PúBLICA

Ocioso es aquí recordar la importancia que para la conservación de la Naturaleza y la ordenación del te-rritorio tienen los montes públicos, y muy singularmente los montes de utilidad pública (MUP). En estos últimos, la funcionalidad está muy estrechamente ligada a la pro-piedad, y la defensa de la primera presupone la necesi-dad de garantizar la integridad de la segunda. Por eso, a nuestro juicio, toda reforma de la Ley de Montes de 2003 se hubiera debido basar, en cuanto a defensa de la propiedad forestal pública, en dos objetivos: 1) corre-gir la desprotección legal de la propiedad de los MUP que fue irrefl exivamente hecha por la ley de 2003; 2) crear nuevos mecanismos de protección legal de dicha propiedad.

3.1. Desprotección legal de los MUP causa-da por la Ley de Montes de 2003

En lo que se refi ere al primer objetivo, puede sorpren-der que afi rmemos que en 2003 hubo una desprotec-ción de la propiedad forestal pública catalogada. La doctrina ha subrayado que esa Ley dio la total impres-criptibilidad a los MUP, hecho cuya importancia no se

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Actualidad

talogación excepcional de parte de un MUP “por razones distintas a las previstas en el apartado ante-rior” (es decir, sin haber perdido las condiciones que justifican la catalogación), mientras que la LMLM exige acuerdo del máximo órgano de gobierno de cada comunidad autónoma y la existencia de una “causa de interés público prevalente”.

Sin embargo, todas las demás garantías cuya recu-peración fue propuesta en las alegaciones colegiales no han sido incluidas en la LMLM. Así, han quedado sin respaldo legal aspectos tales como la exención del cumplimiento de las “sentencias clandestinas” sobre la propiedad de montes catalogados (es decir, de aquellas dictadas en procedimientos en que no ha sido citada la Administración Forestal), la consideración como públicos de los montes con dominio disociado o el mantenimiento en todo caso del estado posesorio de los MUP a favor de las entidades públicas.

3.2. Nuevos mecanismos de protección le-gal de la propiedad de los MUP

Si la recuperación de las garantías legales que con-templaba la Ley de 1957 para la propiedad de los MUP no ha sido completa, hay que decir que no sólo no se crean nuevas garantías, sino que se retrocede en dos aspectos, sobre lo cual también alertaron las alegacio-nes del Colegio de Ingenieros de Montes, sin que fue-ran atendidas. Así, la nueva redacción del artículo 20.1 ha eliminado la potestad de la Administración Forestal autonómica para investigar la propiedad de los MUP municipales. De este modo, la única administración que eficazmente ha desempeñado esta labor queda relega-da a un mero papel de colaboradora de las entidades propietarias.

Por otra parte, la reforma del artículo 18.3 ha elimina-do la posibilidad de inscribir un MUP en el Registro usan-do como la cartografía del Catálogo o la del deslinde aprobado y firme: toda inmatriculación deberá aportar como base cartográfica la certificación catastral descrip-tiva y gráfica. Esta última reforma es un paso más en las leyes que desde 1996 han ido otorgando al catastro un papel jurídico que cabe calificar de desproporcionado, y cuyo máximo exponente es la Ley 13/2015, de 24 de junio, de reforma de la Ley Hipotecaria y de la Ley de Catastro Inmobiliario, promulgada sólo unas semanas antes de la LMLM. Es indiscutible la necesidad de dotar de una estrecha relación al catastro y al Registro de la Propiedad, y es extraordinaria la importancia del catas-tro como herramienta de conocimiento de la propiedad rural, pero es igualmente innegable la gran cantidad de errores, cartográficos y jurídicos, que contienen los actuales catastros. Por eso, dificultar el acceso directo e inmediato al Registro de la cartografía forestal oficial, en particular la de los deslindes, que está hecha con una calidad jurídica y técnica mucho mayor que la catastral, constituye un error grave.

Debemos, por último, subrayar que estos errores y omi-siones de la Ley de Montes en materia de propiedad no son salvables por una posible vía reglamentaria, ya que la doctrina del Tribunal Constitucional establece que la limitación de la propiedad tiene reserva de ley, es decir, es un ámbito de libertad ciudadana que sólo puede ser regulado por una norma con rango de Ley, y no por el ejecutivo ni, en consecuencia, por los reglamentos.

4. RÉGIMEN JURÍDICO DE LOS MONTES PRI-VADOS DE RÉGIMEN ESPECIAL

Un aspecto no siempre suficientemente atendido por las Leyes forestales ha sido el de la propiedad forestal pri-vada, que constituye, de hecho, la mayor parte de la su-perficie forestal española. En este aspecto, varias tipo-logías de montes privados cuentan con una regulación legal propia, de las cuales la más completa es la de montes vecinales en mano común (MVMC), que cuenta incluso con una Ley nacional propia (Ley 55/1980, de 11 de noviembre), y que en la práctica apenas se ha visto afectada por la reforma que comentamos, que ha alterado la redacción del artículo 11.4 pero sin ningún cambio significativo.

Los otros montes de propiedad privada que pueden considerarse de régimen especial son los protectores, los de socios y las sociedades forestales. Acerca de ellos, como hemos hecho en el apartado anterior, podríamos entender que la Ley tenía estos deberes: 1) corregir la extraordinaria confusión causada por la Ley 10/2006, de 28 de abril, en la figura del “monte protector”; 2) avanzar en la definición legal de los montes de socios; 3) favorecer la gestión de las micro-propiedades fores-tales divisas.

La Ley, en nuestra opinión, ha cumplido plenamente el primer objetivo, aunque sea, de nuevo, sólo corrigiendo un desacierto previo. En efecto, la Ley de 2006 recogió (además de los MUP) otras dos categorías de montes protegidos (protectores y “con otras figuras de protec-ción”) que podían afectar indistintamente a montes pú-blicos o privados, definiendo cada una de ellas con unas listas extremadamente artificiales y llenas de sola-pamientos, creando una complicación casi inextricable que condujo a la general inaplicación de esta reforma. La Ley de 2015, al dar nueva redacción a los artículos 13 y 24, vuelve a la situación de 2003, con ligeras correcciones adicionales, lo que parece muy oportuno.

Los montes de socios, como es sabido, son propie-dades indivisas que por distintos motivos (en particular, por la atomización de su propiedad) no pueden regirse por las normas generales del Código Civil. Salieron de su casi absoluta orfandad legislativa gracias a la Dispo-sición Adicional 10ª de la Ley de 2003, que permitió crear Juntas Gestoras regidas por normas distintas a las del Código, y que se han materializado en nuestro país gracias, sobre todo, al Programa “Montes de Socios” que desarrolló la Asociación Forestal de Soria (ASFO-SO) dentro de la Red Rural Nacional del MAGRAMA. Acerca de estos montes, es de lamentar que la LMLM haya desaprovechado un trabajo previo muy interesante e impulsado por la sociedad civil: el del grupo de traba-jo nacional constituido en el seno del citado Programa, con participación de la Administración del Estado, de varias Comunidades Autónomas y de expertos indepen-dientes, que aprobó en mayo de 2013 (en una reunión habida en el Colegio de Ingenieros de Montes en Ma-drid) una propuesta de normativa articulada sobre mon-tes de socios. Esa propuesta figuró en el anteproyecto de LMLM sometido a primera consulta pública pero, desgraciadamente, no en el proyecto de Ley aprobado por el Consejo de Ministros; es más, el proyecto desna-turalizaba de tal modo la D.A. 10ª de la Ley de 2003, que la hacía ya no inservible, sino perjudicial para la conservación de este tipo de propiedad.

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Actualidad

Gracias al empeño de varias personas e instituciones, entre ellas ASFOSO y el Colegio de Ingenieros de Mon-tes, ha podido corregirse parcialmente el proyecto en el trámite parlamentario, de modo que el nuevo artículo 27bis contiene sobre los montes de socios tanto elemen-tos positivos como otros negativos. Entre los primeros, destaca la prohibición de la división de la cosa común mientras no esté totalmente identificada la propiedad de un monte de socios, o que expresamente se ordene la identificación fiscal de las Juntas Gestoras. Entre los se-gundos, un evidente (e insistentemente denunciado) error de concepto, pues define los montes de socios como aquellos “cuya titularidad corresponde, en pro indiviso, a varias personas y alguna de ellas es desconocida”, cuando lo que les caracteriza no es la existencia de copropietarios desconocidos (aunque muy a menudo los haya), sino que sean comunidades de bienes que no pueden gestionarse por el Código Civil. No es un error sin consecuencias: habrá montes que tendrán su titulación esclarecida o no alternativamente, de modo que se aplicarán normas distintas a una misma realidad atendiendo a una circunstancia meramente accidental. Por otra parte, no se avanza nada en la actualización de titulación de estos montes, salvo la indisimulada ape-tencia que el Ministerio de Hacienda manifiesta en la LMLM por adquirir la propiedad de porciones no escla-recidas de estos montes, evidentemente para venderlas. Y se elimina la anterior exigencia, para constituir una junta gestora, de un previo acuerdo de al menos once condueños, lo cual evitaba iniciativas individuales con fines poco claros, iniciativas que ahora pasan a ser, la-mentablemente, posibles.

Por último, en cuanto a la creación de medidas para incentivar la gestión de micro-propiedades forestales di-visas, la LMLM incluye (en la nueva redacción de la D.A. 5ª y la nueva D.A. 13ª) una innovación prometedora, al extender a toda España las Sociedades Forestales que se han promocionado recientemente en Galicia (Decreto 45/2011, de 10 de marzo, de la Junta de Galicia), y que son sociedades de responsabilidad limitada cons-tituidas por titulares de derechos de uso de pequeñas

parcelas forestales. La LMLM permite la participación minoritaria de no propietarios en las Sociedades, esta-blece su naturaleza jurídica básica, las asocia a la Ley de Sociedades de Capital y establece para ellas (en la única medida de fiscalidad forestal contenida en toda la Ley) una deducción en el Impuesto de Sociedades.

5. ORDENACIÓN FORESTAL, USO Y APROVE-CHAMIENTO DE LOS MONTES

Acerca de estas muy importantes materias, encontra-mos, como en los anteriores casos, una de cal y otra de arena. Entre los aspectos positivos, debe valorarse el nuevo apartado l) del artículo 3, que califica a los montes españoles de cualquier titularidad como “infraes-tructuras verdes”, lo cual permite incluir en el futuro las medidas forestales entre las que se tomen para aplicar la Comunicación de 6 de mayo de 2013, de la Comi-sión al Parlamento Europeo, al Consejo, al Comité Eco-nómico y Social Europeo y al Comité de las Regiones, titulada «Infraestructura verde: mejora del capital natural de Europa». Igualmente, se aceptó en el trámite parla-mentario una importante alegación del Colegio de Inge-nieros de Montes (nueva redacción del artículo 39): la evidente prevención, incomprensiblemente omitida por las leyes anteriores, de que todos los montes de dominio público (incluyendo por tanto a los MUP) sean clasifica-dos como no urbanizables, como habían dispuesto ya muchas legislaciones autonómicas (La Rioja, Aragón o Castilla-La Mancha, entre otras). Es de lamentar que no se admitiera la alegación completa, puesto que se pro-ponía también dicha clasificación urbanística para los montes protectores, así como otras protecciones del uso del suelo forestal, como la prohibición o limitación de nuevas roturaciones con fines agrícolas en montes cata-logados y protectores, o la introducción de mecanismos de salvaguarda del terreno forestal en las concentracio-nes parcelarias.

También entendemos positiva la nueva redacción dada al artículo 54bis de la Ley de Montes, que se re-

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fiere a la circulación de vehículos a motor por montes de cualquier propiedad. Este artículo había sido introducido mediante enmienda parlamentaria en la Ley de 2006, conllevando una gran polémica (incluso fue objeto de dos recursos de inconstitucionalidad por las Comunida-des Autónomas de La Rioja y de Castilla y León), y ve-nía a prohibir con carácter general (y al mismo tiempo con muchas salvedades extremadamente ambiguas), en toda España y en todo tipo de montes, la circulación de dichos vehículos por las pistas forestales (categoría esta que, por cierto, no se definía). No queremos entrar en la crítica de este precepto: baste señalar que sus defectos habían conducido a su inaplicación, por lo que su reforma parecía inevitable. La LMLM ha optado por encargar la regulación de esta materia a las Comunida-des Autónomas.

Un aspecto que ha levantado polémica ha sido la reforma de la obligación de ordenar los montes. A este respecto, la Ley básica de montes ha sufrido cambios bruscos: en 2003 establecía que todos los montes públi-cos debían contar con un instrumento de ordenación en un plazo de quince años (art. 33.2 y Disposición Transi-toria 2ª), mientras que las Administraciones “impulsarían” la ordenación de los demás (art. 33.1). La reforma de 2006 fue mucho más allá, y estableció que todos los montes (públicos y privados) debían contar con dicho instrumento, salvo los de superficie inferior al mínimo que determinarían las comunidades autónomas. La reforma de 2015 (nueva redacción del art. 33.2) sólo obliga a la ordenación de los montes de utilidad pública y pro-tectores (lo cual supone volver a la situación anterior a 2003; véase el artículo 204 del Reglamento de Montes de 1962), y por otra parte (nuevo artículo 32.4) permite a las Comunidades Autónomas aprobar “modelos tipo” de gestión forestal “para aquellos montes cuyas caracte-rísticas así lo permitan”, a los que se pueden adherir los propietarios de montes, adhesión que implica considerar el monte “ordenado”.

Las críticas a esta reforma han subrayado el retroceso que supone reducir la obligación de contar con instru-mentos de ordenación, retroceso que, en realidad, es más bien teórico, puesto que ningún efecto han tenido las leyes a partir de 2003 para impulsar significativa-mente la ordenación de los montes, a lo que no es ajeno el que ninguna de las leyes haya ofrecido a los propieta-rios un incentivo o una ventaja comparativa por ordenar la producción de sus montes. Creemos no obstante que la crítica teórica principal que se le puede hacer es que incurre de nuevo en una confusión de concepto, que es común en los últimos años, y que consiste en identificar la gestión forestal sostenible con la ordenación de mon-tes. De hecho, la nueva redacción del artículo 32.2 ya no se refiere a las directrices básicas comunes de orde-nación de montes, sino a las de “gestión forestal sosteni-ble”. Y sin embargo, no son conceptos idénticos: la ges-tión forestal sostenible, según la Conferencia ministerial sobre protección de bosques en Europa (Helsinki, 1993) es un modo de administración y uso de los montes que permita mantener su potencial sin causar daño a otros ecosistemas, mientras que la ordenación tiene como fin primordial la organización económica (igualmente soste-nible) de las producciones forestales. Es decir: si de lo que se trata es de planificar aprovechamientos de ma-nera sostenible, no basta un “modelo de gestión”, sino que entramos en el ámbito de la ordenación; intensa o simplificada, comarcal o de monte, pero ordenación.

6. INCENDIOS FORESTALES

Pero sin duda el aspecto que ha levantado más polé-mica durante la tramitación de la Ley, y que (desgracia-damente) ha sido casi el único cuyos ecos, totalmente distorsionados, han llegado a la opinión pública, ha sido la reforma del artículo 50.1, el que contenía hasta ahora la prohibición casi total de cambiar el uso de un terreno forestal durante treinta años, por el mero hecho de haber sufrido un incendio. El debate en los medios de comunicación y en los círculos políticos acerca de este aspecto concreto de la Ley ha adoptado a menudo un carácter sensacionalista y totalmente alejado de la realidad jurídica, e incluso de cualquier realidad.

Debemos recordar el estado de la cuestión antes de la reforma de 2015. Existe un consenso general, basado en el mero sentido común, de que la legislación no debe permitir que un incendio sirva para cambiar el uso de un terreno forestal. Pero es que el texto original del artículo 50.1 la Ley de 2003 era totalmente adecuado para dicho fin: “Queda prohibido autorizar la pérdida de uso forestal de un terreno por razón de un incendio”. Sin embargo, la reforma de 2006 cambió la redacción del precepto, que pasó a rezar así: “queda prohibido (…) el cambio de uso forestal al menos durante 30 años”, contemplando, como únicas excepciones “singulares”, el que antes del incendio el cambio de uso estuviera previsto en un instrumento de planeamiento aprobado o con evaluación ambiental favorable, o en una “directriz de política agroforestal”.

Obsérvese que la reforma de 2006 prohibió, sin casi excepciones, cualquier pérdida de uso forestal (no sólo la urbanización, sino también la roturación, o la cons-trucción de una obra pública) durante “al menos” treinta años en los terrenos incendiados de cualquier propie-dad, independientemente de la causa del incendio, y por tanto aunque el propietario de los terrenos no tenga relación alguna con tal causa (como en los causados por rayo); es más, aunque el incendio se haya hecho con la probada intención de perjudicar al propietario. Por tanto, la reforma de 2006 no aportaba nada a la protección de los montes contra los incendios, ni mucho menos a combatir sus causas. En primer lugar, porque en el conjunto de España no es una causa principal de incendios la búsqueda de la pérdida de uso fores-tal, y por tanto, esa prohibición es, en el mejor de los casos, inútil. Pero es que en el peor de los casos es contraproducente, puesto que la misma Ley pasa a ser una herramienta para que los incendiarios provoquen incendios cuyo fin sea lesionar legítimos derechos de los propietarios de terrenos forestales (por ejemplo, queman-do terrenos que se vayan, con toda legalidad, a roturar para uso agrícola).

Por tanto, lo que procedía, y lo que propuso el Co-legio de Ingenieros de Montes, era recuperar la redac-ción original del artículo 50.1 en la primitiva Ley de 2003, que es incluso más radical que la introducida en la reforma de 2006, ya que, como se ve, establecía una prohibición perpetua, basada sólo en que nadie, nunca, pueda causar un incendio para sacar provecho de él. Pero en lugar de aceptar esta sencilla propuesta, la LMLM ha optado por hacer una confusa segunda reforma del artículo 50.1, que señala que las Comuni-dades Autónomas, o el Estado en determinados casos, podrán acordar el cambio de uso “cuando concurran razones imperiosas de interés público de primer orden

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que deberán ser apreciadas mediante ley, siempre que se adopten las medidas compensatorias necesarias que permitan recuperar una superfi cie forestal equivalente a la quemada”, excepción que no es aplicable a los MUP. No deja de constituir un mero parche, que no remedia en absoluto el problema al que se enfrentan desde hace años los propietarios privados de terrenos forestales.

De igual manera, es de lamentar que la reforma del artículo 48 haya suprimido la posibilidad (contemplada en el anteproyecto) de declarar zonas de riesgo medio (no sólo “alto”) de incendio forestal, lo cual impide que estas zonas puedan recibir las ayudas previstas en el Reglamento (UE) nº 1305/2013, de 17 de diciembre de 2013, relativo a la ayuda al desarrollo rural a través del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader). Y tampoco puede considerarse acertada la reforma del ar-tículo 46, que suprime la referencia al Comité de Lucha contra Incendios Forestales (CLIF), uno de los órganos de coordinación interadministrativa forestal que ha resultado más útil, y cuya existencia depende ahora sólo de lo que decida (según la nueva redacción del artículo 10.2) el futuro Consejo Forestal Nacional.

7. FISCALIDAD Y PROFESIONALIDAD DEL SEC-TOR FORESTAL

Como señala el Plan de activación socioeconómica del sector forestal publicado por el MAGRAMA en 2014, en España no hay una fi scalidad adecuada y estable para los montes. La fi scalidad avanza en este sector a bandazos, que a veces son positivos (como el régimen especial creado para los MVMC en 1998,

o la reforma fi scal del sector resinero hecha en 2014), pero que en todo caso no responden a ninguna visión de conjunto: el sector forestal (el 1,4% del PIB español en 2013) no es visible para Hacienda. Para promover la creación de esta fi scalidad se publicó 2015 la decla-ración “Despertar los montes con una fi scalidad forestal específi ca”, suscrita por asociaciones de empresarios y de propietarios forestales (COSE, ASEMFO, ASPAPEL, ACEMM, AVEBIOM, Unión por la Biomasa), y por los Colegios de Ingenieros de Montes y de Ingenieros Técni-cos Forestales, con concretas propuestas para crear esta fi scalidad. Pero, fi nalmente, la LMLM no incluye más me-didas concretas en ese sentido que las ya mencionadas para los montes de socios (y que se limita a su iden-tifi cación) y para las Sociedades Forestales. Fuera de ellas, sólo cabe reseñar la nueva redacción del artículo 63.2, que señala que “las administraciones facilitarán el desarrollo de instrumentos basados en el mercado para abordar efi cazmente la conservación y mejora de los ac-tivos naturales o de los servicios que estos prestan”, pero hay que recordar que mandatos similares ya fi guraban en la Ley de 2003 o en la Ley 2/2011, de 4 de mar-zo, de Economía Sostenible (cuyo art. 89.2 trata de la capacidad de absorción de los sumideros españoles de CO2), sin que hayan tenido repercusión práctica alguna.

Por último, hay un aspecto en el que la LMLM, simple-mente, no ha entrado: el de la defensa de la profesiona-lidad del sector forestal. Las ingenierías y la arquitectura españolas, al ser profesiones altamente cualifi cadas, cuentan con preceptos legales que exigen, en materias evidentemente relacionadas con una determinada titu-lación, la participación de personas que posean ésta. Es lo que se llama “reserva de actividad”, que no es un

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privilegio obsoleto y corporativista, sino la consecuencia de que la ley debe velar por la capacidad funcional y técnica de los profesionales de un sector, para asegurar lo que la jurisprudencia ha denominado “el principio de libertad con idoneidad”. Este principio está claramente salvaguardado en la Directiva Europa de Servicios, que sólo exige que las reservas se apliquen de manera no discriminatoria, estén justifi cadas por razones imperiosas de interés general (entre ellas, la protección del medio ambiente), sean adecuadas para la realización del ob-jetivo que persiguen y no vayan más allá de lo necesa-rio. Sin embargo, la Ley de 2003 sólo exigió “profesio-nales con titulación forestal universitaria” (art. 33.4) para redactar los instrumentos de gestión de montes, y ello no ha sufrido cambio alguno desde entonces. En ningún momento del debate de la LMLM se ha aceptado la posibilidad de atender las alegaciones que proponían extender esta reserva a actividades tan evidentemente propias de la Ingeniería de Montes como la repoblación forestal, los deslindes y amojonamientos de montes, las declaraciones de utilidad pública de montes, los incen-dios forestales, la restauración hidrológico-forestal, los tratamientos selvícolas, etc.

8. CONCLUSIÓN

Tras concluir este apresurado repaso a la reforma he-cha por la LMLM, vienen a nuestra mente las palabras escritas en la Revista de Montes, hace más de un siglo (en 1912), por el eximio Ingeniero de Montes Antonio García Maceira (1844-1923), quien fue, entre otras mu-chas cosas, uno de los mejores entomólogos forestales de Europa: “Hay en España una incontinencia por legis-lar, en la mayoría de los hombres de gobierno. El afán

pueril por recabar muchas veces elogios; el deseo de dejar su nombre en muchas disposiciones, para alardear en el Parlamento inteligencia y actividad; la vanidad, en fi n, de sobresalir y de adquirir relieve, siquiera sea momentáneo, es causa de atropellos censurables y de disposiciones defectuosas, hijas endebles del gabinete, que no resisten la crítica imparcial ni la comparación con la realidad. Esta afi rmación se hace patente al examinar el fondo de algunas leyes de Montes, las que más recla-man el trabajo de observación y el conocimiento prácti-co de nuestras montañas. Al eludir esa labor necesaria, resultan leyes defectuosas, leyes falsas, leyes muertas y sin efi cacia, que no pueden servir para otra cosa que para ocupar largas columnas en la Gaceta, rellenando después los tomos de legislación; pero que de ningún modo aprovechan como guías fi eles del trabajo, ni pue-den ser motivo de ilustración ni de estudio”.

No queremos decir que este sea también nuestro jui-cio global sobre la Ley cuyo somero análisis nos ha en-cargado esta Revista, pero sí nos sirve para ilustrar nues-tro convencimiento de que el sector forestal necesita una ley global, estable, de buena calidad técnica y cercana a los problemas reales del sector. La tuvo, en nuestra opinión, en la Ley de Montes de 8 de junio de 1957, cuya calidad técnica (más allá de las circunstancias po-líticas en las que vio la luz) es unánimemente reconoci-da. Pero no la ha tenido desde 2003, y esta valoración de conjunto de la LMLM que ahora nos ocupa (cuyos méritos y aciertos parciales, como se puede ver, también existen) conduce a la misma impresión que producían las leyes ahora reformadas: tantas cosas remedia como las que complica; no trae como resultado esa Ley global, acertada, estable y de calidad, sino que constituye, mu-cho nos tememos, “otra Ley más”.acertada, estable y de calidad, sino que constituye, mu-

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Entrevista

Entrevista a Víctor Manuel Sarabia Herrero

Ingeniero de Montes. Director General de Servicios de Limpieza y Residuos del

Ayuntamiento de MadridIngeniero de Montes por la Universidad Politécnica

de Madrid (1995). Trabajó en TRAGSATEC desde 1996 a 1999 organizando y coordinando, en Andalucía, la gestión de expedientes de ayuda a trabajos forestales en montes en régimen privado (Subprograma 2 del en-tonces FEOGA – Orientación). En 1999 se trasladó a Madrid, desde donde realizó Proyectos de Ordenación de Montes y pastos en diversas partes de España, y también participó en otro tipo de proyectos como el de construcción del Parque Forestal de Valdebebas (Ma-drid). En 2007 fue nombrado funcionario de carrera de los Cuerpos Superior y Técnico de Gestión Catastral, del entonces Ministerio de Economía y Hacienda. Tras pa-sar una temporada en la Delegación de Gerona pasó a la de Madrid y, finalmente, ingresó en el Ayuntamiento en el año 2009. Ha desempeñado varios puestos en las Áreas de Gobierno de Seguridad y Emergencias, y Medio Ambiente y Movilidad, hasta el que desempeña actualmente.Revista Montes. ¿Qué hace un ingeniero de Montes

como responsable de la limpieza y la gestión de los residuos de la ciudad de Madrid?

Víctor Manuel Sarabia Herrero. Trabajar mucho e inten-tar aprender todos los días acerca de una actividad que hasta hace pocos años era totalmente desconoci-da para mí. Si a lo que te refieres es a cómo he aca-bado aquí, la respuesta es con esfuerzo y dedicación. He trabajado en temas muy variados a lo largo de mi vida profesional (desde contar árboles hasta hacer ins-pecciones tributarias o hacer auditorías de calidad de la norma ISO - 9001, por citar algunas) y en todas he puesto lo mejor de mí. Todos y cada uno de los traba-jos que he realizado me han gustado, todos los retos que se me han ofrecido los he aceptado; el último y el más importante es en el que estoy ahora.

RM. ¿Cuál es el presupuesto para limpiar las calles y recoger la basura de la capital de España? ¿Es suficiente?

VMSH. El presupuesto de limpieza y recogida de resi-duos en Madrid supera los 350 millones de euros al año, contando todos los servicios: limpieza viaria y SELUR (servicio público de limpieza urgente), recogida de RSU incluida la del vidrio y cartón, mantenimiento de contenedores y papeleras, y gestión de puntos lim-pios. Se trata de unos servicios de gran entidad, dado que se trata de una ciudad con más de tres millones de habitantes. En cuanto a si ese presupuesto es o no suficiente, eso depende del servicio; en general el ser-vicio de recogida de residuos está bien dimensiona-do dado que se paga por tonelada entregada en el Parque Tecnológico de Valdemingómez. Del resto de servicios también puede decirse que el dinero es sufi-ciente, aunque por supuesto podrían mejorar si se am-pliara el presupuesto, excepto el servicio de limpieza. El servicio de limpieza ha sido objeto de importantes recortes en los últimos años, lo que ha llevado consigo

una disminución de medios que hace que actualmente no sea suficiente para limpiar las calles a la misma velocidad a la que se ensucian, aunque lo sería si se ensuciaran menos.

RM. ¿Cuáles son los principales retos a los que te estás enfrentando?

VMSH. El principal reto es sin duda la gestión del per-sonal. En esta Dirección general trabajan cerca de cuatrocientos funcionarios, a los que hay que añadir cerca de seis mil personas contratadas por los conce-sionarios, que trabajan en tres turnos de trabajo todos los días del año. Esto exige una gestión muy minuciosa y continuada que se lleva gran parte del tiempo.El segundo reto es la gestión y control de los servicios por el mismo motivo: su entidad, a la que en este caso hay que añadir que se prestan de cara al ciudadano, por lo que debe ponerse en ellos mayor cuidado y respeto si cabe. Aunque en esta Dirección General hay grandes profesionales, como también los hay en las empresas concesionarias, las directrices y líneas estratégicas las marca el director, en coordinación con los responsables políticos, por lo tanto todo el mundo espera de ti una dirección adecuada, que haga que sus esfuerzos y el dinero de los ciudadanos rindan al máximo, y eso es una gran responsabilidad y, por lo tanto, también un reto importante.

RM. ¿Crees que los ingenieros de Montes están capa-citados para dirigir departamentos técnicos de medio ambiente de las ciudades, no sólo en el ámbito de la jardinería y los parques forestales?

VMSH. Estoy seguro de que están preparados en tanto en cuanto que son ingenieros. El medio ambiente ur-bano tiene una fuerte carga de gestión económica, de personal y de medios. Hay que diseñar servicios, programarlos y presupuestarlos, pero también hay que planificar a todos los niveles, desde el estratégico al operativo. Nuestra formación debe tener, y lo tiene, un importante componente verde, con esto quiero decir de conocimiento de la naturaleza y de los ecosistemas y biotopos forestales, pero también lo tiene de ingenie-

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Entrevista

ría y planifi cación, y es este segundo componente el que te prepara para este tipo de trabajos de marcado cariz industrial. Industrial, sí, pero con unas evidentes e importantísimas repercusiones medioambientales.Si me permites que exprese una opinión, se debe cui-dar mucho que los aspectos de planifi cación, gestión de equipos y procesos, análisis y cálculo, sigan estan-do presentes en la formación de los futuros ingenieros de Montes (sin desmerecer al resto, por supuesto) por-que son los que nos diferencian de otras disciplinas medioambientales y nos permiten abrir nuestro campo de actuación profesional.

RM. ¿Has necesitado formación complementaria para comprender el mundo de los residuos urbanos, o bas-ta con la experiencia?

VMSH. Digamos que no he tenido esa formación com-plementaria, aunque me hubiera venido bien. He teni-do que aprender con la experiencia, y llevo tan sólo cuatro años dedicándome a este tipo de trabajos, con lo que he tenido que aprender deprisa. Afortunada-mente todo este tiempo he formado parte de equipos de profesionales con amplios conocimientos y expe-riencia en este tema, y eso me ha ayudado mucho. Esos mismos equipos siguen formando parte de esta Dirección, por lo que sigo contando con su apoyo y aprendiendo de ellos cada día.

RM. ¿Cómo pueden acceder los compañeros que estén interesados a estos puestos?

VMSH. Bueno, en este caso en concreto, lógicamente, es necesario aprobar una oposición, y no tiene que ser forzosamente una oposición a los cuerpos tradicio-nales de la Administración General de Estado o de las Comunidades Autónomas, nuestra profesión da para mucho más. En mi caso concreto, soy funcionario del Ministerio de Economía y Hacienda, actualmente pres-tando servicios en el Ayuntamiento de Madrid. Lo que hace falta es amplitud de miras y voluntad de aprender cosas nuevas, no cerrarse a nada y acep-tar los retos que se te vayan planteando, que seguro

que se te plantean, con confi anza y dedicación.RM. ¿Están preparados los ingenie-ros de Montes para asumir respon-sabilidades en puestos políticos de primer nivel como el tuyo?VMSH. Por supuesto que lo están, la prueba es que los hay, los ha habido y los habrá. El ingeniero de Montes es una persona que, a lo largo de su formación, ha tenido que domi-nar materias muy variadas, desde el cálculo de estructuras a la botánica o zoología, pasando por la física, las matemáticas, la química o la ordenación de montes. No se pue-de ser exhaustivo, son infi nidad de materias que conforman una menta-lidad capaz de comprender, asumir y gestionar aspectos complejos y de tomar decisiones sabiendo las conse-cuencias que pueden tener, aunque éstas abarquen diferentes ámbitos de conocimiento.Este tipo de decisiones son las que se toman en estos puestos, y por eso

pienso que los ingenieros de Montes estamos tan pre-parados como los demás para tomarlas.

RM. ¿Cuál es su opinión sobre la nueva Revista Montes?VMSH. Siempre que he leído la Revista Montes lo he

hecho con mucho interés, como una de las pocas pu-blicaciones en la que se podía encontrar información acerca de nuestra profesión, aunque tal vez demasia-do restringida a lo que es la actividad del profesional o investigador forestal “sensu stricto” poniendo menos atención en los profesionales que, como en mi caso, se salían un poco de la norma. Creo que el hecho de hacer esta entrevista demuestra que la Revista, en esta nueva etapa, ha tomado cons-tancia de este hecho y ha decidido ampliar su campo de actividad para mostrar a los ingenieros de Montes presentes y futuros todas las puertas a las que pueden llamar y todos los puestos a los que pueden aspirar con su formación. Eso es un gran acierto, os deseo la mejor de las suer-tes en esta nueva etapa.

RM. Por último, un mensaje que quiera transmitir a los lectores.

VMSH. Pues, abundando en lo anteriormente dicho, quiero decir que no pierdan de vista la componente de ingeniería que tiene nuestra profesión, que hace que seamos capaces de ingeniárnoslas en casi cual-quier situación.Ese ser ingenieros y a la vez naturalistas nos permi-te ver con claridad que los bosques son un recurso fundamental para facilitar y dar calidad a la vida de las personas y, paralelamente, nos permite calibrar las consecuencias que las actividades humanas tienen sobre el medio ambiente. Estos dos puntos son funda-mentales para poder optimizar los recursos y minimi-zar los impactos, y son escasos los profesionales que son capaces de alcanzarlos con solvencia.Nuestra profesión consta de tres palabras, y la prime-ra es Ingenieros. Seamos ingenieros y mostrémonos en todo momento orgullosos de serlo.ra es Ingenieros. Seamos ingenieros y mostrémonos en

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Ciencia y Técnica

Comparación de la efi cacia del mulching y la siembra para Comparación de la efi cacia del mulching y la siembra para Comparación de la efi cacia del mulching y la siembra para reducir la erosión post-incendio en Galiciareducir la erosión post-incendio en Galiciareducir la erosión post-incendio en Galicia

Comparación de la efi cacia del mulching y la siembra para reducir la erosión post-incendio en Galicia

Comparación de la efi cacia del mulching y la siembra para Comparación de la efi cacia del mulching y la siembra para Comparación de la efi cacia del mulching y la siembra para reducir la erosión post-incendio en Galicia

Comparación de la efi cacia del mulching y la siembra para reducir la erosión post-incendio en Galicia

Comparación de la efi cacia del mulching y la siembra para reducir la erosión post-incendio en Galicia

Comparación de la efi cacia del mulching y la siembra para Comparación de la efi cacia del mulching y la siembra para Comparación de la efi cacia del mulching y la siembra para reducir la erosión post-incendio en Galicia

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J. A. Vega Hidalgo1

[email protected]. Fernández Filgueira1

cffi [email protected]. Fonturbel Lliteras1

[email protected] Departamento de Protección Forestal, Centro de Investigación Forestal de Lourizán, Xunta de Galicia.

ResumenEl aumento del riesgo de erosión después de

incendio hace necesario el uso de tratamientos de esta-bilización del suelo en las áreas afectadas por el fuego con mayor severidad. Para ello, es necesario testar la efectividad del tratamiento para ayudar al gestor a la elección del más adecuado. En este trabajo se compara la efi cacia de dos tratamientos de control de la erosión en dos áreas de matorral incendiadas en Galicia: mul-ching y siembra. Durante el primer año post-fuego, solo la adición de mulch redujo de manera signifi cativa las pérdidas de suelo en relación al testigo (suelo quema-do no tratado), sin comprometer la recuperación de la vegetación.

Palabras clave: erosión, tratamientos de estabilización, mulching, siembra.

Foto 1. Vista general del dispositivo experimental de O Irixo (Orense)

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015. Páginas 15-19 – 16 –

Ciencia y Técnica

Comparación de la eficacia del mulching y la siembra para reducir la erosión post-incendio en Galicia

INTRODUCCIÓN

Uno de los efectos ecológicos más graves de los incendios es el incremento de las pérdidas de suelo por erosión (BENAVIDES-SOLORIO y MACDONALD, 2005; FERNÁNDEZ et al., 2011). Los incendios de alta severidad provocan la destrucción de la vegetación y de la cubierta orgánica del suelo, exponiendo el suelo mineral, reduciendo su capacidad de infiltración y alte-rando otras propiedades físicas que lo hacen suscep-tible al impacto de la lluvia (DE BANO et al., 1998; SHAKESBY y DOERR, 2006). La aplicación urgente de tratamientos de estabilización del suelo, después del fue-go, constituye el primer paso para la restauración de áreas incendiadas, al minimizar el riesgo de escorren-tía y erosión (NAPPER, 2006; VEGA et al., 2013a). El NW de España es una de las áreas de Europa con mayor número de incendios forestales (SAN MIGUEL y CAMIA, 2009). Además, esta es la región española que registra las mayores pérdidas de suelo después de incendio (CERDÁ y MATAIX-SOLERA, 2009) debido a la coincidencia de una alta erosionabilidad de los suelos quemados y una elevada precipitación. Desde el año 2010 la Xunta de Galicia viene actuando para reducir el riesgo de erosión después de incendio, basándose para ello en la investigación sobre el tema desarrollada en la Comunidad (VEGA et al., 2013a).

La siembra de herbáceas ha sido ampliamente usada durante años en los Estados Unidos por su bajo coste y facilidad de aplicación. Sin embargo, recientes revisio-nes bibliográficas (BEYERS, 2009; PEPPIN et al., 2010) han mostrado su falta de eficacia para incrementar la cubierta vegetal o reducir la erosión post-incendio, espe-cialmente durante el primer año post-fuego, cuando el riesgo de erosión es mayor. En cambio, bajo las condi-ciones templado-húmedas de muchas zonas de Galicia, y después de fuegos de severidad moderada, se ha encontrado que la siembra es eficaz para reducir las pérdidas de suelo por erosión (PINAYA et al., 2000; DÍAZ-RAVIÑA et al., 2012). Otros tratamientos como el mulching se utilizan para incrementar de forma inmedia-ta la cobertura del suelo quemado y han mostrado su eficacia para reducir la erosión después de incendio bajo muy diversas condiciones (BAUTISTA et al., 1996; WAGENBRENNER et al., 2006; FERNÁNDEZ et al., 2011; ROBICHAUD et al., 2013).

La aplicación de tratamientos de control de la erosión puede tener otras consecuencias ecológicas; por ejem-plo, la siembra puede interferir con la recuperación natu-ral de la vegetación (KEELEY, 2004; DODSON y PETER-SON, 2009) y el mulching puede inhibir la revegetación y/o introducir plantas alóctonas (KRUSE et al., 2004) aunque también se han observado efectos positivos en

la regeneración natural de la vegetación, al mejorar las condiciones microclimáticas (BAUTISTA et al., 2009; FER-NÁNDEZ y VEGA, 2014; SANTANA et al., 2014).

Toda esta información resulta crítica para que los ges-tores forestales puedan decidir sobre el mejor tratamiento posible para reducir la erosión post-incendio sin compro-meter la regeneración natural en las áreas incendiadas.

Teniendo en cuenta lo anterior, los objetivos del pre-sente estudio fueron: a) Comparar la efectividad de dos tratamientos diferentes de estabilización del suelo (mul-ching y siembra) para reducir las pérdidas de suelo, en comparación con un suelo quemado no tratado, en dos áreas de matorral afectadas por fuegos de diferente se-veridad en Galicia y b) determinar si esos tratamientos tenían un efecto diferente sobre la recuperación de la cubierta vegetal.

MATERIAL Y MÉTODOS

Sitios de estudio

El estudio se llevó a cabo en dos áreas de matorral afectadas por fuegos de distinta severidad en el verano de 2009. Las principales características de los sitios ex-perimentales se resumen en la Tabla 1.

Diseño experimental

Una semana después del fuego se instalaron 15 par-celas (22 m x 5 m en O Irixo, Orense; y 30 m x 10 m en A Estrada, Pontevedra), con su lado más largo paralelo a la línea de máxima pendiente (Fotos 1 y 2). La severidad del fuego en el suelo se determinó situando sistemáticamente un cuadro de 20 cm x 20 cm en 30 puntos a lo largo de dos transectos paralelos al lado más largo en cada parcela. A cada cuadro se le asignó un número de acuerdo a la clasificación de severidad de fuego en el suelo propuesta por VEGA et al. (2013b):

Tabla 1. Características generales de los sitios experimentales

Localización Clima*Precipitación

media*(mm/año)

Temperatura media anual*

(ºC)Sustrato Textura

sueloPendiente media (%)

A Estrada42º38’58’’N8º29’31’’W

Oceánico 1.810 12,0 Granito Franco-Arenosa 46

O Irixo42º31’25’’N8º4’23’’W

Oceánico 1.241 11,7 Esquisto Franco-Arenosa 36

* RIVAS-MARTÍNEZ (1987)

Foto 2. Vista parcial del dispositivo experimental de A Estrada (Pontevedra) durante la ejecución de los tratamientos

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Ciencia y Técnica

J. A. Vega Hidalgo, C. Fernández Filgueira y T. Fonturbel Lliteras

1. Hojarasca (Oi) consumida pero consunción limitada del mantillo (Oe + Oa). 2. Capa Oa carbonizada cu-briendo el suelo mineral, posibles depósitos de ceniza. 3. Cubierta orgánica del suelo (Oi + Oe + Oa) comple-tamente consumida (suelo desnudo) pero sin consunción de la materia orgánica del suelo y suelo mineral super-ficial inalterado 4. Cubierta orgánica del suelo consu-mida y materia orgánica del suelo mineral superficial también consumida, depósitos de ceniza y alteración de la estructura del suelo 5. Como 4 y alteración en la coloración del suelo (rojizo). La severidad del fuego en el suelo se calculó como el promedio de los valores de severidad observados ponderado por su frecuencia.

Las parcelas fueron delimitadas por geotextiles. Tres tratamientos se asignaron de manera aleatoria: siembra, mulching y control (suelo quemado), con cinco réplicas en cada uno de ellos.

La siembra se realizó manualmente de la forma más homogénea posible. La dosis fue de 4 g m-2 en A Es-trada y de 3 g m-2 en O Irixo. La mezcla estaba forma-da por 35% Lolium multiflorum, 20% Dactylis glomerata, 10% Festuca arundinacea, 5% Festuca rubra, 5% Agrostis tennuis y 25% Trifolium repens (% peso total). Esta mezcla ya había sido utilizada en experiencias anteriores (FER-NÁNDEZ et al., 2012).

El mulch de paja de trigo fue aplicado manualmente de manera uniforme por la parcela (Fotos 2 y 3). La dosis fue de 2,3 t ha-1 en A Estrada y de 2,5 t ha-1 en O Irixo. En este último sitio la siembra se efectuó también en las parcelas de mulching. La aplicación del mulch supuso una cobertura inmediata del suelo quemado del 83% en A Estrada y del 87% en O Irixo.

La erosión se recogió entre septiembre de 2009 y septiembre de 2010 limpiando cuidadosamente los geo-textiles de la parte inferior de cada parcela después de cada evento de lluvia. Los sedimentos recogidos se pesaron en el campo y una muestra de los mismos fue

llevada al laboratorio para la determinación de su peso seco. Para ello, las muestras de suelo erosionado se se-caron en estufa (105ºC) durante 24 h.

La cantidad de lluvia y su intensidad se midió en dos pluviógrafos en cada sitio experimental.

En cada parcela de cada sitio experimental se situa-ron diez cuadros de 1 m de lado para el seguimiento de la cobertura vegetal. Los muestreos se realizaron al final del primer año después del fuego.

Análisis estadístico

Un modelo general lineal mixto (ZUUR et al., 2009) fue empleado para testar el efecto del tratamiento sobre la erosión anual y la cobertura total de la vegetación en cada sitio experimental al final del período de estudio. El tratamiento fue considerado un factor fijo en los mode-los y la parcela (y el cuadro para la vegetación), factor aleatorio. El paquete estadístico R (CORE TEAM DEVE-LOPMENT, 2014) fue empleado para llevar a cabo los análisis.

RESULTADOS

La severidad del fuego en el suelo fue claramente di-ferente en cada sitio experimental. Las parcelas de O Irixo presentaban una severidad alta, mientras que en A Estrada la severidad era moderada (Tabla 2). La precipi-tación media y el factor de erosividad de la lluvia (Tabla 2) estuvieron por debajo de la media de la zona en O Irixo (1.241 mm; 175 hJ m-2 cm h-1) mientras que en A Estrada ocurrió lo contrario.

En ambos sitios experimentales, el tratamiento tuvo un efecto significativo sobre la erosión. En los dos casos, el mulching produjo significativamente menos sedimentos que la siembra (p< 0.0001) y el control (p< 0.0001) sin que se detectaran diferencias significativas entre estos dos tratamientos.

A pesar de las diferencias en el régimen de preci-pitación entre los dos sitios experimentales, la diferente severidad del fuego en el suelo hizo que los niveles de erosión registrados fueran claramente diferentes. En O Irixo, la erosión promedio el primer año después del fuego en las parcelas control fue de 22,3 t ha-1, mientras que en las parcelas de siembra y mulching esos valores fueron de 23,4 y 1,5 t ha-1 respectivamente (Graf. 1). En ese mismo período de tiempo los valores respectivos en A Estrada fueron de 3,6 t ha-1, 2,9 t ha-1 y 0,4 t ha-1 (Graf 1).

El tratamiento no tuvo ningún efecto sobre la cobertura vegetal en A Estrada, con valores similares al final del estudio para los tres tratamientos ensayados (Graf 2). Por su parte, en O Irixo la siembra fue efectiva para au-mentar la cobertura vegetal sólo en combinación con el mulching (p <0.0001) en comparación con la siembra o el control. Al final del estudio, la cobertura media de la

Foto 3. Detalle de la cobertura del suelo inmediatamente después de la aplicación del mulch de paja

Tabla 2. Severidad media del fuego en el suelo y características de la lluvia en los sitios experimentales

Sitio Experimental Severidad del fuego en el suelo*

Precipitación (mm)

Factor de erosividad de la lluvia(hJ m-2 cm h-1)

A Estrada 2,5 2.345,2 498,7

O Irixo 3,5 992,6 78,9

* VEGA et al. (2013)

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Comparación de la efi cacia del mulching y la siembra para reducir la erosión post-incendio en Galicia

vegetación variaba desde el 77% en la siembra al 96% en el mulching + siembra (Graf 3).

Gráfi co 1. Pérdidas de suelo medias durante el primer año post-fuego. Barras verticales, error estándar

Gráfi co 2. Cobertura media de la vegetación al fi nal del primer año post-fuego en A Estrada. Barras verticales, error estándar

Gráfi co 3. Cobertura media de la vegetación al fi nal del primer año post-fuego en O Irixo. Barras verticales, error estándar

DISCUSIÓN

La reducción del 90% en la producción de sedimentos después de la aplicación de mulching medida en el pre-sente estudio, es similar a la encontrada previamente en condiciones diferentes a las de este estudio (BAUTISTA et al., 1996; WAGENBRENNER et al., 2006; ROBI-CHAUD et al., 2013) y mayor que el 66% medida por FERNÁNDEZ et al. (2011) después de incendio de alta severidad en Galicia.

La falta de efi cacia de la siembra está de acuerdo con los resultados de investigaciones previas llevadas a cabo en los Estados Unidos en los que se emplearon do-sis similares a las utilizadas en el presente estudio (ROBI-CHAUD et al., 2006; WAGENBRENNER et al., 2006).

En el presente estudio, la revegetación fue muy rápida en los dos casos. La respuesta de la vegetación nativa, compuesta básicamente por rebrotadoras, fue parecida a la observada en comunidades de matorral similares después de incendios (FERNÁNDEZ et al., 2011; FER-NÁNDEZ y VEGA, 2014).

El mulching pareció benefi ciar la recuperación de la cubierta vegetal solo en el sitio con menor precipitación anual, sugiriendo una mejora de las condiciones micro-climáticas para el establecimiento de la vegetación, como también fue observado por FERNÁNDEZ y VEGA (2014) y SANTANA et al. (2014).

CONCLUSIONES

El presente estudio confi rma la inefi cacia de la siem-bra para favorecer la revegetación y reducir de forma signifi cativa las pérdidas de suelo contra incendio inclu-so en las condiciones, a priori muy favorables, como las de Galicia.

El mulching resultó ser una técnica efectiva para limitar la erosión post-fuego sin comprometer la regeneración natural de la vegetación.

Estos resultados apoyan consistentemente el uso ope-rativo del mulching para reducir la erosión tras incendios en Galicia.

AGRADECIMIENTOS

Este estudio ha sido fi nanciado por el Instituto Nacio-nal de Investigaciones Agrarias (INIA) a través del pro-yecto RTA2014-00011-C06-02 y por el Plan de Innova-ción y Mejora Forestal de Galicia (2010-2020) de la Xunta de Galicia.ción y Mejora Forestal de Galicia (2010-2020) de la

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Evolución de parámetros físico-químicos de los suelos forestales. El caso del País Vasco

A. Cantero AmianoIngeniero de [email protected]

ResumenA partir de las fuentes de información disponibles y de

los datos de un muestreo propio, se llega a una serie de conclusiones respecto a las principales características y a la variación espacio-temporal de diversos parámetros físico-químicos en los suelos forestales del País Vasco.

La remedición en un lapso de 10 años de una serie de suelos situados bajo plantaciones forestales productivas pone de manifiesto que no se ha producido, en general, pérdida de fertilidad en esos suelos.

Palabras clave: muestreo, análisis, laboratorio, pH, nu-trientes, sostenibilidad.

Foto 1. Localización de parcela del IFN3 en pinar talado. Es necesario emplear un detector de metales para localizar el rejón que marca el centro de cada parcela

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A. Cantero Amiano

INTRODUCCIÓN

Este año 2015 ha sido declarado por la FAO Año Internacional de los Suelos. Es una buena ocasión, por tanto, para repasar las fuentes disponibles de informa-ción referente a los suelos forestales españoles y, más en concreto, a los localizados en el ámbito del País Vasco.

Tradicionalmente, el estudio de los suelos no era un aspecto analizado en detalle en los trabajos de ordena-ción forestal. La inexistencia de mapas de suelo fiables como referencia, la dificultad de realizar un correcto muestreo y la carestía de la toma de datos, de la aper-tura de calicatas y del procesamiento de las muestras en el laboratorio, han sido factores negativos que han inci-dido en esta escasez de trabajos especializados, con contadas excepciones. Indirectamente, la litología era el factor que se ha venido estudiando para paliar ese déficit en conocimientos edáficos.

La llegada del siglo XXI trajo consigo la certificación forestal, la gestión forestal sostenible y el estudio de los sumideros forestales de carbono. En ese contexto, los suelos forestales son uno de los puntos clave para ana-lizar conceptos como la sostenibilidad de las prácticas forestales o la cantidad de carbono almacenado en las masas forestales. Concretamente, entre los indicadores de Gestión Forestal Sostenible según la norma UNE (162.002:2007) se citaba el Estado nutricional de los suelos (Indicador 2.2 de tipo Descriptivo), con el objeto de sensibilizar a propietarios y gestores forestales sobre la necesidad de unas correctas prácticas de abonado, detección de posibles carencias nutricionales y manejo de suelos. La necesidad de datos para conocer ese in-dicador a nivel de monte, comarca o región puso de manifiesto las carencias existentes en el estudio de los suelos españoles.

El MAGRAMA proporciona tres grandes fuentes de datos referentes al estudio de suelos forestales españoles:•  El Inventario Forestal Nacional (IFN) muestrea, des-

de hace medio siglo y con una frecuencia decenal, los suelos de entornos forestales arbolados siguien-do una cuadrícula de parcelas permanentes de 1 km. Sin embargo, ese muestreo es visual o táctil, sin análisis de laboratorio, y referido a unos pocos parámetros de la parte superficial del suelo. El IFN español abarca unas 90.000 parcelas permanen-tes, de las cuales 3.900 se ubican en el País Vasco.

•  El proyecto de muestreo de áreas en el ámbito de las estadísticas agrícolas llamado «LUCAS» (Land Use Cover Area Frame Survey) de EUROSTAT 2013. Desde 2001, miles de suelos son analizados si-guiendo una cuadrícula de 2 km. El muestreo se centra en el suelo agrícola de la UE, con una tasa inicial de toma de muestras del 50 % para las tierras de labor y cultivos permanentes, y el porcentaje res-tante para las praderas y los estratos no agrícolas, como los bosques. Sin embargo, la premisa de no muestrear los terrenos de cota superior a 1.000 m deja fuera un 30% de la superficie forestal arbolada de España, porcentaje que alcanza el 50% en Cas-tilla y León o Aragón.

•  La Red Europea de Seguimiento de Daños en los Bosques, Nivel I, dedicada al seguimiento extensivo de los cambios producidos en los suelos forestales y al estudio de los parámetros indicadores de la bio-diversidad forestal en Europa, siguiendo una cuadrí-cula de parcelas permanentes de 16 km. A lo largo de sus más de 25 años de historia, se ha venido repitiendo en España la medición de 620 parcelas de seguimiento, con un conjunto de 15.000 árboles en los que anualmente se miden parámetros como defoliación, decoloración o salud de las copas. En-tre 1993 y 1995 se midió en 464 de esas parcelas un gran número de parámetros físico-químicos de las capas orgánica y mineral, pero sólo hasta una pro-fundidad de 20 cm. De ellas, 13 parcelas se ubican en el País Vasco.

Se han realizado cinco Inventarios Forestales en el País Vasco: IFN1 (1972), Inventario Forestal del País Vasco (realizado en 1986 por el Gobierno Vasco siguiendo la metodología del IFN2), IFN2 (1996), IFN3 (2005) e IFN4 (2011). Sin embargo, se adolecía de escasez de datos referentes a la sostenibilidad de los suelos foresta-les. Por ello, IKT, S.A. levantó en 2001 la red Basonet, financiada por el Gobierno Vasco y las Diputaciones Fo-rales. Esta red se compone de 428 parcelas distribuidas de forma sistemática por todo el territorio forestal del País Vasco, siguiendo una malla UTM de 3*3 km. Para ello se seleccionó una de cada nueve parcelas realizadas en la red del Inventario Forestal de 1996 y se procedió a su localización y remedición. Además de medir los preceptivos datos dasométricos, se realizaron calicatas y analíticas de dos horizontes (0-20 y 20-40 cm), inclu-yendo una descripción completa del perfil del suelo, con el fin de calcular diversos parámetros edáficos.

Precisamente, esta red Basonet ha servido de referen-cia para conocer la variabilidad temporal de los sue-los forestales vascos, ya que en 2011 se ha repetido el muestreo edafológico en un 10% de las medidas diez años antes. Los criterios elegidos para elegir esta sub-muestra de 42 parcelas han sido:• Debían ser parcelas ubicadas en masas forestales

de aprovechamiento intensivo, pino radiata (Pinus radiata) y eucalipto (Eucalyptus globulus y E. nitens), por su mayor exigencia en nutrientes debida a su elevado crecimiento y menor turno; el pino radiata (130.000 hectáreas en la vertiente cantábrica) y el eucalipto (15.000 hectáreas, en su mayor parte en la costa de Bizkaia) son las especies que aportan cerca del 90% de la madera que se corta anual-mente en el País Vasco.Foto 2. Rejón enterrado que marca el punto exacto central de

cada parcela IFN

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Evolución de parámetros físico-químicos de los suelos forestales. El caso del País Vasco

•  También debían ser parcelas seleccionadas para medir en campo en el IFN4 (se remidió el 50% de las del IFN3) y además todos los equipos de campo de ese Inventario deberían incluir al menos una par-cela; ello es debido a que esta toma de datos eda-fológicos se hizo coincidir con el control de calidad del trabajo de campo del IFN4 que realizó IKT, S.A.

•  Por último, la muestra a remedir debería incluir un porcentaje representativo de parcelas con suelos que presentaban carencias nutricionales en 2001, con el fin de comprobar su evolución en estos años.

La llegada de la certificación forestal regional PEFC al País Vasco en 2004 fue el mejor exponente de la apues-ta de la Administración y de los propietarios privados por la gestión forestal sostenible. Desde 2005, propieta-rios y técnicos forestales de Bizkaia y norte de Álava han ido remitiendo más de 1.500 muestras de suelo a los laboratorios de NEIKER (Instituto Vasco de Investigación y Desarrollo Agrario) con el fin de realizar su análisis químico y de recomendar una adecuada fertilización, basada en el estado nutritivo del sitio y en la demanda de nutrientes por parte del arbolado. Esta base de datos ha servido para aumentar el nivel de conocimientos rela-cionados con los suelos forestales vascos y ha permitido dividir el territorio en cuatro grandes grupos de suelo que se diferenciaban por su fertilidad y estado nutritivo, concluyendo que la mayor parte de las plantaciones de pino radiata presentaban deficiencias de fósforo y magnesio, y elaborando unas recomendaciones gene-rales en función del grupo de suelo, tanto de época de aplicación como dosis y composición de los productos.

Basándose en estos conocimientos, en NEIKER se cla-sificaron los suelos de las parcelas de la red Basonet (2001) entre aquéllas que presentaban carencias nutri-cionales y las que no. Para ello, se empleó el criterio propuesto por SIX et al. (2002), según el cual los suelos con bajas cantidades de carbono orgánico, inferiores a los niveles que se calculaban en función de los niveles de arcillas y limos de cada suelo, presentaban carencias nutricionales. Hay que tener en cuenta que la materia orgánica se suele considerar como un buen indicador de la sostenibilidad de la gestión forestal (NAMBIAR, 1996).

En el informe de la localización de la superficie fores-tal vasca afectada por carencias nutricionales (NEIKER, 2009), se concluía que de las 428 parcelas de Basonet analizadas, en 219 (el 51,17%) se registraban bajas can-tidades de carbono orgánico, inferiores a las estimadas según el citado estudio de SIX et al. (2002).

MATERIALES Y MÉTODOS

Se plantea, pues, la repetición en 2011 de 42 mues-tras de suelos, ya medidos diez años antes y ocupados por plantaciones de pino radiata y eucalipto. En esa submuestra, se incluían 26 parcelas que se habían clasi-ficado como “con carencias nutricionales”.

Para evitar sesgos, se plantea seguir la misma metodo-logía de muestreo, el mismo centro de análisis (Laborato-rio Agroambiental de Fraisoro, en Zizurkil, Gipuzkoa) y los mismos parámetros físico-químicos que en 2001. La mayor diferencia metodológica entre ambos muestreos deriva del hecho de que en 2001 se abrían calicatas hasta alcanzar la roca madre y se empleaban sondas

o barrenas para medir en tres puntos la profundidad efectiva media del regolito y para completar la muestra de 1 kg de tierra por cada uno de los dos horizontes muestreados (0-20 y 20-40 cm); por su parte, en 2011 se procedió a tomar la misma cantidad de muestra de tierra de cada horizonte, pero empleando para ello las barrenas utilizadas para estimar la profundidad efectiva.

La profundidad efectiva media asignada a cada suelo se ha obtenido calculando el valor medio de la profun-didad alcanzada en tres catas o pinchazos por parcela. Partiendo del centro de cada parcela, estas catas se ubican siguiendo una dirección aleatoria y separándose entre sí 5 metros.

La textura de los dos horizontes de cada suelo fue medida en 2001 (clasificación ISSS), pero no en 2011, debido a su coste de medición y a la hipótesis de que ésta no iba a variar en estos 10 años, algo que sí podría suceder en los parámetros químicos.

También se simplifica el muestreo de la densidad apa-rente. En 2001, aprovechando las calicatas, se toma-ron muestras en ambos horizontes mediante cilindros de acero de volumen conocido, por lo que la densidad aparente se calculó en laboratorio mediante la relación peso seco de la muestra sobre el volumen del cilindro. En 2011, en ausencia de calicatas, se recurrió a mé-todos indirectos, a partir de la textura, para estimar la densidad aparente de cada horizonte muestreado.

Foto 4. Empleo de barrena para medición de profundidad y, a la vez, para tomar muestras a distintas profundidades

Foto 3. Apertura de calicata para toma de muestras. La fotografía muestra un horizonte superficial (0-20 cm)

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A. Cantero Amiano

En ambos muestreos se ha desechado la capa orgá-nica (horizonte O hasta 1-2 cm de profundidad) y se procuró que tanto en 2001 como en 2011 las muestras fueran recogidas en primavera-verano. En 2011 no se tomaron ni analizaron muestras de parámetros relacio-nados con la hojarasca, como sí se hizo en 2001 por medio de un muestreador cuadrado de 50 cm de lado.

Tanto en 2001 como en 2011, las muestras de sue-lo obtenidas fueron conservadas en frigorífico hasta su entrega en el laboratorio al cabo de pocos días para proceder a su análisis. En ninguna de las muestras ana-lizadas se apreció un nivel reseñable de pedregosidad, con un promedio en torno al 5% de elementos gruesos en el horizonte superficial y al 10% en el horizonte pro-fundo. Una vez recibidos los resultados del laboratorio, se procedió a establecer la posible relación de los pa-rámetros analizados con los datos físicos y dasométricos de cada parcela muestreada.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

La tabla 1 pone de manifiesto el mantenimiento o au-mento de los valores medios de los principales pará-metros físico-químicos en los suelos de pino radiata y eucalipto del País Vasco a lo largo de estos diez años transcurridos. Se presentan los datos del horizonte más superficial (0-20 cm), aunque en el horizonte profundo (20-40 cm) se observa la misma tónica en sus valores medios.

También se constata que los coeficientes de correla-ción entre las muestras de 2001 y 2011, como medida de la relación lineal entre variables cuantitativas, son re-lativamente altos. Ello viene a significar que los suelos que destacaban porque presentaban valores más altos

o más bajos de un parámetro en 2001, también desta-can por la misma razón en 2011.

En cuanto a la profundidad efectiva media, se ha pa-sado de un valor medio de 50 cm en 2001 a un valor de 77,5 cm en 2011. El coeficiente de correlación tan bajo obtenido (9%) pone de manifiesto la gran variabi-lidad de medición de este parámetro, ya que depende de factores como la pedregosidad, la potencia del ope-rario o el tipo de barrena empleada.

Igualmente, se constata un aumento del contenido en materia orgánica en ambos horizontes. Según el cono-cido coeficiente de Waksman, se puede determinar el contenido en materia orgánica de un horizonte multipli-cando el contenido en carbono orgánico por el factor 1,724; es decir, la materia orgánica del suelo contie-ne un 58% de carbono. Por tanto, se ha pasado en el conjunto de la muestra analizada de un promedio del 2,32% de carbono orgánico en 2001 a un 3,23% en 2011.

En suma, se ha conseguido un enorme volumen de datos dispuestos para su análisis. Tanto estos mismos resultados como los procedentes de las fuentes de in-formación antes citados van a servir seguidamente para cuantificar la bondad de ciertos asertos, más o menos extendidos, relacionados con nuestros suelos forestales:•  “Los suelos forestales cantábricos son los más fértiles

en el conjunto español”.Si se toman los datos de la Red Europea de Da-ños-Nivel I y se analiza el conjunto de suelos anali-zados en la vertiente cantábrica (Galicia, Asturias, Cantabria y la parte atlántica de Navarra y País Vasco), éstos muestran en sus primeros 20 cm mayo-res porcentajes medios en nitrógeno (3,86 frente a 2,38%) y carbono orgánico (60 frente a 34 g/kg) que el resto de suelos forestales españoles. Los sue-los cantábricos también presentan menores valores medios en densidad aparente (1,08 frente a 1,38 g/ml), presencia de elementos gruesos (19 frente a 32%) y pH (4,16 frente a 6,18).

•  “Los suelos forestales vascos son más arcillosos que los gallegos”.Atendiendo a su textura observada, los horizontes muestreados en la citada Red Europea se clasifican en una escala entre 1 (gruesa, con más del 65% de arena) y 5 (muy fina, con más del 60% de arcilla. El promedio obtenido en Galicia (1,57) es el más arenoso de todas las Comunidades, mientras que Navarra y País Vasco presentan los valores más arci-llosos (2,96). Los mapas del IFN2 también muestran un alto porcentaje de suelos arcillosos en Navarra y País Vasco.

•  “La productividad del pino radiata está directamente relacionada con factores como bajos contenidos en arena y elevados de arcilla. También aparece una correlación débilmente significativa y de signo nega-

Tabla 2. Valores medios de diversos parámetros relacionados con la clase de calidad de los pinares y analizados en 2001 (textura) y en 2011 (nutrientes)

Clase de calidad % Arena % Arcilla Nitrógeno (%) Calcio (mg/l)

Magnesio (mg/l)

Fósforo (mg/l) Altitud (m)

1 (alta) 16,24 38,29 0,18 1.082,17 166,83 12,58 314

2 (media) 16,45 26,18 0,22 393,75 51,50 3,25 337

3 (baja) 21,41 32,60 0,20 910,52 75,98 3,98 367

Tabla 1. Valores medios de los principales parámetros físico-químicos en el horizonte superficial (0-20 cm) de las parcelas

remedidas, junto con su coeficiente de correlación

Parámetro 2001 2011 Coef.Corr (%)

Densidad aparente (g/ml) 0,98 1,19 75,66

pH 4,94 5,02 59,83

M.O.% 5,06 7,14 35,18

Relación C/N 16,49 17,28 31,74

Nitrógeno (%) 0,19 0,24 36,42

Fósforo Olsen (mg/l) 4,38 5,95 81,34

Magnesio (mg/l) 74,54 93,03 91,23

Potasio (mg/l) 91,18 103,20 56,34

El coeficiente de correlación de Pearson es una medida de la rela-ción lineal entre dos variables aleatorias cuantitativas. Si el coefi-ciente alcanza el 100%, existe una correlación perfecta entre dos muestras. Si es del 0%, no existe relación lineal

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Ciencia y Técnica

Evolución de parámetros físico-químicos de los suelos forestales. El caso del País Vasco

tivo entre el nitrógeno total y la calidad, y también, aunque ahora positiva, entre esta última y el calcio y magnesio de cambio (GANDULLO et al., 1974)”.Efectivamente, en la tabla 2, construida con los va-lores medios de los suelos analizados en pinares vascos en 2001-2011, se muestran esas mismas tendencias. Igualmente, la calidad del pinar, según las tres clases de Madrigal y Toval (1975), parece estar directamente relacionada con el contenido en fósforo. Por último, hay que citar el conocido factor negativo que supone la altitud en la productividad de los pinares.

•  “El eucalipto y el pino marítimo se desarrollan mejor que el pino radiata en terrenos más arenosos”.Efectivamente, la tabla 3, elaborada a partir de los valores de textura obtenidos en la primera medición de la red Basonet (2001), muestra las diferencias en-tre esas especies. A nivel español, los estratos crea-dos por el IFN2 ponen también de manifi esto esas diferencias. Los estratos dominados por pino radiata y por fustal denso de roble y de haya son los únicos que presentan de visu textura arcillosa en cerca de un 50% de las parcelas y textura arenosa en menos de un 3%. En el otro extremo, los estratos dominados por eucalipto cantábrico, pino marítimo cantábrico y castaño son los únicos que presentan textura inter-media en un 75% de las parcelas y textura arenosa en menos de un 2%.

El análisis de los datos disponibles ha permitido tam-bién obtener nuevas conclusiones para los suelos del País Vasco:

•  “A mayor profundidad del suelo, aumenta el porcen-taje de arcilla y desciende el de arena”.El gráfi co 1, elaborado a partir de los valores de textura de la red Basonet (2001) en las principales li-tologías del País Vasco, muestra esas tendencias. En un 75% de los suelos analizados, el porcentaje de arcillas del horizonte profundo superaba el del hori-zonte superfi cial y sucedía lo contrario con la arena. Estos hechos pueden ser explicados, en entornos llu-viosos, a través del agua de infi ltración que arrastra parte de la arcilla de los horizontes superiores y la deposita en las zonas más profundas (proceso de iluviación de arcilla).

•  “A mayor profundidad del suelo, aumenta el pH”.El gráfi co 2, elaborado también con los datos de Basonet (2001), muestra un ligero aumento del pH en los horizontes profundos en las principales litolo-gías del País Vasco.

Foto 5. Paisaje de Zeanuri (Bizkaia) dominado por pino radiata, con un mosaico de pinares talados, jóvenes y adultos

Foto 6. Paisaje costero de Bizkaia, mostrando un mosaico de parcelas de eucalipto

Tabla 3. Valores medios de textura según especie principal de la parcela, obtenidos en la red Basonet (2001)

Especie % Arena (0-20 cm)

% Arena (20-40

cm)

% Arcilla (0-20 cm)

% Arcilla (20-40

cm)

Eucalipto 36,58 34,36 27,83 28,82

Pino marítimo 36,28 24,23 27,50 35,18

Pino radiata 19,08 17,53 35,89 37,61

Los suelos donde se ha plantado eucalipto y pino marítimo desta-can por su alto contenido en arena

Gráfi co 2. Valores medios de pH en la red Basonet (2001) según litología. En las cuatro litologías analizadas, el horizonte más

profundo presenta mayor pH medio

Gráfi co 1. Valores medios de textura en la red Basonet (2001) según litología. En las cuatro litologías analizadas, el horizonte

más profundo presenta menos arena y más arcilla

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Ciencia y Técnica

A. Cantero Amiano

Las razones del punto anterior podrían ser repetidas en este caso.

•  “En la zona cantábrica, a mayor altitud aumenta el porcentaje de arena y la materia orgánica y des-ciende la arcilla y el pH”.El gráfi co 3 se ha elaborado a partir de los valores medios del horizonte superfi cial en 2011, por lo que sólo comprende parcelas de pino radiata y eucalip-to situadas en la vertiente cantábrica del País Vasco, donde dominan los entornos silíceos y ambientes húmedos. Estos hechos contribuyen a homogenei-zar las condiciones de partida. En ese contexto, el aumento general de las precipitaciones y el descen-so de las temperaturas con la altitud contribuyen al proceso de eluviación y a cambios físico-químicos ligados a la evolución de los suelos.

•  “Los suelos que presentaban carencias nutricionales en 2001, diez años después mantienen ese défi cit”.El gráfi co 4 se ha elaborado a partir de los valo-res medios de todos los horizontes muestreados en

2011. Muestra el menor porcentaje en materia orgá-nica de los suelos que diez años antes presentaban carencias nutricionales y, a la vez, el ya comentado aumento en el contenido en materia orgánica con la altitud. En general, el contenido en materia orgánica del horizonte superfi cial resulta ser el doble del con-tenido del horizonte profundo.Hay que tener en cuenta que un gran número de propietarios forestales recurre al abonado N-P-K al plantar eucalipto. En el caso del pino radiata, son aún pocos los propietarios que recurren al abonado, sobre todo en los primeros años de la nueva masa. Las tendencias actuales apuntan a un aumento de la superfi cie de eucalipto a costa del pino radiata, por lo que las necesidades nutritivas de los suelos forestales vascos pueden ser mayores en el futuro.

Se espera que las mediciones realizadas sean sólo el comienzo de un análisis más profundo y sostenido en el tiempo, que ayude a conocer mejor la variabilidad es-pacio-temporal de los suelos forestales del País Vasco.tiempo, que ayude a conocer mejor la variabilidad es-

Bibliografía ARIAS, A.; GARTZIA, N.; 2015. Sostenibilidad de la fertilización de pino radiata en la CAPV. Euskadi Basogint-za-Forestal, 83:7-8.

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GANDULLO, J.M.; GONZÁLEZ ALONSO, S. & SÁNCHEZ PALOMARES, O.; 1974. Ecología de los pinares españoles. IV. Pinus radiata D. Don. Colección Monografías INIA nº. 13. Madrid.

LOPEZ ARIAS, R.; MONTOYA MORENO, M. 1998. La red europea de seguimiento de dañ os en los bosques (Nivel I) Espana, 1987-1996. Organismo Autónomo Parques Nacionales. Madrid.

MADRIGAL, A.; ÁLVAREZ, J.G.; RODRÍGUEZ SOALLEIRO, R.; ROJO, A.; 1999. Tablas de producción para los montes españoles. Fundación Conde del Valle de Salazar. Madrid.

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Gráfi co 3. Valores medios de diversos parámetros del horizonte superfi cial en el muestreo de 2011 según clases de altitud (m).

Conforme aumenta la cota, crece el contenido en arena y materia orgánica, a la vez que disminuye la arcilla y el pH

Gráfi co 4. Valores medios de materia orgánica en 2011, según clases de altitud (m). Conforme aumenta la cota, crece el contenido en materia orgánica, tanto en los suelos que mostraban carencias

nutricionales diez años atrás como en los que no la mostraban

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MeFiTu, un proyecto educativo de sensibilización sobre los incendios forestales

H. Ballart PastorFundación Pau [email protected]

ResumenEl MeFiTu es un proyecto de sensibilización sobre la

problemática de los incendios forestales dirigido a esco-lares y a la sociedad en general. Se adapta a alumnos de primaria y secundaria. Consta de tres actividades, una aplicación audiovisual para introducir los concep-tos, adaptada a cada ritmo de aprendizaje. La segunda actividad consiste en la construcción y quema de dos maquetas simulando dos escenarios: un bosque gestio-nado y otro bosque sin gestionar, donde se observan los diferentes efectos del fuego. La tercera consiste en visitar un perímetro de un incendio histórico para conocer el estado de regeneración.

Palabras clave: prevención, educación, incendios, sensibilización ambiental, gestión forestal.

Ejemplo de salida a campo, realizada en octubre de 2014. En ella se visitó la zona quemada por el incendio de Alcublas y Andilla (Valencia), que arrasó unas 25.000 ha en 2012

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H. Ballart Pastor

INTRODUCCIÓN

Tras los episodios de incendios en la península de años como el 1994, 1998, 2003, 2012... se vio nece-sario un replanteamiento de conceptos y estrategia ante los incendios forestales, así como la sensibilización de las futuras generaciones.

Aunque los últimos años, 2013, 2014, hayan ofreci-do una tregua, la tendencia para el escenario futuro se agrava con el cambio climático, dónde los incendios fo-restales serán un grave problema. Por ello, la necesidad de concienciar a la población todavía persiste (WWF ESPAÑA, 2015).

En este escenario nació desde Bombers de la Gene-ralitat de Catalunya el proyecto MeFiTu, Los Bosques Mediterráneos, el Fuego y Tú, un programa formativo y educativo de sensibilización sobre la problemática de los incendios forestales, dirigido a escolares y a la sociedad en general. Este proyecto actualmente lo ejecuta la Fun-dación Pau Costa, la cual está buscando colaboradores y patrocinadores para su expansión en toda España.

El objetivo del MeFiTu consiste en la comprensión por parte de la sociedad de tres conceptos básicos en rela-ción con nuestros bosques mediterráneos:•  Son elementos naturales modificados intensamente

por los habitantes de la región mediterránea desde

hace miles de años, es decir, son bosques antrópi-cos y no son bosques vírgenes o salvajes.

• Cuando llegamos a las causas de un incendio fores-tal, el daño ya está hecho. El enfoque actual de la prevención de incendios forestales tiene en el punto de mira la causa de la ignición, pero es necesario reorientar los esfuerzos hacia la causa de la pro-pagación. Esta idea tan simple está directamente relacionada con la gestión forestal.

•  Plantear el fuego no como un elemento destructor y maligno sino como la perturbación natural y habi-tual en las regiones mediterráneas, entender que los incendios no los eliminaremos nunca y que, incluso, son necesarios para garantizar la perpetuación de algunas especies.

Los objetivos que se persiguen a nivel de servicio pres-tado a la comunidad se basan en adquirir competencias relativas al desarrollo del pensamiento crítico: mantener una actitud curiosa ante la realidad de los incendios forestales, analizar información, reflexionar, para poder rechazar prejuicios preconcebidos, así como adquirir va-lores de ciudadanía ambiental activa, concienciando en la responsabilidad social hacia el bosque y la gestión forestal como instrumento para la prevención de grandes incendios.

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Ilustración de la portada de la presentación del Mefitu

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MeFiTu, un proyecto educativo de sensibilización sobre los incendios forestales

METODOLOGÍA

El proyecto MeFiTu recoge algunas de las conclusiones expuestas en el principal Proyecto Europeo FireParadox que ha tratado la problemática de los incendios fores-tales, donde se recomienda trabajar para reorientar la percepción social del fuego en los países del arco me-diterráneo (JOAQUIM SANDE SILVA et al., 2010). Hay que aprender a convivir con el fuego, gestionándolo como un factor ecológico más, sin percibirlo únicamente como un factor de destrucción para nuestros bosques. Entender que la propagación del fuego está relaciona-da con la continuidad y la carga de vegetación forestal, estando en nuestras manos poder cambiar la estructura forestal de estos bosques abandonados para hacerlos más resistentes a los incendios, usando herramientas como la gestión forestal. Para conseguir cambiar esta percepción social se diseñó este taller.

El contenido fue desarrollado por un equipo multidisci-plinar de profesores y maestros, conjuntamente con téc-nicos forestales y profesionales de extinción de incendios (GALÁN SANTANO et al., 2007). Se realizaron varias pruebas piloto para testar el proyecto en escuelas de primaria y secundaria catalanas, el cual tuvo muy buena aceptación. Los resultados se exponen en el artículo Envi-ronmental Awareness Project: “Mediterranean Forest, Fire and You”. El MeFiTu tiene una visión expansiva, con la misión de concienciar a la sociedad de la problemática de los incendios forestales.

El contenido que se desarrolla en el taller es el siguiente:•  El fuego como fenómeno natural. Historia e

importancia•  Fuego controlado. Ejemplos cotidianos•  Fuego descontrolado y la fragilidad de los bosques

•  Y después de un fuego,... ¿qué? Estrategias de resis-tencia de las especies arbóreas al fuego

•  El ciclo del bosque• Gestión forestal sostenible• Diferentes métodos para llevar a cabo la gestión

forestal• Convivir con el fuego: GIF, PAS y autoprotecciónEl proyecto parte de tres bases metodológicas y se

realizan actividades para consolidar los conceptos:• Conceptos teóricos → Aplicación audiovisual en

aula•  Experimentación → Taller interactivo de quema

controlada• Contacto con la naturaleza → Salida a campo para

visita de perímetro históricoEl MeFiTu va destinado a los alumnos de ciclo medio y

superior de primaria y a sus maestros, los cuales se ven involucrados en el proyecto. Se está haciendo extensible a alumnos de secundaria.

Los conceptos teóricos se trabajan con los maestros durante una jornada de formación donde se les prepara para que, previamente al taller con el alumnado, tengan unos conocimientos mínimos y los puedan transmitir a los alumnos, así como resolver las dudas de éstos. También se dan instrucciones de cómo preparar el material (árbo-les de papel) para llevar a cabo el taller.

Una de las fi nalidades básicas es facilitar que los alumnos transformen sus vivencias en experiencias de aprendizaje. Es decir, que traspasen un puente desde la vivencia experimentada durante el taller, hasta un es-pacio, la naturaleza, donde desarrollen las tareas de construir nuevas estructuras conceptuales, procedimenta-les, emocionales o actitudinales. La facilitación de este proceso de forma creativa es lo que pretende ofrecer este taller.

Aplicación audiovisual

El lobo MEFITU, la mascota del proyecto, funciona de eje de animación de la presentación audiovisual. Los alumnos aprenden la importancia que tuvo en la evolu-ción de la humanidad el descubrimiento del fuego y su control. Se explican situaciones cotidianas donde inter-viene el fuego controlado, y se advierte que en el monte, si un fuego se queda sin vigilancia, se puede descontro-lar convirtiéndose en incendio forestal. Se señalan cuáles

Sesión con audiovisual en aula

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H. Ballart Pastor

pueden ser las causas de los incendios en relación con los cambios en el paisaje. Se exponen medidas para minimizar su efecto y reducir la vulnerabilidad de nuestros bosques. De aquí se desprende la necesidad de gestio-nar los montes para minimizar la velocidad e intensidad de propagación del fuego, evitando así un gran incendio forestal. La aplicación audiovisual se realiza en un aula de la escuela justo antes de realizar el taller.

Taller de interacción con una quema controlada

Se crean dos escenarios forestales diferenciados por su carga de combustible forestal: una maqueta simula el escenario de un bosque no gestionado, con una ele-vada carga de árboles y arbustos de cartón, papel de periódico y serrín; y otro panel simula el escenario del bosque gestionado, con menos carga y continuidad del combustible. Se realiza la quema de las maquetas. Se relaciona la estructura forestal con el comportamiento del fuego y la capacidad de extinción. Se trabaja la idea de la gestión forestal y los resultados que de esta se derivan. Con la observación directa de la propagación del fuego en las maquetas, los alumnos refl exionan acer-ca de dónde situarían su vivienda hipotéticamente, con-templando una posible ignición en uno u otro escenario.

Ejecución del taller de quema de maquetas simulando dos bosques, gestionado y no gestionado

Salida a campo

Se realiza una salida al bosque, visitando preferible-mente un incendio histórico de la zona para poder ob-servar los efectos. El circuito es circular y tiene cinco estaciones o puntos donde se explica:•  La gestión forestal. A menudo, para explicar este

punto, colaboran otros agentes del territorio como ingenieros forestales de la provincia.

• Autoprotección frente a un incendio forestal. Se tra-bajan las instrucciones a seguir en caso de fuego

para que los alumnos aprendan a protegerse. Cola-boran los bomberos.

•  Estrategias de adaptación de las especies al fuego, observando los rebrotes, el regenerado, las piñas, la corteza de los árboles, entre otras. Se puede ver, tocar y experimentar lo que se ha trabajado en el aula.

• Cambios en el paisaje. Se observa in situ el aban-dono agrícola y la falta de gestión forestal.

•  Efectos de fuego. Se diferencian zonas quemadas en alta y en baja intensidad, para poder relacionar-las con las diferentes estructuras forestales.

Ejemplo de salida a campo organizada por MeFiTu en colaboración con el Consorci de la Serra de Llaberia y Bomberos

de la Generalitat en 2011

Recursos

La Fundación Pau Costa facilita a las escuelas el mate-rial audiovisual para los alumnos, material formativo adi-cional, paneles y material para llevar a cabo los talleres de quema controlada, así como todos los formadores y las tareas de organización y ejecución de las activida-des. Por otra parte, la escuela se encarga de realizar los árboles con papel y cartón con los alumnos, y de contratar el autocar para la salida a campo, en caso de ser necesario.

Colaboración con entidades locales

Se está realizando un importante esfuerzo para poder contar con el apoyo de diferentes instituciones estatales y agentes del territorio, de forma que se pueda mostrar el esfuerzo común en materia de prevención de los in-cendios forestales, y a la vez cautivar a los alumnos con la presencia de estas autoridades, acercándoles a cono-cer los distintos campos profesionales involucrados.la presencia de estas autoridades, acercándoles a cono-

Bibliografía GALÁN SANTANO, M.; REY, A.; VIDAL, J.; 2007. Environmental awareness project: “Mediterranean forest, fi re and you”. Wildfi re 2007. Comunicaciones de la IV Conferencia Internacional sobre Incendios Forestales, Sevilla (España)

HERNÁNDEZ, LOURDES. 2015. Incendios en España. Bosques listos para arder. WWF España

SANDE SILVA, J.; REGO, F.; FERNANDES, P.; RIGOLOT, E.; (editors). 2010. Towards Integrated Fire Management – Outcomes of the European Project Fire Paradox. European Forest Institute Research Report 23

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Los Parques Forestales en la legislación de la Comunidad de Madrid: Desarrollo autonómico

y desarrollo local

M. C. Alcalá GómezSecretaria General del Ayuntamiento de [email protected]

ResumenEn la regulación de los parques forestales y para aten-

der mejor las demandas sociales, reduciendo el impacto de la presión demográfi ca, de acuerdo con la planifi ca-ción urbanística, se contempla una actuación coordina-da entre la Comunidad de Madrid y los ayuntamientos.

La Comunidad de Madrid ha creado una Red de Par-ques Forestales Periurbanos, desarrollando en los mis-mos una política de mejoras. Diferentes ayuntamientos madrileños han desarrollado en su normativa urbanística y planeamiento sus propios parques forestales, presen-tándose en este artículo ejemplos de diferentes parques forestales.

Palabras clave: parques forestales, Monte del Pilar, parque periurbano, Comunidad de Madrid.

Vista general del Monte del Pilar (Madrid) tomada desde la torre de vigilancia contra incendios

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M. C. Alcalá Gómez

1. Aspectos generales de la regulación de los parques forestales

La regulación de los montes y de los terrenos forestales tiene una honda raigambre en nuestro derecho, y en él podemos encontrar tanto una importante legislación como la pervivencia de antiguas normas consuetudi-narias en lo que se refiere, en particular, a los montes comunales.

En materia de montes hay una clara evolución, en los tiempos recientes, desde una concepción “económica” de los mismos, por la riqueza y aprovechamientos que suponían –y siguen suponiendo– para los municipios, hasta la visión actual, que contempla la vital importancia que suponen para el medioambiente, fauna y flora, y para la calidad de vida de las personas. Estos últimos aspectos llevan a la necesidad de establecer medidas que garanticen su existencia junto con criterios de apro-vechamiento racional de los mismos.

Dentro del régimen jurídico de los montes, hay una categoría de espacio forestal desarrollada en tiempos más recientes, que es la de los denominados parques forestales.

La regulación de los mismos se encuentra:•  En la legislación específica sobre conservación y

defensa de las masas forestales, tanto estatal como autonómica.

•  En la normativa urbanística y en el planeamiento, habitualmente ordenados por los planes generales como espacios libres o verdes.

En materia forestal, atendiendo la competencia estatal para dictar la legislación básica sobre montes, aprove-chamientos forestales y medio ambiente, hay que acudir, en primer lugar, a la Ley 43/2003 de 21 de noviembre, de Montes (BOE 22 de noviembre de 2003, nº 280) modificada por la Ley 10/2006 de 28 de abril (BOE 29 de abril de 2006, nº 102).

La Ley de Montes designa a las Comunidades Au-tónomas como responsables y competentes en materia forestal, de acuerdo con la Constitución y los estatutos de Autonomía. Con carácter general, la ley revitaliza el papel de los Ayuntamientos en la política forestal, con-cediéndoles una mayor participación en las decisiones que les afectan.

En su artículo 5, apartado 1, se define lo que es el concepto legal de monte: todo terreno en el que vege-tan especies forestales arbóreas, arbustivas, de matorral o herbáceas, sea espontáneamente o procedente de siembra o plantación, que cumplen o puedan cumplir funciones ambientales, protectoras, productoras, cultura-les, paisajísticas o recreativas.

2. Normativa de la Comunidad de Madrid

La legislación autonómica puede, en su normativa fo-restal y urbanística, excluir de la consideración de monte a determinados terrenos, aunque en principio reunieran las características antes señaladas; y además, es la le-gislación autonómica quien podrá determinar la dimen-sión de la unidad administrativa mínima que será consi-derada monte a los efectos de la ley.

La legislación autonómica en Madrid está constituida por la Ley 16/1995 de cuatro de mayo, denominada “Ley forestal y de protección de la naturaleza de la Co-munidad de Madrid”. En materia de protección del ar-

bolado urbano, hay que atender a lo que dispone la ley de protección y fomento del arbolado urbano, Ley 8/2005, de 26 de diciembre, que establece toda una serie de medidas protectoras y un régimen sancionador, obligando a los ayuntamientos a adaptar sus ordenan-zas a sus previsiones.

La Ley 16/1995 de la Comunidad de Madrid parte de un concepto de monte análogo al de la Ley de Mon-tes, y en su artículo 44 preceptúa que la unidad míni-ma forestal en la Comunidad de Madrid la establece el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid, me-diante Decreto, pudiendo ser variable de acuerdo con las condiciones y características de las distintas zonas o tipos de monte.

Los parques forestales o periurbanos se regulan en el artículo 41, cuando establece que en las zonas de in-fluencia de las grandes poblaciones la Comunidad de Madrid promoverá la realización de parques forestales o periurbanos con el fin de atender mejor las deman-das sociales de contacto con la naturaleza y reducir el impacto de la presión demográfica en los montes de mayor valor ecológico de la Comunidad de Madrid, todo ello en el marco y de acuerdo con la planificación urbanística y territorial.

Para que la Comunidad pueda realizar estas actuacio-nes, se prevén por la ley la suscripción de convenios con ayuntamientos interesados, que reflejarán, entre otros as-pectos, los relativos a su creación, ejecución, manteni-miento, conservación y condiciones de financiación.

Cabe destacar que esta regulación de los parques fo-restales se encuentra dentro del título VII de la ley madri-leña, en su capítulo II, que regula “Uso recreativo de los Montes”, que es la idea que subyace en la regulación de estos espacios.

En desarrollo de estas precisiones, la Comunidad de Madrid ha creado una Red de Parques Forestales Pe-riurbanos, que se definen como grandes espacios cuyo principal objetivo es la regeneración del medio físico y la implantación de equipamientos de ocio y tiempo libre1.

1 En la página Web de la Comunidad de Madrid, www.madrid.org, entrando en Dirección General de Medio Ambiente, hay información de interés sobre parques forestales periurbanos, así como del Plan Forestal de la Comunidad de Madrid 2000-2019.

Cartel descriptivo de la zona ubicado en el Monte del Pilar de Majadahonda (Madrid), en el acceso desde la Urbanización

Pinar del Plantío

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015. Páginas 30-33– 32 –

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Los Parques Forestales en la legislación de la Comunidad de Madrid: Desarrollo autonómico y desarrollo local

Así se crearon los parques forestales periurbanos de Polvoranca (150 hectáreas), Bosquesur (323 hectáreas) y Valdebernardo (103 hectáreas).

Los objetivos de esta red de la Comunidad de Ma-drid son, de un lado, ofrecer a los ciudadanos un área verde periurbana para su disfrute, con las consiguientes mejoras ambientales y paisajísticas, y de otro, el esta-blecimiento de corredores ecológicos entre diferentes espacios forestales próximos a Madrid.

La Comunidad de Madrid ha desarrollado en estos parques una política de mejoras en caminos, sistemas de riego, plantaciones de árboles y arbustos, zonas de-portivas e infantiles, miradores y centros de educación ambiental.

3. Incidencia de la normativa urbanística de Ayuntamientos de la Comunidad de Madrid en materia de parques forestales

Además de estos parques forestales promovidos por la Comunidad de Madrid, diferentes Ayuntamientos ma-drileños han desarrollado en su normativa urbanística y planeamiento sus propios parques forestales.

Así, el Ayuntamiento de Madrid ha desarrollado par-ques forestales propios. Puede destacarse el Parque forestal de Villaverde, con una finalidad esencial de re-generación urbana y financiación en un 50 % de la ini-ciativa URBAN, Fondo Europeo de Desarrollo regional.

La finalidad del mantenimiento de parques forestales, en buena parte antiguos cazaderos reales, y la creación de nuevos espacios forestales por parte del Ayuntamien-to de Madrid, coincide, lógicamente, con la de aquellos que son de titularidad de la Comunidad de Madrid: conformar un manto verde en la trama urbana y que estos espacios estén unidos a través de pasillos verdes.

En el ámbito municipal, y en desarrollo de las Previsio-nes de los Planes Generales, el instrumento urbanístico más adecuado para el desarrollo de las previsiones de dichos planes generales, en relación a los parques fores-tales municipales, es el Plan Especial.

El hecho de que estos terrenos estén destinados por el Planeamiento a Par-ques Forestales, hace que no requieran la titularidad pública, aunque su ad-quisición progresiva vía expropiación suele ser una previsión de las normas urbanísticas municipales.

Los usos de los terrenos integrantes de los parques forestales están fuertemente limitados en la medida que se prohíben los usos o aprovechamientos que impli-quen transformación de su destino.

A los ayuntamientos corresponde la protección de las masas forestales, además de a la Administración fores-tal correspondiente, aun en el caso de que no sean espacios de titularidad municipal, para evitar actuaciones que supongan atentado contra el carácter de estos terrenos. La Ley 9/2001, de 17 de julio, del suelo de la Comunidad de Madrid, dispone en su artículo 3.2 letras a) y f), dentro de los fines de la ordenación urbanística, la preservación de las características de los espacios

naturales protegidos y del suelo excluido del proceso de urbanización, y la protección, rehabilitación y mejora del medio ambiente urbano y rural. Frente a las agresiones que puedan sufrir estos espacios, en particular en caso de incendio, se establece la obligación de restitución medioambiental, así como que durante los treinta años siguientes al incendio no puedan incluirse estos terrenos en otra clase de suelo, salvo por ley de la Comunidad de Madrid, con la necesaria motivación.

Fuente ornamental existente en la zona de disuasión frente al Centro Comercial Monte del Pilar

Una de las zonas de Reserva Natural del Monte del Pilar

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015. Páginas 30-33 – 33 –

Divulgación

M. C. Alcalá Gómez

4. Especial referencia al Monte del Pilar de Majadahonda

Dentro de los municipios de la Comunidad de Madrid, además de los parques forestales con que se ha dotado la capital, puede destacarse la regulación de otros muni-cipios, como es el caso del Monte de “El Pilar”, de 800 hectáreas, y que tiene una parte en el término municipal de Madrid (109 ha), otra en Pozuelo de Alarcón (458 ha) y otra en Majadahonda (243 ha).

Por lo que se refi ere a Majadahonda, protege su parte del parque forestal mediante un Plan Especial, aproba-do defi nitivamente el 1 de octubre de 1997.

Este Plan Especial del Monte del Pilar se defi ne como un desarrollo de las previsiones del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Majadahonda, con la fi nalidad de integrar el Monte del Pilar como zona verde dentro del Patrimonio Público, preservándolo mediante criterios restrictivos de uso, y con tres objetivos priorita-rios: la conservación de un espacio valioso y frágil, com-patibilizar el mantenimiento de este espacio con usos recreativos y didáctico-culturales, y viabilizar su gestión.

Dada la fecha de elaboración de este Plan Especial y los importantes cambios normativos posteriores, tanto a nivel estatal como autonómico, así como la necesidad de evaluar si los objetivos y programas de actuación recogidas en 1997 se han cumplido y cómo, sería ne-cesario, como en relación a otros Planes Especiales de Municipios madrileños, su revisión.

La protección de algo tan valioso como los espacios forestales debería tener a nivel municipal el correspon-diente esfuerzo de actualización en la regulación de su protección y gestión.

Hay que recordar a tal efecto lo que dispone la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad (BOE nº 299, de 14/12/2007), en cuya exposición de motivos (apartado tercero) se dice: “(…) las Administraciones competentes garantizarán que la gestión de los recursos naturales se produzca con los mayores benefi cios para las generaciones actuales, sin merma de su potencialidad para satisfacer las necesida-des y aspiraciones de las generaciones futuras, velando por el mantenimiento y conservación del patrimonio, la

Bibliografía Ayuntamiento de Majadahonda. Conoce el Monte del Pilar. http//www.majadahonda.org/conoce-el-mon-

te-del-pilar.html.Comunidad de Madrid. www.madrid.org.España. Ley 43/2003, de 21 de noviembre, de Montes. Boletín Ofi cial del Estado, 22 de noviembre de

2003, nº 280.España. Ley 10/ 2006, de 28 de abril, por la que se modifi ca la Ley 43/2003, de 21 de noviembre, de

Montes (BOE de 29 de abril de 2006, nº 102).España. Ley 42/2007, de 13 de diciembre, del patrimonio Natural y de la Biodiversidad (BOE de 14 de

diciembre de 2007, nº 299).España. Ley 16/1995, de 4 de mayo, Forestal y de Protección de la Naturaleza de la Comunidad de Madrid

(BOCM de 30 de mayo de 1995, corrección de errores BOCM de 28 de junio de 1995).España. Ley 8/2005, de 26 de diciembre, de Protección y Fomento del arbolado urbano de la Comunidad

de Madrid. BOCM de 31 de diciembre de 2005, con corrección de errores BOCM 19 de enero de 2006.GARCÍA VALDECANTOS, J. L.; 2011. Medio físico: El parque de Polvoranca y su relación con los usuarios.

Foresta, número especial Comunidad de Madrid.RODRÍGUEZ BARREAL, J. A.; et al.; 1997. El parque periurbano de la Casa de Campo y su importancia social

para Madrid. VI Congreso IPFRA Europa, pág. 141-173. Madrid.

biodiversidad y los recursos naturales existentes en todo el territorio nacional, con independencia de su titularidad o régimen jurídico, atendiendo a su ordenado aprove-chamiento y a la restauración de los recursos renova-bles.”chamiento y a la restauración de los recursos renova-bles.”

Vista de la torre de vigilancia contra incendios desde uno de los caminos del Monte del Pilar

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Opinión

Los Juegos del Hambre

Miguel Cabrera BonetDoctor Ingeniero de Montes

[email protected]

Los precios de licitación para los proyectos de orde-nación promovidos por las Comunidades Autónomas han venido disminuyendo progresivamente desde el co-mienzo de la crisis económica. Es cierto, sin embargo, que algo se ha hecho por parte de algunas para que las ordenaciones se sigan haciendo con la misma cali-dad que las que se hacían con precios precrisis, ya que han puesto o están poniendo en marcha mecanismos (normativos generalmente) que contribuyen a agilizar la elaboración de los proyectos.

Las empresas del sector y los profesionales autóno-mos, como siempre que el hambre acecha, han puesto en marcha su ingenio y conocimientos y han mejorado técnicas y tecnologías, haciendo, además, un esfuerzo en la mejora de sus medios para dar respuesta, con las mismas exigencias, al reto de poder trabajar con los nuevos precios. La utilización de técnicas nuevas de inventario (LiDAR; ForeStereo;...) o el recurso a metodo-logías que estaban implícitas en las Instrucciones de Ordenación (muestreos estratificados dirigidos, etc.) han conseguido que las empresas y profesionales del sector hayan podido asumir esos bajos precios, manteniendo aún la calidad del producto... hasta ahora.

Sin embargo, la progresiva bajada de precios para estos trabajos (y esto es extensible a otros proyectos, obras o aprovechamientos en el medio forestal) está al-canzando cotas que suponen una reducción de un 70% a un 80% respecto a lo que se pagaba a principios de siglo. Como referencia, basta con consultar los precios que fijaban entonces las tarifas de honorarios del Cole-gio. Esta bajada no se puede asumir ni con las innova-ciones realizadas, y, en mi opinión, está comenzando a traspasar el límite de lo admisible por el monte y por los profesionales forestales. Es cierto que es la ley de la ofer-ta y la demanda, y que las empresas y profesionales nos presentamos a los concursos rebajando nuestros precios a importes que están absolutamente alejados de lo que puede considerarse como el precio horario razonable de cualquier titulado que ha dedicado muchos años de estudio y muchos años de experiencia a estos proyectos, o del precio horario de un ingeniero de la Administra-ción. La necesidad de conseguir trabajo por parte de las pequeñas empresas o ingenieros autónomos ha obli-gado a aceptar estas bajadas por ahora sin rechistar. Sin obviar la parte de responsabilidad de los que entra-mos en este juego, pudiera ser que el razonamiento por parte de quien fija esos precios es que si se entra sobre determinados precios con unas bajadas de licitación, es porque pueden seguirse bajando los precios indefinida-mente; tal vez, según este mismo razonamiento, hasta que se tenga que pagar por hacer el trabajo por parte de quien lo contrate... ¿Es esto ético? Cada uno tiene su opinión. Parece obvia cuál es la de quien esto escribe. Eso es jugar con el hambre de los que dependen de nosotros. Creo que ha llegado el momento de que quie-nes pensamos de esta manera hagamos oír nuestra voz: al menos que nos quede el derecho al pataleo. Y, si se quiere salir del agujero, lo primero es dejar de cavar.

Los presupuestos en los que se sostienen las propues-tas de proyectos de ordenación por parte de la Admi-nistración, salvo excepciones, no consideran determina-dos costes que se producen en una ordenación, ponen precios unitarios de personal alejados de la realidad o consideran rendimientos exageradamente optimistas. La consultoría forestal privada, en el contexto forestal espa-ñol actual, es fundamental para redactar proyectos que la Administración no puede acometer, por falta de me-dios y tiempo, y para servir de punta de lanza en I+D, y en la asimilación de nuevas tecnologías y metodologías al sector forestal (que la Administración apenas puede hacer). En muchos casos, los gestores que necesitan de la consultaría privada, se aprovechan de la situación de crisis económica para, haciendo un símil forestal, “resi-narnos a muerte”. Es una falacia que la competitividad hasta el extremo pueda mejorar al sector. Por ahora, lo que está consiguiendo es que muchas empresas conso-lidadas en los últimos 20 años echen el cierre, lo que conlleva una pérdida de músculo en la consultoría del sector forestal.

Todo esto, además, puede devenir en una pérdida de calidad del producto a entregar que irá en detrimen-to de la gestión y que puede terminar por volverse en contra de nuestra propia profesionalidad, perdiendo credibilidad sobre la solvencia técnica de los proyectos de ordenación. Aunque lo que realmente puede acabar con la calidad de la planificación y la gestión forestal es precisamente la destrucción del sector.

Otras ingenierías también con vocación de fomento no minusvaloran las actividades profesionales de sus compañeros en la actividad privada. En otras palabras, eso sería como admitir que la profesión forestal es pres-cindible... incluso dentro de la propia Administración. Y la Administración tiene la responsabilidad de crear un entorno favorable al sostenimiento de la industria y sec-tores económicos en tiempos de crisis, al revés de lo que muchos están haciendo con estas actitudes de juegos del hambre.

El Reglamento (UE) nº 1305/2013, de 17 de diciem-bre, de ayuda al desarrollo rural a través de los Fondos FEADER (artículo 21), determina que la ayuda estará su-peditada a la presentación de la información pertinente procedente de un plan de gestión o equivalente que sean compatibles con una gestión forestal sostenible. Es decir, a partir de la implantación de los Planes de Desarrollo Rural, elaborados a partir del Reglamento 1305/2013, para la percepción de ayudas de Fondos FEADER es imprescindible contar con el adecuado instru-mento de planificación de la gestión forestal sostenible. Si queremos que lleguen estas ayudas de Europa a Es-paña, es necesario hacer muchos planes técnicos, pro-yectos de ordenación o equivalentes. Pero es obvio que tienen que ser documentos de calidad, elaborados por profesionales de solvencia; no se pueden hacer a costa de cualquier cosa, porque si se hace así, no reflejarán adecuadamente la realidad y podrán dar lugar a actua-ciones que tengan poco que ver con lo planificado. Y

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Opinión

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OpiniónOpinión

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que a la larga, si se realiza una gestión mediocre por ausencia de calidad en la planifi cación de la misma, la que a la larga, si se realiza una gestión mediocre por ausencia de calidad en la planifi cación de la misma, la que a la larga, si se realiza una gestión mediocre por

estructura natural se resentirá, lo que puede llevar a la retirada de las ayudas solicitadas.

Refl exionemos, por favor. Está claro que en los contex-retirada de las ayudas solicitadas.

Refl exionemos, por favor. Está claro que en los contex-retirada de las ayudas solicitadas.

tos de crisis los precios se racionalizan, los medios se adecúan a las ofertas, las técnicas y tecnologías mejo-tos de crisis los precios se racionalizan, los medios se adecúan a las ofertas, las técnicas y tecnologías mejo-tos de crisis los precios se racionalizan, los medios se

ran, los rendimientos se ajustan y los costes se aquilatan. Pero todo tiene un límite. No se puede bajar indefi nida-ran, los rendimientos se ajustan y los costes se aquilatan. Pero todo tiene un límite. No se puede bajar indefi nida-ran, los rendimientos se ajustan y los costes se aquilatan.

mente el precio. Obviamente, de lo que estamos hablando no es del

hormigón de una estructura, porque si fuera este el caso, Obviamente, de lo que estamos hablando no es del

hormigón de una estructura, porque si fuera este el caso, Obviamente, de lo que estamos hablando no es del

terminaríamos lamentando desgracias personales y con-secuencias penales. Pero tenemos que pensar que un proyecto de planifi cación de la gestión forestal sosteni-secuencias penales. Pero tenemos que pensar que un proyecto de planifi cación de la gestión forestal sosteni-secuencias penales. Pero tenemos que pensar que un

ble es el que regula la forma de realizar dicha gestión proyecto de planifi cación de la gestión forestal sosteni-ble es el que regula la forma de realizar dicha gestión proyecto de planifi cación de la gestión forestal sosteni-

para sostener la estructura natural. Sin olvidar que, así como todas las ingenierías proyectan fundamentalmente para sostener la estructura natural. Sin olvidar que, así como todas las ingenierías proyectan fundamentalmente para sostener la estructura natural. Sin olvidar que, así

en el espacio, la ingeniería forestal lo hace en el tiempo, como todas las ingenierías proyectan fundamentalmente en el espacio, la ingeniería forestal lo hace en el tiempo, como todas las ingenierías proyectan fundamentalmente

de ahí la importancia de la planifi cación y de la orde-en el espacio, la ingeniería forestal lo hace en el tiempo, de ahí la importancia de la planifi cación y de la orde-en el espacio, la ingeniería forestal lo hace en el tiempo,

nación de los recursos forestales: tener que recordar esto de ahí la importancia de la planifi cación y de la orde-nación de los recursos forestales: tener que recordar esto de ahí la importancia de la planifi cación y de la orde-

es muy descorazonador para un ingeniero de Montes.

No quiero terminar sin apuntar posibles soluciones: la primera pasa por una normalización de las ordenacio-nes, cosa que las Instrucciones o Pliegos de Condicio-nes de las diferentes CC.AA. recogen en buena parte, nes, cosa que las Instrucciones o Pliegos de Condicio-nes de las diferentes CC.AA. recogen en buena parte, nes, cosa que las Instrucciones o Pliegos de Condicio-

pero que sería necesario afi nar, ya no tanto por su con-nes de las diferentes CC.AA. recogen en buena parte, pero que sería necesario afi nar, ya no tanto por su con-nes de las diferentes CC.AA. recogen en buena parte,

tenido como por los formatos, estandarizándolos; la pero que sería necesario afi nar, ya no tanto por su con-tenido como por los formatos, estandarizándolos; la pero que sería necesario afi nar, ya no tanto por su con-

segunda, que ya varias comunidades autónomas han realizado o están realizando, poner a disposición de los técnicos herramientas informáticas ágiles, sencillas y realizado o están realizando, poner a disposición de los técnicos herramientas informáticas ágiles, sencillas y realizado o están realizando, poner a disposición de

que faciliten (y no al contrario) la elaboración de las los técnicos herramientas informáticas ágiles, sencillas y que faciliten (y no al contrario) la elaboración de las los técnicos herramientas informáticas ágiles, sencillas y

ordenaciones (incluyendo el abaratamiento de los inven-tarios); la tercera, que se aligeren de contenidos innece-sarios, farragosos y, en consecuencia, costosos, los tex-tarios); la tercera, que se aligeren de contenidos innece-sarios, farragosos y, en consecuencia, costosos, los tex-tarios); la tercera, que se aligeren de contenidos innece-

tos de las ordenaciones (en la actualidad se dispone de muchísima información sobre el medio natural y forestal, tos de las ordenaciones (en la actualidad se dispone de muchísima información sobre el medio natural y forestal, tos de las ordenaciones (en la actualidad se dispone de

a la que bastaría con hacer referencia). Y sería bueno muchísima información sobre el medio natural y forestal, a la que bastaría con hacer referencia). Y sería bueno muchísima información sobre el medio natural y forestal,

contar con tablas de referencia de precios de ordena-a la que bastaría con hacer referencia). Y sería bueno contar con tablas de referencia de precios de ordena-a la que bastaría con hacer referencia). Y sería bueno

ción que, dentro de las lógicas diferencias por las ca-contar con tablas de referencia de precios de ordena-ción que, dentro de las lógicas diferencias por las ca-contar con tablas de referencia de precios de ordena-

racterísticas de cada monte, orientaran sobre precios razonables, calculados sobre precios reales de perso-nal, de medios y materiales, y sobre rendimientos razo-nables.nal, de medios y materiales, y sobre rendimientos razo-

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Opinión

Incendio de Sierra de Gata; ¿qué está fallando?

Blas Curado FuentesIngeniero de Montes

Resp. Área Medio Ambiente IC MEJORA [email protected]

Los incendios forestales vienen azotando el medio na-tural a lo largo de la Historia. Antes de que fuéramos capaces de controlar el fuego, encenderlo y apagarlo, los bosques han sufrido siempre de este acontecimien-to fatídico. La diferencia es que antaño el único origen (culpable) era la propia madre Naturaleza: rayos de tor-mentas, altas temperaturas estivales, el viento, el propio combustible propiciado por vegetación vivaz, etc.

Ahora sin embargo entra en juego el factor humano. Los motivos pueden ser muchos y tantos como personali-dades e intereses existen en cada individuo: venganzas, problemas psicológicos o psiquiátricos, desinterés por el monte en busca de cambios drásticos del uso del suelo para poder llevar a cabo otras actividades más rentables, demandadas y de enriquecimiento personal rápido (p.e. agrícolas, urbanísticas, expropiaciones, uso público, etc.). No es mi intención analizar las causas de los incendios como el de Sierra de Gata, pues compete a las Autoridades encontrar al responsable/s y aplicar la ley que corresponda (delito penal, civil o ecológico).

Sea el origen natural o humano, el caso es que hemos creado mecanismos con los que se pretende minimizar el riesgo de incendio forestal, que sobre el papel pare-cen efi caces, pero la realidad es que cada año (en ve-rano) se nos refuta la teoría y echa por tierra el método y nos alerta de que algo no está funcionando bien.

Entre estas estrategias hemos creado leyes importantes como la “archi mencionada” Ley de Montes (actualiza-da este año 2015), que permite urbanizar en terrenos afectados por incendios forestales por interés público, compensando la superfi cie afectada plantando (repo-blando) un área similar a la perdida en otra zona. Esto da mucho que pensar… y nada bueno viene a la mente, ¿verdad?

Solo un par de refl exiones al respecto, ¿crees que es lo mismo repoblar la superfi cie igual a la quemada en otra zona? Yo personalmente (y siendo ingeniero de Montes) aseguro que no. Es de primero de carrera saber que un monte no se iguala al perdido hasta pasadas varias

décadas, y en el caso del pino resinero (Pinus pinaster) de Sierra de Gata, 150 años por lo menos, y encinas y alcornoques ya casi 300 años… Por otro lado, si se puede compensar en otra zona repoblando, es bueno saber que repoblar signifi ca poner árboles (plantones de pocos cm) en zonas rasas… ¿Signifi ca eso que entonces habrá otras superfi cies degradadas ya por otros incen-dios forestales esperando a ser repobladas por las que ahora se han quemado en Gata? ¿Qué signifi ca esto? ¿No crees que esto puede dar lugar a una cadena sin fi n de quemar-repoblar-quemar-repoblar…. pero en dis-tintas zonas?... Me huele a chamusquina.

Volviendo a los mecanismos y normas que se han creado para evitar los incendios forestales, en Extrema-dura contamos con el famoso PREIFEX (Plan de Preven-ción de Incendios Forestales de Extremadura). Esta nor-mativa ya lleva en vigor unos cuantos años, pero parece que mucho fruto no da. Pues bien, el PREIFEX obliga (o si no, sanciona) a los propietarios de terrenos forestales (fi ncas de dehesa incluidas) de más de cierta superfi cie y en ciertas zonas de riesgo, a elaborar un Plan de prevención frente a incendios forestales, que debe ser aprobado por la Administración Forestal autonómica y posteriormente ejecutarse por el propietario anualmen-te. Las actuaciones a las que obliga al propietario son básicamente apertura y repaso anual de cortafuegos perimetrales en la fi nca para evitar la propagación de incendios de fuera a dentro y viceversa.

Pues bien, si Extremadura (o como el caso de Gata) es prácticamente monte en manos privadas, principalmen-te compuesto por fi ncas de unas 400 ha de media, y pocas superan las 1.000 ha, eso signifi ca que nuestro monte está fragmentado en trocitos, que a su vez y se-gún el PREIFEX deben tener sus perímetros de seguridad. Entonces, ¿cómo es posible que un incendio (sea el ori-gen y el motivo el que sea) no sea controlado y arrase casi 8.000 ha en dos días? Mi respuesta: los planes PREIFEX, o no se hacen o no se vigila que se cumplan. ¿Culpables? Todos. Los propietarios y la Administración, esta última por inefi cacia en su función de policía. Ah, eso sí, si hay un incendio y el propietario no tiene el PREI-FEX aprobado y aplicado, la Administración le puede sancionar con fi nes recaudatorios para poder sufragar los costos de la extinción (que suelen ser elevadísimos). ¿Tiene sentido? No, porque al fi nal pierde el Medio Am-biente, las personas y los propietarios.

Ante esta hipótesis la Administración siempre alega falta de medios y recursos para ejercer la función de vigilancia en el cumplimiento de planes PREIFEX, y no les falta razón, porque prevenir no está de moda: nadie lo ve, es una labor silenciosa pero honrada, no da votos, etc. Un claro ejemplo una vez más de ello, es la actual demonizada Ley de Montes, que quita autoridad para sancionar a los funcionarios mileuristas del monte (Guar-das forestales o Agentes del Medio Natural)… Entonces la cosa está clara: no habrá en el futuro, ni por asomo,

Faja cortafuegos en un encinar de la provincia de Cáceres

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una mayor intensidad en lograr los objetivos del PREI-FEX… Allá cada uno (dirán).

Además y para más “inri” las localidades afectadas por el incendio de Gata (Hoyos, Acebo, etc.), que han estado en boca de todos porque ha sido una verdadera tragedia, también (como muchas de Extre-madura) tienen las obligación de cumplir el PREIFEX al estar en zona de Alto Riesgo (ZAR). ¿Lo han hecho? El decreto que regula el PREIFEX obliga igualmente a los Ayuntamientos a elaborar y ejecutar planes periur-banos de prevención de incendios, con el fi n de que el fuego no entre al pueblo y/o que el pueblo no sea

el foco de inicio de un incendio forestal. Estos planes periurbanos son responsabilidad de “los Alcaldes de turno”, que si no los llevaban a rajatabla, son ellos los culpables (en parte) de que se tenga que desalojar el pueblo entero y que haya cundido el pánico y se hayan perdido bienes materiales e inmateriales de los pobres vecinos… Téngalo en cuenta para la próxima (elecciones).

Cuando pase el calor y empecemos a oír las campa-nas de Navidad, por favor no nos olvidemos de que los incendios se apagan en invierno, y de quiénes son real-mente los primeros responsables.

, y de quiénes son real-

Cortafuegos periurbano en municipio extremeño (línea naranja) Jaral denso en fi nca cacereña

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Podas en pinar joven para reducir combustible

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Opinión

Logotipo del 12º CONAMA. Se aprecia la ausencia de los bosques y las repoblaciones pese a su importancia como

fi jadores de CO2 para una economía baja en carbono. Fuente: http://www.conama2014.conama.org

Hasta ahora se han propuesto numerosas ideas para se-cuestrar y fi jar carbono de la atmósfera, desde inyectarlo en yacimientos petrolíferos o gasísticos agotados hasta di-luirlo en el agua de los océanos. Pero hasta ahora ninguna de estas ideas ha sido viable por motivos técnicos o eco-nómicos. La única forma efectiva y viable conocida hasta ahora para secuestrar y fi jar carbono de la atmósfera es la repoblación forestal.

En este sentido, el anteproyecto de Ley Andaluza de Cambio Climático contempla la creación del Sistema An-daluz de Compensación de Emisiones (SACE), que preten-de estimar las emisiones difusas de gases de efecto inver-nadero que no están sujetas al régimen del comercio de derechos de emisión, y obligar a las industrias y empresas responsables de dichas emisiones difusas a su compensa-ción mediante proyectos de mitigación, que serán funda-mentalmente repoblaciones forestales en terrenos de que dispongan las empresas afectadas o en montes públicos patrimoniales y demaniales.

No debería hacer falta extenderse para describir la lamen-table situación en que se encuentra nuestro sector y nuestra profesión en España. La importancia productiva y la rentabili-dad económica de la mayor parte de los montes arbolados y de los aprovechamientos forestales se desplomó a lo largo del s. XX. Y el sector forestal quedó prácticamente fuera de las subvenciones agrarias de la PAC.

De los montes públicos, y particularmente los de utilidad pública, sólo se encuentran ordenados una pequeña par-te; y de los privados la superfi cie ordenada es residual o nula. En muchas comunidades autónomas la situación de los montes públicos podría califi carse como de auténtico abandono. La transferencia de las competencias forestales a las autonomías supuso que en la mayor parte de ellas, si no todas, las repoblaciones forestales y las restauraciones hidrológico-forestales fueran total o prácticamente paraliza-das a partir de los años 80 debido a (1) los prejuicios contra los pinares, alimentados por el movimiento ecolo-gista, (2) la casi absoluta ausencia de pinos y pinares en las aceptadísimas series de vegetación de Rivas-Martínez pese a su demostrada importancia en el paisaje ibérico a

lo largo de todo el holoceno, (3) la inclusión como LICs y ZECs, Hábitats de Interés Comunitario y Hábitats Priorita-rios de matorrales y pastos que ocupan terrenos deforesta-dos y sustituyen a bosques como consecuencia del fuego, el pastoreo indiscriminado o las talas incontroladas, y (4) la obligación de someter las repoblaciones forestales (incluso las protectoras) a evaluación de impacto ambiental como si fueran una actuación nociva contra el propio monte.

El sector y la administración forestal quedaron prácticamen-te marginados del crecimiento, el desarrollo económico y la modernización que experimentó el país y la administración pública en el resto de los sectores desde los años 80 y 90 hasta la crisis de 2008. No es ningún atrevimiento afi rmar que en España el sector forestal está incomprendido, margi-nado y abandonado en la administración y por la sociedad.

Como profesión, descuidamos o incluso despreciamos el arbolado urbano y la jardinería como competencia pro-fesional, campos donde ahora ingenieros agrónomos y agrícolas, e incluso arquitectos, nos comen nuestro terreno clamorosamente. En décadas pasadas, cuando la deserti-fi cación y la erosión eran el tema ambiental de mayor rele-vancia científi ca y divulgativa, como profesión no pudimos o no supimos explicar a la sociedad y a la administración la importancia y efectividad de las repoblaciones y res-tauraciones hidrológico-forestales. Biólogos, ambientalistas e incluso veterinarios no dejan de invadir competencias tradicionalmente forestales (como la gestión cinegética y piscícola, las repoblaciones y revegetaciones, o la gestión del medio natural), mientras parecemos incapaces de ha-cer valer ante el legislador y la justicia nuestra capacidad y preparación frente a otros ingenieros para trabajar en campos como los ríos y su gestión, el abastecimiento y saneamiento de agua, o las emergencias (más allá de los incendios forestales). Muchas de estas materias siguen au-sentes o insufi cientemente recogidas en los planes de estu-dios de las escuelas de Montes y Forestales.

En este contexto, y como evidencian tanto el SACE del anteproyecto de Ley Andaluza de Cambio Climático como en general la indiscutible relevancia del cambio climático en todos los foros científi cos y académicos (como el propio CONAMA), la función del secuestro y fi jación de carbono atmosférico que realizan los bosques, y especialmente las repoblaciones forestales, son una oportunidad única para el sector forestal y para los ingenieros de Montes como profesión, para relanzar una política forestal que en Espa-ña está abandonada.

El pasado mes de noviembre se celebró en Madrid el 12º Congreso Nacional de Medio Ambiente (CONAMA) bajo el título Economía baja en carbono. La única sesión que hubo en dicho congreso sobre algún tema forestal fue una sesión organizada por el Colegio de Ingenieros de Montes sobre la nueva Ley de Montes.

Sorprende la absoluta ausencia del papel de los bos-ques y las repoblaciones forestales como fi jadores de car-bono en un CONAMA que trató precisamente sobre “una economía baja en carbono”. Y resulta particularmente pe-noso el papel ausente e inactivo de los dos colegios (Cole-gio de Ingenieros de Montes y Colegio de Ingenieros Téc-nicos Forestales) y de las escuelas de ingenieros de Montes y Forestales.nicos Forestales) y de las escuelas de ingenieros de Montes

12º Conama: Oportunidad perdida para el Sector Forestal y los ingenieros de Montes

Andrés López-CotareloIngeniero de [email protected]

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 39 –

Cuál es tu opinión

LOS PLANES DE DESARROLLO RURAL Y LO FORESTAL

El 17 de diciembre de 2013 el Parlamento y el Con-sejo de la Unión Europea aprobaron el nuevo Regla-mento 1305/2013 relativo a la ayuda al desarrollo rural a través del Fondo Europeo Agrícola de Desa-rrollo Rural (FEADER), que establece las medidas a financiar por este fondo para el periodo de progra-mación 2014-2020.

Los Estados miembros han tenido que elaborar sus Programas de Desarrollo Rural (PDR) basándose en al menos cuatro de las seis prioridades comunes de la UE:•  Fomentar la transferencia de conocimientos y la

innovación en la agricultura, la silvicultura y las zonas rurales.

• Mejorar la viabilidad y la competitividad de to-dos los tipos de agricultura y promover las tecno-logías agrícolas innovadoras y la gestión sosteni-ble de los bosques.

•  Promover la organización de la cadena alimenta-ria, el bienestar de los animales y la gestión de riesgos en la agricultura.

•  Restaurar, conservar y mejorar los ecosistemas dependientes de la agricultura y la silvicultura.

•  Promover la eficiencia de los recursos y apoyar el paso a una economía hipocarbónica y adapta-ble a los cambios climáticos en los sectores agrí-cola, alimentario y forestal.

•  Fomentar la inclusión social, la reducción de la pobreza y el desarrollo económico en las zonas rurales.

La financiación procede en parte del FEADER y en parte de fuentes nacionales o regionales. Espa-ña, con 17 PDR autonómicos y uno nacional (PNDR), movilizará en este periodo unos 13.000 millones de euros. De ellos, 2.000 millones estarán destinados a impulsar medidas de carácter forestal, según decla-ró la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, con motivo de la 7ª Conferencia Ministerial del proceso Forest Europe, celebrada en Madrid en octubre.

En este marco, la Revista Montes propone al lector las siguientes preguntas:

Pregunta 1.- ¿Cuál crees que ha sido la repercusión de este programa sobre los sistemas forestales en el periodo anterior?

Pregunta 2.- ¿Te parece adecuada la proporción de fondos destinados a medidas forestales?

Pregunta 3.- ¿En qué sentido crees que el desarrollo de los diferentes PDR influirá en los montes como ge-neradores de empleo?

A continuación se exponen algunas de las opinio-nes manifestadas a través de la página web de la Revista. Las que no han podido ser publicadas en papel por falta de espacio, están a disponibles en www.revistamontes.net.

Andrés Blázquez Jiménez

Ingeniero de Montes y licenciado Cien-cias AmbientalesAgroforestra Medioambiental S.L. San-tisteban del Puerto (Jaén)[email protected]

1. Poco eficiente debido a que la ejecución de las obras forestales dentro de los PDR se han limitado a actuaciones demasiado puntuales y a última hora, desti-nadas a agotar de alguna manera (y en algunos casos ni a eso) los fondos destinados a tal fin. Además en las escasas obras forestales en PDR que conozco que se han hecho en esto últimos años de crisis global, el objetivo principal ha sido dar empleo, pasando por alto que la obra realizada sirviera para algo forestalmente hablando, como por ejemplo que la repoblación se hi-ciera en época adecuada o priorizar podas en lugar de claras o clareos.

2. Me parece escasa teniendo en cuenta el porcentaje de masa forestal existente en muchos municipios, siendo claramente una fuente generadora de empleo, el cual es tan necesario para la subsistencia de estos municipios, para su desarrollo y para evitar que los sectores más jó-venes de la sociedad desaparezcan de estas zonas. Se podría aprovechar esta oportunidad para el desarrollo de las zonas rurales en una época tan desfavorable y en un período tan crítico como es 2014-2020, pero por desgracia parece ser que Europa mira para otro lado. Desde mi punto de vista, en el año 2020, el panorama en las zonas rurales en los que la mayor parte de su término municipal sea eminentemente forestal, puede ser desolador.

3. Como generadores de empleo puede influir de forma positiva, pero lo suyo es que influya desde ya, porque no hay tiempo debido a la situación de crisis y a cómo se encuentran los montes. No puede ocurrir otra vez lo mismo que ha pasado con el anterior Plan, que ha sido a última hora cuando ha dado a luz, con prisas y sin miramientos a medio plazo hacia el monte. La generación de empleo debe hacerse ya pero unida siempre a la correcta ejecución de la obra, poniendo interés en el futuro del monte y priorizando las obras forestales que sean más importantes según el contexto rural donde se encuentren.

Blas Curado Fuentes

Ingeniero de MontesIC Mejora SL. Área [email protected]

1. Como bien es sabido, la superficie forestal (arbola-da) se ha visto incrementada en un porcentaje significa-tivo (33%) en los últimos 25 años, lo cual evidencia de una u otra forma una tendencia positiva en la gestión sostenible del recurso forestal en España, estando por ejemplo algunas CCAA en una posición destacable, como Extremadura, donde casi el 50% de su superficie es forestal, teniendo en cuenta el ecosistema adehesa-do. Ahora lo que no está claro es que si esta mejoría se debe a dichos Planes anteriores o a otro factores,

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 40 –

Cuál es tu opinión

como ayudas a la reforestación de tierras agrarias, crisis económica, etc.

2. En principio, los 2.000 millones representan sólo aproximadamente un 10% del total (13.000 millones), lo cual a priori es poco teniendo en cuenta las magnitudes de superfi cie forestal que he indicado anteriormente. El monte necesita de más ayudas pues los propietarios fo-restales privados obtienen poca renta si la comparamos con la agricultura, sobre todo en zonas donde el monte tiene valores y recursos naturales intangibles económi-camente frente a los bosques propiamente productores.

3. Debería infl uir positivamente, pero todo está por ver, pues en la mayoría de los casos al fi nal el dinero va a parar a manos de intermediarios, administracio-nes y demás entes gestores, no llegando casi nunca a los pueblos y a la población en paro de estos. Ponien-do el ejemplo de la obra forestal, pese a los esfuerzos para que estas generen mano de obra local, al fi nal los contratistas locales (sin medios) suelen subcontratar casi toda la obra a empresas grandes que normalmente traen su maquinaria, operarios y recursos, dejando sólo en los pueblos una mínima parte en el sector servicios (alojamientos, comida y poco más). Y todo ello parte de solvencias técnicas imposibles de cumplir que se exigen en Pliegos para poder contratar con la Administración.

Jesús Martínez Ben

Ingeniero de MontesfmC Forestal y Medioambiente consul-tores. A Coruñ[email protected]

1. Mínima, apenas ha tenido impacto, ya que sin una estrategia sólida en la cual se establezcan claramente las necesidades del sector en cada región y también a nivel nacional, toda esta fuente de recursos tan importan-te y que sin duda podría haber supuesto un empuje muy importante para lo forestal, termina dejando muy poca huella. Una vez más el sector (profesionales, industria, propietarios, Universidad, y por supuesto AAPP) sigue no estando a la altura de un recurso tan importante y con tanto potencial.

2. No sé si son o no adecuados, pero en mi opinión el problema, volviendo sobre la pregunta anterior, es que la mayor parte de dichos fondos irá destinado a acciones que no van a contribuir a los cambios y me-joras que necesita el recurso/sector forestal, debido a esa falta de política y estrategia clara. La falta de ideas, iniciativas y la negativa a abrir un debate serio es un cáncer de este sector.

3. Se generará el trabajo que las acciones habituales vienen propiciando, es decir, generación de trabajo a corto o muy corto plazo en medidas con muy bajo impac-to, y en muchos casos destinadas única y exclusivamente a hacer política (no forestal); perdiendo la oportunidad una vez más para que el grueso de las acciones traiga consigo de una vez por todas la puesta en marcha de proyectos motores del recurso, y la ocasión de que el sec-tor cambie radicalmente orientándose a dar un enfoque multifuncional, donde se resuelvan los problemas que le afectan gravemente (baja productividad, escaso impacto socio-económico en las zonas rurales, en relación al que podría tener, abandono, incendios, baja calidad de mu-chos de los productos y servicios de los montes,...).

Julio de la Cruz Moreno

Ingeniero de MontesFuncionario. Dirección General de Me-dio Natural. La [email protected]

1. En la mayoría de los casos ha servido para in-crementar la superfi cie forestal, pero se ha avanzado menos de lo esperado en cuanto al mantenimiento, la conservación y la mejora de los ecosistemas forestales, tanto los de nueva creación como los ya existentes.

2. Hay que ser realistas y asumir que, durante siglos, el mundo rural español se ha sustentado y se sustenta principalmente en la agricultura, la ganadería, el turismo rural y, en último lugar (salvo excepciones muy concretas y puntuales), están los aprovechamientos forestales. De-berían destinarse más fondos a crear una cultura forestal, a promocionar el uso de productos forestales, fruto de una gestión sostenible, así como a la formación de las actividades y puestos de trabajo que conlleva el sector forestal.

3. Mientras no se cree esa cultura forestal, se enseñe a la mayoritaria población urbana que los montes no se conservan solos, y se pongan en valor los ecosistemas forestales, en todas sus múltiples dimensiones (económi-ca, ecológica, ambiental, cultural, de ocio, etc.), será muy difícil revertir la actual tendencia al despoblamiento de los montes y las áreas rurales en general.

Sergi Marín i Monfort

Ingeniero de Montes e ingeniero AgrónomoAutónomoCastellón de la Plana

1. Diría que escasa, al menos en la zona de Caste-llón, donde los fondos se han destinado mucho a obras municipales promovidas por ayuntamientos, ya que han sido ellos los que controlaban los GAL (Grupos Acción Local). Después de varios LEADER, RURALTER, PDR, las zonas rurales siguen con crecimiento negativo y un des-poblamiento que no cesa. ¿Qué falla?

2. Proporcionalmente, teniendo en cuenta la superfi cie forestal existente, es una cantidad baja, pero si tenemos en cuenta la gente del mundo rural que se dedica en mayor o menor medida al trabajo forestal, no nos po-demos quejar. Otra cosa es saber cómo se subdividen exactamente los “fondos forestales”... porque si se van a empresas externas al mundo rural, por ejemplo en traba-jos de vigilancia, 4x4, etc., da igual 2 mil que 3 mil. Los fondos debieran quedarse siempre en el ámbito rural.

3. Trabajando con empresas locales que estén bien asentadas en el territorio o de nueva creación con pro-yectos creíbles y viables económicamente. Son nece-sarios planes estratégicos locales/comarcales que mar-quen las posibles líneas a seguir en cada zona, pero esto es un trabajo previo que rara vez se realiza.

La Revista no se hace responsable de los conteni-dos de las opiniones recogidas.

La Revista no se hace responsable de los conteni-

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Actividad colegial

La agencia de noticias Servime-dia organizó un encuentro sobre “La problemática de los incendios y la reforma de la Ley de Montes”, con profesionales de la lucha contra los incendios forestales y medios de comunicación, en el que participa-ron representantes de WWF, de la Asociación Nacional de Bomberos Forestales, del Colegio de Ingenieros de Montes, del Colegio de Ingenie-ros Técnicos Forestales y del Sindica-to de Agentes Forestales de Madrid.

Ricardo Vélez, vocal del Colegio de Ingenieros de Montes y ex jefe del Área de Defensa contra Incen-dios Forestales, destacó que el aban-dono generalizado del monte es la principal causa de los incendios, y que este abandono es una tendencia socio-económica generalizada en todo el sur de Europa, ya que “como los montes no resultan rentables, no se invierte en ellos.”

La coordinadora de restauración fo-restal de WWF, Diana Colomina, re-cordó que el 0,2% de los fuegos que se producen en España son grandes incendios, que han quemado el 44% del total de hectáreas quemadas. “Se debe poner el foco en reducir la vulnerabilidad de nuestros bosques al paso de las llamas, evitando el abandono de estas zonas y así la generación de combustible”. En este sentido, Íñigo Hernández, represen-tante de la Asociación Nacional de Bomberos Forestales aseguró que la palabra clave es “gestión forestal”,

RICARDO VÉLEz, PORTAVOz DEL COLEGIO EN EL FORO SERVIMEDIA SOBRE INCENDIOS FORESTALES

para lo que consideró fundamental la profesionalización del personal contra incendios. Así, explicó que “un monte gestionado todo el año, es más difícil de incendiar, y si se incendia, el fuego será más peque-ño”. Raúl de la Calle, secretario del Colegio de Ingenieros Técnicos Fo-restales, denunció que pese a que la legislación vigente obliga a ello, “solo el 13% del monte español cuen-ta con instrumentos de gestión”, y ha defendido que debería obligarse a todos los municipios españoles a contar con planes de prevención de incendios.

Por su parte, Marcos García Rey miembro de la Fundación Civio, autor de la investigación “España

en Llamas”, informó de que el 55% de los incendios acontecidos entre 2001 y 2013, se iniciaron de mane-ra intencionada, cifra que asciende hasta el 80% en el caso de Galicia. Según Marcos García, la problemá-tica de los incendios reside, además, en los problemas de coordinación existentes entre las Administraciones.

Por último, el secretario general del Sindicato de Agentes Forestales de Madrid, Miguel Higueira, se refirió a la reforma de la Ley de Montes como “una oportunidad perdida”, que bajo su punto de vista, “es un sinsentido, ya que dificulta la identificación de los delitos forestales por parte de los agentes forestales”.

El Colegio Oficial de Ingenieros de Montes y la Asociación de Fun-cionarios pertenecientes al Cuerpo de Ingenieros de Montes del Esta-do (AFIME), organizaron durante los meses de junio a septiembre unas jornadas de información práctica para interesados en presentarse a

II JORNADAS DE PREPARACIÓN DE OPOSICIONES: CUERPO DE INGENIEROS DE MONTES Y TÉCNICOS FACULTATIVOS SUPERIORES DE ORGANISMOS AUTÓNOMOS

DEL MINISTERIO DE MEDIO AMBIENTE

las plazas del Cuerpo de Ingenieros de Montes del Estado y Técnicos Fa-cultativos Superiores de OO.AA. del MAGRAMA.

En las mismas se trataron temas incluidos en el temario de las oposi-ciones, tales como la Directiva Mar-co del Agua y restauración de ríos, política forestal internacional, recur-sos genéticos forestales, evaluación de impacto ambiental y evaluación ambiental estratégica, instrumentos financieros comunitarios y su aplica-ción en el sector forestal, política de desarrollo rural, incendios forestales, restauración hidrológica y desertifi-

cación, contaminación atmosférica, normativa en materia de prevención y control integrados de la contami-nación y directiva sobre emisiones industriales. También se dieron unas nociones y consejos básicos a la hora de preparar una oposición.

Desde aquí queremos dar las gracias a nuestros compañeros fun-cionarios que han participado volun-taria y desinteresadamente en estas jornadas: Antonio López, Ferrnando Magdaleno, Francisco Javier Adell, Ana Suárez, Felipe Pérez, Juan Fco. Arrazola, Elena Hernández, Luis Martín y Marta Dopazo, así como a

La Revista no se hace responsable de los conteni-dos de las opiniones recogidas.

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 43 –

Actividad colegial

El Colegio Oficial de Ingenieros de Montes y la Asociación Profesional de Ingenieros de Montes al Servicio de la Hacienda Pública, han orga-nizado, durante los meses de julio y septiembre, unas jornadas de infor-mación práctica para interesados en presentarse al proceso selectivo para ingreso en el Cuerpo de Ingenieros de Montes de la Hacienda Pública convocado para este año.

Se trataron temas tales como la ac-tividad profesional del Ingeniero de Montes en la Hacienda Pública, la formación y mantenimiento del Catas-tro Inmobiliario, la valoración catas-tral de bienes inmuebles urbanos, rús-ticos y de características especiales, el acceso al Cuerpo de Ingenieros de Montes de la Hacienda Pública

(acceso libre y promoción interna), el catastro inmobiliario (organización y funciones), la colaboración adminis-trativa (Ayuntamientos, Diputaciones, Notarios y Registradores, FEGA), el sistema de información catastral, la actividad internacional del catastro o las actuaciones técnico-facultativas (Jurados de Expropiación Forzosa, Patrimonio del Estado, asesoramiento a la Intervención General del Estado).

Queremos agradecer la participa-ción de nuestros compañeros Manuel Rojo, Rafael Gallegos, Bruno López, Borja Olea, Álvaro Tapias, Amalia Velasco y Santiago Sutil, sin la cual no se habrían podido llevar a buen término estas Jornadas. También que-remos agradecer a la directiva de la Asociación Profesional de Ingenieros de Montes al Servicio de la Hacien-da Pública las facilidades dadas a la hora de programar y desarrollar estas jornadas.

Entre los datos de la encuesta rea-lizada por el Colegio a los asisten-tes a la misma conviene destacar: respecto a la organización de estas

jornadas, el 88% de los participantes se muestran satisfechos con la infor-mación previa recibida; respecto a los ponentes, el 77% considera que han sido motivadores, el 80% consi-dera además que se explicaban con claridad y el 80% también, que se ha respondido adecuadamente a las preguntas realizadas; respecto a las ponencias realizadas, el 77% de los participantes considera adecuada la información facilitada para poder preparar las oposiciones, el 73% ha considerado adecuada la duración de las sesiones programadas y el 77% de los participantes ha visto sa-tisfechas sus expectativas respecto a estas jornadas; y finalmente, el 84% de los participantes ha mostrado su satisfacción por el desarrollo de este evento.

Para sucesivas convocatorias simi-lares el Colegio intentará organizar una nuevas jornadas de preparación de oposiciones.

Contenidos de la Jornada:http://goo.gl/nRM5ja

III JORNADAS DE PREPARACIÓN DE OPOSICIONES: CUERPO DE INGENIEROS DE MONTES DE LA HACIENDA PúBLICA

la directiva de la Asociación de Fun-cionarios pertenecientes al Cuerpo de Ingenieros de Montes del Estado (AFIME) por las facilidades dadas a la hora de programar y desarrollar estas jornadas.

Entre los datos de la encuesta rea-lizada por el Colegio a los asisten-tes a la misma conviene destacar: respecto a la organización de estas jornadas, el 90% de los participantes se muestran satisfechos con la infor-

mación previa recibida; respecto a los ponentes, el 77% considera que han sido motivadores y han animado a la participación, el 87% considera además que se explicaban con cla-ridad y el 77% que se ha respondi-do adecuadamente a las preguntas realizadas; respecto a las ponencias realizadas, el 80% de los participan-tes considera adecuada la informa-ción facilitada para poder preparar las oposiciones, el 70% ha conside-

rado adecuada la duración de las sesiones programadas y el 80% ha visto satisfechas sus expectativas res-pecto a estas jornadas; y finalmente, el 87% de los participantes ha mos-trado su satisfacción por el desarrollo de este evento.

Para posteriores convocatorias de oposiciones se tratarán de organizar jornadas similares a esta.

Contenidos de la Jornada:http://goo.gl/TSn5jg

El Instituto de Ingeniería de España acogió el pasado 1 de octubre a los ingenieros de Montes para celebrar el día de su patrón, San Francisco de Asís (oficialmente el 4 de octubre). Como cada año, el decano del Cole-gio, Carlos del Álamo, hizo un breve resumen de la actualidad del sector en su discurso de bienvenida Para su-jetar un árbol son más importantes las raíces que las copas. Del Álamo co-menzó refiriéndose al Laudato Si del Papa Francisco, un mensaje al mundo entero sobre la necesidad de cuidar de la Tierra y de todos sus habitantes.

SAN FRANCISCO 2015

El Papa recuerda en esta encíclica que San Francisco es el ejemplo por excelencia del cuidado de lo que es débil y de una ecología integral, vivi-da con alegría y autenticidad. Es el santo patrono de todos los que es-tudian y trabajan en torno a la eco-logía. Que el Papa alarme sobre la situación de la Tierra y anime a invo-lucrarse en el cuidado del medio am-biente da una idea de la tendencia general en el mundo desarrollado. El decano recordó también un encuen-tro importante para el sector forestal: la Conferencia sobre el Cambio Cli-

mático, a celebrar en París durante el mes de noviembre. También es actua-lidad la nueva ley de montes, por lo que este es un año en el que los mon-tes y el cuidado del medio ambiente han sido protagonistas. Recordó que el monte ordenado y que se conserva es el que más servicios presta a la sociedad, y destacó que el ejercicio profesional del ingeniero de Montes debe evolucionar con la sociedad, de la misma manera que todas las ingenierías evolucionan con el tiem-po. Los montes son los mismos. Las sociedades, no, concluyó el decano.

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 44 –

Actividad colegial

Durante la celebración del Día de San Francisco se hizo entrega de las Medallas de Honor del Colegio de Ingenieros de Montes, con las que se reconoce el mérito de las personas destacadas en el sector.

Entre ellas, el Colegio ha escogi-do a José Manuel Romay Beccaría como Colegiado de Honor 2015 por la labor desarrollada en la de-fensa y conservación de los montes y el medio ambiente de España, tanto desde la Administración como desde su actividad profesional pri-vada, y en nombre de todos los ho-menajeados ofreció unas palabras a los asistentes: Es un gran honor, una gran responsabilidad –afirmó- representar a tantos grandes profe-sionales a quienes se les ha recono-cido hoy su trabajo. A una nación se la conoce por los hombres que produce, pero también por los hom-bres a los que honra. Destacó la tra-yectoria profesional en común con el Decano, Carlos del Álamo, en la lucha contra incendios forestales. Hace 25 años creamos un modelo que se ha demostrado muy exitoso. El discurso completo está disponible en www.revistamontes.net.

El resto de Medallas de Honor ha recaído en:

José Luis García Rodríguez, por los Servicios Prestados al Colegio y Actividad Colegial

Luis Alfonso Gil Sánchez, por su Actividad Académica e Investigadora

Antonio Díaz de Paz, por su Activi-dad en la Administración

Miguel Soriano Moyano, por su Emprendimiento y Actividad en la Empresa

Mª Teresa Lara Carbó, por su Acti-vidad en el Ámbito Político

Editorial Solitario, por su actividad en el ámbito de las Publicaciones

Jesús Reina Fraile, en la categoría de Medios de Comunicación

Miguel Pedro A. Castroviejo Boli-bar, por su Actividad en Instituciones

Miguel Cabrera Bonet, por su Ejer-cicio Libre de la Profesión

Asociación Forestal de Soria AS-FOSO, por la Gestión Forestal en Montes Privados

También recibieron la Medalla del Colegio en el 50 aniversario de su colegiación: Alejandro Valladares Conde, Antonio López Lillo, Juan C. Martín de Vidales Cabeza, Witeri-co Solís Sánchez, José Ruhi Babot, Eduardo Olano Gurriaran, Francisco Javier Martínez Millán, Juan José Jun-co Rodríguez, Emilio Villar Rioseco, Pedro Molina Vicente, Juan Pedro Garbayo Abascal y Jaime Villagrán de Cárdenas.

Por último, se hizo entrega del XVII Premio Montero de Burgos, que re-cayó en el Dr. Ingeniero de Montes Ignacio Pérez-Soba, por su artículo

“Sebastián Vidal Soler (1842-1889): un ingeniero de Montes enamorado de la naturaleza Filipina”, publicado en la revista “Perro Berde” de la Em-bajada de España en Filipinas.

En una reunión con presencia de autoridades representantes de todas las administraciones y entidades que dedican su actividad al cuidado del medio ambiente, cada uno de ellos quiso transmitir unas palabras de agradecimiento a nuestros compañe-ros de profesión y destacar la impor-tancia para la sociedad del ejercicio de la misma.

Miguel Giménez de Córdoba, pre-sidente del Grupo Tragsa: Tragsa es la empresa española con más inge-nieros de Montes en nómina, y quie-nes ejercen aquí vuestra profesión están llamados a realizar importan-tísimas tareas en el presente y futuro de la empresa.

Jose Vicente López Álvarez, direc-tor de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Montes, Forestal y del Medio Natural de Madrid: Estas me-dallas representan la importancia de la profesión en tantos ámbitos.

Manuel Moreu Munaiz, presidente del Instituto de Ingeniería: La actuali-dad que el Papa Francisco ha otor-gado al medio ambiente es un reflejo de la actualidad.

Tomás Fernández-Couto, secre-tario general de Desarrollo Rural

y Montes de la Xunta de Galicia: Tenemos que ser consecuentes del abando-no de las zonas rurales y la necesidad de luchar contra esta situación con medidas inmediatas. Muchos pue-blos ya han sido abando-nados y es difícil pedir a los jóvenes que se queden donde no hay oportunida-des. Ya sabemos gestionar un monte público; ahora tenemos por delante una gran tarea en el desarrollo de montes y parcelas fores-tales de carácter familiar y privado que sin impulso y sin lograr que sean renta-bles no prosperan.

Vicente Pérez Pérez, General Jefe del Servicio de Protección de la Natu-raleza de la Guardia Civil (SEPRONA): Desde hace casi 30 años los agentes del SEPRONA han tenido contacto permanente con el monte, con un trabajo basado en el respeto a Miembros de la Mesa Presidencial con algunos de los galardonados por el Colegio

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 45 –

Actividad colegial

las normas que garantizan el cuida-do del entorno natural. Desde hace tres décadas existe una estrecha relación entre sus agentes y los in-genieros de Montes en el ejercicio de su profesión, pero sobre todo en su vocación de servicio a la natura-leza y a la sociedad.

Miguel Ángel Ruiz López, vicecon-sejero de Medio Ambiente, Adminis-

tración local y Ordenación del Territo-rio de la Comunidad de Madrid: Tra-bajar con el medio ambiente requiere una buena planifi cación para manejar de forma óptima el capital natural de nuestro país. De COP21, el evento a nivel mundial celebrado en París, sal-drá fortalecido el sector forestal.

Valvanera Ulargui Aparicio, di-rectora de la Ofi cina Española de

Cambio Climático: En la cumbre de París, sin duda los ecosistemas fo-restales habrán salido fortalecidos y reconocidos por su importante papel para conseguir los objetivos contra los impactos del cambio climático. Trabajamos en el pro-yecto Huella Carbono, y España tiene una posición muy importante en este sentido. Los ingenieros de Montes destacan en la lucha contra el cambio climático a corto plazo, pero tienen un papel fundamental en el cuidado de las masas foresta-les que quedarán para las genera-ciones futuras.

Begoña Nieto Gilarte, directora general de Desarrollo Rural y Política Forestal: 2015 ha sido declarado como el Año Internacional del Suelo, y en el mundo entero muchas funda-ciones se han implicado para trans-mitir la necesidad de su cuidado. En ese cuidado tienen mucha respon-sabilidad los ingenieros de Montes, afi rmó. Además, se están poniendo en marcha los programas de desa-rrollo rural en nuestro país, y de ellos se va a benefi ciar también el entorno forestal, que implicará directamente a los ingenieros de Montes. Los ob-jetivos de este ambicioso programa son mejorar la calidad de vida en el medio rural; garantizar la perma-nencia de la población en el monte; y garantizar la perdurabilidad de los montes.

El acto concluyó con un cóctel ser-vido en el jardín del Instituto.

XVIII PREMIO PERIODÍSTICO

“MONTERO DE BURGOS”El Colegio y la Asociación de Ingenieros de Montes y el Grupo TRAGSA

convocan el

XVIII PREMIO PERIODÍSTICO “MONTERO DE BURGOS”

sobre el medio natural, sus recursos y el sector forestal, estimándose el refl ejo de algún aspecto de la realidad viva de nuestro tiempo, la capacidad de comunicación y el respeto a los principios científi co-técnicos aplicables, de

acuerdo con la naturaleza del trabajo.

DOTACIÓN: 1.450€Podrán participar todos los autores que presenten un trabajo periodístico que haya

sido publicado entre el día 31 de Agosto de 2015 y el 30 de agosto de 2016,en cualquier periódico o revista española.

El premio no podrá dividirse, aunque sí declararse desierto. En este caso, podrá concederse Accésit, si así lo estima el Jurado.El plazo de admisión de los trabajos terminará

el 2 de septiembre de 2016.Las bases se pueden consultar en la web del Colegio de Ingenieros de Montes

(www.ingenierosdemontes.org).El envío de los artículos se hará a la dirección:

C/ Cristóbal Bordiú, 19-21, 2º dcha. 28003 MadridTel. 91 534 60 05

[email protected]

XVII PREMIO MONTERO DE BURGOS

En reunión mantenida el martes 22 de septiembre de 2015, el jurado del XVII Premio Periodístico Montero de Burgos decidió conceder el galardón de la edición de este año 2015 al artículo “Sebastián Vidal Soler (1842-1889): un ingeniero de Montes ena-morado de la naturaleza Filipina”, cuyo autor es el Doctor Ingeniero de Montes Ignacio Pérez-Soba Diez del Corral.

Se hizo entrega del premio el día 1 de octubre durante los Actos que con motivo de la Festividad de San Francisco de Asís celebraron el Co-legio y Asociación de Ingenieros de Montes.

El artículo premiado, que fue pu-blicado en origen por la Embajada de España en Filipinas, a través de su revista "Perro Berde", se reproduce íntegramente a continuación.

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 46 –

Actividad colegial

INTRODUCCIÓN

El Ingeniero de Montes español Sebastián Vidal Soler fue el mejor investigador de la flora filipina y uno de los mayores expertos mundiales en botánica tropical de todo el siglo XIX, pese a lo cual no es hoy muy cono-cido. Los especialistas van estudiando su vida y obra1, pero coincidimos con Bankoff2 en que la brillante labor en Filipinas del Cuerpo español de Ingenieros de Mon-tes ha sido olvidada durante mucho tiempo3. Por eso, pretendemos divulgar someramente la biografía de Se-bastián Vidal, que en nuestra opinión constituye un ejem-plo de amor a su profesión, a España y a Filipinas, tierra ésta en la que quiso vivir y donde murió. Una vida así no debe caer en el olvido, ni estar sólo en las publicaciones especializadas.

FORMACIÓN E INICIO DE SU ACTIVIDAD PROFESIONAL (1842-1871)

Sebastián Vidal Soler nació en Barcelona el 1 de abril de 1842, hijo de Domingo Vidal y Balaguer, natural de Cardona (Barcelona) y de Petronila Soler Robirosa, nacida en La Habana (Cuba). Ingresó en la Escuela de Ingenieros de Montes, donde obtuvo el número dos de la decimotercera promoción (año 1865). Su hermano mayor, Domingo (nacido en 1838), ingresó poco des-pués en la misma Escuela, donde obtendría el número tres de la 15ª promoción (1867).

Sebastián Vidal colaboró aun antes de acabar sus estudios con la Comisión que estudió las inundaciones del Júcar, dirigida por el Ingeniero de Montes Miguel Bosch Juliá, y cuya Memoria final se considera el primer estudio hidrológico-forestal español. Y tras ello, fue uno de los escasísimos Ingenieros de Montes españoles (sólo hubo ocho entre 1843 y 1870) que fueron becados para ampliar estudios en la Escuela Forestal de Tharan-dt, en Alemania. Permaneció allí de 1865 a 1868, es-pecializándose en botánica y conociendo a H.M. Wi-llkomm, coautor de un monumental estudio de la flora española (la Prodromus Florae Hispanicae, 1861-1880). A su regreso, Vidal es destinado a la Comisión de la Flora Forestal Española, donde realiza excursiones de herborización en Cataluña (abril-septiembre de 1869),

1 Las obras recientes que nos han servido de fuentes principales son las de Aranda (1992, 1995, 1998), Bankoff (2004; 2011), Casals (1989, 1996, pp. 168-171); García López (1996a; 1996b); Gonzá-lez Escrig (1998; 2002, pp. 416-422); Pérez-Soba y Bañas (1998; 2000) y Pinar (1999). También hay entradas referidas a Vidal en obras de consulta: Diccionario Biográfico Español (Real Academia de la Historia); Cyclopedia of Malesian Collectors (Herbario Nacional de Holanda); Apuntes biográficos del tomo V de Técnica e Ingeniería en España (Real Academia de Ingeniería, Institución Fernando el Ca-tólico y Universidad de Zaragoza).

2 Bankoff (2011, p. 85).

3 Honrosas excepciones en esas décadas de olvido fueron las pu-blicaciones de Merrill (1903), Sánchez (1948) y Rodríguez (1962).

XVII PREMIO MONTERO DE BURGOS

SEBASTIÁN VIDAL SOLER (1842-1889):

UN INGENIERO DE MONTES ENAMORADO DE LA NATURALEzA FILIPINA

Ignacio Pérez-Soba Diez del CorralDoctor Ingeniero de Montes

tras lo cual es nombrado catedrático de botánica apli-cada de la Escuela de Ingenieros de Montes, con sólo veintisiete años de edad.

LA DECISIÓN DE SU VIDA: MARCHAR A FILI-PINAS. SUS PRIMERAS OBRAS

En 1871, Sebastián Vidal solicita la Jefatura de la Ins-pección General de Montes de Filipinas, lo que llama poderosamente la atención. Como catedrático, le espe-raba una vida prestigiosa y tranquila; en su lugar, pide un destino difícil, peligroso (el puesto está vacante por defunción) y con una flora desconocida, como recuerda años después: Sin libros que le guíen en el laberinto que le espera, se embarca uno temeroso, pensando en los medios de suplir con floras de países vecinos la falta que nota para poder desempeñar con acierto su cometido4. De lo que no cabe duda es del entusiasmo con que encaró su nueva labor: si buscaba aventuras y retos, los halló y los superó. En 1873 su hermano Domingo pidió también destino en Filipinas; en su caso, quizá

4 Vidal (1874, pp. 116-117).

Figura 1. Retrato de Sebastián Vidal Soler (Fuente: González Escrig, 2002, p. 417)

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Actividad colegial

por los problemas políticos que le había causado su republicanismo.

Sebastián Vidal toma posesión el 18 de enero de 18725, y a los pocos días parte a explorar Mindanao. Tras ello, estudia la organización del servicio y la regularización de los aprovechamientos forestales6, elevando al Madrid sus propuestas de reforma en agosto de 1872. Cae enfermo, pero aun así explora los montes de Tabayas, lo que agrava su mal y le obliga a volver a España durante un año7.

En España, Vidal, incluso convaleciente, desarrolla una actividad asombrosa. En primer lugar, redacta una Memoria sobre el ramo de montes en las islas Filipinas, dirigida al Ministro de Ultramar, cuyo motivo es un íntimo convencimiento de la importancia grande de los montes públicos en Filipinas y el no menos arraigado de ser ur-gentemente necesarias reformas esenciales8. Consciente de que el Ministerio no la publicará, la edita él mis-mo, omitiendo piadosamente las propuestas de reforma administrativa. Es una obra que va mucho más allá de su título, con tres apéndices valiosos en sí mismos: uno

5 Jordana (1873, p. 176).

6 Jordana (1873, p. 176).

7 Jordana (1873, p. 330).

8 Vidal (1874, p. I).

sobre maderas filipinas, otro sobre Mindanao, y una bi-bliografía sobre Extremo Oriente. De hecho, el apéndice sobre maderas se publica enseguida como libro (Breve descripción de algunas de las maderas más importan-tes y mejor conocidas de las islas Filipinas, 1874), y la bibliografía es citada como obra de referencia por Me-néndez Pelayo en La Ciencia española (1876). Además, Vidal traduce del alemán dos obras sobre el archipiéla-go: Estudios sobre el clima de Filipinas (dos estudios de C. Semper y G. Karsten, publicada en 1874), y Viajes por Filipinas, de Fedor Jagor, que ve la luz en 1875 y por la que Vidal recibe la Cruz de la Corona de Prusia.

Vuelto Vidal a las islas, en abril de 1876 es nombra-do secretario de la Comisión Española en la Exposición Universal que se celebra ese año en Filadelfia (Estados Unidos). Allí desplegó su habitual energía: recibió un premio por sus trabajos sobre Filipinas; publicó a su vuel-ta (junto con José Jordana Morera, otro brillante Ingenie-ro de Montes catalán) el libro Apuntes sobre los montes y la agricultura norteamericana (1877); fue enviado a Cuba a estudiar el sector tabaquero para mejorar ese ramo en Filipinas; y, de paso, conoció a una joven de Filadelfia, Ella Paoli9, con la que contrajo matrimonio, que fue muy feliz.

Un suceso doloroso cierra esta etapa brillante: su que-rido10 hermano Domingo fallece en Barcelona (en donde estaba de paso) en septiembre de 1878, a causa de una enfermedad contraída en Filipinas.

LA COMISIÓN DE LA FLORA FILIPINA (1876-1886)

En su Memoria de 1874, Vidal pedía crear una Comisión de la Inspección de Montes que investigara botánica y cartográficamente el Archipiélago. El Real Decreto de 21 de julio de 1876 creaba la Comisión de la Flora y Estadística Forestal de Filipinas, que se constituía en mayo de 1878 dividida en dos subcomisiones: “flora” y “estadística y mapa forestal”. Vidal dirigió la primera, auxiliado por el Ayudante de Montes (y notable pintor) Regino García, el botánico José Pérez Maeso y el farmacéutico Rosendo García. Comenzó así un intenso trabajo de exploración y herborización, en el cual Vidal acude con interés a los indígenas: para el estudio de la vegetación (…) [el Ingeniero de Montes] se ve precisado a tener un roce más íntimo con el indio, sin lo cual dejará de visitar muchas localidades donde podría hallar preciosos datos.11

En 1880, Vidal publicaba el Catálogo metódico de las plantas leñosas silvestres y cultivadas observadas en la provincia de Manila, complemento de la Memoria descriptiva de la Provincia de Manila publicada por Santiago Ugaldezubiaur, Jefe de la otra subcomisión. En 1883, ya como obras independientes, Vidal produ-cía dos libros extraordinarios, que definían cualitativa y cuantitativamente las familias y los géneros recolectados: la Reseña de la flora del archipiélago filipino (el primer estudio geobotánico de las islas) y la Sinopsis de fami-

9 Sawyer (1900, p. 48) la recuerda como una “dama encantadora”.

10 Como mostró Sebastián en su cariñosa dedicatoria de la Breve descripción de algunas de las maderas… (1874).

11 Vidal (1874, pp. 120-121).

XVII PREMIO MONTERO DE BURGOS

Figura 2. “Monte de la cuenca del río Grande (Mindanao)”, grabado de la Memoria sobre el ramo de montes en las islas

Filipinas (1874)

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Actividad colegial

lias y géneros de plantas leñosas de Filipina, introduc-ción a la Flora forestal del Archipiélago filipino12, obra compilatoria y clasificatoria que incluía un bello atlas de 100 láminas dibujadas por Regino García. Esos traba-jos fueron premiados en la Exposición Colonial Interna-cional de Ámsterdam de 1883, valiendo a su autor el título de Caballero de la Orden del León Neerlandés. Vidal aprovechó su viaje a Europa en 1883 para estu-diar herbarios filipinos conservados en Londres, Madrid y París, de lo cual nació otra doble publicación: Pha-nerogamae Cumingianae Philippinarum (1885, catálogo de las plantas fanerógamas coleccionadas en Filipinas por Hugh Cumming en 1836-1840, conservadas en el Jardín botánico de Kew, Londres) y Revisión de las plan-tas vasculares filipinas (1886), que comprendía 2.200 especies, 1.500 de ellas determinadas con precisión.

Tras ello, Vidal amplió el objeto de su Comisión: pese a llamarse “de Flora”, en 1885 incorporó al joven na-turalista Domingo Sánchez Sánchez para estudiar la fauna. Y por si fuera poco, la Inspección de Montes asumió desde 1875 la dirección del Jardín Botánico de Manila, creado en 1858. Dirigido primero por Domingo Vidal, le sucedió su incansable hermano, quien constru-yó edificios permanentes, aclimató en el Jardín muchas especies, creó una biblioteca y colaboró con estableci-mientos botánicos de todo el mundo (San Petersburgo,

12 Hay edición facsímil de la Sinopsis (Agencia Española de Coo-peración Internacional y Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Montes de Madrid, 1998).

Hong-Kong, Chicago...). En 1891, el Jardín tenía 1.400 especies.

LA SUPRESIÓN DE LA COMISIÓN. LA EXPO-SICIÓN DE MADRID (1886-1888)

Parecía ya próxima la publicación de una completa Flora Forestal Filipina, a imagen de la monumental Flora Forestal Española que el Ingeniero de Montes Máximo Laguna comenzaba a publicar en Madrid en 1883 y culminaba en 1890. Esta esperanza se truncó por el Real Decreto de 26 de febrero de 1886, que imponía severos recortes a la Inspección de Montes de Filipinas y suprimía la Comisión de la Flora y Estadística Forestal. Los Ingenieros de Montes protestaron agriamente: en or-den a la supresión de la Comisión de la Flora Forestal de Filipinas, ¿qué hemos de decir sino que (…) sintamos antes vergüenza que tristeza o defección?13 El Ministerio rectificó en parte, creando en julio siguiente una plaza de Ingeniero Inspector (el propio Vidal) dedicado a los trabajos necesarios para la definitiva formación de la Flora forestal del archipiélago. A instancia del Museo Nacional de Ciencias Naturales, en 1887 también se restableció la plaza de Domingo Sánchez.

Pero poco pudo dedicarse Vidal a su “Flora”, pues fue designado para preparar la parte forestal de la Ex-posición General de Filipinas (Madrid, 30 de junio-30

13 Castel (1886, p. 219).

XVII PREMIO MONTERO DE BURGOS

Figura 3. Una de las láminas del Atlas de la Sinopsis de familias y géneros de plantas leñosas de Filipinas (1883)

Figura 4. Hoja primera del Bosquejo forestal del archipiélago filipino, obra de la Comisión de Flora y Estadística Forestal de Filipinas y mostrado en la Exposición General de Filipinas de

1887 (Fuente: González Escrig, 2002, p. 413)

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Actividad colegial

de octubre de 1887), encargo que permitió salvar del desempleo al personal de la suprimida Comisión. La sección forestal de la Exposición fue una de las más extensas y completas14, ganó numerosos premios y valió a Vidal la Gran Cruz de Isabel la Católica. El 2 de junio de 1888, se embarca en Barcelona para volver a Filipi-nas15. No pisaría más España.

Figura 5. La estatua dedicada a Sebastián Vidal, inaugurada en 1892 en el Jardín Botánico de Manila (postal coloreada de

comienzos del siglo XX)

LA MUERTE DE VIDAL (1889). SU LEGADO

Sebastián Vidal fallece con 47 años en Manila, a causa del cólera, el 28 de julio de 1889. Así rezaba la noticia enviada desde Manila: Vidal, el sabio botánico, el Ingeniero ilustre, el escritor austero, el amigo irreem-plazable, el esposo modelo, el caballero sin tacha, ha dejado esta vida de afanes y sinsabores para nacer en la imperecedera y gloriosa a que le dan derecho, que nadie ha de envidiarle, sus méritos científicos16. Pero lo que más impresiona no son sus encomiásticas necroló-gicas publicadas en todo el mundo, sino el profundo cariño con que se le recuerda muchos años después. En 1900, el estadounidense Sawyer dice: Todos los británicos y estadounidenses residentes o visitantes en Manila recordarán a un caballero catalán, Don Se-bastián Vidal y Soler (…) Vidal era un hombre de gran formación e igual modestia, con el honor más estricto, extremadamente bondadoso y caritativo. Era famoso en

14 Sánchez (2003, pp. 98-101).

15 Sánchez (2003, p. 156).

16 Nota publicada en la Revista de Montes (1889, p. 423).

XVII PREMIO MONTERO DE BURGOS

América, en Londres, París y Ámsterdam, y en cualquier lugar donde se reunieran botánicos. Su muerte en 1890 [en realidad, en 1889] fue universalmente lamentada17. Y Domingo Sánchez escribe en 1947 sobre su antiguo jefe: Con él perdió el Cuerpo uno de sus miembros más preclaros y yo uno de mis mejores amigos, hacia el cual guardo imperecedero reconocimiento18.

Ese Cuerpo, el de Ingenieros de Montes, hizo cuanto pudo para recordar a Vidal. Su sucesor, Salvador Cerón Martínez, siguió la labor recolectora, con cuyos resulta-dos (421 especies nuevas) más los pliegos de Vidal, se publicó el Catálogo de plantas del herbario recolecta-das por el personal de la suprimida Comisión de la Flora Forestal (1892), con más de 2.500 especies. Además, Cerón instaló en 1892 una estatua de Vidal en el Jar-dín Botánico de Manila. Obra del escultor barcelonés Enrique Clarasó, representaba a Vidal con uniforme del Cuerpo de Ingenieros de Montes con las tres conde-coraciones antes mencionadas; en la mano izquierda llevaba la Revisión de plantas vasculares filipinas, y en la derecha una planta apoyada en un tronco rodeado de vegetación de los géneros Heliconia y Argemone. Por lo que sabemos19, fue reinstalada en 1961 en el Mehan Garden de Manila, por la Sociedad Filipina para la Taxonomía de las Plantas.

Sin embargo, el 28 de septiembre de 1897 un incendio destruyó la Inspección de Montes: En un momento queda-ron destruidas las magníficas colecciones de insectos, de plantas y otros objetos naturales que, a fuerza de tiempo y de constantes trabajos, se habían formado; desapareció toda la Biblioteca, sin quedar sano ni un solo libro de los muchos de que constaba; se redujeron a cenizas importan-tes trabajos de los Sres. Vidal, Jordana y otros entendidos Ingenieros20. Y durante la ocupación estadounidense fue abandonado el jardín botánico21 y se perdió mucho de lo salvado del incendio: cuando el botánico E.D. Merrill llegó a Manila en 1902, se encontró con un edificio vacío, sin siquiera una silla22. Sin embargo, algunos de los pliegos de Vidal son guardados en el Herbario Nacional de Fili-pinas, y muchos más en herbarios de Florencia, Ginebra, Kew, Leiden, París y sobre todo en el Real Jardín Botánico de Madrid, que posee una colección de 8.000 especies estudiada por Quisumbing en 195423. Muchos ejempla-res de fauna fueron enviados a Madrid y se conservan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales24, algunos incluso expuestos con la etiqueta de la Inspección de Montes de Filipinas.

Y, por encima de todo, quedan el recuerdo de Vidal y de sus obras, que hemos querido honrar en estas páginas.

17 Sawyer (1900, p. 48). El original está en inglés; la traducción es nuestra.

18 Sánchez (1948, p. 121). La publicación es póstuma.

19 Aranda (1997).

20 Noticia publicada por la Revista de Montes (1898, pp. 23-24).

21 El actual jardín botánico y zoológico de Manila se inauguró en 1959.

22 Robbins (1958, p. 277).

23 Blanco (1995, pp. 206-207).

24 Santos Mazorra (2000, pp. 21-22, 280 y 320).

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Actividad colegial

XVII PREMIO MONTERO DE BURGOS

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. Aribau y Compañía (sucesores de

Figura 6. Estado en que se hallaba el herbario de Vidal en el Jardín Botánico de Madrid en 1954, al comienzo de su estudio y catalogación (Fuente: ponencia de Paloma Blanco en el “II Taller

sobre Conservación e Informatización de Herbarios”, 2011)

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 51 –

Actividad colegial

PRESENTACIÓN DE LA PUBLICACIÓN “MAqUINARIA PESADA EN LA EXTINCIÓN DE INCENDIOS FORESTALES”

El Colegio de ingenieros de Montes sigue apoyando las iniciativas de sus colegiados

En el Salón de Actos del Instituto de la Ingeniería de España tuvo lugar el pasado 3 de noviembre la presenta-ción de esta publicación que recoge de una forma amena y rigurosa el em-pleo de la maquinaria pesada para la extinción de incendios forestales.

Su autor, Juan B. García Egido, ingeniero de Montes y Vocal de Ciu-dad Real del Colegio en Castilla – La Mancha, desarrolla su labor profe-sional en la empresa pública GEA-CAM. “El empleo de maquinaria pesada no se puede improvisar en la extinción de incendios. Esta publi-cación va a suponer una gran ayuda para conseguir este cometido”.

Según el autor, el origen de la ma-quinaria pesada se encuentra en el

desarrollo de los vehículos militares pesados de principios del S. XX. A partir de ahí se fue desarrollando en paralelo a la evolución de las versio-nes militares.

En el año 1940 se empieza a utilizar la maquinaria pesada en EE.UU. para la extinción de incen-dios forestales. Anteriormente había sido utilizada en tareas relaciona-das con la preparación del terre-no en repoblaciones forestales. En España se comienzan a utilizar en los años 60, en las labores de re-población. Poco a poco fueron em-pleándose también en la extinción de incendios forestales, sobre todo en la realización de cortafuegos. Entre la maquinaria más usada des-

tacan los tractores de cadenas, las excavadoras o retropalas, y los vehí-culos modificados para el transporte de agua.

El autor destacó que el equipo hu-mano que atiende y maneja la ma-quinaria pesada debería tener su for-mación específica para la extinción de incendios forestales, cosa que en la actualidad no sucede. Esta tarea formativa también debería extender-se, a juicio del autor, a los mandos que dirigen las operaciones de extin-ción, lo cual permitiría una utilización efectiva de dicha maquinaria, en combinación con el resto de medios

Con motivo de la celebración del V Centenario de Santa Teresa de Jesús, el pasado 23 de octubre el Colegio organizó una visita a la exposición de las Edades del Hombre en Ávila con la ayuda de Pino Pliego, vocal de la Junta del Colegio.

El grupo tuvo ocasión de recorrer el centro histórico de la ciudad con uno de los guías locales más pres-tigiosos antes de almorzar en el Pa-rador algunos platos típicos de la región. Después de comer, los cole-giados se acercaron al Centro de Re-cepción de Visitantes de las Edades del Hombre para comenzar junto al guía oficial el recorrido a pie por las iglesias de la exposición.

VISITA “LAS EDADES DEL HOMBRE”

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 52 –

Actividad colegial

El Colegio de Ingenieros de Mon-tes ha realizado una serie de con-ferencias informativas, dedicadas a analizar la actualidad de la acti-vidad profesional del Ingeniero de Montes, en cinco de las Escuelas que forman a los futuros profesiona-les: Córdoba, Palencia, Albacete, Madrid y Valencia.

Esta iniciativa nace con el objetivo principal de ayudar a los estudiantes de los últimos cursos de la titulación en temas como el estado actual de las competencias de la titulación, la correspondencia de las titulaciones de Ingeniero de Montes y de Máster Ingeniero de Montes, el acercamien-to a oportunidades de empleo tanto en España como en el exterior, o las iniciativas de apoyo al emprendi-miento que organiza el Colegio.

También es una buena ocasión para que tengan una primera toma de contacto con el Colegio y pue-dan plantear sus dudas relativas al panorama de las profesiones en Es-paña, su regulación, su evolución y las posibilidades de desarrollo que ofrece en la actualidad.

Por otro lado se informó de la con-vocatoria del II Concurso Nacional de Proyectos Fin de Carrera de la In-geniería de Montes y de la celebra-ción, en el mes de enero de 2016, de la Conferencia sobre la Profe-sión de Ingeniero de Montes, a las que se les ha animado a participar activamente.

Es importante destacar el notable interés por parte de los futuros profe-sionales en todas las cuestiones que se trataron.

El Colegio pretende dotar de con-tinuidad a este tipo de acciones y realizarlas todos los años en las Es-cuelas Técnicas donde se imparta la formación de grado y máster con acceso a la profesión de Ingeniero de Montes.

Descargar contenidos:http://goo.gl/8jP3A4.

CICLO DE CONFERENCIAS “LA ACTIVIDAD PROFESIONAL DEL INGENIERO DE MONTES” EN LAS ESCUELAS TÉCNICAS

que actúan en un incendio: medios aéreos, brigadas terrestres, etc.

Finalmente se citó el enorme interés que tiene la utilización de maquina-ria pesada en su faceta económica, ya que su coste es relativamente bajo y su eficacia alta, sumando además una gran rapidez de despliegue.

En palabras del decano del Co-legio, Carlos del Álamo, “este libro está llamado a convertirse en una re-ferencia para los ingenieros de Mon-tes en general, y en particular a los que desarrollen su labor profesional en el ámbito de la extinción de incen-dios forestales”.

Con actos como este, el Colegio de Ingenieros de Montes continua con su labor de apoyo a las diver-sas iniciativas que le proponen sus colegiados con el fin de impulsarlas y darlas a conocer.

Dónde adquirir esta publicación: http://goo.gl/yMvTEK.

Palencia

Córdoba

Albacete

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 53 –

Actividad colegial

ARAGÓN

EL COLEGIO DE INGENIEROS DE MONTES INGRESA EN EL PATRONATO DEL PAISAJE PROTEGIDO DE LA SIERRA DE SANTO DOMINGO

El Colegio de Ingenieros de Mon-tes ha ingresado, en octubre de 2015, como miembro del Patronato del Paisaje Protegido de la Sierra de Santo Domingo. Este Patronato es el órgano consultivo y de participación social que asesora al Gobierno de Aragón para la gestión de este Es-pacio Natural Protegido, que es el último que se ha declarado en la Comunidad Autónoma (por Decreto 52/2015, de 8 de abril, del Gobier-no de Aragón), y que es también el único que cuenta con un representan-te de los Colegios profesionales en su Patronato.

El Paisaje Protegido de la Sierra de Santo Domingo se ubica en la zona alta de la comarca de las Cinco Villas, en la provincia de Zaragoza, y tiene un carácter emi-nentemente forestal: se configura

Vista de la Sierra de Santo Domingo

Igna

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Pére

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como un mosaico de formaciones boscosas naturales, pinares proce-dentes de repoblación forestal y altamente integrados en el medio, matorrales de transición, pastizales de montaña y formaciones roco-sas con vegetación rupícola. Unas

10.000 hectáreas comprendidas dentro del Paisaje y de sus Zonas de Protección corresponden a mon-tes de utilidad pública, lo que supo-ne más del 75% del total de la su-perficie afectada por ambos tipos de protección.

El pasado 1 de octubre se presen-tó a los medios de comunicación, en Sevilla, la Asociación Superior de Ingeniería de Andalucía (ASIAN). Se trata de la primera Asociación de Ingeniería de ámbito regional que se instala en Andalucía, y nace como ente horizontal y coordinador de las nueve ramas de la ingeniería tradicional: ICAI; Aeronáutica; Agro-nomía; Caminos, Canales y Puertos; Industriales; Minas; Montes; Navales y Oceánicos; y Telecomunicaciones.

Formada por las Asociaciones y/o Colegios Profesionales presentes en Andalucía, y las correspondientes delegaciones de entes análogos de representación nacional, su principal misión, además de la de aumentar las relaciones entre sus socios, es reivindicar el papel fundamental de la ingeniería en el funcionamiento de nuestra sociedad, para lo cual quiere asumir el rol de portavoz y dinami-zador de la ingeniería en la región andaluza.

ANDALUCÍA

PRESENTACIÓN EN SEVILLA DE LA ASOCIACIÓN SUPERIOR DE INGENIERÍA DE ANDALUCÍA

Entre los decanos y/o presidentes, nuestro decano Eduardo Muñoz-Cobo Rosales(4º por la izq.)

ASIAN inicia su actividad pública con la presentación del “Plan de in-versiones tecnológicas inteligentes de Andalucía” como parte de una serie de acciones que abarcarán ámbitos como la formación, la visi-bilización de recursos, la organiza-

ción y participación en foros, publi-caciones, etc., siendo su web el ele-mento de comunicación que servirá de coordinación e información de sus actividades.(http://ingenieriadeandalucia.es/)

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 54 –

Actividad colegial

José

Cav

ia

CANTABRIA

EL COLEGIO DE MONTES SOLICITA A LA CONSEJERÍA FORMAR PARTE DE LA MESA FORESTAL DE CANTABRIA

El consejero de Medio Rural, Pesca y Alimentación, Jesús Oria, recibió el pasado 9 de septiembre en San-tander a representantes de la Junta Directiva del Colegio de Ingenieros de Montes en Cantabria, encabeza-dos por su decano Óscar González, quienes le han solicitado formar par-te de la Mesa Forestal de la Comuni-dad Autónoma.

El consejero les ha contestado que, por su parte, “no hay ningún inconve-niente”, aunque habrá que ver la fór-mula por “si es necesario modificar la normativa o, en primer término, se les invita”.

A la reunión han asistido también el director general de Medio Natural, Antonio Lucio, y los también miem-bros de la Junta Directiva del Cole-gio, Carlos Tejedor, vicedecano, y Ja-cobo Fernández, secretario-tesorero.

Un momento de la reunión celebrada en el despacho del consejero Jesús Oria en el Parque Científico y Tecnológico de Cantabria

Durante la reunión, que, según los colegiados, ha sido “muy positiva”, se han establecido las bases de una relación duradera, abordando todos los asuntos relacionados con los montes en Cantabria; en particu-

lar, la superficie forestal arbórea, la de matorral, los incendios forestales, pastizales, con lo que poco a poco “iremos sentando las bases de la nueva relación”.

Fuente: www.cantabria.es

El 29 de junio de 2015, el Co-legio de Ingenieros de Montes en Aragón remitió al Director General de Gestión Forestal del Gobierno de Aragón un escrito presentando

ALEGACIONES AL PROYECTO DE ORDEN SOBRE RESCISIÓN ONEROSA DE CONSORCIOS DE REPOBLACIÓN FORESTAL EN ARAGÓN

alegaciones al proyecto de Orden por la que se establecen los módulos aplicables a la rescisión anticipada parcial o total, onerosa, de conve-nios o consorcios forestales para la

repoblación de terrenos en montes públicos o privados en la Comunidad Autónoma de Aragón. Dicho proyecto pretendía dar cumplimien-to a lo establecido por la Disposición Adicional De-cimotercera de la Ley de Montes de Aragón, que prevé la posibilidad de que se determinen unos módulos máximos de indemnización para la rescisión onerosa de consorcios o convenios, en lugar de atender al cálculo de las deudas acumuladas.

El Colegio hacía dos ale-gaciones de carácter ge-neral: en primer lugar, que resulta preceptivo el informe sobre el proyecto por el Comité Forestal de Aragón (órgano colegiado consulti-vo del Gobierno de Aragón en materia forestal); y en se-gundo, que se cuente con la

participación del Departamento de Hacienda del Gobierno de Aragón, dado el carácter económico y patri-monial de la materia tratada.

A estas alegaciones generales seguían numerosas propuestas con-cretas, referidas a la mejora de la corrección técnica y jurídica del tex-to, y a aspectos tan relevantes como limitar la aplicación de dichos módu-los a la Administración autonómica o los propietarios de los montes para evitar que se apliquen a expedien-tes expropiatorios, que no tendrían por qué contar con trato preferente; que la aplicación de los módulos no sea obligatoria para el propietario; que no se contemple (como hacía el proyecto) el caso de que haya in-demnizaciones nulas en terrenos que han sido efectivamente repoblados; que la aplicación de los módulos se haga previa rodalización de la superficie cuya rescisión se solicite, ya que un coeficiente de variación muy elevado haría bajar artificial-mente los valores medios en los que se basa la indemnización; o que se tenga en cuenta la reciente entrada en vigor de la Ley de desindexación de la economía española.

Uno de los antiguos carteles del ICONA que daban publicidad a las repoblaciones realizadas mediante

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 55 –

Actividad colegial

CASTILLA LA MANCHA

REUNIÓN CON EL CONSEJERO DE AGRICULTURA Y EL DIRECTOR GENERAL DE POLÍTICA FORESTAL DE CASTILLA – LA MANCHA

El pasado 14 de octubre se cele-bró una reunión de la Mesa Forestal de Cantabria, bajo la presidencia del consejero Jesús Oria, a la que fue invitado el Colegio de Ingenie-ros de Montes. El principal acuerdo al que se llegó fue la creación de dos grupos de trabajo en materia de Sanidad y Explotación forestales. El primero de ellos sobre el “Plan de lu-cha integrada contra los patógenos causantes de daños en las masas de eucalipto de Cantabria” y el segun-do para la “Agilización de los trámi-tes administrativos”, y cuyos dictáme-nes estarán concluidos para finales de 2015 y con entrada en vigor a comienzos de 2016.

A la reunión, que comenzó con una intervención del consejero en la que recordó los principales puntos de la estrategia Forestal de su depar-tamento para la presente legislatura 2015-2019, asistieron también el di-rector general de Medio Natural, An-tonio Lucio; el jefe de la Sección Fo-restal IV del Gobierno de Cantabria, Javier Carrasco; el jefe del Servicio de Montes, Javier Espinosa; un repre-sentante de la comarca de Liébana y Nansa, y Alcalde de Cillorigo de Lié-

REUNIÓN DE LA MESA FORESTAL DE CANTABRIA

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bana, Jesús Cuevas; otro representan-te de la comarca oriental y Alcalde de Voto, José Luis Trueba; Fernando Rojas y José Causí, de ASPAPEL; Ós-car González, del Colegio de Inge-nieros de Montes; Carlos Tejedor, de ASFORCAN; y Eloy Gutiérrez y José Saiz, de ACEMM.

Todos los asistentes expresaron un alto grado, si no total, de coinciden-cia con la exposición realizada por el titular de la Consejería, quien en 15 puntos ha desarrollado las líneas

maestras para estos cuatro años, des-tacando asuntos relacionados, ade-más de los ya expuestos sobre Sa-nidad y Explotación Forestal, con la aplicación del reglamento europeo EUTR y el Plan Nacional de control de la legalidad de la madera comer-cializada en Cantabria; Forestación de Tierras o repoblación; Infraestruc-turas forestales; Certificación, y Anua-rio Forestal.

Fuente: www.cantabria.es

El pasado 2 de septiembre, el decano del Colegio de Ingenieros de Montes en Castilla - La Mancha, Ángel Roldán Martínez, junto con miembros de la junta directiva, man-tuvieron una reunión con el conseje-ro de Agricultura, Medioambiente y Desarrollo Rural de la Junta de Co-munidades de Castilla - La Macha, Francisco Martínez Arroyo, y el di-rector general de Política Forestal y Espacios Naturales, Rafael Cubero Rivera.

El objetivo principal de la reunión fue poner el Colegio de Ingenieros de Montes a disposición de la Junta de Comunidades para desarrollar de forma conjunta diferentes ideas y propuestas, y que ello posibilite la mejora en la conservación y el aprovechamiento de los montes. El

fin último es que sean estos, a través de la gestión forestal sostenible, los que logren reactivar el sector fores-tal permitiendo, entre otras cosas, la creación de empleo en los territorios más forestales.

Entre los temas de la reunión se trató la necesidad de la puesta en valor de los montes de la Región, a través de la valoración económica de todos los servicios que se gene-ran en los más de 3,5 millones de hectáreas que ocupan. Conocer cuantitativamente los servicios que los montes generan (agua que filtran, retención de suelo, captura de CO2 atmosférico) permitiría conocer cuál es el verdadero valor de la riqueza natural de nuestra región, más allá del valor de los productos forestales más tradicionales. Incorporar el va-

lor económico de estos servicios en la contabilidad regional sería clave para la financiación de los terrenos forestales.

También se puso de manifiesto la potencialidad que supone el apro-vechamiento de la biomasa forestal residual en los municipios con ma-yores existencias forestales. Por un lado, generarían energía para su propio consumo a través del com-bustible producido en montes de su propiedad, ahorrando a las arcas municipales importantes cantidades monetarias; y por otro, se generaría empleo local además de regenerar el monte y evitar incendios forestales.

Otro de los temas tratados fue la importancia económica que tiene el aprovechamiento cinegético en nuestra región, que debe basarse en

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 56 –

Actividad colegial

proyectos de ordenación cinegética de adecuada calidad para mejorar no sólo las poblaciones cinegéticas, sino el resto de la fauna y los hábitats de los que dependen, lo que incre-mentaría el valor de estos aprovecha-mientos y el de la riqueza del capital natural de la región.

Por último se destacó que las situa-ciones de emergencia, cada vez más complejas, que hoy día se originan por la ocurrencia de los incendios forestales, requieren de dispositivos con personal altamente cualificado. Por ello este Colegio apuesta por la profesionalización de sus combatien-

tes a todas las escalas.Se finalizó recordando el papel

clave que desempeñan los Ingenie-ros de Montes en la gestión forestal regional, e instando a incrementar la plantilla de estos profesionales en la JCCM y en las empresas públicas dependientes de esta administración.

El pasado 17 de octubre se cele-bró en Lumbreras (La Rioja), una jor-nada sobre Gestión y conservación de pastos naturales de La Rioja in-cluidos en la Directiva Hábitats. La jornada fue organizada por el Co-legio de Ingenieros de Montes en La Rioja y fue impartida por Alfonso San Miguel Ayanz, catedrático del Departamento de Sistemas y Recur-sos Naturales de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Montes, Forestal y del Medio Natural, de Madrid.

La primera parte de la mañana se dedicó a situar y analizar la impor-tancia de la Red Natura en el contex-to de la conservación de los hábitats de interés comunitario, centrándose en los hábitats pascícolas. Tras un almuerzo donde pudimos seguir co-mentando temas de gestión de estos ecosistemas, se realizó una visita por el Collado de Sancho Leza para seguir debatiendo sobre gestión de pastos y ordenación del pastoreo.

LA RIOJA

JORNADA SOBRE GESTIÓN Y CONSERVACIÓN DE PASTOS NATURALES DE LA RIOJA

PAÍS VASCO

JORNADA SOBRE SELVICULTURA MICOLÓGICA Y NUEVAS APLICACIONES DE LOS HONGOS FORESTALES

En el marco de colaboración entre la Delegación vasca del Colegio y HAZI Fundazioa, se ha celebrado el 16 de octubre de 2015 una nueva jornada de formación forestal en el Instituto Agrario de Arkaute. De todos es sabido el interés que genera la re-cogida micológica en el País Vasco, interés que se manifiesta no sólo en numerosas visitas a nuestros propios

montes, sino también a los territorios colindantes. Por ello, resulta muy útil conocer las experiencias acome-tidas en los últimos años con el fin de cuantificar y ordenar la actividad micológica.

Los tres ponentes elegidos, todos ellos ingenieros de Montes, proce-den del entorno de la Escuela Fores-tal de Palencia (Universidad de Valla-

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Actividad colegial

dolid), conocida por su pujanza en conocimientos micológicos.

El primer ponente, Juan An-drés Oria, lleva varios años transmitiendo su entusiasmo y sus conocimientos botánicos y micológicos a las promociones que han ido pasando por Pa-lencia. Como es habitual, su intervención trascendió el tema propuesto para su charla, dis-curriendo por la historia y la geografía forestal. Habló de la pérdida de muchos montes adehesados debido al aban-dono rural y de la necesaria in-tervención selvícola en muchos montes con el fi n de aumentar la producción fúngica, el desa-rrollo de especies frutícolas y la biodiversidad.

El zumaiarra Jaime Olaizola, gerente de la empresa ID Forest, explicó su trabajo centrado en la biotecnología aplicada. La identifi cación de los hongos más demandados, la inocula-ción de plantas de vivero o de árboles adultos mediante mico-rrizas y las experiencias acome-tidas en montes vascos centra-ron su intervención.

Por último, Beatriz de la Parra, de ECM Ingeniería Ambiental, se centró en las plantaciones micorrizadas para la produc-ción de setas comestibles, en la micorrización de planta en vivero y en el destoconado bio-lógico, es decir, en el empleo de hongos saprófi tos para des-truir tocones, evitando el rebro-te de especies no deseadas (chopos, eucaliptos, robinias) y produciendo a la vez hongos comestibles.

La jornada terminó con una excursión vespertina por Mon-tes de Vitoria, recorriendo ha-yedos, pinares y quejigales. Con la ayuda de Juan Andrés Oria, descubrimos las especies fúngicas asociadas a cada tipo de vegetación, repasamos la historia reciente de estos montes y los que llevaron cestas pudie-ron aprovechar para recoger las setas y hongos que fueron apareciendo.

Las charlas de esta jornada, las publicaciones relacionadas y diversas fotos de la excursión pueden ser descargadas en la web de HAZI:

http://cort.as/YXk5.

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Caza y Pesca

De la corrupción política a la corrupción técnicaSección elaborada por Alejandro Chinchilla Rodríguez

Ingeniero de Montes

Este es un artículo contra el maltrato profesional y falta de moral de aquellos técnicos que hacen daño a mis compañeros y a mi profesión, y hacen insostenible el aprovechamiento cinegético en España.

Advierto al lector que de los 120 artículos que ha-bré publicado a lo largo de mi vida, este es quizás el artículo más duro de todos ellos; y han sido muchos los que llevo en la mochila, habiendo pasado por casi todas las revistas del sector cinegético: Trofeo, La Caza y Su Mundo, Jara y Sedal, Federcaza, Caza y Safaris, Hunters, etc.

Si hay algo en España con lo que todos los ciuda-danos nos hemos sensibilizado, y mucho, es con el problema de la corrupción de nuestros políticos y las Administraciones Públicas que tenían bajo su cargo y mandato. Los casos judiciales en España relacionados con “corrupción política” se refl ejan en España en unas 1.700 causas y más de 500 imputados o investigados, de los cuales, solo 20 han sido condenados y entra-do en prisión. Según fuentes del Consejo General de Poder Judicial, en España se investigaban 1.661 casos de corrupción. A la cabeza, Andalucía con 541, y la Comunidad Valenciana, con 200 casos. La que menos, La Rioja con 4.

Y la pregunta es: ¿se ha extendido también este mal a la caza? Mi respuesta es sí. Este sector también se ha visto afectado por casos de este tipo y aunque algunos de ellos han salido a la luz, otros por desgracia no. Y nos ha pasado como a “La Pantoja”, que por mucho me-nos que otros imputados en España, ya está en la cárcel y los otros ni la han pisado. En nuestro caso, los furtivos van para adelante, pero en los casos más complejos nadie hace nada.

A largo de estos años, junto a otros compañeros de nuestra profesión, he sido un fi rme defensor de los Pro-yectos de Ordenación Cinegética o Planes Técnicos. Nunca he dudado de su utilidad y de las competencias que necesita el técnico a la hora de redactarlos y pro-yectar la gestión cinegética. Un buen proyecto no solo es útil, es necesario para una correcta gestión cinegética y, por imperativo legal, más necesario todavía si cabe para que se pueda practicar el aprovechamiento cine-gético de forma sostenible en cualquier lugar de España.

Además, el futuro de la caza pasa por la “Ordena-ción Cinegética”. Las razones que la justifi can (ecoló-gica, técnica, económica, social y legal) sólo pueden integrarse bajo un buen proyecto repleto de nociones de ingeniería. Mucha gente nos está observando, y las cosas no las estamos haciendo todo lo bien que cabría esperar. Prueba evidente de ello es la situación actual de muchas poblaciones de fauna cinegética en España. La sociedad entera, no sólo los grupos ecologistas, ter-minarán tarde o temprano con esta situación si no hace-mos nada. Ellos no son los enemigos, los enemigos son los que bajo la acepción de “técnico” no aplican “técni-ca” y “toleran” que se aprueben proyectos insostenibles, bien porque no les interesa, bien porque no saben.

Mi bochorno llega cuando recibo quejas de compa-ñeros que son “maltratados” por los técnicos de algunas

provincias, información que muchas veces me corrobo-ran los propios agentes medioambientales que están al pie del cañón y se enteran de todo en sus comarcas y zonas. Y créanme… son muchas. Algunas las he ex-perimentado en mis propias carnes y las he llegado a denunciar ante el órgano que correspondía. Otras, algo tarde, salieron en los medios de comunicación cuando ya eran demasiado escandalosas.

Es muy triste y lamentable, pero ocurre y parece que en algunos lugares es algo frecuente. Por eso, me veo en la obligación moral de escribir este artículo para que aque-llos acostumbrados a estas prácticas sepan que no somos tontos ni ingenuos, que sabemos lo que están haciendo y que contra ellos nos tendrán a la mayoría de nosotros.

Disculpen el tono subido de mis palabras, pero me encuentro muy abochornado cuando, tras luchar porque se haga “ingeniería” y “ordenación” en materia de caza en las Comunidades Autónomas, que no es otra cosa que hacer nuestro trabajo de forma profesional y “digni-fi carlo”, escucho estas quejas.

¿Qué dirían ante esta situación los padres de nuestra ingeniería, insignes ingenieros que fi guran en nuestros manuales, libros, retratos en Escuelas y en monumentos por toda España?

Decía un profesor en una conferencia que una vez tuvo que presentar por falta de plazo un Plan Técnico en una provincia, y era un sencillo encuadernado con los datos principales en la carátula y después unos 80 folios en blanco. ¿Saben qué paso después? ¡Que vino apro-bado con capturas, calendario y pliego de condiciones incluido! ¡No lo habían abierto ni lo habían leído! Este caso hubiera sido digno para expulsar al funcionario de la Administración aunque cause mucha risa.

Y a las pruebas me remito porque el problema se ve potenciado y oxigenado por una cadena llena de des-propósitos que sigue el siguiente orden lógico:

1º La Comunidad Autónoma carece de directrices o instrucciones para la Ordenación Cinegética, o “son muy simplistas y abiertas”, es decir, vale todo lo que quieras poner dentro de cada epígrafe del Plan.2º El técnico del órgano competente en materia de caza tiene todo el “poder” para hacer las resoluciones aprobatorias de los Planes “más simplistas y abiertos” si cabe. Es decir, un “copy - paste” unas de otras, si-guiendo por lo general lo que se dice en las Órdenes Anuales de Vedas. Entonces… ¿para qué un Plan?3º Ante lo anterior, los titulares de los cotos no creen en el Plan, y sólo les preocupa que “se lo aprueben” y que la Administración autonómica competente en ma-teria de caza no indague mucho en lo que se hace dentro de su coto. Y si al fi nal la resolución es “lo más abierta” posible, mejor. 4º A continuación visita el técnico al titular para que le contrate el Plan. La negociación es muy clara: “¿Eres amigo del técnico que lo aprueba?”. Es decir, el “cuán-to sabes” no vale ni importa. Y la culpa de estos casos es porque algunos técnicos de las Administraciones públicas han terminado acostumbrando al titular para que tire por este camino.

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Caza y Pesca

5º Finalmente y como se aprueba por amiguismo, y además todo es lo mismo en una resolución muy abierta y generalista, el precio del Plan no llega ni a lo que valdría hacer una medición de una pequeña parcela (unos 300 €, si llegan, en estas provincias). 6º Cuando llega un proyecto que no es de su amigo, el técnico de la Administración demora su aprobación (saltándose en muchos casos el orden administrativo de los expedientes), pone trabas y, al fi nal, el titular termina despidiendo al técnico para contratar a otro que le garantice su aprobación. Da igual que donde ponga perdiz diga paloma torcaz, o cabra montés donde ponía arruí, el caso es que se lo aprueben cuanto antes.7º Pero lo peor viene cuando el técnico nos dice que en su provincia los Planes “los hace todo el mundo”, sin distinción de competencias. Pero no hablo ya de competencias por la titulación, sino de competencias reales a la hora de redactar y calcular, esa que pa-rece que no existe en muchos de estos casos. ¡Era de esperar! ¿Para qué competencias en la materia si al fi nal todo vale?8º Finalmente el pastel de una provincia entera “se lo comen” los 2 – 3 amigos del técnico. Los afectados podrían recurrir los planes, pero eso conlleva contratar un abogado y hacer un buen informe técnico contra lo que ha resuelto el técnico de la Administración. Con total seguridad lo ganaría, porque no se siguen crite-rios de cálculo alguno en el 90% de los casos, pero ¿a qué coste en tiempo y dinero? La Justicia es muy lenta en España y un abogado cuesta mucho dinero.9º El problema llega también a la Universidad cuando el profesor tiene que explicar que todo lo que está en-señando, la ingeniería que conlleva la caza y los co-nocimientos integrados a los que afecta (ordenación, selvicultura, derecho, economía, estadística, cálculo infi nitesimal y álgebra lineal, etc.), no se utiliza en la realidad. Esta situación es triste y lamentable, y hay que erra-

dicarla. Por otra parte, ya no solo la prensa, las redes sociales y los stakeholders o grupos de interés (titulares, propietarios, guardas, técnicos, asociaciones ecologis-tas, federaciones, etc.) están ahí pendientes de lo que se está haciendo y, tarde o temprano, acabarán con el problema.

Pero nosotros, desde nuestra posición, desde las Universidades, los Colegios Profesionales y desde el compañerismo que nos tiene que caracterizar a todos, tenemos que luchar contra ello. Y no caben otras herra-mientas que las siguientes:

1º Trabajar para que el Ministerio de Agricultura, Ali-mentación y Medio Ambiente fomente el que se dicten unas Instrucciones Generales de Ordenación Cinegé-tica en todas las Comunidades Autónomas.2º Obligar a las Comunidades Autónomas para que dicten unas Instrucciones de Ordenación Cinegética “completas”, donde no quepa la menor duda y que-de limitado el poder del técnico de la Administración pública competente en materia de caza a la hora de resolver los Planes Técnicos.3º Aplicar las nuevas tecnologías para que la Ordena-ción Cinegética se “digitalice” y pueda integrarse dentro de la eAdministración (o Administración electrónica).Desde el Colegio hemos trabajado duro este año

para dar un paso más en este sentido. La publicación de una guía metodológica en esta materia y de acceso libre, su difusión en varias Universidades de España y la creación de una página web, son las primeras medidas para terminar con este problema y procurar que, a través de una planifi cación seria y coherente, se haga ingenie-ría a favor de la sostenibilidad ambiental, económica, social y cultural.

Eso sí, enfrente tendremos a aquellos acostumbrados a las prácticas anteriores que seguro nos lo pondrán difícil y preferirán que no se haga nada y todo siga igual.

Finalmente, mi más sentido ánimo a aquellos compa-ñeros que estáis sufriendo estas situaciones. A vosotros va dedicado este artículo. Os lo debía.ñeros que estáis sufriendo estas situaciones. A vosotros

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Caza y Pesca

Sección coordinada por Fernando Torrent BravoProfesor de acuicultura de la ETSI de Montes. UPM

Importancia de la conectividad longitudinal en los ecosistemas fl uviales

Gonzalo Rincón SanzLaboratorio de Hidrobiología, E.T.S.I. Montes, Forestal y del Medio Natural

Universidad Politécnica de Madrid

La conectividad es una propiedad fundamental de los ríos que permite la libre circulación de caudales, sedi-mentos y especies. En los ecosistemas fl uviales esta co-nectividad se expresa en varias dimensiones:• Conectividad longitudinal: conexión a lo largo del

cauce.• Conectividad lateral: conexión entre el cauce y las

riberas o la llanura de inundación. • Conectividad vertical: conexión entre las aguas su-

perfi ciales y el medio hiporreico.A estas tres dimensiones hay que añadirle una cuarta

que sería la dimensión temporal (Ward 1989) que intro-duce el concepto de evolución de los sistemas fl uviales a lo largo del tiempo.

La conectividad longitudinal se considera como una de las dimensiones más importantes. Es esencial para el mantenimiento de los fl ujos ecológicos (material y ener-gía), así como para el movimiento de genes, individuos y poblaciones. Dicha conectividad se ve alterada de forma natural cuando elementos como grandes rocas o árboles caídos obstaculizan el fl ujo de la corriente. Sin embargo, cada vez es más frecuente que la conectivi-dad sea afectada por actividades humanas, reduciendo sus propiedades y conduciendo a efectos ambientales negativos. El principal ele-mento que causa la des-conexión es la presencia de barreras transversa-les al cauce, tales como presas y azudes. Uno de los principales efectos directos y a corto plazo de dicha desconexión es la difi cultad en el despla-zamiento de la fauna pis-cícola a lo largo del río, con los efectos ecológicos que lleva aparejados: imposibilidad para com-pletar el ciclo biológico, aislamiento poblacional, alteración de los ciclos de nutrientes, etc.

La pérdida de conecti-vidad longitudinal por la regulación de los ríos es un problema a escala glo-bal. En la Unión Europea,

la Directiva Marco del Agua (DMA, 2000/60/CE) considera la conectividad como uno de los objetivos para alcanzar el buen estado ecológico de las masas de agua. Esta propiedad es entendida como la “no dis-rupción en la migración de organismos acuáticos y el transporte de sedimentos”. En este sentido se considera a las barreras artifi ciales como elementos alterantes a ser considerados cuando se evalúe la calidad ecológica de los ríos, ya que su presencia fragmenta el ecosistema.

Uno de los principales retos a los que en la actualidad se enfrentan los profesionales de la gestión del medio ambiente es la de tratar con presupuestos escasos para la restauración del medio fl uvial. Por este motivo es pre-ciso el desarrollo de metodologías de trabajo efi caces que permitan obtener el máximo benefi cio con los esca-sos recursos disponibles.

España es uno de los países del mundo con mayor ratio de barreras transversales por río. Se considera ne-cesario el desarrollo de una estrategia para recuperar la conectividad longitudinal en los ambientes fl uviales.

La gestión de estos obstáculos puede hacerse de va-rios modos, entre los que destacan dos procedimientos:• Construcción de escalas para peces. No se consi-

gue restaurar la conectividad total del tramo fl uvial

Arroyo Minguete, Valsaín (Segovia)

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Caza y Pesca

pero al menos se consigue restablecer el fl ujo bio-lógico que evite el aislamiento demográfi co de las especies de peces.

•  Eliminación, total o parcial, de los azudes y presas que mayor impacto suponen para la conectividad. Supone una medida más audaz que permitiría res-tablecer la conectividad en un tramo de forma más completa, al permitir la libre circulación de caudal, sedimentos y peces. Y puede llevarse a cabo por-que gran número de los azudes que jalonan nues-tros ríos se encuentran abandonados o han perdido la función para la que fueron concebidos. Esta me-dida es más polémica ya que generalmente entra en confl icto con otras actividades humanas como la agricultura. Sin embargo, poco a poco empiezan a verse pasos en el campo de la restauración fl uvial encaminados a aplicar esta metodología de forma efectiva, buscando un equilibrio entre las necesida-des humanas y ambientales.

Como se ha visto, la perdida de conectividad longitu-dinal supone un serio problema en los ríos ibéricos. No obstante, se considera muy necesario seguir trabajando para restablecer el concepto multidimensional del río, destacando especialmente la mejora de su dimensión longitudinal.

Literatura recomendada:

Ward, J. V. (1989). The four-dimensional nature of the lotic ecosystem. Journal of the North American Bentholo-gical Society 8:2–8.

Noticias de pesca y acuicultura

Un concienzudo estudio multidisciplinar del CSIC, pre-sentado el pasado mes de julio, concluye que el can-grejo autóctono no es tal, y explica que fue introducido desde Italia durante el reinado de Felipe II. Esto abre el debate de las inversiones masivas para la protección de las escasas poblaciones del supuestamente autóctono; y sobre todo, de las limitaciones impuestas en comercia-lizar otras especies. La comercialización del cangrejo rojo genera 70.000 jornales en Andalucía, mientras que del cangrejo señal sólo se permite el autoconsumo y exclusivamente en determinadas autonomías. En Europa sí se comercializa también este último, a precios muy interesantes.

Para cualquier persona interesada en acuicultura, se ha publicado un interesante informe anual de la acuicultura española de 2015, que refl eja dónde nos encontramos: con un crecimiento mundial es-pectacular, y un estancamiento en Europa, particular-mente en España (http://www.apromar.es/content/la-acuicultura-en-espa%C3%B1a-2015).

Se ha celebrado en octubre, en Huelva, el XV Congre-so Nacional de Acuicultura. En él, una vez más, el sector investigador público presenta sus investigaciones, pero la presencia de las industrias productoras es muy limita-da.la presencia de las industrias productoras es muy limita-

Arroyo Minguete, Valsaín (Segovia)

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 62 –

Jardines y Paisaje

Los tesoros verdes de nuestras ciudadesLaura Santiago Subero*

Ingeniera de Montes. Asociada Senior. G-advisory. Grupo Garrigues

* Laura Santiago ha formado parte del equipo de G-advisory que ha realizado el “Estudio sobre la contribución económica, social y ambiental de los parques y jardines a las ciudades españolas” junto con Ernesto Lluch y María García Casado. El equipo ha sido dirigido por Antonio Baena, Socio de G-advisory. En todo momento han contado con la colaboración de ASEJA, a través de su grupo de trabajo.

Sección coordinada por Antonio Morcillo San Juan, Dr. Ingeniero de Montes, Ayto. de Madrid y José Luis Rodríguez Gamo, Ingeniero de Montes, Ferrovial Servicios S.A.

Los efectos benefi ciosos de nuestros parques y jardines son indiscutibles. A todos nos vienen a la mente los benefi cios relacionados con la calidad de vida en nues-tras ciudades, la posibilidad de acceder a estos espacios como medio de esparcimien-to y marco de tranquilidad. Pero más allá de dichos as-pectos sociales inmediatos, son muchos más los que se

encuentran asociados a nuestras zonas verdes y a su correcto mantenimiento y gestión. Se trata de otros be-nefi cios de distinta naturaleza ambiental, económica y también social, que se traducen en una valía adicional para nuestras ciudades.

Esta contribución de nuestros espacios verdes ha sido analizada en el “Estudio sobre la contribución económi-ca, social y ambiental de los parques y jardines a las ciudades españolas”, que ha sido realizado por G-advi-sory (Grupo Garrigues) con la colaboración de ASEJA y el Grupo HEDIMA.

El estudio tiene como objetivo profundizar en el co-nocimiento del sector del mantenimiento y conservación de parques y jardines: sus principales magnitudes, los modelos de gestión vigentes y sus contribuciones más relevantes, desde el punto de vista socioeconómico y ambiental, a la mejora de nuestras ciudades.

Evolución del sector de conservación y man-tenimiento de parques y jardines

El informe pretende destacar la situación del sector en el contexto económico negativo de los últimos años. Según datos de las empresas asociadas a ASEJA, se ha experimentado un descenso de la facturación cercano al 11%. A este descenso se ha sumado un mantenimiento del empleo, con una plantilla de 12.000 empleados entre el conjunto de empresas, junto con un incremento de un 20% de la superfi cie total de zonas verdes mante-nidas, en el periodo 2010-2013.

Teniendo en cuenta el importante papel que juegan las administraciones municipales en la conservación de los parques y jardines de las ciudades, como responsa-bles de la gestión del patrimonio verde, y en línea con la disminución de la facturación del sector, el estudio observa un descenso del gasto agregado dedicado en las ciudades españolas al mantenimiento de parques y jardines de prácticamente el 18% en el mismo periodo 2010-2013.

¿qué percepción tiene el ciudadano de nuestras zonas verdes?

En este contexto, la encuesta sobre calidad de vida urbana de la OCU1 destaca, entre los aspectos que “más nos gustan de nuestras ciudades españolas”, el paisaje urbano, categoría que engloba la satisfacción con la arquitectura de las ciudades, el mantenimiento de sus edifi cios, su mobiliario urbano, su limpieza y sus parques. Las mejores notas en esta categoría las obtie-nen las ciudades de Pamplona, Vitoria, Oviedo, Bilbao y Albacete.

Sin embargo se ha podido constatar que el 35% de los ciudadanos opinan que el estado de los parques y jardines de nuestras ciudades es poco o nada satisfac-torio. Junto con la limpieza de las calles, el estado de los parques y jardines es el servicio municipal que reci-be más valoraciones negativas, frente a otros servicios como el alumbrado público o la recogida de basuras, resultando la percepción más negativa la que se recoge en los municipios de entre 400.000 y 1.000.000 de habitantes2.

¿Cómo se gestionan actualmente nuestros parques?

El estudio ofrece un análisis de los sistemas de gestión actuales para el mantenimiento de los parques y jardi-1 “Calidad de vida en las ciudades”, OCU 2012.

2 “La importancia de los servicios públicos en el bienestar de los ciu-dadanos”, AEVAL 2012. (AEVAL: Agencia de Evaluación y Calidad. Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas).

Figura 1. Evolución del sector de mantenimiento de parques y jardines en 2010-2013. Fuente: “Estudio sobre la contribución económica, social y ambiental de los parques y jardines a las

ciudades españolas”. G-advisory, 2015

* Datos de empresas asociadas a Aseja, equivalentes al 70% del sector público de mantenimiento de parques y jardines

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 63 –

Jardines y Paisaje

nes, basado en tres modelos de gestión: pública, mixta y externalizada.

Atendiendo a los benefi cios de operatividad, produc-tividad y fl exibilidad que permite el modelo de externa-lización, se ha producido un importante crecimiento del sector privado en el mantenimiento de las zonas verdes. En concreto, la participación externa a través de con-tratos con empresas privadas se sitúa cercana al 60%3.

En el marco del contexto económico negativo de los últimos años, se puede afi rmar que el peso en las lici-taciones actuales de los servicios de mantenimiento de parques recae mayoritariamente sobre la oferta econó-mica. En la mayoría de los pliegos revisados, la oferta económica tiene un peso superior al 50% del total de la valoración, llegando en algunos casos a pesar entre el 70% o el 100%. Esta situación junto con las importantes bajas sobre los precios de licitación, pueden considerar-se como aspectos con potencial repercusión negativa sobre la calidad del servicio ofertado y, en defi nitiva, sobre la calidad de nuestros parques.

¿Cuánto puede valer un parque?

La existencia y la buena conservación de los parques y jardines genera benefi cios económicos para los muni-cipios en términos de empleo e incremento de actividad económica, revalorización de inmuebles y comercios, aumento de la demanda turística y mejoras para la sa-lud, entre otros.

3 “Aproximación a la situación actual de la gestión del paisaje ver-de urbano en España”, Asociación Española de Parques y Jardines Públicos (AEPJP) y ASEJA.

El estudio ofrece una valoración anual del impacto económico de los parques y jardines en España, ci-frándola en 11 euros/m2, recalcando el valor activo de las zonas verdes para las comunidades en las que se enmarcan.

Sí se puede garantizar la sostenibilidad del mantenimiento de nuestros espacios verdes

Son muchas las fuentes de fi nanciación ya probadas en el ámbito internacional para el mantenimiento de par-ques y jardines. En España, la fi nanciación de nuestros parques se nutre de tres fuentes principales: los presu-puestos de los ayuntamientos para dichas partidas, las concesiones de determinados servicios de valor añadi-do y, en algunos casos, los cánones asociados a la ce-lebración de determinados actos culturales.

El estudio presenta un análisis de po-sibles fuentes de ingresos adicionales para el mantenimiento de los parques y jardines, incorporando potenciales fuentes de ingreso innovadoras con el fi n de incentivar un posible debate sobre nuevas vías de generación de ingresos.

Se puede consultar el estudio completo en la web de Aseja (http://cort.as/YrB9), y su resumen ejecutivo en la de G-Advi-sory (http://cort.as/YrBk).ejecutivo en la de G-Advi-

Figura 2. Posibles fuentes de ingresos para la conservación y mantenimiento de parques y jardines, utilizadas a nivel internacional. Fuente: “Estudio sobre la contribución económica, social y ambiental de los parques y jardines a las ciudades españolas”. G-advisory,

2015

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 64 –

Internet forestal

Pagos y ayudas de la PAC - MAGRAMAhttp://www.magrama.gob.es/es/politica-agricola-comun/pagos-y-ayudas-de-la-pac//

En esta sección de la web del MAGRAMA se encuentra toda la información sobre las normas aplicables para el cumplimiento de la condicionalidad, pagos y benefi ciarios de las ayudas de la PAC.

El segundo pilar de la PAC: la política de desarrollo rural – Parlamen-to Europeohttp://goo.gl/lkxie1

Interesante página del Parlamento Europeo donde se analiza uno de los pilares de la PAC. La última reforma de la política agrícola común (PAC) ha mantenido su estructura en dos pilares; el desarrollo rural sigue siendo lo que conocemos como el «segundo pilar de la PAC».

Desarrollo rural 2014-2020 – Unión Europeahttp://goo.gl/tiY3zS

La política de desarrollo rural de la UE ha evolucionado continuamente para responder a los nuevos retos de las zonas rurales. El proceso de reforma más reciente, que ha ido de la mano de la amplia reestructuración de la PAC de la UE, se completó en líneas generales en diciembre de 2013, con la aprobación de los actos legislativos básicos para el periodo 2014-2020.

Portal de la PAC de Castilla y Leónhttp://www.pac.jcyl.es/

Toda la información práctica relativa a la PAC, puesta a disposición de los agricultores y ganaderos de Castilla y León.

Aplicación para móvil sugerida

SilvoINTA: Gestión forestal portátilhttps://goo.gl/LxnqkS - Android

SilvoINTA es un asistente de Silvicultura. Se trata de una base de datos que además de registrar información de los árboles, permite realizar cálculos útiles para el control de cortas, como área basal y distribución diamétrica, y exportar los datos.

Las funciones de la aplicación son: confi guración de variables, registro de datos, visua-lización de resultados y exportación de datos.

Criterios de Valoración: - Imprescindible, deberías colocarla en favoritos. - Web bastante buena. No dejes de visitarla. - Podría ser interesante para echar un vistazo. - No está mal, pero... - Se puede pasar sin verla.

Internet para ForestalesSección elaborada por Jesús Mª González Capitán, Ingeniero de Montes

La PAC y los Fondos FEADER

La Política Agrícola Común (PAC) es una de las políticas más importantes y uno de los elementos esenciales del sistema institucional de la Unión Europea (UE). La PAC gestiona las subvenciones que se otorgan a los agricultores y ganaderos de la UE.

El Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) es un instrumento fi nanciero de la Comisión Europea cuya fi nalidad es la ayuda para el desarrollo económico de las regiones deprimidas de la Unión Europea. Estos fondos son subvenciones a fondo perdido, siendo gestionados directamente por las administraciones públicas (central, autonómica y local) teniendo cada una de ellas un cupo de fondos asignado para realizar proyectos en la zona. El objetivo del FEDER sería desarrollar los principios económicos en los que se basa la zona monetaria óptima para que todas las regiones de la Unión Europea converjan al mismo nivel de desarrollo, y permita fortalecer la moneda y la posición económica de Europa.

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 65 –

Árboles singulares

FICHA TÉCNICAEspecie: Olea europaea var. europaeaLocalización: Ulldecona, Comarca del Montsià (Tarra-gona)Medidas:

Perímetro normal a 1,3 m: 7,9 metrosAltura: 6,5 metrosDiámetro de copa: 16,8 metros

Protección: Declarado Árbol Monumental (Orden 03/09/1997. DOGC 2480, 09/22/1997)Edad: Se estima en 1.701 años, siendo plantado en el año 314, durante el reinado del Emperador Constantino I (306 – 337 d.C.)Motivo de singularidad: Edad, dimensiones y belleza

DESCRIPCIÓNEl olivo conocido como “La Farga de Arion”, ejemplar

seleccionado en este número, destaca por singulares motivos, pero es su edad la que verdaderamente nos sorprende. Según un estudio dirigido por el catedrático de Dasometría D. Antonio Prieto, recientemente publicado por la Universidad Politécnica de Madrid, su edad es de 1.701 años, considerándose el árbol fechado más antiguo de la península.

En la zona, la comarca del Montsià, se ha registrado la mayor concentración de olivos milenarios del mundo. Sólo en Ulldecona, y en la fi nca del Arion (30 ha), po-demos encontrar cerca de 200 olivos de la variedad fragua. Son majestuosos ejemplares de tronco retorcido, de porte regio marcado por el paso del tiempo, que forman un conjunto singular y protegido al que sólo se permite el acceso mediante visitas guiadas concertadas.

La familia Porta-Ferré de la Galera, propietarios de dichos árboles, envasa aceite certifi cado procedente de estos olivos milenarios (ya que siguen siendo productivos), obtenido tras un costoso proceso artesanal de elaboración.

Hay que resaltar otro dato de inte-rés: la Farga del Arión fue declarado árbol monumental por la Generalitat de Cataluña en 1997 y recibió el 1er Premio AEMO (Asociación Española de Municipios del Olivo) al mejor olivo monumental de España en 2006. de Municipios del Olivo) al mejor olivo

La Farga de ArionSección elaborada por Elsa Martín Díaz

Ingeniera de Montes

municipiosdelolivo.fi les.wordpress.com

tauladelsenia.org pinterest.com

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 66 –

Europa forestal

Madrid, capital europea de los Ministros ForestalesSección elaborada por José María Solano López

Dr. Ingeniero de Montes

Madrid ha reunido, bajo presidencia española y es-lovaca, a 38 ministros y altos representantes en materia forestal, con ocasión de la VII Conferencia Ministerial sobre Protección de Bosques en Europa, y de la Confe-rencia Ministerial Extraordinaria, que se celebraron los días 20 y 21 de octubre en el pabellón norte de IFEMA. Este año, además, han celebrado el XXV aniversario del proceso, ahora conocido como FOREST EUROPE.

Junto a ellos, han participado como observadores los representantes de alto nivel de 18 organizaciones inter-nacionales representando a otros procesos e institucio-nes intergubernamentales, a los propietarios y gestores de montes, la comunidad académica y científi ca, y a otros interesados por diferentes circunstancias.

Durante estos días los ministros han renovado el com-promiso político de sus países con los bosques y la ges-tión forestal sostenible. Tras constatar que en las últimas décadas la superfi cie forestal en Europa ha aumentado, y que se han realizado progresos en gestión forestal sostenible, también han compartido la idea de que han aparecido durante este periodo nuevos problemas y nue-vas oportunidades, que han examinado conjuntamente.

Desde 1990, la Conferencia ministerial sobre Protec-ción de Bosques en Europa, conocida como proceso

FOREST EUROPE, ha facilitado un diálogo político abier-to e inclusivo entre gobiernos, organizaciones guberna-mentales y no gubernamentales, sociedad civil y sector privado que ha estudiado los desafíos y las oportuni-dades comunes relacionadas con los montes a escala continental.

En esta conferencia, los ministros y altos representan-tes han resaltado la importancia del proceso FOREST EUROPE para la promoción de acciones nacionales y regionales en asuntos relativos a los montes en el con-tinente europeo. En palabras de la ministra española y copresidenta de la Conferencia, presente tan solo en la apertura y el cierre de la misma, “FOREST EUROPE ha sido esencial para mejorar la cooperación sobre políti-cas forestales y para la aplicación de la gestión forestal sostenible en el continente europeo en estos 25 años, y va a seguir siéndolo en el futuro”.

El Estado de los bosques en EuropaComo ya viene siendo habitual en estas conferencias

desde la de Viena en 2003, los ministros han recibido un ejemplar del informe Estado de los Bosques en Euro-pa, elaborado con base en informes nacionales y que describe cada uno de los indicadores de sostenibilidad

Panorámica de la reunión

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Europa forestal

paneuropeos a escala regional. Elaborado por unos 300 corresponsales nacionales y expertos internaciona-les que han proporcionado los datos para 60 autores de sus diferentes secciones, este informe muestra una visión global de los bosques europeos, de su estado ac-tual, las tendencias observadas y las respuestas políticas ante estas tendencias. Esta edición, además, proporcio-na una descripción muy instructiva a la gestión forestal en la región durante el periodo 1990-2015.

De esta obra se deduce que la superficie forestal eu-ropea está en expansión continua los últimos 25 años, alcanzándose para esta edición los 215 millones de hectáreas, lo que significa un 33% del área total del continente.

Según el informe, la expansión y la gestión forestal sostenible de los montes europeos permite responder de una manera muy importante a algunos de los de-safíos actuales, como el cambio climático, puesto que la captura media anual de esta superficie alcanza la nada despreciable cifra de 719 millones de toneladas de CO2 equivalente, es decir, el 9% de las emisiones netas de gases de efecto invernadero en el continente. Esta importancia creciente se refleja en las políticas fo-restales nacionales, que han sido revisadas poniendo un mayor énfasis en la lucha contra el cambio climático, estableciéndose en varios países entidades especializa-das en la aplicación de la legislación, los proyectos y programas de cambio climático, energías renovables y eficiencia energética.

Igualmente se observa un progreso importante en la gestión forestal sostenible en Europa, en forma de mejo-ra de políticas, normativas e instrumentos de seguimiento e información, entre otras cosas. El número de estados que poseen un Programa Forestal Nacional es en 2015 el triple que en 1990, y documentos estratégicos sobre política forestal existen en todos ellos. Ello ha conducido a que cerca del 70% de los montes europeos tenga un instrumento de gestión, es decir, alrededor de 155 millo-nes de hectáreas.

Esto significa una ma-yor protección de los montes europeos, puesto que según se afirma en una de las Resoluciones, un monte gestionado sos-teniblemente se recobra con mayor facilidad de daños o plagas, y se adapta mejor a los cam-bios en las condiciones del medio. A esto se aña-de que en Europa, según este informe, más de 30 millones de hectáreas se gestionan con el objetivo prioritario de conservar la diversidad biológica o el paisaje, y que este valor se ha venido incre-mentando en medio mi-llón de hectáreas en los últimos 15 años.

Pero no sólo ha au-mentado la protección, sino que a pesar de los efectos de la reciente

recesión económica global, los montes europeos han comenzado a recuperarse también económicamente. Europa sigue siendo uno de los primeros productores mundiales de madera en rollo o equivalente, y el valor de los productos forestales no maderables, que a menu-do proporcionan una importante fuente de ingresos a es-cala local, es también significativa. Los 103 millones de euros anuales de contribución al PIB europeo han hecho que el continente europeo se haya convertido en este último periodo de importador neto de madera y pasta de celulosa en exportador. Estas circunstancias han re-dundado en trabajo e ingresos directos para al menos 3 millones de familias, a los que habría que sumar los empleos indirectos, así como el trabajo realizado por los propietarios y las comunidades locales, que no se reflejan en las estadísticas de empleo.

Todos estos datos avalan la idea de los ministros sobre la gran oportunidad que la transición a una economía verde representa para que el sector forestal avance más allá en estos aspectos socioeconómicos de la gestión forestal sostenible.

Las Resoluciones y la Decisión de Madrid

Los ministros decidieron en Madrid, mediante la firma de la Resolución de Madrid 1 titulada El sector forestal en el centro de la economía verde, aumentar el papel que los bosques europeos desempeñan en la economía verde a la que se tiende a transformar la actual. Reco-nocieron igualmente en esta Resolución que la transición hacia la economía verde proporciona una enorme opor-tunidad de desarrollo al sector forestal, y a la subsiguien-te creación de empleo.

Hay oportunidades en la diversificación y el desarrollo del sector forestal, nuevos nichos de mercado, empleo ligado a los productos no madereros y a los servicios, que comienzan a atraer mayor atención y a ampliar el mercado de productos y servicios que los montes pro-porcionan. En este sentido resultaría clave el desarrollo

Isabel García Tejerina y Ľubomír Jahnátek, ministros copresidentes de la VII Conferencia Ministerial sobre Protección de Bosques en Europa

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 68 –

Europa forestal

de tecnologías y productos innovadores que se identifi -quen con las nuevas demandas sociales sobre el sector forestal. Muy relacionado con ello está la formación del personal, que haga al sector más competitivo, pues sólo así se asegura la rentabilidad del sector forestal.

Vivimos en un momento de cambios ambientales muy veloces. El cambio climático agravará los daños cau-sados por episodios de sequía, incendios, tormentas, plagas y enfermedades, lo que, junto con otros cambios ambientales de amplitud regional, como los causados por la creciente contaminación, el aumento de la po-blación humana y los cambios derivados en el uso del suelo, pone en riesgo a largo plazo la capacidad que tienen los montes de cumplir sus funciones económicas, ecológicas y sociales. Muchos de estos factores son transfronterizos, por lo que se hace más evidente que nunca la necesidad de intensifi car la colaboración inter-nacional en la protección forestal, y por ello los ministros responsables de los bosques han plasmado en la Re-solución de Madrid número 2, titulada Protección fores-tal en un entorno cambiante su compromiso político de mejorar esta colaboración y el convencimiento de que la mejor manera de proteger los montes es gestionarlos sosteniblemente.

Finalmente, los ministros han fi rmado también la De-cisión de Madrid, en la que tocan ciertos aspectos del propio proceso FOREST EUROPE. Reconociendo en ella el importantísimo papel que ha desempeñado el pro-ceso durante los 25 años que ahora se celebran en la aplicación de la gestión forestal sostenible en Europa, y conscientes asimismo de los nuevos desafíos que se pre-sentan, especialmente de la forma de encajar el proceso en los acontecimientos globales en marcha, los ministros han determinado la necesidad de reafi rmar los princi-pios, los fi nes y el espíritu del proceso, así como la de adaptarse a las nuevas condiciones globales en cuanto a estructura y métodos de trabajo. Por esta razón han decidido que se revisen estos asuntos durante el periodo siguiente, de forma que en la próxima Conferencia Mi-nisterial puedan tomar una decisión al respecto.

La Conferencia Extraordinaria

Inmediatamente después de la clausura de la VII Conferencia, comenzó la Conferencia Extraordinaria

de FOREST EUROPE. Su origen hay que buscarlo en la Decisión de Oslo de 2011 que convocaba un Comité Intergubernamental de Negociación de un Convenio Forestal legalmente vinculante, que debía reunirse cua-tro veces y presentar sus resultados a una Conferencia Ministerial Extraordinaria, en la idea que podría presen-tar un texto a aprobar por los ministros antes del plazo normal de una conferencia ordinaria.

Sin embargo, no fue así, y según el informe presenta-do por el Sr. Heino, presidente del Comité, a pesar de todos los esfuerzos, se ha llegado a un texto cuya parte forestal está completamente consensuada, y la mayor parte de la instrumental también, pero no se ha podido cerrar por completo porque subsisten diferencias entre Rusia y Suiza por un lado y la UE y los demás países por el otro, en asuntos como qué organización debe servir de anfi triona al convenio, cómo va a ser la secretaría, como se designarán los miembros del comité de cum-plimiento, o cuál va a ser el voto de la Unión Europea.

Los ministros, en una breve Decisión, reconocen y agradecen el trabajo realizado por el Comité, estable-cen que el texto resultante debe servir como base para un acuerdo vinculante en Europa, y se dan de plazo máximo hasta 2020 para retomar el diálogo en este asunto, cuando las condiciones internacionales mejoren y lo permitan.

Relevos en el Comité General de Coordinación

Próximamente la Unidad de Enlace se transferirá a Bratislava y el compromiso de España con este proceso encarará la recta fi nal. Transcurridos unos dos años, en que las Resoluciones y Decisiones de Madrid estarán en pleno proceso de aplicación, España cederá la copre-sidencia a Alemania, que comenzará con Eslovaquia la preparación de la Conferencia de Bratislava.

Otro aspecto relevante de la Conferencia ha sido el cambio en el Comité General de Coordinación (GCC), el grupo de cinco países signatarios que conducen y fi nancian el proceso FOREST EUROPE. Tras un largo pe-riodo integrando el GCC, Noruega abandona su pues-to a favor de Suecia, manteniéndose de esta forma el equilibrio geográfi co de este grupo. Cuando se produjo el anuncio, Noruega fue muy aplaudida por todos los presentes, y todos desearon los mejores éxitos para Sue-

cia, que adquiere un compromiso a largo plazo –unos 20 años– con el proceso.

En la Conferencia de Bratislava será el momento en que España abandone el GCC, dando por fi nalizado el periodo que comenzó en la Conferencia de Viena en 2003. Desde entonces FOREST EURO-PE ha sufrido cambios y adaptaciones muy profundos, pese a respetar su idea funda-cional, y España habrá sido uno de los protagonistas principales de ellos. La vi-sión de montes muy heterogéneos, con una enorme diversidad biológica, con ca-racterísticas comunes pero también otras muy diferentes del resto de los europeos ha tenido su consideración en este proce-so, y estamos seguros de que ese camino trazado por nuestro país ya no será aban-donado cuando dejemos de estar en el grupo responsable de la conducción y la fi nanciación del proceso.grupo responsable de la conducción y la

Delegación española en la Conferencia

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 69 –

Forestales ilustres

Hilarión Ruiz Amado (1832-1906):Un estudioso de la topografía

Sección elaborada por Francisco Grimalt FalcóIngeniero Técnico Forestal e Ingeniero de Montes

...más bien sabíamos todos sus compañeros, que entonces, como antes y ahora y siempre, tuvo y tiene el

cuerpo de montes en tal señor (Ruiz Amado) a un jefe y de los más aguerridos e inteligentes en los combates

librados y que se libren, entre la ignorancia y el caci-quismo en materia de montes, y la ciencia y la justicia

en el ramo forestal.

Primitivo Artigas (1899)

Hilarión Ruiz Amado nació en Torrelavega el 4 de febrero de 1832, hijo de Hilarión Ruiz de la Cueva, que sería alcalde de Cartes, y de Ramona Amado Regueiro.

Obtuvo el nº2 de la 4ª promoción de Ingenieros de Montes de Villaviciosa de Odón en 1855, siendo nom-brado Ingeniero de Montes el 21 de enero del mismo año. Destinado a las provincias de León, La Coruña, Girona, Lleida, Salamanca, Castellón, Tarragona y Bar-celona, acabó su trayectoria profesional como Vocal de la Junta Consultiva de Montes en la categoría de Ins-pector General de 2ª clase. Se jubiló por Real Orden, a petición suya, el 27 de junio de 1892, a la edad de 60 años.

Hilarión Ruiz se establecería en Girona, donde con-trajo matrimonio con Ana Contreras Carbonell, residien-do posteriormente en Barcelona, donde fallecería el 13 de octubre de 1906 a la edad de 74 años. Todos su hijos alcanzaron notoriedad pú-blica, cada uno en el ámbito de sus profesiones: Ramón (doctor en de-recho, jesuita y gran pedagogo), Luis (escritor, periodista, crítico teatral, dramaturgo y traductor español que a instancias de su padre inició los estudios de Ingeniero de Montes, pero que no llegó a con-cluir, en parte, por su deli-cada salud) y José María (destacado ginecólogo).

A parte de la profe-sionalidad y buen hacer que describen las cró-nicas sobre su trabajo como funcionario del Cuerpo de Montes, des-taca su faceta como escri-tor, siendo el autor de las siguientes obras:• Manual de Legislación

y Administración Forestal (1859). Gerona.

•  Los montes españoles bajo el punto de vista de su desa-

mortización y administración (1862). Gerona. Firma-do bajo el seudónimo de “Una máscara sin careta”.

•  Estudios forestales. Los montes en sus relaciones con las necesidades de los pueblos (1870-1872). Imprenta de Puigrubí y Arís, Tarragona. 2 tomos, 1.401 pág.

•  Tablas taquimétricas aplicadas a las graduacio-nes centesimal y sexagesimal (1885). Tip. Cristóbal Miró, Barcelona. 39 pág.

• Doble transportador y círculo logarítmico: Instrucción (1888). Barcelona.

•  Taquímetros autorreductores (1903). 58 pág.•  Tratado de topografía moderna (1903-1905). Bar-

celona. 2 tomos, 1.092 pág. Su primera gran obra, Estudios forestales, fue premia-

da con la medalla de oro en la Exposición Agrícola de Barcelona en 1872, y sirvió para dar a conocer en Es-paña la importancia social y económica de los montes, siendo un referente bibliográfi co de la época para todos aquellos defensores de la causa forestal.

Pero la faceta predilecta del Sr. Ruiz se enmarcó en el campo de la topografía, llegando a ser una autoridad y publicando el extenso Tratado de topografía moderna, en dos volúmenes y profusamente ilustrado. Incluso aque-llos que querían construir nuevos aparatos topográfi cos acudían a él y entabló relaciones con ilustres topógrafos

extranjeros.Cabe destacar que publicó varios artí-culos en la Revista Forestal, Económica

y Agrícola, así como en la Revista de Montes, tratando temas de

contabilidad, montes públicos, dibujo, canales y pantanos, etc. Además, fue el funda-dor y director (1894-1895) de la revista La Topografía Moderna y El Catastro, así como director (1895-1897) de la Revista de l’Institut Agrícola Català de Sant Isidre.

Durante su carrera, fue nombrado Co-mendador de la Real Orden de Carlos III y a fi nales de su vida fue iniciada la pro-puesta de la Gran Cruz de Alfonso XII, que no

pudo llegar a tiempo. Además, fue unos de los

primeros presidentes de la Asociación de Ingenieros de

Montes.Asociación de Ingenieros de

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 70 –

Decíamos ayer

Efectos económicos marginales de las inversiones del Estado en el área forestal

por Javier Prats Llaurado, Ingeniero de MontesPublicado en el Nº 68, año 1956; páginas 129-130

[…]Uno de los más graves fallos del régimen económico

moderno es la desocupación, que entraña una importan-te pérdida de fuerzas productivas, y paralelamente un bajo nivel de vida de la población. A fi n de combatir el paro, el Estado puede intervenir en el ciclo económico efectuando inversiones en trabajos públicos, puesto que está comprobado que el empleo primario de cierto nú-mero de personas, cuando el paro es grande y el ahorro pequeño, multiplica la cantidad total de ocupación. […]

[…] (La fi nalidad de) los trabajos de repoblación y mejora de los montes […] consiste en aumentar la pro-ductividad del área forestal, objetivo de importancia decisiva, que por encima de toda otra consideración, constituye su verdadera razón de ser. Pero también es digna de ser tenida en cuenta la efectividad de estos tra-bajos para combatir el paro, efecto puramente marginal que, sin embargo, puede llegar a constituir por sí solo, a los ojos del más reputado economista moderno, motivo sufi ciente incluso para emprender trabajos públicos de las más dudosa utilidad…

En la actual coyuntura económica de España, tal vez el único ejemplo de crisis crónica del trabajo se encuen-tra en el “paro encubierto” de nuestro campo, donde las diversas formas de desocupación temporal representan todavía una suma muy importante de jornadas perdidas. Y precisamente los trabajos de revalorización del área forestal han venido a crear una demanda para estas jornadas en blanco de la población agrícola activa, ofreciéndole un género de ocupación que difi ere poco de su tipo de trabajo habitual. Por otra parte, desde que la teoría económica de John Maynard Keynes ha prevalecido sobre los conceptos de la economía clási-ca, ha podido ser estudiada desde un ángulo nuevo la forma en que las inversiones públicas son susceptibles de contrarrestar la desocupación. Para los economistas prekeynesianos todo acto de ahorro, es decir, de absten-ción de consumo, lleva necesariamente a invertir tal aho-rro en la producción de bienes de capital. Keynes, por el contrario, sostiene que esto sólo se produce cuando existe pleno empleo, es decir, en un caso particular del ciclo económico opuesto a las fases con mayor o me-nor grado de desocupación. Partiendo de la teoría del multiplicador, que ya en 1931 expuso sistemáticamente R. F. Kahn, Keynes deduce teóricamente, y una reiterada práctica parece darle la razón, que “cuanto mayor sea la propensión marginal a consumir –menor propensión al ahorro–, tanto más grande será el multiplicador, y por consiguiente, tanto mayor la infl uencia que tendrá un incremento determinado de las inversiones sobre el grado de ocupación”. Esto es exactamente lo contrario de lo que pensaban sobre el ahorro Adam Smith, David Ricardo o Stuart Mill.

En el caso de las inversiones del Estado, el mecanismo que entra en juego, dando lugar a la onda de expan-sión económica, se explica por los principios siguientes: todo incremento de las inversiones aumenta el consumo (principio del multiplicador); todo incremento del consu-mo produce a su vez nuevas inversiones (principio de

aceleración). Pero lo que permite establecer diferencias cualitativas entre distintas inversiones estatales de igual cuantía, en relación con la ocupación total que son sus-ceptibles de provocar, es el concepto de Keynes que he-mos transcrito en el párrafo anterior y que en este caso particular puede ser expuesto en forma más restringida: la ocupación primaria producida por los trabajos públi-cos provocará a su vez una ocupación secundaria tanto mayor cuanto menor sea la proporción de lo ahorrado sobre lo consumido entre los partícipes directos del em-pleo primario. […]

[…]Si se analiza sobre este esquema el caso de los tra-

bajos de repoblación forestal, o sea la modalidad más representativa y de mayor volumen entre las producidas por la aplicación de fondos del Estado sobre el área forestal, puede advertirse que este tipo de inversión pre-senta características particularmente idóneas para esti-mular el grado de ocupación, […]. Estas características son las siguientes:1º. Alto valor de la propensión marginal al consumo.–

Las inversiones en trabajos de repoblación se carac-terizan, según se hace notar expresamente en la Me-moria-Resumen de los trabajos del Patrimonio Forestal del Estado, por el destino de más del 80 por 100 de los gastos totales al pago de salarios. Estos sala-rios son percibidos por personas de alta propensión marginal a consumir, ya que, en general, no cabe suponer en los obreros contratados más que una re-ducida capacidad de ahorro. Por otra parte, los tra-bajos de repoblación se realizan por administración directa del Estado, lo que excluye los benefi cios de empresa, y por consiguiente, la probable inmoviliza-ción de una parte de estos benefi cios en concepto de reservas, a fi n de eludir la presión fi scal.

2º. Reinversión completa en el mercado nacional.– Las percepciones personales, sea en concepto de di-rección o de salarios, no es de creer puedan dar lugar, en proporción apreciable, a inversiones en el extranjero. Los materiales se adquieren total o casi totalmente en el mercado nacional.

3º. Falta de contracción en las actividades paralelas.– El pequeño volumen de la actividad privada en el cam-po de la repoblación forestal permite deducir que las inversiones del Estado en esta clase de trabajos son inversiones netas, es decir, no neutralizadas por una contracción de las inversiones no ofi ciales en el mismo campo.

En resumen, mientras no exista una coyuntura de pleno empleo en el campo español, objetivo hacia el cual se tiende, pero que no parece pueda ser alcanzado en plazo breve, cabe afi rmar que las inversiones en repo-blación y sus análogas en el área forestal, independien-temente de su fi nalidad propia, resultan marginalmente muy efi caces para contribuir a resolver día por día los problemas económicos más perentorios del campo, y para prestar notable estímulo al desenvolvimiento gene-ral del país elevando la capacidad de consumo de uno de sus más extensos sectores de población.ral del país elevando la capacidad de consumo de uno

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 71 –

Fue noticia

ELABORACIÓN DE UN MAPA DE MODELOS DE COMBUSTIBLE Y DE UN INVENTARIO FORESTAL REGIONAL EN

CASTILLA-LA MANCHA La Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y De-

sarrollo Rural de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, a través de la empresa pública GEACAM, li-citó el pasado mes de agosto un contrato para elaborar un mapa de modelos de combustible y una cartografía de inventario forestal para toda la Región. La gran en-vergadura de este proyecto sólo es comparable a nivel nacional con la del Inventario Forestal Nacional o la del Mapa Forestal Español, no habiéndose realizado este tipo de proyecto anteriormente por ninguna otra comu-nidad autónoma.

La adjudicataria de este contrato ha sido la Unión Tem-poral de Empresas de Tecnosylva y föra forest techno-logies, dos consultoras tecnológicas del sector forestal, que desarrollan este proyecto considerado como I+D+I (investigación, desarrollo e innovación) y que tiene como base el empleo de nuevas tecnologías para la adqui-sición de datos, todas ellas basadas en la teledetec-ción, como son las imágenes de satélite y la información LiDAR capturada por el Instituto Geográfico Nacional a través del proyecto PNOA. Ello permite abordar la totalidad de la superficie de la Comunidad Autónoma, minimizando la inversión económica y aumentando su grado de detalle y calidad. Una escala de trabajo que convierte al proyecto en único.

Este proyecto tiene dos objetivos principales. El prime-ro de ellos es realizar una cartografía adecuada y ac-tualizada de los modelos de combustible de la Región. Esta cartografía es básica para disponer de información sobre el comportamiento potencial del fuego a través de simuladores, lo que permite poder diseñar operaciones de extinción del fuego de forma más efectiva y segura, así como el diseño en las infraestructuras preventivas: áreas de defensa, fajas cortafuegos o puntos de agua.

El segundo objetivo se basa en la generación de un inventario forestal que cartografíe las principales varia-bles que se emplean en la cuantificación de los recursos forestales, principalmente las que corresponden a la ma-dera, pero también otros como biomasa, corcho, resi-na, bellota, entre otros, mejorando la rentabilidad en su aprovechamiento a través de la redacción de los corres-pondientes instrumentos de gestión forestal sostenible.

La utilización de estas tecnologías permite a la Ad-ministración Regional desarrollar este proyecto de gran envergadura a un coste económico muy bajo y al mismo tiempo permite ahorrar, y de una forma muy conside-rable, a los titulares de terrenos forestales que deseen disponer de un instrumento de gestión. Según el actual reglamento de desarrollo rural, los titulares de los montes que soliciten ayudas deberán contar obligatoriamente con estos instrumentos como requisito previo. Además, la actual legislación obliga a que determinados terrenos forestales cuenten con estas planificaciones.

CINCUENTENARIO DE LA CIX PROMOCIÓN DE INGENIEROS DE

MONTESEl 9 y 10 de septiembre tuvieron lugar los actos de

celebración del Cincuentenario de la CIX promoción de

Ingenieros de Montes, que fue la última que accedió a la carrera tras superar examen de ingreso.

Los actos empezaron con una misa en la Escuela de Ingenieros de Montes de Madrid, a continuación de la cual tuvo lugar un desayuno en el que todos los miembros de la promoción dijeron unas palabras. Posteriormente se plantó en el arboreto de la Escuela un árbol que quiere simbolizar el agradecimiento al recuerdo de los años pasados en ella. Dicho árbol era un Chamaecypa-ris lawsoniana, elegido por ser una conífera de bonito color, un árbol excelente para cultivos forestales y, como la CIX promoción es la última del Plan Antiguo, algo exótico. También su porte representa para los miembros de esta promoción lo que significa la profesión de in-geniero de Montes. Después tuvo lugar una comida de hermandad en Madrid y una cena de conmemoración en Segovia.

75 ANIVERSARIO DEL PLAN GENERAL DE REPOBLACIÓN FORESTAL DE ESPAÑA

La Universidad de Lleida y los Grupos de Historia Forestal y de Repoblaciones forestales de la Sociedad Española de Ciencias Forestales (SECF) celebraron unas jornadas técnicas en la Escuela Técnica Superior de In-geniería Agraria de Lérida, los días 16 y 17 de septiem-bre, para conmemorar el 75 Aniversario del comienzo de la ejecución del Plan General de Repoblación Fores-tal de España.

Las jornadas fueron inauguradas por el Rector de la Universidad y durante el primer día consistieron en unas conferencias invitadas que abarcaron los siguientes temas: • Antecedentes de la actividad repobladora. La ne-

cesidad de repoblar (Ignacio Pérez Soba)•  El contexto económico y social en España (1940 -

1970) (Iñaki Iriarte)•  La Administración forestal repobladora (Jesús Pemán)•  La actividad repobladora realizada entre 1940 y

1984 (Enric Vadell)•  Las repoblaciones productoras. Su impacto econó-

mico (Juan Picos)•  Las repoblaciones protectoras. El papel del pino

(Luis Gil)•  Repoblaciones y ganadería. El uso pastoral (José

Luis González Rebollar)•  Papel de las repoblaciones como herramientas de

restauración forestal (Lorena Gómez-Aparicio)

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 72 –

Fue noticia

•  La selvicultura de las repoblaciones realizadas (Ra-fael Serrada)

Tras las conferencias se proyectó el vídeo Pinos y pe-nas, elaborado por el Agente de Protección de la Natu-raleza del Gobierno de Aragón, Carlos Tarazona.

El día 17 por la mañana se visitaron los montes de Comellàs y Poblet, situados en la cuenca del río Francolí. En ellos se pudieron observar los trabajos de repobla-ción realizados por el ingeniero Antonio Monzón, en la época del Patrimonio Forestal del Estado, que fueron continuación de los iniciados por el ingeniero José Reig, a comienzos del siglo XX.

Anton Vallvey Sanromà, Director del Paraje Natural de Poblet, y José Antonio Bonet, responsable de las parce-las de seguimiento micológico instaladas en el monte de Poblet, presentaron esta parte de las jornadas.

Por la tarde se presentaron unas comunicaciones vo-luntarias sobre diversos aspectos de lo que fue y es la actividad repobladora.

Próximamente, en la web de la Sociedad Española de Ciencias Forestales y de la Universidad de Lleida, se dispondrá del vídeo completo de cada una de las po-nencias y comunicaciones. Y Está prevista la publicación de un número monográfico en los Cuadernos de la So-ciedad Española de Ciencias Forestales, así como de un libro específico más extenso que recoja estos trabajos.

En la realización de estas jornadas colaboraron la Di-putación de Lleida y el Grupo Tragsa.

AUMENTA EL CONSUMO Y EL PRECIO DE LA MADERA PARA TRITURACIÓN

La Confederación de Organizaciones de Selvicultores Españoles, COSE, ha actualizado el Observatorio de Precios de Productos Forestales. Según la Confedera-ción, en general los precios se mantienen similares a los de 2014, a pesar de que el consumo de madera y sus derivados continúa creciendo de forma progresiva.

La madera de sierra de calidad sigue estancada en mínimos de aprovechamiento, siendo la industria del embalaje la única que la está consumiendo de forma significativa.

El aumento del consumo de maderas de trituración, tanto para pasta de papel como para uso energético, ha provocado tensiones puntuales que se traducen en fuertes subidas de precios, lo que provoca que se consu-man pies de mayor calidad para trituración.

La industria continúa premiando la adquisición de ma-deras en grandes lotes, como por ejemplo las subas-

tas organizada por ASFOVA –Asociación Forestal de Valladolid–, que han logrado incrementos notables en el precio de venta de las maderas agrupadas de sus asociados.

Según COSE, la crisis ha provocado la falta de un tejido empresarial sólido, generando situaciones en las que el mercado demanda más madera, pero la falta de maquinaria y medios técnicos y humanos provoca que esa demanda no se cubra totalmente.

El Observatorio de Precios de Productos Forestales, creado y gestionado por COSE (http://selvicultor.net), es el único referente de la evolución de los precios de la madera en España. Sus datos se actualizan trimestral-mente a nivel nacional.

CONFERENCIA “LA GESTIÓN DE LOS JARDINES HISTÓRICOS”

El pasado 22 de octubre en el Claustro de la Escuela de Minas y Energía de Madrid, organizado por el Club español de Medioambiente con la colaboración del Co-legio y Asociación de Ingenieros de Montes y la ETS de Ingenieros de Minas y Energía, se celebró la conferencia La Gestión de los Jardines Históricos, realizada por el Dr. Ingeniero de Montes Santiago Soria Carreras, Sub-director General de Parques y Viveros del Ayuntamiento de Madrid.

PRODUCTOS IBÉRICOS CON CERTIFICADO PEFC

Vivimos en una época en la que la humanidad tiene un enorme potencial para deteriorar la Tierra y necesita a gritos personas que redirijan ese potencial hacia la sostenibilidad. El equipo de PEFC tiene ese objetivo y la marca Fuente la Virgen comparte sus ideales medioam-bientales. Por ello, la finca Fuente la Virgen, situada en la Sierra que une Córdoba y Sevilla, en pleno Parque Natural y Reserva de la Biosfera, acaba de obtener el certificado de cadena de custodia PEFC para todos sus productos ibéricos. Con 2.600 hectáreas de dehesa mediterránea dedicadas a la cría del cerdo ibérico, la finca ya obtuvo en 2012 el certificado PEFC en gestión forestal sostenible.

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 73 –

Fue noticia

Según Ignacio Mª Oriol, Director de Productos Ibéri-cos Fuente la Virgen: “Al elegir el sello PEFC fomentamos las buenas prácticas ambientales, el consumo responsa-ble y algo muy importante, demostramos que es posible una buena gestión de nuestras dehesas que genere em-pleo en condiciones dignas, mantenga vivas las comu-nidades rurales y garantice el bienestar animal y la sos-tenibilidad de los bosques. Tenemos la responsabilidad de dejar a las generaciones futuras un medio ambiente mejor y más sostenible. El hecho de obtener y visualizar este certifi cado en nuestros productos nos compromete a cuidar aún más y mejor nuestra dehesa, contarlo y ani-mar a otros a que también lo hagan. Además, todo esto aporta un valor añadido a nuestros productos y supone un elemento diferenciador en el mercado”.

Los clientes que buscan productos de calidad valoran cada vez más que sus compras sean responsables y tengan garantías de sostenibilidad. El buen jamón ibé-rico de bellota es el estandarte de nuestra gastronomía española y es un producto de lujo que va destinado a esos clientes.

“Valoro mucho que PEFC, que es una entidad inde-pendiente, me garantice que los productos ibéricos con los que trabajo procedan de bosques sostenibles, y en concreto que la marca Fuente la Virgen esté tan com-prometida con el futuro de las dehesas. Porque los pro-ductos de alta calidad siempre están relacionados con el campo, la libertad y la vida, y de ahí surgen esos aromas y sabores que llegan a emocionar a los pala-dares más exigentes.” Florencio Sanchidrián, designado Embajador Mundial del jamón ibérico por la Academia Internacional de Gastronomía.

Según Cristina Oria Riu, premio Madrid Fusión 2011 y fundadora de Cristina Oria - alta cocina a domicilio: “Para nosotros es muy importante que nuestro proveedor tenga la máxima calidad en sus productos y que todos sus procesos de elaboración tengan cuenta el medioam-biente sostenible.”

Muchas familias han vivido y trabajado en la fi nca desde que fue fundada hace más de 60 años. A día de hoy, los hijos y nietos de esas personas siguen vi-viendo, trabajando y luchando por mantener viva esa explotación ganadera cuyos límites exceden de lo pu-ramente profesional haciendo de Fuente la Virgen una gran familia.

PEFC España promueve los productos certifi cados PEFC en el sector alimentario, objetivo principal del pro-yecto Sabores de Bosques Sostenibles.

PREMIOS EL BATEFUEGOS DE ORO 2015Los Premios El Batefuegos de Oro son una iniciativa

que pretende reducir el número de incendios forestales que se producen cada año en España, así como la superfi cie afectada por los mismos. Para conseguirlo se han creado seis categorías ofi ciales, evaluadas por un Jurado Técnico previo y falladas por un Jurado Nacional, y una especial fuera de concurso que concede la enti-dad convocante de los Premios.

En reunión celebrada el pasado 12 de noviembre de 2015, el Jurado Nacional de los Premios El Batefuegos de Oro falló las candidaturas, otorgando los galardones de la decimocuarta edición a las siguientes personas y entidades:

Categoría 1ª. Premio a la mejor prevención: Centro Operativo Provincial del Plan INFOCA en la provincia de Córdoba

Categoría 2ª. Premio a la mejor extinción: Servicio Te-rritorial de Medio Ambiente de León. Equipos de Lucha Integral contra IIFF

Categoría 3ª. Premio a la mejor divulgación: La Cla-queta PC “La vida en llamas”

Categoría 4ª. Premio a la mejor labor educativa: Cen-tro de Defensa contra el Fuego (Junta de Castilla y León)

Categoría 5ª. Premio al mejor avance tecnológico: La-boratorio de Incendios Forestales (CIFOR-INIA)

Categoría 6ª. Premio a la mejor labor en el marco internacional: Francisco Castro Rego

Categoría 7ª. Menciones Especiales: Antonio de la Vega (padre e hijo); Felipe Aquirre Briones; Sergio Pas-cual Simón; José Luis Duce; y Fallecidos en la campaña 2015.

MULTA POR IMPORTAR PRODUCTOS PROCEDENTES DE TALA ILEGAL

Forest Legality Alliance, organización con sede en Washington, a la cual pertenece la Asociación Espa-ñola del Comercio e Industria de la Madera (AEIM), informa que el Departamento de Justicia de los EEUU ha difundido un comunicado de prensa sobre la admisión de culpa de la empresa “Lumber Liquidators” por vio-laciones graves del “Lacey Act” de los Estados Unidos (normativa equivalente al EUTR en la Unión Europea).

La empresa fue hallada culpable por importar “a sa-biendas” suelos de madera, talada ilegalmente en Rusia (Mongolian oak) y fabricados en China. La multa ascien-de a más de 13 millones de dólares, la más alta asocia-da con “Lacey Act” hasta la fecha.

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 74 –

In Memoriam

Los textos para In Memoriam no deben exceder de 500 palabras. Se mandarán por mail a: [email protected]. Se agradecerá envíen también una foto de la persona recordada.

Heredé de José Ferrando su bien más preciado, su Pi-nar, cuando aún era yo un joven y bisoño ingeniero. Si vales el Pinar te acogerá y te envolverá, si no él mismo te expulsará, me dijo al tras-pasarme los trastos a un año de su jubilación. Fue un 26 de junio de 1992, en la reunión anual de la Comunidad de Villa y Tierra de Pedraza, propietaria del mítico mon-te Pinar de Navafría. Eran años en que montes orde-nados tan emblemáticos como éste no cambiaban de ingeniero sino tras varios semiperiodos, treinta años en este caso, por lo que el relevo se hacía con toda solem-nidad. Bien sabía él que el Pinar ya me había abducido hacía meses.

Hacía un año que me había incorporado a mi primer destino profesional en el Servicio Forestal de Segovia, ya por aquel entonces Medio Ambiente, cambio de nombre y de enfoque al que Pepe, un curtido forestal de Distrito, nunca llegó a adaptarse.

Muy pronto entendí dónde me había embarcado, en cuanto oí por primera vez el nombre de “jardinón”, cariñoso mote con que sus compañeros llamaban con indisimulada sorna al monte 198, a causa de las aten-ciones, a su entender desmedidas, que recibía. Cuando

casó en segundas nupcias con Carmen, su abnegada compañera hasta el fi nal, por aquel entonces alcal-desa de Pedraza y presi-denta de la Comunidad de Villa y Tierra, no faltó quien

vio en esta boda otro acto vinculado a la ordenación del monte. Pepe, ahora ya no tendrás problemas con la Comunidad ¿no?

Concebía la ordenación como una forma de crear riqueza y trabajo para las poblaciones locales. Siempre he pensado que fue más entendido por las sencillas gen-tes que vivían del Pinar que por sus propios compañeros. A veces el selvicultor daba paso al agricultor levantino que este alcoyano llevaba en la sangre. Le veía desde mi casa, colgada en el casco antiguo, trajinar afanoso en su huerta de la vega del río Clamores.

José Ferrando fue el primer y único jefe verdadero que he tenido. A través de él tuve el privilegio de conocer los últimos años de la mejor tradición forestal segoviana, que había leído en clásicos como José Jordana o Máxi-mo Laguna. Ya jubilado, me seguía preguntando con frecuencia por su monte. En alguna ocasión le recogía en casa y pasábamos una tarde paseando por algún rodal. Allí, en pleno monte, que a pesar de los tiempos

sigue siendo lo nuestro, podremos debatir algún concepto, me decía.

Ya en la distancia por mi nuevo destino en Burgos, seguía preguntándome por la fecha de mi regreso a Segovia. Por aquel enton-ces la enfermedad que devoraba sus recuer-dos avanzaba ya lenta pero imparable. La última vez que estuve con él fue en una de nuestras “quedadas” con Aurelio Martínez, el sobresaliente Guarda que le acompañó durante decenios al frente del Pinar como fi el compañero y amigo. Durante la comida se felicitó en varias ocasiones por mi regre-so a Segovia, a pesar de que le repetía machaconamente que seguía destinado en Burgos. Sin embargo, cuando subimos por la tarde al Pinar y pasamos con el todote-rreno la mojonera del monte, Aurelio y yo oímos estupefactos Sección 1ª, Cuartel B, Tramo I. Habría que ir pensando en hacer algo aquí. Paradojas de tan cruel enferme-dad que borra selectivamente la memoria cercana y mantiene intactas algunas parce-las de la lejana.

Aquella tarde nos hicimos la fotografía que acompaña estas líneas, en el monolito conmemorativo a su jubilación que algunos de sus amigos le habíamos instalado años antes en Peñacabra, uno de sus rincones fa-voritos. Fue la última vez que pisó con plena consciencia el escenario terrenal de la gran pasión que guió su vida.

Javier María García LópezDr. Ingeniero de Montes

Jefe del Servicio Territorial de Medio Ambiente de Burgosde Medio Ambiente de Burgos

JOSÉ FERRANDO PLÁ

Ingeniero de Montes

Alcoy, 28-III-1928 – Segovia, 15-XI-2015

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 75 –

Agenda

FERIAS Y CONGRESOS

VIVERALIA 2016. Salón Profesional de la Planta Ornamental y Afi nesFecha: Del 2 al 4 de febrero de 2016

Lugar: Alicante, España

Organiza: Institución Ferial Alicantina

Información: http://viveralia.feria-alicante.com/2016/fi cha.php

FIMMA-MADERALIA. 37ª Feria Internacional de Proveedores sector Madera-Mueble y de Maquinaria y Herramientas para madera, mueble, carpintería y decoraciónFecha: Del 2 al 5 febrero 2016

Lugar: Feria Valencia, España

Organiza: Feria Valencia

Información: http://fi mma-maderalia.feriavalencia.com/

CINEGÉTICA 2016. Feria de Caza y PescaFecha: Del 17 al 20 de marzo de 2016

Lugar: IFEMA, Feria de Madrid. Madrid, España

Organiza: Expocinegética SL

Información: www.cinegetica.es; [email protected]

9TH INTERNATIONAL BIOMASS CONFERENCE & EXPOFecha: Del 11 al 14 de abril de 2016

Lugar: Charlotte, North Carolina, Estados Unidos de América

Organiza: BBI International

Información: www.biomassconference.com

IBER-FORESTA. 2ª Feria Forestal IbéricaFecha: Del 21 al 23 de abril de 2016

Lugar: Recinto Ferial El Berrocal. Plasencia (Cáceres)

Organiza: Extrefor

Información: www.iber-foresta.com

LIGNA CONFERENCE 2016. La Fabricación integrada en la industria de la madera - la Comunidad de la madera en su camino hacia la Industria 4.0Fecha: Del 3 al 4 de mayo de 2016

Lugar: Robotation Academy. Hannover, Alemania

Organiza: Deutsche Messe

Información: http://www.ligna.de/home

EUBCE 2016. 24th European Biomass Conference and ExhibitionFecha: Del 6 al 9 de junio de 2016

Lugar: Amsterdam, Países Bajos

Información: http://www.eubce.com/home.html

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 76 –

Agenda

FERIAS Y CONGRESOS

JORNADAS Y CURSOS

CONAMA 2016Fecha: Del 28 de noviembre al 1 de diciembre de 2016

Lugar: Madrid

Organiza: Fundación Conama

Información: www.conama.org; [email protected] pueden sugerir temas a tratar en la propia web del Conama (https://goo.gl/6iG6X2)

CURSO DE ANÁLISIS Y PLANIFICACIÓN DE LA EXTINCIÓN DE INCENDIOS FORESTALESOrganiza: Colegio de Ingenieros de Montes y EIMFOR SL

Duración: 21 horas. Febrero de 2016 (fechas pendientes de concretar)

Lugar: Madrid

Información: [email protected]; 91 534 60 05; www.ingenierosdemontes.org/formacion

CURSO DE MANDO DE BRIGADA HELITRANSPORTADAOrganiza: Colegio de Ingenieros de Montes y EIMFOR SL

Duración: 75 horas (35 online + 40 presenciales). Febrero de 2016 (fechas pendientes de concretar)

Lugar: Madrid y teleformación

Información: [email protected]; 91 534 60 05; www.ingenierosdemontes.org/formacion

CURSO DE GESTIÓN DE LA SEGURIDAD EN LOS INCENDIOS FORESTALES Organiza: Colegio de Ingenieros de Montes y EIMFOR SL

Duración: 21 horas. Febrero de 2016 (fechas pendientes de concretar)

Lugar: Madrid

Información: [email protected]; 91 534 60 05; www.ingenierosdemontes.org/formacion

CURSO DE SEGUIMIENTO, INVENTARIO Y RASTREO DE FAUNA IBÉRICA CON TÉCNICAS GIS/GPSOrganiza: Colegio de Ingenieros de Montes

Duración: 70 horas. Del 29 de febrero al 18 de abril de 2016

Lugar: Teleformación

Información: [email protected]; 91 534 60 05; www.ingenierosdemontes.org/formacion

CERTIFICACIÓN OFICIAL TEÓRICO-PRÁCTICA DE PILOTOS DE RPAS (DRONES)Organiza: Eaglevisión S.L.

Duración: Teoría: 60 horas on line y 7 presenciales (1 jornada); Práctica: 8 horas presenciales y examen. Matrícula abierta

Lugar: Madrid y teleformación

Información: http://eaglevision.pro/titulo-ofi cial-de-piloto-de-drones-rpas-teorico-y-practico/

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 77 –

Libros

EL TEIDE DESDE MI VENTANAAutor: Isidoro Sánchez GarcíaEdita: Fonteide y Ayto. de La OrotavaDepósito Legal: Tf-787-2013Desde que se jubiló en 2003, el polifacético ingeniero de Montes Isidoro Sánchez García, natural de La Orotava (Tenerife) y director del Parque Nacional del Teide entre 1974 y 1980, fotografía a diario al Teide (3.718 m de altitud) desde la ventana de su casa en el Puerto de la Cruz, situada a unos 19 km de distancia y a una altitud de 90 metros. Eligió doce fotos repartidas a lo largo del año e invitó a unos amigos para que les contaran sus impresiones sobre el volcán canario. Con este material estructuró un libro, dedicado al Teide y a sus tres nietos, y consiguió que el Ayuntamiento de La Orotava, titular mayoritario del Parque Nacional, y la empresa orotavense FONTEIDE, fi nanciaran su publicación, al objeto de recordar los sesenta años de la declaración del Teide como Parque Nacional por Decreto del Ministerio de Agricultura. Desde julio de 2007 el Teide está incluido, por decisión del Comité del Patrimonio Mundial de la UNESCO, en el listado de lugares Patrimonio de la Humanidad.

INCENDIOS DE VEGETACIÓN. SU ECOLOGÍA, MANEJO E HISTORIAAutor: Dante Arturo Rodríguez TrejoEdita: Colegio de Postgraduados en AgriculturaISBN: 978-60-7715-237-8Este libro, que trata los incendios como una alteración del desarrollo normal de un ecosistema, evitando palabras como catástrofe, analiza los efectos de los mismos para cada una de las principales formaciones vegetales de México, según los si-guientes elementos:• Atributos espaciales (clases de regímenes de fuego, tipo, extensión, forma, borde

y perímetro, y patrón de afectación a nivel individual y a nivel de paisaje)• Atributos temporales (frecuencia, estacionalidad, duración de la perturbación y la

duración de los efectos que provoca el incendio (recomposición))• Atributos de la afectación (intensidad, severidad o impacto que la perturbación

produce en los seres vivos y selectividad)•  Sinergismo entre perturbaciones, como puede ser ante las perturbaciones antrópi-

cas, las plagas de insectos, el vulcanismo, etc.• Adaptación al fuego (a nivel de especie, población, comunidad, ecosistema y

procesos, y paisaje)• Manejo del fuego

El autor manifi esta su admiración por el conocimiento tradicional, que atesoran mu-chas comunidades campesinas, del manejo del fuego a favor de sus intereses particu-lares, sin provocar daños en otras zonas fuera de su ámbito deseado.La obra cuenta con reproducciones de cuadros, grabados y versos que ilustran los diferentes ecosistemas.

TRATADO DE LA BIOMASAAutor: Mariano Seoánez CalvoEdita: McGraw-HillISBN: 978-84-481-8523-7

Comprende esta obra, en sus 490 páginas, todo el conocimiento fundamental del que se dispone actualmente acerca del aprovechamiento de la biomasa, prin-cipalmente con fi nes energéticos. La información sobre biomasa de origen forestal ocupa gran parte del libro, comenzando por su producción en la Naturaleza y en la elaboración industrial de los productos forestales: leñas, astillas, matorrales, restos de tratamientos selvícolas, residuos de las industrias de la madera.

Se describen los procesos físicos, químicos, biológicos y térmicos de la biomasa para uso energético y se presentan los impactos ambientales de estos procesos. Ade-más se incluyen numerosas tablas, índices y fórmulas para los distintos cálculos que precisa el aprovechamiento económico de la biomasa.

Page 78: Revista Montes. Número 122, IV trimestre 2015

Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 78 –

Libros

MAqUINARIA PESADA EN LA EXTINCIÓN DE INCENDIOS FORESTALESAutor: Juan Bautista García EgidoEdita: Ediciones AIFEMAISBN: 978-84-606-8263-9

Este libro proporciona a los directores de extinción un manual de operaciones con maquinaria pesada, describiendo sus características, tipos, utilidades e integración con los otros medios de extinción, proponiendo acciones para mejorar su seguridad y rendimiento.

Se describen los tipos de máquinas existentes con las herramientas que pueden llevar. Se detallan las operaciones que se pueden ejecutar con estas máquinas, con las técnicas y maniobras tanto para el ataque directo al fuego en el frente y en los fl ancos, como para el ataque indirecto. Se describen también las operaciones de control y liquidación y la apertura de accesos para otros medios.

Se incluyen datos de rendimientos y se presentan las limitaciones de uso, así como las medidas de seguridad en su empleo, mediante ejemplos de operaciones concre-tas citando casos de accidentes reales. Asimismo se dan recomendaciones para la restauración del lugar con el fi n de evitar la erosión posterior y el impacto visual.

DICCIONARIO ILUSTRADO DEL CORCHOAutor: Ignacio García PeredaEdita: EuronaturaISBN: 978-84-9744-001-1

Disfrazado de diccionario, en un formato pequeño y de ágil lectura, Ignacio García presenta el fruto de varios años de intensa investigación sobre la actividad corchera en el Sudoeste europeo.

El autor nos presenta casi medio centenar de voces relacionadas directamente con el corcho, que constituyen toda una cultura alrededor de este material, tanto del traba-jo y cuidado del alcornoque como de la explotación posterior del corcho.

Destaca además el apoyo iconográfi co para cada uno de los conceptos y entradas del diccionario, con el que se pretende remarcar la memoria histórica y antropológi-ca. Se trata de una multitud de ilustraciones que ayudan al lector a comprender el mundo corchero y no sólo sirven de complemento al texto, sino que constituyen parte esencial de la obra: desde los carteles que promocionan el cava catalán hasta los anuncios de los diseñadores de vanguardia portugueses, que ofrecen todo tipo de elementos “de diseño” fabricados en corcho.

MANUAL DE EXTINCIÓN DE INCENDIOS FORESTALES PARA CUADRILLASAutores: Rubén Santos Becerro, Víctor Fernández Huertas, Enrique Rey van den Berc-ken y Julio Esteban InésEdita: Junta de Castilla y León. Consejería de Fomento y Medio AmbienteDepósito legal: LE-23-2014 Durante la época de mayor riesgo de incendios forestales, la Junta de Castilla y León dispone cuadrillas de trabajadores forestales por todo el territorio regional con el fi n de extinguir los posibles incendios forestales que pudieran surgir. Las entidades que contratan a los trabajadores de estas cuadrillas han de formarles para el correcto desempeño de los trabajos de extinción. Con el fi n de garantizar y avalar esta formación, la Consejería de Fomento y Medio Ambiente ha establecido un “Procedimiento de formación y certifi cación de trabajadores de cuadrillas de ex-tinción de incendios forestales en Castilla y León”, conducido y tutelado por el Centro para la Defensa contra el Fuego (CDF). Este manual es una revisión y actualización de la publicación previa del año 2003, poniendo especial énfasis en su utilidad como material formativo. El equipo técnico del CDF ha pretendido desgranar en él todos los contenidos esenciales para la formación de trabajadores de cuadrillas.Uno de los aspectos que se ha revisado y ampliado con especial detalle en este manual, es la forma de abordar la prevención de riesgos durante el trabajo. Tanto en el apartado de seguridad, como en el resto del manual, se realiza un especial hincapié en la inclusión de medidas de prevención y hábitos seguros dentro de los procedimientos habituales de trabajo. En este sentido, y como una de las formas esen-ciales de prevenir riesgos, también se ha incluido un apartado específi co orientado al análisis y la previsión del comportamiento del fuego desde la perspectiva de una cuadrilla de extinción.

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015 – 79 –

Revistas

Catalunya Forestal - Número 125 - Septiembre 2015Edita: Consorci Forestal de CatalunyaISSN: 2014-0673Sumario: • Nuestros sistemas agroforestales•  La fi scalidad forestal•  Ejemplos de servicios ambientales y diversifi cación en la gestión de fi ncas Pro Silva, una

silvicultura alternativa

Desarrollo Rural y Sostenible - Número 26 - Otoño 2015 Edita: MAGRAMANIPO: 280-15-052-3Sumario: •  En primera persona: Paul Soto. Responsable y gestor de la Unidad de Apoyo (Contact

Point) de la Red Europea de Desarrollo Rural•  La visión de Karolina Jasinska-Mühleck, Técnica de la Unidad para la Coherencia del De-

sarrollo Rural, Dirección General de Agricultura y Desarrollo Rural de la Comisión Europea•  Leader a través de los grupos de acción local

La cultura del árbol - Número 72 - Septiembre 2015Edita: Asociación española de arboriculturaISSN: 1576-2777Sumario: •  El Jardín Botánico de la Universidad de Valencia• Método Bond de valoración de la salud del árbol urbano• Apicultura urbana. Las abejas, los árboles y la ciudad

Navarra forestal - Número 36 - Junio 2015Edita: Asociación forestal de NavarraISSN: 1578-0258Sumario: • Gestión selvícola de los pinares de pino carrasco en el Valle medio del Ebro• Compraventa de hongos para su comercialización• A vueltas con la Confederación Hidrográfi ca del Ebro

Spanish Journal of Rural Development - Vol. VI, Número especial 1 - Mayo 2015Edita: Ignacio Javier Díaz-Maroto HidalgoISSN: 2171-1216Sumario:• Modelo de desarrollo turístico: Caso Tepotzotlán y el Oro, pueblos mágicos del Estado

de México•  ¿Puede el turismo alternativo potenciar el desarrollo local en Latinoamérica?•  El turismo como actividad complementaria de la pesca en comunidades rurales. Caso

Bahía de Chamela, Jalisco

Page 80: Revista Montes. Número 122, IV trimestre 2015

Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 80 –

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Revista Montes. Número 122. 4º Trimestre 2015– 82 –

Normas de publicación

NORMAS PARA LA PUBLICACIÓN EN LA REVISTA MONTES

A) ARTÍCULOS TÉCNICOS Y/O CIENTÍFICOS1. El artículo debe ser inédito y estar escrito en español. Su longitud máxima no debe exceder de 3.000 palabras (9 hojas DIN A-4 a 1,5 espacios)2. Los originales deberán seguir la siguiente estructura:a. Título: En letras mayúsculas, reflejando fielmente el contenido del artículo pero lo más breve posible (no más de 20 palabras).b. Autores: Nombre, apellidos, titulación, institución y dirección de correo electrónico de todos los autores, indicando cuál de estas direcciones es la asignada para correspondencia.

Facilitar dirección postal para el envío del certificado de publicación.c. Resumen del artículo: Suficientemente informativo pero breve (nunca más de 100 palabras).d. Palabras clave (de 3 a 6). Tanto el resumen como las palabras clave deberán enviarse obligatoriamente en castellano y opcionalmente en inglés (este último solo se publicaría

en el Buscador de artículos de la Web).d. Introducción: Deberán exponerse en ella los antecedentes, la justificación del trabajo y los objetivos que pretende alcanzar.e. Materiales y métodos: Se expondrán los medios materiales con los que se ha realizado el trabajo, así como la metodología empleada, de tal manera que sea posible su

reproducción.f. Resultados y discusión: Se detallarán los principales resultados conseguidos, siempre basados en la información existente en el texto. Resultará conveniente relacionar el

resultado conseguido en este trabajo con el de otros trabajos similares o relacionados, de manera que sea palpable la mejora con el trabajo expuesto.g. Conclusiones: Se recogerá una síntesis de los argumentos o afirmaciones derivadas de la discusión de los resultados obtenidosh. Imágenes, figuras y tablas: Se incluirán los necesarios a un tamaño reducido, siempre en formato digital, ya sea en formato XLS, TIFF ó EPS. Llevarán una numeración del

tipo: Fig. 1 (para imágenes y figuras), Tabla 1, etc., así como un pie perfectamente explicativo. Se utilizará esta misma numeración para aludir a ellos en el texto. Las imágenes, figuras y tablas se copiarán también en una hoja aparte, junto a sus pies explicativos. La resolución mínima exigida para las imágenes y figuras es de 300 ppp. El número máximo de imágenes es de seis y el mínimo de tres, preferiblemente a color.

i. Cuadros de texto: Será posible intercalar cuadros de texto entre el texto principal que expliquen detalladamente alguna idea o aporten alguna información concreta, tal que de haberla incluido en el texto resultaría de excesivo detalle, sin que por ello, el no leerla, conlleve no entender el texto principal en su totalidad.

j. Bibliografía: Se incluirá la citada en el texto (autor siempre en mayúsculas). Se recomienda el seguimiento del sistema autor-año, de acuerdo con los ejemplos siguientes:- Libros: HAWLEY, R. C.; SMITH, P.; 1982. Silvicultura práctica, 2ª Ed. Ediciones Omega. Barcelona.- Revistas: MOORE, C.; DI MATEO, P.; 1979. A basal area ratio predictor of loblolly pine plantation mortality. Forest Science, 25: 275-282.- Páginas Web: http://dirección (Año). Hipervínculo desactivado.

B) ARTÍCULOS DE DIVULGACIÓN 1. El artículo debe estar escrito en español y su longitud máxima no debe exceder de 2.000 palabras.2. Los originales deberán seguir la siguiente estructura:

Título, autores, resumen, gráficos, cuadros, bibliografía e imágenes/figuras/tablas, igual que los apartados a,b,c,h,i,j del punto 2 de los artículos del apartado A.3. Versarán sobre temas de actualidad forestal, o que en general afecten al medio natural.

C) ARTÍCULOS DE OPINIÓN1. El artículo debe estar escrito en español y su longitud máxima no debe exceder de 1.000 palabras.2. Los originales deberán seguir la siguiente estructura:

Título en letras mayúsculas, reflejando fielmente el contenido del artículo pero lo más breve posible (nunca más de 20 palabras).Apellidos y nombre de los autores, su profesión, titulación y las direcciones postal y electrónica de contacto.Deberá incorporar resumen (nunca más de 100 palabras) y, en la medida de lo posible, imágenes y gráficos.

3. Versarán sobre temas de actualidad forestal, o que en general afecten al medio natural.

D) FORMATOTodos los artículos se enviarán por mail o en soporte físico digital (CD, DVD, memoria USB) acompañado de la copia en papel o impresión en PDF.Los textos (cuerpo del artículo, pies explicativos, etc.) se enviarán en formato DOC, RTF o TXT.Los gráficos, tablas y fotografías, en formato XLS, TIFF o EPS; y además se incluirán en otro documento (DOC o PDF) junto a sus pies explicativos.

E) EVALUACIÓN DE LOS ARTÍCULOSTodos los trabajos enviados que reúnan las condiciones anteriores serán evaluados de forma independiente por expertos en las materias objeto del artículo, designados por el Consejo de Redacción. Los resultados serán expuestos en reuniones trimestrales que se celebran para aceptar, aceptar con modificaciones (que serían solicitadas a los autores) o rechazar conjuntamente su publicación.

F) PUBLICACIÓN DE ARTÍCULOSLos artículos que hayan superado favorablemente la evaluación del Consejo de Redacción, y hayan sido revisados por el autor de acuerdo con las observaciones de aquél, serán publicados por REVISTA MONTES en dos formatos: en el formato ordinario de la Revista (formato papel), y en formato digital (solamente con la posibilidad de leer e imprimir), dentro de la Página Web de la misma (www.revistamontes.net).Así mismo, el autor cede a REVISTA MONTES, de forma indefinida, los derechos de autor sobre los contenidos enviados. Y de manera recíproca, la Revista queda obligada a identificar esos contenidos con su autor en cualquier manera de publicación.Los artículos de Divulgación, una vez publicados, pasarán a formar parte de las candidaturas al Premio Periodístico Montero de Burgos, a no ser que el autor se exprese contrario a tal circunstancia.

G) ENVÍO DE LOS ARTÍCULOSTodos los trabajos se enviarán a: REVISTA MONTES C/ Cristóbal Bordiú 19-21 2ºDcha – 28003 Madrid. Tel: 91 5346005; E-mail: [email protected]

H) DEVOLUCIÓN DE ARTÍCULOS Y CERTIFICADOUna vez publicado un artículo en la Revista, se devolverá al autor el material aportado (CD, DVD, memoria USB, fotos, diapositivas, etc.) y se le enviará un certificado de su publicación.

I) IN MEMORIAMLos textos para In Memoriam no deben exceder de 500 palabras. Se mandarán por mail a: [email protected]. Se agradecerá envíen también una foto de la persona recordada.

J) CARTAS AL DIRECTORLas cartas dirigidas al director no deben exceder de 400 palabras. Sus autores se identificarán con su nombre y apellidos, y deberán adjuntar un teléfono y dirección de contacto (postal o electrónica). Se mandarán a: REVISTA MONTES. C/ Cristóbal Bordiú 19-21 2ºDcha– 28003 Madrid. O por mail a: [email protected].

No se admitirá en los artículos publicidad de productos o marcas que se comercialicen.Las normas se pueden consultar también en www.revistamontes.net

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